OPERACIONES

Fases del plan de operaciones

Una vez visto qué es el plan operativo, es importante que comprendas que este
documento está formado por cuatro partes fundamentales: producto o servicio,
procesos, programa de producción y gestión de almacén. Por lo tanto, para
realizar el plan de operaciones es necesario abordar todos los procesos que se
van a llevar a cabo en cada una de las partes. 
Productos o servicios
Se definirá el producto o servicio desde su parte más técnica: diseño, aspectos
legales, patentes… así como se realizará una comparativa con productos y
servicios de la competencia. 
Procesos
Se detallará un listado de todos los procesos que se deben llevar a cabo para
poder lanzar el producto o el servicio al mercado, así como la relación que
existe entre cada uno de los procesos. En cada proceso se especificará quién
es el proveedor y nos aseguraremos de indicar la relevancia del proceso dentro
de la producción de tal manera que queden claro las partes más importantes y
sobre las que hay que llevar un mayor control. 
Producción
Llegamos a la parte productiva. En ella se tendrá que indicar la capacidad de
producción de la empresa, el tiempo de producción y de almacenaje, el impacto
medioambiental… y, lo más importante, los estándares de calidad que se van a
seguir para asegurar la calidad de todo lo que se produzca. 
Aprovisionamiento
Llegamos a la cuarta etapa. Seguro que eres consciente de que la fase de
aprovisionamiento es crucial para evitar roturas de stock o parones
innecesarios en la cadena de producción. Aquí incluiremos todo lo referente a
este punto: tipo de materia prima o material, control de calidad de los mismos,
tipo de almacenaje necesario para cada una de ellas, proveedores, fechas de
entrega, posibles opciones de aprovisionamiento para cubrir siempre un
servicio…. 
Como ves, es importante dedicar un buen tiempo a hacer e ir revisando de
manera periódica el plan de operaciones de una empresa para conseguir que
el proceso productivo nunca se vea interrumpido. 
Descripción de la tecnología
Frecuentemente cuando los medios de comunicación hablan de la influencia de la tecnología
en nuestras vidas se refieren a las nuevas tecnologías o la alta tecnología. Nosotros mismos al
escuchar la palabra tecnología tendemos a pensar en ordenadores de última generación, en
naves espaciales, satélites artificiales, redes de alta tensión, centrales eléctricas, grandes
máquinas…
Sin embargo los objetos más domésticos y cotidianos también son productos tecnológicos: los
libros, la ropa que vestimos o los bolígrafos no han estado siempre ahí, surgieron a raíz de un
descubrimiento o de una invención en un momento determinado de la historia; también
fueron, en su día, tecnología punta.
Se suele asociar tecnología con modernidad, pero realmente la actividad tecnológica, la
curiosidad por modificar nuestro entorno para mejorar nuestras condiciones de vida, es algo
tan viejo como la humanidad.