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MÉDICA
I
MARCO REGULATORIO Y
DOCTRINA GENERAL
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Sin embargo, la Jurisprudencia más reciente (STS de 03.02.2015) entiende que en el campo de la medicina satisfactiva la
obligación del facultativo resultado única y exclusivamente cuando este se haya comprometido a la obtención de un resultado
concreto. En cualquier otro caso su obligación es de medios.
Cumple advertir, eso sí, del distinto plazo de prescripción de la acción por
El art. 217 LEC regula la carga de la prueba con carácter general, y así atribuye al
demandante la carga de probar los hechos en los que funde su pretensión; de este modo,
cuando, al tiempo de dictar sentencia o resolución semejante, el tribunal considerase
dudosos unos hechos relevantes para la decisión, desestimará las pretensiones del actor,
o las del demandado, según corresponda a uno u otro la carga de probar los hechos que
permanezcan inciertos y fundamenten las pretensiones.
Por tanto, la regla general contenida en el artículo precitado implica que es el actor el
"encargado procesal" de llevar a cabo una actividad probatoria suficiente para que el
juzgador entienda acreditada su pretensión. No obstante, la aplicación absoluta de esta
regla general produciría en numerosos supuestos resultados inicuos ocasionados, por
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Ahora bien, este régimen de responsabilidad objetiva que recoge para los servicios sanitarios el artículo 148 del vigente
TRLGDCU alude a la responsabilidad civil a cargo del establecimiento sanitario en el que tuvo lugar la intervención o
actuación médica causante del daño, de manera que la responsabilidad del concreto profesional médico actuante continuará
rigiéndose según criterios culpabilísticos de imputación; y es en este punto donde entra en juego la doctrina del daño
desproporcionado, que lo que pretende es facilitar la posición probatoria del demandante por medio de una suerte de presunción
de culpa de aquel profesional, que éste deberá desvirtuar si desea obtener un pronunciamiento absolutorio frente a la pretensión
actora.
Sin embargo, se prestará por escrito en los casos siguientes: intervención quirúrgica,
procedimientos diagnósticos y terapéuticos invasores y, en general, aplicación de
procedimientos que suponen riesgos o inconvenientes de notoria y previsible repercusión
negativa sobre la salud del paciente.
3. El consentimiento escrito del paciente será necesario para cada una de las
actuaciones especificadas en el punto anterior de este artículo, dejando a salvo la
posibilidad de incorporar anejos y otros datos de carácter general, y tendrá información
suficiente sobre el procedimiento de aplicación y sobre sus riesgos.
4. Todo paciente o usuario tiene derecho a ser advertido sobre la posibilidad de utilizar
los procedimientos de pronóstico, diagnóstico y terapéuticos que se le apliquen en un
proyecto docente o de investigación, que en ningún caso podrá comportar riesgo
adicional para su salud.
- Sentencias que equiparan la falta de información con una infracción de la lex artis.
ANTECEDENTES DE HECHO
RESOLUCIÓN:
▪ Motivo primero.-
- A este respecto, recuerda la Sala que es doctrina retirada del TS que los actos de
medicina voluntaria o satisfactiva no comportan por sí la garantía del
resultado perseguido, por lo que solo se tomará en consideración la existencia
▪ Motivo segundo.-
- Conforme al TS, con cita a las SSTS de 04.03.2011 y 16.01.2012, los efectos que
origina la falta de información están especialmente vinculados a la clase de
intervención: necesaria o asistencial, voluntaria o satisfactiva, pues en este último
caso la información que se debe procurar al paciente es más rigurosa, dada la
necesidad de evitar que se silencien los riesgos excepcionales ante cuyo
conocimiento el paciente podría sustraerse a una intervención innecesaria o de una
necesidad relativa.
ANTECEDENTES DE HECHO
RESOLUCIÓN:
- Y ello, dice, la Sala, “en razón de que cualquiera que sea la perspectiva con que se
mire la presente cuestión, será preciso que ocurran determinados eventos para el
éxito de la pretensión de la parte actora, como son un daño concreto, una acción
impregnada de culpa de una persona unida o no a un vínculo contractual y un nexo
causal entre los anteriores”.
▪ Motivo tercero.-
- En todo caso, concluye la Sala, la fuerza mayor alegada por el INSALUD “no se da
en la presente situación, ya que si se hubiese practicado la operación de cesárea en
su debido tiempo (…) no se hubiera determinado la muerte del feto. Sin que dicho
retraso se debiera a causa distinta a un desorden ilógico en la transmisión de las
órdenes oportunas, concretada en el retraso de la intervención del anestesista”.
Desestimado también este motivo, el TS confirmó la sentencia de la AP.
ANTECEDENTES DE HECHO
RESOLUCIÓN:
Consentimiento informado.
ANTECEDENTES DE HECHO
RESOLUCIÓN:
- Si bien es cierto que el documento firmado por el paciente no menciona los efectos
secundarios y/o las complicaciones que pudieran derivarse del tratamiento
radiológico, también es cierto que sí se hace constar la dificultad del resultado
positivo – y, desde luego, la hemorragia cerebral sufrida por el paciente no fue
provocada por la intervención radiológica.
- En todo caso, la Sala recuerda que tiene declarado en otras sentencias que:
ANTECEDENTES DE HECHO
RESOLUCIÓN:
- Dice la Sala que la responsabilidad médica sólo puede apreciarse cuando existe
culpa o negligencia por parte del facultativo, que se concreta en la infracción de la
lex artis ad hoc, y recuerda que “no es aceptable la objetivación de la
responsabilidad en un sistema de responsabilidad subjetiva o por culpa, como el
que establece el art. 1902 Cc, ni tan siquiera mediante la doctrina del resultado
desproporcionado, que sólo es admisible como procedimiento racional por vía de
inferencias lógicas a la demostración de la culpabilidad del daño”.
- La lex artis supone, entonces, que la toma de decisiones clínicas está basada en el
diagnóstico que se establece a través de una serie de pruebas encaminadas a
demostrar o rechazar una sospecha o hipótesis de partida. Ello implica la obligación
del médico de realizar todas las pruebas diagnósticas necesarias, atendido el estado
de la ciencia médica en ese momento, de tal forma que, realizadas las
comprobaciones que el caso requiera, sólo el diagnóstico que presente un error de
notoria gravedad o unas conclusiones absolutamente erróneas, puede servir de base
para declarar su responsabilidad.
▪ Motivo tercero.-
▪ Motivo cuarto.-
«(…) los criterios de imputación válidos no se separan en gran medida [en uno y otro
caso] puesto que, como es bien sabido, los tribunales del orden contencioso-
administrativo vinculan la existencia de responsabilidad al incumplimiento de los
estándares del servicio».
ANTECEDENTES DE HECHO
- La actora recurrió en casación esta sentencia, alegando infracción del art. 1902 Cc.
RESOLUCIÓN: