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ALERGIA A LOS MEDICAMENTOS

Las alergias nos acompañan desde que nos convertimos en humanos. Todos conocemos a
alguien alérgico a algo, sin embargo, parece es que ahora, y no hace un siglo, que se habla
mas de ellas. Esto se debe a que están aumentando, ya muchos expertos la consideran una
epidemia.
Con toda la medicina y ciencia que hemos adquirido durante todos estos años, las vacunas
que han sido hechas para enfermedades mucho más mortales que una rinitis alérgica, y aún
no hemos sido capaces de eliminar las alergias de nuestra vida.
Les hablare sobre un tipo de alergia que podemos tener muy en particular, las alergias a los
medicamentos. Para entender de que se tratan las alergias a los medicamentos, primero les
explicare que es una alergia y su estrecha relación con sistema inmune.
La aparición de una alergia se debe a un funcionamiento incorrecto del sistema inmunitario.
Este reacciona defendiéndose de un agente peligroso que, en realidad, es inocuo. En
ocasiones, la reacción sí ocurre ante la presencia de un elemento peligroso, pero lo hace de
manera desproporcionada. Esas moléculas inocuas se le consideran antígenos por estimular
una respuesta inmune, pero en el caso de las alergias a ese antígeno se le considera alergeno
porque la respuesta inmunitaria que desencadenan es de tipo alérgica mediada por la IgE.
Esta reacción ocurre en individuos que, por predisposición genética, se sensibilizan a los
alérgenos. Esta predisposición genética se conoce como atopia.
En el caso de las alergias a los medicamentos para que un fármaco produzca una reacción
alérgica hace falta un contacto sensibilizante previo, ya sea con el mismo fármaco o con
alguno muy vinculado químicamente (ver anexo 1). Es por ello, por lo que se hace
necesario conocer los principios inmunológicos que rigen a los fenómenos alérgicos y asi
comprender con claridad.
Usualmente los medicamentos son moléculas muy pequeñas y no logran estimular al
sistema inmune, es necesario que se unan a proteínas de nosotros para poder estimular la
respuesta inmune y convertirse en un antígeno completo. El medicamento solo se denomina
haptenos o antígenos incompletos y las proteínas a las que se unen se les conoce como
proteínas transportadoras. Cuando el medicamento se transforma en un antígeno completo
se genera una producción de IgE dirigida específicamente al fármaco, pero ¿cómo se activa
esta producción de IgE?
Para responder esta pregunta tenemos que pensar en el antígeno que es reconocido por las
APC y es fagocitado y presentado a los linfocitos T helper específicamente los linfocitos
Th2 que segregan IL-4, IL-5 e IL10, que favorecen a la inmunidad humoral e induce el
mecanismo para la elaboración de esta IgE específica por las células plasmáticas. Estas IgE
se liberan en el torrente circulatorio y se fijan en la superficie de los basófilos y los
mastocitos que tienen receptores para la IgE, el receptor más importante es el llamado
FcεR1 (receptor 1 para el factor cristalizable Épsilon).
Cuando el organismo vuelve a entrar por segunda vez en contacto con dicho fármaco, este
reacciona con la IgE producida, que está fijada en la superficie de los basófilos o los
mastocitos, provocando la liberación de histamina y otras sustancias químicas (o
mediadores) almacenadas en gránulos en el interior de dichas células. Las sustancias
liberadas son las que desencadenan los síntomas propios de una reacción alérgica.
Dependiendo del lugar en el que se esté produciendo la reacción, los síntomas pueden
variar desde la aparición de ronchas aisladas con intenso picor, o una erupción generalizada
con habones e hinchazón, hasta episodios de broncoespasmo o incluso anafilaxia, o choque
alérgico generalizado, que puede llegar a ser mortal.
Las personas alérgicas a veces comentan que no han habían tomado nunca ese
medicamento y tuvieron una reacción alérgica, pues estas personas quizás no se acuerdan
de que tomaron el medicamento, porque fue hace mucho tiempo o también hay alimentos
que contienen algunos compuestos íntimamente relacionados con el fármaco y se
sensibilizaron de forma indirecta. No es posible se alérgico si no hay una exposición previa
al alergeno, no nacemos alérgicos, nos hacemos alérgico.
Muchas personas confunden la alergia en las cuales debe haber un mecanismo
inmunológico, con otro tipo de efecto adverso a los medicamentos que podría ser por un
mal uso del medicamento como una sobredosis o un efecto segundario a el medicamento
que ya viene previsto en la etiqueta del medicamento.
Existen dos tipos de reacción adversa a un medicamento a los medicamentos un tipo A, la
cual es una reacción que es predecible y otra que es el tipo B, es una reacción que no es
predecible. Las que con un mayor porcentaje se presenta son el tipo A, por ejemplo, un
paciente que tomo un tipo de desinflamatorio no esteroideo y genero una hemorragia
gastrointestinal. Las reacciones de tipo A usualmente depende de la dosis, por ejemplo, una
sobredosis que vaya más allá que la dosis optima volviéndose un efecto toxico. En las
reacciones adversas de tipo B no importa mucho la dosis, si no de que tan reactivo sea y del
mecanismo que puede ser inmunológico, no inmunológico e idiosincrasia. Son las
reacciones de tipo B en donde se agrupan las alergias a los medicamentos, en el anexo 2 se
puede ver resumido lo descrito anteriormente.
Por otro lado, Hay clasificaciones para las reacciones alérgicas a los medicamentos las
cuales se dividen en dos grupos según su rapidez de presentación: las de tipo inmediato,
que se presentan dentro de la primera hora de la toma del medicamento, y las de tipo tardío,
que se presentan transcurrido una hora, por lo menos, de habernos tomado el medicamento
y a veces hasta pueden tardar semanas en desarrollarse. Las reacciones de tipo inmediato
nos implican que son mediadas por la producción del anticuerpo o inmunoglobulina E,
mientras que las de tipo tardío se desencadenan por distintos mecanismos inmunológicos y
pueden dar lugar a varios tipos de reacción. Algunas de las manifestaciones clínicas
características de las alergias a medicamentos inmediatas y tardías se muestran en el anexo
3 y anexo 4.
La clasificación de Gell y Coombs, permite diferenciar las distintas alergias
medicamentosas, entre ellas, los tipos I, II y III implican una reacción humoral. El tipo IV
es de mediación celular. En la tabla 1 se muestra una breve descripción de cada tipo.
Las alergias a los medicamentos con respecto a la edad pueden ocurrir en cualquier
momento de la vida. Sin embargo, a diferencia de lo que sucede en otra patología alérgica
como el asma o la alergia a los alimentos en las cuales el primer diagnóstico suele hacerse
en la infancia y adolescencia, la alergia a los medicamentos suele diagnosticarse mas tarde,
ya que las personas más mayores suelen ingerir mas medicamentos y esto le da más
posibilidad de una sensibilización, hay que recordar que si no se tiene un contacto previo
con el medicamento no se puede ser alérgico.
Existen muchos tipos de medicamentos, pero hay medicamentos que producen con una
mayor frecuencia las reacciones alérgicas. En primer aparecen los antibióticos
betalactámicos (la penicilina, la amoxicilina y las cefalosporinas), estos medicamentos
tienen el mayor porcentaje del diagnóstico, seguido por los antiinflamatorios no esteroides
(ácido acetilsalicílico, ibuprofeno, diclofenaco, etc.). No hay algo claro en la literatura del
porque unos medicamentos producen con más frecuencias una reacción alérgica, pero una
de la causa quizás podría ser en la alta utilización de estos fármacos en la población general
y en el caso de los antibióticos betalactámicos también se le podría atribuir la razón de su
estructura química, ya que permite un rápido reconocimiento por el sistema inmunitario
El diagnóstico de alergias algunas veces es complicado a primera vista, ya que algunos
tipos de hipersensibilidades a los medicamentos presentan cuadros clínicos similares a los
síntomas de las alergias a los medicamentos. El grupo de medicamentos de los opioides no
genera un tipo de hipersensibilidad por un mecanismo inmunológico, sino que generan
estímulos hacia mastocitos, a continuación, el mastocito se desgranula y libera toda la
histamina y todos los gránulos que tienen preformados. La consecuencia de lo dicho
anteriormente es la presentación de síntomas como urticaria, rinitis, asma e incluso
anafilaxia que es la reacción de hipersensibilidad más grave. Esta serie de sintomatología
como pueden ver son síntomas muy similares a las reacciones alérgicas por medicamentos
y es un ejemplo del porque a veces se hace difícil diagnosticar el tipo de hipersensibilidad a
los medicamentos a simple vista.
El primer método de diagnóstico para confirmar las sospechas de una alergia a
medicamentos es se basa en una historia clínica detallada de la reacción y los
medicamentos implicados. Para confirmar las sospechas de la historia, de acuerdo con la
evaluación del especialista, se procede a realizar estudios in vitro (de laboratorio) y/o
estudios in vivo (sobre el propio paciente).
Los estudios de laboratorio incluyen la determinación de IgE específica en suero la prueba
de activación de basófilos (TAB) y la prueba de transformación linfoblástica. Muchas veces
estas pruebas aportan pocos datos para una confirmación decisiva si se trata de una alergia
o no y entonces se pasa a pruebas in vivo.
Los estudios in vivo ameritan un riesgo, ya que, si eres alérgico al medicamento,
dependiendo de lo reactivo que seas y no tanto de la dosis se presentaran peligros, por lo
que estas pruebas siempre deben estar en manos de personas expertas. Las pruebas cutáneas
son un ejemplo de este tipo de pruebas, la piel se expone a fármacos que causan
alergia y luego se observa para detectar signos de una reacción alérgica.
habitualmente con lectura inmediata del resultado a los quince minutos, y de las pruebas
epicutáneas o de parche, con lecturas tardías.
Las alergias a los medicamentos se pueden tratar con adrenalina, corticoides y
antihistamínicos, a así como el tratamiento farmacológico de los síntomas de los órganos
más afectados: broncodilatadores, cardiotónicos, todos estos tratamientos se utilizan
usualmente si la alergia es de tipo inmediata. Por otro lado, En las reacciones tardías, el
tratamiento se basa fundamentalmente en la utilización de corticoides por vía general, o por
vía tópica si se trata de dermatitis de contacto.
Existen variados métodos para tratar las alergias a los medicamentos, pero no es posible
prevenir la aparición de una reacción alérgica a un medicamento. Una vez que un paciente
es alérgico a un determinado compuesto, se lo debe considerar en esa condición de por
vida. En los momentos actuales no existe método alguno para revertir la condición alérgica
a un medicamento.
Es muy importante saber a qué medicamentos somos alérgicos y tener presente de las
complicaciones que se puede llegar a tener si somos persona que por predisposición
genética podríamos llegar a adquirir una alergia.
Las personas alérgicas a los medicamentos se enfrentan a situaciones en donde para la
mejoría o resolución de su enfermedad se amerita un medicamento al que es alérgico y si
pensamos en una variable para este medicamento, las variables no podrían ser tan efectivas
o tienen precios elevados. En momentos de urgencias en donde perdamos la conciencia y
no le podamos advertir al medico de las posibles hipersensibilidades a cierto medicamento
y el especialista debe actuar rápido también representaría un problema.
En general las alergias van en aumento y como regla las personas con muchas alergias
conocidas, como a alimentos, a fármacos y otras sustancias, tienen mayor probabilidad de
desarrollar otro tipo de alergias diferentes, o sea reaccionar a un nuevo alergeno diferente.
Al parecer el sistema inmune va reaccionando cada vez más al entorno cambiante en que
vivimos.
ANEXOS

Clasificació Inmunoreactantes Presentación clínica


n
Tipo I Mediados por mastocitos, Anafilaxia, urticaria, angioedema, asma y
dependientes de IgE (anafiláctica e rinitis alérgica
independiente de IgE)
Tipo IIa Reacciones citotóxicas mediadas por Citopenias inmunes
anticuerpos (complemento y
anticuerpos IgG e IgM a menudo
están involucrados)
Tipo IIb Reacciones estimuladoras de células Enfermedad de Graves y urticaria
mediadas por anticuerpos idiopática crónica
Tipo III Reacciones mediadas por complejos Enfermedad del suero y vasculitis
inmunes,
complemento involucrado
Tipo IVa Reacciones mediadas por células Th1, Diabetes tipo 1 y dermatitis de contacto
activación de macrófagos (con IVc)
Tipo IVb Reacciones mediadas por células Th2, Asma persistente y rinitis alérgica
inflamación eosinofílica
Tipo IVc Mediada por células T citotóxicas Síndrome de Stevens-Johnson y
(perforina/granzima B involucrada) queratinocitos epidérmicos tóxicos (TEN)
Tipo IVd Inflamación neutrofílica mediada por Pustulosis exantematosa aguda
células T generalizada (AGEP) y enfermedad de
Behcet

Tabla No. 1 Clasificación de las reacciones de hipersensibilidad


Clasificación de Gell-Coombs de Reacciones de Hipersensibilidad –
MedicalCRITERIA.com
Anexo 1

Anexo 2
Anexo 3

anexo 4

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