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Jugar con el espejo

17 OCT

El espejo es un elemento fundamental e nuestro vida cotidiana. Y nos ayudará a favorecer


en nuestros bebés el conocimiento de uno mismo. Estas actividades van encaminadas a
trabajar la percepción, la coordinación y la precisión d movimintos. Para llevarlas a cabo
hay que tener en cuenta en qué momento se encuentra el niño.

Hasta los 6 meses no asocia su reflejo consigo mismo. Aunque puede tener interacción con
él, no comprenderá qué está pasando. Sólo es algo más que está ahí. Es a partir de esa edad
cuando empiezan a darse cuenta de que hay algo extraño en eso. Cuando sea capaz de
reconocerse tendrá una reacción de risa, sorpresa y satisfacción. Aunque esto ocurra, será
por poco tiempo: enseguida se olvidará y volverá a encontrarse con su reflejo.

Imagen de OfiLineaMobiliario
Algunas actividades con el espejo a partir de 6 meses
Podemos sentar al niño delante del espejo (sin que nosotros nos reflejemos), y así observar
cómo interactúa con él y qué expresiones y sensaciones le provoca su propia imagen.
Después nos podemos poner a su ladopara que vea nuestro reflejo también. Esto le ayudará
porque conoce nuestra imagen, y le chocará vernos doble. Nos mirará en el espejo con gran
curiosidad y alegria.

Seguidamente podemos empezar a interactuar con las imagenes del espejo. Por ejemplo,
moviendo los brazos. Así le ayudamos a discernir qué son las manos y qué son la imagen
reflejada de las manos. Hagamos toda clase de movimientos que llamen su atención hacia el
espejo.

También podemos coger sus manos y acercarlas al espejo, así como cogerlo en brazos para
acercarle y separale del espejo, aparecer y desaparecer de él,…

Algunas actividades con el espejo a partir de 10 meses


A partir de los 10 meses empezará a tener mucha más interacción con el espejo: jugar con
las manos, chupar el reflejo,… Por ello estas actividades van destinadas a favorecer el
control del propio cuerpo. Una de ellas es «jugar a los gestos», con la que además
trabajamos el lenguaje expresivo. Podemos poner cara a distintos sentimientos, para que el
niño nos imite: alegre, sorprendida, triste… También podemos jugar con los animales,
imitando cómo se mueve cada animal. Para ello necesitaremos un gran espejo. O, en mi
caso, el portal del edificio donde viven los abuelos 😉

https://elbauldelasenyo.wordpress.com/category/baby/

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