Paulo Freire, reconocido pedagogo y filósofo brasileño, planteó diversas cualidades

docentes fundamentales para llevar a cabo una educación liberadora y transformadora.

Estas cualidades destacan la importancia de establecer una relación horizontal entre el
educador y el educando, fomentando la participación activa y crítica de estos últimos en el
proceso educativo. A continuación, se presentan algunas de las cualidades docentes
planteadas por Paulo Freire:

1. Diálogo: Freire enfatizaba la importancia del diálogo como una herramienta esencial para
la construcción del conocimiento. El docente debe establecer un diálogo abierto y
respetuoso con los estudiantes, escuchando atentamente sus ideas, experiencias y
perspectivas, y fomentando la expresión de diferentes puntos de vista.

2. Curiosidad y humildad intelectual: El docente debe ser curioso y tener una actitud abierta
al aprendizaje constante. Reconoce que tanto él como los estudiantes son sujetos en
constante desarrollo y que todos tienen conocimientos y experiencias valiosas para aportar
al proceso educativo.

3. Compromiso social: Freire resalta la importancia de que el docente esté comprometido

con la transformación social y la justicia. Debe promover la conciencia crítica y la reflexión
sobre las estructuras de poder y las desigualdades presentes en la sociedad, buscando
formas de acción y cambio.

4. Empatía y respeto: El docente debe mostrar empatía hacia los estudiantes, reconociendo
sus realidades, contextos y necesidades individuales. Además, debe establecer un
ambiente de respeto mutuo, donde se valore la diversidad de opiniones, experiencias y
culturas.

5. Creatividad y flexibilidad: Freire destaca la importancia de la creatividad y la flexibilidad

en el proceso educativo. El docente debe ser capaz de adaptarse a las necesidades y
características de los estudiantes, utilizando diferentes recursos, métodos y estrategias
pedagógicas para hacer el aprendizaje significativo y relevante.

Estas cualidades docentes planteadas por Paulo Freire se basan en su enfoque de la

educación como un acto de liberación y transformación, donde tanto el educador como el
educando son agentes activos en la construcción del conocimiento y en la lucha por la
justicia social.