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Introducción.
Durante la conferencia se percibe un lenguaje correcto por parte del conferenciante, buena
pronunciación, maneja correctamente los recursos semánticos, su intensidad es adecuada
manejando un volumen de voz alto, su tonalidad y timbre son agradables, la velocidad al
hablar es lenta; sin embargo, no se considera negativo, puesto que para la conferencia permite
entender y procesar todo lo que dice. Su terminología es sencilla, no usa términos
especializados que podrían dificultar al entendimiento de la ponencia, por lo que logra que su
presentación se dé a entender a la perfección, ya que no cansa al auditorio, y capta la atención
de los participantes. También maneja el lenguaje verbal siendo este muy sutil. Su conferencia
está dirigida sobre todo a los profesores de primaria y secundaria, ya que ellos son los
encargados de enseñar a los niños y adolescentes a escribir durante su etapa en la escuela.
Ponencia:
Al inicio el primer tema a tratar por el doctor Daniel Cassany es “¿Cómo se aprende a
escribir?” y en este habla de cómo se aprende a escribir en el contexto de los niños nacidos en
el siglo XXI, cómo los niños viven en entornos letrados dónde estamos expuestos a
exámenes, periódicos, apuntes, leyes, normas y como tradicionalmente se pensaba que para
entender, comprender y escribir textos bastaba con aprender a decodificar y codificar, por lo
tanto la escuela enseñaba a leer en voz alta y a atender lo que estás decían, pero Cassany
asegura que esto es falso, ya que la codificación es importante pero no suficiente porque los
textos que existen son diferentes aunque utilicen la misma lengua, pero estos utilizan recursos
distintos de la lengua, con palabras y organizaciones distintas, entonces es difícil encontrar a
una persona que conozca todos los textos, puesto que solo utilizamos lo que nos afectan en la
vida cotidiana y solo aprendemos los que leemos y escribirnos eventualmente, ya que son los
únicos que nos interesan y en consecuencia aprendemos las particularidades de cada uno de
ellos.
Seguidamente, para dar un ejemplo más claro de lo expuesto el profesor Cassany toma como
ejemplo a la niña llamada Litang que escribió una carta a Cristina, la tesista doctoral, que era
su cuidadora quien debió irse a estudiar a Inglaterra, por lo cual Litang quiso escribirle una
carta por su ausencia, sin embargo, Cristina notó que en realidad la carta no decía nada. Aquí
él se hace la pregunta de “¿La niña sabe escribir o no?” y explica que ninguna de las dos, ya
que está a medio camino de aprender a escribir, porque conoce letras, y sabe también que
para comunicarse en la vida real se utilizan textos, y que los textos tienen formatos como
cartas y que existe un destinatario, y un autor, y lo único que le falta saber es redactar frases.
Meses después la niña escribe otra carta, donde ya se puede notar un texto con sentido. El
profesor Cassany dice que nadie discutirá que Litang no sabe escribir, porque ya lo hizo y
tuvo un sentido. Un ejemplo que nos parece pertinente dada su aclaración y concepción de la
escritura en los niños anteriormente.
En esta primera parte concluye que escribir una frase como “mi mamá me mima” no es haber
aprendido a escribir, sino que la manera de encontrar relevante escribir es para comunicarse
con otros. Para enseñar a escribir hay que encontrar situaciones relevantes en las cuales los
niños quieran escribir, con textos completos que los motive a comunicarse, como en internet
donde es posible escribir a amigos, familiares o desconocidos con los que se pueden
compartir intereses culturales, cómics, etc. Finaliza diciendo algo muy importante, y es que
enseñar a escribir no es concentrarse en la caligrafía, ortografía o en la elaboración de las
frases, ya que muchas veces olvidamos lo más importante que es el hecho de encontrar
situaciones comunicativas en el que los niños sepan expresarse con textos completos.
De acuerdo con esto Cassany resalta que hay cuatro principios básicos para iniciar con el
proceso de escrituras en las aulas las cuales son:
● Escribir con las herramientas que se utilizan hoy en día. Como se sabe, los tiempos
van cambiando y los formatos también, por esto es importante dotar de equipos
tecnológicos a las aulas para poder escribir con el teclado. Sin embargo, no quiere
decir que hay que dejar de lado el papel y el lápiz.
Cassany da consejos sobre cómo escribir teniendo en cuenta esa aproximación, que nos
permitirán mejorar. Nos aconseja que no hay que pensar que escribir es un acto único en el
que solo sea redactar, sino que hay que pensar la escritura como una actividad compleja en la
que tenemos la planificación, la redacción y revisión.
La teoría y las herramientas que nos ha proporcionado el doctor Daniel Casany son guías para
poner en práctica en las aulas; sin embargo, documentar el proceso que tienen los estudiantes
a la hora de aprender a escribir como el maestro a la hora de enseñar hará que se identifiquen
dificultades y errores que no se vuelva a cometer y a sistematizar una metodología fácil y
productiva para aplicar a la hora de enseñar a escribir. Por otra parte, la elección de los temas
que habló el profesor Cassany es idónea y casi completa, vista casi todas las dimensiones y
sobre todo con ejemplos prácticos y fáciles que podemos llevar al aula.
Por otro lado, el profesor Cassany toca un tema importante que es el profesor como modelo
del proceso de escritura: y en esta habla de cómo debe ser un modelador de ideas, mostrando
cómo hacer mapas mentales, en los que ellos puedan guiarse. Escribir textos concretos, temas
de cualquier cosa, ya que las ventajas de enseñar a escribir es que se puede escribir lo que se
quiera. Lo importante, es que los estudiantes escojan el tema que ellos quieran escribir. Sin
embargo, hay que tener en cuenta las tipologías, ya que es importante trabajar los distintos
tipos de texto, ya que permite trabajar distintos recursos lingüísticos, de forma que ellos
vayan experimentando los diferentes tipos de escrituras. La idea es que hay que trabajar con
diferentes textos, con temas que permitan enriquecer la capacidad del uso de la lengua y un
aprendizaje mucho más amplio de la escritura, ya que la escritura es diversa, y hay que
trabajarla con una gran variedad de recursos. Pero él piensa que en la educación primaria y
secundaria no es necesario, ya que aquí lo primordial es que el niño escriba y sepa hacerlo.
Por otro lado, ya finalizando los puntos importantes del seminario, el profesor Cassany, nos
da algunas indicaciones de como deberíamos corregir a los estudiantes, saltándose un poco al
lado idealista de realizar esta acción, pero que deberíamos empezar a implementar en la
clases, y el da las siguientes: corregir lo que el alumno pueda aprender, corregir pronto, al
momento, corregir los borradores, fijarse en el significado y no en la forma, dar indicaciones
pero nunca la solución correcta, conversar como autor-alumno, negociar con la clase la
manera de corregir, organizar a los alumnos para que se ayuden, enseñar a usar los recursos
digitales y variar los ejercicios de corrección.
Al igual que en la vida cotidiana podemos ver que en la escuela aprendemos a escribir en
todas las materias y en todos los niveles, por esta razón el docente debe actuar como
"cuidador" y "mediador" del aprendizaje. Adicionalmente es importante tener en cuenta que
la tecnología hace parte de la escritura actual, por lo tanto, hay que aprender a usarla.
Por otro lado, también nos aconseja que debemos tener en cuenta la escritura de manera
cooperativa, escribir textos diversos, con audiencias reales, pues de esta manera podemos
mejorar y dar un salto cualitativo en la enseñanza de la escritura.
De acuerdo con el diálogo que ofrece el Doctor Cassany, destacamos que la escritura no solo
puede reducirse a tener una buena caligrafía a través de planas. Si bien la percepción y
motricidad son importantes pues son aspectos visibles, pero no son los únicos que componen
el proceso de la escritura. Finalmente, el profesor Cassany invita a relacionarnos con la
escritura como un proceso de representación y de comunicación de lo que es el ser humano,
de lo que siente, lo que piensa y conoce del mundo. Escribir es, ante todo, pensar y crear
mundos posibles, por lo cual, al igual que la lectura, no se pueden reducir a técnicas, sino que
debe interiorizarse en todo el ser del sujeto escritor.