En pleno siglo XXI asistimos a importantes avances tecnológicos que han
logrado acelerar el ritmo de la vida humana y generar una variedad de comportamientos nuevos y nocivos para el público en general. Por ello, existen muchos medios electrónicos que abren nuevos caminos. Como usuario de Internet, puede utilizar estos medios masivos para cometer algunos delitos. Son los más vulnerables de la sociedad, es el más vulnerable de la sociedad, como los delitos de provisión sexual a niños y adolescentes a través de los medios de comunicación, donde está el trabajo actual, es como querer mostrar una modalidad dirigida a uno de las cosas. El bullying y el acoso siempre están presentes en las escuelas, pero gracias a Internet y las nuevas tecnologías, los ataques se han extendido más allá de los edificios escolares y están arrasando en las redes sociales. Más y más casos. La revolución tecnológica y la expansión de Internet han creado muchas oportunidades para acceder a la información, la educación y el entretenimiento y fomentar las relaciones sociales. Utilizamos las tecnologías de la información y la comunicación para conocer lo que sucede en el mundo, aprender, jugar, trabajar, acercarnos a las personas (amigos, familiares), compartir experiencias y expresar opiniones. Compra bienes o servicios con otros (descarga películas, música, tiendas, etc.). Uno de los cambios más importantes que ha supuesto la irrupción de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación es la relación entre los jóvenes y sus iguales. Los teléfonos inteligentes, las redes sociales y las aplicaciones de mensajería instantánea están transformando el poder y la forma del diálogo breve entre los jóvenes, instantáneo y duradero, sin contacto directo ni intervención física con los demás, primando la conexión. Para los niños y adolescentes, Internet se convierte en un importante espacio de socialización y socialización a través del cual establecen canales de comunicación y relaciones con sus pares. Conéctate con amigos, comenta experiencias cotidianas, comparte fotos y vídeos, expresa emociones y opiniones, y proyecta a través de redes sociales como Tuenti, Facebook, Twitter, Instagram o aplicaciones móviles como Whatsapp. Sin embargo, cabe recordar que las tecnologías de la información y la comunicación son solo una herramienta y se pueden utilizar correctamente. Además de los múltiples beneficios y oportunidades de ocio, conocimiento, formación, comunicación o relación social que ofrecen estas tecnologías, su uso indebido conlleva diversos riesgos a los que los menores están especialmente expuestos. Frente a las vastas oportunidades de comunicación y aprendizaje que ofrecen las tecnologías de la información y la comunicación, estas posibilitan el surgimiento de nuevas formas de acoso e intimidación que ponen en peligro la salud de los jóvenes, como en este caso. Regular el delito de violencia sexual contra menores es muy importante en el ordenamiento jurídico mundial al ser considerado un delito grave por afectar un conjunto de derechos que forman parte de los derechos humanos básicos. Se constató que era el delito socialmente más condenado y que las víctimas eran en general menores de edad de escasos recursos. Al cometer este delito, los perpetradores son plenamente conscientes de la ilegalidad de sus actos y actúan en consecuencia. Esto se debe a que la comisión delictiva no exige que el atacante tenga pleno conocimiento jurídico de que el hecho es sancionado. Especialmente para los menores desprotegidos que no pueden resistir la agresión sexual. En las circunstancias ya señaladas, el imputado Jean Claude Villafuente Yupanqui fue condenado por un delito contra la libertad. Adecuación al carácter penal de los ofrecimientos sexuales a niños, niñas y adolescentes sancionados según lo dispuesto en el artículo 183-B de la Ley peruana. Las acciones representadas por el artículo 183-B del Código Penal se consuman en el momento en que un agente contacta a una víctima menor de edad y le hace una solicitud o sugerencia sexual. Dependiendo de cómo esté estructurada la fórmula de la ley, es solo un delito de actividad. El agente no tiene que lograr su propósito. En otras palabras, no tiene que obtener el material pornográfico solicitado. Asimismo, para evitar que los agentes mantengan relaciones sexuales con las víctimas, basta con que los agentes las soliciten o propongan a su vez. Cometer el crimen por completo. El delito se configura simplemente al momento de solicitar pornografía a un menor de 14 años, para sugerir que el niño realice actos con connotaciones sexuales, con un sujeto pasivo o un tercero, además de que el material la pornografía que se puede presentar debe ser menor de edad, mientras que su derecho a la reparación sexual está protegido, y por lo tanto es el titular legal del derecho. Por lo tanto, también debe quedar claro que los contactos deben establecerse por medio de la tecnología, como sea; Facebook, Messenger, WhatsApp, entre otros, así como el contacto directo del agresor con los menores, y se debe aclarar que no es necesario enviar lo solicitado por el sujeto activo, pues se trata de un simple operativo delictivo, configurado por el simple hecho de petición y sugerencia. Lapiz Arrascue Elianee Jhasmyth