Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
UU en Afganistán
¿Quiénes son los talibanes?
La última vez que gobernaron en 1961, los talibanes declararon un Emirato Islámico e
impusieron su estricta interpretación del Corán y la aplicaron con brutales castigos en
público, entre ellos azotes, amputaciones y ejecuciones en masa, su extremismo
religioso sunita profundizó el ataque a las mujeres, prohibieron que las mujeres y las
niñas realizaran la mayoría de los trabajos e incluso que asistieran a la escuela. Se
dieron casos de lapidaciones, también dejaron claro que no tolerarían cualquier práctica
religiosa rival: a principios de 2001 destruyeron monumentos no islámicos como las
estatuas budistas de Bamiyan, de 1.500 años de antigüedad objetos de admiración en
todo el mundo. Los talibanes los consideraban blasfemos y se jactaron de que su
destrucción era sagrada, hubo ejecuciones de chiitas/hazaras a quienes consideraban
herejes, las mujeres que eran sorprendidas fuera de casa con el rostro descubierto se
arriesgaban a castigos muy severos y las mujeres solteras que fueran vistas en compañía
de hombres solteros también enfrentaban penas. Su ideología dicta que las mujeres solo
deben ocupar los roles sociales más limitados.
y como dato curioso EE. UU. entregó armamento sofisticado a los talibanes, primero
colaborando en su lucha contra el gobierno afgano y la ocupación soviética, luego como
parte de su compromiso militar. Sin embargo, después del 11 de setiembre, al decidir
combatir a los talibanes debieron enfrentar tropas que utilizaban esas armas que les
habían entregado.
ahora para entrar más en materia y entender que hacía EE.UU en Afganistán,
hablaremos sobre el atentado de las torres gemelas, para posteriormente hablar sobre Al
Qaeda, y la misión estadounidense con la que empezó la invasión de estos a Afganistán.
El operativo del 11 de septiembre de 2001 más conocido como la caída de las torres
gemelas, fue ejecutado por 19 militantes islámicos, fue el mayor operativo de la historia
realizado en un país central desde un país pobre. Participaron cuatro aviones
comerciales que habían sido secuestrados, dos fueron a las Torres Gemelas del World
Trade Center en Nueva York, uno al Pentágono en Washington, y el cuarto se estrelló
en las afueras de Pensilvania cuando los pasajeros trataron de quitarle a los
secuestradores el control del avión.
En el hecho murieron unas 3.000 personas incluidos los 19 secuestradores, de los cuales
quince eran de Arabia Saudita, dos de Emiratos Árabes Unidos, uno del Líbano y uno
de Egipto. Ninguno era afgano, aunque todos estaban conectados a la red de Al Qaeda,
que tenía campos de entrenamiento en Afganistán.
Dos meses después de que Estados Unidos y sus aliados internacionales y afganos
lanzaran sus ataques, y el régimen talibán colapsó haciendo que sus combatientes se
dispersaran en Pakistán, un nuevo gobierno respaldado por Estados Unidos se hizo
cargo en 2004, pero los talibanes todavía tenían mucho apoyo en áreas alrededor de la
frontera con Pakistán, y ganaban cientos de millones de dólares al año con el tráfico de
drogas, la minería y los impuestos.
Este grupo podría estar ingresando hasta US $1.500 millones al año, una cifra que en la
última década ha experimentado un gran aumento. Afganistán es el mayor productor de
opio del mundo, y la mayoría de las amapolas utilizadas para producir heroína se
cultivan en áreas controladas por los talibanes
ISAF
Las tropas internacionales no tenían pensado quedarse para siempre, su misión era
contener a los talibanes mientras formaba y equipaba el nuevo ejército y policía afgano.
En 2013 la OTAN dejo la seguridad del país en manos de la policía afgana y se dedico
solamente a dar apoyo aéreo y a continuar formando a la propia policía afgana, el 31
diciembre de 2014, Obama dio por terminada la misión ISAF y dio inicio a la misión
CENTINELA DE LA LIBERTAD, la cual sería llevada a cabo con muchos menos
recursos y estaría centrada exclusivamente en asistir, entrenar y asesorar a las fuerzas de
seguridad afganas.
Retirada
Afganistán siguió siendo pasto de la inestabilidad, pero a pesar de varios tires y afloja
entre los talibanes y la OTAN, estados unidos anuncio que sus tropas abandonarían el
país entre mayo de 2020 y septiembre de 2021, y así fue, la OTAN cansada de poner
dinero y tras sufrir más de 3.500 bajas entre sus filas, fue paulatinamente abandonando
el país. La retirada de las tropas estadounidenses de Afganistán comenzó en mayo de
2021 y las fuerzas de combate de los Estados Unidos terminaron su retirada de
Afganistán el 30 de agosto de 2021.
En mayo de 2021 los talibanes iniciaron una ofensiva que se extendió en el campo a
principales ciudades del país, con la intimidación, ejecutando a importantes figuras de la
sociedad civil y mediante la diplomacia llegando a acuerdos con los lideres de
diferentes tribus, los talibanes se fueron abriendo paso, a finales de julio se estimaba que
ya dominaban la mitad de los distritos rurales del país, y a pesar de que los primeros
ataques de los talibanes a capitales de provincia fueron abatidos por las fuerzas
especiales afganas.
Zaranj cayo el 6 de agosto, siendo la primera ciudad en caer en manos de talibanes y en
dos días cayeron 5 de las 34 capitales de provincia afgana, tras fracasar las
conversaciones con estados unidos sobre un nuevo apoyo militar, (viernes 13 de agosto
el presidente se da cuenta que no obtendrán nuevamente el apoyo y protección
estadounidense) y el 15 de agosto sucede la caída de la capital de la entonces República
Islámica de Afganistán Kabul, y los Talibanes anuncian su intención de proclamar el
restablecimiento del Emirato Islámico de Afganistán. Ese mismo día el presidente
Ashraf Ghani y altos funcionarios de su gobierno, así como el personal de las embajadas
de varios países occidentales, abandonaron el país.
La rápida conquista de casi todas las capitales de provincias afganas por parte de los
talibanes no dio el suficiente tiempo a Estados Unidos y sus aliados de la OTAN para
ayudar a salir a miles de afganos que se quedaron en el país y que calificaban para ser
evacuados.
“Hay mucha angustia asociada con esta partida. No sacamos a todos los que queríamos
hacer salir. Pero creo que, si nos hubiéramos quedado otros 10 días, no habríamos
sacado a todos”, dijo el general McKenzie durante la rueda de prensa.
Así terminó una operación masiva para evacuar a más de 120.000 personas en poco más
de dos semanas: estadounidenses, extranjeros y muchos afganos.
Consecuencias y actualidad
Con los talibanes armados controlando las calles de Kabul y otras ciudades, el terror se
ha apoderado de la capital y de otros lugares de Afganistán.
En Kabul, los combatientes talibanes han ido de puerta en puerta en algunos barrios,
buscando a cualquier persona que haya apoyado al gobierno o a los estadounidenses. Y
a pesar de las promesas públicas de los líderes talibanes de un enfoque más moderado
para gobernar, se han impuesto restricciones a las mujeres, y los talibanes han reprimido
a algunos periodistas independientes.
Entre los 38 millones que permanecen en el país, existe una gran incertidumbre sobre
qué tipo de gobierno impondrán los talibanes: ¿traerán de regreso las duras reglas y
castigos que caracterizaron su último régimen?
Muchos afganos miran el gobierno de los talibanes en las zonas rurales y temen que no
solo no hayan cambiado, sino que de alguna manera hayan empeorado.
Esta es una sociedad profundamente tradicional. Las mujeres y las niñas obtuvieron un
poco de libertad cuando las fuerzas de la coalición occidental fomentaron la educación.
las violaciones a los derechos humanos de las mujeres y niñas han aumentado a paso
constante. A pesar de que en un principio prometieron que las mujeres podrían ejercer
sus derechos dentro de los límites de la sharia, la ley islámica—que incluye el derecho a
trabajar y estudiar—, los talibanes han excluido sistemáticamente a las mujeres y niñas
de la vida pública.
Las mujeres no ocupan cargos en el gabinete del gobierno de facto, que, a su vez, disolvió
el Ministerio de Asuntos de la Mujer y, así, eliminó con eficacia el derecho a la
participación política de las mujeres. Los talibanes también prohibieron que las niñas
asistieran a la escuela después del sexto grado e impidieron que las mujeres realizaran la
mayoría de los trabajos que se llevan a cabo fuera del hogar.
Haqqani, por su parte, asegura que "lo único que acordaron los talibanes fue una
retirada estadounidense".
"Dijeron: 'De acuerdo, comenzaremos un diálogo con el gobierno afgano'. Pero nunca se
lo tomaron en serio".
El hecho es que el gobierno afgano cayó antes de que el diálogo con los talibanes
produjera el alto el fuego previsto y un acuerdo definitivo. E incluso la violencia se
recrudeció en los meses posteriores al acuerdo, según algunos observadores, debido al
interés de los talibanes en controlar el mayor territorio posible y ganar fuerza de cara a
esas negociaciones inconclusas.
El Acuerdo de Doha no menciona nada sobre ellas, ni obliga a los talibanes a respetar
los derechos humanos.
Suhail Saheen, portavoz de los talibanes, le dijo a la BBC que en el nuevo Afganistán
"las mujeres pueden tener acceso a la educación y al trabajo".
El analista Haqqani alerta, en cambio, de que nunca se puede confiar "en la palabra de
los talibanes: siempre llevan sus promesas a tribunales que se rigen por su interpretación
del islam".
Muchas afganas temen el retorno de los talibanes al poder y han intentado salir de
Afganistán.
Haqqani cree que "es solo cuestión de tiempo que se materialice" la amenaza de
acciones terroristas desde Afganistán que temen los países occidentales y lamenta que el
Acuerdo de Doha no incluye ningún mecanismo para garantizar que, efectivamente, los
talibanes cumplen su compromiso de no permitir que Afganistán se convierta en una
base terrorista.
Él es uno de los que teme que entre los 5.000 presos liberados en virtud del Acuerdo de
Doha pueda haber integrantes de organizaciones yihadistas como Al-Qaeda, Estado
Islámico o el Movimiento Islámico del Turkestán Oriental, que tiene como objetivo la
región china de Xinjiang, donde viven los uigures, una minoría de chinos musulmanes.