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Nuestro trabajo se titula “Prevalencia de Demencia en una Clínica de Atención Geriátrica de

Monterrey”

La evaluación neuropsicológica forma parte de la investigación clínica del paciente, y consiste en

la aplicación de instrumentos estandarizados para diagnosticar diversas alteraciones en las
funciones cognitivas, como memoria, lenguaje y funciones ejecutivas.

En los adultos mayores la evaluación neuropsicológica sirve para diagnosticar desde un deterioro
cognitivo leve hasta una demencia.

La demencia tipo Alzheimer representa entre el 60% al 80% de los casos a nivel mundial, sin
embargo suele detectarse en etapas medias y tardías lo que impide la intervención temprana de
tratamientos no farmacológicos y a su vez retrasar el deterioro cognitivo.

El objetivo de nuestro trabajo es Describir la prevalencia de demencia en pacientes que acuden

por primera vez a consulta Geriátrica en Monterrey.

Utilizamos una muestra de 228 pacientes que acudieron a consulta al Centro Regional para el
Estudio del Adulto Mayor (CREAM) en el año 2015, de los cuales solo 161 contaban con los
criterios de inclusión de edad, es decir, ser mayores de 65 años y tener un diagnostico ya
establecido.

Se utilizaron instrumentos como el neuropsi y el minimental para medir funciones cognitivas, el

AVD para medir el grado de independencia, la Geriatric Depression Scale (GDS) para medir
depresión, y la escala de deterioro de demencia (CDR).

En los resultados que obtuvimos podemos observar que la demencia tipo alzheimer ocupa el
primer lugar de los diagnosticos obtenidos abarcando un 38%, le sigue un Deterioro Cognitivo Leve
con un 19%, una demencia vascular con 11%, solo un 6% representa el envejecimiento normal y el
resto algún otro tipo de demencia y/o trastorno neurológico.

De la demencia tipo alzheimer podemos observar que un 13% de los pacientes se encontraban en
etapa inicial, 50% en etapa moderada y un 36% en etapa severa.

En conclusión podemos decir que la evaluación neuropsicológica es una herramienta útil en la

detección temprana del deterioro cognitivo leve y las demencias, por lo que debería incluirse en
todas las clínicas de atención geriátrica y en las clínicas de atención primaria como medida de
prevención.