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Se distingue al Derecho Romano como el conjunto de normas

jurídicas por las que se rigió el pueblo romano desde la fundación de la


ciudad de Roma, en el siglo VIII a.C., hasta la muerte de un emperador de
Oriente llamado Justiniano, en el siglo VI de nuestra era.

En los tiempos del imperio Romano se consideraba a la persona como


el ente más importante de la sociedad, en el cual recaían diferentes aspectos
y facultades que se concebían por él, al igual que las clasificaciones
otorgadas en la sociedad. Para conocer aún mejor el ámbito de la persona se
lleva a cabo una conjunción de conceptos fundamentales en el derecho
Romano con el cual se define lo que es, sus funciones y evolución.

El Derecho Romano, es el derecho más interesante de la antigüedad.


En su evolución puede estudiarse claramente la influencia de los diferentes
factores sociales, políticos religiosos y económicos a través del tiempo,
incluyendo la época actual. Las leyes romanas, a pesar de haber existido en
épocas tan remotas y responder a algunas necesidades distintas a las
nuestras, constituyen el más sólido fundamento de las legislaciones
contemporáneas.

Una persona se conoce más bien como un hombre, una persona que
es capaz de razonar con su propia inteligencia, comunicarse con su lenguaje
articulado y clasificado como primate. En el derecho Romano no es
importante la previa definición sino más bien, tiene más importancia el
hombre en su aspecto social como un sujeto de derechos políticos y civiles.

En este concepto que se tiene de hombre en la antigua Roma se


conocían dos clasificaciones de personas una persona física y la persona
jurídica o moral. Una persona física connota a un ser considerado capaz de
ser sujeto activo o pasivo del derecho, es decir, es capaz de tener derechos
y obligaciones. En el sentido de la persona jurídica señala el papel que el
individuo desempeña en la sociedad que puede derivarse en varios roles
como un padre de familia, comerciantes, magistrados etc. Una persona moral
acumula fácilmente muchos papeles, es así entonces donde se aproxima
más al sentido del origen de la palabra persona designado como mascara
que deriva dela etimología de la palabra “phersu”.

En cuanto a la capacidad jurídica que la persona evoca es más bien


una aptitud legal que se tiene para poder ejercer los derechos que les
competan. Existe en este la capacidad de goce y ejercicio que denotan los
derechos que se disfrutan pues, si no se tiene el goce no se podría catalogar
a uno como persona en cuanto a la capacidad es independiente pues, los
niños como las personas deficientes de capacidades mentales no son
personas que tengan el ejercicio de este si no es a través de un
representante. En la antigua Roma eran pocos los poseedores que tenían la
plena capacidad del goce del derecho dado a que o no eran libres ni
ciudadanos o por estar sometidas bajo potestad como el caso de los
esclavos.

La importancia del derecho romano ha sido reflejada en la acepción y


recepción de este derecho por países del mundo, incluyendo también
Venezuela debido a la uniformidad y coherencia de las normas que
estructura sus ordenamientos y el matiz de universalidad lo que lo hace un
derecho superior y de fácil imposición, existiendo en él una gran seguridad,
no habiendo disgregación ni confusión en el mismo.

Esta recepción hace resaltar una importancia extraordinaria en el


derecho romano en las leyes actuales venezolanas, porque un pueblo
abandona su propio derecho para importar otro como era el romano vertido
en lengua diversa y de una vida histórica milenaria. El Derecho Romano,
influye en el derecho venezolano a través del derecho español, durante la
conquista y colonia, a través del derecho francés, nacido del Código Civil
Napoleónico y de los otros grandes códigos europeos, sobre todo el italiano,
que sirvieron de inspiración a las codificaciones nacionales, influidos todos
por el Derecho Romano y a la vez por el estudio intensivo que se hacía en
épocas pasadas del Corpus Iuris Civilis.

Con el imperio romano, Roma produjo un derecho de matices


universales, apto para satisfacer las necesidades de aquellos pueblos que
convivieron con ella, lo que conllevó además de que sus normas estaban
revestidas de universalidad, a una gran coherencia y uniformidad en las
mismas. En los trece siglos de vida que estuvo vigente el Derecho Romano,
quedaron ajustadas y regladas todas las relaciones de la vida jurídica del
individuo dentro de la familia, y del individuo como sujeto activo y pasivo de
las obligaciones, con los demás hombres y con las cosas de la naturaleza.

De aquí que los tres objetos del derecho privado romano: personas,
cosas y acciones, sean también los tres objetos de nuestro derecho civil. Por
ende en la actualidad hablamos que en el derecho comparado tomado en
cuenta en las leyes venezolanas están incluidos los principios del derecho
romano en los principios generales del derecho, aunque claro está con
modificaciones que han sido formuladas acorde a las necesidades
presentadas durante épocas aledañas.

Por distinguidas razones, el derecho romano debe ser estudiado


dentro del derecho actual venezolano. Ya que, quienes lo elaboraron se
distinguieron por una lógica notable y por una gran delicadeza de análisis y
de deducción. Constituye uno de los ejemplos más perfectos de
interpretación jurídica que ofrecer a los principiantes del derecho. Una
perfección que no nos sorprende porque los romanos tuvieron una aptitud
especial para el derecho, así como los griegos la tuvieron para la filosofía. Su
enseñanza al comienzo de la carrera cumple dos funciones básicas: la de
formar al estudiante y la de informarle sobre un derecho casi perfecto vigente
hace siglos, cuyos principios han servido para la elaboración de varias
legislaciones modernas y de su correcta interpretación y aplicación.

Su función formativa consiste en dar al estudiante los instrumentos


lógicos y metodológicos para la comprensión y la aplicación de un sistema
jurídico. El estudio lógico del derecho romano brinda al estudiante una visión
de conjunto de un sistema jurídico. La propia lógica del sistema romano lo
facilita, y da bases para la cabal comprensión del derecho privado
contemporáneo. Si bien los tiempos cambian, el derecho, por su carácter
dinámico, debe adecuarse a esos cambios, pese a las transformaciones el
derecho romano sigue vivo a través de sus principios, formando parte de las
legislaciones modernas. Como bien sabemos, principios son "base,
fundamento, origen", o también, "primeras proposiciones o verdades"; esto
es, fuentes o fundamento del derecho. Como tales, los principios del derecho
valen antes que la ley, en la ley y después de la ley.

Además, de la función informativa se refiere a la evolución del derecho


romano, brindando al estudiante el sentido de la relación del derecho con la
sociedad que rige, tanto desde el punto de vista sociológico, como del
histórico. En tal sentido, el estudio del derecho es una realidad compleja que
presenta varias dimensiones disciplinarias; (social, lógica, económica,
psicológica, ética, religiosa, etc.), las cuales dilucidan su enlace con la
materia para complementar el conjunto de saberes contextuales de la misma,
es decir que si el mundo del conocimiento gira alrededor de un universo
complejo de saberes, estaríamos proponiendo que las diferentes ciencias,
disciplinas y subdisciplinas existentes en ese mismo universo, deben de
aceptar diálogos reconciliatorios para la conquista de un razonamiento de
mayor interpretación de las causas y efectos de las diferentes ramas de
estudio aplicables en el mundo actual.
Si la propia idea de justicia, jamás superada, que ha sido elaborada
por el jurista romano Ulpiano: "constante y perpetua voluntad de dar a cada
uno lo suyo" continua vigente hoy. No hay porque ignorar durante el estudio y
al ejercer la abogacía los conocidos preceptos del derecho: dar a cada uno lo
suyo, no dañar a otro y vivir honestamente. Es importante destacar que en la
actualidad venezolana surgieron cambios jurídicos y con relación al derecho
debido a épocas antiguas como las de roma la cual se prestó para que el
mundo fijara sus puntos de vistas en ella ya que esto era un mundo sin leyes,
normal o decretos y no todos pagaban por los delitos o hechos ilegales que
en la actualidad si se pueden ver presenciados.

A través del estudio de la historia romana podemos darnos cuenta que


el hombre está hecho para vivir en sociedad, pero esa convivencia no sería
posible si cada uno de los componentes de esa sociedad hiciese lo que le
viniera en gana.

Si bien sabemos que los principios romanos son la base fundamental


para la elaboración de la legislación moderna venezolana, cabe destacar su
significativa importancia durante el estudio del derecho. Las leyes siguen
manteniéndose ante la necesidad del estado venezolano de regular los
parámetros de convivencia e integración del hombre y la sociedad, así como
también poder otorgar la capacidad de libre ejercicio y posesión de sus
derechos. Aunque dentro del ámbito jurídico se han observados cantidad de
modificaciones, debido a que con el tiempo se presentan situaciones que
requieren limitaciones y leyes por las cuales regirse, siempre se ha
conservado la esencia del ideal de justicia romano un poco menos estricto en
cuanto a las penas que se colocan dependiendo el delito a tratar, tomando
en cuenta la equidad e igualdad social para no alterar la democracia pero
tampoco dejar de lado el ordenamiento jurídico necesario

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