Universidad Autónoma de Nuevo León

Facultad de Filosofía y Letras

Equidad de género
Ensayo: La formación de mi identidad de género

Alumna: María Merari Flores Domínguez

Matricula: 1643004
 La formación de mi identidad de género

La conducta esperada a mi genero por parte de mi familia es que sea una mujer
que atienda a las personas, ser servicial en todo momento, recuerdo que cuando
era pequeña ciertas actividades que había que realizar en casa eran asignadas
dependiendo de tu género, por ejemplo mi hermano por el hecho de ser hombre
no hacia ciertas actividades como lavar trastes, lavar el baño o lavar ropa porque
eran consideradas actividades para mujeres, mientras mi hermana y yo si
estábamos obligadas a participar en la limpieza de la casa. También a la hora de
comer éramos responsables de servir comida. Todo esto demostraba la idea que
tiene la familia sobre cómo debe ser una mujer, que tipo de conductas o
actividades debe realizar por su género, también esperando a que fuéramos
sumisas a que no tuviéramos la misma libertad que tenía mi hermano.

En la escuela podría mencionar que cuando era niña por ejemplo en la primaria
siempre se espera que las niñas, sean las que mejor se comportan, las que
siempre llevan la tarea las que son más limpias, y tienen todo ordenado, y
recuerdo mucho que lo que se pensaba de los niños era que eran desordenados,
groseros y cero responsables.

En el ámbito de la amistad, de igual manera lo que esperaban los chicos era que
fueras una mujer sumisa, una chava “bien” con buenos modales, que no dijeras
malas palabras, tenían una mente machista claro esta sobre cómo deben ser las
mujeres, el cómo deben comportarse, darse a respetar por los chavos y no
llevarse mucho con estos porque si no te tachaban de ser una chava grosera y
brusca, por lo tanto no se fijaban en ti, cosa que en lo particular no me interesaba
mucho, siempre fui algo llevada con mis amigos pero también de cierta forma me
ganaba su respeto, porque veía como se expresaban de ciertas chavas
tachándolas de tontas porque no decían nada cuando estos las ofendían. Y eso es
algo confuso porque las quieren sumisas, que no respondan cuando se les dice
algo, pero tampoco las quieren tontas o mejor dicho las juzgan por dejarse, esto
es una idea tan contradictoria.
Durante mi vida en la interacción con mi padre pues fue algo desapegada, jamás
he coincidido con sus ideas, ya que suele ser muy machista, y siempre esperaba
que como yo era mujer fuera o cumpliera con las expectativas de como debe ser
una mujer, limpiar toda la casa, hacer de comer, y salir pero solo hasta cierta hora
porque si no se vera mal, pero como no le di gusto o no hice ciertas cosas que a el
le parecieran bien pues quizás jamás cubrí sus expectativas, mientras que con mi
madre muchas veces coincidíamos en que no debíamos dejarnos o que no
debería importarnos lo que la demás gente dijera de cómo nos comportábamos
porque no debíamos ser mujeres sumisas pero por otro lado a veces tenia ideas
machistas como todo.

También recuerdo mucho que cuando salía con chicos tenia que comportarme de
cierta manera a veces sentía que no podía ser yo por completo porque tenia que
ser mas femenina o si no pensaba que podía dejar de gustarles, muchas veces
tenia que pasar horas escogiendo como vestirme para verme femenina, pensaba
también como debía actuar o tenia que tener mucho cuidado con lo que decía y en
la forma en que iba a decir las cosas, porque tenia la idea de que no podía hacer
ciertas cosas o actuar de cierta manera si no iba a dejar de gustarles. Era algo
muy incomodo de igual forma pasaba a veces cuando salía con amigas y salíamos
con chicos o conocíamos chicos teníamos que comportarnos de cierta manera
para que nos voltearan a ver de lo contrario pues no podríamos lograr que alguien
nos hablara, en verdad que era una situación bastante incomoda, pero agradezco
que haya encontrado gente que no me juzgue por como actuó o me diga no hagas
esto porque esto no debe hacerlo una mujer o se ve mal, etc.