11 Resistencia Al Corte de Los Suelos: 11.1 Justificación

Notas Mecánica de Suelos y Rocas Edilma Lucía Gómez Paniagua
11 RESISTENCIA AL CORTE DE LOS SUELOS
11.1 JUSTIFICACIÓN
En la mayoría de los problemas de ingeniería sólo la resistencia al corte merece ser
considerada. Aunque los suelos están sometidos a esfuerzos de compresión, tracción
y de cizalladura o de corte, la resistencia que tienen a los de compresión es tan alta y
la que tienen a la tracción tan baja que el interés del ingeniero se centra sólo en la
resistencia al corte.
11.2 TEORÍA DE FALLA MOHR COULOMB

La teoría de falla de uso tradicional en Mecánica de Suelos es la de Mohr-Coulomb,
una generalización de las teorías de falla propuestas separadamente por Coulomb y
Otto Mohr. Esta teoría, establece que la rotura por corte en un punto de una masa de
suelo ocurre cuando el esfuerzo cortante en una dirección dada “" llega a igualar a la
resistencia a la cizalladura en esa misma dirección “s”, la cual depende de la cohesión
y de la fricción interna de los granos, y está dada por la siguiente expresión.
s  c  Tag
En esta expresión “s” es la resistencia al corte del suelo en un punto dado y en una
dirección determinada, “c” es la cohesión entre las partículas, “” es el esfuerzo normal
a la dirección para la cual se considera la resistencia a la cizalladura o al corte y “” es
el ángulo de fricción interna del suelo.
En cuanto al esfuerzo “” debe entenderse que se trata siempre del esfuerzo efectivo
que es el que da la resistencia al corte por fricción, por lo que es más correcto
escribirla de la siguiente manera.
s  c   Tag  c  (  u)Tag
En cuanto al valor de la cohesión “c”, debe entenderse que esta no es una constante
del material, como lo propuso inicialmente Coulomb, sino una función que depende del
contenido de humedad gravimétrica el suelo (w). De esta manera, la expresión podría
rescribirse así:
s  f (w)  (  u)Tag
En un sistema de coordenadas con eje horizontal representando los esfuerzos
normales y eje vertical representando los esfuerzos tangenciales o de corte, dicha
ecuación representa una recta que se conoce con el nombre de recta de
Mohr-Coulomb, tal como se indica en la Figura 11.1. Las ideas más recientes sobre
resistencia al corte, aplicadas a suelos compresibles, hacen necesario establecer una
distinción entre las arcillas normalmente consolidadas para las que la ley lineal parece
Capítulo 11. Resistencia al corte 11-1

seguir siendo satisfactoria con la ordenada en el origen nula (c = 0) y las

preconsolidadas en las que la ley lineal ha tenido que ser sustituida por otra más
compleja.
Figura 11.1. Envolvente de Mohr-Coulomb

Aunque la teoría de falla de Mohr-Coulomb ha dado en general buenos resultados
prácticos en los suelos, existen otras teorías de falla que aunque pueden ser un poco
más complejas son mucho más aproximadas a la realidad.
Los ensayos tradicionales que se realizan en el laboratorio para el estudio de la
resistencia al corte de un suelo son los de corte directo, compresión simple y
compresión triaxial. Con estas pruebas se pretenden determinar los valores de c y  y
también estudiar las relaciones esfuerzo-deformación en los suelos.
11.2.1 El concepto de ángulo de fricción interna

Para entender conceptualmente el concepto del ángulo de fricción interna de un suelo,
consideremos primero la Figura 11.2. Cuando un suelo falla, no lo hace a través de un
plano que atraviesa los granos de suelo (Figura 11.2a), sino que se produce un
deslizamiento que ocurre grano a grano (Figura 11.2a), de manera que la resistencia
que ofrece una masa de suelo frente al deslizamiento de la otra, tiene que ver con las
fuerzas friccionales que se desarrollan entre los granos que la componen.
Figura 11.2. Envolvente de Mohr-Coulomb

Así las cosas, mientras más granos entren en contacto entre sí por unidad de
superficie, mayor será el esfuerzo necesario para que ocurra el deslizamiento
(interviene acá la compacidad del suelo o la relación de vacíos del mismo). En este
mismo sentido, se deduce fácilmente que cuanto más angulosos y trabados se
encuentren los granos y cuanto mayor sea el coeficiente friccional del material que lo
compone, mayores serán las fuerzas friccionales que desarrollará (comparemos por
ejemplo las arenas con las arcillas).
Ahora consideremos el ejemplo de un plano inclinado como el de la Figura 11.3. Si
sobre este plano se apoya un cuerpo de peso W, cuya área de contacto en el plano es
“A”, para un valor cualquiera del ángulo “”, tendremos lo siguiente:
Figura 11.3. Plano inclinado

F es la fuerza que, dependiendo de la magnitud del ángulo α, tratará de deslizar el
cuerpo sobre el plano (F=W Senα).
fn es la fuerza que, dependiendo de las características friccionales de los materiales,
se le opondrá a F y será de sentido contrario.
Si aumentamos paulatinamente el ángulo α, llegará un momento en que la fuerza F
iguala a la fuerza fn (F = fn). En este momento diremos que el deslizamiento es
inminente, ya que se ha alcanzado el valor máximo de la fuerza de fricción. A este
ángulo α lo denominamos ángulo de fricción del material . Así las cosas, el ángulo de
fricción del material  es el valor límite del ángulo de oblicuidad α.
Estas conclusiones pueden extrapolarse a otras situaciones. Supongamos el caso de
una arena limpia y seca, o sea en la que no exista ninguna fuerza de unión entre sus
granos (no hay cohesión). El máximo ángulo con el que se podrá construir un talud
con dicha arena tendrá un ángulo  con respecto a la horizontal ya que a un grano de
arena apoyado sobre este talud se le podría aplicar el mismo esquema. A este ángulo
 se lo denomina en Mecánica de Suelos ángulo de fricción interna del material. No
obstante, se debe tener en cuenta que la resistencia friccional en arenas es algo más

compleja que lo que hemos visto en cuerpos sólidos, ya que es la suma de una
resistencia friccional entre sus granos y de otra fricción debida al rodamiento de los
mismos.
11.2.2 El concepto de cohesión

Hay suelos o estados de los suelos en los que además de los esfuerzos friccionales
contribuyen otro factor para determinar la resistencia final al esfuerzo de corte. A este
factor suele denominársele como cohesión, debiéndose considerar a esta en dos
formas diferentes.
En primer lugar, está el caso de las arcillas en las cuales se tienen fuerzas de carácter
electrostático, que son generadas por la película de agua absorbida que se forma
sobre cada partícula, y generan una cohesión que suele denominarse cohesión
verdadera.
En segundo lugar, se tienen las arenas y también los limos y las arcillas, los cuales
pueden tener para ciertos grados de humedad una cohesión aparente que se debe a
las fuerzas de tensión superficial. Esta atracción entre partículas como consecuencia
de la tensión superficial, de la cual se habló en el Capítulo 06, se pierde rápidamente si
la muestra se sumerge en agua, ya que la muestra absorbe agua, los meniscos
aumentan de radio con lo cual los esfuerzos que mantienen unidas a las partículas
disminuyen, las partículas se separan y la muestra se desgrana totalmente o en trozos
perdiendo de esta forma la cohesión aparente debida a la tensión superficial.
11.3 ENSAYO DE CORTE DIRECTO
11.3.1 Aspectos generales del ensayo

El ensayo de corte directo consiste en someter una muestra cilíndrica aplanada o
prismática de sección cuadrada, de suelo confinada lateralmente dentro de una caja
metálica, a una carga normal N para aplicarle luego una carga tangencial T, que se
aumenta gradualmente hasta hacer fallar el espécimen por rotura a través de un plano
preestablecido, tal como se esquematiza en la Figura 11.4.
N
N
Placa Metálica Espécimen de suelo
Piedra Porosa
de área transversal A
T A B
T
Suelo
Plano de falla predeterminado
Piedra Porosa
Figura 11.4. Muestra de suelo sometida a un ensayo de corte directo

Las piedras porosas superior e inferior proporcionan drenaje libre a muestras saturadas
cuando se desee y se sustituyen por placas metálicas al ensayar muestras secas.
El esfuerzo tangencial se logra debido a que la caja consta de dos secciones, una de
las cuales es móvil y se desliza respecto a la otra para producir el esfuerzo tangencial
o de corte. Por la construcción del aparato, el plano de falla resulta bien definido,
como se muestra en la Figura 11.4.
Dependiendo de las características del ensayo, puede ser de esfuerzo controlado o de
deformación controlada. En el ensayo de esfuerzo controlado se aplican valores fijos
de la fuerza tangencial al aparato de modo que el esfuerzo aplicado tiene siempre un
valor prefijado. En el ensayo de deformación controlada la máquina actúa con una
velocidad de deformación constante y la fuerza actuante sobre el espécimen se lee en
el extensómetro correspondiente.
Los esfuerzos normal () y tangencial () se determinan suponiendo que ellos están
uniformemente distribuidos sobre la Sección A del espécimen, de modo que  = N/A y
 = T/A.
Se acostumbra hacer el ensayo utilizando tres cargas normales N 1, N2 y N3 sobre tres
muestras diferentes del mismo suelo, para las cuales las fuerzas tangenciales con las
que se produce la falla serán llamadas respectivamente T 1, T2 y T3.
Si se traza un diagrama  contra , los pares de valores correspondientes a cada
fuerza normal aplicada nos darán tres puntos en dicho gráfico. Si se considera que el
material ensayado cumple con el criterio de falla de Mohr-Coulomb, la línea que une
esos tres puntos debe ser la línea recta de ecuación  = s = c+tag, ya que en cada
una de las tres determinaciones el esfuerzo cortante  ha igualado a la resistencia al
corte s del suelo. La intersección de tal recta con el eje  nos da la cohesión c y la
inclinación de la misma respecto a la horizontal nos da el ángulo de fricción interna .
11.3.2 Curvas esfuerzo deformación en el ensayo de corte directo

En el ensayo se miden además de las cargas aplicadas al espécimen, las
deformaciones que el mismo sufre. De este modo, se pueden trazar las curvas de
esfuerzo cortante  contra deformación  de la muestra. Debido a que durante el
ensayo la carga que va deformando la muestra es tangencial, la deformación, en
porcentaje, se calcula como   (D / D)  100 .
Estas curvas son muy diferentes dependiendo del tipo de material ensayado
(Figura 11.5). Se ha encontrado que en suelos grueso granulares sueltos aumenta la
densidad cuando actúan fuerzas de cizalladura sobre ellos de modo que la falla es de
tipo plástica y que, por el contrario, en suelos grueso granulares densos, las fuerzas
cortantes hacen aumentar en ellos la relación de vacíos de modo que la falla es de tipo
frágil. Un comportamiento análogo se obtiene para suelos fino granulares blandos y
duros, aunque por razones muy diferentes.

En las curvas que acaban de la Figura 11.5 se observa como para materiales con falla
de tipo frágil ocurre una rigidez inicial mucho mayor con un pico que no se da para
materiales de falla plástica y como para deformaciones muy grandes las curvas tienden
a unirse.
Esfuerzo Cortantel ()
Material Frágil
Arenas Densas y Arcillas Duras
Esfuerzo Cortante ()

Ecuación de la recta 
 = s = c+Tag
.
. 3
.1
2 Material Plástico
Arenas Sueltas y Arcillas Blandas
Esfuerzo Normal () Deformación Unitaria ()
Figura 11.5. Curvas obtenidas en un ensayo de corte directo

En el ensayo, la validez de los resultados depende del tipo de falla del material. En
suelos de falla frágil, cuando se inicia el movimiento del marco móvil, la deformación en
la superficie de falla AB mostrada en la Figura 11.4 no es uniforme, sino que existen
concentraciones de deformación en las zonas próximas a "A” y a “B”, que son menores
que en el centro de la muestra. A estas diferentes deformaciones corresponden
diferentes esfuerzos. Cuando las zonas A y B alcanzan la deformación y el esfuerzo
de falla, en el centro de la muestra actúan esfuerzos mucho menores. Al continuar la
deformación, la falla progresa hacia el centro de la muestra y las zonas extremas, ya
falladas, están trabajando a un esfuerzo mucho menor que el de falla. Se mide
entonces lo que podría considerarse la deformación media de la superficie de falla y la
resistencia medida en el ensayo es un promedio de los esfuerzos actuantes que no
representa la máxima resistencia sino que es menor. Esto no sucede en suelos de falla
plástica ya que en ellos una vez se alcanza la falla, en todos los puntos de la sección
crítica, los esfuerzos son iguales, independientemente de cualquier concentración de la
deformación de modo que el esfuerzo promedio si representa al máximo de falla.
En el ensayo, existe otro inconveniente y es que el área del espécimen está en
realidad variando durante la aplicación de las fuerzas tangenciales, lo cual indica que
deben hacerse correcciones que normalmente no se efectúan.
11.3.3 Resistencia residual en el ensayo de corte directo

Los parámetros de resistencia al corte que se obtienen considerando los valores de la
carga tangencial máxima aplicada en el ensayo corresponden a la condición de falla
del material.

Si la prueba de corte directo se continúa después de obtenida la falla del material, la

fuerza tangencial disminuye. Si la prueba se continúa, la resistencia disminuye a
medida que el desplazamiento crece hasta un límite que se conserva, aun cuando el
desplazamiento crezca a valores muy grandes, del orden de varios centímetros a la
escala de la prueba. A esta resistencia final se le denomina resistencia residual.
Con los valores de la carga tangencial correspondientes a la resistencia residual del
suelo también se puede trazar la envolvente de falla del material y obtener los
parámetros de cohesión y fricción residuales, normalmente denominados c r y r.
Los valores de cr y r que se obtienen son mucho menores que los de c y 
correspondientes a la condición de falla propiamente dicha. Incluso el valor de c r es
prácticamente nulo.
11.4 ENSAYO DE COMPRESIÓN TRIAXIAL
11.4.1 Montaje del ensayo

El ensayo de compresión triaxial se realiza sobre muestras cilíndricas que van
envueltas en una membrana impermeable de caucho y dentro de una celda que se
llena de agua para de esta manera poderle aplicar una presión de confinamiento que el
suelo recibe uniformemente en todas las direcciones (Figura 11.6). Luego se aplica
una carga axial con medida de deformaciones y frecuentemente de presiones
intersticiales hasta llevar el suelo a la falla.
Pistón para aplicación del esfuerzo
desviador
Piedra porosa
Tubo de nylon flexible
Cámara llena de agua
Membrana de caucho
Suelo
Piedra porosa
Hacia la bureta de drenaje

Desde el controlador de
presión de cámara
Hacia el transductor de presión
intersticial
Figura 11.6. Cámara de compresión triaxial

El ensayo se puede hacer de deformación controlada, caso en el cual el pistón de
carga vertical se apoya en un marco de carga motorizada con un sistema de
engranajes que permite deformar verticalmente la muestra a una velocidad constante.
También se puede hacer de esfuerzo controlado, caso en el cual la muestra se deforma
libremente bajo la aplicación de cargas en el pistón vertical.

Con el pistón se aplica el esfuerzo axial 1 y con la cámara los esfuerzos de

confinamiento 2 y 3. Debido a que no se generan esfuerzos de corte en los planos en
que actúan los esfuerzos axial (1) y de confinamiento (2 y 3), estos planos son
principales y por lo tanto los esfuerzos son también principales. Los esfuerzos
principales 2 y 3 son iguales y actúan no sólo en la superficie vertical de la muestra
sino también en sus bases y suelen denominarse como 3. Por tanto, si en cualquier
etapa del ensayo la carga del pistón es P y la sección transversal de la muestra es A,
entonces:
P P
1    3   1   3
A A
El esfuerzo P/A que aplica el pistón es igual a la diferencia entre los esfuerzos totales
principales mayor y menor, 2 - 3, el cual se denomina esfuerzo desviador.
11.4.2 El círculo de Mohr

Con el equipo de compresión triaxial sólo es posible aplicar esfuerzos principales, que
son aquellos que actúan en planos principales, es decir en planos en los que no actúan
esfuerzos cortantes. El estado de tensión en cualquier otro plano que no sea uno de
los principales se determina indirectamente.
Si consideramos un elemento infinitesimal de volumen cúbico y de caras verticales y
horizontales dentro de una muestra de suelo sometida a un ensayo de compresión
triaxial, el estado de esfuerzos será el mismo, independientemente de la localización
que tenga dentro de la muestra (Figura 11.7). Los planos que limitan dicho elemento
son planos principales, dado que en ellos no actúan esfuerzos cortantes, sólo
esfuerzos normales, llamados esfuerzos principales y designados como 1, 2 y 3.
1
1
3 2
3
3 2
2
1
Figura 11.7. Estado de esfuerzos en el ensayo triaxial

En el ensayo triaxial, cuando se aplica el esfuerzo axial 1 los otros dos esfuerzos
permanecen constantes e iguales 2 = 3. Por eso podemos reducir el problema a un
caso plano en el que se pueden usar 2 o 3 indiferentemente, aunque normalmente se
usa 3, tal como se indica en la Figura 11.8.

1  3
3 1
3
3 3 3 3 3 3
3
3 1
1  3
Figura 11.8. Estado de esfuerzos simplificado en el ensayo de compresión

triaxial
Por resistencia de materiales es claro que en el estado plano considerado solo existen
los dos planos principales que se muestran en los que actúan los esfuerzos principales
1 y 3. De este modo, en cualquier otra dirección oblicua existirá conjuntamente con el
esfuerzo normal  un esfuerzo tangencial . El problema es encontrar los valores de 
y  para cualquier dirección en función de los esfuerzos principales 1 y 3 y el ángulo 
que define dicha dirección.
Con base en el elemento infinitesimal mostrado en la Figura 11.9, haciendo equilibrio
de fuerzas en las direcciones normales y tangenciales relativas al plano con inclinación
 y finalmente dividiendo por dA se obtienen las siguientes expresiones útiles para
encontrar los valores de  y  en función de los esfuerzos principales 1 y 3 y del
ángulo .
dA  ( 1dACos )Cos  ( 3dASen ) Sen     1Cos 2   3Sen 2
dA  ( 1dACos ) Sen  ( 3dASen )Cos    ( 1   3 ) SenCos
1
1dACos

1 1dACos dACos

  
3dASen 3dASen dA

dA

3 3 3
dA
 dA
 dASen
 Área dA
1
Figura 11.9. Deducción de los esfuerzos normal y de corte en un ensayo de

compresión triaxial

De la trigonometría tenemos las siguientes relaciones fundamentales:

1  Cos 2 1  Cos 2 Sen 2
Cos 2  Sen 2  SenCos 
2 2 2
Haciendo uso de estas relaciones podemos convertir las expresiones de  y  en
función del ángulo doble 2.
 1  Cos 2   1  Cos 2   1  1  
  1    3   Cos 2  3  3 Cos 2
 2   2  2 2 2 2
Sen 2
   1   3 
2
Finalmente las expresiones para hallar  y  en función de los esfuerzos principales 1.
y 3 y el ángulo quedan de la siguiente manera.
1   3 1   3 1   3 1   3
   Cos 2     Cos 2
2 2 2 2
 3
 1 Sen 2
2
Elevando al cuadrado las dos expresiones anteriores y sumándolas se obtiene
finalmente lo siguiente.
 3   3 
2 2

  1   2   1 
 Cos 2 2  Sen 2 2 
 2   2 
 3   3 
2 2

  1   2   1 
 2   2 
En un sistema de coordenadas con eje horizontal representando los esfuerzos
normales y eje vertical representando los esfuerzos tangenciales o de corte, dicha
ecuación representa puntos situados sobre una circunferencia con centro en
 1   3   3
 ,0  y de radio 1 .
 2  2
Esta representación es conocida con el nombre círculo de Mohr, que se define como
el lugar geométrico de los puntos cuyas coordenadas dan el valor de los esfuerzos
normales y tangenciales o de corte en las diferentes direcciones que pasan por un
punto dado de la masa de material sometida a la acción de fuerzas.
En este círculo, D es el punto cuyas coordenadas representan los esfuerzos normal  y
tangencial  asociados al plano que tiene una inclinación .

1
Esfuerzo Tangencial ()


D
3 
 
2
A B
Esfuerzo Normal ()
3
1   3 1   3
2 2
1
Figura 11.10. Círculo de Mohr en el ensayo de compresión triaxial
11.4.3 Envolvente de falla

Se había comentado que la rotura por corte en un punto de una masa de suelo
comienza cuando en alguna superficie que pasa por dicho punto se alcanza una
combinación crítica entre el esfuerzo normal y el tangencial o de corte. Dicha
combinación crítica se considera que se da cuando el esfuerzo tangencial o de corte 
iguala a la resistencia al corte del suelo s en la misma dirección. Esto es para cuando
 = s = c + tag. Esto es posible sólo si la relación entre 1 y 3 es tal que el círculo
de Mohr correspondiente es tangente a la recta de Coulomb que representa la
resistencia al corte del suelo, tal como se indica en la Figura 11.11. Un círculo no
tangente a la recta indica que en ningún punto de la masa de suelo se alcanza un
esfuerzo tangencial o de corte  que sea igual a la resistencia al corte del mismo.
1
g 
t a
c+
=

D 
3 

2=90+

c = 45+2
A O B
3
1
Figura 11.11. Envolvente de falla en el ensayo de compresión triaxial

Nuevamente el ángulo  representa la inclinación del plano en que actúan los

esfuerzos  y  respecto al plano en que actúa el esfuerzo principal mayor 1. Según la
geometría del problema los lados AO y DO son iguales por ser radios del círculo. Por
lo tanto, si el ángulo AOD es igual a 90-, resulta obvio que  = 45+/2 y entonces
2 = 90+.
Si retomamos las siguientes ecuaciones:
1   3 1  3
  Cos 2
2 2
 3
 1 Sen 2
2
Sabiendo que para la condición de falla  = c + tag podemos obtener lo siguiente.
1  3    3 1  3 
Sen 2  c   1  Cos 2 Tag
2  2 2 
Reemplazando el valor de  por el de 45+/2 podemos hacer lo siguiente:
1  3     3 1   3 
Sen(90   )  c   1  Cos(90   ) Tag
2  2 2 
1  3     3 1  3 
Cos  c   1  Sen Tag
2  2 2 
( 1   3 )Cos  2c   1   3    1   3 Sen Tag
( 1   3 )Cos 2  2cCos   1   3    1   3 Sen Sen
( 1   3 )Cos 2  2cCos   1   3 Sen   1   3 Sen 2

( 1   3 )(Cos 2  Sen 2 )  2cCos   1   3 Sen
 1   3  2cCos   1 Sen   3 Sen
 1 (1  Sen )  2cCos   3 (1  Sen )
Cos 1  Sen
 1  2c 3
1  Sen 1  Sen
1  Sen Cos
Se puede demostrar que  Tag 2 (45   / 2) y que  Tag (45   / 2)
1  Sen 1  Sen
De esta forma obtenemos finalmente que la expresión que relaciona los esfuerzos
principales 1 y 3 a la cual corresponde la condición de falla del suelo es la siguiente.
 1   3Tag 2 (45   / 2)  2cTag (45   / 2)

En mecánica de suelos se acostumbra emplear estas expresiones en función de

N  Tag 2 (45   / 2) . El valor de N juega un papel importante en la simbología
matemática de muchas aplicaciones en Mecánica de Suelos.
 1   3 N  2c N
Debido a que el ensayo de compresión triaxial lo que busca es determinar la recta de
Coulomb, que se define con los parámetros de resistencia al corte c y , lo que se hace
es llevar a cabo dos o más ensayos de compresión triaxial sobre muestras del mismo
suelo, con presiones de confinamiento diferentes y llevar las pruebas hasta la falla.
Para cada una de las pruebas se tendrá la combinación de esfuerzos 1 y 3 que
produce la falla, con la representación correspondiente del círculo de Mohr. Por lo
tanto, al menos un punto de cada círculo representa los esfuerzos normal  y
tangencial o de corte  asociados a la falla. La envolvente de rotura será entonces la
recta tangente a los círculos de falla que es precisamente la recta de Coulomb de
ecuación  = c + tag. De ahí encontramos los parámetros c y  (Figura 11.12).
Envolvente de Falla
c tag

D
3 3 1 3 1 1 Esfuerzo Normal ()
Figura 11.12. Círculos de Mohr y envolvente de falla en el ensayo de compresión

triaxial
11.4.4 El concepto del polo

En el caso más general en que los esfuerzos principales no son horizontal y vertical, el
círculo de Mohr puede servir para encontrar los esfuerzos actuantes en cualquier
dirección y ligados a un punto considerado de la masa de suelo, siempre y cuando se
conozcan las magnitudes y las direcciones de los esfuerzos principales.
Consideremos el punto Q en una masa de suelo sujeto a esfuerzos principales
actuantes según las direcciones d1 y d3 del que requerimos conocer los esfuerzos
ligados a una dirección AA’ que forma un ángulo  con la dirección d3 (Figura 11.13).
El punto D cuyas coordenadas proporcionan los esfuerzos deseados puede obtenerse

llevando el ángulo 2 en sentido contrario al de las manecillas del reloj, a partir del eje
horizontal.
Sin embargo, la posición D puede obtenerse por otro método diferente. Primero se
traza por B una paralela a la dirección d 3 correspondiente al plano en que actúa el
esfuerzo principal mayor 1. Esta línea corta el círculo en el punto P, llamado polo.
Este punto puede trazarse también trazando por A una paralela a la dirección d 1
correspondiente al plano en que actúa el esfuerzo principal menor 3. Por P se puede
trazar una paralela a la dirección AA’ que corta al círculo en el punto D.
d3
d1
A
D Q
Polo P
D

1 A’
 
3
2
A B
3
1
Figura 11.13. Concepto del polo

Según lo anterior, una vez obtenido el polo P será posible, pasando por él paralelas a
diferentes direcciones, encontrar puntos en el círculo de Mohr cuyas coordenadas
representan los esfuerzos asociados a planos en las diferentes direcciones
consideradas.
Además, si se toman varios puntos en el círculo y se trazan por ellos paralelas a las
direcciones de los planos en que actúan los esfuerzos representados por esos puntos,
todas esas líneas concurrirán en el polo. Para encontrar este importante punto bastará
con conocer la dirección del plano en que actúan los esfuerzos representados por un
solo punto del círculo.
En el ensayo triaxial el esfuerzo principal mayor actúa sobre un plano horizontal y el
esfuerzo principal menor actúa sobre un plano vertical. Por lo tanto, el polo es el
indicado en la Figura 11.14.

Figura 11.14. Polo en el ensayo de compresión triaxial
11.4.5 Curvas esfuerzo deformación y los criterios de falla

Igual que en el ensayo de corte directo, en el de compresión triaxial se trazan las
curvas esfuerzo deformación, cuya forma puede ser una de las indicadas en la
Figura 11.15. Más adelante se explicarán las formas de estas curvas para diferentes
tipos de suelo.
Esfuerzo Desviador (1 – 3)
Material Frágil
Material Plástico
Deformación Unitaria ()
Figura 11.15. Curvas esfuerzo deformación en el ensayo de compresión triaxial

Para aplicación de la teoría de falla de Mohr-Coulomb se puede seguir como criterio de
falla alguno de los siguientes:

 La falla está determinada por el máximo esfuerzo cortante o la máxima diferencia

entre los esfuerzos principales (1 – 3) leída en las curvas esfuerzo desviador
deformación.
 La falla está determinada por la máxima relación entre los esfuerzos principales
(1/3).
 La falla está determinada por un máximo de deformación unitaria elástica
experimentada por el material sujeto a esfuerzos, de acuerdo con las curvas
esfuerzo desviador deformación.
11.4.6 Trayectoria de esfuerzos (diagramas p-q)

Cuando se desea representar los estados sucesivos de esfuerzos que existen en una
muestra de suelo sometida a un ensayo de compresión triaxial, una forma precaria de
hacerlo consiste en dibujar sobre un mismo diagrama la serie de círculos de Mohr
correspondientes a los diferentes valores de 1 soportados por la muestra, tal como se
indica en la parte izquierda de la Figura 11.16. Se puede ver que de esta forma se
obtiene un dibujo que puede ser bastante confuso al aumentar el número de valores de
1 considerados. Por lo anterior, se suele recurrir a los denominados diagramas p-q
cuyas coordenadas son p = (1+3)/2 y q = (1-3)/2.
(a) (b)
Figura 11.16. Representación de los estados de esfuerzos sucesivos en un

ensayo de compresión triaxial
La línea formada por la unión de los puntos con coordenadas (p,q), la cual se muestra
en la parte derecha de la Figura 11.16, se denomina trayectoria de esfuerzos. Cada

punto de ella, al igual que cada círculo de Mohr en la parte izquierda de la

Figura 11.16, representa un estado de esfuerzos determinado.
En el caso más general de un ensayo de compresión triaxial, si se dibujan en un mismo
diagrama los puntos con coordenadas (p,q) correspondientes a la falla del material,
cualquiera que haya sido el criterio seleccionado para tal fin, la línea recta que forma la
unión de dichos puntos tiene como pendiente Sen y como intercepto cCos, de
manera que este es un método alternativo para determinar los parámetros de
resistencia al corte, tanto en términos de esfuerzos efectivos como totales.
11.4.7 Tipos de ensayos triaxiales

Cuando se aplica una carga determinada a un suelo saturado, dado que el agua es
incompresible, es ella quien en principio recibe el total de la carga aplicada. El exceso
de carga que soporta el agua es lo que se denomina exceso de presión de poros.
Estos excesos de presión de poros hacen que el esfuerzo efectivo sobre una masa de
suelo dada disminuya y que por lo tanto la resistencia al esfuerzo cortante también lo
haga.
Dependiendo de que los excesos de presión de poros generados bajo la aplicación de
una nueva carga puedan o no disiparse rápidamente, se reconocen dos condiciones
extremas. Primero, la condición drenada, para la cual el cambio de esfuerzos se da tan
lentamente respecto a la capacidad de drenaje del suelo, como para que no se
produzca ningún exceso de presión de poros. En segundo lugar, se tiene la condición
no drenada, durante la cual los esfuerzos se cambian tan rápidamente, con respecto a
la posibilidad que el suelo tiene para drenar, que no se produce disipación alguna de la
presión de poros. Estas dos condiciones rara vez se dan íntegramente en el terreno,
pero por ser condiciones límites constituyen guías valiosas para entender el
comportamiento de los suelos.
En los suelos gruesogranulares, en los que la permeabilidad es muy alta, los excesos
de presión de poros se disipan rápidamente, por lo que la condición prevaleciente en
ellos es la drenada.
En los suelos cohesivos, por su baja permeabilidad, el agua requiere periodos de
tiempo importantes para movilizarse dentro de la masa de suelo y por lo tanto la
condición prevaleciente, por lo menos en las etapas de aplicación de la carga e incluso
mucho después de terminada dicha aplicación, es la condición no drenada. Además
del hecho de que la condición no drenada prevalezca o no, existen otros factores que
tienen gran influencia en la resistencia al esfuerzo cortante tales como la historia previa
de consolidación del suelo, la velocidad de aplicación de las cargas y la sensibilidad de
la estructura.
Con el fin de recrear en laboratorio las condiciones discutidas, se han ideado tres
diferentes tipos de ensayos triaxiales, cuyas variaciones dependen de que se haga

consolidar o no la muestra con la presión de confinamiento antes de aplicar el esfuerzo

axial y también de la velocidad con que se aplique la carga axial.
Ensayo lento o consolidado drenado (CD)
Este ensayo puede simular la situación en que el suelo que se afectará con una
construcción es un depósito de arena o grava, de manera que la falla potencial debido
a la aplicación de nuevas cargas se producirá en condiciones drenadas. También es
posible que se presente esta situación en cortes de arcilla, varios años después de su
construcción, cuando el exceso de presión intersticial (negativo) se disipa por
completo.
En este ensayo se aplica a la muestra la presión de confinamiento (3) teniendo abierta
la válvula de comunicación con la bureta y dejando transcurrir el tiempo necesario para
que haya completa consolidación bajo la presión actuante. Cuando el equilibrio
estático interno se alcanza, todas las fuerzas exteriores actúan sobre la fase sólida del
suelo de modo que producen esfuerzos efectivos en tanto que los esfuerzos neutros en
el agua corresponden a la condición hidrostática. Posteriormente la muestra es llevada
a la falla aplicando la carga axial en pequeños incrementos, cada uno de los cuales se
mantiene el tiempo necesario para que la presión en el agua, en exceso de la
hidrostática, se reduzca a cero. En la Figura 11.17 se ilustra el proceso que se lleva a
cabo en este tipo de ensayo.
Primera Etapa Segunda Etapa Etapa Final
Esfuerzos Totales = Esfuerzos Efectivos
3  1 = 3 +  1 = 3 + 
3 3 3 3 3 = 3 3= 3
u=0 + u=0 = u=0 u=0
3  1 = 3 +  1 = 3 + 
Figura 11.17. Etapas en un ensayo de compresión triaxial CD

En la primera etapa en la que se aplica el esfuerzo 3, por permitirse la consolidación
total, la presión de poros se ha reducido a cero. En la segunda etapa actúa sobre el
espécimen el esfuerzo desviador  y nuevamente la presión de poros es cero por
permitirse drenaje libre y dejarse transcurrir suficiente tiempo. El valor  en la falla,
es el esfuerzo desviador de falla que mide la resistencia a la compresión del
espécimen en esta prueba.

La suma de estas dos etapas conduce a la etapa final que se representa en dos partes,
una relativa a los esfuerzos totales y otra a los esfuerzos efectivos, aunque en este
caso son iguales.
Una de las características fundamentales de esta prueba es que los esfuerzos
transmitidos al espécimen son efectivos. Por lo anterior, se obtiene mediante este
ensayo sólo una envolvente de resistencia, tal y como se muestra en la Figura 11.18.
La resistencia del suelo queda en términos de esfuerzos efectivos según la siguiente
expresión en la que c’ y ’ son cohesión y ángulo de fricción interna reales.
  c  Tag   c  (  u)Tag 
Se hace esta distinción porque, como se verá a continuación, con las demás pruebas,
es posible hallar otros parámetros c y  que no son reales sino aparentes.
Envolvente de Falla Única (Esfuerzos Efectivos)
c’ tag’
’
c’

3 3
1 1
Figura 11.18. Envolvente de falla en un ensayo de compresión triaxial CD

Ensayo consolidado rápido o consolidado no drenado (CU)
Los ensayos no drenados simulan la situación cuando un depósito de arcilla se somete
a un cambio de esfuerzos que es rápido comparado con el tiempo necesario para la
disipación del exceso de presión intersticial, de manera que la falla se produce en
condiciones no drenadas. Sin embargo, si el tiempo de construcción se extiende por
largo tiempo, como suele suceder, por ejemplo, en presas de tierra, al final de la
construcción ya se habrá producido algún grado de consolidación. Si en este momento
los esfuerzos de corte que se generan en el suelo tienen la magnitud suficiente para
producir la falla, esta se producirá rápidamente sin drenaje adicional. Este es
precisamente el caso en que se debe emplear un ensayo consolidado no drenado.

En este ensayo se aplica a la muestra la presión de confinamiento (3) teniendo abierta

la válvula de comunicación con la bureta y dejando transcurrir el tiempo necesario para
que haya completa consolidación bajo la presión actuante. Cuando el equilibrio
estático interno se alcanza, todas las fuerzas exteriores actúan sobre la fase sólida del
suelo de modo que producen esfuerzos efectivos en tanto que los esfuerzos neutros en
el agua corresponden a la condición hidrostática. Posteriormente, la muestra es
llevada a la falla aplicando la carga axial con la válvula de salida del agua a la bureta
cerrada, de modo que no se permite ninguna consolidación adicional en el espécimen.
Esto hace que a medida que se aplica el esfuerzo desviador se desarrollen presiones
de poros y que por lo tanto los esfuerzos efectivos ya no sean iguales a los esfuerzos
totales sino que se vean disminuidos vertical y lateralmente por el valor de esa presión.
En la Figura 11.19 se observa que la primera etapa es igual a la que se lleva a cabo en
un ensayo lento. La segunda etapa se caracteriza por el desarrollo de presión de
poros en el agua de la muestra y la resistencia a la compresión  resulta mucho
menor que en la prueba lenta. Los esfuerzos totales que son los que el operador
aplica sobre el espécimen son mayores que los efectivos siendo la diferencia
precisamente la presión neutra u.
Esfuerzos Totales Esfuerzos Efectivos
3  1 = 3 +  1 = 3 +  = 3 – u + 
3 3 3 3 3 = 3 – u 3= 3 – u
u=0 + u = u u
3  1 = 3 +  1 = 3 +  = 3 – u + 
Figura 11.19. Etapas en un ensayo de compresión triaxial CU

El círculo de falla se puede trazar de dos maneras, una a partir de los esfuerzos totales
que el operador conoce y otra a partir de los esfuerzos efectivos para la cual se
requiere conocer el valor de la presión neutral u.
En la Figura 11.20 el círculo I es de esfuerzos totales y el círculo I' es el
correspondiente círculo de esfuerzos efectivos. Se observa que los círculos de
esfuerzos efectivos y los de esfuerzos totales tienen el mismo diámetro debido a que
se resta a 1 y a 3 la misma presión de poros u.
Se observa que la envolvente en términos de esfuerzos totales se puede expresar
mediante la relación que se muestra a continuación. En esta expresión c y  reciben el
nombre de cohesión aparente y ángulo de fricción interna aparente, respectivamente, y
son simplemente parámetros matemáticos que se consideran para determinar la

resistencia al corte del suelo en este tipo de prueba a partir de los esfuerzos normales
totales que también son aparentes, pues no son los que el suelo soporta realmente en
su estructura.
  c  Tag
Envolvente de Falla (Esfuerzos Totales)
c tag
Envolvente de Falla (Esfuerzos Efectivos)

c’ tag’ '
c' I' I
c
3 u Esfuerzo Normal ()

3
1 u
3
Figura 11.20. Envolventes de falla en un ensayo de compresión triaxial CU

En términos de esfuerzos efectivos, la resistencia del suelo quedaría dada por la
siguiente expresión en la que c’ y ’ si son cohesión y ángulo de fricción interna reales.
  c  Tag   c  (  u)Tag 
La envolvente de esfuerzos efectivos es posible hallarla solo si se miden las presiones
de poros durante la ejecución del ensayo. Por ser una envolvente de esfuerzos
efectivos, los círculos deben ser tangentes adicionalmente a la recta que se obtendría
en una prueba triaxial lenta.
Ensayo rápido o no consolidado no drenado (UU)
Este ensayo puede simular la situación cuando un depósito de arcilla se somete a un
cambio de esfuerzos que es rápido comparado con el tiempo necesario para la
disipación del exceso de presión intersticial. De esta manera, la falla potencial debido
a la aplicación de nuevas cargas se producirá en condiciones no drenadas. Las obras
que se ven sometidas a esta situación incluyen pequeños terraplenes, taludes
artificiales, muros de contención y cimentaciones de edificios.
En este ensayo la presión de confinamiento y la presión de celda se aplican tan
rápidamente con respecto a la velocidad del agua para salir que no se produce alguna
disipación de los excesos de presión de poros (Figura 11.21).


1 = 3 + 
3  1 = 3 + 
1 = 3 – (u1 +u2) + 
3 3 3 3 3 = 3 – (u1 +u2) 3= 3 – (u1 +u2)

u1 + u2 = u1 +u2 u1 +u2
1 = 3 + 
3  1 = 3 + 
1 = 3 – (u1 +u2) + 
Figura 11.21. Etapas en un ensayo de compresión triaxial UU

El círculo de falla se puede trazar de dos maneras, una a partir de los esfuerzos totales
que el operador conoce y otra a partir de los esfuerzos efectivos para la cual se
requiere conocer el valor de la presión neutral u (Figura 11.22).
c tag

c’ tag’ '
c' I' I
c
3 u=u1+u2 Esfuerzo Normal ()

3
1 u=u1+u2
3
Figura 11.22. Envolventes de falla en un ensayo de compresión triaxial UU
11.4.8 Factores que influyen en el comportamiento al esfuerzo cortante de los

suelos “cohesivos”
El término cohesivo se ha venido usando, a lo largo de estas notas, en referencia a
aquellos suelos que sin presión normal exterior apreciable presentan características de
resistencia al corte. Aunque en principio el término cohesión se asoció con una

especie de liga entre las partículas constituyentes, algunos autores piensan que esto
se debe, igual que en los suelos grueso granulares, a fricción entre las partículas.
Para evaluar con detalle los factores que influencia la resistencia al esfuerzo cortante
de los denominados suelos cohesivos consideremos la Figura 11.23, que muestra una
muesta de arcilla sedimentaria sometida a una prueba de corte directo.
1=N/A
1=N/A
T
Suelo
Suelo
Figura 11.23. Muestra de arcilla en un ensayo de corte directo

Si inicialmente se consolida la muestra bajo un esfuerzo 1 y además se tiene que
dicha arcilla nunca ha soportado un esfuerzo mayor que 1, la arcilla estará entonces
normalmente consolidada bajo este esfuerzo. En este caso las presiones de poros son
cero (u = 0). Si se incrementa el valor del esfuerzo normal en una cantidad 1
entonces sobre la muestra actuará un esfuerzo total igual a 2 = 1 + 1. Si la muestra
tiene muy buen drenaje, aunque inicialmente 1 será tomado por el agua, si transcurre
el tiempo suficiente, se producirá la consolidación de la muestra bajo este nuevo
incremento y 1 llegará a ser esfuerzo efectivo. Si además, aplicamos T en
incrementos pequeños y actuando cada uno un tiempo suficiente para que se disipe
cualquier exceso de presión de poros que se produzca, la resistencia al corte de la
arcilla estará dada por la expresión.
s  ( 1   1 )Tag  c   2Tag
Si T se aplica rápidamente, aparecerán presiones neutrales que disminuyen el
esfuerzo efectivo y por lo tanto la resistencia al esfuerzo cortante sería.
s  ( 1   1  u)Tag  ( 2  u)Tag
La resistencia al esfuerzo cortante varió simplemente porque se varió la velocidad de
aplicación de la carga T.
El valor de u que se genera depende de la sensibilidad de la arcilla. Una arcilla muy
sensible se degrada, tendiendo a disminuir de volumen por lo que u se hace mayor que
en el caso de una arcilla menos sensible.
Si a la muestra se le impide el drenaje, el esfuerzo 1 nunca podrá llegar a ser
efectivo ya que la arcilla no puede materialmente consolidarse y por lo tanto 1 no
dejará de ser presión neutral (1 = u). Al aplicar T, tampoco se disiparán las

presiones de poros que se generen y ello aunque sea aplicada lentamente. Si u T es la

presión de poros generada por T, la resistencia al corte de la arcilla queda definida de
la siguiente manera.
s  ( 1   1  u  uT )Tag  ( 1   1   1  uT )Tag  ( 1  uT )Tag
Nuevamente se observa que la resistencia al corte es diferente, sólo por un cambio en
las condiciones de drenaje.
Toda la anterior discusión, puede extenderse también para arcillas sobreconsolidadas
de la siguiente manera. Consideremos la misma muestra anterior, pero ahora
fuertemente sobreconsolidada para la presión 1 de gran magnitud. Si la muestra se
descarga después de haber sido preconsolidada bajo 1, esta tenderá a expandirse
pero como no puede tomar instantáneamente el agua necesaria para ello, el agua de
los poros queda en estado de tensión tal, que proporciona a las partículas sólidas una
presión suficiente para mantener el mismo volumen. Esta tensión debe ser igual a la
presión 1 bajo la cual la muestra fue sobreconsolidada.
   1
Si inmediatamente después de retirar la carga P, la muestra se lleva a la falla,

aplicando T rápidamente, se producirá una presión en el agua igual a 2. De esta
manera, la resistencia al esfuerzo cortante podrá escribirse como:
s  (   )Tan  0  (1   2 )Tan  (1   2 )Tan
Esta es la resistencia que se interpreta históricamente como cohesión de las arcillas,

por cuanto ocurre a esfuerzo exterior nul, pero que en realidad se debe a la historia de
preconsolidación de la arcilla.
Si el drenaje está completamente impedido, cualquiera que sea el descenso o aumento
de la carga exterior aplicada a la muestra, toda esa presión adicional la tomará el agua
y al aplicar T rápidamente el material tendría exactamente la misma resistencia debida
a la preconsolidación bajo 1, es decir, el material se comportaría como puramente
cohesivo.
Por otra parte, si el suelo tiene facilidad para absorber agua y se deja transcurrir el
tiempo para que esto suceda, después de haber removido la carga que producía 1, la
muestra se expanderá y gradualmente irá disipándose la tensión en el agua y por lo
tanto el esfuerzo efectivo hasta que finalmente sea nulo.
Todas estas discusiones que acaban de presentarse, hacen que los resultados de
pruebas triaxiales e arcillas normalmente consolidadas y en las preconsolidadas sean
como se explica en los dos numerales siguientes:

11.4.9 Arcillas normalmente consolidadas

En estas pruebas la envolvente de falla resulta ser una línea recta cuya prolongación
pasa por el origen de coordenadas. Se obtiene una sola envolvente que es de
esfuerzos efectivos y totales a la vez, pues en todas las etapas del ensayo la presión
de poros es cero.
Envolvente de Falla Única (Esfuerzos Efectivos)
tag’
’

3 3
1 1
Figura 11.24. Arcillas normalmente consolidadas en un ensayo triaxial CD

En estas pruebas la envolvente de falla también resulta ser una línea recta cuya
prolongación pasa por el origen de coordenadas. La envolvente de falla puede
obtenerse en términos de esfuerzos totales o efectivos. En este caso es correcto
suponer que la envolvente de esfuerzos efectivos es la misma que se hubiera obtenido
en una prueba lenta.
La resistencia al corte queda definida, como se dijo al explicar este tipo de ensayos en
general, solo que tanto c como c’ son nulas.
La diferencia que existe entre  y ’ depende del valor que alcance  en el instante de
la falla. Gráficamente se ve que a mayor valor de u, los círculos I e I’ estarán más
separados y  resultará menor que ’.


c tag

c’ tag’ '

I' I
3 u Esfuerzo Normal ()

3
1 u
3
Figura 11.25. Arcillas normalmente consolidadas en un ensayo triaxial CU

En este ensayo al someter la muestra, consolidada en la naturaleza a la presión z, a
esa misma presión con el agua de la cámara, teóricamente la estructura del suelo
tomará toda esa presión, puesto que el suelo ya había sido consolidado a ella y el
agua de la muestra pasará al mismo tiempo a un estado de presión nula. Por otra
parte, si la presión de confinamiento ejercida es mayor que la presión que el suelo
tenía en la naturaleza, en una cantidad 3, todo el exceso lo tomará el agua de la
muestra sin que se modifiquen los esfuerzos efectivos y ello independientemente del
valor de 3. Consecuentemente, al no variar los esfuerzos efectivos, la resistencia
mostrada por el suelo  es constante, cualquiera que sea la presión del agua en la
cámara.
En la Figura 11.26 se puede apreciar con mayor claridad lo que sucede en el ensayo.
En la primera etapa el esfuerzo de confinamiento es el que tenía el suelo en la
naturaleza más un cierto valor 3 (3 = z + 3). Debido a que la muestra ha había
sido consolidada bajo una presión z, se desarrollan unos excesos de presiones de
poros iguales al incremento en el esfuerzo 3 (u1 = 3).
En la segunda etapa se aplica el esfuerzo desviador  de modo que al final de la
etapa se ha desarrollado una presión de poros u 2. Debido a que la resistencia
mostrada por el suelo  es constante, entonces el valor de la presión de poros u 2
también lo es.

Figura 11.26. Etapas en un ensayo triaxial UU sobre arcillas normalmente

consolidadas
Al sumar las dos etapas se tiene una presión neutral total u = u1 + u2. Los esfuerzos
efectivos serán los totales menos esa presión neutral u.
 3   3  u   3  (u1  u 2 )  (z   3 )  ( 3  u 2 )  z  u 2
1  1  u  ( 3   )  (u1  u2 )  (z   3   )  ( 3  u2 )  z  u2  
Se nota que el valor de los esfuerzos efectivos es independiente del valor de 3 y sólo
depende de la presión a la que el suelo estaba sometido en la naturaleza y del valor de
u2. Por esto independiente del valor de 3 aplicado, sólo se consigue un círculo en
términos de esfuerzos efectivos con esta prueba.
Figura 11.27. Envolventes de falla en un ensayo de compresión triaxial UU sobre

arcillas normalmente consolidadas
La envolvente de los círculos de esfuerzos totales es una línea recta horizontal pues el
valor de  es constante. El ángulo de fricción interna  es cero y entonces la

resistencia al corte en este caso es no drenada y queda expresada como  = c. En la

gráfica de resistencia al corte  vs esfuerzo normal  los círculos de Mohr tienen
entonces el mismo diámetro.
11.4.10 Comportamiento de arcillas sobreconsolidadas en pruebas de

compresión triaxial
En estas pruebas, la envolvente de falla para esfuerzos mayores que el de
preconsolidación o esfuerzo crítico (c) resulta ser una línea recta cuya prolongación
pasa por el origen de coordenadas, es decir, en dicho rango de esfuerzos, la arcilla se
comporta como si fuera normalmente consolidada. Para esfuerzos menores que el de
preconsolidación, la envolvente de falla queda un poco arriba de la anterior, tal como
se ilustra en la Figura 11.28.
Figura 11.28. Envolventes de falla en un ensayo triaxial CD sobre arcillas

sobreconsolidadas
En este caso, la envolvente en términos de esfuerzos efectivos es la misma que se
hubiera obtenido en una prueba lenta. En términos de esfuerzos totales, la resistencia
permanece constante para una amplia gama de valores de esfuerzos menores que el
de preconsolidación, tal como se ilustra en la Figura 11.29.
De acuerdo con lo anterior, la resistencia al esfuerzo cortante en la prueba CU es
mayor que en la prueba CD para esfuerzos menores que el de preconsolidación. Esto
se debe a que para esfuerzos menores que el de preconsolidación la deformación
producida por la carga axial en la segunda etapa del ensayo tiene a hacer que la
muestra se expanda; como esto no es posible debido a que el ensayo se hace a
volumen constante, el agua empieza a trabajar a tensión, aumentando el esfuerzo

efectivo y haciendo que éste sea mayor que el esfuerzo normal de confinamiento
aplicado.
La tendencia a la expansión para esfuerzos de confinamiento menores que el de
preconsolidación se debe a que la fase sólida de la arcilla está estructurada de manera
que al aplicar los esfuerzos desviadores la deformación tangencial que se produce
afecta las fuerzas fisicoquímicas que mantenían en relativo equilibrio a la estructura
preconsolidada, liberando con ello cierto poder de expansibilidad que aún conservaba
la estructura. Como la deformación volumétrica de la muestra está impedida por estar
los drenajes cerrados, esta expansibilidad genera tensiones en el agua intersticial de la
muestra y los esfuerzos efectivos en la fase sólida de la arcilla aumentan en la misma
proporción.
Figura 11.29. Envolventes de falla en un ensayo triaxial CU sobre arcillas

sobreconsolidadas
En este ensayo, al no permitirse cambios volumétricos en ninguna etapa, los esfuerzos
efectivos se mantienen constantes de manera que la resistencia del suelo es
independiente del valor de 3. Por esto, independiente del valor de 3 aplicado, sólo
se consigue un círculo en términos de esfuerzos efectivos con esta prueba.
11.4.11 Teoría de los coeficientes A y B de presión neutral

Este procedimiento hace uso de lo que se conoce como TEORÍA DE LOS
COEFICIENTES A Y B DE PRESIÓN NEUTRAL, la cual se debe a A. W. Skempton.
Esta teoría tiene la finalidad de estimar la presión neutral desarrollada en una muestra
de arcilla cuando varían los esfuerzos principales totales 1 y 3 y es particularmente
útil para conocer la resistencia al esfuerzo cortante de los suelos en pruebas rápidas
consolidadas.

Skempton propone la siguiente fórmula como medio para la evaluación de u. Los

coeficientes A y B pueden obtenerse en una prueba en la que 1 y 3 representen el
cambio en los esfuerzos principales.
u  u1  u 2  B 3  A( 1   3 )
Si consideramos un elemento de suelo en equilibrio bajo una presión exterior p ejercida

en todas las direcciones, la muestra está normalmente consolidada bajo esa presión de
modo que p actúa sobre la estructura del suelo y no sobre el agua del mismo.
Si los esfuerzos varían en dos etapas, se tendrá primero un incremento 3 igual en
todas las direcciones y posteriormente un esfuerzo desviador .
El incremento 3 produce además un incremento en las presiones de poros u1. El
coeficiente B se define como la relación entre el aumento en la presión neutral u1 y el
aumento en el esfuerzo 3.
u1
B
 3
En los suelos el valor de B varía entre 0 y 1. Se obtienen valores de 1 para suelos

completamente saturados y valores muy cercanos a 0 cuando el suelo está muy seco.
El incremento  produce además un incremento en las presiones de poros u3. El
coeficiente A se define como la relación entre el aumento en la presión neutral u2 y el
aumento en el esfuerzo .
u 2
A
 1   3
p 3  p3
+ u1 + u2 = u = u2 + u2

p p 3 3 p3 p3
p 3 p3

Figura 11.30. Parámetros de presión de poros

En el caso de arcillas de alta sensibilidad, la degradación de la estructura bajo
deformaciones hace que se generen grandes presiones de poros algunas veces
mayores que el esfuerzo desviador aplicado por lo que el coeficiente A = 1 o incluso
mayor. Las arcillas fuertemente preconsolidadas, la deformación bajo el esfuerzo

desviador aplicado libera en la estructura la capacidad de expansión, por lo cual la

presión neutral generada resulta tensión por lo que A da valores negativos.
11.5 ENSAYO DE COMPRESIÓN SIMPLE

El ensayo de compresión simple consiste en someter una muestra cilíndrica de suelo
sin confinamiento lateral a una carga axial, con el fin de medir deformaciones y
registrar la fuerza que produce la falla.
Para la determinación del esfuerzo compresivo () en la muestra de laboratorio se
acostumbra tomar como sección recta de la probeta no la inicial, de área A o, sino una
corregida de magnitud Ac=Ao/1-. De esta manera si P es la carga compresiva en un
momento dado, =P/Ac.
El valor de  correspondiente a la carga que produce la falla de la probeta, llamada
carga crítica, se le llama resistencia a la compresión simple q u.
En el ensayo se puede obtener una falla de tipo frágil en la que ocurre una separación
por corte de las dos partes del suelo después de una deformación relativamente
pequeña o una falla de tipo plástica en la que se da un abombamiento de la muestra de
suelo como en forma de tonel y para deformaciones grandes no se alcanza a producir
una falla por corte.
Placa Superior
P
Material Frágil
 = P/A
 = L/L (L disminución longitud de muestra

Material Plástico
Deformación Unitaria ()

Placa Inferior
Figura 11.31. Esquema del ensayo de compresión simple

La pendiente de la curva esfuerzo normal vs deformación unitaria es una medida de la
rigidez del material. Se llama módulo tangente inicial Ei de la muestra a la inclinación
de la tangente a las curvas en el punto de origen. A mayor valor de Ei más
indeformable es el suelo.

11.5.1 Similitud con el ensayo de compresión triaxial

Se explicó ya que en arcillas saturadas y normalmente consolidadas sometidas a un
ensayo de compresión triaxial no consolidado no drenado (UU), los esfuerzos efectivos
aplicados están dados por las siguientes expresiones.
 3   3  u   3  (u1  u 2 )  (z   3 )  ( 3  u 2 )  z  u 2
 1   3    z  u 2  
En el ensayo de compresión simple no existe la etapa de presión hidrostática que si
existe en la prueba triaxial no consolidada no drenada (UU), de modo que sólo existe la
etapa de carga que conduce el suelo a la falla. En la etapa previa a la falla, los
esfuerzos totales son nulos y el agua adquiere una tensión de magnitud igual,
teóricamente, a la presión de preconsolidación (z) que el suelo tenía en la naturaleza.
Esta tensión del agua comunica a la estructura sólida los esfuerzos efectivos
necesarios para que la muestra mantenga su volumen. Esto ocurre gracias al
fenómeno de capilaridad que es más importante en suelos finogranulares que en
suelos gruesogranulares.
En la segunda etapa la muestra es llevada a la falla con la aplicación del esfuerzo axial
qu, que mide su resistencia en este tipo de prueba, originando a la vez una presión
neutral adicional u2.
Etapa Previa Etapa de Falla Etapa Final

1 = qu 1 = 1 – (u1 +u2)
qu
1 = qu + z – u2
3 3= 3 – (u1 +u2)

u1= -z + u2 = u1 +u2 u1 +u2
3= z – u2
1
qu 1 = qu
Figura 11.32. Etapas de un ensayo de compresión simple sobre arcillas

normalmente consolidadas
Los esfuerzos efectivos al final de la prueba, en el instante de la falla valen
 3   3  u  0  (u1  u 2 )  (z  u 2 )  z  u 2
 1   1  u  qu  (u1  u 2 )  qu  (z  u 2 )  qu  z  u 2
Se observa que son los mismos obtenidos en la prueba triaxial no consolidada no
drenada (UU). La resistencia a la compresión simple q u se convierte en el valor  de
la prueba UU.

Se puede concluir con base en lo anterior que un ensayo de compresión simple no es

más que uno triaxial rápido en el que el esfuerzo de confinamiento total aplicado es
cero, el esfuerzo de confinamiento efectivo es igual a la presión de preconsolidación
del suelo en la naturaleza menos la presión de poros generada durante la etapa de
falla de muestra y la resistencia a la compresión en la falla es q u.
Por lo anterior, el valor de la resistencia a la compresión simple q u puede emplearse
para deducir la cohesión no drenada y la resistencia al corte no drenada de arcillas
saturadas normalmente consolidadas como se muestra en el gráfico de la Figura 11.33.
Con base en esta prueba no se puede calcular la envolvente de falla en términos de
esfuerzos efectivos ya que para ello habría que conocer el valor de la presión de poros
que se genera en la falla, lo cual no es posible hacerlo con el equipo.

tag’
'

c = qu/2
c = qu/2
I I'
3 =  1 = qu
3 = z-u2 qu
1 = z-u2+qu
Figura 11.33. Envolventes de falla en un ensayo de compresión simple sobre

arcillas normalmente consolidadas
11.5.2 Sensibilidad y tixotropia de las arcillas

La sensibilidad o susceptibilidad de una arcilla es la propiedad que tienen la mayoría
de estas de perder la estructura con que se formaron en la naturaleza al ser
remoldeadas, lo cual trae consigo grandes disminuciones de su resistencia y aumento
de su compresibilidad. Este cambio ocurre porque al remoldear la arcilla se rompen las
fuerzas de ligación físico químicas entre las partículas que mantenían su estructura.

En la práctica, las arcillas experimentan este fenómeno en procesos de construcción en

que se vean sometidas a fuerzas de vibración. Un ejemplo es cuando se hincan
pilotes, lo cual puede hacer que la arcilla pase a un estado líquido incluso sin que se
haya añadido agua al suelo.
Numéricamente se mide como la relación entre la resistencia a la compresión simple de
una muestra de arcilla inalterada y la resistencia a la compresión simple de una
muestra de suelo remoldeada formada con la misma arcilla que se ensayó en estado
inalterado.
La sensibilidad st de la arcilla suele escribirse entonces con base en el ensayo de
compresión simple de la siguiente manera:
q u (inalterado )
s
q u (remoldeado)
De acuerdo con la magnitud de s t, las arcillas pueden calificarse de la siguiente
manera:
Arcillas normalmente sensibles 2 < st < 4
Arcillas muy sensibles st > 4
Arcillas extrasensibles st > 8
La mayor sensibilidad en las arcillas hace que sus parámetros de resistencia al corte, y
especialmente el ángulo de fricción interna, sea sumamente difícil de estimar.
Normalmente este ángulo es mucho más bajo que la que suele denominarse
resistencia residual de la arcilla.
En contraposición a la sensibilidad está la tixotropía. Esta propiedad la tienen todas
las arcillas, unas en mayor grado que otras, y consiste en la capacidad que tienen
estas de recuperar parte de su resistencia y rigidez iniciales después de remoldeadas
si se les deja en reposo durante un tiempo determinado.
Las cenizas volcánicas son excelentes representante de esta propiedad y es a la que
tradicionalmente han recurrido los constructores en zonas como nuestro eje cafetero en
que son precisamente el material abundante para la construcción de terraplenes. Ellas
no se someten a grandes cargas para ser compactadas sino que se dejan en reposo en
el sitio hasta que ellas adquieren nuevamente la resistencia o parte de la resistencia
que tenían originalmente en el sitio del que fueron cortadas.
11.6 PROBLEMAS RESUELTOS

Problema 1. Planteamiento.
Una muestra de arcilla normalmente consolidada extraída de 8 m de profundidad se
sometió a una prueba triaxial rápida consolidada y falló con un esfuerzo desviador de
1 kg/cm². En una prueba lenta se determinó para esa arcilla un valor de  de 26.5°.

También se sabe que el peso unitario del suelo es de 1.55 ton/m³. Calcule la presión
de poros en la muestra en el instante de la falla en la prueba rápida.
Problema 1. Solución.
Sabemos que en términos de esfuerzos totales, la relación entre los esfuerzos de falla
es la siguiente:
 1   3Tag 2 (45   / 2)  2cTag (45   / 2)   1   3 N  2c N

En términos de esfuerzos efectivos esta expresión puede presentarse de la siguiente
forma:
 1   3Tag 2 (45    / 2)  2cTag (45    / 2)   1   3 N   2c N 
Pero como se trata de una arcilla normalmente consolidada en la que la cohesión es

nula, esta expresión queda de la siguiente manera:
 1   3 N
 1   3 N     1  u  ( 3  u ) N    u 
1  N
Para saber el valor de u tenemos que conocer entonces el de 1, 3 y N'. El de 3 lo

podemos determinar suponiendo que es igual al de la muestra en la naturaleza. El de
1 lo podemos estimar con base en 3 y el esfuerzo desviador 1-3. El valor de N' se
puede calcular suponiendo que el  de la prueba lenta es el mismo que se obtendría en
la prueba rápida consolidada.
 3  z  (1.55ton / m³)8m  12.4ton / m²  1.24kg / cm²
 1   3  1kg / cm²   1  1kg / cm²   3  1kg / cm²  1.24kg / cm²  2.24kg / cm²
N   Tag 2 (45    / 2)  Tag 2 (45  26.5 / 2)  2.61
Reemplazando el valor de N en la ecuación deducida para u obtenemos lo siguiente:

 1   3 N  2.24kg / cm²  1.24kg / cm ²(2.61)
u   0.62kg / cm²
1  N 1  2.61

Problema 2. Planteamiento.
Calcule el esfuerzo desviador en la falla para un suelo al que se hace una prueba
triaxial drenada con presión de confinamiento de 2 kg/cm², si ese suelo tiene como
parámetros de resistencia c = 0.5 kg/cm² y  = 35°.
Problema 2. Solución.
Por los datos del problema, sabemos los valores de 3, c' y ' y debemos averiguar el
valor de 1-3.
Pero sabemos que en una prueba drenada, la relación entre los esfuerzos principales
en el momento de la falla está dada por la siguiente expresión:
 1   3Tag 2 (45    / 2)  2cTag (45    / 2)   1   3 N   2c N 
Según esta ecuación debemos conocer el valor de 3, c', ' y N' para conocer el valor
de 1 y posteriormente el del esfuerzo desviador en la falla. El valor de N ' se puede
calcular con base en el valor de  dado. Los demás valores ya los conocemos.
N   Tag 2 (45    / 2)  Tag 2 (45  35 / 2)  3.69
 1   3 N   2c N   2kg / cm²(3.69)  2(0.5kg / cm²) 3.69  9.30kg / cm²
 1   3  9.30kg / cm²  2kg / cm²  7.30kg / cm²
11.7 TRABAJO PERSONAL

1 Una muestra de arena seca es ensayada en un ensayo triaxial de compresión en
el que se obtuvo un ángulo de fricción interna  = 36°. ¿Si el esfuerzo principal
menor 3 fue de 300 kPa, cuál fue el valor del esfuerzo principal mayor 1 con el
cual la muestra falló? ¿Cuáles son los esfuerzos normales  y de corte  con los
cuales la muestra falló? ¿Qué ángulo forma el plano en el que actúan estos
esfuerzos  y  con el plano en el que actúa el esfuerzo principal mayor 1? ¿Qué
ángulo forma el plano en el que actúan estos esfuerzos  y  con el plano en el
que actúa el esfuerzo principal menor 3? Resuelva el problema analítica y
gráficamente.
2 Resuelva el problema anterior si no se trata de una arena seca sino de una con
cohesión de 12 kPa.
3 ¿Cuál es el máximo esfuerzo por corte que puede ser aplicado en un punto de
una masa de suelo en una dirección determinada en que el esfuerzo normal total
es de 295 kN/m² y la presión de poros es de 120 kN/m² si además la envolvente
de resistencia efectiva está definida por una cohesión efectiva de 12 kN/m² y un

ángulo de fricción interna efectiva de 30°? Resuelva el problema analítica y

gráficamente.
4 En una arcilla normalmente consolidada se calculó el ángulo de fricción interna en
una prueba lenta y resultó de 30°. En una prueba rápida consolidada en la misma
arcilla se produjo la falla con un esfuerzo principal menor de 4.5 kg/cm² y un
esfuerzo principal mayor de 6.5 kg/cm². Estime la presión de poros en la falla en
la prueba rápida consolidada y el valor del ángulo de fricción aparente en esta
misma prueba. Resuelva el problema analítica y gráficamente. Aclare todas las
suposiciones que tenga que hacer para resolver el problema.
5 Considere un perfil de suelo conformado por un estrato muy potente de arcilla,
con el nivel freático en superficie y con un peso unitario saturado de 1.9 ton/m³
del que se tomó una muestra a unos 10 m de profundidad. En un ensayo de
consolidación se encontró que el esfuerzo de preconsolidación de la muestra es
aproximadamente de 0.95 kg/cm², en un triaxial rápido se encontró un ángulo de
fricción interna efectivo de 40° y en uno de compresión simple se encontró una
resistencia a la compresión simple de 4 ton/m². Cuál cree que fue la presión de
poros generada al final del ensayo de compresión simple. Cuál es la resistencia
al corte no drenada de esta arcilla. Resuelva el problema analítica y
gráficamente.
6 Considere el problema anterior. ¿Si se fuera a construir un terraplén sobre dicha
arcilla, qué parámetros de resistencia al corte usaría para el diseño? ¿Por qué?
¿Si la capa de arcilla estuviera intercalada frecuentemente con capas de arena
gruesa que parámetros de resistencia al corte usaría para el diseño? ¿Por qué?
7 ¿En que casos de la vida práctica interesa conocer la resistencia residual de un
suelo?
8 Considere la siguiente figura y calcule los esfuerzos actuantes sobre el plano B-B.
Resuelva el problema gráficamente con ayuda del polo en cada uno de los
círculos de Mohr que pueden definir este problema y también analíticamente con
base en las expresiones que relacionan  y  son 1, 3 y .

9 ¿En el ensayo de corte directo, cuál es la posición del polo y cuál la de los planos
principales en los que actúan los esfuerzos principales mayor y menor?
10 ¿Será posible obtener en laboratorio valores de sensibilidad s t menores que 1?.
Explica claramente su respuesta.

11 Resistencia Al Corte de Los Suelos: 11.1 Justificación

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Notas Mecánica de Suelos y Rocas Edilma Lucía Gómez Paniagua

11 RESISTENCIA AL CORTE DE LOS SUELOS

11.2 TEORÍA DE FALLA MOHR COULOMB

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-1

seguir siendo satisfactoria con la ordenada en el origen nula (c = 0) y las

Figura 11.1. Envolvente de Mohr-Coulomb

11.2.1 El concepto de ángulo de fricción interna

Figura 11.2. Envolvente de Mohr-Coulomb

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-2

Figura 11.3. Plano inclinado

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-3

11.2.2 El concepto de cohesión

11.3 ENSAYO DE CORTE DIRECTO

11.3.1 Aspectos generales del ensayo

Plano de falla predeterminado

Figura 11.4. Muestra de suelo sometida a un ensayo de corte directo

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-4

11.3.2 Curvas esfuerzo deformación en el ensayo de corte directo

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-5

Esfuerzo Cortante ()

Esfuerzo Normal () Deformación Unitaria ()

Figura 11.5. Curvas obtenidas en un ensayo de corte directo

11.3.3 Resistencia residual en el ensayo de corte directo

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-6

Si la prueba de corte directo se continúa después de obtenida la falla del material, la

11.4 ENSAYO DE COMPRESIÓN TRIAXIAL

11.4.1 Montaje del ensayo

Hacia la bureta de drenaje

Figura 11.6. Cámara de compresión triaxial

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-7

Con el pistón se aplica el esfuerzo axial 1 y con la cámara los esfuerzos de

11.4.2 El círculo de Mohr

Figura 11.7. Estado de esfuerzos en el ensayo triaxial

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-8

Figura 11.8. Estado de esfuerzos simplificado en el ensayo de compresión

3dASen 3dASen dA

Figura 11.9. Deducción de los esfuerzos normal y de corte en un ensayo de

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-9

De la trigonometría tenemos las siguientes relaciones fundamentales:

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-10

Esfuerzo Tangencial ()

Figura 11.10. Círculo de Mohr en el ensayo de compresión triaxial

11.4.3 Envolvente de falla

Figura 11.11. Envolvente de falla en el ensayo de compresión triaxial

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-11

Nuevamente el ángulo  representa la inclinación del plano en que actúan los

( 1   3 )Cos 2  2cCos   1   3    1   3 Sen Sen

( 1   3 )Cos 2  2cCos   1   3 Sen   1   3 Sen 2

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-12

En mecánica de suelos se acostumbra emplear estas expresiones en función de

3 3 1 3 1 1 Esfuerzo Normal ()

Figura 11.12. Círculos de Mohr y envolvente de falla en el ensayo de compresión

11.4.4 El concepto del polo

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-13

Figura 11.13. Concepto del polo

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-14

Figura 11.14. Polo en el ensayo de compresión triaxial

11.4.5 Curvas esfuerzo deformación y los criterios de falla

Deformación Unitaria ()

Figura 11.15. Curvas esfuerzo deformación en el ensayo de compresión triaxial

Capítulo 11. Resistencia al corte 11-15

 La falla está determinada por el máximo esfuerzo cortante o la máxima diferencia

11.4.6 Trayectoria de esfuerzos (diagramas p-q)