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Economía Ecológica y Marxismo

Article · November 2022

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Leonel Ramírez García


Universidad Nacional Autónoma de México
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UNIVERSIDAD NACIONAL DE ROSARIO
FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y ESTADÍSTICA

Economía, Ambiente y Sociedad

Trabajo Integrador: “Análisis, aspectos conceptuales y teóricos


marxistas dentro de la Economía Ecológica”

Presenta: Leonel Ramírez García R-6028/3

Bv. Oroño 1261, Rosario, Santa Fe, Argentina a 30 de noviembre de 2022


Introducción

Kicillof (2021) propone que un sistema teórico es un conjunto de teorías que poseen
consistencia unas con otras y que se determinan mutuamente e influyen y necesitan
entre sí y abarcan “las principales categorías económicas”.

La definición anterior lleva a pensar que se pueden analizar los sistemas y teorías
económicas contrastando unas con otras, que pueden entre ellas tener similitudes
y diferencias y que al abarcar las principales categorías económicas tienen
necesariamente que ser analizadas en términos de las otras. Este tipo de análisis
permite medir la influencia de unas con las otras, así como plantearse críticas o
complementariedades entre estas, cosa que no es nueva.

A partir de esto, en este trabajo, que es sobre todo de carácter reflexivo, puesto que
no propone comparaciones empíricas ni un análisis demasiado profundo (por lo
menos en estas paginas pues hay conocimiento por detrás), se pretende analizar
los puntos en común entre la Economía Ecológica y el Marxismo, a partir de
sentencias específicas.

Los escritos sobre Economía Ecológica son muy amplios y no siempre las ideas
coinciden exactamente, por ello, se usará aquí un conjunto de tres trabajos que
resumen algunos supuestos y bases de esta teoría, con la intención de no ampliar
demasiado la exposición y de acotarla para que sea más clara. Los textos para
utilizar son Pengue (2010), Pérez (2012) y Van Haudermerien (1998), además, se
agregan dos textos de apoyo sobre teoría económica como son Autores Varios
(2014) y Vargas (2006).

Este escrito solo consta de una parte, en la que la metodología es muy sencilla,
explicar uno a uno los supuestos, propuestas o aseveraciones de la Economía
Ecológica que se encontraron en los textos señalados, explicar el concepto parecido
en el marxismo y enfatizar sus puntos en común. Finalmente se dan algunas
reflexiones finales.
Los puntos en común de la Economía Ecológica y el Marxismo

Como se dijo, en este trabajo se busca hallar puntos en común entre el paradigma
marxista y la economía ecológica. Por supuesto que el tema puede llevar muchas
páginas y mucho tiempo de lectura y por lo abstracto, sobre todo de la teoría
marxista, el debate se puede llevar muy lejos de acuerdo con las interpretaciones
de quien escribe, quien lee y de los textos consultados.

Por lo anterior, el método aquí utilizado se basará en extraer sentencias puntuales


de los textos mencionados sobre economía ecológica y a partir de estos decir por
qué se les considera en este trabajo puntos en común con el marxismo. Por
supuesto, es una interpretación de quién aquí escribe, invitando al debate de las
ideas.

Cómo primer punto es necesario indicar que le economía ecológica se puede definir
como la ciencia que se encarga de gestionar la sustentabilidad, es una ciencia
transdisciplinar que estudia a la economía como un subsistema del sistema natural
y de evaluar como se dan las relaciones entre estos, por lo que su punto de partida
es el cuidado del sistema natural.

Por otro lado, el marxismo se presenta como un cuerpo teórico económico, que
analiza las relaciones de distribución, producción, circulación y consumo, que se
dan en el sistema capitalista, sobre la base de que las relaciones de producción,
que son básicamente la explotación del capitalista sobre el trabajador y la lucha
entre estas clases, dan origen al sistema económico y social.

Por la naturaleza del trabajo es imposible hacer una redacción amplia sobre cada
teoría, por lo que a partir de este punto se procederá a analizar los puntos clave que
se han encontrado en los textos para explicar su relación con el marxismo como
teoría económica.

Un primer punto para resaltar que tienen en común ambos paradigmas es que
critican a la economía convencional. Evidentemente cada una lo hace desde su
trinchera, pero un aspecto central en ambas es que parten de una critica hacia lo
aceptado y a partir de ahí, se generan las ideas que darán sustento a su cuerpo
teórico.

El método usado para la crítica y la postulación de ideas puede ser otro punto en
común. El marxismo basa su tesis en el método dialéctico que según Vargas (2006)
“se refiere a que la naturaleza de los procesos reales está determinada, en última
instancia, por la lucha o contradicción de los componentes de dicha realidad”. Marx
considera que el capitalismo tiene contradicciones que lo llevarán a su final, entre
ellas el reemplazo de la mano de obra, pero también considera que el capitalismo
está destruyendo otro aspecto básico para su supervivencia, que es la naturaleza
mediante su sobreexplotación. Por lo tanto, la crítica de la economía ecológica y del
marxismo se centra en la dialéctica y ataca las contradicciones del sistema, como
punto de unión entre las dos, la destrucción de la naturaleza.

Así mismo, para la economía ecológica los ecosistemas son la base la vida humana
y de la sociedad, por lo que el conocimiento de estos es la base física y conceptual
de toda la actividad humana y de la economía (Pengue, 2010). Se entiende también
que la forma en que la humanidad aprovecha los recursos naturales es un proceso
coevolucianario, es decir, “significa que en la medida en la que el sistema
socioeconómico modifica los sistemas biológicos, se ve obligado a su vez a adaptar
el primero a los cambios introducidos en el segundo, de manera que es capaz de
comprender los efectos de las modificaciones sobre los ecosistemas - de adquirir
un nuevo conocimiento - que le permita usar adecuadamente los mismos, para lo
cual necesita crear nuevas instituciones, en el sentido de nuevas leyes, reglas o
normas sociales de comportamiento” (Aguilera Klink y Alcántara, 1994: citado en
Pengue, 2010).

De lo anterior queda el símil con la teoría marxista que propone que la base de la
economía y de toda la sociedad humana son los medios de producción, en donde
se incluyen los recursos naturales, los recurso científicos y tecnológicos y la fuerza
de trabajo. Por esto, se entiende que la base en ambos paradigmas es material y
es esta base material, la que configura la estructura de la sociedad. Evidentemente
en el marxismo se incluyen otras cosas además de los recursos naturales, aunque
estos juegan un papel importante.

Así mismo, para el marxismo los medios de producción son coevolutivos con la
sociedad, mientras los seres humanos hacen uso de estos medios, los mismos se
van modificando por lo que la sociedad se tiene que readaptar a las nuevas
condiciones de la base material, es, en sentido conceptual lo mismo, con la
diferencia de lo que se representa como base, en la economía ecológica son los
ecosistemas como un todo.

En este punto hay que señalar que Marx indicaba también que, así como el hombre
modifica la naturaleza mediante el trabajo, al hacerlo esta le modifica, aunque el
énfasis se da en el trabajo en sí, este aspecto se puede llevar al hecho de que en
el proceso de apropiación de naturaleza el ser humano modifica sus capacidades,
sus conocimientos y los mismos ecosistemas, llevando a un ciclo muy similar al que
se plantea en la economía ecológica.

Sobre esta misma línea la economía ecológica entiende que la sociedad y la


economía no solo se pueden analizar como un subsistema dentro del ecosistema,
sino que están empotrados históricamente y cambian con la percepción social de
los ecosistemas. Así mismo, la sociedad se encuentra dentro de una estructura de
derechos de propiedad sobre los recursos ambientales, en una distribución
asimétrica del poder y de los ingresos, y en una estructura de clases, géneros, social
y de castas ((Martínez-Alier, 2002: citado en Pérez, 2012).

Las similitudes que se encuentran en las aseveraciones del párrafo anterior


respecto del pensamiento de la economía ecológica con el marxismo son claras.
Por un lado, el marxismo también apunta a que las sociedades son influidas por su
historia y que la percepción con respecto al sistema ha cambiado a lo largo de la
misma bajo el fundamento de la coevolución que se da en los medios de producción.
De igual forma, los derechos de propiedad son una de las bases conceptuales más
importantes dentro de la escuela marxista, pues para Marx, la estructura de
propiedad marca la forma en que se dan las relaciones productivas y que de hecho
se adaptan a la evolución material de forma histórica y tardía (la economía ecológica
también menciona un atraso en la adaptación de la sociedad a las nuevas
condiciones del ambiente), no es lo mismo la propiedad comunal de los inicios del
hombre a la propiedad privada de los medios de producción del capitalismo actual,
y de hecho esta estructura de propiedad en ambas teorías marca quién, cómo y
cuándo puede explotar los recursos naturales.

Todo lo anterior recuerda al materialismo dialéctico, una propuesta marxista que


según Vargas (2006) postula “Dado que los fenómenos, por ejemplo, los sociales,
están en un proceso continuo de cambio, éste a través del tiempo se presenta como
su historia, por lo que el materialismo histórico se refiere al análisis de la
transformación y evolución de los procesos reales a partir de sus contradicciones, y
que también se registran en el tiempo, como la historia de la sociedad.”

Otra similitud en el mismo párrafo es la distribución asimétrica de la distribución del


poder y de los ingresos, que es un punto muy marcado en la teoría y práctica
marxista, pues siempre hay aquellos que son dueños y aquellos que son explotados
y con base en eso también se toman decisiones y se usan los recursos de todo tipo,
incluyendo los naturales. Lo anterior nos lleva a la división en clases, aunque no
quiere decir que sea exactamente la misma división, la sociedad marcada por
distintas clases sociales (explotadores y explotados, históricamente en el marxismo)
es de resaltar, pues para ambas teorías puede ser, como ya se dijo, la base de
quienes y cómo explotan los recursos.

El valor es otro de los aspectos en común respecto a la crítica. Para la economía


ecológica el sistema de precios deja de lado aspectos relevantes al sistema, por
ejemplo, oculta muchas veces el daño ambiental o la medida en términos
monetarios no necesariamente refleja la importancia del recurso que se aprovecha
o del daño que se genera. Así mismo, critica la tendencia a monetizar aspectos
como la contaminación y propone indicadores biofísicos, cómo la huella ecológica,
en lugar de los monetarios. En este sentido, se puede decir que le economía
ecológica vas más por el lado del valor de uso de los recursos naturales.

El marxismo también critica el sistema de precios aludiendo a que los precios


monetarios no son la representación real del valor de las cosas, aunque para esta
teoría el valor proviene del trabajo, no necesariamente se contrapone a la visión de
la economía ecológica, en el sentido de que también propone identificar el valor de
uso de las mercancías y los recursos, por lo que las visiones podrían ser
complementarias.

Finalmente, regresando incluso al principio, Marx propone que las contradicciones


inherentes al modo de producción capitalista tenderán a llevarlo a su extinción (por
medio de la revolución), y que en dado punto un Estado fuerte, controlado por el
proletariado, deberá tomar el control (dictadura del proletariado) para llevar a la
humanidad al comunismo.

Aunque lo anterior no es expuesto de esta forma, en el cambio hacia el comunismo


Marx dice que cambiará necesariamente la forma en que se produce y se consume
debido a la evolución de las fuerzas productivas. La Economía Ecológica en algún
punto supone necesario un cambio en el consumo y en la forma de producir para
evitar la debacle ecológica, como indica Pengue (2010) “Cuando la sociedad asuma,
con una nueva mirada de racionalidad ambiental que ya no le es posible seguir
sobreexplotando los recursos naturales y que se camina directamente a su
extinción, si no produce cambios en sus hábitos de consumo y producción.” Así
mismo para esta teoría el Estado es el que debe asumir el control del cambio social
hacia la sustentabilidad.

Lo anterior no significa que ambos vayan obligatoriamente por el mismo camino o


propongan la misma salida, pero, nuevamente, las posturas no son mutuamente
excluyentes y pueden ser complementarias, pues, como muchos marxistas afirman,
no hay capitalismo sustentable, por lo que el cambio de modo de producción sería
una salida de los conflictos planteados por ambas tesis. Finalmente, el método
dialéctico llama a la complementariedad de posturas.

Reflexiones finales

Este trabajo tenía como objetivo plantear, brevemente, algunas de las similitudes
que se pueden encontrar entre la Economía Ecológica y el Marxismo.
Evidentemente lo aquí hecho no es un trabajo demasiado profundo pues requeriría
mucho más trabajo y una extensión mucho más larga. Por eso, se escogieron
algunos textos y a partir de eso se creó el análisis que es evidentemente teórico y
trata de dejar la puerta abierta hacia investigaciones más profundas en este sentido.

Es claro que hay similitudes y diferencias entre estas teorías y que su punto de
interés es distinto. A pesar de esto y con base en lo expuesto anteriormente, se
puede reflexionar sobre la posible complementariedad de ambas exposiciones. Esto
partiendo de una evolución de ambas visiones y de que ninguna explica
completamente la realidad, por lo que los puntos en común pueden servir para
robustecer las criticas hacia el sistema dominante y puede llevar a tesis mejor
sustentadas que abarquen un abanico más amplio de fenómenos y que concilie los
cambios sociales con los cambios materiales y ecológicos. La economía ecológica
y el marxismo no son mutuamente excluyentes en todos sus aspectos, pero no
concilian en todos tampoco, por lo que hay que se cautelosos con su combinación,
sin dejar de lado que hay potencial en la misma.

Como se pudo ver, los puntos en común son amplios en sentido teórico y permiten
una amplia disertación teórica y práctica. El marxismo nunca dio recetas para aliviar
los problemas del sistema como otras teóricas (el keynesianismo, ejemplo), así
mismo, aunque la economía ecológica si propone en algunos puntos planes de
acción dentro del capitalismo, se puede decir que al afirmar que se necesita un
cambio en la producción y el consumo, indica una salida similar al marxismo,
cambiar el sistema. Además, las bases de la crítica y de la teoría son evidentemente
parecidas, por lo que se puede decir que hay influencia del marxismo en la
economía ecológica sin decir que es su base, lo que abre aún más la puerta de la
conciliación.

Finalmente, lo más importante es reflexionar respecto de ambas teorías, sus fallas


y sus aciertos, sus bases y metodología, ya sea juntas o separadas, pues la crítica
y la reflexión son siempre claves del avance. Aquí se plantea que esto se haga
desde ambas teorías, qué crítica una de la otra y que se propone al respecto. ¿Se
puede conciliar una teoría que en suma defiende al medio ambiente y la
sustentabilidad de la sociedad con una que busca acabar con la dinámica de
explotación de la historia humana y del capitalismo? Posiblemente, pero el punto de
partida puede ser comparaciones de esta clase entre ambas y los frutos de esto
pueden ser mejores de lo que se espera, como se dijo, cualquier crítica y estudio de
este tipo es un avance.

Bibliografía

Hauwermeiren, S. V. (1998). Manual de economía ecológica (No. 333.72 H2981m


Ej. 1). ABYA-YALA.

Kicillof, A. (2019, 9 diciembre). De Smith a Keynes: Siete Lecciones de historia del


pensamiento económico. Siglo XXI Editores.

Pengue, W. (2010). La economía ecológica y el desarrollo en América Latina. León


y Altieri. Vertientes del pensamiento agroecológico: Fundamentos y aplicaciones,
125.

Pérez. (2012). Conceptualización sobre el Desarrollo Sostenible: operacionalización


del concepto para Colombia. Punto de vista, 3(5), 8.

Vargas, G. (2006). Introducción a la teoría económica un enfoque latinoamericano.


Pearson educación.

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