Acerca de la teoría
Acerca de la teoría
¿Qué es hoy el diseño? ¿Qué es lo que lo distingue de la mera comunicación
prosaica? ¿De qué ciencias se nutre? ¿En qué medios crece, cuáles son las
condiciones de su desarrollo? Son algunas de las preguntas a las que busca
responder la teoría del diseño.
¿A qué nos referimos cuando hablamos de
‘teoría’?
En Ciencia y Meditación , Martín Heidegger comenta que
1 dominó el pensamiento de Occidente durante tres siglos,
la palabra ‘teoría’ viene del griego tehorein, compuesta de
Thea y Orao. Thea (teatro) es la apariencia o aspecto que
tienen las cosas; Orao implica haber visto algo, exami-
narlo. Por eso, para Heidegger, teoría es ‘mirar el aspecto
bajo el que aparece lo presente y, por medio de esta
visión, permanecer a su lado mirándolo’. ¿Para qué? Para
poder describirlo, interpretarlo, considerarlo de una
manera diferente a la que ponemos en juego cuando
estamos sumergidos en su práctica.
Más allá de la etimología, lo que llamamos ‘teoría’
(muchas veces en oposición a la práctica) depende de
condiciones históricas que han encadenado de diferente
manera la tríada compuesta por la teoría, la praxis
(acción) y la poiesis (creación y producción).
La vinculación que tienen entre sí estos tres aspectos, el
peso relativo de cada uno y su importancia en la
jerarquía de saberes ha variado a lo largo de la historia de
la humanidad y en cada momento ha configurado un tipo
diferente de acercamiento al saber. En el origen griego, la
teoría era una praxis ligada al estilo de vida teórico, esto
es, aquel que se ocupaba -tal como lo detalla Aristóteles
en la Metafísica- del conocimiento de lo eterno e invaria-
ble que solamente se puede observar: las estructuras
invariables del mundo sublunar, las regularidades y
objetos de las matemáticas, el orden de los cuerpos
celestes y sus motores. Pero, a pesar de ocuparse de la
especulación, Teoría no se oponía a Práctica: la teoría era
un modo de acción diferente al modo de acción poiético
que se ubicaba en los límites entre el saber teórico y la
experiencia.
Mucho se ha investigado sobre la historia del par
teoría/práctica. Lo cierto es que el modo en que coaguló
a partir del siglo XVII en Occidente ha configurado
nuestro modo actual de percibir el mundo, de compren-
der las disciplinas, las profesiones y todo el campo del
saber. Quien mejor representa la visión de la teoría que
es Descartes que con su famoso axioma: Pienso, luego
existo instauró un modo de pensamiento que sostiene
que la teoría no requiere ninguna justificación de su
existencia a través de la praxis o la poiesis y que la teoría
es la única forma legítima de conocimiento.
Este planteo tendrá consecuencias inconmensurables
para el desarrollo del pensamiento en general, para la
valoración de las prácticas sociales y para la jerarquiza-
ción de los campos del saber. Sin embargo, la historia del
siglo XX en Occidente, puede resumirse como la historia
de la lucha contra esa concepción de la teoría divorciada
de la práctica y único modo valedero de saber. Las
epistemes contemporáneas no plantean las teorías
como sedes de una verdad que revela los secretos de la
naturaleza y las cosas sino como el marco de saber
acorde a la verdad que se impone desde el poder en cada
época2.
Una teoría hoy es es una reflexión conceptual sobre
algún fenómeno o sobre algún campo de conocimiento;
es un sistema articulado de nociones, axiomas o puntos
de partidas, observaciones y postulados que proporcio-
na una explicación plausible sobre aquello a lo que se
refiere.
Algunas teorías describen (identifican características
específicas de personas, grupos, acontecimientos);
otras, explican (describen las relaciones) y unas terceras,
1
Martin Heidegger, «Ciencia y Meditación» en Conferencias y
Artículos, traducción de Eustaquio Barjau, Ediciones del Serbal,
Barcelona, 2001.
2
Estas ideas reconocen varias formulaciones pero acá hacemos
referencia específica a los planteos de Michel Foucault en
varias de sus obras.
TEORÍA Y CRÍTICA 2022 · 1
Acerca de la teoría
predicen posibles comportamientos pero todas están
formuladas como intentos de organizar el conocimiento,
como intentos de hacer entrar la realidad en un modelo
de cierta generalidad que vaya más allá de cada fenóme-
no particular y que, en consecuencia, lo haga accesible
para el establecimiento de ciertas leyes y constancias.
Hay teorías científicas referidas a la física, a la
matemática, a la biología; teorías sociológicas, teorías de
la literatura, teorías de la arquitectura, del color.
Nosotros nos ocupamos de las del diseño.
En este caso, una reflexión sobre el Diseño de
Comunicación Visual
Si bien no existe consenso respecto de qué campo
responde a ese nombre, sí podemos acordar en que
todos los que se enfrentan a ese problema, tienen
implícita una pregunta sobre su carácter: ¿qué es Diseño
de Comunicación Visual?
Por nuestra parte, partimos de un axioma: no hay
absolutamente nada que constituya la ‘esencia’ del
diseño de comunicación visual. Al contrario, solo hay
maneras de concebirlo y conceptualizarlo. Este axioma
admite un predicado central: las diversas maneras de
concebirlo, están delineadas desde circunstancias
histórico-culturales que modelan puntos de vista diferen-
tes. De esta afirmación resultan dos elementos más: no
hay una definición respecto a qué es el DCV ni tampoco
límites sobre su extensión e incumbencias.
A pesar de esta indefinición los discursos que se
hacen sobre nuestra disciplina, tratan de responder
sobre los límites, los aspectos implicados y sus modos
de producción desde distintas concepciones ideológi-
cas, sociales, epistémicas, culturales y políticas. Se
impone acá una aclaración importante: no todos los
discursos disciplinares constituyen una teoría. Por eso
se hace necesario distinguir entre pensamiento de diseño
y teoría del diseño.
En primer lugar, todo aquel que conoce el diseño ya
sea porque lo practica o porque lo utiliza, tiene una cierta
concepción y valoración acerca de él. Estas concepcio-
nes no constituyen una teoría, de la misma manera que
tampoco lo son las orientaciones de diseño, el análisis de
los conceptos o las generalizaciones empíricas. Cuando
hablamos de pensamiento de diseño, nos referimos a
esas ideas que subyacen de manera implícita, irreflexiva
o apenas esbozadas. Una teoría, por el contrario, requiere
una sistematización conceptual: una teoría de diseño
debería estar compuesta con un conjunto de supues-
tos, conceptos y principios sobre el hecho de diseño, su
relación con el autor, con aquellos a los que está
destinada, con los medios de producción y con el
entorno social en el que se desarrolla.
Quienes se ocupan de teorías sobre el diseño son
agentes especializados que generan una reflexión sobre
los modos de ser del diseño, lo sistematizan, proponen
metodologías, abordan problemas que consideran
imprescindibles para el hecho de diseño.
Puntos a tener en cuenta para pensar la potencia
de una teoría
1. El nivel de generalización, es decir su pretensión de ser
una teoría cuya validez se limite a un espacio y tiempo
concretos. Ninguna teoría que se presente como univer-
sal puede constituirse como tal.
2. El grado de abstracción y concreción o sea el
equilibrio entre los conceptos generales y la capacidad
de operacionalizar los conceptos que usa para que
puedan ser aplicados a aquello que se estudia.
3. La coherencia de los axiomas y puntos de partida
4. La formalización o sea, el grado en que está explici-
tada la estructura de la teoría
5. La claridad respecto a unidades de análisis sobre las
que se aplique (individuos, instituciones, unidades
colectivas -regiones, ciudades-)
6. La fecundidad o sea, el grado en que la teoría da
respuestas plausibles a preguntas significativas3
¿Por qué hablar de teoría del Diseño de
Comunicación Visual?
La teoría del diseño de Comunicación Visual es un
desarrollo aún pendiente. Hay aproximaciones teóricas
que no llegan a consolidarse aún como una teoría con
las características señaladas pero, no obstante constitu-
yen una mostración importante del desarrollo realizado
hasta ahora. En nuestro país debemos reconocer los
esfuerzos realizados por Tomás Maldonado, Leonor
Arfuch, Guy Bonsiepe, Beatriz Galán, entre otros. Toman-
do las palabras de esta última, podemos decir que ‘el
diseño ha entrado en la universidad de hecho pero no de
derecho’. La expresión apunta a subrayar que el Diseño
3
Estos puntos están inspirados en los propuestos por Johan
Galtung (1966) en Teorías y métodos de la investigación social.
Buenos Aires: Editorial Universitaria (1966) — (1976). «Social
Position and the Image of the Fu- (1976). «Social Position and
the Image.
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no está totalmente reconocido en el sistema científico
argentino al que ingresó hace 60 años. Es justamente
ese ingreso, el que marca el inicio del pensamiento
teórico sobre el diseño: la entrada al mundo universitario
requirió de un metalenguaje que lo explique y legitime
como disciplina académica.
¿Cómo pensamos una teoría del Diseño de
Comunicación Visual?
Desde nuestro punto de vista, nos separamos de
aquellas teorías que acentúan el carácter funcional o
estético del diseño de Comunicación Visual.
Lo concebimos como una práctica social diversa
inscripta en el campo de la producción cultural, es decir,
el campo de aquellas prácticas que tienen como
principal ocupación la producción de bienes culturales o
simbólicos. Como tal reconoce distintos modos de ser y
de institucionalización que lo constituyen de manera
compleja, heterónoma, alejada de la normatividad
prescripta por las instituciones.
Si repasamos los puntos mencionados más arriba,
proponemos:
1. El nivel de generalización: una teoría capaz de
explicar los modos de conformación del diseño en
Argentina a lo largo del siglo XX y lo que va del XXI
2. El grado de abstracción y concreción. La teoría que
proponemos está basada en conceptos abstractos
(particularmente el concepto de campo y sus subcon-
ceptos) que pueden operacionalizarse para estudiar
analíticamente situaciones concretas.
3. Los axiomas y puntos de partida se desprenden de
concepciones coherentes respecto a la genealogía de la
práctica llamada ‘diseño’, la práctica llamada ‘comunica-
ción’, la práctica llamada ‘proyectación’ y los constructos
que se han producido a partir de ellas.
4. La formalización. En este punto estamos en una
etapa preliminar y este curso es un esfuerzo para lograrlo.
5. La claridad respecto a unidades de análisis. La
teoría que proponemos posee claridad sobre estos
aspectos, fácilmente identificables.
6. La fecundidad. Creemos que nuestra aproximación
teórica otorga explicación a la dinámica contemporánea
del diseño de Comunicación Visual
¿Quién comanda el sintagma Diseño de Comuni-
cación Visual?
Un punto de partida que guía nuestra teorización es que
la comunicación visual, tal como se estudia en las univer-
sidades argentinas (independientemente de qué tipo de
facultad cobije la disciplina), está pensada desde el
diseño, entendido como ‘saber proyectual’. O sea, aquel
tipo de saber que en su desarrollo y en su práctica ‘se
activan redes heterogéneas compuestas por elementos
de variadísima índole en la que se incluyen narraciones,
imaginarios, cálculos matemáticos, principios construc-
tivos, intereses de representación, modos de representa-
ción, modos de traducción, junto a fuentes de poder,
leyes de ‘propiedad’, regímenes de inclusión (y su contra-
partida la exclusión) o posicionamientos ideológicos o
políticos, vale decir un complejo entramado de elemen-
tos cuya heterogeneidad no necesita ser negada sino
analizada’. El diseño como actividad de proyectación se
ocupa de la transformación del hábitat humano y tiene
como lenguaje privilegiado, el icónico.
Bibliografía a consultar
A continuación consignamos bibliografía de los autores
mencionados, y que realizaron aportes en nuestro país.
·ARFUCH, Leonor 1997: El diseño en la trama de la
cultura: desafíos contemporáneos. En “Diseño y Comuni-
cación. Teorías y enfoques críticos”. Buenos Aires,
Paidós.
·BONSIEPE, Gui 1993: Del objeto a la interfase.
Mutaciones del diseño. Buenos Aires, Infinito, 1999.
---------------------1993: Las 7 Columnas del Diseño.
México Azcapotzalco, Universidad Autónoma Metropoli-
tana Azcapotzalco.
·GALÁN, Beatriz 2011: Diseño, proyecto y desarrollo.
Buenos Aires, Wolkowicz Editores.
·LEDESMA, María 1997: Diseño gráfico ¿Un orden
necesario? En “Diseño y Comunicación. Teorías y
enfoques críticos”. Buenos Aires, Paidós.
·MALDONADO, Tomás 1984: El proyecto moderno.
Buenos Aires, Facultad de Arquitectura y Urbanismo.
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