Puntualizaciones sobre el amor de

transferencia
La transferencia es un elemento muy importante a la hora de estar en terapia pues
muestra un signo en el que el analista puede ser amado u odiado (dependerá de lo que
busque el paciente). En ello se tiene que entender que el amor que pueda sentir el
paciente por el terapeuta entra en juego el cómo se desarrollará el lazo de confianza
entre ambos.
Para esto se deberá de tener cuidado de no caer en un enamoramiento ya sea de uno
con otro o viceversa dado que podría representar una resistencia al momento de hacer
una terapia incluso si no se llegase a tener un lazo de transferencia entre paciente y
terapeuta no podra igualmente haber ningún tipo de avance. El amor que se da en la
transferencia surge de bases irreales e infantiles pues en lo puntualizado este está
ligado a nuestra relación que se tuvo/tiene con los cuidadores.
El amor puede igualmente ser genuino haciendo una comparación que puede ser en
nuestra vida diaria pues este es diferente puesto que al no estar bajo un proceso
terapéutico será diferente el motivo y la conexión igualmente será diferente. Con ello
vemos que las bases para el enamoramiento cambian rotundamente puesto que ambos
en su génesis y metas cambian su metodología.
En la transferencia se puede ver que el amor puede ser beneficioso a la hora de hacer
la terapia dado que en estos se podrán conocer aspectos que necesita resolver el
paciente puesto que estos se presentan de manera inconsciente y el trabajo del
analista es hacerlos conscientes y poder generar un movimiento perpetuo en el
individuo. En este proceso igualmente entra la contra transferencia en la que el analista
deberá de recibir y debra de conocerse lo suficiente para determinar que lo que recibe
podrá devolverlo para el mejor aprovechamiento del paciente en su búsqueda de
sentido y de un mejor estilo de vida del que se ha tenido antes. Por ende esta dinámica
se ha de tener en cuenta la transferencia y contratransferencia en la que hará que la
dinámica de la terapia pueda avanzar y no se detenga o se lleve por caminos no aptos.