Tercera tópica y locuras públicas de lo limítrofe a

lo central
Se centra en que el aparato psíquico se entiende como la construcción del psiquismo
entre uno y otro, dado que esta introduce en la segunda tópica freudiana en esa
escisión como un mecanismo de forma universal y de estructura que permite una
coexistencia universal a grandes modos en su funcionamiento.
El spaltung se representa como una barra vertical perpendiculares la barra horizontal
que desde la segunda tópica ha de representar la represión y junto a ella se encuentra
dos exigencias de carácter biológico y otra en de intersubjetivo. Desde lo económico se
diferencia los mecanismos de carga y descarga, las cargas por ligadura son captadas
como una representación de una cosa.
En lo dinámico se ve en tres dimensiones, la represión y procesos de investidura y
desinversión, la asociación que determina los predominio del P al CC y la vinculación
que pone en relación dos procesos las descargas de los procesos terciarios. Con ello el
aparato psíquico pasa a un modo de funcionamiento de coexistencia el cual ha de
corresponder al funcionamiento inconsciente escindido.
La noción de lo inconsciente escindido ha de remontarse a freud en el núcleo actual y
en la obsesión de repetición en los cuales son reproducciones de sucesos pasados y
de manera posterior a elementos de aglomeración no integrada, en el terror sin nombre
de BIon, en el terror al derrumbe de Winnicot, lo real como fuera del lenguaje e
inadmisibilidad de Laca, lo originario y pictograma de Aulagnier, teatro de lo imposible
en McDougall etc.
Se tiene que considerar que para muchos autores las dos tópicas freudianas alcanzan
modelos explicativos y para otros son de una tópica intersubjetiva, pues hay
investigadores que no tienen preocupaciones típicas, pues existen topologías no
freudianas y están los que enumeran tanto eclipses de las tópicas como cuartas tópicas
más todos ellos han dicho que existen fundamentos elementales en los intereses
clínicos