Los pueblos originarios:

Nosotros venimos a hablar de los pampas y los guaraníes. Primero tenemos al pueblo
originario pampa, al ser un pueblo nómade, es decir que eran grandes cazadores y
recolectores, se podían encontrar entre la zonas de la pampa húmeda y al sudoeste de la
llanura occidental.

Los pampas eran un pueblo muy organizado, viviendo en grupos y teniendo una figura a la que
obedecían, en este caso eran los caciques quien se encargaba de guiar al pueblo. También
contaban con la división del trabajo, las mujeres encargadas del cuero y las recolectas de los
alimentos, mientras que los hombres de la caza y de la protección del pueblo.

Una de las razones por la cual este pueblo originario era tan conocido, era por sus grandes
habilidades en la alfarería y trabajos en piedra, fabricantes de boleadoras, arcos y flechas.
Unas de sus grandes actividades económicas eran los cultivos anuales (trigo, maíz, girasol,
arroz) y perennes (frutales) en el este y la ganadería en el centro-oeste.

Su parte cultural estaba travesada por el llanto, la lucha, por la pérdida de sus ríos y creían en
una identidad superior a ellos, parecidos al gran señor del sol. Sus leyendas se basaban en
cosas cotidianas de su vida, que para aquellos momentos no tenían la explicación de hoy en
día. Su conexión con la naturaleza va más allá del cuidado de este, sino que también creían en
la naturaleza como otra deidad divina.

A principio del siglo XIX, el gran pueblo pampa, empezó a desaparecer, siendo remplazados
por otros pueblos con caracteres distintos, más parecidos a los pueblos araucanos o
mapuches.

El pueblo originario guaraní, también es un pueblo de carácter nómade, se podían encontrar

entre territorio que hoy comprende Brasil, Paraguay y la provincia de Misiones, en la
Argentina. Los guaraníes que vivían en la selva y tenían muchos recursos para conseguir
alimentos eran cazadores, recolectores, pescadores y cultivaban en pequeñas parcelas.

La organización era diferente a la de los pampa, ello se guiaban por la organización familiar, es
decir que obedecían a la cabeza a mando (padre), luego esto se trasladaba a la “comunidad”,
es decir que era una agrupación de varias familias, luego se encontraba la familia al mando
donde estaba el cacique.

Los guaraníes, eran conocidos por ser buenos agricultores de maíz, también cultivaban otras
verduras. Algo muy importante y diferente que tenían, es que cada familia contaba con un
“cerco” que era dedicado a los cultivos.

Para ellos el tema ambiental era importante, cuidaban la tierra y buscaban lugares más aptos
para sus cultivos todo el tiempo, esto también se veía unido al tema cultural, ya que sus
cultivos eran algo muy importante.

Los guaraníes fueron uno de los primeros pueblos contactados tras la llegada de los europeos
a Sudamérica hace unos 500 años. Hoy día constituyen el pueblo indígena más numeroso de
Brasil, donde aún viven alrededor de 51.000 guaraníes. Muchos otros habitan en los vecinos
Paraguay, Bolivia y Argentina.