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formulación de la hipótesis y los

objetivos
Una vez hemos delimitado nuestro problema de
investigación y nos hemos documentado lo suficiente
como para manejar los conceptos con los que queremos
trabajar, llega el momento de determinar sobre qué
aspectos concretos de la realidad social sobre la que
descansa el problema queremos incidir. Para ello se
formulan objetivos e hipótesis.
Un planteamiento investigador puede incluir bien
objetivos, bien hipótesis, o bien ambos a partir de una
formulación de objetivos que incluyan en su seno
hipótesis específicas de investigación.
Nos hallamos ante un momento clave de la
investigación. Unos objetivos y/o hipótesis bien
planteadas supondrán una fantástica guía para saber
qué información concreta registraremos del problema.
Una deficiente formulación de objetivos y/o hipótesis a
buen seguro provocará que difícilmente podamos dar
respuesta a nuestros compromisos investigadores
porque no sabremos qué datos recoger ni cómo
articularlos para dar respuesta a los interrogantes del
estudio.
Los objetivos suponen una declaración de intenciones,
un compromiso investigador. En el planteamiento
investigador asumen la forma de interrogantes y suelen
formularse a partir de enunciados precedidos de un
verbo cognoscitivo en infinitivo (conocer, averiguar,
analizar, determinar).
Por ejemplo, si nuestra investigación tratara sobre la
"exclusión social educativa del alumnado de etnias
minoritarias", un objetivo podría ser: "Determinar las
principales causas de fracaso escolar del alumnado de
etnias minoritarias", o bien "analizar los principales
ámbitos cotidianos de discriminación social que sufre el
alumnado de etnias minoritarias".
Por su función en la investigación, habitualmente
encontramos dos tipos de objetivos: el objetivo general
(también llamado principal) y los objetivos específicos
(también llamados secundarios).
El objetivo general refleja la esencia del problema a
investigar, y en muchas ocasiones ya viene formulado
implícitamente en el título de la investigación. A partir
del objetivo general se construye una batería de
objetivos específicos o secundarios.
Estos representan dimensiones específicas del objetivo
general, abordando ya aspectos o facetas concretas que
buscamos conocer con la investigación.
El siguiente vídeo propone un ejemplo de planteamiento
de investigación a partir de objetivo general y
secundarios.
Las hipótesis, por su parte, son soluciones probables,
previamente seleccionadas, al problema de
investigación, propuestas por el investigador. Se
formulan en términos de afirmación.
En definitiva constituyen una suposición, una
"sospecha" elaborada por el investigador acerca de cómo
funcionan los diferentes aspectos de la realidad que
está estudiando. A lo largo de la investigación se
comprobará si se confirman o no. En definitiva, las
hipótesis nos sirven porque:
• Son una guía a lo largo de la investigación.
• Tienen una función descriptiva y explicativa del
problema.
• Permiten probar teorías.
• Sugieren nuevas teorías.
Por otra parte, para que una hipótesis sea considerada
como bien formulada, tiene que cumplir una serie de
características:
• Deben ser claras y comprensibles.
• No deben de llevar en sí juicios morales.
• Han de ser susceptibles de verificación.
• Tienen que dar una respuesta probable.
• Deben contener un único enunciado, no solapar
proposiciones.
Veamos a partir del ejemplo del primer vídeo de esta
página cómo podría realizarse un planteamiento
investigador que contara con objetivos e hipótesis:
Para la elaboración de hipótesis es especialmente
recomendable saber qué son las Hipótesis de
Investigación. Las hipótesis de investigación son
proposiciones tentativas acerca de las posibles
relaciones entre dos o más variables.
A partir de esta definición podemos clasificar los
distintos tipos de hipótesis, que nos llevarán a buscar
los aspectos concretos de la realidad que queremos
investigar. Los principales tipos de hipótesis son:
• Descriptivas: proponen cuál será el valor de una
variable en un contexto determinado o en presencia
de otras variables. Ej: La expectativa de encontrar
empleo fijo en el primer año tras la graduación por
parte de los estudiantes de trabajo social es
superior al 50%.
• Correlacionales: Especifican que existe relación
entre dos o más variables, aunque sin establecer
relación de dependencia entre ellas. Ej: A mayor
implicación cívica de los sujetos, mayor
participación ciudadana de éstos.
• De diferencia entre grupos: Se utilizan para
comparar el comportamiento de una o más
variables entre grupos de población. Ej: Las
personas desempleadas hacen más uso de los
servicios sociales municipales que las empleadas.
• Causales: Afirman las relaciones entre dos o más
variables, la forma en que se dan esas relaciones, y
la situación de dependencia de unas respecto a
otras. Ej: La desestructuración familiar provoca
baja autoestima en los hijos.

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