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Ubicación de objetos en el espacio.

¿Qué es ubicar?
Comencemos por saber qué es ubicar.
Ubicar significa, de una forma genérica. localizar, situar o
instalar en un determinado espacio o lugar.
En ese sentido, “ubicarse” significa estar situado en un
determinado lugar.
Por ejemplo, “La alameda se ubica en el centro de la
ciudad”’.
De esta forma, ubicarse también se utiliza como
“orientarse”.
Por ejemplo, “Gracias al mapa pudimos ubicarnos y
encontrar el camino”.
¿Cómo ubicamos un lugar o un objeto?
Para ubicar algún objeto o lugar. necesitamos fijar un
punto de referencia, con el que podamos encontrar lo que
estamos tratando de ubicar.
Cuando indicamos la posición de algo lo hacemos desde
nuestro punto de vista, desde nuestra posición.
Por eso, es necesario e importante reconocer y generar las posiciones referentes que tienen los objetos respecto de la persona
que los mira.
Cuando queremos mostrar a alguien dónde se ubica algo y no podemos señalarlo con el dedo, es necesario que podamos darle
una buena descripción de todo el espacio que rodea al objeto, su entorno o contexto.
Ahora veamos los elementos que necesitamos para hacer la descripción de una ubicación.
Elementos para hacer una ubicación
Para hacer una ubicación clara y precisa de dónde encontrar un objeto o lugar, es necesario tener un punto, usar posiciones,
plano y usar un punto de referencia o referencias.
Veamos la definición de cada uno:
Punto. Es el lugar, la ubicación o la posición en la que se encuentra algo.
Por ejemplo, dónde está una pelota, dónde se localiza una persona, o donde se ubica un lugar.
Lo utilizamos en los mapas, y es muy útil cuando jugamos a cualquier deporte, porque dependiendo de donde se sitúe un jugador
o un compañero, así debemos de lanzarle la pelota.
Lo usamos continuamente sin darnos cuenta.
Posiciones. La posición de un objeto es aquella información que permite localizarlo en el espacio en un instante de tiempo
determinado.
Dentro de estas, las más comunes son a la izquierda, a la derecha, arriba, sobre, atrás, adelante, en frente, abajo, a un costado o
lado.
Es muy importante conocer cuál es la derecha y cuál la izquierda, pues nos servirá para resolver una gran cantidad de situaciones
en la vida cotidiana.
Si se te hace difícil distinguir entre la derecha y la izquierda lo que puedes hacer es pensar con qué mano escribes.
Si escribes con tu derecha, todo lo que esté a tu derecha estará del lado de esa mano y así ya sabrás cual es la derecha y cuál es la
izquierda.
Otra ubicación es abajo o arriba de la silla.
También una persona se puede ubicar adelante o atrás de un árbol.
Plano. Es la perspectiva desde la que miramos o vemos algo.
Cualquier cosa la podemos ver desde tres puntos de vista:
Desde adelante o desde atrás. En ellos se incluye el plano vertical o vista frontal.
Desde un lado o desde el otro, ya sea derecha o izquierda. Se incluyen el plano transversal o vista lateral.
Desde arriba o desde abajo, o superior e inferior: En ellos están incluidos el plano horizontal o vista superior/inferior.
Veamos algunos ejemplos de estos tipos de vista o perspectiva.
El ejemplo de la vista superior de unas casas o sea croquis o mapa.
Otro ejemplo puede ser la vista frontal, como puede ser la foto del frente de una casa.
La vista lateral de una silla puede ser una foto de un costado de la misma.
Podemos ver una cama de tres maneras: ista frontal, vista superior y vista lateral.
Punto de referencia o referencias. Para determinar la posición de un cuerpo, siempre es necesario referirse a otro objeto, lugar,
punto o a un conjunto de cuerpos materiales.
La idea de punto de referencia se asocia al espacio que ocupa un observador dentro de un cierto contexto.
Los puntos cardinales también se usan como punto de referencia al dar instrucciones para ubicar un lugar.

Factores de la comunicación
Emisor. Su rol es el punto inicial de la acción
comunicativa, parte de su propia iniciativa el deseo
de comunicar cierta información. Qué comunicar y
cuál es el mejor modo en una situación particular
son cuestiones que salvo bajo ciertas condiciones
apremiantes, generalmente decide el emisor.
Receptor. Es quien recibe la información y la ajusta a
su interpretación con los mismos signos lingüísticos;
se desprende de esto su propia interpretación del
mensaje recibido. Lo comprende de modo tal que
luego está en condiciones de elaborar por si mismo
una respuesta al emisor, para la cual se va a pasar a
posicionar como emisor en este caso de un mensaje
original y respuesta del anterior, reiniciando la
acción comunicativa sucesivamente.
Código y canal. Son elementos también
fundamentales de la comunicación. El código se refiere al sistema que ambos agentes deben compartir lo cual garantiza el
entendimiento, son signos lingüísticos, estos son combinados arbitrariamente por quien es el emisor del mensaje y según el caso
de lo que desea transmitir.
Contrario a esto mismo también el código debe dar garantía de estabilidad de ciertos elementos, no puede todo ser arbitrario
según el deseo del emisor, debe ser a la vez estable; esto es vital para la transición de contenidos en el mensaje. Con respecto a
esto se dice que deben ser partícipes de un sistema lingüístico de códigos más amplio que los comprende que es el consensual
lingüístico que prima en una sociedad determinada en un momento histórico particular.
Factores de la comunicación
Es el famoso analista lingüista Ferdinand de Saussure quien desde su punto de vista positivista, realiza este análisis sobre los
distintos elementos que componen la comunicación. Este autor va clasificando a los diversos factores en:

Factores externos. Aquellos expuestos a factores físicos, ambientales, como transmisión de las vibraciones de la voz en el
momento en que circulan el aire.
Factores internos. Los cuales son procesos internos mentales y biológicos en los cuales está involucrado el sustento material que
es la persona como la vibración de la voz humana y también comprenden al entendimiento mental del código comunicativo. Sin
embargo, su punto de vista no comprende el contexto histórico, sobre el cual los mensajes discursivos son influidos por el
contexto de época.

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