1.

Identifica las necesidades y preocupaciones específicas de tu escuela: Es

importante identificar las problemáticas específicas que se presentan en la
escuela para poder abordarlas en el plan de convivencia escolar. Puedes
realizar una encuesta o entrevistar a estudiantes, padres de familia y
docentes para obtener información.
2. Define los objetivos del plan: Los objetivos deben estar enfocados en
fomentar una cultura de respeto, tolerancia y responsabilidad en la escuela.
3. Establece un equipo de trabajo: El equipo debe estar conformado por
docentes, estudiantes, padres de familia y cualquier otra persona
involucrada en la comunidad educativa. El equipo será responsable de
diseñar, implementar y evaluar el plan.
4. Define las normas y valores que se quieren promover: Es importante que las
normas y valores sean claras y concretas para que puedan ser fácilmente
comprendidas y aplicadas por todos los miembros de la comunidad
educativa.
5. Diseña actividades y estrategias para la implementación del plan: Estas
actividades y estrategias deben estar enfocadas en el fortalecimiento de
habilidades sociales, emocionales y cognitivas en los estudiantes.
6. Establece mecanismos de seguimiento y evaluación: Es importante llevar un
registro de la implementación del plan y de los resultados obtenidos para
poder evaluar su efectividad y hacer ajustes si es necesario.