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1.

Las necesidades de una organización son evolutivas en el tiempo y su


estructura deberá reflejar esos cambios dinámicos.

2. Una organización desarrollará inicialmente sus propios tipos de


estructura: en algunos casos de una forma centralizada producirá los
mejores resultados.

3. Sea un tipo u otro de estructura, si esta sirve a los objetivos de la


empresa a largo plazo y consiga alcanzar positivamente los planes
corporativos, esa será la respuesta mejor estructurada.

Anteriormente observamos como una estructura centralizada limita la eficacia de


la gestión de un empresario. La empresa es vulnerable y depende demasiado del
personal cualificado o de mayor preparación: ofrece pocas alternativas de
promoción y puede causar un efecto negativo en la motivación o interés del
personal.

La descentralización aporta mayor eficacia y responsabilidad, cuando las unidades


de negocio periféricas o regionales se encuentran situadas lejos de la unidad de
gestión central, tanto si la empresa es comercial o industrial.

Las descentralización absoluta no es recomendable (que no posible), porque


siempre deberá existir una unidad de gestión centralizada que coordine todas y
cada una de las acciones y sea el punto de referencia de las demás unidades
periféricas. La descentralización es simplemente un tipo de delegación que se
basa en las directrices que recibe de la Central. A esta acción se le llama
generalmente “descentralización de la gestión”.

La descentralización es importante para la gestión y administración en las grandes


empresas. Aporta suficiente autonomía a los centros periféricos, reduce o evita
complejos circuitos en la información, reduce tensiones en la gestión, etc.

Existe una cierta confusión respecto al término “descentralización” que a menudo


se define como un método dentro de la organización en la que normalmente se
delegan responsabilidades específicas. Esto ¿nos sugiere que la delegación es
sólo un proceso de descentralización?

La delegación, como tal, se puede llevar a cabo de la siguiente forma:

o Los procesos de gestión y liderazgo se dividen en unidades pequeñas.


o Los procesos de gestión se dividen de manera que existan responsables
especializados para satisfacer al líder.

El primero supone delegar el liderazgo, en tanto que el segundo únicamente


desarrolla un sistema de consulta a especialistas para ayudar al líder en la toma
de decisiones.
No obstante, sugerir que la descentralización no es sino el proceso práctico del
concepto de delegación, es bastante ingenuo, porque:

o La delegación puede realizarse bien a nivel general o individual.


o Puede ser de forma permanente o solo temporal.
o Puede englobar tareas rutinarias de poca trascendencia o para la toma de
decisiones estratégicas importantes en la política corporativa de la empresa.

En cambio, la descentralización es un aspecto mucho más específico que la


delegación ya que nos referimos a delegar autoridad y responsabilidad a unidades
periféricas, independientes, dentro de una gran organización.

La cuestión surge cuando hemos de determinar el grado de descentralización que


hemos de implementar en una organización.

Existen ventajas tanto en la centralización como en la descentralización; todo es


cuestión de sopesar las ventajas de una y de otra, respecto a las necesidades de
la empresa.

La descentralización se considera más eficiente, pues centra el poder y la


responsabilidad en los Delegados de las unidades de negocio periféricas, puesto
que se supone que este delegado tiene las habilidades suficientes para tomar
decisiones correctas.

No obstante, existe el riesgo de delegar, cuando los mecanismos de control de la


gestión no es el adecuado.

Una de las ventajas más importantes de la descentralización es la reducción de


los circuitos, tanto funcionales como económicos, característicos en toda gran
organización; es sobre todo una forma eficaz de reducir o eliminar un porcentaje
muy amplio de prácticas o tareas innecesarias.

Otra ventaja es la rapidez con la que se pueden tomar decisiones importantes al


no tener que consultar constantemente a la unidad Central. La organización en su
conjunto se puede adaptar con mayor rapidez y eficacia a cualquier cambio que se
produzca en su mercado o zona geográfica.

Quizás la ventaja más importante de una estructura descentralizada es el clima y


moral del personal de las unidades periféricas en la realización de su trabajo:
aumenta la iniciativa y participación de este personal y también la calidad de las
decisiones.

Un enfoque centralizado de la gestión, puede llegar a desconocer los cambios que


se puedan producir en el entorno o condiciones locales donde estén ubicadas las
unidades periféricas.

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