En esta obligación se encuentra englobado el objeto de la obligación: dar, hacer o no hacer
una cosa. El contrato se encuentra enmarcado dentro de las fuentes voluntarias y es definido por el artículo 1101 del código civil: Art. 1101.- El contrato es un convenio en cuya virtud una o varias personas se obligan respecto de una o de varias otras, a dar, hacer o no hacer alguna cosa. Un contrato es un acuerdo de voluntades que crea obligaciones. Es importante la distinción entre acto jurídico, convención y contrato. El acto jurídico: es toda manifestación de voluntad que tiene por objeto modificar la situación jurídica, ya sea creando, transmitiendo o extinguiendo derechos. Contrario al hecho jurídico, que de este no se necesita de la voluntad de la persona para cambiar la situación jurídica. Convención: cuando el acto jurídico es el resultado de más de una voluntad existe una convención. Contrato: cuando la convención tiene por finalidad crear obligaciones nos encontramos frente a un contrato. El contrato tiene como característica principal el aspecto pecuniario, algunas convenciones que no tienen ese aspecto no constituyen contratos, por ejemplo: el matrimonio y la adopción. Clasificación de los contratos: Nuestro código civil indica tres clasificaciones de los contratos: contratos sinalagmáticos y unilaterales, contratos a titulo oneroso y a titulo gratuito, contratos conmutativos y aleatorios. Art. 1102.- El contrato es sinalagmático o bilateral, cuando los contratantes se obligan recíprocamente los unos respecto a los otros. Art. 1103.- Es unilateral, cuando una o varias personas están obligadas respecto de otras o de una, sin que por parte de estos últimos se contraiga compromiso. Art. 1104.- Es conmutativo, cuando cada una de las partes se obliga a dar o hacer una cosa que se considera equivalente de lo que hace o da el otro contratante; cuando la equivalencia consiste en eventualidades de ganancia o pérdidas para cada uno de los contratantes, dependientes de un suceso incierto, el contrato es aleatorio. Art. 1105.- El contrato de beneficencia es aquel en que una de las partes procura la otra un beneficio puramente gratuito. Art. 1106.- El contrato a título oneroso es aquel que obliga a los contratantes a dar o hacer alguna cosa. Clasificación según su forma: a) CONTRATOS CONSENCUALES: son aquellos que se forman por el solo consentimiento de las partes contratantes, que se dice el solus consensus obligat, el solo consentimiento obliga. Estos contratos se fundan en el principio del consensualismo, según el cual la voluntad es suficiente para crear un contrato. b) CONTRATOS SOLEMNES: son los que exigen, además del consentimiento, que es un requisito que debe de estar presente en todos los contratos, una formalidad que sin su cumplimiento el contrato carecería de validez: format dat esse rei (la forma da el ser a la cosa). Existen dos características en los contratos solemnes: 1. La intervención notarial. 2. Tendencia al formalismo. La formalidad exigida para la validez del contrato no solamente consiste en la intervención de un notario, sino también en la redacción de un documento notarial.
Tendencia hacia el formalismo:
El Dr. Jorge A. Subero Isa nos dice que, cada día se acentúa mas la tendencia del legislador de someter los actos jurídicos a ciertos requisitos, para una mayor eficacia en estos. Las formalidades en algunos casos tienen por finalidad reglamentar la prueba o existencia de esos actos y, en otros casos persiguen hacer oponibles a los terceros la transmisión o la contestación de un derecho real. Para esto existen las llamadas formalidades que se dividen en dos: relativas a la prueba y relativas a la oponibilidad de los terceros. 1. Formalidades relativas a las pruebas: algunos actos jurídicos solo pueden ser comprobados mediante el cumplimiento de determinados procedimientos. El que alega la existencia de una obligación debe de aportar una prueba de esta. El artículo 1315 del código civil establece: Art. 1315.- El que reclama la ejecución de una obligación, debe probarla. Recíprocamente, el que pretende estar libre, debe justificar el pago o el hecho que ha producido la extinción de su obligación. El artículo 1341 del código civil dispone que: Art. 1341.- Debe extenderse acta ante notario o bajo firma privada, de todas las cosas cuya suma o valor exceda de treinta pesos, aun por depósitos voluntarios; y no se recibirá prueba alguna de testigos en contra o fuera de lo contenido en las actas, ni sobre lo que se alegue haberse dicho antes, en, o después de aquellas, aunque se trate de una suma o valor menor de treinta pesos. Todo esto, sin perjuicio de lo que se prescribe en las leyes relativas al comercio. Los artículos 1347 y 1348 hacen excepción a lo establecido en el artículo 1341. 2. Formalidades relativas a la oponibilidad de los terceros: los actos jurídicos para que tengan fecha cierta a los terceros deben ser sometidos a las formalidades prescritas por el artículo 1328 del código civil: Art. 1328.- Los documentos bajo firma privada no tienen fecha contra los terceros, sino desde el día en que han sido registrados, desde el día de la muerte de cualquiera que los haya suscrito, o desde el día en que su sustancia se ha hecho constar en actos autorizados por oficiales públicos, tales como los expedientes de colocación de sellos o de inventario. La inscripción en el registro no está requerida a pena de nulidad del acto. Su falta solamente produce, por una parte, una sanción fiscal, y por otra, una carencia frente a los terceros. Los actos constitutivos o traslativos de derechos reales, deben ser sometidos a los requisitos de publicidad, principalmente aquellos actos que recaen sobre los inmuebles a fin de que sean oponibles a los terceros. c) CONTRATOS REALES: se denominan contratos reales aquellos que para su formalización exigen, además del consentimiento, que es un requisito indispensable en todo contrato, la entrega de la cosa. El consentimiento por si solo no es suficiente para la existencia del contrato. El código civil contempla la existencia de cuatro contratos reales: 1. El préstamo a uso o comodato, el cual es definido por el articulo 1875 como: Art. 1875.- El préstamo a uso o comodato es un contrato, por el cual una de las partes entrega una cosa a otro para servirse de ella, con la obligación en el que la toma de devolverla después de haberla usado. 2. El préstamo de consumo, considerado por el artículo 1892: Art. 1892.- El préstamo de consumo es un contrato, por el cual una de las partes entrega a otra cierta cantidad de cosas que se consumen por el uso, quedando obligada esta última a devolver otro tanto de la misma especie y calidad. 3. El depósito, el cual es considerado por el artículo 1915: Art. 1915.- El depósito en general es un acto por el cual se recibe un objeto de otro, con obligación de guardarle y devolverle en naturaleza. 4. El empeño. El código civil contempla dos artículos concernientes a esto, donde el deudor entrega una cosa mobiliaria a su acreedor para la seguridad de la deuda. Art. 2071.- El empeño es un contrato por el cual el deudor entrega una cosa al acreedor para seguridad de la deuda. Art. 2072.- El empeño de una cosa mobiliaria se llama prenda. El de una cosa inmobiliaria se llama anticresis. La ley 45-20 sustituye el termino prenda por garantía mobiliaria. Artículo 131.- Derogatoria de la prenda civil y mercantil. La presente ley regula lo referente a toda garantía sobre bienes muebles, por lo que se deroga toda disposición en materia de prenda civil, prenda comercial, con o sin desapoderamiento que contradiga lo dispuesto en esta ley. Toda norma en el ordenamiento jurídico de República Dominicana que aluda a las mismas se entenderá comprendida bajo el régimen unitario de las garantías mobiliarias y se regirá por lo dispuesto en la presente ley.