ENSAYO

RESILIENCIA, FACTORES, FORMAS DE CONSTRUIR RESILIENCIA,

APRENDER DEL PASADO, DÓNDE BUSCAR AYUDA Y LÍNEA EN EL TIEMPO.

Introducción

Los humanos al ser seres pensantes y racionales nos damos cuenta de todo lo que ocurre
a nuestro alrededor, somos consientes de las cosas que nos afectan y nos hacen felices,
nuestros sentimientos dirigen el curso de nuestra vida ya que cambian nuestra forma de
percibir nuestro entorno y es cuando la lógica y el corazón se encuentran para definir
como sentirnos con aquellas situaciones que se expresan más que las otras y son
importantes en el continuo desarrollo de nuestra percepción, aquellas situaciones que
interpretamos como difíciles y dolorosas nos producen momentos de angustia y tristeza,
pero ¿Cómo afrontamos y nos adaptamos a esas situaciones?

Según Wikipedia “la Resilencia es la capacidad para adaptarse a las situaciones

adversas con resultados positivos”. Entonces respondiendo a la pregunta en mis
palabras la Resilencia es una pauta muy importante para superar estas situaciones y salir
airosos de la adversidad. Aquí es este ensayo explicare y daré información sobre la
Resilencia y las cosas que no nos permiten aplicarla en nuestras vidas, la información de
este ensayo nos permitirá mejorar como personas al saber cómo actuar sobre nuestros
sentimientos negativos que se generan por los eventos desafortunados de nuestra
existencia.

La Resilencia es un proceso por el que pasamos las personas cuando superamos un

evento traumático o a alguna tragedia y no solo se consolida en la aceptación de esa
experiencia si no en la superación del hecho para sentirnos bien con nosotros y no vivir
en negación o tristeza. En el trabajo al que le hago un ensayo ahora mismo hablan sobre
“rebotar de una experiencia difícil, como si uno fuera una bola o un resorte” lo cual me
parece acertado porque la Resilencia es pasar por aquella situación y absorber todas esas
emociones negativas pero también aceptarlas y liberarlas rebotando y a su vez soltando
todo lo que nos aqueja. Claramente ser Resiliente no significa no tener dolor o tristeza,
si no saber tratarlo y manejarlo de modo que nos sintamos bien con respecto a aquellos
sentimientos. La tristeza por una tragedia es algo natural y luchar contra ella es un
proceso muy complicado, los humanos somos muy complejos y cada pequeño detalle
influye en nuestro camino de cambio emocional, la Resilencia solo es una palabra para
referirse a lo fuerte que hay que ser para superar cada deslave en la vida de cada quien,
tendemos a creer que la Resilencia es lo que nos va a cambiar la vida pero en realidad es
el nombre que lleva el esfuerzo que vamos a hacer nosotros para cambiarla a esta.
La Resilencia como todas las cosas tienen distintas pautas y factores de desarrollo que
nos lleva a poder utilizarla en nuestra vida diaria, estas están estrechamente arraigadas
con el apoyo familiar e interpersonal que nos ofrecen las personas como muestra de su
empatía. Estos vínculos de apoyo y cariño que mantenemos con cualquier persona nos
generan una sensación de seguridad y nos ayudan a poder formar nuestra visión de la
Resilencia para adecuarla a nuestra cotidianidad. Entre otras guías que congregan la
Resilencia es la capacidad que desarrollamos de controlar y manejar nuestros
sentimientos, y siendo así, que la Resilencia igualmente genera este factor el aprendizaje
de este en primer lugar colabora con la práctica y atención de el entender de nuestros
sentimientos. También nuestra habilidad de comunicarnos y resolver problemas nos
ayuda en este camino de superación ya que al comprender nuestra situación y encontrar
una solución a esta estamos forjando un puente hacia la recuperación y asimilación de la
Resilencia. De igual manera otro factor influyente es una visión positiva de la situación
de forma que veamos todo con unos ojos llenos de esperanza para no caer en la tristeza
o desesperación y constantemente estar firme ante cualquier pensamiento negativo y
solo pensar en lo que podemos rescatar de todo lo que se pueda estar viviendo. Ya por
ultimo también como podemos mantenernos positivos tenemos que ser realistas y
conscientes de la situación, lo ideal es ser cautelosos y capaces de realizar planes
prácticos y considerados pero con una mentalidad alegre y con confianza e ilusión del
futuro.

La Resilencia como algo que se construye y que luego se obtiene tiene diferentes formas
del traslado hacia esta. Ella siempre es lograble y captable, la Resilencia no es lo que
nos ayuda a recuperarnos si no es un conjunto de pasos que se siguen y conforman el
todo del camino de nuestra rehabilitación emocional y que nos conduce a la
conformación de una Resilencia lograda en nuestro ser.

Entre las maneras de poder erigir y componer nuestra Resilencia están:

-Conformar relaciones, ya sean con familiares o personas es muy importante en nuestra

vida en general, tener alguien que nos escuche más que reconfortante porque nos
permite desahogarnos nos ayuda en comprender nosotros mismos y aparte también
escuchar el apoyo e ideas de solución de la otra o otras personas. También formar parte
de grupos de ayuda o de colaboración para servir o pedir servicios es una buena forma
de alcanzar la Resilencia y que interactúa en sus emociones para sanarlas y superar la
tragedia.

-Ver la situación como algo imposible de superar. Ser negativos y/o pesimistas con
respecto a nuestro futuro no nos permite avanzar emocionalmente, nos bloquea y nos
cierra los ojos hasta reducir nuestra percepción a un futuro cargado de emociones
negativas cerrando nuestros planes y trastornando nuestra imaginación hasta creer que
ya no podremos volver a ser felices. Lo importante es mantenerse fuerte y creer en
nosotros mismo de que lograremos aceptar, entender y vencer nuestra tristeza generada
por esa tragedia que nos aflige.
-Aceptar nuestra situación. La vida como tal es una montaña rusa de emociones y es
algo bien sabido por todas las personas que siempre hay altibajos y que las cosas que
nos suceden no son sentido de auto culpabilidad o una pena eterna, todas estas tragedias
son parte de la vida, algunas más fuertes que otras pero es algo que como humanos nos
aturde y desfavorece. El sentimiento de normalidad, de que algo que te apena les sucede
a muchas personas deja un trasfondo de tranquilidad ya que nos sentimos acompañados
en el viaje de aventajo de cualquier tragedia.

-Dirigirnos por nuestras metas. Si tenemos metas para un futuro cercano o lejano estas
pueden ser un muy buen apoyo para motivarnos a superar nuestra tristeza trabajando y
concentrándonos en ellas. Las metas futuras de cada persona son una posición deseada
de está ya que al llevarlas a cabo nos sentimos completos y realizados los cual mejora
nuestros sentimientos y siempre el incentivo de empezar o continuar un
proyecto actuando en pro a algo que nos gusta es propicio a dejar nuestra tristeza y
colaborar en el bien de nuestra felicidad.