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TÍTULO:

“FIESTA DE LAS TARICAYAS”

SEUDÓNIMO: BERMEJA
FIESTA DE LAS TARICAYAS
Las aguas del Río Marañón lucían frescas y torrentosas, las playas hacían sus apariciones
apresuradamente con arenas cenizas y grises , pues, eran los meses de junio y julio del
presente año 2022, la merma hacía que la mijanada de peces aparecieran en las aguas con
saltos y acrobacias de Palometas, Sábalos y Sardinas, poco a poco la tarde iba cayendo en
la majestuosa selva, dejando que la noche se convirtiera en un aliado de sonidos de grillos,
ranas, cotos y hualos, apenas se podía divisar el dosel de los árboles iluminados por los
rayos y relámpagos del firmamento desolado, justo en esa noche las Taricayas habían
acordado realizar una asamblea en la playa frente a la comunidad de San Regis, buscaron
al sapo como presentador de la sesión por ese trabajito lo darían fuertes sumas de dinero y
también contrataron al pihuicho para vigilar la zona, por si vienen los cazadores furtivos. Ya
en la reunión acordaron realizar actividades por el día mundial de las Taricayas que debería
desarrollarse muy pronto, entonces comenzó las ponencias y opiniones, el que escribía en
una Victoria Regia pequeña y ponía orden en la sesión era don Capitari, Taricaya macho
que se caracterizaba por tener el pecho hundido para facilitar el apareamiento a las
Taricayas hembras, y tenía como lapicero a un pez Macana, empezaron a oír la primera
intervención de un Cupiso joven, oyeron muy atentos, éste dijo, que el día festivo cae un día
veintidós de agosto y se debería festejar a lo grande con una fiesta de rompe y raja lo cual
contratarían al orgullo de la Amazonía, “Orquesta Explosiva de Hualos y su ballet de
Tanrillas”, este festejo sería por tres días consecutivos y la comida sería camarones, y
cangrejos a la huama envueltos con gramalotes frescos; para tomar comprarían un cilindro
de aguardiente de Caña de azúcar que destilan en el caserío José Olaya y cerveza traídos
de Iquitos, el lugar de la juerga sería en la playa de Andoas, pues, esta propuesta activaba
los corazones de los asistentes, pareciera que ganaría, atónitos esperaban otra propuesta
para que se lleve a cabo la elección, de pronto levantó la mano una Taricaya hembra que
escapó de Quistococha quien intervino diciendo que la soberbia, la vanidad, la megalomanía
y la idolatría exacerbada estaría conquistando los corazones en la población de las
Taricayas y más bien deberían tomar conciencia ya que el Virus sigue todavía latente y que
varias familias siguen desapareciendo por este mal o por los cazadores furtivos, así que,
propone un reencuentro de paz y armonía entre los Quelonios y amigos, respetando las
medidas de Bioseguridad, comiendo los mejores potajes, insectos y crustáceos de la selva
peruana seguido de su refresco de Camu-camu, y ese día deberían realizar simulacros de
escapatoria y un censo para saber sobre la realidad de la vida del C upiso, de la Taricaya y
de la Charapa, de niños, jóvenes, adultos y ancianos, dijo finalmente, “hermanos hay mucho
que hacer por nuestra especie, estamos en peligro de extinción y no a la vanidad”. Todos los
asistentes se miraron unos a otros y votaron por la propuesta de la hermosa Taricaya que
ganó contundentemente.

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