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Taxonomía de la argumentación jurídica

Palabras desconocidas
● Taxonomía: Ciencia que trata de los principios, métodos y fines de la
clasificación
● Silogismo subsuntivo: es el esquema general de argumentación en la
justificación judicial
● Silogismo disyuntivo: es aquel cuya premisa mayor establece una
disyunción exclusiva, de manera que los dos miembros no pueden ser
simultáneamente verdaderos, ni simultáneamente falsos. Ejemplo: "Todo
círculo es una curva o una recta; es una curva; luego, no es una recta".
Ideas importantes
● La argumentación cumple un papel fundamental. Esto, por cuanto se parte de
que el derecho se ha construido con el fin de tomar decisiones que incumben
a la sociedad
● La lógica formal ofrece unos esquemas o formas de los argumentos que
garantizan que a partir de ciertos enunciados (premisas) se pueda pasar
válidamente (por medio de una regla de inferencia que siga una forma lógica)
a otro enunciado (conclusión)
● Argumentos deductivos: el argumento deductivo pretende que sus
premisas ofrezcan un fundamento concluyente de esta. las premisas y la
conclusión están relacionadas de modo tal que sea lógicamente imposible
que las premisas sean verdaderas y la conclusión no lo sea. se califican
como válidos o inválidos (según si sus premisas proporcionan bases
concluyentes para la verdad de su conclusión).
A) Modus ponens (el modo de poner)
El argumento general que se usa es el silogismo subsuntivo, que es un
argumento deductivo que tiene la siguiente forma: “si se dan las
circunstancias X, entonces debe ser la consecuencia jurídica S; (en
este caso) se dan las circunstancias X (o sea, el caso se subsume
dentro del supuesto de hecho de la norma); por lo tanto, debe ser la
consecuencia jurídica S. Este silogismo subsuntivo tiene la forma
de un modus ponens (el modo de poner), en el que, si se usan las
letras p y q para representar enunciados, se tiene por válido que
si p entonces q; p; entonces q .
B) Modus tollens (el modo de quitar)
Su estructura es algo similar a la de un argumento modus ponens, con
la excepción de que en esta forma de los argumentos jurídicos la
premisa menor y la conclusión se presentan de forma negativa: si p,
entonces, q; no q; por lo tanto, no p. Frente a un argumento que
adopta la forma del modus ponens, entonces la diferencia sería que en
el argumento modus tollens no se pone q, sino no q, lo cual lleva a la
conclusión no p, en vez de a la conclusión p (a la que se llega en el
argumento modus ponens)

C) Silogismo hipotético o transitivo


El silogismo hipotético tiene la forma “si p entonces q; si q entonces r;
por lo tanto, si p entonces r”. Este silogismo se llama también
transitivo, en tanto parte del principio de transitividad lógica, según el
cual si A = B y si B = C, entonces se tiene que A = C
D) Silogismo disyuntivo
se tienen dos opciones (p o q) y se tiene que, por alguna razón, la
opción q no es admisible (no q), por lo cual se afirma la otra opción (p).
Es equivalente, en ese caso, negar la admisibilidad de p y decir “p o q;
no p; por lo tanto, q”
E) El dilema
Usualmente se entiende que un dilema es una situación en la que
estamos obligados a escoger entre dos opciones igualmente buenas o
malas. En la lógica formal, el dilema como argumento deductivo es
consistente con esa comprensión. El dilema es un argumento que
toma la siguiente forma: “se tienen dos opciones (p o q); si p entonces
r; y si q entonces s; por lo tanto, se tiene r o s”
F) Reductio ad absurdum (reducción al absurdo)
Es una versión del argumento modus tollens, cuyo fundamento “reside
en la difundida creencia de que el Derecho no contiene normas
absurdas”19. Según este argumento, si a una formulación normativa
se le pueden atribuir varios significados, entonces esta debe
interpretarse prescindiendo del significado que dé lugar a
consecuencias absurdas o contrarias al sentido común20. Un
argumento por reducción al absurdo toma la siguiente forma: “para
probar p se asume que p es falso (no p); de esa asunción se deriva
una implicación q; se muestra que q es absurdo, falso o contradictorio;
por lo tanto, se concluye p”21.
● Argumentos inductivos: no pretende que sus premisas sean fundamentos
para la verdad de su conclusión, sino solamente que le ofrezcan cierto apoyo
a esta. se califican como o “fuertes” o “débiles”
A) Argumento “a simili” o por analogía
El argumento por analogía recurre a un ejemplo que tenga una
semejanza relevante con el caso estudiado para apoyar una
determinada interpretación. En casos en los que existe una norma con
significado controvertido, la analogía permite interpretarla atendiendo a
criterios argumentativos elaborados en la interpretación de otra norma
con la que guarda una semejanza relevante. El argumento a simili
toma entonces la siguiente forma: “si p o p’ (si algo es p o semejante a
p), entonces q”
B) Argumento autoritativo o “ab auctoritate”
El argumento autoritativo o ab auctoritate se fundamenta en el hecho
de que nadie puede ser un experto en todas las cosas que es posible
conocer
C) Argumentos mediante ejemplos
Los argumentos mediante ejemplos ofrecen uno o más ejemplos como
argumentos en favor de una generalización. Para que un argumento
mediante ejemplos sea persuasivo, sus elementos deben ser ciertos y
representativos del conjunto acerca del que se está construyendo el
argumento
D) Argumento “a fortiori” (a mayor abundamiento)
El argumento a fortiori (a mayor abundamiento) permite argumentar a
favor de una interpretación extensiva de un enunciado normativo que
si bien no prevé explícitamente un caso, prevé otro caso y ofrece
razones para prever lo que se aplican con mayor identidad al nuevo
caso. El argumento a fortiori no se basa entre la semejanza entre los
casos —de ahí que no sea una subclase del argumento analógico—
sino en la razón de ser o en la ratio del enunciado normativo cuya
interpretación va a hacerse extensiva
E) Argumento “a contrario sensu” (en sentido contrario)
Se utiliza para evitar extender una consecuencia jurídica determinada
a un caso no explícitamente previsto por la norma.
Este argumento toma la siguiente forma: “si p, entonces q; no p, por lo
tanto, no q”. Frente a esto, Atienza advierte que, esta estructura lógica
no se trataría de una forma deductiva válida pues sería la de una
falacia, la de negación del antecedente. Sin embargo, sí sería un
argumento lógicamente válido, si se interpretara que la primera
premisa (la norma) establece que p es condición necesaria para q:
sólo si p, entonces q
F) Argumentos acerca de las causas
Los argumentos acerca de las causas se utilizan para probar una
correlación entre dos acontecimientos o tipos de acontecimientos. Un
argumento acerca de las causas, entonces, busca probar que A causa
B y expone las razones por las que “tiene sentido” o es probable que
así sea. En la elaboración de argumentos acerca de las causas debe
recordarse la regla básica según la cual “correlación no implica
causalidad”: existen acontecimientos que se dan juntos (en
correlación), sin que exista una causa o razón ulterior para que así sea

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