Está en la página 1de 9

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL SIMÓN RODRÍGUEZ


DECANATO DE EDUCACIÓN AVANZADA
NÚCLEO REGIONAL DE EDUCACIÓN AVANZADA CARACAS
MAESTRIA EN CIENCIAS ADMINISTRTIVAS
MENCION GERENCIA ESTRATEGICA

INFORME FINAL

(DERECHOS HUMANOS
Y ESTADO)
ÉTICA (ORIENTACIONES BÁSICAS)

Unidad curricular: Ética de la profesión. Participante: Bárbara


Mendoza
Unidades de créditos: 3 C.I.N°: 13686196
Periodo académico: 2022-I
Profesora: José Moreno
Caracas, Julio de 2022.

Análisis Documento ONU


Buenas noches chicos y chicas, llegando al final de la jornada, AHORA la
siguiente actividad consiste en la lectura de 13 documentos cortos, divididos en
3 temas, 
1.- Derecho al Desarrollo
2.-Derechos Humanos en Venezuela 
3.- Medidas coercitiva Unilaterales.

Cada tema esta escrito y pensado desde distintas corrientes y puntos de vistas,
funcionarios de las Naciones Unidad como el secretario General y La alta
Comisionada para los DDHH, relatores especiales para los DDHH y
representantes de los estados.

Que debemos hacer:


1.- Leer todos los documentos y analizar cada uno de los puntos de vistas
desde la visión del escritor. 
2.- Dejar un comentario publico sobre los tres temas en discusión en el apartado
para el foro
3.- Desarrollar un trabajo de tres paginas analizando los tres temas en discusión
asociado a la carta de la Naciones Unidas. 21 de febrero
4.- cualquier duda pueden realizar preguntas como comentarios públicos en esta
sección o por whatsap.
Derecho al Desarrollo

“… El desarrollo no es simplemente una cuestión de crecimiento económico. Se trata de


dar a las personas la capacidad de vivir sus vidas al máximo potencial ...”

El derecho al desarrollo consiste en promover y proteger la capacidad de


cada persona para participar en el desarrollo, contribuir a él y disfrutar de él,
incluidos los aspectos económicos, sociales, culturales o políticos. Exige una
distribución justa de los beneficios resultantes del desarrollo. El mismo es un
derecho tanto individual como colectivo, que está profundamente enlazado con el
derecho de los pueblos a la libre determinación, y su derecho a ejercer plena
soberanía sobre todas sus riquezas y recursos naturales.
El mundo ha hecho grandes progresos en la reducción de la pobreza, con
más de 1000 millones de personas que han salido de la pobreza extrema desde
1990. En la actualidad es preocupante la situación, motivado a que las tasas de
pobreza están distribuidas en una forma muy diversa. Existen personas y mujeres
que viven en países frágiles o afectados por conflictos enfrentándose a una mayor
vulnerabilidad de pobreza, se estima que para el año 2030, casi el 35 % de la
población de los países menos desarrollados podría permanecer en la pobreza
extrema, esto si las desigualdades se mantienen constantes.
La implementación efectiva del derecho al desarrollo contribuiría a reducir la
pobreza y la desigualdad, la prevención de los conflictos y la promoción del
progreso, permitirá que todas las personas y todos los pueblos puedan vivir con
libertad, igualdad y dignidad y disfrutar de una paz duradera, esto claro está sin
darle las espaldas a ninguno de ellos.
No es precisamente un proceso monetario, ya que, por otra parte, es
perseverante al proceso integral, el cual incluye al desarrollo económico, social,
cultural y político, colocando a las personas y pueblos en un primer plano, y no a
los Gobiernos ni a las empresas privadas. Aunque el derecho al desarrollo se
concibe erradamente y únicamente como un asunto de capital financiero, el cual
se mide por el aumento del producto interno bruto de cada país.
Su propósito es tratar de lograr resultados precisos, pero también de poner
en marcha un proceso particular de avance que asienta la realización de los
derechos económicos, sociales y culturales, así como de los derechos y libertades
civiles y políticos, ampliando las capacidades y expectativas de las personas y de
los pueblos para optimizar su bienestar y comprender lo que valoran en su vida.
Los fundamentos del derecho, se remontan incluso más allá de la
declaración de 1966, cuando el entonces ministro de Relaciones Exteriores de
Senegal, Doudou Thiam, se refirió a él en la Asamblea General de la ONU, los
cuales se encuentran en los artículos 1, 55 y 56 de la Carta de las Naciones
Unidas. Estos artículos establecen que las relaciones pacíficas y amistosas entre
las naciones requieren condiciones de estabilidad y bienestar, palabras que
subrayan claramente la importancia del derecho al desarrollo. El mismo se
consagró formalmente en la Declaración sobre el derecho al desarrollo, aprobada
por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su resolución 41/128, de 4 de
diciembre de 1986.
Esta declaración establece inequívocamente que el desarrollo es un
derecho y ubica a las personas y pueblos en el centro del proceso de desarrollo.
Es un derecho inalienable, expresando que toda persona tiene derecho a
participar en un progreso económico, social, cultural y político en el que puedan
realizarse plenamente todos los derechos humanos y libertades fundamentales,
contribuyendo al mismo y a disfrutar de él. Además, principios como la no
discriminación y la soberanía de los Estados también forman parte del derecho
internacional consuetudinario, que es vinculante para todos los Estados.

Derechos Humanos
Son valores que las antiguas culturas legaron al mundo han sido recogidas
por el derecho positivo; los pueblos civilizados han guardado como patrimonio
moral e históricos las experiencias que obtuvieron a través de su vida comunitaria,
pero es indudable que los derechos han sido reconocidos a través de
convenciones y protocolos, en el ámbito internacional y de constituciones políticas
en el ámbito de cada Estado. Fue en la antigua Grecia donde se desarrollaron los
primeros elementos constitutivos de la democracia, la dinámica convivencia en el
medio social, cultural, político y económico; sirvieron de escenario para apuntalar
los primeros conceptos sobre Democracia y Derechos.

Evolución histórica de los Derechos Humanos

De manera específica, de los Derechos Humanos se comienza a hablar en


el siglo XX, como consecuencia de los tratados de paz celebrados luego de las
guerras mundiales. Por ejemplo, el Tratado de Versalles se suscribió finalizando la
Primera Guerra Mundial y dio lugar a la creación de la Sociedad de las Naciones,
como una organización internacional con sede en Ginebra (Suiza), la cual tuvo
como finalidad primordial el cumplimiento de los tratados de paz y el
mantenimiento de la paz, destacándose por su ayuda a los refugiados, la solución
de conflictos entre Estados y la reconstrucción de Estados por los desastres de la
citada guerra mundial.

Con posterioridad a la Segunda Guerra Mundial, entre el 25 de abril y el 26


de junio de 1945 se llevó a cabo La Conferencia de San Francisco, en la cual
participaron cerca de cincuenta Estados. De esa reunión surgió la expedición de la
“Carta de la Naciones Unidas” y, consecuencialmente, la creación de las Naciones
Unidas el 26 de junio de 1945, con finalidades y propósitos contenidos en el
preámbulo y en el artículo 1º de la Carta. Los propósitos que resaltan para ese
momento eran el mantenimiento de la paz y la seguridad internacional, la tutela de
los derechos y libertades fundamentales de los hombres en el ámbito universal y
el respeto al principio de la igualdad de derechos y al de libre determinación de los
pueblos.

Declaración Universal de los Derechos Humanos

En fecha 10 de diciembre de 1948, la Asamblea General de las Naciones


Unidas (ONU); proclamó la “Declaración Universal de los Derechos
Humanos”. Esta declaración contiene 30 artículos, y en cuyo preámbulo se lee lo
siguiente:

“La presente Declaración tiene como ideal común que todos los pueblos y
naciones deben esforzarse, a fin de que tanto los individuos como las
instituciones, inspirándose constantemente en ella, promuevan mediante la
enseñanza y la educación, el respeto a estos derechos y libertades, y aseguren,
por medidas progresivas de carácter nacional e internacional, su reconocimiento y
aplicación universales y efectivos”.

Estas declaraciones de derechos humanos han sido base para que distintos
países del mundo con vocación democrática adapten sus constituciones para
implementar medidas que aseguren el cumplimiento de tales derechos.

Para el caso específico de Venezuela. En 1999 se aprobó, en proceso


constituyente, una nueva Constitución, contentiva de importantes disposiciones en
materia de protección a los derechos humanos tanto civiles y políticos como
económicos, sociales y culturales. La Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela fue modificada y promulgada el 20 de diciembre de 1999, siendo la
única en la historia del país cuya redacción fue aprobada por el pueblo mediante el
voto en referéndum, recibiendo el respaldo del 72% de los votos escrutados.

El texto Constitucional venezolano responde a criterios de una carta


sustantiva moderna, adecuada a los preceptos de la Declaración Universal de los
Derecho Humanos, y su modificación posee características de avance
institucional.
Para Venezuela ha sido un proceso engorroso, Durante un tiempo, las
organizaciones de derechos humanos conscientes de la situación, han realizado
trabajos de documentación de los acontecimientos en Venezuela, para informar
internacionalmente sobre la situación presentadas en Venezuela, se realizaron
acciones a nivel nacional para exigir justicia y protección. Se solicitó la apertura de
un canal humanitario por la violación del derecho a la salud y a la vida de los
venezolanos, sin respuesta alguna por parte del Tribunal Supremo de Justicia. Al
haberse agotado las vías internas, se demostró la importancia de acudir a
instancias internacionales. A pesar de los logros, la vigencia plena de los
derechos humanos no existe aún, la realidad en nuestro país como en América
Latina; existen serias amenazas a la vigencia de derechos ya conquistados con
mucho esfuerzo y al costo de muchas vidas. Por eso el reto, es evitar el retroceso
en los derechos alcanzados y lograr el reconocimiento y disfrute de nuevos
derechos para toda la población, especialmente en lo concerniente a los derechos
económicos, sociales y culturales, donde existen enormes desafíos, entre ellos
alcanzar su justiciabilidad, en momentos cuando las tendencias de la economía
mundial impulsan su desconocimiento.

Medidas Coercitivas Unilaterales.

Según el Consejo de Derechos Humanos, dichos mecanismos son


“medidas que incluyen las económicas y políticas, aunque no se limitan a ellas,
impuestas por Estados o grupos de Estados para coaccionar a otro Estado a fin de
obtener de éste la subordinación del ejercicio de sus derechos soberanos y
provocar algún cambio concreto en su política”.
Hace décadas que las acciones de bloqueo se discuten a menudo en el
marco de las Naciones Unidas. Se trata de una temática controversial que hasta
hoy no logra clarificarse por completo en el marco del derecho internacional. Como
bien lo explicó el Relator Especial, Idriss Jazairy, “todas las medidas coercitivas
unilaterales no son ilícitas, pero no son legítimas”.
¿Por qué? Un Estado no tiene la autoridad jurídica de administrar una
sanción sobre otro, pero el derecho internacional no obliga a ningún país a
mantener buenas relaciones comerciales con otros. Así, un Estado puede
minimizar sus relaciones con otro, siempre y cuando no viole los derechos
humanos de sus ciudadanos.
Las medidas coercitivas unilaterales se encuentran en una cierta
nebulosidad jurídica, puesto que es difícil poder definir cuándo una situación es un
bloqueo y en qué medida afecta los derechos humanos de los habitantes de un
Estado.
Aun así, los Estados que acuden a ellas justifican sus medidas coercitivas
con el argumento de que intentan proteger a las poblaciones que se encontrarían
bajo cierto poder nocivo para los derechos humanos. Pero, como lo destacó
durante el panel el experto egipcio Mohamed Abdel-Moneim, profesor de derecho
internacional, las buenas intenciones no cuentan si acaban provocando
consecuencias negativas.
La Carta de las Naciones Unidas no permite a un Estado solo decidir
emprender acciones coercitivas puesto que pueden violar o perjudicar la
realización de los derechos humanos de la población del país afectado. Por esta
razón, las únicas medidas coercitivas que Naciones Unidas considera legítimas y
legales son aquellas decididas por el Consejo de Seguridad que, además de ser
multilaterales, son emprendidas tras una evaluación de sus posibles
consecuencias negativas.
Al final de la discusión, el relator Jazairy lamentó que los Estados que
imponen acciones coercitivas no se pronunciaran durante el debate, como fue el
caso de Estados Unidos, que estuvo presente en la sala, pero no tomó la palabra.
Para él, la manera de proteger los derechos humanos en el marco de la puesta en
marcha de medidas coercitivas reside en el debate transparente con otros
organismos internacionales, como el Banco Mundial, o con el Alto Comisionado de
las Naciones Unidas para los Derechos Humanos con el fin de evaluar sus
potenciales consecuencias negativas de manera objetiva.

El bloqueo a Cuba es “contraproducente”

El experto Aslan Abashidze lamentó el bloqueo económico al cual está


sometida Cuba, así como todas las medidas coercitivas emprendidas fuera del
ámbito del Consejo de Seguridad, y que son, por lo tanto “ilegítimas”.
Según Abashidze, el bloqueo impuesto a Cuba por los Estados Unidos hace más
de 55 años “es contraproducente” puesto que perjudica el ejercicio de los
derechos económicos, sociales y culturales de la población de la isla y
compromete el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Por esa
razón, el catedrático ruso calificó las medidas coercitivas unilaterales de
“inmorales”.
| En el momento de la intervención de los Estados, Cuba pidió el apoyo de la
comunidad internacional para terminar con el bloqueo y agregó que, si bien
reconocía “la voluntad expresada por el presidente estadounidense de trabajar por
su eliminación”, para lograrlo bastaría con que el presidente Obama “aplicara con
determinación las amplias facultades ejecutivas que tiene para ello”.
Opinión propia: En pocas palabras consisten en sanciones económicas,
embargos, restricciones económicas, tienen un impacto negativo en el goce y
disfrute pleno de los Derechos Humanos fundamentales de los ciudadanos, entre
ellos el derecho a la vida, el derecho a un nivel de vida adecuado, derecho a la
alimentación, vestido, vivienda, asistencia médica; tienden a repercutir sobre las
necesidades básicas de la población. Otra afectación a los derechos humanos de
la población de los Estados contra las cuales las medidas coercitivas van dirigidas
se verifica en la agudización de la pobreza en los estamentos de la población con
menores recursos, en contraste con el incremento de ingresos para los sectores
que controlan el mercado negro, que actúa frente a la ausencia de un mercado
interno que abastezca las necesidades de la población.
Esta situación se ve agravada, cuando el Estado que está siendo
sancionado con la medida, es dependiente económicamente, en un porcentaje
alto, del país que la impone, lo que se traduce en una repercusión de gran
alcance, afectando a los grupos más vulnerables como mujeres, niños/niñas,
enfermos y ancianos. De manera general, la implementación prolongada de estas
medidas afecta el desarrollo económico y social del país.
Bibliografía Electrónica:

[PDF] Derechos humanos : historia y conceptos básicos biblioteca.clacso.edu.ar ›


Venezuela › fundavives › pdf_132

https://www.ohchr.org/sites/default/files/
SRRightDevelpment_IntroductiontoMandate_SP.pdf

http://www.ohchr.org/EN/Issues/Development/SRDevelopment/Pages/
SRDevelopmentIndex.aspx

También podría gustarte