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Editor:
Tomás Cortés Espinosa
ATLAS
PERMANYER MÉXICO
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Editor:
PERMANYER
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Tomás Cortés Espinosa
ATLAS
multidisciplinario de enfermedades autoinmunes
Sin contar con el consentimiento previo por escrito del editor, no podrá reproducirse ni fotocopiarse ninguna parte de esta publicación. © Permanyer 2020
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Jhonatan Aguilar Hernández Ángel Ibáñez Pérez
Clínica de Enfermedad Inflamatoria Intestinal Servicio de Nutrición Pediátrica
Centro Médico Nacional 20 de Noviembre – ISSSTE Centro Médico Nacional 20 de Noviembre – ISSSTE
Ciudad de México, México Ciudad de México, México
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Rebeca Pérez Cabeza de Vaca Mario Antonio Téllez González
Laboratorio de Oncoinmunología Coordinación de Investigación
División de Investigación Biomédica Laboratorio de Medicina Regenerativa e Ingeniería de Tejidos
Centro Médico Nacional 20 de Noviembre – ISSSTE Centro Médico Nacional 20 de Noviembre – ISSSTE
Ciudad de México, México Ciudad de México, México
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5-ASA ácido-5 aminosalicilatos Htco hematocrito
6-MP 6-mercaptopurina
IBP inhibidor de bomba de protones
AC auscultación cardíaca Ig inmunoglobulina
ACO anticonceptivos orales HIS International Hidradenitis Suppurativa Severity Score System
Ags VHB antigenos de superficie de virus de hepatitis B IM intramuscular
AINE antiinflamatorios no esteroideos IMC índice de masa corporal
Alb albúmina INR international normalized ratio
ALT alanina-aminotransferasa IPA índice paquete-año
AMAS anticuerpos antimitocondriales IV intravenoso
ANAS anticuerpos antinucleares
AO ambos ojos LOCS III Lens Opacities Clasification System III
AP auscultación pulmonar
ASAS Assessment of SpondyloArthritis International Society MaRIA puntaje de actividad por resonancia magnética
ASCA anticuerpo anti-Saccharomyces cerevisiae MEI manifestación extraintestinal
ASDAS Ankylosing Spondylitis Disease Activity Score MMII miembros inferiores
AST aspartato-aminotransferasa MMX multimátrix
AZA azatioprina MVC murmullo vesicular conservado
BASDAI Bath Ankylosing Spondylitis Disease Activity Index NAMC no alergias medicamentosas conocidas
BASFI Bath Ankylosing Spondylitis Functional Index Neu neutrofilos
BT bilirrubina total
OCT tomografía de coherencia óptica
CCR cáncer colorrectal OD ojo derecho
CDAI índice de actividad de la EC OI ojo izquierdo
CDEIS puntaje endoscópico de severidad para EC
CEP colangitis esclerosante primaria
PAS ácido peryódico de Schiff
CMV citomegalovirus
PCR proteína C reactiva
CPRE colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
PG pioderma gangrenoso
CU colitis ulcerosa
PIO presión intraocular
CUCI colitis ulcerosa crónica inespecífica
PMN polimorfonucleares
CV capacidad visual
PP parsplanitis
PPD derivado proteico purificado de la tuberculina
DLQI Dermatology Life Quality Index
V
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ÍNDICE
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PrólogoIX 12. Hidradenitis supurativa 55
TOMÁS CORTÉS ESPINOSA SAGRARIO HIERRO OROZCO Y MÓNICA ELIZABETH
VÁSQUEZ VÁSQUEZ
inflamatoria intestinal 33
CARLOS HUMBERTO SANDOVAL JIMÉNEZ SECCIÓN 6 Inmunología
SECCIÓN 8 Nutriología
SECCIÓN 3 Dermatología
20. Esquema de la nutrición en enfermedades
11. Pioderma gangrenoso 53 autoinmunes105
SAGRARIO HIERRO OROZCO Y MÓNICA ELIZABETH ANA KARINA GARCÍA SÁMANO, ÁNGEL IBÁÑEZ PÉREZ,
VÁSQUEZ VÁSQUEZ JOSÉ ANTONIO LEYVA ISLAS E ISABEL MARTÍNEZ DEL RÍO REQUEJO
VII
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PRÓLOGO
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H ace cerca de un siglo, Paul Ehrlich propuso que la respuesta inmunológica contra nues-
tro propio cuerpo se denominara «autotóxicus», es decir, lo que actualmente conocemos
con el término de «autoinmunidad». Para que ello se produzca se requieren factores
genéticos y ambientales y un desbalance del sistema inmunológico, y de esta manera se desa-
rrolla la enfermedad.
Si bien aún no conocemos la etiología exacta, al parecer una enfermedad autoinmune es
multifactorial y podría explicar por qué un individuo, al presentar un problema autoinmune,
puede llegar a desarrollar o asociarse a una segunda enfermedad.
En estos primeros años del siglo XXI, la enfermedad inf lamatoria intestinal se ha conver-
tido en una enfermedad mundial, y nuestro país no es una excepción. La enfermedad inf lama-
toria intestinal presenta manifestaciones extraintestinales en un 50% de los casos, afectando
principalmente a los sistemas músculo-esquelético, dermatológico y oftalmológico, así como al
hígado y las vías biliares principalmente. No hay que olvidar que existen otras enfermedades
inmunológicas que pueden afectar a otros órganos y/o sistemas del cuerpo.
La clínica de la enfermedad inf lamatoria intestinal del Centro Médicio Nacional 20 de
Noviembre –centro de referencia– decidió, junto con un grupo de especialistas involucrados en
las enfermedades autoinmunes, desarrollar un atlas ilustrado con casos clínicos, algoritmos
diagnósticos y de tratamientos e ilustraciones de los aspectos inmunogenéticos y nutricionales.
El presente atlas está dirigido no sólo a los médicos gastroenterólogos, sino también a los
patólogos, cirujanos de colon y recto, reumatólogos, dermatólogos y oftalmólogos, así como a
los nutriólogos, con el propósito de trabajar en conjunto para batir la morbilidad, afectación
social y deceso de los pacientes que han puesto en nuestras manos su salud.
Espero que este atlas multidisciplinario sea de su completo agrado y conlleve los conoci-
mientos ilustrados.
IX
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1
SECCIÓN
y coloproctología
Gastroenterología
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Capítulo 1
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y crónica. Crohn intraluminal
Jesús Gerardo López Gómez, Jhonatan Aguilar Hernández, Christian Navarro Gerrard, Rodolfo Ramírez del Pilar,
Edgar Alonso Tapia Rangel y Tomás Cortés Espinosa
Padecimiento actual
Exploración física
El paciente refiere que empieza 5 meses antes con cuadros
Signos vitales dentro de parámetros fisiológicos. Explora- autolimitados de disentería sin respuesta a múltiples esquemas
ción abdominal: abdomen plano, blando, depresible, peristalsis antibióticos y antiparasitarios. En el momento de su ingreso se
presente, doloroso a la palpación profunda en marco colónico, encontraba con 8 evacuaciones al día, Bristol 6, con presencia
sin datos de irritación peritoneal. Resto asignológico. de moco y sangre en < 50% de las deposiciones.
Se le realizó una colonoscopia extrainstitucional, con re-
porte de colitis inf lamatoria a determinar. Las biopsias de
Estudios de laboratorio y gabinete íleon, recto, sigmoides y colon reportaron leve actividad inf la-
Leucocitos, 5.5 millares/mm 3; hemoglobina, 12.1 g/dl; pro- matoria inespecífica.
teína C reactiva (PCR), 39.9 mg/l; albúmina, 1.9 g/dl.
Se realizó revisión de laminillas de colonoscopia extrains-
titucional, con resultados de CUCI con actividad severa, cam- Exploración física
bios regenerativos del epitelio superficial y leve fibroplasia es- Signos vitales dentro de parámetros normales. Exploración
tromal. abdominal: abdomen plano, blando, depresible, peristalsis pre-
En nuestro centro se le realiza colonoscopia con toma de sente, sin dolor a la palpación, sin datos de irritación peritoneal.
biopsias, enterorresonancia y anticuerpos Saccharomyces cerevi- Resto asignológico.
siae (ASCA) (Figs. 1-5).
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Figura 1. Colonoscopia con colon descendente y sigmoides con presencia de úlceras
serpinginosas cubiertas por fibrina. Pérdida completa del patrón vascular y austral.
Figura 3. Enterorresonancia con datos sugerentes de enfermedad de Crohn. El colon
ascendente se observa dilatado, con zona de estenosis en su unión al colon transverso
con un porcentaje del 40%.
Diagnóstico
Colitis ulcerosa Truelove and Witts moderada.
Figura 4. Enterorresonancia con datos de enfermedad de Crohn, con imagen de actividad
en colon ascendente y descendente con índices de MaRIA de 19 y 24 puntos,
Abordaje y tratamiento respectivamente.
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Figura 5. Biopsia de colon: histopatología con infiltrado inflamatorio en la lámina propia
con la formación de microabscesos en las criptas y un granuloma.
Figura 6. Colonoscopia que muestra pérdida del patrón vascular en sigmoides y colon
ascendente con mucosa eritematosa y edematizada hasta más allá del ángulo esplénico,
friable con múltiples erosiones.
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Figura 9. Colonoscopia que muestra múltiples pseudopólipos en el trayecto del colon
transverso, con mucosa edematosa.
Figura 10. Colonoscopia que muestra múltiples pseudopólipos en el trayecto del colon
descendente, con mucosa edematosa, eritematosa y friable al paso del endoscopio.
Estudios de laboratorio y gabinete
Leucocitos, 4.3 millares/mm 3; hemoglobina, 12.5 g/dl; crea-
tinina, 0.65 mg/dl; Na, 138 mEq/l; K 3.76 mEq/l; VSG 65, y PCR,
20 mg/l.
Se le realizó colonoscopia con toma de biopsias (Figs. 9-11).
Diagnóstico
Colitis ulcerosa Truelove and Witts severa, complicada con
infección por Clostrioides difficile severo.
Abordaje y tratamiento
Mujer en la séptima década de la vida, con diagnóstico de
colitis ulcerosa de larga evolución, que fue abordada con protocolo
para descartar infección gastrointestinal versus recaída. Presentó
una PCR positiva para toxina A/B de C. difficile, motivo por el cual
se le administró tratamiento con vancomicina vía oral hasta remi-
sión de la diarrea. Parece existir una correlación directamente
positiva entre el índice de actividad de la colitis ulcerosa y la fre-
cuencia de la infección por C. difficile; en estos pacientes es inha-
bitual la visualización macroscópica de pseudomembranas. En la
mayoría de los casos, el tratamiento específico de la infección por
C. difficile es suficiente para controlar el brote de colitis ulcerosa.
Figura 11. Biopsia de colon: histopatología con infiltrado mononuclear difuso de la lámina
ENFERMEDAD DE CROHN FISTULIZANTE EN UN propia con presencia de un absceso en la cripta.
JOVEN CON ENFERMEDAD DE TAKAYASU
Ficha de Identificación perforación secundaria a estenosis ileal a los 21 años; se le reali-
Varón de 22 años originario de Oaxaca (México). zó hemicolectomía derecha e ileostomía. Había recibido trata-
miento con esteroides, metotrexato, ciclofosfamida, azatioprina y
rituximab (suspendido por reacción adversa grave), aunque antes
Antecedentes personales de su ingreso únicamente tomaba prednisona 5 mg/día.
Arteritis de Takayasu a los 13 años (Numano V-coartación de
aorta, aneurisma carotídeo, estenosis aórtica infrarrenal y aneu- Padecimiento actual
risma de arteria mesentérica superior). Apendicitis aguda a los 18
años con hallazgo posquirúrgico de ileítis y adenitis mesentérica. Acude a la consulta por diarrea de 5 evacuaciones/día de
Fístula enterovesical complicada con absceso intraabdominal y 5 meses de evolución, evacuaciones Bristol 7, con moco y sangre
Colitis ulcerosa crónica inespecífica aguda y crónica. Crohn intraluminal 7
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Figura 12. Mucosa de colon con múltiples úlceras aftoides confluentes cubiertas de Figura 13. Mucosa de íleon atrófica, con una úlcera aftoide aislada. Úlceras aftoides no
fibrina y moco. confluentes en íleon.
Exploración física
Signos vitales dentro de rangos normales; peso, 36 kg; talla,
1.57 m; índice de masa corporal (IMC), 14.60 kg/m 2. Abdomen
con múltiples cicatrices e ileostomía en cuadrante inferior iz-
quierdo funcional, soplo abdominal, dolor abdominal en epigas-
trio, peristalsis disminuida, sin irritación peritoneal.
Diagnóstico Figura 14. Biopsia de colon con dilatación de capilares y linfáticos, hallazgo indirecto de
enfermedad vascular (enfermedad de Takayasu) (flechas).
Enfermedad de Crohn fistulizante, CDAI de 352.
Enfermedad de Takayasu.
HISTOPLASMOSIS INTESTINAL, UN
Abordaje y tratamiento DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
Los estudios realizados confirmaron la sospecha clínica de
Ficha de identificación
enfermedad de Crohn activa, fistulizante y sin afección peria-
nal, además de enfermedad de Takayasu. Se realizó consenso Varón de 55 años, originario de Sinaloa (México), que traba-
con el Servicio de Reumatología y se decidió iniciar tratamien- ja como químico farmacobiólogo en un hospital de su localidad.
to con anti-TNF con certolizumab pegol 400 mg subcutáneo. Se
administró al paciente dosis de inducción en las semanas 0, 2
y 4, continuando con aplicación mensual. Actualmente se man- Antecedentes personales
tiene en vigilancia en la Clínica de Enfermedad Inf lamatoria
de nuestro hospital con remisión clínica, bioquímica, endoscó- Timoma benigno diagnosticado en 2011, tratado con resec-
pica e histológica sostenida después de 12 meses de tratamien- ción de timo y dos costillas de hemitórax izquierdo; inmunode-
to. Su arteritis de Takayasu también permanece inactiva. ficiencia común variable diagnosticada en 2017, con tratamien-
8 SECCIÓN 1 Gastroenterología y coloproctología
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Figura 15. Enterorresonancia T1 contrastada axial. La imagen poscontraste volumen
interpolated breath-hold examination (VIBE) muestra realce heterogéneo mural en las
zonas con mayor edema (flecha).
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Figura 20. Colonoscopia: recto con mucosa con patrón en empedrado (estrella), mucosa
nodular, eritematosa y friable.
Figura 23. Biopsia de colon: tinción de tinción de ácido peryódico de Schiff (PAS), en la
que se identifican células epitelioides que forman el granuloma con microrganismos
(color rosa dentro de las células epitelioides), con Blastomyces (óvalo negro).
Padecimiento actual
Figura 21. Colonoscopia: colon sigmoides con mucosa, eritematosa, friable, úlceras El paciente refiere iniciar hace 3 meses con evacuaciones
Bristol 6, con una bilirrubina total (BT) 0.41 mg/dl; international
lineales (flecha).
normalized ratio (INR), 0.9; tiempo parcial de tromboplastina
(TTP), 24.5 s; tiempo de protrombina (TP), 16.3 s; VIH, negati-
vo, y albúmina, 3.8 g/dl. Evacuaciones con frecuencia de 2-3/
día, sin moco y acompañado de hematoquecia. Consultó en un
hospital regional, donde concluyen que presenta colitis eosi-
nofílica, por lo que recibe tratamiento con ácido 5 aminosalicí-
licos (5-ASA,) con mejoría parcial; sin embargo, por persistir
con hematoquecia decide acudir a nuestra consulta.
Exploración física
Signos vitales en rangos normales. A nivel de abdomen se
observan heridas quirúrgicas antiguas, cadenas ganglionares
axilares y resto asignológico.
Abordaje y tratamiento
Hasta un 70% de las histoplasmosis diseminadas tienen
manifestaciones gastrointestinales. Las lesiones endoscópicas
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pueden ser úlceras y masas polipoideas de predominio ileoce-
cal, causando dificultad en el diagnóstico diferencial de la
enfermedad inf lamatoria intestinal. Existen varias modalida-
des para llevar a cabo el diagnóstico, aunque en este caso se
obtuvo por histopatología con tinción de PAS. Para su manejo
multidisciplinario se interconsultó a los servicios de Infecto-
logía, Inmunología y Neumología. Se inició manejo con anfo-
tericina B por la gravedad de la enfermedad y posteriormente
se continuó con itraconazol. En el seguimiento meses después
al tratamiento, el paciente mostró mejoría clínica, endoscópi-
ca e histológica.
CRÉDITOS Y AGRADECIMIENTO
Figura 24. Tomografía computarizada de tórax: se observan ganglios axilares y pectorales (IMÁGENES)
de predominio izquierdo de hasta 10 mm de diámetro, así como una masa hipodensa que A Moisés Salamanca (Departamento de Patología, Centro
se extiende sobre el borde lateral de la costilla izquierda compuesta por múltiples Médico Nacional 20 de Noviembre, ISSSTE), Julita Orozco
imágenes ovoideas de hasta 20 mm de diámetro; se aprecia imagen hipodensa ovoidea (Departamento de Radiología e Imagen, Centro Médico Nacio-
con bordes lobulados en espacio intercostal izquierdo, que se extienden hacia los tejidos nal 20 de Noviembre, ISSSTE) y Ariel Waller (Departamento
blandos periféricos extratorácicos y la región intratorácica comprimiendo el borde plural de Endoscopia, Centro Médico Nacional 20 de Noviembre,
y el parenquimatoso pulmonar adyacente (flecha) ISSSTE).
Capítulo 2
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inflamatoria intestinal (colitis ulcerosa crónica
inespecífica y enfermedad de Crohn)
Francisco Álvarez-López y Marcos M. Bocaletti-García
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Heces con sangre/día <4 ≥4 ≥6
Endoscopia Normal Eritema, patrón vascular Eritema marcado, sin patrón Sangrado extenso y
disminuido vascular ulceración
Friabilidad leve Erosiones
Rectorragia
Aumento de la frecuencia de las evacuaciones
Sospecha Disminución en la consistencia de las heces
clínica de CU Síntomas
crónica Urgencia y tenesmo. Moco rectal
idiopática Manifestaciones extraintestinales
Puntaje Truelove-Witts
o SCCAI
Considerar
ingreso según
severidad > 8 evacuaciones al
Notificación a cirugía/ coloproctología de
día, rectorragia,
requerir manejo quirúrgico
megacolon tóxio
Figura 1. SCCAI: índice de actividad clínica simple; CMV: citomegalovirus; AINE: antiinflamatorio no esteroideo; ELISA: enzimoinmunoanálisis de absorción.
Algoritmo diagnóstico de la enfermedad inflamatoria intestinal (colitis ulcerosa crónica inespecífica y enfermedad de Crohn) 13
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Sospecha Manifestaciones extraintestinales
clínica de
enfermedad
de Crohn Ileítis incidental
notada durante Notificación del cirujano
cirugía
Historia clínica
completa
Médico internista/ Pérdida de peso, ulceración oral y/o estomatitis,
gastroenterólogo eritema nudoso o pioderma gangrenoso, artritis,
fístula perianal y fisura anal
Evaluación
completa
Intervención de nutrición y hematología por
Médico especialista anemia, y de reumatología por manifestaciones
extraintestinales
Puntaje de CDAI
Considerar
ingreso según Signos clínicos de
severidad severidad (fiebre,
dolor abdominal,
anemia severa)
La actividad clínica de la EC se divide en remisión, leve, Se han desarrollado múltiples sistemas de puntaje endoscópi-
moderada y severa. Se utiliza el índice de actividad de la EC co, aunque los más utilizados son el puntaje endoscópico de seve-
(CDAI), considerando remisión < 150, leve entre 150 y 220, ridad para EC (CDEIS) y el puntaje endoscópico simple para EC
moderada entre 220 y 450, y severa > 450 puntos. La respuesta (SES-CD). Debido a su menor complejidad, este último se utiliza
al tratamiento es cuando existe una disminución de > 100 pun- más17,18. La videocápsula es útil en el diagnóstico de la EC del in-
tos14. La resonancia magnética (RM) ha mostrado ser una he- testino delgado en pacientes con alta sospecha de la enfermedad.
rramienta adecuada para evaluar la actividad, extensión y com- Los que presentan síntomas obstructivos deben ser sometidos a
plicaciones de la EC. Los datos a evaluar son: engrosamiento de estudios de imagen y se les ha de realizar cápsula de permeabilidad
la pared, edema mural, úlceras, fístulas y otros signos perien- para disminuir el riesgo de retención10. La enteroscopia se puede
téricos de inf lamación (signo del peine, estratificación grasa, realizar en manos expertas si se requiere el diagnóstico histológico
crecimiento ganglionar). En 2009 se desarrolló el puntaje de o cuando esté indicada la terapia endoscópica (dilatación de este-
actividad por RM (MaRIA), el cual ha sido validado15,16. nosis, remoción de cápsula impactada y tratamiento de sangrado)13.
14 SECCIÓN 1 Gastroenterología y coloproctología
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Capítulo 3
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complicada (megacolon tóxico)
y complicaciones de la enfermedad
de Crohn (penetrante y fistulizante)
Rubén Pérez Fernández y Ignacio Marín-Jiménez
COLITIS ULCEROSA COMPLICADA CON [PMN]), junto a elevación de reactantes de fase aguda (RFA) (fi-
MEGACOLON TÓXICO brinógeno [FB], 760; proteína C reactiva [PCR], 24.7; velocidad de
sedimentación globular [VSG], 33) y procalcitonina. Se realiza
Ficha de identificación rectoscopia urgente, que muestra múltiples lesiones ulceradas y
friables desde el margen anal, con afectación continua de una
Mujer de 33 años y nacionalidad española. Exfumadora de mucosa edematosa con pérdida de patrón vascular sugestivo de
20 cigarrillos/día hasta hace 3 años (índice paquete-año [IPA] colitis ulcerosa (CU) con extensión pancólica. Se toman biopsias,
5 paquetes/año), sin otros hábitos tóxicos. Ocupación: reparti- que muestran infiltrado linfocitario y de células plasmáticas en
dora/comercial. la lámina propia, con disminución de glándulas en la mucosa y
presencia de aisladas criptitis, compatibles con una enfermedad
inflamatoria intestinal (EII) de tipo CU. Se realizan varios copro-
Antecedentes personales cultivos y detecciones rápidas de toxina de C. difficile, que resul-
No alergias medicamentosas conocidas (NAMC). No facto- tan positivos en una determinación, coincidiendo con la positi-
res de riesgo cardiovascular (FRCV). Pielonefritis aguda (2002). vización en una muestra de biopsia rectal, por lo que se inicia
Síndrome de ovario poliquístico. Tratamiento: anticonceptivos tratamiento con antibioterapia (vancomicina + metronidazol).
orales (ACO) desde hace un año. Dada la falta de mejoría del cuadro, se realizan radiografías ab-
dominales y una ecografía abdominal, que muestra engrosamien-
to de las paredes colónicas junto a dilatación del mismo, con el
Enfermedad actual desarrollo de toxemia sistémica (inestabilidad hemodinámica),
por lo que la paciente es trasladada a la Unidad de Agudos para
Cuadro de dos meses de evolución de dolor abdominal de tipo monitorización y tratamiento de su megacolon tóxico. A modo de
cólico e intensidad moderada, sin claro desencadenante, con au- resumen, en las figuras 1-5 y en la tabla 1 se muestra la evolución
mento del número de deposiciones (hasta tres al día sin productos del cuadro clínico en forma de pruebas complementarias.
patológicos y algunas nocturnas), que es manejado con antibiote-
rapia empírica por su médico de Atención Primaria. Empeora-
miento en la última semana, cuando desarrolla un cuadro de Diagnóstico
dolor abdominal más intenso, continuo, con hasta 10 deposiciones
al día, todas con sangre, tenesmo rectal y pérdida de 4 kg de peso. — Brote grave de CU corticorrefractaria con megacolon
No presentó fiebre ni manifestaciones extraintestinales. tóxico.
— Desnutrición proteica secundaria.
— Anemia grave multifactorial.
Exploración física
Tensión arterial (TA), 113/70; frecuencia cardíaca FC, Tratamiento y abordaje multidisciplinario
100 lpm; temperatura, 36.5 ºC. Consciente, orientada, colabora-
dora y afebril. Eupneica. Cabeza y cuello sin alteraciones. Piel El megacolon tóxico es una entidad caracterizada por el
sin lesiones evidentes. Auscultación cardíaca (AC): ruidos rít- desarrollo de una dilatación colónica no obstructiva (> 6 cm),
micos sin soplos. Auscultación pulmonar (AP): murmullo vesi- junto al desarrollo de toxemia sistémica durante un episodio de
colitis activa1. Una de sus causas más frecuentes es la EII, es-
cular conservado (MVC) sin ruidos sobreañadidos. Abdomen:
tando presente en el 10% de los ingresos de pacientes con CU
ruidos hidro-aéreos (RHA) disminuidos y normales, blando,
en algunas series2. Uno de los factores más importantes que
depresible y doloroso en fosa ilíaca derecha (FID) con Blumberg
contribuyen a su desarrollo es la extensión de la inf lamación
dudoso, sin palpación de masas o megalias. Miembros inferiores
más allá de la submucosa, a nivel de la muscular y la serosa,
(MMII) sin edemas ni signos de trombosis venosa profunda
que, junto con la migración leucocitaria y liberación de media-
(TVP). Tacto rectal: hemorroides no trombosadas, leve dolor y
dores, producen dismotilidad y con ello dilatación 3. El desarro-
dedil manchado con escasa cantidad de sangre.
llo de megacolon tóxico supone una situación con una mortali-
dad intrahospitalaria elevada y que requiere de un manejo
Pruebas complementarias multidisciplinar junto a una monitorización estrecha (Tabla 2)1.
El cuadro clínico grave, con compromiso vital de la pacien-
En la analítica realizada en el momento del ingreso destaca te, precisó de un abordaje conjunto de varias especialidades
la presencia de trombocitosis (359,000 plaquetas) con leucocitosis médicas y quirúrgicas. En primer lugar, es indispensable la
y desviación izquierda (17,000 leucos con 81% polimorfonucleares realización de pruebas de imagen por parte de radiología, que
15
16 SECCIÓN 1 Gastroenterología y coloproctología
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Críticos, con desarrollo de megacolon; tercera columna: analítica
previa al alta)
Ingreso Agudos Alta
Figura 3. Radiografía de abdomen con contraste. Se objetiva marcada dilatación (> 6 cm)
del colon transverso, con signos de afectación sistémica e inestabilidad hemodinámica,
compatible con megacolon tóxico.
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ENFERMEDAD DE CROHN
FISTULIZANTE-PENETRANTE
Ficha de identificación
Varón de 43 años y nacionalidad española. Sin hábitos tó-
xicos. Ocupación: profesional sanitario.
Antecedentes personales
Alérgico a las sulfamidas. Familiar de primer grado (padre)
con enfermedad de Crohn (EC). Obesidad. Sarcoidosis pulmonar.
Diverticulitis aguda no complicada. EC de tres años de evolución
con afectación ileocólica fistulizante, sin enfermedad perianal
(A2L2B3). Dado el patrón fistulizante, se inicia tratamiento con
anti-inhibidor de factor de necrosis tumoral (TNF-α) (adalimu-
mab 40 mg subcutáneo (sc.) cada 14 días), que es necesario inten-
sificar por pérdida de repuesta secundaria (40 mg SC cada 7 días).
Figura 5. Radiografía de abdomen simple. Control posterior radiográfico, previo al alta, Al año de evolución, en un intervalo de 6 meses, desarrolla dos
que muestra resolución del cuadro. brotes graves con formación de colecciones intraabdominales y
fístulas enteroentéricas, manejadas de forma conservadora con
ciclos de antibioterapia y tratamiento esteroideo, ya que tras va-
aporta información vital a la hora de tomar decisiones terapéu- loración por cirugía, a pesar de su carácter recurrente, no se
ticas concretas. En este marco, además, se precisa del manejo descartaba un posible origen en un cuadro de diverticulitis aguda.
conjunto con cirugía general, dado que el último escalón de
tratamiento de este cuadro es la colectomía total. El contacto
directo con microbiología y otros servicios centrales también es Enfermedad actual
de alta importancia, debido a que es imprescindible confirmar Tras la resolución clínico-radiológica del último brote gra-
o descartar sobreinfecciones añadidas. No es infrecuente pre- ve, se suspende el tratamiento con adalimumab por pérdida de
cisar la valoración por parte del Servicio de Reumatología por
segunda respuesta pese a intensificación, realizando inducción
presencia de cuadros de dolor articular, muchas veces como
con ustekinumab en pauta habitual y en concomitancia con
manifestación extraintestinal de la enfermedad.
ciclo de tratamiento esteroideo. Actualmente ha conseguido
disminuir la dosis de prednisona a 10 mg/día con estabilidad
Seguimiento de la paciente clínica y analítica, a la espera de confirmación radiológica.
Tabla 2. Criterios clínicos para el diagnóstico de megacolon tóxico descritos inicialmente por Jalan, et al. en 1969 4
Síntomas/Signos sugestivos Criterios clínicos (cualquiera de los 3) Al menos uno de los siguientes Criterio radiológico
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Diarrea con sangre Temperatura ≥ 38.6 ºC Deshidratación Dilatación del colon ascendente
o transverso > 6 cm
Estreñimiento FC > 120 lpm Hipotensión
Fiebre
Adaptado de Woodhouse3.
Figura 7. Tomografía computarizada abdominopélvica. En FII se identifica estenosis de Figura 9. Tomografía computarizada abdominopélvica. Se identifica a nivel de FII
sigma inflamatoria, junto a colección con gas en el interior. persistencia de colección inflamatoria.
Figura 8. Tomografía computarizada abdominopélvica. Trayecto fistuloso entre colección Figura 10. Ecografía intestinal (sonda lineal). Se objetiva engrosamiento mural en sigma
y asa ileal. (> 10 mm) en un segmento largo.
Colitis ulcerosa crónica inespecífica complicada (megacolon tóxico) y complicaciones de la enfermedad de Crohn (penetrante y fistulizante) 19
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Figura 11. Tomografía computarizada
abdominopélvica. En ambos cortes de la
tomografía computarizada se identifican al
menos dos trayectos fistulosos ileocólicos.
Tabla 3. Resumen de la evolución analítica a lo largo del curso de multidisciplinar desde el primer momento, con la necesidad de
la enfermedad hasta la actualidad un estrecho contacto con anatomía patológica para poder orien-
tar el diagnóstico. Durante el control evolutivo posterior, espe-
1.er brote grave 2.º brote grave Actualidad
cialmente durante el desarrollo de los brotes graves, fue crucial
Hemoglobina (g/dl) 17.0 (50% Htco) 14.3 (47.4% Htco) 15.2 el contacto con el Servicio de Radiología. Además, la valoración
Plaquetas (10^3/microL) 367 313 310 conjunta realizada con el Servicio de Cirugía a la hora de ma-
nejar las complicaciones intraabdominales de la enfermedad
Leucocitos (10^3/microL) 27.60 21.05 15.10
(colección en FII) permite abarcar al paciente desde una pers-
Fórmula leucocitaria Neu. 86.7% Neu. 83.2% Neu. 80.1% pectiva integral y acordar la mejor estrategia terapéutica.
Fibrinógeno (mg/dl) 554 507 363
Proteínas (g/dl) 6 6.8 6.8
Plan de seguimiento
PCR (mg/dl) 12.9 3.2 0.9
Tras comenzar la inducción con ustekinumab intravenoso,
Procalcitonina 0.05 0.17 Neg.
previa actualización de estudio prebiológico, se ha solicitado al
Calprotectina 927 - 120 paciente una ecografía intestinal de control, realizando segui-
Htco: hematocrito. miento en consulta para monitorización de la enfermedad y
control del tratamiento.
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José Alberto Romero Lozanía y Tania Santamaría Rodela
Tratamiento de la CU
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Tratamiento de inducción Tratamiento de mantenimiento
Colitis Colitis
Proctitis
izquierda extensa
Leve-moderada
Truelove & W.
¿Refractaria? Recaída
Moderada-severa
Truelove & W.
Hidrocortisona IV
Prednisona 40-60 mg/día × 7-10 días, 100 mg/6-8 h o AZA 2-2.4 mg/kg al día o
desescalar en 8-12 semanas metilprednisolona IV 6-MP 1-1.5 mg/kg al día
60 mg/día
¿Refractaria? Recaída
Ciclosporina IV
Hidrocortisona IV 100 mg/6-8 h o Infliximab,adalimumab, golimumab
2 mg/kg al día o
Metilprednisolona IV 60 mg/día o vedolizumab
infliximab 5 mg/kg
¿Refractaria? Recaída
Tratamiento de mantenimiento de la colitis presente recurrencia, o que presente una recaída en los pri-
ulcerosa meros 3 meses después de descontinuar el esteroide5), así
como para aquéllos que fueron inducidos con ciclosporina o
La elección del tratamiento de mantenimiento se determi- tacrolimus 3.
na por la extensión de la enfermedad, el curso de ésta (frecuen- La terapia antifactor de necrosis tumoral (TNF) (inf lixi-
cia e intensidad de los brotes), falla y eventos adversos de tra- mab, adalimumab y golimumab) puede utilizarse en el mante-
tamientos de mantenimiento previos, severidad de los brotes nimiento de la remisión conseguida con terapia anti-TNF, com-
recientes, tratamiento usado para inducir la remisión, seguri- binado con tiopurinas, de preferencia al usar inf liximab1,3.
dad del tratamiento y prevención de cáncer (Fig. 1). La terapia con vedolizumab (antiintegrina a4b7) se reco-
La mesalazina es el tratamiento de mantenimiento de pri- mienda en los pacientes que fueron inducidos mediante vedo-
mera línea en aquellos pacientes en que se realizó inducción lizumab o que han perdido la respuesta al anti-TNF.
con ella o esteroide oral/rectal. La dosis oral efectiva para Las indicaciones electivas de tratamiento quirúrgico son
mantener la remisión es de 2 g/día1,3,5, mientras que la dosis la refractariedad o reacciones adversas al tratamiento médico,
efectiva rectal es de 3 g/semana divididos en varias dosis3. la presencia de displasia o cáncer y la falta de desarrollo físi-
Las tiopurinas (azatioprina [AZA] 2-2.5 mg/kg al día o co en los niños. El procedimiento de elección es la proctoco-
6-mercaptopurina [6-MP] 1-1.5 mg/kg al día) se recomiendan lectomía restauradora con reservorio ileoanal en J o ileosoto-
para los pacientes con actividad de la enfermedad leve-mode- mía definitiva en caso de no ser candidato al procedimiento
rada que han experimentado recaída temprana (síntomas de
de elección 5.
actividad de la enfermedad en un periodo < 3 meses después
de lograr la remisión clínica1) o frecuente (≥ 2 recaídas/año1)
mientras se encontraban tomando mesalazina a dosis óptima ENFERMEDAD DE CROHN
o para aquéllos que son intolerantes a mesalazina 3. También
se recomienda para los pacientes dependientes de esteroide De igual manera, la estrategia de tratamiento médico para
(incapaz de reducir prednisona por debajo de 10 mg/día den- la EC se divide en dos: tratamiento de inducción a la remisión
tro de los primeros 3 meses de recibir esteroide, sin que se y tratamiento para el mantenimiento de la remisión 3.
Enfermedad inflamatoria intestinal 23
Tratamiento de la EC
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Tratamiento de inducción Tratamiento de mantenimiento
Recaída
CDAI
¿Refractaria?
¿Refractaria?
Tratamiento de la enfermedad de Crohn tamiento médico y quirúrgico1,10. Dentro del tratamiento médi-
activa co se considera inf liximab como de primera elección (adalimu-
mab se recomienda débilmente), aunado a la administración de
El tratamiento de inducción a la remisión se basa princi- antibióticos8. El papel de los inmunomoduladores no está claro,
palmente en la distribución (ileal, cólica, ileocólica, gastroin- pues mientras que las guías del American College of Gastroente-
testinal alta), extensión (localizada o extensa) gravedad, patrón rology y la Pan American Crohn’s and Colitis Organisation men-
de enfermedad y comportamiento (inf lamatorio, fibroesteno- cionan que deben considerarse para el tratamiento de las fístu-
sante, fistulizante)7. las perianales en combinación con anti-TNF1,9, en la guías de
El tratamiento de primera elección de la EC activa leve- la European Crohn’s and Colitis Organisation se menciona que no
moderada limitada a íleo y/o colon ascendente es budesonida es posible recomendar agregar inmunomodulador a la terapia
MMX 9 mg/día1,8,9. anti-TNF, dado que la evidencia es insuficiente8. Tampoco exis-
El uso de corticoides sistémicos orales (mismo esquema te evidencia para el tratamiento de la fístula perianal compleja
que en la CU) se recomienda como tratamiento de primera lí- en EC mediante ustekinumab o vedolizumab1,8.
nea para la inducción a la remisión en los pacientes con EC Dentro de las opciones quirúrgicas para el tratamiento de la
activa moderada-severa, mientras que los anti-TNF (inf liximab, fístula perianal se encuentra la colocación de setones, avance de
adalimumab y certolizumab pegol) generalmente se recomien- colgajos, pegamento de fibrina y algunas técnicas innovadoras,
dan en los pacientes que no responden a la terapia convencional como el ligado del tracto de las fístulas interesfintéricas y el tra-
con esteroides; sin embargo, también se pueden utilizar como tamiento basado en células madre derivadas de tejido adiposo10.
primera línea. Cuando la inducción se realice mediante inf li- En caso de enfermedad perianal refractaria a terapia mé-
ximab, se recomienda administrar concomitantemente tiopuri- dica o quirúrgica, ésta puede controlarse mediante estoma de
na. Si a pesar del uso de anti-TNF no se obtiene una respuesta derivación10.
adecuada, se recomienda el uso de ustekinumab (antiinterleu- Otras intervenciones quirúrgicas que frecuentemente se
cina 12/23) o vedolizumab8,9. Estos dos últimos también pueden realizan durante la evolución natural de la EC son la esteno-
utilizarse como primera o segunda línea. plastia, resección ileocecal, colectomía segmentaria o total1,9 y
En el escenario de EC severa o fulminante se prefiere el drenaje de abscesos10.
uso de esteroide vía IV, aunque también puede considerarse el En cuanto al uso de ácido-5 aminosalicilatos (5-ASA), sólo
uso de anti-TNF, en particular inf liximab en el caso de EC ful- hay evidencia para el uso de sulfasalazina en el tratamiento
minante, de igual manera concomitantemente con inmunomo- de inducción en casos de EC leve-moderada con afección coló-
dulador8. nica, mientras que ciclosporina, micofenolato de mofetilo y
La inducción a la remisión de una fístula perianal en la EC tacrolimus no deben utilizarse en la inducción a la remisión
se recomienda llevarla a cabo mediante la combinación de tra- de la EC9.
24 SECCIÓN 1 Gastroenterología y coloproctología
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3. Harbord M, Eliakim R, Bettenworth D, Katsanos K, Kopylov U, Kucharzik T,
en los pacientes dependientes de esteroide, se recomienda el et al. Third European Evidence-based Consensus on Diagnosis and Manage-
uso de tiopurinas (AZA 1.5-2.5 mg/kg al día o 6-MP 0.75-1.5 mg/ ment of Ulcerative Colitis. Part 2: Current Management. Journal of Crohn’s
kg al día) o metotrexato hasta 25 mg intramuscular o subcutá- and Colitis. 2017;11(7):769-84.
4. Ho GT, Mowat C, GCJR, Fennell JM, Shah NB, Prescott RJ, et al. Predicting
neo (recomendación débil)1,8 (Fig. 2). the outcome of severe ulcerative colitis: development of a novel risk score
Cuando la inducción a la remisión se logró mediante anti- to aid early selection of patients for second-line medical therapy or surgery.
Aliment Pharmacol Ther. 2004;19(10):1079-87.
TNF, vedolizumab o ustekinumab, el tratamiento de manteni- 5. Yamamoto-Furusho JK, Gutiérrez-Grobe Y, López-Gómez JG, Bosques-Padilla
miento debe continuarse con el mismo agente biológico8,9. En F, Rocha-Ramírez JL. Consenso mexicano para el diagnóstico y tratamietno de
caso de usar anti-TNF (en especial inf liximab) como tratamien- la colitis ulcerosa crónica idiopática. Rev Gastroenterol Mex. 2018;83(2):144-67.
6. Travis S, Satsangi J, LM. Predicting the need for colectomy in severe ulce-
to de mantenimiento, debe considerarse combinarse con inmu- rative colitis: a critical appraisal of clinical parameters and currently avai-
nomodulador (AZA, 6-MP, metotrexato) para evitar la pérdida lable biomarkers. Gut. 2010;60(1):3-9.
de respuesta debido a la inmunogenicidad9. 7. Feldman M, Friedman-S L, Brandt LJ. Sleisenger and Foordtran’s: Gastroin-
testinal and liver disease, 10.ª ed. Filadelfia: Elsevier; 2016.
El papel de los 5-ASA en el mantenimiento de la remisión 8. Torres J, Bonovas S, Doherty G, Kucharzik T, Gisbert JP, Raine T, et al. ECCO
es nulo, dado que han no han demostrado ser eficaces9. Guidelines on Therapeutics in Crohn’s Disease: medical treatment. Journal
of Crohn’s and Colitis. 2020;14(1):4-22.
9. Lichtenstein GR, Loftus EV, Isaacs KL, Regueiro MD, Gerson LB, Sands BE.
ACG Clinical Guideline: Management of Crohn’s Disease in Adults. Am J
BIBLIOGRAFÍA Gastroenterol. 2018;113(4):481-517.
10. Adamina M, Bonovas S, Raine T, Spinelli A, Warusavitarne J, Armuzzi A, et
1. Yamamoto-Furusho JK, Bosques-Padilla F, de-Paula J, Galiano MT, Ibañez P, al. ECCO Guidelines on Therapeutics in Crohn’s Disease: Surgical Treatment.
Juliao F, et al. Diagnóstico y tratamiento de la enfermedad inflamatoria in- J Crohns Colitis. 2020;14(2):155-68.
testinal: Primer Consenso Latinoamericano de la Pan American Crohn’s and 11. Truelove SC, Witts LJ. Cortisone in Ulcerative Colitis. Br Med J. 1955;2(4947):
Colitis Organisation. Rev Gastroenterol Mex. 2017;82(1):46-84. 1041-8.
Capítulo 5
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a enfermedad hepatobiliar
Francisca Martínez Silva, Rocío Guadalupe Vargas Ángeles y Daniel Torres Rubi
DIAGNÓSTICO
ANTECEDENTES
En el desarrollo y evolución del proceso diagnóstico se
Sin antecedentes familiares a destacar. realizaron los paraclínicos enunciados a continuación, desta-
De los antecedentes personales destacan: colitis ulcerosa cando que en el caso de los paraclínicos endoscópicos éstos son
crónica inespecífica (CUCI) desde 2004 con afectación panco- además terapéuticos, por lo que se refieren en dicho apartado.
lónica y tratamiento con mesalazina 1.5 g y azatioprina 50 mg
cada 24 h. Durante el diagnóstico se detectó también elevación
de las enzimas hepáticas de colestasis, por lo que en su estan- BIOQUÍMICO (LABORATORIO)
cia en el Servicio de Pediatría se le realizó biopsia hepática, la
Como parte del protocolo de estudio, se realizaron estudios
cual no fue concluyente. En vigilancia a cargo de gastroente-
especiales (Tabla 1). Existe patrón bioquímico con alteración de
rología de adultos a partir del año 2015, con diagnóstico de las pruebas de función hepática con predominio de colestasis,
CUCI Montreal A1, E3 con patrón frecuente de recaída en con aumento claro de fosfatasa alcalina (FA) y γ-glutamil trans-
manejo con mesalazina 1.5 g/día oral y azatioprina (ponderada peptidasa (GGT) (Tabla 2).
2 mg/kg 45 kg) 100 mg/día. En el año 2016 se corroboró por
histología infección por citomegalovirus, por lo que recibió
valganciclovir 900 mg/día por 25 días. Desde su ingreso en RADIOLÓGICOS
nuestro servicio, la paciente mantiene un patrón frecuente de
recaída por CUCI, con cuadros leves-moderados que ceden con Ultrasonido hepatobiliar
el manejo convencional. Actualmente en control clínico de la
Incremento difuso de la ecogenicidad; a la aplicación de
CUCI con las dosis mencionadas de mesalazina y azatioprina.
angio-Doppler, perfusión intrahepática conservada y estructu-
Anemia crónica multifactorial desde 2015 de características ras vasculares permeables; datos de hipertensión portal mani-
ferropénicas en tratamiento concomitante con hierro oral y en festada por esplenomegalia y vena porta de 14 mm, sin hepato-
control. Hepatopatía con colestasis intrahepática de causa no patía restrictiva del f lujo al Doppler (Fig. 1).
determinada, para la que se inició manejo con ácido ursodeoxi-
cólico 250 mg ponderado (15 mg/kg al día) a razón de 750 mg/
día, aunque en el año 2018 se agregó bezafibrato 400 mg por Tomografía trifásica hepática
día en 2 dosis por falta de respuesta. Hemotransfusiones en
diversas ocasiones: en 2004 por primera vez y en 2016 la última. Hígado con crecimiento del lóbulo hepático izquierdo con
Apendicectomía en 2016. alteraciones en el árbol biliar, con dilatación de la vía biliar in-
tracompatible con colangitis esclerosante primaria (CEP) (Fig. 2).
PADECIMIENTO ACTUAL
Colangiorresonancia magnética
Desde finales de 2018 con agravamiento de la colestasis y
Vía biliar con estrechamiento segmentario con dilatación de
sin ninguna respuesta al manejo instaurado, con prurito oca-
los conductos biliares intrahepáticos distales, de aspecto de árbol
sional como único síntoma, por lo que se inició estudio para
podado de predominio en lóbulo izquierdo, con crecimiento de
determinar la causa y normalizar la conducta. éste más allá de la línea media. El resto de la vía biliar, con
cambios compatibles con CEP con estenosis dominante (Fig. 3).
EXPLORACIÓN FÍSICA
Peso, 43 kg; talla, 1.55 m; tensión arterial (TA) 100/60 HISTOPATOLÓGICO
mmHg; frecuencia cardíaca (FC) 68 lpm; FR, 18 respiraciones/m;
Biopsia hepática
temperatura, 36 ºC. Paciente endomórfica, con palidez mucote-
gumentaria +/+++, hidratada. Sin compromiso cardiopulmo- Cambios de regeneración de los hepatocitos con binuclea-
nar al momento, con abdomen plano blando y depresible sin ción, balonización e infiltrado inf lamatorio moderado de
25
26 SECCIÓN 1 Gastroenterología y coloproctología
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TORCH: (toxoplasma, rubeola, citomegalovirus, herpes) Memoria inmunológica IgG para rubeola, herpes tipo 1 y citomegalovirus
15 U/l 26 U/l 475 U/l 308 U/l 0.4 mg/dl 3.1 g/dl 13 s
Figura 2. Tomografía trifásica que deja evidente la dilatación de la vía biliar intrahepática.
Figura 1. Ultrasonido Doppler con datos de hepatopatía crónica con hipertensión portal
secundaria.
TRATAMIENTO Y ABORDAJE
MULTIDISCIPLINARIO
Es importante mencionar que, al sospecharse CEP con
afectación en la función hepática y daño crónico sin respuesta Figura 3. Colangiorresonancia con dilatación y estrechamientos de la vía biliar.
al tratamiento convencional, así como datos sugestivos de hi-
pertensión portal, la paciente fue derivada simultáneamente al
Servicio de Trasplante Hepático para ser considerada para que estenosis dominante de rama intrahepática derecha con reali-
iniciara protocolo pertinente. zación de esfinterotomía satisfactoria, dilatación y colocación
El diagnóstico se realizó basándose en los aspectos bioquí- de endoprótesis plástica de 10 cm × 5 Fr (Figs. 4-6). En este
mico-radiológicos, por lo que, al detectarse la estenosis y dado procedimiento se realizó cepillado de la vía biliar, que reportó
que la colestasis no mejoró con el manejo médico, se decidió células columnares con cambios reactivos asociados a inf lama-
comentar y manejar conjuntamente el caso con el Servicio de ción acentuada, negativo a células neoplásicas. Se realizaron
Endoscopia de la unidad para valorar la estenosis y normalizar en total cinco procedimientos terapéuticos, con recambio pro-
la conducta terapéutica. La paciente fue programada para gresivo de las endoprótesis hasta considerar rehabilitada la
CPRE inicial, la cual evidenció hallazgos sugestivos de CEP, estenosis (Fig. 7).
Enfermedad inflamatoria intestinal asociada a enfermedad hepatobiliar 27
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Figura 6. Imagen radiológica final del estado de la endoprótesis.
Figura 5. Imagen endoscópica de la endoprótesis en la vía biliar. Figura 7. Imagen de CPRE que muestra la estenosis rehabilitada.
19 U/l 23 U/l 190 U/l 130 U/l 0.60 mg/dl 3.2 g/dl 15 s
SEGUIMIENTO
En este caso, la paciente presenta 16 años de evolución con
enfermedad inf lamatoria intestinal (EII) de tipo CUCI, con la vía biliar al inicio. Fue posible realizar diagnóstico y manejo
colestasis intrahepática al año del debut de la EII. La evolución con respuesta favorable a las dilataciones por parte del Servicio
de la enfermedad hepatobiliar se trata de una variante de la de Endoscopia, y destacar finalmente que esto incluso permitió
CEP con afectación inicial de pequeños conductos, por lo que que saliera, al menos por ahora, del protocolo de trasplante
la colestasis se mantuvo asintomática y sin grandes cambios de dada la mejoría significativa al manejo endoscópico.
28 SECCIÓN 1 Gastroenterología y coloproctología
Es importante no dejar de lado el escrutinio sugerido por han tenido alguna alteración de las pruebas de función hepática
las guías con colonoscopia de forma anual, estudios de imagen en el curso de la enfermedad, y deben considerarse en orden
hepatobiliar de forma semestral, tomografía computarizada y/o las siguientes situaciones: CEP, daño hepático inducido por fár-
colangiorresonancia anual. Así como solicitar marcadores tu- macos y enfermedad hepática independiente; de éstas, la más
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morales, específicamente α-fetoproteína, Ca 19-9 y antígeno frecuente en nuestro medio es el hígado graso no alcohólico2.
carcinoembrionario. La CEP es la enfermedad hepática más específica para los pa-
Dado que ya fue derivada y captada por el Servicio de cientes con EII; principalmente en varones afectados con colitis
Trasplante Hepático, la paciente es valorada de forma semestral ulcerosa representa una entidad potencialmente mortal. Se sabe
por dicho servicio, a pesar de la mejoría clínica y radiológica. que su curso es independiente del de la EII y tiene un impacto
Respecto a la EII, se encuentra clínicamente inactiva, bio- significativo en la calidad de vida, morbilidad y mortalidad de
químicamente con actividad leve, por colonoscopia con datos estos pacientes1,2. Es importante considerar que el tratamiento
de actividad leve que se corrobora en la histología, por lo que médico no reduce el tiempo de trasplante hepático, el riesgo de
colangiocarcinoma o la muerte3, por lo que es necesario un se-
se ha considerado progresión de la terapia a un biológico, sobre
guimiento continuo en los pacientes con mayor riesgo. El tras-
el cual se está discutiendo en el momento actual.
plante hepático es la única terapia que puede curar la CEP3.
COMENTARIO BIBLIOGRAFÍA
Hasta el 50% de los pacientes con EII experimentan una 1. Harbord M, Annese V, Vavricka SR. ECCO Guideline. J Crohn´s Colitis.
manifestación extraintestinal (MEI) en algún momento de la 2016;20:239-54.
2. Vavricka SR, Schoepfer A, Schari M. Extraintestinal Manifestations of In-
enfermedad, cuya probabilidad aumenta con la duración de la f lammatory Bowel Disease. Inf lamm Bowel Dis. 2015;21(8):1982-92.
enfermedad y cuando hay otras manifestaciones extraintestina- 3. Restellini S, Chazouilléres, Frossard JL. Increased cholestatic enzymes in
two patients with long-term history of ulcerative colitis: consider primary
les. Las MEI tienen un impacto adverso en la calidad de vida de biliary cholangitis not always primary sclerosing cholangitis. Liver Interna-
los pacientes1. Se sabe que hasta el 30% de los pacientes con EII tional. 2016;37:475-89.
Capítulo 6
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con indicación quirúrgica
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Leucocitos (µl) 14,540 7,790 7,200
Conteo diferencial
A B
Figura 1. Imágenes obtenidas en el
ingreso hospitalario de la paciente en las
que se observa engrosamiento de los
segmentos del colon. En la imagen coronal
(A), se muestra engrosamiento en colon
sigmoides con marcado edema
pericolónico y líquido libre en corredera
parietocólica y hueco pélvico. Tras la
administración de material de contraste
intravenoso en el corte axial (B), se
muestra un engrosamiento persistente, sin
mostrar cambios en los ganglios linfáticos
locorregionales.
A B
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Figura 2. Colonoscopia en las primeras 24 h de la admisión, la cual reveló colitis activa severa, caracterizada por engrosamiento de la mucosa en el colon ascendente con úlceras
profundas (A), así como eritema, friabilidad y edema sangrado espontáneo (B).
A B C
Figura 3. A: vista panorámica de mucosa colónica con extenso infiltrado inflamatorio y distorsión arquitectural de las criptas. B: «pantalonamiento» de las criptas de la mucosa colónica
con extenso infiltrado inflamatorio agudo de la lámina propia, congestión vascular y hemorragia reciente. C: abscesos crípticos constituidos por presencia de infiltrado inflamatorio agudo
dentro de las criptas dilatadas.
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inflamatoria intestinal
A B
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Figura 1. A: radiografía de manos post-amputación.
B: fotografía de manos post-amputación.
A B C
A B
A B C
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Figura 5. A: colon transverso proximal.
B: colon descendente. C: ángulo esplénico.
A B
ras superficiales e infiltrado linfoplasmocitario, compatible
con datos de Crohn».
Por parte de nuestro servicio la paciente se encuentra en
vigilancia clínica, bioquímica y endoscópica de la enfermedad
inf lamatoria a nivel intestinal. En su momento se contempló y
solicitó el uso de terapia biológica por factores de mal pronós-
tico, como afectación colónica, fenotipo estenosante y antece-
dente de cirugía por enfermedad de Crohn (hemicolectomía
C D izquierda); sin embargo, por no encontrarse con datos de acti-
vidad clínica o endoscópica moderada-grave y por el costo ele-
vado de la terapia, la institución no autorizó dicha terapia, por
lo que la paciente se mantiene sólo con metotrexato, indicado
por Reumatología, para la artritis reumatoide, motivo por el que
seguirá en vigilancia.
COMENTARIOS FINALES
Consideramos hacer algunas ref lexiones finales como re-
Figura 6. A: recto con cambios inflamatorios leves. B: anastomosis en la que se observa troalimentación del presente caso:
grapa de titanio. C: transverso sin lesiones endoscópicas. D: íleon terminal sin lesiones — La paciente cursa con artritis reumatoide seropositiva
endoscópicas. desde los 30 años de edad, motivo por el que nunca se
consideró la posibilidad de artropatía asociada a EII,
pasando 15 años entre ambos diagnósticos, tiempo du-
rante el cual la paciente recibió en repetidas ocasiones
en ángulo esplénico con estenosis diafragmática que permite antiinf lamatorios no esteroideos durante las agudiza-
el paso del endoscopio (Fig. 5 C)». ciones de su enfermedad articular, lo que contribuyó
Se procede a realizar una hemicolectomía izquierda ex- potencialmente a la progresión de la actividad inf lama-
tendida (incluyendo el tercio distal del transverso, ángulo toria intestinal, en ese entonces «subclínica».
esplénico, descendente y sigmoides), con una colorrectoanas- — En el momento de su ingreso en urgencias de nuestra
tomosis término-terminal mecánica con grapadora circular unidad, con un cuadro de diarrea mucosanguinolenta,
de 29 mm (transverso a recto superior), sin complicaciones en el interrogatorio dirigido la paciente refirió cuadros
transoperatorias aparentes. La paciente presenta una evolu- repetidos con dicha sintomatología, siendo en este mo-
ción posquirúrgica favorable, por lo que al quinto día es egre- mento cuando se sospecha la posibilidad de EII (y no
sada a su domicilio. El reporte histopatológico concluyó «en- gastroenteritis infecciosa), por lo que es ingresada para
fermedad de Crohn con actividad moderada y fibrosis de su protocolo de estudio.
pared; benigno». — Durante el primer internamiento en nuestra unidad, se
Desde entonces y hasta la fecha la paciente se ha mante- corrobora el diagnóstico de EII con colonoscopia y biop-
nido en vigilancia clínica, bioquímica, endoscópica e histopa- sias, siendo manejada en la Consulta Externa de Gas-
tológica de su enfermedad por nuestro servicio, sin datos de troenterología con monoterapia a base de mesalazina;
actividad inf lamatoria a nivel intestinal, y ya han pasado tres sin embargo, dado que la paciente cursó mínimamente
años de la hemicolectomía descrita previamente. Refiere dos sintomática y sin elevación de marcadores inf lamato-
evacuaciones al día, formadas, sin moco ni sangre, niega dolor rios (velocidad de sedimentación globular [VSG] y pro-
abdominal, fiebre o pérdida de peso, refiere artralgias (dolor teína C reactiva [PCR]) durante tres años no se contem-
leve en tobillos y dedos de las manos); abdomen con cicatrices pló la colonoscopia de control con toma de biopsias, ni
quirúrgicas, blando, no doloroso y sin masas palpables. Se mucho menos escalar la terapia farmacológica. Recor-
encuentra en tratamiento con metotrexato a dosis de 15 mg demos que en la colonoscopia inicial las lesiones eran
por semana indicado por Reumatología. Sus datos de laborato- principalmente de tipo inf lamatorio y no se documentó
rio de control son: hemoglobina, 14.9 g/dl; hematocrito, 47.9%; estenosis, e incluso se llegó al ciego, por lo que consi-
leucocitos, 6,700; plaquetas, 416,000; glucosa, 125 mg/dl; crea- deramos que debió realizarse colonoscopia de control a
tinina, 0.79 mg/dl; velocidad de sedimentación globular, los 3-6 meses de haber iniciado el tratamiento e inde-
15 mm/h, y proteína C reactiva, 0.60. En su última colonosco- pendientemente del estado clínico y bioquímico de la
pia, se observan datos de actividad inf lamatoria leve en el paciente. Recordemos que no necesariamente existe
recto (Fig. 6 A), anastomosis a 18 cm del margen anal total- correlación clínica, endoscópica e histológica en esta
mente permeable (Fig. 6 B), colon transverso (Fig. 6 C), ascen- enfermedad. De haberse documentado actividad mode-
dente e íleon terminal (Fig. 6 D) sin lesiones endoscópicas. El rada-grave, el escalamiento de la terapia médica habría
reporte histopatológico concluye lo siguiente: «biopsias de podido, al menos potencialmente, retrasar o incluso
íleon sin alteraciones histológicas, biopsias de recto con úlce- evitar la cirugía en esta paciente.
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2
SECCIÓN
Reumatología
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Capítulo 8
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Fedra Irazoque-Palazuelos y Sandra Muñoz-López
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PCR 14.9 mg/l
BUN 15 mg/dl
Glucosa 80 mg/dl
Triglicéridos 226 mg/dl Figura 2. RMI en secuencia T1, donde se puede observar la hiperintensidad del borde
Bilirrubina total 0.89 mg/dl anterosuperior del cuerpo de L1, con sindesmofitos en T1-T2, T2-T3 y T3-T4.
Neutrófilos 3.34 miles/mm3 84.4%. Estos criterios tienen como punto de partida el dolor
Linfocitos 3.62 miles/mm3 lumbar mayor a tres meses de evolución y la edad de inicio
menor a los 45 años; posteriormente se dividen en dos ejes: uno
Hemoglobina 18.6 g/dl de ellos con evidencia por imagen de sacroilitis y el segundo
Volumen corpuscular medio 95.3 fT con la presencia del antígeno leucocitario humano B27 (HLA-
B27)2 (Fig. 3).
Plaquetas 260 miles/mm3 Antes del desarrollo de estos criterios, la realización del
Velocidad de sedimentación globular 60 mm/h diagnóstico de EA dependía de las manifestaciones clínicas y
los cambios radiográficos, los cuales ofrecían una sensibilidad
HLA-B27 Positivo del 66.2% y una especificidad del 97.3%. Sin embargo, estos
cambios descritos (Tabla 3 y Fig. 4) requieren mucho tiempo
de evolución para evidenciarse en las radiografías, cerca de
A 8-10 años, y su identificación es tardía para poder modificar
la evolución de la enfermedad. La identificación de cambios
tempranos mediante la RM ha permitido inf luir en el trata-
miento temprano y, en consecuencia, en la progresión de la
enfermedad 3,4.
Como se ha mencionado antes, la RM ha conseguido cam-
biar la evolución de la enfermedad, y la realización temprana
de este estudio es de suma importancia para ofrecer una nue-
va oportunidad a los pacientes. La resonancia debe solicitarse
con ciertas características, las cuales permiten una mejor eva-
luación de esta articulación: RM semicoronal con orientación
respecto al eje longitudinal del hueso sacro, idealmente con
cortes de 4 mm, con las secuencias T1, T2 con supresión grasa
y STIR. Además, la secuencia T1 contrastada con gadolinio
B
(Gd) permite diferenciar las lesiones agudas con mayor exac-
titud (Tabla 4).
Las distintas lesiones que podemos observar en la RM
pueden hablarnos de la evolución de la enfermedad; principal-
mente las lesiones agudas traducen una inf lamación aguda de
la enfermedad, y el edema óseo u osteítis es la lesión caracte-
rística de enfermedad activa, además de la capsulitis, la sino-
vitis y la entesitis; todas ellas se observan como lesiones hi-
perintensas en la secuencia T1. Es de suma importancia el
conocimiento de las estructuras anatómicas de esta región
para poder identificar cuándo se trata de un sitio de inf lama-
Figura 1. A: RMI STIR de la columna sacra, donde se observa hiperintensidad en la
ción ligamentaria, así como el trayecto sinovial y las cápsulas
porción superior de la articulación sacroilíaca derecha y una disminución del espacio
que se encuentran en esta articulación.
articular en relación con la contralateral. B: RMI T1, donde se observan
Las lesiones activas suelen estar limitadas al hueso sacroi-
hiperintensidades heterogéneas periarticulares, que traducen una sustitución grasa. líaco o a la articulación y no cruzan estos límites anatómicos;
otras enfermedades podrían semejar estos cambios y deberán
descartarse. Los vasos sanguíneos en la periferia de los liga-
En el año 2010, la ASAS realizó una actualización de sus mentos pueden dar falsos negativos al ofrecer imágenes pare-
criterios, los cuales cumplen fines de estudios clínicos e inves- cidas a una inf lamación aguda. Por ello, se ha determinado que
tigación, y no deben utilizarse como criterios diagnósticos; para considerar que una lesión es activa debe cumplir con los
cuentan con una sensibilidad del 82.7% y una especificidad del siguientes criterios: si se trata de una sola lesión, debe estar
Espondiloartritis axial. Espondilitis anquilosante 41
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Edad de desarrollo < 40 años Rigidez matutina > 30 min Edad de presentación < 40 años
Duración del dolor > 3 meses Mejoría con el ejercicio, no con el reposo Inicio insidioso
Inicio insidioso Despertar nocturno por dolor Mejoría con el ejercicio
Rigidez matutina Dolor glúteo alternante No mejora con el reposo
Mejoría con la movilización Dolor nocturno (mejora al levantarse)
C D
Figura 3. Criterios ASAS de EA. Se muestran los dos ejes principales para la inclusión de
pacientes y considerar el diagnóstico de EA (adaptado de la Biblioteca de ASAS Slide
Library).
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Figura 5. Maniobra de Schober.
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Figura 8. Maniobra de rotación cervical.
cual ha mostrado un efecto benéfico en la movilidad, la progre- 5. Van der Heijde D, Ramiro S, Landewé R, Baraliakos X, Van den Bosch F,
Sepriano A, et al. 2016 update of the ASAS-EULAR management recommen-
sión radiográfica y el dolor inf lamatorio. dations for axial spondyloarthritis. Ann Rheum Dis. 2017;76:978-91.
La mejor evidencia y con mejores resultados la han mos- 6. Molnar C, Scherer A, Baraliakos X, de Hooge M, Micheroli R, Exer P, et al.
trado los inhibidores del TNF, que incluyen adalimumab, goli- TNF blockers inhibit spinal radiographic progression in ankylosing spond-
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mumab, inf liximab y etanercept; han mostrado una mejoría en ylitis by reducing disease activity: results from the Swiss Clinical Quality
Management cohort. Ann Rheum Dis. 2018;77(1):63-9.
el dolor, la funcionalidad y la inf lamación, tanto clínica como 7. Weisman MH. Inf lammatory back pain: the United States perspective.
en la RM8,10. Rheum Dis Clin North Am. 2012;38:501.
8. Vander Cruyssen B, Muñoz-Gomariz E, Font P, Mulero J, de Vlam K, Boonen
A, et al. Hip involvement in ankylosing spondylitis: epidemiology and risk
factors associated with hip replacement surgery. Rheumatology (Oxford).
BIBLIOGRAFÍA 2010;49:73.
9. Stolwijk C, Essers I, van Tubergen A, Boonen A, Bazelier MT, De Bruin ML,
1. Van der Heijde D, Ramiro S, Landewé R, Baraliakos X, Van den Bosch F, et al. The epidemiology of extra-articular manifestations in ankylosing spon-
Sepriano A, et al. Rheumatology. 7.a edición. Filadelfia: Elsevier; 2018.
dylitis: a population-based matched cohort study. Ann Rheum Dis.
2. Sieper J, Rudwaleit M, Baralaikos X, Brandt J, Burgos R. The assessment of
2015;74:1373.
Spondyloarthritis international society (ASAS) handbook: a guide to assess
spondyloarthritis. Ann Rheum Dis. 2009;68(Suppl II). 10. Sieper J, Hu X, Black CM, Grootscholten K, van den Broek RWM, Kachroo S.
3. Machado PM, Landewé R, Heijde DV; Assessment of SpondyloArthritis inter- Systematic review of clinical, humanistic, and economic outcome compari-
national Society (ASAS). Ankylosing Spondylitis Disease Activity Score (AS- sons between radiographic and non-radiographic axial spondyloarthritis.
DAS): 2018 update of the nomenclature for disease activity states. Ann Semin Arthritis Rheum. 2017;46:746.
Rheum Dis. 2018;77(10):1539-40. 11. Eriksson JK, Jacobsson L, Bengtsson K, Askling J. Is ankylosing spondylitis
4. Zhu W, He X, Cheng K, Zhang L, Chen D, Wang X, et al. Ankylosing spond- a risk factor for cardiovascular disease, and how do these risks compare with
ylitis: etiology, pathogenesis and treatments. Bone Res. 2019;7:22. those in rheumatoid arthritis. Ann Rheum Dis. 2017;76:364.
Capítulo 9
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Fedra Irazoque-Palazuelos y Sandra Muñoz-López
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PCR 14.4 mg/l
BUN 26 mg/dl
Glucosa 87 mg/dl
HLA-B27 Positivo
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te las comorbilidades metabólicas y cardiovasculares7.
otorga 2 puntos; el resto de las categorías otorgan 1 punto):
El manejo con AINE prácticamente se usa para disminuir
– Evidencia de psoriasis actual, historia personal de psoriasis, historia las manifestaciones musculoesqueléticas. No se recomienda el
familiar de psoriasis en familiares de primer o segundo grado uso de esteroides sistémicos; el uso de forma localizada se li-
– Distrofia ungueal típica de psoriasis mita a la afección monoarticular o entesitis localizada. Los
FARME han mostrado beneficio en las manifestaciones articu-
– Factor reumatoide negativo
lares, entesitis, dactilitis; sin embargo, no se ha demostrado su
– Presencia de dactilitis actual o histórica utilidad en la afección axial ni en la ungueal. El uso de ciclos-
porina ha mostrado una eficacia similar al metotrexato, y la
– Evidencia radiográfica de hueso nuevo yuxtaarticular cerca de márgenes
articulares (periostitis) en las manos o los pies sulfasalazina y la lef lunomida también han mostrado efectos
benéficos.
En la actualidad, el uso de biológicos ha supuesto un cam-
bio considerable en la evolución de la enfermedad. Los inhibi-
También hay que buscar intencionadamente datos de ente- dores del TNF son los más respaldados por la evidencia cientí-
sitis, como dolor en el talón, el codo o la cadera lateral relacio- fica, mejorando la artritis periférica y la calidad de vida, y
nado con la inflamación de la inserción del tendón en el hueso5. disminuyendo la progresión radiográfica. Además, la evidencia
Las lesiones dérmicas de psoriasis son lesiones enrojecidas, también ha mostrado eficacia ante enfermedad ungueal, ente-
inf lamadas, con placas blanquecinas o aperladas, que se cir-
sitis y dactilitis. Se ha aprobado el uso de otras terapias nuevas,
cunscriben en pápulas y placas, comúnmente encontradas en
como anti-IL-12 e IL-23 (ustekinumab), para la psoriasis y la
los codos, rodillas, superficies extensoras de las extremidades
artritis psoriásica. La terapia anti-IL-17 (secukinumab) se ha
y piel cabelluda. No hay que dejar pasar localizaciones como el
escalpe, el pliegue interglúteo, el periné y la región periumbi- aprobado para la artritis psoriásica y la EA.
lical. Y es necesaria la revisión de las uñas, en búsqueda de En cuanto a la mejor forma de evaluar la respuesta al tra-
puntilleo y/o onicólisis6. tamiento en la artritis psoriásica, aún no está definida. En 2009
Las radiografías de manos y pies ayudan a la detección de M. Schoels, et al. publicaron en Annals of Rheumatic Disease la
erosiones y la formación ósea periarticular, la cual es sugestiva aplicación del score DAPSA para valorar la actividad de la en-
de artritis psoriásica. Los cambios clásicos de osteólisis llevan fermedad, tomando en cuenta el compromiso articular perifé-
a artritis mutilans o deformidad en «copa de lápiz», las cuales rico 66/68 articulaciones (inf lamación y dolor), la escala visual
traducen estadios avanzados de la enfermedad. La progresión análoga del dolor, la valoración global de la enfermedad por el
radiográfica es lenta en los estadios tempranos de la enferme- paciente y los niveles de PCR. Otro método para la evaluación
dad. Se suele usar el score de Sharp modificado para evaluar las de la actividad de la enfermedad y la respuesta al tratamiento
erosiones, aunque no fue desarrollado para esta entidad, y tam- es el Índice de Actividad Mínima (MDA), el cual ayuda en la
poco se ha logrado la validación para la artritis psoriásica 5. toma de decisiones y utiliza un esquema de tratamiento por
El uso de ultrasonido Doppler ha mostrado tener buena objetivos (Treat to target). El BASDAI evalúa el dolor axial, la
rentabilidad para la detección de sinovitis subclínica en las fatiga y la rigidez. Y el PASI/NAPSI realiza una valoración de
etapas tempranas de la enfermedad, permitiendo la identifica-
la afectación cutánea/ungueal8-10.
ción de aumento del f lujo sanguíneo en las articulaciones afec-
tadas. Hasta el 96% de las veces se encuentra una afección de
un mayor número de articulaciones que las encontradas clíni-
BIBLIOGRAFÍA
camente, lo que promueve la reclasificación, resultando en
cambios significativos en el pronóstico y el tratamiento. No 1. Hochberg M, Gravallese E, Silman A, Smolen J, Weinblatt M, Weisman M.
Rheumatology. 7.a edición. Filadelfia: Elsevier; 2018.
sería raro que en un futuro el ultrasonido musculoesquelético 2. Gladman DD. Current concepts in psoriatic arthritis. Curr Opin Rheumatol.
formara parte de la evaluación clínica de rutina en la revisión 2002;14:361.
de un paciente reumático. 3. Alinaghi F, Calov M, Kristensen LE, Gladman DD, Coates LC, Jullien D, et
La resonancia magnética también ha contribuido a un ma- al. Prevalence of psoriatic arthritis in patients with psoriasis: A systematic
review and meta-analysis of observational and clinical studies. J Am Acad
yor entendimiento de la enfermedad, pues ha permitido la dife- Dermatol. 2019;80:251.
renciación de la afección en la artritis psoriásica frente a la ar- 4. Mease PJ, Gladman DD, Helliwell P, Khraishi MM, Fuiman J, Bananis E, et
tritis reumatoide; en ésta la afección primordialmente es en las al. Comparative performance of psoriatic arthritis screening tools in patients
with psoriasis in European/North American dermatology clinics. J Am Acad
entesis. No obstante, en la vida real la limitación a la accesibili-
Dermatol. 2014;71:649.
dad de este tipo de estudios ha provocado su poca utilización. 5. Alamanos Y, Voulgari PV, Drosos AA. Incidence and prevalence of psoriatic
Es importante mencionar que los pacientes con artritis arthritis: a systematic review. J Rheumatol. 2008;35:1354.
psoriásica tienen un aumento en la morbilidad y mortalidad 6. Thom N, Ritchlin CT, Zhang X, Reveille J, Weisman MH. Prevalence of chro-
nic axial pain, inf lammatory back pain, and spondyloarthritis in diagnosed
cardiovascular; el riesgo de infarto de miocardio, cardiopatía psoriasis. Arthritis Care Res (Hoboken). 2015;67:829.
isquémica, hipertensión, diabetes y dislipidemia se ve incre- 7. Eder L, Haddad A, Rosen CF, Lee KA, Chandran V, Cook R, et al. The Inci-
mentado en estos pacientes. dence and Risk Factors for Psoriatic Arthritis in Patients With Psoriasis: A
Prospective Cohort Study. Arthritis Rheumatol. 2016;68:915.
El tratamiento de estos pacientes es complicado, debido a los
8. Jadon DR, Sengupta R, Nightingale A, Lindsay M, Korendowych E, Robinson
distintos fenotipos clínicos que pueden encontrarse (artritis pe- G, et al. Axial Disease in Psoriatic Arthritis study: defining the clinical and
riférica, afección dérmica y ungueal, enfermedad axial, dactilitis radiographic phenotype of psoriatic spondyloarthritis. Ann Rheum Dis.
y entesitis), ya que no todos los tratamientos son efectivos para 2017;76:701.
9. Gladman DD, Inman RD, Cook RJ, Maksymowych WP, Braun J, Davis JC, et
todas las manifestaciones clínicas. El tratamiento deberá llevar al. International spondyloarthritis interobserver reliability exercise--the INS-
un seguimiento multidisciplinario, en el que se tome en cuenta PIRE study: II. Assessment of peripheral joints, enthesitis, and dactylitis. J
la afección clínica del paciente, con intervención por parte de Rheumatol. 2007;34:1740.
10. Haroon M, Rafiq Chaudhry AB, Fitzgerald O. Higher Prevalence of Metabolic
Dermatología; el reumatólogo deberá considerar la eficacia, la
Syndrome in Patients with Psoriatic Arthritis: A Comparison with a Control
seguridad y los costos del tratamiento, así como enfocarse en las Group of Noninf lammatory Rheumatologic Conditions. J Rheumatol.
manifestaciones musculoesqueléticas. El objetivo principal del 2016;43:463.
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Capítulo 10
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inespecífica
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Sacroilitis en HLA-B27 y Artritis o entesitis o dactlitis
imagen y ≥ 1 característica o ≥ 2 otras característica y
de EsP de EsP
≥ 1 característica de EsP:
Características de EsP:
• Uveítis
• Dolor lumbar inflamatorio • Psoriasis
• Artritis • Enfermedad de Crohn/colitis ulcerosa
• Entesitis (talón) • Infección previa
• Uveítis • HLA-B27
• Dactilitis • Sacroilitis en imagen
• Psoriasis
• Enfermedad de Crohn/colitis ulcerosa
o
• Buena respuesta a AINE
• Historia familiar de SpA
• HLA-B27 ≥ 2 otras característica de EsP:
• PCR elevada
• Artritis
• Entesitis
• Dactilitis
• DLI (alguna vez)
• Historia familiar de EsP
Figura 2. Criterios ASAS de clasificación para la EsP. Sensibilidad: 78.0%; especificidad: 83.7%; n = 929 (adaptado de Rudwaleit M, et al. Ann Rheum Dis. 2009;68:777-83).
Tabla 2. Tabla 3.
Escala Puntuación Escala Puntuación
Dermatología
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Capítulo 11
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Pioderma Gangrenoso
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Figura 3. Lesiones iniciales. Figura 4. Dermatosis tras cuatro años de tratamiento.
fibrina predominante en la periferia, borde irregular y bien siva por neutrófilos, trombosis y necrosis de vasos de pequeño
definido. En el tercio superior de la pierna izquierda presencia y mediano calibre. Puede presentarse también vasculitis necro-
de exposición ósea y en el dorso del pie izquierdo con exposi- sante, necrosis fibrinoide y leucocitoclasia. Sin embargo, no
ción de tendones. En el estudio histopatológico de biopsia de presenta características histológicas específicas, por lo que el
úlceras se reportó el diagnóstico de PG. Se inició tratamiento diagnóstico constituye un verdadero desafío clínico y general-
con inmunomodulador (talidomida), pero no se observó mejo- mente se realiza por exclusión.
ría, por lo que se escaló manejo con adalimumab (anticuerpo El tratamiento del PG sigue siendo un reto en la práctica
monoclonal anti-TNF), con dosis de impregnación de 80 mg clínica, ya que no existe ningún consenso actual debido a su
subcutáneos seguida de 40 mg semanales como mantenimien- baja incidencia. El objetivo principal es la eliminación com-
to, con lo que se ha controlado la dermatosis (Fig. 4) durante pleta de la actividad inf lamatoria, la curación de la herida y
los últimos tres años. el control del dolor y de las posibles enfermedades asociadas.
La rápida instauración del tratamiento evitará la progresión
de la lesión y disminuirá el riesgo de la aparición de grandes
PIODERMA GANGRENOSO cicatrices.
La terapéutica de primera línea en casos graves son
El PG es una dermatosis inf lamatoria primariamente es- los esteroides sistémicos (0.5-1 mg/kg al día) o pulsos de cor-
téril, ulcerosa e infrecuente, caracterizada por lesiones ulcero- ticoesteroides intravenosos (1,000 mg/día) y ciclosporina
sas recurrentes. Suele iniciarse como una pústula o nódulo (4-5.0 mg/kg al día) o azatioprina (1-2 mg/kg), con los efectos
doloroso que evoluciona a una úlcera de crecimiento rápido y adversos relacionados con la administración de los mismos,
progresivo, con bordes irregulares, violáceos, eritema perile- como la inmunosupresión, que puede favorecer sobreinfec-
sional, fondo con fibrina o necrótico y exudado purulento o ción, principalmente bacteriana, de las úlceras. A pesar de
hemorrágico, que al resolverse dejan zonas de atrofia. Habitual- esto se presenta una alta tasa de respuesta (de dos a cuatro
mente las lesiones son únicas y dolorosas, pero en ocasiones semanas) no curativa, pues previene la progresión de la enfer-
pueden presentarse múltiples. La localización típica es en las medad y detiene la inf lamación, siendo muy importante, ade-
extremidades inferiores (región pretibial), las nalgas, el abdo- más, el tratamiento de la enfermedad concomitante de base
men y la cara. en caso de que exista. Recientemente ha cobrado auge el
El PG puede presentarse en ausencia de enfermedad aso- empleo de inhibidores del factor de necrosis tumoral, que han
ciada o en el contexto de alguna enfermedad sistémica como: sido reportados como efectivos, como se demuestra en los
colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn, hepatitis crónica activa, casos presentados, sin tener recaídas después de tres años de
cirrosis biliar primaria, artritis reumatoide seropositiva, periar- tratamiento. Otras opciones terapéuticas incluyen: talidomida,
tritis simétrica de pequeñas articulaciones seronegativa, síndro- diaminodifenilsulfona, micofenolato de mofetilo y metotrexa-
me antifosfolípido, algunas gammapatías paraproteinémicas, to. El curso de la enfermedad es crónico, con periodos de re-
enfermedades hematopoyéticas malignas, trastornos tiroideos, misiones y exacerbaciones que van de meses a años.
diabetes mellitus tipo 2, síndrome metabólico y, en algunos re-
portes de casos, con lupus eritematoso sistémico.
Su etiopatogenia aún no se define, pero parece originarse BIBLIOGRAFÍA
por la alteración de neutrófilos con disfunción de la inmunidad A hronowitz I, Harp J, Shinkai K. Etiology and management of pyoderma gan-
celular y humoral. grenosum: a comprehensive review. Am J Clin Dermatol. 2012;13:191-211.
Según la manifestación clínica, se puede clasificar en cin- A lavi A, French LE, Davis MD, Brassard A, Kirsner RS. Pyoderma gangrenosum:
An update on pathophysiology, diagnosis and treatment. Am J Clin Dermatol.
co tipos: ulceroso (cerca de 80% de los casos), pustular, ampo- 2017;18:355-72.
lloso, vegetante y periostomal. X ia FD, Liu K, Lockwood S, Butler D, Tsiaras W, Joyce C, et al. Risk of developing
pyoderma gangrenosum after procedures in patients with a known history
En el estudio histopatológico se detectará necrosis y ulce- of pyoderma gangrenosum-A retrospective analysis. J Am Acad Dermatol.
ración, la dermis se mostrará edematosa, con infiltración ma- 2018;78:310.
Capítulo 12
Hidradenitis supurativa
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Sagrario Hierro Orozco y Mónica Elizabeth Vásquez Vásquez
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Figura 3. Dermatosis antes del inicio de
tratamiento con adalimumab.
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Aarón Vázquez Hernández, Diana Durón Vázquez y Katia Hop García
RESUMEN CLÍNICO
Presentamos el caso de un varón de 40 años de edad, ori-
ginario de Ciudad de México y de ocupación cocinero.
Hace seis años presentó incremento en el número de eva-
cuaciones, las cuales de forma gradual se tornaron líquidas y
acompañadas de moco y sangre, pérdida de peso y fiebre. Fue
intervenido quirúrgicamente de colectomía por colon tóxico,
aunque continuó con evacuaciones de características similares
e incremento en el número. Fue valorado por el Servicio de
Cirugía de Colon y Recto, que le diagnosticó colitis ulcerosa
crónica inespecífica tipo pancolónica, por lo que se le indicó
mesalazina, 6-mercaptopurina y prednisona, con lo que obtuvo
una mejoría parcial, aunque requirió ser hospitalizado en diver-
sas ocasiones por anemia ferropénica severa, desequilibrio hi-
droelectrolítico y desnutrición. Un año después se le realizó
resección intestinal tipo ileostomía terminal con estoma abdo-
minal y se le diagnosticó enfermedad de Crohn (EC). Se inició
manejo con el inhibidor de factor de necrosis tumoral a (TNF-a) Figura 2. Placas eritematoescamosas con aspecto psoriasiforme.
inf liximab, con el que se consiguió reducción en la frecuencia
del número de evacuaciones y ausencia de moco y sangre. Cua-
tro semanas después presentó erupción diseminada a piel en
brazos y tronco con prurito intenso, por lo que fue valorado por
el Servicio de Dermatología, que le indicó antihistamínico, ciclo
corto de esteroide tópico y emolientes. De manera simultánea
presentó artralgias inespecíficas, por lo que el Servicio de Reu-
matología indicó manejo con antiinf lamatorios no esteroideos.
Tras la infusión de inf liximab, el paciente presentaba exacer-
bación de lesiones cutáneas, prurito y dolor articular, cada vez
de mayor severidad. Fue valorado por el Servicio de Alergología,
que sugirió suspender inf liximab. Dos meses después, se inicia
adalimumab 40 mg cada 14 días, con reducción del gasto de
Figura 1. Pápulas y placas eritematoescamosas en tronco anterior. Figura 3. Placas eritematoescamosas en muslo.
57
58 SECCIÓN 3 Dermatología
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Figura 4. Biopsia de piel que muestra acantosis e infiltrado linfocítico superficial.
Figura 5. Biopsia de piel que muestra acantosis con infiltrado inflamatorio por linfocitos.
Figura 6. Biopsia de piel que muestra acantosis, espongiosis y exocitosis. Figura 8. Aclaramiento de las lesiones con tratamiento con metotrexato.
Descartar infecciones
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Referir a Dermatología para valoración y biopsia
Considerar
Suspender
otra
anti-TNF
alternativa
Tratar la psoriasis:
– Esteroide tópico
– Análogo de vitamina D
Tratar la psoriasis:
Tratar la psoriasis:
– Tratamiento tópico
– Esteroide tópico – Metotrexato
– Análogo de vitamina D – Ciclosporina
– Acitretina
Psoriasis Psoriasis
refractaria: refractaria:
considerar cambio considerar cambio
de anti-TNF o de anti-TNF o
discontinuarlo discontinuarlo
Figura 9. Aclaramiento de las lesiones en muslo derecho. Figura 10. Algoritmo para el tratamiento de la psoriasis inducida por anti-TNF-a1.
En una revisión sistemática del año 2010, que incluyó a 207 El tratamiento para las formas leves, es decir, con afección
pacientes con psoriasis inducida por anti-TNF-a, el 43% de los menor del 5% de la superficie corporal, es con análogos de vi-
casos tenían artritis reumatoide, el 26% espondiloartropatía tamina D y esteroides tópicos, mientras que para las formas
seronegativa y el 20% enfermedad inf lamatoria intestinal (EII), más severas consta de metotrexato, ciclosporina o luz ultravio-
de los cuales el 59% había recibido inf liximab, el 22% adalimu- leta A. El tratamiento anti-TNF-a debe suspenderse si no existe
mab y el 19% etanercept. En el 65% de los casos se presentó en mejoría o en las formas graves (eritrodermia y pustulosis gene-
mujeres y la edad promedio fue de 44.9 años2. ralizada). En más del 70% de los casos no fue necesario suspen-
En pacientes con EII, 10 (3.7%) de 270 pacientes tratados der el tratamiento2-5.
con anti-TNF-a desarrollaron psoriasis o reacción psoriasifor- En todos los casos de reacción psoriasiforme inducida por
me, 6 eran mujeres, 5 habían recibido inf liximab y 5 adalimu- anti-TNF-a es esencial la participación del dermatólogo, para des-
mab, y 9 pacientes tuvieron EC. El tiempo promedio de inicio cartar otras causas agravantes de la psoriasis, como infecciones
de las lesiones cutáneas fue de 7.5 (± 6.4) semanas después de (como estafilococo y VIH, entre otras), medicamentos (litio, clo-
haber iniciado el tratamiento con anti-TNF-a. Sólo en 3 pacien- roquina) en sujetos genéticamente predispuestos y realizar biop-
tes fue necesario discontinuar el tratamiento3. sia de piel1, además de seleccionar el tratamiento de acuerdo a la
Existen tres patrones de reacción psoriasiforme inducidas severidad de la psoriasis, con la finalidad de permitir al paciente
por anti-TNF-a: a) inducción de una erupción psoriasiforme con continuar su tratamiento anti-TNF-a.
hallazgos sugestivos de una reacción medicamentosa, histológi-
camente con patrón de interfase (que para muchos autores no
es realmente psoriasis); b) exacerbación de psoriasis preexis- BIBLIOGRAFÍA
tente con o sin cambios en su presentación clínica, y c) induc- 1. Callamer AN, Guerrero KT, Henning JS, Battafarano DF. Psoriatic Skin Lesion
ción de psoriasis en un paciente que no presentaba previamen- Induced by Tumor Necrosis Factor Antagonist Therapy: A literature Review
and Potencial Mechanisms of Action. Arthritis Rheum. 2008;59(7):996-1001.
te la enfermedad4. 2. Collamer AN, Battafarano DF. Psoriatic Skin Lesions induced by tumor Ne-
La histología de las lesiones de la reacción psoriasiforme crosis Factor Antagonist Therapy: Clinical Features and Possible Immuno-
pathogenesis. Semin Arthritis Rheum. 2010;40:233-40.
muestra hallazgos típicos de psoriasis: hiperplasia epidérmica, 3. Peer F, Miller A, Pavli P, Subramaniam K. Paradoxical psoriasiform reactions
paraqueratosis, infiltrado linfocítico epidérmico, capilares dila- of anti-tumour necrosis factor therapy in inf lammatory bowel disease pa-
tients. Internal Medicine J. 2017;47:1445-8.
tados y pústulas intraepidérmicas. Sin embargo, también pue- 4. Santos-Juanes L, Galache C. Reacciones cutáneas psoriasiformes durante el
den semejar reacciones pustulosas por medicamentos y ecce- tratamiento con etanercept. Actas Dermasifiliogr. 2010;101(Supl 1):106-10.
mas con espongiosis y exocitosis con linfocitos maduros1,3. 5. Fania L, Morelli M, Scarponi C, Mercurio L, Scopelliti F, Cattani C et al.
Paradoxical Psoriasis induced by TNF-α blockade shows immunological fea-
La patogénesis propuesta es una sobreproducción de inter- tures typical of the early phase of psoriasis development. J Pathol Clinical
ferón α e interferón b por células dendríticas como consecuen- Res. 2020;6(1):55-68.
6. Sondermann W, Herz S, Sody E, Köober A. Dermatological complications of
cia del bloqueo de TNF-a en individuos genéticamente predis- therapy with biologics in inflammatory antoimmune disease. J Dtsch Dermatol
puestos1,5,6. Ges. 2019;17(10):1029-37.
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4
SECCIÓN
Oftalmología
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Capítulo 14
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(parsplanitis)
Luis Porfirio Orozco Gómez, Sara Isabel Plazola Hernández y Mario Andrade Lozano
CASO CLÍNICO DE ESCLERITIS Entre las enfermedades sistémicas más comunes se en-
cuentran las de origen autoinmune, enlistadas en la tabla 2.
Ficha de identificación Los estudios de laboratorio utilizados para el abordaje
diagnóstico de la escleritis se encuentran en la tabla 3. El ul-
Nombre: G. G. L. Edad: 52 años. Mujer, de nacionalidad
trasonido puede ser útil para la localización del nódulo en los
mexicana, de ocupación secretaria, sin antecedentes crónicos
casos de escleritis posteriores y el signo de la T es caracterís-
degenerativos ni quirúrgicos de importancia.
tico (Fig. 1 D).
Acudió por referir desde hacía tres meses el ojo derecho
El tratamiento se basa en disminuir el proceso inf lamato-
(OD) rojo, con inf lamación palpebral superior, lagrimeo, dolor
rio con antinf lamatorios no esteroideos (AINE), dentro de los
a los movimientos oculares y fotofobia; presentaba el ojo iz-
cuales la indometacina a dosis de 75 mg cada 12 h, según se ha
quierdo (OI) asintomático. Tratada con fosfato de prednisolona
encontrado, es efectiva en las escleritis no necrotizantes (se
durante un mes con un esquema de dosis reducción, no presen-
puede extender el tratamiento hasta seis meses)2.
tó mejoría. En el interrogatorio dirigido, la paciente refirió
Como adyuvantes al tratamiento, y usados en colirios of-
síntomas reumáticos, resaltando el dolor articular.
talmológicos, se encuentran la ciclosporina A y el tacrolimus
En la exploración oftalmológica, se encontró una capacidad
tópico al 0.02%.
visual (CV) de 20/20 en ambos ojos (AO) con la cartilla de Sne-
En casos severos, se puede recurrir a los esteroides sisté-
llen. Pupilas con ref lejo fotomotor y consensual sin alteracio-
micos, entre los administrados por vía oral, como la prednisona
nes. Estrabograma en ortoposición en la posición primaria de
en una dosis de 1 mg/kg de peso con un esquema de dosis re-
la mirada y movimientos oculares sin limitaciones ni incomi-
ducción semanal. Se ha descrito el uso de aplicaciones de este-
tancias. En el segmento anterior del OD se encontró la conjun-
roide ocular o subconjuntival, cuando la vía oral se encuentra
tiva moderadamente hiperémica, vasos tortuosos y violáceos
contraindicada.
profundos en el cuadrante nasal inferior y superior (Fig. 1 A),
En cuanto a la ciclofosfamida, metrotexato, la azatioprina,
fondos de saco formados sin secreciones, córnea transparente
la cliclosporina y el micofenolato de mofetilo, se describen como
que no teñía con f luoresceína, cámara anterior formada de
fármacos modificadores de la enfermedad sistémica de base, por
grado III de Van Herick, iris normal, no rubeosis, cristalino
lo que deben utilizarse cuando se cuenta con un diagnóstico
transparente; el OI no presentaba alteraciones.
clínico y bioquímico de una enfermedad sistémica asociada2-4.
Respecto al fondo de ojo de AO: vítreo claro, papila redon-
Actualmente el uso de terapias inmunológicas con anti-
da con bordes definidos de coloración anaranjada, excavación
cuerpos dirigidos a las moléculas proinf lamatorias como el
de la papila 0.3/0.3, emergencia vascular central, trayectos vas-
TNF-α representa una revolución en el tratamiento del cuadro
culares normales, relación arteria-vena 2:3, mácula contrastada
agudo de las manifestaciones sistémicas (en este caso oculares)
y retina aplicada.
Se le indicó indometacina 75 mg cada 12 h y acetato de de una enfermedad autoinmune.
prednisolona cada 3 h con reducción semanal. Se obtuvo una Adalimumab en inyecciones precargadas de 40 mg (adultos)
mejoría a las tres semanas de tratamiento. de uso subcutáneo cada dos semanas, ha demostrado ser una te-
Se le realizaron estudios complementarios de laboratorio rapia rápida y eficaz para el alivio del cuadro clínico de la uveítis,
para descartar el origen reumatológico: perfil de vasculitis, per- por lo que podría ser una posibilidad terapéutica para cualquier
fil de lupus y perfil de artritis reumatoide; se encontraron resul- proceso inflamatorio ocular de tipo no infeccioso, como lo es la
tados negativos para el posible origen del padecimiento actual. escleritis.
El diagnóstico clínico correspondió a una escleritis anterior Es importante sospechar una enfermedad sistémica agre-
difusa del OD, según la clasificación de las escleritis no infec- gada en pacientes que presentan escleritis, debido a su alto
ciosas de Watson y Hayreh (Tabla 1). Es una enfermedad que porcentaje de comorbilidad; por ende, se deberá realizar un
suele presentarse comúnmente en las mujeres durante la cuar- abordaje multidisciplinario en conjunto con el Servicio de Reu-
ta-sexta década de la vida, con una relación 1.6:1 con respecto matología para el adecuado manejo de control de la enfermedad
a los hombres. Su presentación bilateral puede llegar a ser de base, y no sólo tratar los síntomas oculares5,6.
hasta del 52%1.
En la escleritis, el paciente tiene un riesgo del 25-50% de
presentar una enfermedad sistémica asociada, que en el 77.6% CASO CLÍNICO DE IRITIS
de los casos ya se encuentra diagnosticada con anterioridad y Ficha de identificación
es del conocimiento del paciente; en otro 14% es diagnosticada
en el momento de presentar las manifestaciones oculares, y Nombre: S. L. A. Edad: 59 años. Hombre de nacionalidad
finalmente en el 8.4% de los casos es diagnosticada durante el mexicana, de ocupación profesor, con antecedentes crónicos
seguimiento del paciente con escleritis1 (Fig. 1 C). degenerativos de espondilitis anquilosante (EA) desde 1962, la
63
64 SECCIÓN 4 Oftalmología
A B
Sin contar con el consentimiento previo por escrito del editor, no podrá reproducirse ni fotocopiarse ninguna parte de esta publicación. © Permanyer 2020
C D
Figura 1. A: área difusa escleral con los
característicos vasos epiesclerales y
esclerales tortuosos de color violáceo.
B: misma área difusa de la imagen A tras
5 min de aplicación de fenilefrina; se
observa una disminución del calibre de
los vasos epiesclerales, pero permanece
la tortuosidad de los vasos esclerales.
C: nódulo escleral con hiperemia y
tortuosidad vascular. D: ecografía modo
B de globo ocular donde se aprecia el
signo de la "T".
Tabla 1. Clasificación no infecciosa de la escleritis (Watson y Hayreh) Tabla 3. Estudios de laboratorio comúnmente utilizados en
enfermedades sistémicas asociadas a la escleritis
Anterior Difusa
Anticuerpos anticitoplasma de neutrófilos
Nodular
Anticuerpos antinucleares
Necrotizante con inflamación
Biometría hemática
Necrotizante sin inflamación
Velocidad de sedimentación globular
Posterior
Complejos inmunes circulantes
Enfermedad de Behecet cual le condicionó una rigidez crónica a nivel lumbar (Figs. 2
A y 2 C), enfermedad tratada por el Servicio de Reumatología
Síndrome de Churg-Strauss con medicamentos sistémicos AINE de tipo celecoxib.
Acudió por primera vez al Servicio de Oftalmología el día 26
Síndrome de Cogan
de enero de 2006 por presentar un dolor intenso en el OD y fo-
Enfermedad de Takayasu tofobia, así como una disminución de la agudeza visual en AO.
Su CV en el OD era de 20/25 y en el OI, de 20/60 con la cartilla
Esclerodermia
de Snellen. La presión intraocular (PIO) era de 15 mmHg en el
Epiescleritis, iritis y uveítis intermedia (parsplanitis) 65
A B C
Sin contar con el consentimiento previo por escrito del editor, no podrá reproducirse ni fotocopiarse ninguna parte de esta publicación. © Permanyer 2020
D E
Figura 2. A: imagen radiológica de anquilosis de articulación sacroilíaca, vista anterioposterior. B: celularidad en la cámara anterior (Tyndall positivo) C: imagen radiológica de anquilosis
de columna lumbosacra, vista anterioposterior y lateral. D: hiperemia conjuntival, depósitos retroqueráticos finos con pigmento en la cápsula anterior del cristalino. E: membrana
inflamatoria pupilar.
OD y 13 mmHg en el OI. En el segmento anterior del OD se fía de coherencia óptica (OCT) retiniana, que evidenció quistes
evidenció lo siguiente: hiperemia conjuntival, depósitos retroque- foveolares. Por tal motivo requirió un manejo con dexametaso-
ráticos finos (Fig. 2 D), celularidad en la cámara anterior (Tyn- na de liberación prolongada de aplicación paraocular, la cual
dall positivo) (Fig. 2 B), membrana inflamatoria pupilar (Fig. 2 resolvió la inf lamación macular.
E) y pigmento en la cápsula anterior del cristalino (Fig. 2 D), así La iritis se presenta como una inflamación del iris súbita e
como facoesclerosis; en el OI no se encontraron alteraciones. incapacitante, con una sintomatología ocular temporal como
Debido a los datos clínicos y antecedentes personales patológicos fotofobia, baja visión y dolor ocular; generalmente es de expre-
del paciente, se realizó el diagnóstico de uveítis anterior no gra- sión monocular, aunque puede alternar los ojos en sus recaídas.
nulomatosa y se inició un tratamiento con prednisolona tópica En la exploración física oftalmológica se pueden presentar signos
y colirio de tropicamida-fenilefrina (T-P solución oftálmica). generales inflamatorios como inyección ciliar, precipitados re-
En la revisión realizada dos semanas después, el 10 de ene- troqueráticos finos, humor acuoso, carga proteica de aspecto fi-
ro de 2006, presentó una mejoría con ausencia de actividad. La brinoide en la cámara anterior e hipotensión ocular por la infla-
CV del OD era de 20/25 y la del OI, de 20/50. La presión intrao- mación del cuerpo ciliar. Es notoria la tendencia monocular8.
cular era de 14 mmHg en el OD y 14 mmHg en el OI. En el
segmento anterior de AO se apreciaba una queratopatía punteada
superficial con tinción de fluoresceína, así como una disminu- Uveítis anteriores relacionadas con el
ción del tiempo de ruptura lagrimal en 4 s y un menisco lagrimal antígeno leucocitario humano B27 positivo
disminuido; no se observaron datos inflamatorios oculares, sólo
facoesclerosis en el OD. Se continuó con el tratamiento para el La positividad de este antígeno de histocompatibilidad se
síndrome del ojo seco con lubricantes oculares en gotas y gel. considera un marcador genético que detona susceptibilidad de
El paciente presentó varias recurrencias de la uveítis ante- sufrir enfermedades articulares para desarrollar una espondi-
rior, las cuales fueron manejadas con medicamentos tópicos, y loartropatía (SpA) y la posibilidad de inflamación ocular (uveí-
hubo una remisión de la inf lamación. tis). Las afecciones sistémicas relacionadas más frecuentemente
En enero de 2007, empezaron los síntomas de diminución son la EA, la artritis idiopática juvenil, la artritis reactiva (sín-
de la agudeza visual y metamorfopsias en el OI. Bajo midriasis drome de Reiter), la artritis psoriásica y la enfermedad intestinal
farmacológica se encontraron en el fondo de ojo datos sugesti- inflamatoria crónica (colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn).
vos de edema macular (EM), por lo que se realizó un estudio Los pacientes con uveítis y antígeno leucocitario humano
de f luorangiografía retiniana (Figs. 3 A y B), que confirmó el B27 (HLA-B27) positivo pueden desarrollar manifestaciones sis-
edema macular cistoideo (EMC), corroborado con una tomogra- témicas en el 30-90% de los casos, o bien el 20-30% de los indi-
66 SECCIÓN 4 Oftalmología
A B
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Figura 3. A: fotografía de fondo de ojo a color donde se observa pérdida de reflejo foveolar macular. B: fluorangiografía retiniana donde se observa la evolución en distintos tiempos del
estudio, conformándose la imagen en pétalos de flor, típicos del edema macular cistoideo.
viduos con EA o artritis reactiva desarrollarán en algún mo- mientras se carezca de un programa obligatorio de vigilancia
mento uveítis9. permanente en esta entidad, bajo un enfoque multidisciplina-
La segunda enfermedad vinculada con mayor frecuencia rio, en lugar de un manejo de consultorio10-12.
con la SpA es la artritis reactiva, originalmente descrita como
síndrome de Reiter, con la tríada típica de uretritis no gonocó-
cica, artritis y conjuntivitis, aunque se acompaña también de CASO CLÍNICO DE UVEÍTIS INTERMEDIA O
úlceras bucales, inf lamación de tendones muy dolorosa e inca- PARSPLANITIS
pacitante (conocida como entesitis), eritema nodoso, trombosis
venosa y pericarditis, entre otros. Existe una relación con la Ficha de identificación
iritis o iridociclitis hasta en el 10% de los casos. Habitualmente
Nombre: G. G. A. Edad: 11 años. Hombre de nacionalidad
la presentación es monocular e incluso recidivante si no se
mexicana, de ocupación estudiante; niega antecedentes de im-
tratan de forma simultánea las infecciones adjuntas, como Kle-
portancia.
bsiella, Salmonella o Chlamydia trachomatis, dado que está de-
Acudió por primera vez a la consulta oftalmológica el 8 de
mostrado cierto patrón de semejanza antigénica («mimetismo»)
febrero de 2013 con dolor, ardor, ojo rojo y visión de cuerpos
de alguno de los microorganismos patógenos descritos, lo cual
flotantes en AO. Su CV en el OD era de 20/60 y en el OI, de
perpetúa el estímulo antigénico y la posibilidad de recidivas.
20/25 con la cartilla de Snellen. En el segmento anterior de AO
presentaba fondos de saco formados sin secreción, con la con-
juntiva ligeramente hiperémica, córnea con queratopatía en ban-
Uveítis relacionada con artropatía
da, cámara anterior formada, no celularidad, iris con sinequias
Desde hace más de un siglo está documentada la artritis posteriores, pupila central redonda y refléctica, cristalino del
reumatoide idiopática, no siempre relacionada con HLA-B27. OD con una catarata C4 N2 (Lens Opacities Clasification System
Con anterioridad se identificó como artritis crónica juvenil o III [LOCS III]); cristalino del OI transparente; fondo de ojo bajo
artritis reumatoide juvenil, a condición de que la presentación midriasis medicamentosa y oftalmoscopio indirecto: OD vítreo
de la artritis fuera antes de los 16 años y con una duración de turbio con bancos de nieve en el vítreo anterior, OI vítreo claro,
al menos seis semanas. En la actualidad se reconocen siete papila redonda de color normocrómica, bordes bien definidos,
formas de presentación, entre ellas las formas oligoarticulares excavación 0.3, emergencia vascular central, trayectos vascula-
o pauciarticulares, que no comprometen más de cuatro articu- res sin alteraciones, depósitos en copo y bancos de nieve en la
laciones y son las que tienen uveítis con mayor frecuencia, retina inferior con área de tracción, relación arteria-vena 2:3,
mientras que en las formas sistémicas no se presenta. Esta contrastada, mácula contrastada y retina aplicada (Fig. 4 A).
evidencia ayuda a definir los tiempos en los programas de vi- Se realizó un ultrasonido en modo AB y se encontraron
gilancia y detección temprana de esta uveítis, que se conoce ecos de mediana y baja ref lectividad en el vítreo anterior medio
como blanca porque no cursa con signos y síntomas inf lamato- compatibles con condensaciones vítreas, retina aplicada (Fig. 4
rios (se reconoce tardíamente por sus complicaciones). C). Llegamos al diagnóstico de parsplanitis (PP) en AO y que-
La incidencia de uveítis alcanza el 20% en las formas oli- ratopatía en banda. El plan terapéutico fue: prednisolona 1 gota
goarticulares, a las que les siguen en frecuencia las formas cada 4 h y T-P cada 12 h. Se interconsultó con Inmunología, que
poliarticulares con factor reumatoide (FR) negativo (5-10%), agregó glicofosfopeptical cada 8 h.
mientras que al vincularse con FR positivo esta relación es El 14 de marzo de 2013 la CV del OD era de 20/80 y la del
prácticamente nula. Las formas de uveítis más graves se obser- OI, de 20/30; la presión PIO en AO, de 15 mmHg; en el segmen-
van en las niñas, en las que se ha notificado una relación de to anterior de AO: conjuntiva clara, córnea con depósitos cálci-
3:2, y las complicaciones coinciden cuanto más temprano sea cos en banda incipientes, vascularización periférica discreta,
el inicio de la uveítis. que no teñía con f luoresceína, cámara anterior formada, iris
Desafortunadamente aún se identifican en fases tardías, sin alteraciones, pupila central con sinequias posteriores en el
sobre todo por su tríada común de complicaciones secundarias: meridiano de las 8, redonda y ref léctica, cristalino transparen-
catarata, glaucoma y queratopatía en banda. Esto no cambiará te con pigmento leve en la cápsula anterior de AO.
Epiescleritis, iritis y uveítis intermedia (parsplanitis) 67
A B
Sin contar con el consentimiento previo por escrito del editor, no podrá reproducirse ni fotocopiarse ninguna parte de esta publicación. © Permanyer 2020
C D
Figura 4. A: depósitos en copo y bancos de nieve en la retina inferior con área de tracción, relación arteria-vena 2:3, mácula contrastada y retina aplicada. B: fotografía de fondo de ojo
donde se observa implante de dexametasona de liberación prolongada (Ozurdex) en la cámara vítrea inferior. C: ultrasonido en modo AB, donde se observan ecos de mediana y baja
reflectividad en el vítreo anterior y medio compatibles con condensaciones vítreas, retina aplicada. D: imagen de tomografía de coherencia óptica macular de tipo espectral, donde se
observa edema macular quístico.
Fondo de ojo bajo midriasis medicamentosa con oftalmos- talino con pigmento en la cápsula anterior. En el fondo de ojo
copia indirecta en AO con vítreo claro, papila redonda, color de AO: aplicada, copos de nieve dispersos, sin celularidad. Se
nacarado, bordes bien definidos, excavación 0.3/0.3, emergencia diagnosticó una PP sin actividad. Se le indicó una reducción de
vascular central, trayectos vasculares sin alteraciones, relación la fluorometalona a 48 h y del diclofenaco por razón necesaria.
arteria-vena 2:3, mácula contrastada, retina aplicada, copos de El 12 de septiembre de 2013 el paciente refirió haber sus-
nieve dispersos, fondo coroideo, no celularidad vítrea. Por todo pendido por iniciativa propia el diclofenaco y la f luorometalo-
ello, se decidió continuar con prednisolona cada 4 h. na, e inició nuevamente con baja visón del OD (20/80), segmen-
El 14 de marzo de 2013 el paciente acudió nuevamente a to de AO con conjuntiva clara, córnea con depósitos cálcicos en
Inmunología y se le indicó adalimumab vía subcutánea para el banda incipientes, hipopión de menos de 1 mm, con depósitos
control de la parsplanitis y continuar con glicofosfopeptical. retroqueráticos, vascularización periférica discreta, que no te-
El 5 de abril de 2013 su CV había mejorado para el OD: era ñía con f luoresceína, cámara anterior formada, pupila central
de 20/50 en el OD y de 20/40 en el OI, y el segmento anterior con sequias posterior, redonda y ref léctica, cristalino transpa-
no presentaba variación en AO. En el fondo de ojo bajo midria- rente con pigmento leve en la cápsula anterior de AO; en el
sis medicamentosa con oftalmoscopia indirecta en AO se en- fondo de ojo bajo midriasis medicamentosa: celularidad en el
contró lo siguiente: vítreo claro, papila redonda, color nacarado, vítreo abundante y engrosamiento retiniano inferior. Se decidió
bordes bien definidos, excavación 0.3/0.3, emergencia vascular la aplicación de betametasona paraocular, así como reiniciar la
central, trayectos vasculares sin alteraciones, relación arteria- prednisolona cada 4 h y T-P cada 24 h.
vena 2:3, mácula contrastada, retina aplicada, copos de nieve El 18 de septiembre de 2013 mejoró la visión del OD (20/60)
dispersos, sin celularidad vítrea, células pigmentarias (+). y también el estado inf lamatorio ocular, por lo que se continuó
Continuó el manejo conjunto con Inmunología. Se le cam- con la prednisolona cada 4 h más T-P cada 24 h.
bió la prednisolona tópica por f luorometalona cada 4 h en AO. El 3 de octubre de 2013 se le encontró mejor: la visión en
El 23 de mayo de 2013 la CV era de 20/30 para el OD y de el OD era de 20/40 y en el OI, de 20/25, sin datos de inf lama-
20/30 para el OI; la PIO de AO era de 15 mmHg; respecto al ción. Se inició la reducción de la prednisolona, que tomaría
segmento anterior: córnea con depósitos cálcicos finos, vascula- cada 6 h, y se continuó con T-P cada 24 h; se le citó a un control
rización periférica discreta, sinequias posteriores en M8 y cris- en un mes.
68 SECCIÓN 4 Oftalmología
El 23 de noviembre de 2013 persistía sin datos de actividad paracentral inferior de M5 a M7, endotelitis inferior, cámara
y continuó la reducción del esteroide tópico. anterior formada amplia con celularidad (2+), iris sin rubeosis,
El 11 de agosto de 2014, nueve meses después, se suspen- lente intraocular de cámara posterior in situ con pigmento ante-
dieron la prednisolona y el glicofosfopeptical. rior y celularidad en el vítreo anterior (2+). En el OI se encontró
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El 11 de diciembre de 2014 acudió con un nuevo brote de conjuntiva clara, córnea transparente con queratoplastia en ban-
inf lamación; la CV era de 20/100 en el OD y de 20/40 en el OI. da en M3 a M9, endotelitis inferior, cámara anterior formada,
El OD tenía conjuntiva hiperémica leve, córnea con depósitos celularidad (1+), iris con sinequias posteriores en 360°, cristalino
cálcicos en M3, M6 y M9, precipitados retroqueráticos, iris con N3 C3 P2 (LOCS III) y pigmento sobre la cápsula anterior del
sinequias posteriores de 360°, presencia de células 4 (+) y cris- cristalino; requirió betametasona paraocular en el OD y nueva-
talino con una catarata nuclear. El OI presentaba conjuntiva mente el 9 de abril de 2018, cuando se agregó prednisona por vía
hiperémica leve, depósitos cálcicos en M2, cámara anterior oral 1 mg/kg de peso con dosis reducción semanal.
formada, iris sin alteraciones, pupila central, redonda y ref léc- El 3 de septiembre de 2018 la CV era de 20/40 en el OD y
tica, y pigmento en el cristalino con clasificación C2 (LOCS III). de 20/100 en el OI, y la PIO había tenido un incremento de 43
Fondo de ojo bajo midriasis medicamentosa con oftalmoscopia y 22 mmHg en el OD y el OI, respectivamente, por lo que se
indirecta: OD no valorable por opacidad de medios, OI vítreo inició brimonidina-timolol-dorzolamida (Krytan-tek MR) cada 12
claro con condensaciones anteriores, papila redonda, color na- h por vía tópica, y la PIO mejoró rápidamente a 7 y 9 mmHg.
carado, bordes bien definidos, excavación 0.3/0.3, emergencia Se observó en el OD iris bombé, que requirió realizar una iri-
vascular central, trayectos vasculares sin alteraciones, relación dotomía periférica con láser Nd:YAG en M3 y M9 en áreas de
arteria-vena 2:3, mácula contrastada y retina aplicada. atrofia iridiana con cinco disparos para cada iridotomía con un
Se realizó un ultrasonido ocular en modo AB del OD, el poder de 3.0 mJ; se observó f lujo hacia la cámara anterior y
cual reportó lo siguiente: globo ocular fáquico, vítreo colapsado, retorno de la configuración normal del iris. El 6 de noviembre
células inf lamatorias y EM, lo que tradujo la reactividad de la de 2018 se le realizó un estudio de OCT macular, que corrobo-
PP, por lo que se le aplicó nuevamente una dosis paraocular de ró el EMC, y se requirió la colocación de un implante de Ozur-
betametasona y se reiniciaron la prednisolona y T-P tópicos en dex MR intravítreo en el OD, sin complicaciones.
dosis reducción. El 3 de enero de 2019 la CV era de OD en el 20/40 y de
El 23 de enero de 2015 se envió nuevamente a Inmunología, 20/64 en el OI, con una PIO de 20 y 12 mmHg en el OD y el OI,
que reinició el glicofosfopeptical. El 6 de mayo de 2015 se apli- respectivamente; el fondo de ojo bajo midriasis farmacológica
có una nueva dosis de betametasona paraocular por baja visual mostró para el OD el implante de dexametasona en la cavidad
del OD de 20/100 y celularidad en el segmento anterior, bancos vítrea, papila redonda, coloración normal, con bordes definidos,
de nieve mínimos en fondo de ojo. El 10 de julio de 2015, In- excavación 0.3, no vasculitis, no hiperemia del nervio óptico,
munología agregó def lazacort. El 22 de julio de 2015 se requirió trayectos vasculares ligeramente tortuosos, proliferación infe-
una nueva paraocular del OI de betametasona, que mejoró en rior rodeada por láser, sin tracción retiniana, mácula contras-
la siguiente revisión, el 24 de abril, a 20/50 para el OD y 20/25 tada, áreas de atrofia retiniana periférica fuera de arcadas y
para el OI. retina aplicada; el OI no fue valorable por opacidad de medios.
En agosto de 2015, Inmunología inició azatioprina, y el El 11 de febrero de 2019, el paciente acudió a una revisión y
cuadro se estabilizó tanto que en diciembre de 2015 el paciente refirió una disminución de la visión con el OD, que era de
suspendió los medicamentos tópicos tres semanas antes de la 20/400, y de 20/120 en el OI, y la PIO era de 8 mmHg para el
consulta; se encontró una visión para el OD de 20/40 y para el OD y de 12 mmHg para el OI. Se decidió reinstalar un esquema
OI, de 20/50, sin datos de inf lamación, por lo que se le dejó en tópico con prednisolona cada 3 h y la visión mejoró a los 10 días
vigilancia. para el OD (20/32) y el OI (20/126). En mayo de 2019 requirió
El 18 de enero de 2016 se presentó con una visión de 20/40 una nueva inyección paraocular de betametasona en el OD y el
en AO, celularidad (4+) y f lare (2+), así como bancos y copos 18 junio de 2019, un nuevo implante de Ozurdex MR en el OD.
de nieve en AO. Se reiniciaron la prednisolona y T-P tópicos, y El 7 de octubre de 2019, la CV era de 20/20 en el OD y con
el Servicio de Inmunología inició la prednisona por vía oral 50 el OI contaba dedos a 10 cm, con una PIO de 10 mmHg para el
mg cinco días de forma diaria y luego alternos. El 25 de enero OD y de 55 mmHg para el OI; en el OI se encontró un iris con
de 2016 se le aplicó betametasona paraocular en el OI y se le sequias posteriores casi en 360°, iris bombé, cristalino con ca-
indicó continuar con def lazacort, glicofosfopeptical y azatiopri- tarata N3 C3 P2 (LOCS III) y pigmento sobre la cápsula anterior
na sin suspender. El 6 de abril de 2016, requirió una nueva del cristalino. El 2 de diciembre de 2019 se le realizó una iri-
dosis paraocular de betametasona en el OI y el 7 de septiembre dectomía periférica con láser YAG. Su CV en el OD era de 20/32
de 2016, una nueva paraocular de betametasona también en el y en el OI, de 20/150, con una PIO de 13 mmHg en el OD y de
OI por actividad de PP, y nuevamente otra en el OI el 7 de di- 12 mmHg en el OI.
ciembre de 2016 por continuar con actividad. Con el OD pseudofaco sin datos de inf lamación y en el OI
El 23 de enero de 2017 su CV era de 20/200 para el OD y de seclusión pupilar al cristalino cataratoso que impedía visualizar
20/25 para el OI, , el OCT que se realizó ese día mostró edema los detalles del fondo del ojo, se programó una cirugía de cata-
macular cistoideo (Fig. 4 D), por lo que requirió betametasona rata del OI para marzo del año 2020.
paraocular en el OD de forma previa a la extracción de la cata- El paciente presentaba una PP en AO, clasificada dentro de
rata programada para el 27 de enero de 2017, la cual se realizó las uveítis intermedias; siempre requirió un manejo multidisci-
mediante la técnica de facoemulsificación con la colocación de plinario. Oftalmológicamente se trató con betametasona parao-
una lente intraocular de +17.00 dioptrías, vitrectomía 23g con cular en el OD en dos ocasiones (11 de diciembre de 2014 y 24
implante de dexametasona de liberación prolongada (Ozur- de agosto de 2016), betametasona paraocular OI en cinco oca-
dex MR). El 22 de febrero de 2017 la CV era de 20/40 en el OD y siones (22 de julio de 2015, 25 de enero de 2016, 6 de abril de
de 20/64 en el OI, sin datos de actividad inflamatoria. 2016, 7 de septiembre de 2016 y 7 de diciembre de 2016), además
El 22 de marzo de 2017 inició nuevamente la inflamación de una cirugía de facoemulsificación de catarata, la colocación
intraocular con una disminución de la visión (la CV era de 20/126 de una lente intraocular +17.00, una vitrectomía 23 g y un im-
en el OD y de 20/200 en el OI). Segmento anterior del OD con plante de Ozurdex en el OD, y requirió de dos implantes más
conjuntiva clara, fondos de saco formados sin secreción, córnea colocados el 6 de noviembre de 2018 y el 11 de febrero de 2019.
transparente con queratopatía en banda en M3 y M9, vasculari- Actualmente continúa con medicamentos tópicos, timolol 1
zación endotelial en M5, punto de nailon esclerocorneal in situ gota cada 12 h en AO, dorzolamida 1 gota cada 12 h en el OI y
en M11, córnea con leucoma en el estroma posterior y endotelio prednisolona 1 gota cada 8 h en AO.
Epiescleritis, iritis y uveítis intermedia (parsplanitis) 69
El manejo sistémico del paciente lo realiza el servicio de Se considera que el diagnóstico del EMQ es esencialmente
inmunología y lo ha mantenido sin activaciones de parsplanitis angiográfico. La OCT de la mácula puede medir el acúmulo de
con glicofosfopeptical, azatioprina y def lazacort. líquido en la fóvea.
La PP es un subtipo idiopático de uveítis intermedia y la El diagnóstico se establece en la clínica y deben descartar-
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más frecuente de ellas. En 1988 la Sociedad Americana de Uveí- se enfermedades sistémicas vinculadas, como la sarcoidosis, la
tis la definió como una uveítis intermedia idiopática, que puede enfermedad de Lyme y la sífilis, que pueden presentarse en la
presentarse de manera unilateral o bilateral, con la presencia forma de uveítis intermedia.
de bancos de nieve por lo menos en un ojo. Este tipo de uveítis El tratamiento se administra de acuerdo con la evolución
se caracteriza por vitreítis, vasculitis de retina, acumulación de clínica; se considera que un 10% se autolimitan y pueden pasar
células inf lamatorias (macrófagos, células epitelioides y gigan- inadvertidas, y que un 30% tienen periodos de exacerbaciones
tes) en el vítreo, denominadas copos de nieve, y proliferaciones y remisiones con un curso benigno y buena respuesta a perio-
fibrogliales en la pars plana, llamadas bancos de nieve. En el dos cortos de esteroides sistémicos, paraoculares o intraocula-
año 2015, el Grupo de Estandarización de Nomenclatura (SUN res de liberación prolongada. El 60% tienden a mostrar un
Working Group) la definió como un subgrupo de uveítis interme- curso crónico en el que se necesita incluso inmunosupresión
dia, sin enfermedad sistémica, relacionada con copos o bancos para el control de la inf lamación13,14.
de nieve, por lo menos en un ojo.
La PP es la uveítis más frecuente en niños (10-20%) y co-
rresponde al 8-22% del total de las uveítis, según sea la serie. BIBLIOGRAFÍA
Otros rasgos particulares encontrados en esta población son: 1. Foster CS, Sainz de la Maza M. The esclera. New York: Springer-Verlag; 1994.
mayor frecuencia en el sexo masculino (65.6%), mayor frecuen- 2. Angaputra S, Newcomb CW, Liesegang TL, Kaçmaz RO, Jabs DA, Levy-
Clarke GA, et al. Methotrexate for ocular inf lammatory diseases. Ophthal-
cia de bilateralidad (84.3%) y asimetría; el síntoma de presen- mology. 2099;116:2188.
tación más común es la disminución de la agudeza visual. 3. Kim SJ, Flash AJ, Jampol LM. Nonsteroidal anti-inf lammaory drugs in
No se conoce la patogénesis de la PP, pero se ha considera- ophthalmology. Surv Ophthalmol. 2010;55:104.
4. Raiji VR, Palestine AG, Parver DL. Scleritis and systemic disease association
do una reacción autoinmune contra el vítreo, la retina perifé- in a community-based referral practice. Am J Ophthalmol. 2009;148:946.
rica o el cuerpo ciliar. Una manifestación común es la presen- 5. Sainz de la Maza M, Foster CS, Jabbur NS. Scleritis associated with rheuma-
toid arthritis and with other systemic immune-mediated diseases. Ophtal-
cia de miodesopsias, ambliopía o ambas. mology. 1994;101:1281-6.
Se observa una ligera reacción inf lamatoria en la cámara 6. Sainz de la Maza M, Jabbur NS, Foster CS. Severity of scleritis and epiescle-
ritis. Ophthalmology. 1994;101:389-96.
anterior, opacidades corneales a nivel del endotelio o querato- 7. Watson PG, Hazleman BL, Pavesivo C, Green WR. The esclera and systemic
patía en banda, sinequias posteriores y opacidades cristalinia- disorders. Londres: Butterworth Heinemann; 2004.
nas, y es característica en el vítreo la presencia de bancos de 8. Samson AA. Seronegative spondyloarthropathies and the eye. Curr Opin
Ophthalmol. 2007;18:476.
nieve que se reconocen en la retina periférica inferior con or- 9. Chang JH, McCluskey PJ, Wakefield D. Acute anterior uveitis and HLA-B27.
ganización vítrea y envainamiento vascular, con o sin neovas- Surv Ophthalmol. 2005;50:364.
10. Cunningham ET Jr. A rationale approach to diagnosing uveitis. Rev Ophthal-
cularización. En estas áreas se puede observar un desprendi- mol. 1999;46-55.
miento de retina traccional. Los copos de nieve son cúmulos de 11. Rodriguez A, Calonge M, Pedroza-Seres M, et al. Referral patterns of uveitis
linfocitos en el vítreo periférico, la mayor parte de las veces in a tertiary eye care center. Arch Ophthalmol. 1996;114:593-9.
12. Rosenbaum JT. Acute anterior uveitis and spondyloarthropathies. Rheum
inferiores. La frecuencia de presentación de las complicaciones Dis Clin North Am. 1992;18:143-51.
depende en general de la gravedad y el tiempo de evolución de 13. Alio JL, Ruiz Moreno JM, Carreras Egaña B. Inf lmaciones oculares. España:
Edika Med; 1995.
la PP. El edema macular quístico (EMQ) representa un factor 14. Nussenblatt RB, Withcup S. Uveitis: fundamental and clinical practice. 3.a
determinante en la CV y su frecuencia varía del 30 al 63%. ed. St. Louis: Mosby; 2004.
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Capítulo 15
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esclerouveítis en una paciente con artritis
reumatoide
Stephanie Voorduin Ramos
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Figura 5. Se observa franca mejoría del cuadro inflamatorio al mes de seguimiento.
Figura 1. Se observa hiperemia y edema escleral con zona de ulceración corneal
periférica y lisis del tejido corneal estromal.
BIBLIOGRAFÍA
Cao Y, Zhang W, Wu J, Zhang H, Zhou H. Peripheral Ulcerative Keratitis Asso-
ciated with Autoimmune Disease: Pathogenesis and Treatment. J Ophthal-
mol. 2017;2017:7298026.
Cordero-Coma M, Méndez RS, Blanco AC, Corral AL, Calleja-Antolin S, de Mora-
les JM. Adalimumab for refractory peripheral ulcerative keratitis. J Ophthal
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Foster CS. Ocular manifestations of the potentially lethal rheumatologic and
vasculitic disorders. J Fr Ophtalmol. 2013;36(6):526-32.
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disease associations in scleritis-associated peripheral keratopathy. Arch
Figura 4. Se observa mejoría del cuadro inflamatorio posterior a la aplicación de tres Ophthalmol. 2002;120(1):15-9.
bolos de metilprednisolona. Yagci A. Update on peripheral ulcerative keratitis. Clin Ophthalmol. 2012:6:747-54.
5
SECCIÓN
Pediatría
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Caítulo 16
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Mirna Eréndira Toledo Bahena, Karen Adilene Camargo Sánchez, Alicia Paola Sánchez Padilla,
Adriana María Valencia Herrera y Carlos Alfredo Mena Cedillos
ANTECEDENTES TRATAMIENTO
De manera inicial se manejó con monoterapia con antibió-
Madre de 46 años con diabetes mellitus (DM) tipo 2, padre
tico (clindamicina) por vía oral y antiinf lamatorio no esteroi-
de 51 años con hepatitis C, una hermana de cuatro años con
deo. Se recomienda la mejora de los hábitos higiénico-dietéticos,
parálisis cerebral infantil y dos hermanos sanos. No hay ante- con control de peso, y evitar la fricción en los sitios afectados.
cedente de hidradenitis supurativa (HS).
Hacinamiento positivo, malos hábitos higiénicos. Diagnós-
tico de discapacidad intelectual, epilepsia y microcefalia desde SEGUIMIENTO
los tres años, trastorno de ansiedad; tratamiento actual: topira-
En la revaloración a las tres semanas de tratamiento con
mato 100 mg VO cada 12 h y f luoxetina 30 mg VO cada 24 h. el antibiótico sistémico se observa un empeoramiento del cua-
dro, por lo que se añade rifampicina por vía oral, cumpliendo
12 semanas (Fig. 2).
PADECIMIENTO ACTUAL El paciente no coopera en la administración intralesional
Empezó a los 11 años con cuadros recurrentes de «granos» de triamcinolona.
Tras el término del esquema antimicrobiano, no se encuen-
(sic) en axilas e ingles, con un aumento progresivo de tamaño,
tra mejoría (Fig. 3). El paciente es candidato a la administración
hasta el drenaje espontáneo de material seropurulento, acom- de un inmunosupresor o adalimumab; sin embargo, su estrato
pañados de dolor que limitaba las actividades habituales. socioeconómico no permite costear ninguno de los dos trata-
mientos.
EXPLORACIÓN FÍSICA
COMENTARIO FINAL
Dermatosis localizada en el tronco que afecta a la región
axilar y las ingles, constituida por múltiples nódulos eritema- De acuerdo con el consenso de la Hidradenitis Suppurativa
tosos y abscesos de hasta 2 cm de diámetro, comedones y cica- Foundation de 2009, la HS, también denominada acné inverso
trices hipertróficas y retráctiles, de evolución crónica y recu- o síndrome de Verneuil, se define como una enfermedad del
rrente, acompañados de dolor, calor y uno de ellos con salida folículo piloso crónica, inf lamatoria, recurrente y debilitante,
que usualmente se presenta después de la pubertad, con lesio-
de material purulento (Fig. 1). El resto de la exploración es
nes inf lamadas, dolorosas y profundas en áreas del cuerpo con
normal; IMC: 27.1 kg/m 2.
glándulas apocrinas, más comúnmente en las regiones axilares,
Se estadificó en el estadio II de la escala de Hurley. inguinales y anogenital1-3.
Se aplicó CDLQI, y se obtuvo un gran impacto en la calidad
de vida.
EPIDEMIOLOGÍA
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Sexo
Es más común en mujeres que en hombres, tanto en niños
como en adultos, con una relación 2-5:11,7. En la población pe-
diátrica se ha descrito una relación de 3.8:18. Sin embargo,
Braunberger, et al. reportaron que el inicio prepuberal es más
frecuente en el sexo masculino y el pospuberal, en el sexo fe-
menino9.
ETIOLOGÍA
Aunque el mecanismo etiopatogénico de la HS no se com-
Figura 1. Visita 1: lesiones en las axilas; se observan cicatrices hipertróficas y retráctiles, prende por completo, se centra en la formación de una lesión
con persistencia de nódulos eritematosos y múltiples comedones. en la unidad pilosebácea que contiene glándulas apocrinas, que
de forma inicial presenta una hiperqueratosis folicular con los
subsecuentes taponamiento, dilatación y ruptura del folículo, lo
que ocasiona inf lamación, formación de abscesos y tractos si-
nuosos, así como el involucro de la glándula apocrina por una
inf lamación dérmica 3.
En este mecanismo inf luyen diversos factores como los
siguientes:
— Disregulación de la respuesta inmune innata y adapta-
tiva, con liberación de citocinas, tales como TNF-α,
IL-17, IL-12, IL-23, IL-36 e IL-63.
— Mayor estímulo androgénico (este papel no es muy cla-
ro)3.
— Disminución de esfingolípidos como ceramidas y esfin-
Figura 2. Visita 2, de seguimiento: las lesiones han aumentado en tamaño y cantidad. gomielina, lo que altera la función de barrera cutánea
y ocasiona una activación inmune.
— Alteración de la microbiota: en la piel lesional se en-
cuentran predominantemente especies Corynebacte-
rium, Porphyromonas y Peptoniphilus, mientras que en la
piel no lesional se encuentran Acinetobacter y Moraxella;
también se ha observado una disminución de Staphylo-
coccus epidermidis y Propionibacterium acnes 3.
— Formación de biofilms3.
Existen factores de riesgo asociados a la presentación de la
HS en la edad pediátrica. Es más común que estos pacientes
presenten una historia familiar positiva para HS que aquéllos
que empiezan en la edad adulta (56 vs. 35%), y se ha detectado
una forma de herencia autosómica dominante en relación con
mutaciones de genes involucrados en la vía γ-secretasa/Notch1,
esencial para la respuesta inmune y maduración de las células
del folículo piloso, como NCSTN, PSEN1 y PSENEN3.
También se han identificado los siguientes factores de ries-
go para el inicio temprano: sexo femenino, presencia de otros
Figura 3. Visita 3: lesiones de HS al término del esquema antimicrobiano con elementos de la tétrada de oclusión folicular como acné y seno
clindamicina y rifampicina. pilonidal5.
Dessinioti, et al., en un estudio retrospectivo que comparó
las características de los pacientes con HS de inicio temprano
por cada 100,000 habitantes y una prevalencia del 0.016 al 0.2%5. con las de pacientes que debutaron en la edad adulta, encon-
Se considera que la prevalencia en esta población se encuentra traron una asociación con la historia familiar, mayor duración
subestimada debido a los escasos reportes en esta edad. de la enfermedad (12.6 vs. 8.8 años) y tabaquismo. No encon-
Es más frecuente en afroamericanos y en el estrato socioe- traron ninguna asociación con el género, el IMC, el estadio de
conómico bajo6. Hurley o el número de áreas afectadas10.
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retráctiles o en acordeón1,2.
Hidradenitis Suppurativa Severity Score Index
COMORBILIDADES
VALORACIÓN DE LA GRAVEDAD DE LA
En la población adulta se han descrito asociaciones con ENFERMEDAD
otras enfermedades, tales como tabaquismo, DM, síndrome me-
tabólico, depresión y/o ansiedad, carcinoma de células escamo- Existen escalas que se utilizan para clasificar la gravedad
sas, síndrome de ovario poliquístico, acné, enfermedad inf la- de la enfermedad y ayudan a considerar el tratamiento más
matoria intestinal, pioderma grangrenoso, síndromes adecuado, así como a valorar la respuesta a éste. En la tabla 1
autoinf lamatorios, artropatías, disfunción sexual, linfoma y se muestran diversas escalas, aunque ninguna está validada en
enfermedad tiroidea 3. niños, y se incluyen también las escalas utilizadas para la va-
En la población pediátrica no se han realizado investigacio- loración de la calidad de vida y el dolor.
nes en relación con las comorbilidades, a excepción de un La más utilizada es la escala de Hurley; a través de su uso
metaanálisis sobre síndrome metabólico e HS elaborado por en diversas publicaciones se ha encontrado que el 75% de los
Rodríguez-Zúñiga, et al., en 2015, en el que se reportó que los casos de HS son leves, el 24%, moderados y el 1%, graves2. En
estudios que incluyeron población pediátrica también mostra- la tabla 2 se especifica el estadio de Hurley.
78 SECCIÓN 5 Pediatría
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Tópico Pitirionato de zinc No hay evidencia suficiente del efecto benéfico del uso de antisépticos tópicos
Clorhexidina No se recomienda el uso de resorcinol en niños por el riesgo de intoxicación y muerte
Resorcinol incluso a dosis bajas
Triclosán
Peróxido de benzoílo
Dusidato sódico al 2%
Sistémico Clindamicina Se debe evitar el uso de tetraciclinas en menores de 9 años por el riesgo de
Tetraciclina decoloración dental permanente
Rifampicina + clindamicina
Rifampicina + clindamicina + metronidazol
Dapsona
Ertapenem
Terapia hormonal Anticonceptivos antiandrógenos Para casos recalcitrantes se ha reportado el uso de finasterida 5 mg/día, en series de
Espironolactona casos, con buenos resultados y sin efectos adversos significantes. Sin embargo, se ha
Finasteride cuestionado la ética de su uso, ya que en la mayoría de los casos se utilizó como
primera opción de tratamiento; además, a esta edad no es posible valorar los efectos
adversos comunes como la disfunción sexual
Retinoides Isotretinoína Han sido señalados como infectivos para la HS, pero es poco probable que se utilicen
Acitretina como terapia de primera línea en pacientes pediátricos por la alta tasa de efectos
Alitretinoína adversos y cierre potencial de la epífisis
Esteroides Prednisona El esteroide sistémico puede incrementar la respuesta a otras terapias como
Triamcinolona adalimumab
Puede utilizarse por vía intralesional en lesiones aisladas
Biológicos Adalimumab Adalimumab, el único biológico aprobado por la FDA para su uso en HS, es un
Infliximab inhibidor de TNF-α y puede utilizarse en mayores de 12 años
Anakinra
Ustekinumab
Ixekizumab
Etanercept
Golimumab
MABp1
Otros Metformina Metformina inhibe las citocinas proinflamatorias, mejora la sensibilidad a la insulina y
Glutamato de zinc se ha visto que puede actuar como antiandrogénico
Toxina botulínica A Existen reportes de casos del uso de toxina botulínica en la edad pediátrica con buena
Láser CO2 y Nd:YAG respuesta
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Hurley I Clindamicina al 1% tópica 2 veces al día por 3 meses
Alternativas tópicas: ácido azelaico al 15% o clindamicina al 1% + peróxido de benzoílo al 5%
Puede utilizarse triamcinolona intralesional 10 mg/ml por 7 días
Hurley II Clindamicina 10-25 mg/kg/día en 3-4 dosis (máximo: 1.8 g/día) VO por 10-12 semanas
Puede ser viable la combinación con rifampicina 10 mg/kg/día (máximo: 600 mg/día), aunque las series publicadas respecto a este tratamiento
no incluyen niños
Hurley III Se recomienda ertapenem 15 mg/kg IV. cada 12 h (máximo: 1 g al día) × 7 días + rifampicina 10 mg/kg/día VO cada 24 h +
moxifloxacino 7.5-10 mg/kg/día cada 24 h + metronidazol 30 mg/kg/día dividido en 3 dosis (cada 8 h)
Los 3 últimos, por 6 semanas; posteriormente sólo 6 semanas de rifampicina + moxifloxacino
Si no hay respuesta, debe considerarse un inmunomodulador sistémico o el uso de adalimumab en mayores de 12 años y el tratamiento
quirúrgico
prolongada 5. La HS puede presentar complicaciones, como in- 11. Wortsman X, Rodriguez C, Lobos C, et al. Ultrasound diagnosis and staging
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Capítulo 17
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y Crohn
Nayeli María José Mendoza Tavera, Fernando J. Villaviencio Zepeda, Claudia Estefanía Ramírez Calderón
y Óscar Zavaleta Martínez
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Figura 1. Fotografías tomadas en el momento de su ingreso (noviembre de 2019). Se observa edad aparente menor a la cronológica y dedos de los pies con piel hipercrómica y en palillo
de tambor.
A B
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Figura 2. Serie esófago gastroduodenal en la que se observa esófago sin defectos de llenado ni hernia hiatal. A: estómago con lesiones nodulares en la mucosa, pérdida de patrón de
pliegues gástricos. B: duodeno e íleon con defecto de llenado que impresiona lesiones nodulares en mucosa.
potróficas, dedos de los pies con lesiones hipercriómicas periun- cahuate, res, huevo (clara y yema), fresa, soya, trigo,
gueales, dedos de manos y pies en palillos de tambor, pulsos uva, chocolate, gluten, nuez y centeno negativas.
palpables, llenado capilar de 2 s. Al no contar con resultados de imagen ni biopsias de estu-
dio de endoscopia (realizadas en el hospital de tercer nivel de
procedencia) y mostrar cronicidad de los síntomas, se decide
ESTUDIOS DE LABORATORIO Y GABINETE, realizar panendoscopia y colonoscopia diagnóstica, pues existe
IMAGEN DE ESTUDIO DE HISTOPATOLOGÍA la sospecha diagnóstica de enteritis eosinofílica versus enfer-
medad inf lamatoria intestinal (Fig. 2).
— Biometría hemática: anemia macrocítica hipocrómica, Se llega al diagnóstico de panendoscopia de esofagitis de
leucopenia (2,000 leucocitos totales) y eosinófilos al 4% grado A de los Ángeles, gastritis nodular hemorrágica, duode-
(98 totales). nitis nodular, colonoscopia con ileítis nodular y colitis crónica.
— Reactantes de fase aguda: proteína C reactiva normal
en 0.01 mg/dl (valor de corte: 0.05-25), elevación de la
velocidad de sedimentación globular incrementada en DIAGNÓSTICO HISTOPATOLÓGICO
24 mm/h (valor de corte 0-15).
Esófago: esofagitis crónica moderada por ref lujo, sin dis-
— Funcionamiento hepático y renal sin alteraciones.
plasia ni microorganismos.
— Coproparasitoscópicos y coprocultivo negativos.
Cuerpo y antro gástricos: gastritis crónica severa con acti-
— Examen general de orina sin alteraciones.
vidad moderada y atrofia extensa. Datos de regeneración mo-
— Perfil reumático negativo, complemento C3 y C4 nor-
derados y negativos para displasia.
mal, inmunoglobulinas IgA, IgG e IgM normales para Duodeno e íleon: enteritis crónica moderada con actividad
la edad, IgE 10 veces valor normal para la edad. moderada. Datos de regeneración moderados. Negativo para
— Perfil tiroideo normal. displasia.
— Perfil serologías para toxoplasmosis, rubéola citomega- Colon ascendente, transverso, descendente y sigmoides:
lovirus, herpes simple y VIH (TORCH) negativo y me- colitis crónica moderada-severa con actividad moderada.
moria para virus de Epstein-Barr. Biopsias de estómago, duodeno, íleon y colon consistentes
— Pruebas cutáneas positivas a ácaros del polvo (D. pte- con enfermedad inf lamatoria intestinal tipo Crohn, con activi-
ronyssinus y D. farinae), maleza Amaranthus, Candida y dad moderada y sin evidencia de displasia.
Penicillium. A alimentos, negativas. El paciente inició manejo para inducción a la remisión con
— Inmunoglobulina E sérica específica contra atún, avena, prednisona, de acuerdo a lo establecido en las guías de manejo de
leche (β-lactoglobulina, caseína, α-lactoalbúmina), ca- Enfermedad de Crohn pediátrica1 con lo que se logró remisión total
84 SECCIÓN 5 Pediatría
A B C
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D E F
Figura 3. A: esófago en sus tres tercios de adecuada distensibilidad y calibre, tercio proximal edematoso, medio y distal con edema y aspecto traquealizado. B y C: estómago: pérdida
total de anatomía, no se observan pliegues gástricos, mucosa de aspecto nodular en fondo, cuerpo, antro, lesiones decapitadas, áreas con hemorragia sub-mucosa. D-F: mucosa de
colon con incremento en patrón vascular, ascendente y transverso con lesiones nodulares aisladas.
A B C
D E F
Figura 4. Los cortes histológicos teñidos con hematoxilina-eosina muestran A: mucosa esofágica (20X) con aumento de la capa basal, papilomatosis y hasta10 células de núcleos
deformados intraepiteliales por campo de mayor aumento. B - F: mucosa colónica (10, 20 y 40X) con datos de regeneración caracterizados por telescopamiento, apantalomaniento y
duplicación glandular. En la lámina propia hay aumento del infiltrado linfoplasmocitario con algunos neutrófilos polimorfonucleares entre el epitelio de las criptas y con formación de
algunos microabscesos además de presencia de histiocitos consistentes con EII tipo Crohn.
Caso clínico pediátrico de alergia alimentaria y Crohn 85
de sintomatología y se decide egreso a su domicilio. Actualmente tenido una mejoría en su sintomatología gastrointestinal, sino
en mantenimiento con adalimumab (Humira®), asintomático, con también en el control de su rinitis alérgica.
mejoría importante en el estado nutricional, mostrando progresión Actualmente el paciente se encuentra en seguimiento clí-
de desnutrición crónica agudizada grave a desnutrición crónica nico mensual y aplicación subcutánea del biológico cada dos
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agudizada de intensidad leve y mejoría gradual en el crecimiento. semanas. Se ha descrito una relación positiva entre el grado de
El paciente requirió de un abordaje y manejo multidiscipli- actividad de la enfermedad y la osteopenia e hipoandrogenismo
nario, trabajo en conjunto con los servicios de Alergología Pe- en el hombre, por lo que no se tiene previsto suspender el bio-
diátrica y Patología Pediátrica. Teniendo en cuenta el antece- lógico hasta lograr el crecimiento final5 y desarrollo de los ca-
dente de atopia, era prioritario descartar que el cuadro clínico racteres sexuales. Actualmente el paciente ha mostrado una
se explicara en el contexto de una alergia alimentaria, por lo mejoría importante en el crecimiento y ganancia de peso; sin
que se realizaron pruebas cutáneas, las cuales resultaron posi- embargo, aún sin crecimiento gonadal, por lo que deberá valo-
tivas a los ácaros del polvo (D. pteronyssinus y D. farinae), ma- rarse eventualmente el manejo por Endocrinología.
leza Amaranthus, Candida y Penicillium; y negativas a los alimen- Al cumplir los 16 años el paciente entrará en el programa
tos, así como a inmunoglobulina E sérica específica contra atún, de clínica de transición, el cual tiene una duración de 2 años,
avena, leche (β-lactoglobulina, caseína, α-lactoalbúmina), caca- para promover su empoderamiento sobre la enfermedad y el
huate, res, huevo (clara y yema), fresa, soya, trigo, uva, choco- tratamiento, y continuar su tratamiento en una clínica de gas-
late, gluten, nuez y centeno. Cuenta con manejo y seguimiento troenterología de adultos. Por ahora cumple con todos los obje-
por Inmunología Pediátrica para el manejo de la rinitis alérgica. tivos del tratamiento, al mostrar marcada mejoría en su calidad
Se conocen más de 70 variantes genéticas asociadas a va- de vida, estar asintomático, mejoría en el crecimiento y ganan-
rios componentes de la inmunidad innata o adaptativa como cia de peso, sin efectos adversos asociados al mismo.
factores de susceptibilidad a la enfermedad de Crohn 2. La ma-
yor parte de estos pacientes sufren de un desbalance en la
BIBLIOGRAFÍA
microbiota intestinal, con translocación bacteriana excesiva, lo
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que lleva a una respuesta inmune agresiva en los pacientes Consensus guidelines of ECCO/ESPGHAN on the medical management of
previamente predispuestos genéticamente , lo que explicaría la pediatric Crohn’s disease. J. Crohn's Colitis. 2014;8(10):1179-207.
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el inicio de la terapia con el biológico el paciente no sólo ha col Ther. 1998;12(1):21-5.
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6
SECCIÓN
Inmunología
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Capítulo 18
Inmunología y autoinmunidad
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Rebeca Pérez Cabeza de Vaca, Ana María Hernández Jiménez, Mario Antonio Téllez González, Paul Mondragón Terán,
y Juan Antonio Suárez Cuenca
INTRODUCCIÓN Autoinmunidad
Históricamente, las afecciones autoinmunes/inf lamatorias La autoinmunidad por definición es una respuesta inmu-
se han clasificado en trastornos autoinf lamatorios versus auto- nitaria anormal contra Ag propios. En términos generales, se
inmunes. Los trastornos autoinf lamatorios se han definido por reconocen diversos tipos de autoinmunidad: la caracterizada
la inf lamación sistémica o específica de un órgano que ocurre por lesión tisular directa, la caracterizada por autoanticuerpos
en ausencia de autoanticuerpos y linfocitos autorreactivos. Las y la ligada a inf lamación crónica. En las enfermedades auto-
condiciones autoinmunes, por otro lado, se han clasificado inmunes por lesión tisular, las manifestaciones se limitan a
como trastornos que son regulados y promovidos por el sistema un órgano en particular. Es posible que los anticuerpos esti-
inmune adaptativo, y, por lo tanto, se caracterizan por la pre- mulen en exceso o bloqueen la función normal del órgano. La
sencia y la participación fisiopatológica de autoanticuerpos y/o lesión tisular puede ser diseminada como consecuencia de las
poblaciones de linfocitos autorreactivos. El diagnóstico de las reacciones mediadas por células y de la lesión celular directa
enfermedades autoinmunes depende esencialmente de las ma- por autoanticuerpos o acumulación de inmunocomplejos. En
nifestaciones clínicas y el análisis de perfiles de laboratorio de algunas enfermedades autoinmunes, los anticuerpos actúan
rutina, de ahí que el tratamiento sea diverso. Sin embargo, un como agonistas de ligandos normales, generando una secre-
enfoque profundo en las señales inf lamatorias, el mapeo gené- ción trastornada de mediadores y una atrofia gradual del ór-
tico y las dinámicas celulares sistémicas y locales ha contribui- gano afectado, como ocurre con algunas hormonas. En el caso
do actualmente al tratamiento de estas enfermedades de ma- de las enfermedades autoinmunes sistémicas la reacción se
nera más eficiente. dirige contra una gran variedad de Ag blanco y afecta a diver-
sos órganos y tejidos. Estas enfermedades ref lejan un defecto
general de la regulación inmune con hiperactivación de célu-
GENERALIDADES DEL SISTEMA INMUNE las B y T 6. En muchos de los casos a todos los aspectos celu-
lares y moleculares de la autoinmunidad se añaden compo-
El sistema inmune se define como el conjunto de tejidos,
nentes genéticos que son heredados (Fig. 1). El diagnóstico se
células y moléculas que generan una respuesta defensiva fren-
realiza mediante diversas pruebas de laboratorio, y de mane-
te a un agente exógeno o endógeno, que resulta extraño al or-
ra sumamente reciente dentro de la investigación la epigené-
ganismo, denominado antígeno (Ag). Este sistema está capaci-
tica abre un nuevo camino hacia un enfoque especializado
tado para reconocer lo que le es propio y así mantener la
para el diagnóstico7,8.
individualidad del organismo, pero también para reconocer lo
extraño y eliminarlo, con procesos altamente regulados y se-
lectivos1. Sin embargo, en el caso de las enfermedades que se
denominan autoinmunes, este sistema inmune pierde el control
ASPECTOS CLÍNICOS, CELULARES Y
de sus procesos defensivos normales, generando una respuesta MOLECULARES EN LAS ENFERMEDADES
o autoataque al organismo propio, así como la síntesis de au- AUTOINMUNES SISTÉMICAS
toanticuerpos y la proliferación descontrolada de células.
Las enfermedades autoinmunes más comunes son las sis-
témicas, que se caracterizan principalmente por la pérdida del
control de las células B, la producción de autoanticuerpos y la
Inflamación
formación de complejos inmunes, que contribuyen al daño ti-
La inf lamación es una defensa fisiológica normal en contra sular. Se ha reconocido un agente etiológico o complejos inmu-
de una infección patógena o que se presenta cuando existe daño nes que inducen la señalización por células presentadoras de
tisular y lo repara; en circunstancias normales termina de for- Ag, las cuales podrían generar la respuesta inf lamatoria media-
ma rápida, pero en condiciones crónicas la respuesta inf lama- da por células T que desempeñan un papel esencial en el desa-
toria continúa, dejando a su paso daño en órganos y tejidos2,3. rrollo de las enfermedades autoinmunes (Fig. 2), en donde los
En el caso particular de las enfermedades autoinmunes existe linfocitos T helper (Th) 1 (producción de interferón γ [IFN-γ],
evidencia de que la respuesta anormal inf lamatoria está estre- factor de necrosis tumoral α [TNF-α], interleucina (IL-12) y los
chamente asociada a enfermedades crónicas, como en el caso Th17 (IL-17 e IL-21) sobresalen debido a su rol crítico en la in-
de la artritis reumatoide (AR), la enfermedad inf lamatoria in- f lamación9 sostenida y crónica.
testinal (EII), el lupus eritematoso sistémico (LES), la psoriasis Gran parte de las condiciones autoinmunes inflamatorias se
y la uveítis, entre otras4,5. consideran predominantemente de tipo Th1. Estas enfermedades
89
90 SECCIÓN 6 Inmunología
Lupus y psoriasis
Clínica El LES es un trastorno autoinmune crónico que puede
– Linfocitos T afectar a la piel, las articulaciones, los riñones, el cerebro, el
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– Linfocitos B corazón, la sangre y otros órganos. En los pacientes con LES se
Enfermedades – Células
autoinmunes ha reportado un incremento en el número de células producto-
presentadoras
de antígeno ras de citocinas en la sangre periférica y los órganos inf lama-
Epidemiología Investigación
dos; correlacionándose, por ejemplo, la concentración de IL-17
con la gravedad de la enfermedad14-18. Así mismo, Alunno, et
Aspectos Respuesta al. reportaron que los niveles de IL-17 también están elevados
genéticos inmune en pacientes con el síndrome de Sjögren19.
celular Por otro lado, la psoriasis es un trastorno crónico inmu-
nomediado que afecta principalmente a la piel y las articula-
Respuesta ciones y tiene una compleja arquitectura genética. Se asocia
inmune Epigenética con un complejo proceso inf lamatorio de la piel que produce
molecular hiperplasia de queratinocitos. Aunque la psoriasis general-
– Citocinas
– IL mente se ha considerado un trastorno principalmente impul-
– Factores sado por Th1-IFN-γ, este camino podría ser más esencial en
inflamatorios la fase de iniciación de la enfermedad. Se ha encontrado una
– Anticuerpos mayor frecuencia de células Th17 en las lesiones cutáneas y
sangre periférica de los pacientes con psoriasis. Sin embargo,
Figura 1. Interacción multidisciplinaria en la atención de las enfermedades autoinmunes. la inhibición de IFN-γ no ha mostrado ningún beneficio clíni-
IL: interleucina. co sustancial, lo que nos orienta a un enfoque hacia el eje
Th17, con sus citocinas características IL-17 e IL-23, como
clave del proceso de enfermedades crónicas y potencial blan-
están asociadas a la sobreproducción de la citocina proinf lama- co terapéutico20.
toria IFN-γ por las células T autorreactivas u otras células T
inf lamatorias activadas sistémicamente o en el sitio de la in-
f lamación. El IFN-γ induce la sobreexpresión de moléculas co- Uveítis
estimuladoras negativas en las células T inf lamatorias y los
La uveítis autoinmune e inf lamatoria consiste en un grupo
macrófagos que inducen una función antagónica de IL-175. La
de lesiones intraoculares inf lamatorias que impactan directa-
IL-17 es una citocina proinf lamatoria que induce la producción
mente en la agudeza visual hasta la ceguera, surgen sin un
de diversos mediadores de la inf lamación, que, junto con otras
desencadenante infeccioso conocido y a menudo se asocian con
citocinas proinf lamatorias, contribuyen de manera sostenida a
respuestas inmunológicas a proteínas retinianas únicas. Las
la generación de autoinmunidad10 en enfermedades como la EII,
citocinas efectoras producidas por las células T (IL-1β y TNF-α,
la AR, el lupus y la uveítis.
entre otras) y los leucocitos inf lamatorios reclutados pueden
servir como blancos terapéuticos. La neutralización del TNF-α
ya está en uso clínico en otras enfermedades inf lamatorias
Enfermedad inflamatoria intestinal
autoinmunes, y en la uveítis también se ha demostrado su efi-
La enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa son EII cró- cacia. El hallazgo de la neutralización de la IL-17 por los anti-
nicas que, según se cree, son causadas por una respuesta in- cuerpos monoclonales en ratones parece un blanco prometedor,
mune anormal dirigida contra los componentes normales de la como se ha mencionado anteriormente, y se han abierto ensa-
microbiota, en una respuesta de naturaleza autoinmune me- yos clínicos que examinan la neutralización de la IL-17, así
diada por los receptores tipo Toll (Toll like receptor [TLR]); sin como la inhibición de la migración y el reclutamiento de célu-
embargo, están relacionados múltiples mecanismos inf lamato- las inf lamatorias21.
rios, que comúnmente se conservan de manera localizada,
como la secreción de TNF-α, IL-6, IL-1β. Esta inf lamación
constante y sostenida induce la respuesta adaptativa de proli- Interacción fisiopatológica de las
feración de células Th111. Las manifestaciones clínicas comu- enfermedades autoinmunes y su tratamiento
nes están asociadas a trastornos gastrointestinales crónicos, lo
que en ocasiones dificulta su identificación como EII, que in- El diagnóstico de estas enfermedades siempre deberá
cluso es subdiagnosticada. Para su tratamiento de manera re- acompañarse de perfiles de laboratorio completos e integrar las
ciente se han empleado anticuerpos dirigidos a moléculas in- manifestaciones clínicas que orienten de mejor manera el diag-
f lamatorias, citocinas principalmente, como el caso del anti nóstico (Fig. 3), así como algunas pruebas clínicas que comple-
TNF-α, entre otros, de manera exitosa. menten o consoliden la sospecha clínica del caso. De manera
puntual el tratamiento ideal para estas enfermedades debe te-
ner como finalidad reducir sólo la reacción autoinmunitaria,
Artritis reumatoide dejando íntegro el resto de las funciones inmunes. Comúnmen-
te se administran inmunosupresores con la intención de frenar
La AR se caracteriza por la inf lamación crónica de la mem- la proliferación de linfocitos, o plasmaféresis para los padeci-
brana sinovial. De manera general, hay rigidez articular, can- mientos con alta concentración de complejos Ag-anticuerpo,
sancio, fiebre y periodos de dolor e inf lamación localizados. Las como un mecanismo temporal, con buenos resultados22. La
interacciones celulares inducen la producción de citocinas inf lamación también es uno de los blancos terapéuticos de re-
proinf lamatorias (TNF-α e IL-1β), que a su vez activan los me- levancia. Actualmente se utilizan anticuerpos monoclonales
canismos que conducen a la destrucción de los cartílagos y los para el bloqueo de citocinas (IL-12, IL-22) y TNF-α, como se ha
huesos12,13. Recientemente se ha descubierto que las moléculas ejemplificado en algunas de las enfermedades autoinmunes
Programmed cell death protein 1 (PD-1) y Programmed cell death mencionadas. La gran desventaja de los inmunosupresores es
ligand 1 (PDL-1) se regulan de forma selectiva a través del IFN-γ que reducen la inmunidad general del paciente, y en el caso de
sobreproducido como resultado de la inf lamación local10. los anticuerpos monoclonales ocurre sobre la inf lamación, por
Inmunología y autoinmunidad 91
Agente etiológico
(epítope/Ag/auto-Ag)
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IL-2 Reclutamiento:
Célula presentadora Polimorfonucleares
de antígeno IL-1
IL-6 Inducción factores
(macrófago, CD) inflamatorios
TNF-
TLR
IFN-
Th0 TNF- Th1
NF-kB IL-12
CD8
CD8 MHC LinfocitoT
IL-17
TGF- NAIVE Th17
Mediadores IL-22
inflamación
CD8
Linfocitos T
Coestimulación
Linfocitos B
Autoanticuerpos
Figura 2. Mecanismo fisiopatológico de las enfermedades autoinmunes inflamatorias sistémicas.
lo que la nueva opción abre el panorama para bloquear sólo las de los extraños. Los criterios actuales para el diagnóstico de
células Th activadas por Ag, como los principales mediadores enfermedades autoinmunes se basan en manifestaciones clíni-
de autoinmunidad 23,24. cas y pruebas de laboratorio esencialmente. A pesar de que se
están investigando las vías de señalización de cada una de las
enfermedades autoinmunes, las estrategias terapéuticas aún no
CONCLUSIONES
son suficientes. Por ello, comprender y utilizar los fundamentos
Las enfermedades autoinmunes son trastornos del sistema celulares podría abrir una ventana al tratamiento de estas con-
inmunitario, que pierde la capacidad de distinguir los auto-Ag diciones clínicas.
92 SECCIÓN 6 Inmunología
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7
SECCIÓN
Patología
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Capítulo 19
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inespecífica y enfermedad de Crohn
INTRODUCCIÓN Recomendaciones:
— ECCO-ESP 9: «El diagnóstico de la CU se basa en la
El reciente aumento en la incidencia de la enfermedad distorsión de la arquitectura, infiltrado inf lamatorio
inf lamatoria intestinal (EII) entre la población mexicana ha difuso, plasmocitosis basal, asociado a criptitis, mi-
dado lugar a la creación de unidades multidisciplinarias espe- croabcesos y disminución de las células caliciformes.
cíficas con protocolos definidos que obligan a los anatomopató- En las enfermedades de larga evolución se identifican
logos a conocer esta entidad. Debido al aumento resultante en células de Paneth (especialmente en el colon izquierdo)
la cantidad de biopsias, se requieren pautas que estandaricen y pseudopólipos».
los criterios de la nomenclatura para facilitar el diagnóstico y — ECCO-ESP 10, 11 y 14: «La plasmocitosis basal es la ca-
mejorar el informe anatomopatológico. racterística más temprana para el diagnóstico de CUCI.
Dichas pautas tienen como finalidad sistematizar, paso a Los cambios histológicos de larga evolución se basan en
paso, la interpretación de las biopsias con objetivos que evalúan la distorsión de la arquitectura. Los tratamientos pue-
la confianza diagnóstica en cada nivel. Los distintos pasos de- den modificar el patrón de distribución clásica de la
terminarán si existe enfermedad en la mucosa intestinal y si
inf lamación, por lo cual este dato debe referirse al pa-
la enfermedad es crónica y/o activa, y si la presencia de una
tólogo».
EII se considera probable, si se puede diagnosticar como enfer-
Las fases histológicas de la CUCI se describen en las figuras
medad de Crohn (EC) o bien como colitis ulcerosa (CU).
1 y 2.
Se observa criptitis y microabscesos La criptitis y los microabscesos son menos Fibrosis y marcada pérdida de criptas;
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evidentes, y las células caliciformes puede persistir la distorsión arquitectural
aumentan gradualmente
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0= Sin incremento
2= Moderado incremento
3= Marcado incremento
0= Sin incremento
2= Moderado incremento
3= Marcado incremento
Neutrófilos en el epitelio
Figura 4. Biopsia de colon con presencia de microabscesos, lámina apropia con
0= Ninguno
plasmocitosis.
1= < 5% de criptas involucradas
— Colitis diverticular (colitis asociada a enfermedad diver- — Colitis por tuberculosis: se caracteriza por lesiones gra-
ticular): se refiere a la mucosa, con cambios inf lamato- nulomatosas necrotizantes y, en medida de lo posible,
rios con distorsión en cripta, plasmocitosis basal y me- la búsqueda del bacilo con tinciones especiales. El sitio
taplasia de las células de Paneth (Fig. 8). más común es la válvula ileocecal y en menor medida
— Colitis por radiación: el cuadro histológico muestra te- el recto (Fig. 14).
langiectasia marcada y alteración de los vasos submu-
cosos con proliferación de la íntima, atrofia con distor-
sión de las criptas, hialinización del estroma y un DISPLASIA Y NEOPLASIAS EN LA ENFERMEDAD
infiltrado inf lamatorio mixto, que puede ser activo, sin INFLAMATORIA INTESTINAL
presencia de criptitis ni microabscesos (Fig. 9).
— Colitis isquémica: puede causar atrofia y distorsión de Recomendación ECCO-ES 22: «La displasia es un hallazgo
las criptas con presencia de células plasmáticas basales inequívoco de progresión maligna de la enfermedad inflamato-
e inf lamación aguda leve, hialinización de la lámina ria. Se llega a encontrar en el 60% de las piezas quirúrgicas
propia y fibrosis (Fig. 10). después de 8 a 10 años de evolución y debe catalogarse acorde a
— Enfermedad de injerto contra huésped: presenta inf la- la clasificación de Viena (2000). Se debe tomar una biopsia cada
mación crónica leve y marcada apoptosis, y las células 10 cm en una búsqueda intencionada de displasia» (Fig. 15).
epiteliales de las criptas se encuentran en adecuado
número y forma. La EICH crónica también puede dar
lugar a la distorsión de la cripta y atrofia con o sin fi- MANIFESTACIONES EXTRAINTESTINALES DE LA
brosis (Fig. 11). ENFERMEDAD INFLAMATORIA INTESTINAL
— Colitis infecciosa: normalmente su inicio es súbito con
diarrea sanguinolenta. En la biopsia se encuentran cam- — Eritema nodoso: el hallazgo característico es una pani-
bios muy variables, desde normales hasta edema, inf la- culitis septal fibrosante granulomatosa. Las lesiones
mación aguda con presencia de polimorfonucleares e tempranas se caracterizan por un infiltrado celular in-
incluso con microabscesos; normalmente no hay distor- f lamatorio mixto de linfocitos, eosinófilos y neutrófilos,
sión de la arquitectura de las criptas ni disminución de más intenso en la periferia del lóbulo. La lesión poste-
las células caliciformes, pero sí es posible observar su rior muestra un ensanchamiento del tabique con un
destrucción (Fig. 12). número creciente de macrófagos en los tabiques. Esta
— Colitis pseudomembranosa: producida por Clostridium característica es más prominente en las etapas tardías
difficile, la biopsia muestra predominantemente placas del eritema nudoso agudo y el eritema nudoso crónico
de fibrina con moco y polimorfonucleares (Fig. 13). (Fig. 16).
98 SECCIÓN 7 Patología
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0 Sin anormalidad 3 Ninguno
0.2 Anormalidad leve o moderada difusa o multifocal 3.2 < 50% de driptas involiucradas
0.3 Anormalidad severa difusa o multifocal 3.3 > 50% de criptas involucradas
1.1 Incremento leve pero inequívoco 4.1 Problable exceso local de neutrófilos en parte de la cripta
2B Neutrófilos
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Figura 7. Colitis microscópica. Figura 10. Colitis isquémica.
— Colangitis esclerosante: se caracteriza por estenosis fi- se extiende al parénquima periportal. Obliteración de
broinf lamatoria de los conductos biliares en cualquier los conductos biliares y extensión de la fibrosis al pa-
lugar desde la ampolla de Vater hasta los conductos rénquima. Cirrosis biliar secundaria. Comúnmente se
biliares interlobulares. Fibrosis periductal concéntrica observan características de colestasis crónica, especial-
e inf lamación linfocítica en tractos porta. La fibrosis mente cambios pseudoxantomatosos (Fig. 18).
100 SECCIÓN 7 Patología
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Figura 13. Colitis pseudomembranosa. Figura 14. Colitis por tuberculosis.
Negativo a displasia Indefinido para displasia Displasia de bajo grado Displasia de alto grado Carcinoma
A B
NO SÍ
Biopsias colorrectales
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Tipo de lesión en la mucosa
Inflamación y/o distorsión
Colitis isquémica
Colitis infecciosa
Colitis pseudomembranosa
Colitis isquémica
Colitis microscópica
Tuberculosis
Figura 20. Diagnósticos diferenciales en la EII. Pb: probable.
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8
SECCIÓN
Nutriología
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Capítulo 20
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autoinmunes
Ana Karina García Sámano, Ángel Ibáñez Pérez, José Antonio Leyva Islas e Isabel Martínez del Río Requejo
Estómago
Jugo gástrico
Pepsina
HCI Yeyuno
Agua, alcohol Carbohidratos,
vitaminas hidrosolubles,
ácido folico, péptidos
y aminoácidos
Duodeno
Bilis, enzimas
pancreáticas,
bicarbonato, calcio,
hierro, Magnesio
Ileón
Vitaminas
liposolubles (A-D-K-E)
Sales biliares, grasas,
colesterol y
vitamina B12
Colon derecho
Vitaminas C y K
producidas por microbiota
Agua
Colon izquierdo y recto
Ácidos grasos cadena corta
Agua
Falta de
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ingesta
Sobrecrecimiento
bacteriano Malabsorción
B
ILEOCOLÓNICA
Incremento de
infecciones
Incremento
del riesgo de Mala
tromboembolismo cicatrización
Malnutrición
C
COLÓNICA Mayor estancia Incremento
hospitalaria de fístulas
Mayor
mortalidad
¿El niño tiene un diagnóstico Puntos ¿Cuál es la ingesta Puntos Percentiles del niño Puntos
con implicaciones nutricionales? oral del niño?
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3 líneas por debajo del percentil
3
Definitivamente 3 Nada 3 o peso debajo de percenti 2
K 10 mg IV 1/semana Ictericia
Screening inicial Sí No
Desnutrición leve Pérdida de peso > 5% en los últimos 3 meses o Leve Fractura de cadera, pacientes crónicos, compli-
puntuación: 1 ingesta inferior al 50-75% en la última semana puntuación: 1 caciones agudas de cirrosis, EPOC, hemodiáli-
sis, diabetes, enfermos oncológicos
Desnutrición Pérdida de peso > 5% en los últimos 2 meses o Moderada Cirugía mayor abdominal AVC, neumonía
moderado IMC 18.5-20.5 + estado general deteriorado o puntuación: 2 severa y tumores hematológicos
puntuación: 2 ingesta entre el 25-60% de los requerimientos
en la última semana
Desnutrición Pérdida de peso mayor del 5% en un mes Grave Traumatismo craneoencefálico, transplante
grave (> 15% en 3 meses) o IMC < 18-5 + estado puntuación: 3 medular. Pacientes en cuidados intensivos
puntuación: 3 general deteriorado o ingesta de 0-25% de los (APACHE > 10)
requerimientos normales la semana previa
Edad si el paciente es > 70 años sumar 1 a la puntuación obtenida = puntuación ajustada por la edad
Si la puntuación es ≥ 3 el paciente está en riesgo de malnutrición y es necesario iniciar soporte nutricional. Si la puntuación es < 3 es necesario reevaluar semanalmente. Si el paciente va a ser sometido a cirugía mayor, iniciar soporte nutricional perioperatorio.
Figura 6. Herramientas de tamizaje para la evaluación nutricional en niños y adultos. Evaluación nutricional: NRS adultos o STAMP niños.
108 SECCIÓN 8 Nutriología
EII, CU y EC
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Evaluación nutricional
Evaluación de la enfermedad
Evaluar los
Inactivo Activo efectos
secundarios
Dieta polimérica
6-8 semanas
Reintroducir alimentación
Mejoría por vía oral
¿Probióticos VSL3?
Figura 7. Algoritmo para la evaluación y manejo nutricional de la enfermedad Inflamatoria Intestinal. ASPEN: American Society of Parenteral and Enteral Nutrition; TLW: Índice de
Truelove-Witss modificado para la gravedad de colitis ulcerosa; COAI: Crohn´s Disease Activity Index.
Esquema de la nutrición en enfermedades autoinmunes 109
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nos sistémicos, ya que con frecuencia aparecen signos y sínto- EC, han aumentado su incidencia en las últimas décadas.
mas extraintestinales, que no siempre coinciden con la EII. A Tiene múltiples manifestaciones extraintestinales, entre
pesar de que el tubo digestivo es el órgano blanco de la enfer- ellas las asociadas a la piel, que aparecen la mayor parte de las
medad, los órganos más frecuentemente afectados son las arti- ocasiones después del cuadro clínico intestinal, por lo que es
culaciones, la piel, los ojos, y la vía biliar. esencial identificarlas para tener un adecuado abordaje diag-
La afectación extraintestinal en la EII depende de varios nóstico y terapéutico.
factores y, a veces, es difícil distinguir de las verdaderas mani-
Las manifestaciones cutáneas se catalogan en: lesiones gra-
festaciones extraintestinales (afectación sistémica primaria) de
nulomatosas, dermatosis reactivas, asociadas al tratamiento
las complicaciones extraintestinales propias de la enfermedad,
farmacológico de la EII y otras dermatosis (Tabla 3).
bien sean secundarias a la inf lamación crónica, a la malnutri-
ción o a los efectos adversos de los fármacos.
Las manifestaciones extraintestinales son muy frecuentes, DERMATOSIS SECUNDARIAS
y pueden presentar deficiencias nutricionales; si bien no todas
las manifestaciones extraintestinales cursan alteraciones nu- En la dermatosis secundaria a la desnutrición, los factores
tricionales. Es importante identificar las que sí lo son para implicados son: pobre ingesta de alimentos, pobre digestión y
hacer el diagnóstico y corregir la deficiencias como parte de su absorción, sobrecrecimiento bacteriano, resección quirúrgica,
tratamiento. pérdidas colónicas o por demanda metabólica o asociada al
En las figuras 8 y 9 se presentan algoritmos de algunas de tratamiento.
las manifestaciones extraintestinales que cursan con deficien- La deficiencia de ácidos grasos esenciales, zinc y hierro se
cia nutricional, para la identificación y manejo nutricional de observan principalmente en los pacientes con CUCI. Éstas me-
las mismas. joran con la suplementación (Tabla 4).
EII
(alteraciones de la función hepática entre el 10 y 50% de los pacientes)
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Altura En cada visita en niños 2-3 veces por año
Vitamina B3 (niacina) Tétrada clásica: dermatitis, diarrea, demencia y muerte 500 mg de nicotinamida o ácido nicotínico diario por varias
Mucosas: queilitis, glosistis, estomatitis angular semanas
Dermatosis fotosensible, bilateral, simétrica, popolimorfa
caracterizada por eritema pruriginoso, ardorosos y edematoso bien
definido con distribución en collares de castaña, guantes y calcetín
Complejo B Estomatitis, queilitis y glositis angular 10 mg de riboflavina, 100 mg de piridoxina, 5 mg de ácido fólico
por día
Vitamina C Alopecia, sangrado gingival, pápulas hiperqueratósicas, pelos en 100-300 mg de ácido ascórbico
sacacorchos, hemorragia perifolicular de extremidades inferiores
Zinc Deficiencia más común en EII Sulfato de zinc 220 mg por vía oral
Acrodermatitis enterohepática
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ATLAS
multidisciplinario de enfermedades autoinmunes
Editor:
Tomás Cortés Espinosa
ATLAS
PERMANYER MÉXICO
www.permanyer.com