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12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante.

Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 2


Construcción III

Lección 12 E.L.U. DE ESFUERZO CORTANTE


1. Tensiones cortantes ..........................................................................................3
1.1. Relación entre tensiones rasantes y tensiones cortantes ...................... 3
1.2. Distribución de tensiones en condiciones de servicio y
hormigón sin fisurar ................................................................................. 5
1.3. Distribución de tensiones en condiciones de agotamiento .................. 11
2. Comportamiento de las piezas de hormigón armado ....................................12
2.1. Analogía de la celosía ...........................................................................12
2.1.1. Cortante resistido por las armaduras transversales ..................13
2.1.2. Compresiones en el hormigón del alma ....................................14
2.2. Colaboración del hormigón en la absorción de esfuerzo cortante .......16
3. Método de dimensionamiento de la norma española ....................................19
3.1. Elementos que requieren armadura de cortante ..................................20
3.2. Elementos que no requieren armadura de cortante .............................25
4. Decalaje de la ley de momentos flectores......................................................26
5. Piezas de canto variable .................................................................................29
6. Cargas colgadas y apoyos indirectos .............................................................32
7. Limitaciones y disposiciones constructivas ....................................................33
7.1. Vigas .......................................................................................................33
7.2. Pilares .....................................................................................................35
7.3. Losas macizas ........................................................................................37
7.2. Muros ......................................................................................................38
Bibliografía ...........................................................................................................38
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Construcción III

1. TENSIONES CORTANTES.

1.1. Relación entre tensiones cortantes y tensiones rasantes.

Las tensiones tangenciales son las que hacen deslizar una sección respecto de
otra, es decir, son aquellas que actúan paralelas al plano de la sección, produciendo
distorsiones angulares o alabeos en dicha sección. Los esfuerzos que producen
únicamente tensiones tangenciales son los esfuerzos cortantes y los momentos
torsores. No obstante, estos tipos de solicitaciones son poco frecuentes en la
realidad, siendo habitual que el cortante vaya acompañado de momentos flectores y
la torsión de cortante y momento flector.

Figura 1.
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Construcción III

Si se somete a flexión una viga constituida por una serie de capas colocadas
unas sobre otras sin ningún tipo de conexión, éstas deformarán independientemente,
produciéndose unas deformaciones distintas entre la cara inferior de un tablón y la
cara superior del tablón contiguo. Existe, pues, una tendencia al deslizamiento de
capas horizontales respecto de sus contiguas.

Figura 2.

No obstante, en una viga monolítica este deslizamiento no se produce, porque


el material se opone a él por su cohesión mediante tensiones tangenciales,
denominadas en este caso “tensiones rasantes”.

Si, por el contrario, esta misma barra estuviera formada por elementos
verticales independientes, la cara derecha de cada elemento tendería a deslizar

respecto de la cara izquierda del elemento contiguo.


Figura 3.

Al igual que en el caso anterior, en una viga monolítica este deslizamiento no


se produce porque el material se opone a él por su cohesión mediante tensiones
tangenciales, denominadas en este caso “tensiones cortantes”.

Así pues, si en un punto cualquiera del interior de la viga se analiza el estado


plano de tensiones tangenciales existente, se tiene que en las caras horizontales del
elemento diferencial actúan unas tensiones tangenciales rasantes y en las caras
verticales unas tensiones tangenciales cortantes.
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Construcción III

tr

tc tc

tr

Figura 4.

Al estar el elemento diferencial en equilibrio, imponiendo la condición de


momentos nulos respecto de una de las esquinas, se deduce que las fuerzas
rasantes y cortantes son iguales y, en consecuencia, se tiene que, en un punto, las
tensiones tangenciales rasantes son iguales a las tensiones tangenciales cortantes
(teorema de Cauchy o de reciprocidad de las tensiones tangenciales):

M  0 ; ( r dx dz) dy  ( c dy dz) dx  r  c (1)

1.2. Distribución de tensiones en condiciones de servicio y hormigón sin


fisurar.

Si se analiza ahora el comportamiento de una viga monolítica entre dos


secciones infinitamente próximas donde actúa una carga P1, a cada lado de la
rebanada existen unos esfuerzos cortantes y unos momentos flectores.
p

V V ‐ dV 
V + dV

M M + dM

dx

Figura 5.

Planteando el equilibrio de esfuerzos y tomando momentos respecto de la cara


derecha de la rebanada:
dx
M  V dx  M  dM  p dx (2)
2

1
Tanto si la carga actuante es puntual como uniformemente repartida, entre dos secciones infinitamente
próximas se puede considerar que la carga que actúa es uniformemente repartida.
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Construcción III

de donde, despreciando infinitésimos de segundo orden, se tiene:


dM
V (3)
dx
Es decir, se verifica que el esfuerzo cortante es la derivada del momento
flector.

Por lo que respecta a los momentos flectores, éstos generan el estado de


tensiones normales grafiado en la figura 6. Debido a la diferencia de momento flector
actuando a un lado y otro de la rebanada, lógicamente el valor de las tensiones
también es distinto a ambos lados.

Figura 6.

Como consecuencia de esta diferencia de tensiones normales y para que se


produzca el equilibrio de fuerzas horizontales, en cada fibra de la rebanada deben
aparecer unas tensiones horizontales, que son las denominadas tensiones rasantes.

Figura 7.

Planteando el equilibrio de fuerzas horizontales, se tiene:

 b dx  dF (4)
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Construcción III

donde dF es la resultante de las fuerzas horizontales situadas por encima de la


sección de referencia.

Tal y como se deduce de la figura 7, se tiene:


y max
dF   d b dy (5)
y0

A su vez, de acuerdo con la ley de Navier, se tiene:

M
y  y (6)
I

de donde se deduce:

ymax ymax dM dM ymax dM


dF   d b dy   y b dy   b y dy  Sy (7)
y0 y0 I I y0 I

donde Sy es el momento estático de la parte de la sección que queda por encima de


la fibra considerada.

Sustituyendo en la ecuación (4) y teniendo en cuenta la ecuación (3), se


obtiene la fórmula de Colignon que proporciona el valor de las tensiones
tangenciales:

dM dM S y V Sy
 b dx  Sy     (8)
I dx b I bI

Así pues, en cada punto de los planos perpendiculares a la directriz de la pieza


actúan unos esfuerzos normales y y otros tangenciales y cuyo valor, en el caso de
comportamiento elástico del material, viene dado por las siguientes expresiones (ley
de Navier y fórmula de Colignon):

M V Sy
y  y ; y  (9)
I bI
donde:

M Momento flector
I Momento de inercia
y Distancia de la fibra de referencia a la fibra neutra
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Construcción III

b Ancho de la pieza
V Cortante
Sy Momento estático de la parte de la sección que queda por encima de la fibra
considerada.

Figura 8.

La distribución de tensiones tangenciales a lo largo de la sección sigue una ley


parabólica, siendo nula en los extremos y máxima en el centro de gravedad de la
pieza en el caso de secciones rectangulares (ancho de la pieza constante).

Una vez alcanzada la resistencia a flexotracción del hormigón y, por lo tanto,


producida su fisuración, la tensión tangencial máxima (donde el momento estático es
máximo) es igual a:
V
 max  (10)
bz
siendo z el brazo mecánico de la sección. Además, por debajo de la fibra neutra la
tensión tangencial en piezas de ancho constante se mantiene máxima2 e igual a
max. No obstante, si el ancho disminuye el valor de la tensión tangencial aumenta
(fig. 9).

Figura 9.

2
Dado que en la zona traccionada el hormigón no soporta tensiones normales, de acuerdo con la figura 7, por
debajo de la fibra neutra la diferencia de tensiones normales “dF” a cada lado de la rebanada no varía con la
altura, siendo esta diferencia igual a la existente en la fibra neutra.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 9
Construcción III

Conocidos los valores de y y de y, y de acuerdo con los principios de la


Teoría de la Elasticidad, se puede determinar el valor de las tensiones principales I
y II en cualquier punto de la sección3, y de la dirección en que actúan (direcciones
principales).

y  y2 y  y2
I    2
y ;  II     y2 (11)
2 4 2 4

2 y
tg 2  (12)
y

Las tensiones principales en un punto son, en definitiva, las máximas tensiones


de tracción y compresión que se pueden dar en ese punto. Es decir, debido a la
combinación de los esfuerzos normales y tangenciales producidos por las cargas
exteriores, existen unas direcciones (direcciones principales) en las que las
tensiones normales son máximas.
sII
y
sI
t
s
a

sI

sII

Figura 10.

Si se representa gráficamente las curvas de isovalores de estas tensiones


principales se obtienen las líneas isostáticas, cuyo conocimiento facilita mucho el
estudio y comprensión del estado tensional de la pieza.

3
Las tensiones principales de tracción y compresión I y II en un punto son las tensiones normales a los planos
en las direcciones en las que son nulas las tensiones tangenciales.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 10
Construcción III

Figura 11.

Hay dos familias de curvas, que se corresponden con las dos tensiones
principales. Quiere esto decir que por cada punto pasan dos isostáticas, una de cada
familia, que son ortogonales entre sí. En las fibras extremas superior e inferior una
isostática es la propia fibra y la otra es lógicamente perpendicular a ella. En la fibra
neutra las dos isostáticas cortan a ésta según un ángulo de 45º. Una vez fisurada la
pieza, por debajo de la fibra neutra existen tensiones tangentes pero no hay
tensiones normales, por lo que la inclinación de las isostáticas de tracción (ec. 12) es
45º.

Figura 12.

En definitiva, de todo lo anterior se deduce que, como consecuencia de la


combinación de los esfuerzos normales y tangenciales producidos por las cargas
exteriores, en cualquier punto de la pieza existen esfuerzos de tracción y compresión
que es preciso absorber.

Así pues, en el caso particular de elementos lineales, además de las


armaduras longitudinales que se colocan en las cabezas superior e inferior de la
pieza, hay que tener en cuenta que en el alma de la pieza las tensiones tangentes
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Construcción III

crean sendos campos oblicuos de tensiones de compresión y de tracción que es


preciso absorber, debiendo colocar la correspondiente armadura (armadura
transversal o de cortante) y verificar, además, que esas compresiones no agotan ni
fisuran el hormigón.

1.3. Distribución de tensiones en condiciones de agotamiento.

En condiciones de agotamiento, cuando la pieza está próxima a la rotura, el


hormigón está fisurado y el reparto de tensiones normales ya no es lineal.

En esta situación, el cálculo de las tensiones tangenciales en la zona


comprimida de la sección es muy complejo. En cualquier caso, por debajo de la fibra
neutra la tensión tangencial en piezas de sección rectangular es constante igual a:

V
y  (13)
bz

Por lo que respecta a las direcciones principales, en la zona situada por debajo
de la fibra neutra puede admitirse que las tensiones de tracción en el hormigón son
nulas, por lo que nuevamente, de acuerdo con la expresión que proporciona el
ángulo que forman las tensiones principales con la directriz de la pieza (ec. 12), se
tiene que  = 45º (fig. 11). Así pues, en el alma las tensiones principales de tracción
están inclinadas, por lo que, en términos de eficacia, debería disponerse la armadura
con la misma inclinación, es decir, siguiendo las isostáticas de tracción (fig. 13).
Aunque hasta los años 70 ésta fue la forma habitual de colocar la armadura (barras
levantadas), en la actualidad, debido entre otros factores a los procesos
industrializados de montaje de la ferralla, esta armadura se coloca en forma de
cercos (estribos) dispuestos perpendicularmente al eje longitudinal de la pieza.

Figura 13.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 12
Construcción III

2. COMPORTAMIENTO DE LAS PIEZAS DE HORMIGÓN ARMADO.

Actualmente no existe un acuerdo a nivel internacional sobre cómo calcular la


resistencia a esfuerzo cortante de piezas de hormigón armado, pudiendo encontrar
en la literatura científica, en los códigos técnicos y en las normas de los diferentes
países diferentes expresiones.

2.1. Analogía de la celosía.

La forma en que la pieza resiste el esfuerzo cortante está condicionada por la


disposición que se adopte para las armaduras transversales. En general, estas
armaduras están constituidas por estribos verticales (perpendiculares a la directriz
de la pieza), aunque en ocasiones, sobre todo en losas o en obras de cierta
antigüedad, puede haber barras inclinadas.

El mecanismo resistente de una pieza lineal de hormigón armado tras una


fisuración por cortante puede asimilarse al de una celosía. Esta analogía con la
celosía se conoce con el nombre de analogía de Ritter-Mörsch. En esta celosía
virtual tanto los estribos como las barras levantadas actúan como montantes o
diagonales traccionados, la cabeza comprimida de hormigón como cordón superior,
las armaduras longitudinales de tracción como cordón inferior, y las bielas inclinadas
de hormigón como diagonales comprimidas. Estas bielas siguen la dirección de las
isostáticas de compresión.

Figura 14. Analogía de la celosía.


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Construcción III

Actualmente, el esquema de Ritter-Mörsch ya está superado, pero es muy útil para


entender el comportamiento de la pieza. En cualquier caso, los modelos más actuales
también tienen una cierta similitud a una celosía.

2.1.1. Cortante resistido por las armaduras transversales.- Admitida la analogía


con la celosía, sea un trozo de viga solicitado por un esfuerzo cortante V, donde las
armaduras transversales están separadas entre sí una distancia st y forman un
ángulo con la horizontal , y donde el hormigón del alma está fisurado formando
bielas inclinadas de ángulo .

Figura 15.

De acuerdo con la figura 15, el número de barras transversales que cosen una
fisura es igual al número de barras situadas en una distancia “ℓ”:

ℓ 𝑧 𝑐𝑜𝑡 𝑧 𝑐𝑜𝑡𝛼 𝑧 (14)


𝑛 𝑐𝑜𝑡 𝑐𝑜𝑡𝛼
𝑠 𝑠 𝑠

donde z es el brazo mecánico (distancia entre el cordón superior e inferior de la


celosía, o lo que es lo mismo, distancia entre la resultante de compresiones y la
resultante de tracciones).

Para garantizar el equilibrio, la componente vertical de la fuerza de tracción en


la armadura transversal que cose la fisura debe ser igual al cortante exterior V en
dicha sección.

𝑉 𝑛𝐴  𝑠𝑒𝑛𝛼 (15)
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 14
Construcción III

siendo:
Ast Área de la armadura transversal.
 Tensión de trabajo de las armaduras transversales.

Así pues, se tiene:


𝑧 𝑧 (16)
𝑉 𝑐𝑜𝑡 𝑐𝑜𝑡𝛼 𝐴  𝑠𝑒𝑛𝛼 𝑠𝑒𝑛𝛼 𝑐𝑜𝑡 𝑐𝑜𝑡𝛼 𝐴 
𝑠 𝑠
expresión que proporciona el cortante que absorben las armaduras transversales
cuando la separación entre ellas es igual a st.

Tabla 1. Cortante resistido por las armaduras transversales

Tipo de armadura  = 45º = 30º


z z
Estribos verticales 90º Ast   1,73 Ast  
st st
z z
Barras levantadas 45º 2 Ast   1,93 Ast  
st st
Barras levantadas en
- 45º 0 0
la otra dirección

Como se deduce de la tabla, las barras levantadas absorben más cortante que
los estribos verticales. No obstante, también es cierto que la longitud de las barras
es mayor que la de los estribos y, además, en la misma proporción.

2.1.2. Compresiones en el hormigón del alma.- Modelizando la viga como una


celosía con una separación entre nudos igual a “l”, el ancho de las bielas de
compresión también es igual a “l” (fig. 16). En este caso, la fuerza de tracción en el
tirante inclinado es la resultante de las fuerzas de tracción en las armaduras situadas
en una distancia igual a “l”, y por lo tanto igual a (n Ast α), siendo n el número de
barras inclinadas en la distancia “l”.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 15
Construcción III

Figura 16. Analogía de la celosía.

Para garantizar el equilibrio se ha de verificar que en cada nudo de la celosía


las componentes verticales de la fuerza de compresión Fc en las bielas inclinadas y
de la fuerza de tracción Fα en la armadura transversal han de ser iguales (fig. 17).

𝐹 𝑠𝑒𝑛𝛼 𝐹 𝑠𝑒𝑛  𝑛𝐴  𝑠𝑒𝑛𝛼 𝐹 𝑠𝑒𝑛 (17)

Figura 17. Equilibrio de fuerzas en el nudo de la celosía virtual.

Teniendo en cuenta que la tensión de compresión en cada una de las bielas de


ancho “l” es igual a:
𝐹 (18)

𝑏 ℓ 𝑠𝑒𝑛

de las dos expresiones anteriores y de la ecuación (15), se deduce:

𝑉 𝐹 𝑠𝑒𝑛  𝑉  𝑏 ℓ 𝑠𝑒𝑛 𝑠𝑒𝑛  (19)

𝑉  𝑏 𝑧 𝑐𝑜𝑡 𝑧 𝑐𝑜𝑡𝛼 𝑠𝑒𝑛  

𝑐𝑜𝑡  𝑐𝑜𝑡 𝛼
𝑉  𝑏z
1 𝑐𝑜𝑡 

Esta formula indica que mediante esta


formula podemos calcular la tension
que resisten en funcion de la
resistencia del hormigon Fck
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 16
Construcción III

¿cuanto vale x?
Cojemos el nuevo
angulo(superior) y de el
sacamos Sen tetta = x/l
y sustituyendo en la
formula anterior sacamos
Fc= (tension c *b*l*sin
Hay unas tensiones de tetta)*sin tetta Formula 2
compresion, siempre se de (19)
toman superficies normales a x
la fuerza,
Fc = (Tension *b*x)*sin tetta

Figura 18. Tensiones de compresión en las bielas de hormigón.

2.2. Colaboración del hormigón en la absorción de esfuerzo cortante.

Aún en el supuesto que no haya armadura transversal, la pieza es capaz de


absorber parte de los esfuerzos tangenciales generados por el cortante.

Para entender esta colaboración, se puede suponer que una viga funciona
como un arco atirantado. A medida que la carga aumenta van apareciendo fisuras de
flexión en la zona de tracción. A su vez, cerca de los apoyos, donde el esfuerzo
cortante suele ser máximo, la cabeza de hormigón comprimido se inclina siguiendo
las isostáticas de compresión. Se forma así en la viga una especie arco atirantado
que facilita la transmisión de cargas hasta el apoyo (fig. 19), de tal forma que la
contribución del hormigón se basa fundamentalmente en tres mecanismos
resistentes4: la resistencia a cortante de la cabeza de hormigón comprimido, el
cortante transferido en la superficie de la fisura y el efecto pasador de las armaduras.
Para que el efecto arco se pueda desarrollar es necesario que exista suficiente
armadura anclada en los extremos de la pieza, de ahí que algunos autores
recomienden anclar en los extremos al menos la mitad de la armadura necesaria en
centro de vano.

4
A nivel internacional no existe un consenso entre los investigadores sobre la medida en la que contribuyen
cada uno de estos mecanismos en la absorción a esfuerzo cortante. Como consecuencia de ello, las diferentes
normativas y códigos adoptan diferentes contribuciones como principales, dando lugar a formulaciones distintas.
Hay modelos que estiman que la contribución a cortante de la cabeza de hormigón comprimido es más
importante que el cortante que se puede transferir a través de la superficie de la fisura y viceversa. En cualquier
caso, las dos contribuciones son fundamentales.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 17
Construcción III

Figura 19. Modelo de Kani (1964) y mecanismos resistentes (García et al., 2009).

Dependiendo de la relación canto/luz de la viga y de la capacidad mecánica de


armadura longitudinal dispuesta hasta los apoyos (actuando a modo de tirante), el
cortante absorbido será mayor o menor.

a) Resistencia a cortante de la cabeza de hormigón comprimido.


En las piezas sometidas a flexión existe una zona superior comprimida a la que
no llegan las fisuras. Se mantiene así en esa zona la cohesión del material,
pudiendo absorber tensiones tangenciales, cuya magnitud depende
fundamentalmente de la calidad del hormigón, es decir, de fck.

b) Cortante transmitido en la superficie de la fisura: engranaje de los áridos y


rozamiento entre labios de fisuras.
Los áridos cosen ambos lados de la fisura. Además, debido a la rugosidad
superficial de los labios de las fisuras se generan unas fuerzas de rozamiento
que se oponen al deslizamiento de una biela respecto de la contigua. No
obstante, a medida que aumenta el esfuerzo cortante el ancho de fisura
también aumenta, disminuyendo así el rozamiento en las mismas. Este
mecanismo depende de dos factores, como son la fracción de árido grueso y el
canto útil de la viga. Así, por ejemplo, para una misma fracción, el efecto es
mayor en términos relativos en piezas de poco canto que en piezas de gran
canto, lo que se tiene en cuenta en el cálculo a través de un coeficiente k.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 18
Construcción III

c) Efecto pasador (o efecto dovela) de la armadura longitudinal de tracción.


Las distintas bielas están cosidas entre sí por la armadura longitudinal,
oponiéndose así al deslizamiento de una respecto de la contigua. Este
mecanismo depende de la cantidad de armadura de tracción dispuesta.
Normalmente, esta contribución se suele considerar nula cuando no existe
armadura transversal5.

La rotura de la pieza no se produce cuando se forma la fisura inclinada de


cortante, sino cuando la fisura se propaga a la cabeza comprimida, ya que a partir de
ese instante la pieza ya no es capaz de absorber esfuerzo cortante en la cabeza
comprimida ni momento flector.

Teniendo en cuenta estos aspectos, el Código Estructural (anejo 19, art. 6.2.2)
propone una expresión de origen experimental para determinar la contribución del
hormigón a esfuerzo cortante VRd,c:

0,18
𝑉 , 𝑘 100 𝑓 /
0,15 𝑏 𝑑  0,035 𝑘 /
𝑓 0,15 𝑏 𝑑 (20)

donde:

k Coeficiente que tiene en cuenta la influencia del canto útil en el efecto del
cortante transmitido en la superficie de la fisura inclinada6.

200
𝑘 1 ̸  2,0 donde d es el canto útil expresado en mm.
𝑑

L Cuantía geométrica de armadura longitudinal de tracción7, que se prolonga al


menos una longitud igual a lb,net + d a partir de la sección donde se comprueba

5
Si no existe armadura transversal, el esfuerzo cortante tiende a doblar y desplazar la armadura longitudinal
haciendo saltar el recubrimiento. A partir de ese instante, la colaboración de la armadura longitudinal en la
absorción de esfuerzo cortante puede considerarse despreciable.
6
Este factor, que tiene en cuenta la influencia del canto de la pieza en la resistencia a cortante, es un factor muy
importante. La norma americana (ACI-318) proporciona valores más restrictivos que el Código Estructural y el
EC-2 para cantos útiles superiores a 50 cm, y tanto más restrictivos cuanto mayor es el canto.
7
Una mayor cuantía de armadura longitudinal da lugar a una mayor profundidad de fibra neutra y, por lo tanto,
a una mayor resistencia a cortante al tener una mayor cabeza de hormigón comprimido.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 19
Construcción III

el cortante (para garantizar que la armadura considerada ha sido anclada


convenientemente teniendo en cuenta el efecto del decalaje).
𝐴
 ̸  0,02
𝑏 𝑑
cp Tensión media de compresión (la compresión se toma con signo positivo).
𝑁
   ̸ 0,2 𝑓
𝐴

bw Menor ancho de la sección en una altura igual a tres cuartos del canto útil
medida a partir del c.d.g. de la armadura de tracción8 (fig. 20).

¾d

Figura 20.

Además de los mecanismos resistentes enunciados anteriormente y que se


reflejan a través de los parámetros fck, L y k, en la expresión anterior se ha tenido
también en cuenta el efecto favorable que producen las fuerzas de compresión
longitudinal mediante el término 0,15ꞏcp, en el que el factor 0,15 es un coeficiente
de rozamiento.

3. MÉTODO DE DIMENSIONAMIENTO DE LA NORMA ESPAÑOLA

De acuerdo con lo visto en el primer apartado, en una pieza de hormigón


armado el agotamiento por esfuerzo cortante puede darse de dos formas: por
compresión oblicua del alma (fig. 21) o por tracción del alma.

8
El Código Estructural señala que bw es el espesor mínimo en la zona de tracción. De forma simplificada, puede
considerarse que la zona traccionada se extiende hasta una altura igual a 0,75ꞏd desde la armadura de tracción.
Esta simplificación es la que adoptaba la antigua norma española EHE-08.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 20
Construcción III

a) b)
Figura 21. Agotamiento por cortante: a) compresión del alma (Leonhardt y Mönnig, 1973);
b) tracción del alma.

Cada una de estas dos comprobaciones se realiza en secciones diferentes


(secciones de referencia). La primera, en una sección situada en el borde del apoyo,
y la segunda, en una sección situada a una distancia d del borde del apoyo.

Elementos que obligatoriamente


llevan armadura de cortante
3.1. Elementos que requieren armadura de cortante

Este es el caso, por ejemplo, de vigas9 (en forjados y cimentación) y pilares, o


de algunos tipos de zapatas (zapatas combinadas), es decir, de elementos
unidireccionales en los que no es posible la redistribución transversal de esfuerzos.
En estos elementos es obligatorio disponer una armadura mínima (ver apartado 7).
En cualquier caso, tal y como se ha señalado anteriormente, hay que verificar que no
se produce el agotamiento por compresión oblicua del alma, ni por tracción en el
alma.

a) Agotamiento por compresión oblicua del alma

A partir de la analogía de la celosía y según lo visto en el apartado 2.1.2


(ecuación 19), el cortante que puede provocar el agotamiento de las bielas de
hormigón comprimido viene dado por la siguiente expresión:

𝑐𝑜 𝑡  𝑐𝑜 𝑡 𝜃
𝑉  𝜎 𝑏 𝑧 (21)
1 𝑐𝑜 𝑡 𝜃

debiendo verificarse para que no se produzca el agotamiento:

9
En dinteles de poca luz, inferior a 2 metros, y de poca importancia estructural, el Código Estructural permite
no tener en cuenta las limitaciones de armadura transversal mínima.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 21
Construcción III

𝑉 𝑉

siendo Vd1 el cortante solicitación en la sección situada en el borde del apoyo.

La resistencia a compresión del hormigón de las bielas es menor que la


resistencia a compresión simple debido a diversos factores tales como las
alteraciones causadas por las armaduras que atraviesan dichas bielas, o la tracción
inducida en el hormigón por su adherencia con la armadura transversal. El valor de
dicha resistencia se puede considerar igual a:

   𝑓 Factores correctores para tener en cuenta como se le aplica el esfuerzo al hormigón

siendo  un coeficiente de reducción de la resistencia en el hormigón fisurado por el


efecto del cortante, de valor:
𝑓
 0,6 1
250

y cw un coeficiente que tiene en cuenta la influencia del axil de compresión


actuante en la pieza sobre la capacidad resistente de las bielas10:
 1 para estructuras sin esfuerzo axil de compresión

 1 para 0 < cp ≤ 0,25 fcd Dependiendo de la tension aplicada en el material,
(sigma sub cp)
 1,25 para 0,25 fcd < cp ≤ 0,50 fcd sigma sub cp= (Nd- As2*fyd) /b*h

 2,5 1 para 0,50 fcd < cp ≤ fcd

donde cp es la tensión efectiva de compresión media en la sección de hormigón


debido al axil Nd que, en pilares, debe calcularse descontando la tensión absorbida
por las armaduras comprimidas.
𝑁 𝐴 𝑓

𝐴

siendo:

As2 Área de armadura de compresión. En compresión compuesta (dominio 5)


puede suponerse que toda la armadura del pilar está sometida a la tensión fyd.
10
Cuando el axil de compresión es pequeño, la capacidad resistente de las bielas aumenta. Solo cuando el axil es
muy importante (tensión efectiva σcp > 0,6 fcd) la capacidad resistente de las bielas disminuye, siendo en estos
casos el coeficiente cw < 1.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 22
Construcción III

fyd Límite elástico del acero en compresión, cuyo valor no debe ser superior a 400
MPa.

En definitiva, la ecuación 21, que representa el cortante máximo que puede


absorber un elemento para que no se produzca el agotamiento de las bielas de
hormigón comprimido, se puede escribir:

𝑐𝑜𝑡 𝑐𝑜𝑡
𝑉 𝑉 ,  𝑏 𝑧 𝑓 (22)
1 𝑐𝑜𝑡 

En el caso particular de disponer estribos verticales ( = 90º), la expresión


anterior se puede expresar de la siguiente forma (es la expresión que proporciona el
Código Estructural):

1
𝑉 𝑉 ,  𝑏 𝑧 𝑓 (23)
𝑐𝑜𝑡 𝑡𝑎𝑛

En la comprobación a cortante, el brazo mecánico z se considera


habitualmente igual a 0,9ꞏd.

Teniendo en cuenta estas consideraciones, en el caso particular de piezas de


hormigón armado armadas con estribos ( = 90º), y suponiendo un ángulo de
fisuración del alma11  = 45º, la ecuación 22 es igual a:

11
Para la comprobación a esfuerzo cortante, el Código Estructural permite adoptar cualquier valor de 
comprendido entre 26,5º y 63,5º, o lo que es lo mismo que 0,5  ctg   2,0.

Adoptar un valor de pequeño, o lo que es lo mismo adoptar un valor de cot mayor, equivale a considerar
más armaduras cosiendo el plano de fisuración. Es decir, aumenta la contribución de las armaduras para absorber
las tracciones en el alma de la pieza, pero disminuye la resistencia de la biela frente a las tensiones de
compresión oblicuas (ec. 22). Igualmente, adoptar un valor de grande (o un valor pequeño de cot) equivale a
todo lo contrario. En general, se suele tomar  = 45º, aunque suele ser más rentable trabajar con cot = 2,0
(=63,5º), ya que la resistencia a cortante de las bielas oblicuas no es un problema en piezas de sección
rectangular y permite aumentar la contribución de las armaduras para absorber las tracciones en el alma.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 23
Construcción III

- vigas donde no hay esfuerzo axil (cw = 1,0):


𝑓
𝑉 , 0,27 1 𝑏 𝑑𝑓 (24)
250

- pilares o vigas con esfuerzo axil:


𝑓
𝑉 , 0,27 1  𝑏 𝑑𝑓 (25)
250

b) Agotamiento por tracción en el alma

La forma práctica de proceder para dimensionar una pieza es verificar primero


si realmente es necesaria armadura de tracción, es decir, si el hormigón por sí solo
es capaz de absorber las tensiones de tracción en el alma, o lo que es lo mismo, si
se cumple:
𝑉 𝑉 ,

siendo Vd2 el cortante solicitación en la sección situada a un canto útil del borde del
apoyo y VRd,c el cortante que es capaz de absorber el hormigón (ec. 20) para evitar
un agotamiento por tracción en el alma.

Si esta condición se cumple, en principio no sería necesario colocar armadura


de tracción, si bien es obligatorio disponer una armadura mínima (ver apartado 7).

Si, por el contrario, Vd2 > VRd,c entonces hay que calcular la armadura necesaria
teniendo en cuenta que en condiciones de agotamiento no se considera la
colaboración del hormigón12. Según lo visto en el apartado 2.1.1 (ec. 16), el cortante
que absorben las armaduras transversales es igual a:
𝑧 (sigma sub alfa) tension de agotamiento de trabajo,
𝑉 𝑉 , 𝑠𝑒𝑛 𝑐𝑜𝑡 𝑐𝑜𝑡 𝐴  cuando la armadura de acero esta trabajando al
𝑠 máximo, fyd
Así pues, para que no se produzca el agotamiento debe verificarse:

𝑉 𝑉 ,

12
Esta consideración puede ser discutible y de hecho algunas normas y códigos técnicos sí que consideran la
colaboración del hormigón en la absorción de esfuerzo cortante, como por ejemplo la norma americana ACI-
318-19 o la antigua norma española EHE-08 (vigente hasta noviembre de 2021). En cualquier caso, su no
consideración conduce a una mayor armadura transversal y, por tanto, a una mayor ductilidad y a una mayor
seguridad frente a un agotamiento por cortante, que es un agotamiento de tipo frágil.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 24
Construcción III

siendo Vd2 el cortante solicitación en la sección situada a un canto útil d del borde del
apoyo.

En condiciones de agotamiento, se supone que la armadura alcanza el límite


elástico de cálculo, con lo que la expresión anterior puede escribirse:
𝑧 (26)
𝑉 , 𝑠𝑒𝑛 𝑐𝑜𝑡 𝑐𝑜𝑡 𝐴 𝑓
𝑠

En flexión simple y flexotracción se suele tomar simplificadamente z = 0,9 d. En


el caso de flexocompresión, el Código Estructural no establece un valor, por lo que
se suele adoptar13 también z = 0,9 d. De acuerdo con ello, en el caso particular de
piezas de edificación armadas con estribos ( = 90º) y supuesto un ángulo de
fisuración del alma  de 45º, se tiene14:

0,9 𝑑 (27)
𝑉 , 𝐴 𝑓
𝑠

Ahora bien, en el caso de secciones circulares solicitadas a flexión se puede


considerar z = 0,8 h.

En piezas armadas con estribos circulares, el valor de VRd,s se debe multiplicar


por 0,85 para tener en cuenta la pérdida de eficacia de la armadura de cortante,
debido a la inclinación de las ramas que la conforman.

13
En el caso de flexocompresión, la antigua norma española EHE-08 establecía como valor del brazo mecánico
z, la siguiente expresión:
𝑀 𝑁 𝑧 𝑈 𝑑 𝑐 0
𝑧
𝑁 𝑈 𝑈 0,9𝑑
siendo zo la distancia del punto de aplicación del esfuerzo axil al c.d.g. de la armadura de tracción y Us1 y Us2 las
capacidades mecánicas de armadura de tracción y compresión, respectivamente.
Adoptar esta expresión es asumir algunas consideraciones que en muchos casos no son ciertas, pues se considera
que la mitad de las armaduras trabaja a tracción y la otra mitad a compresión, que la armadura dispuesta es la
estrictamente necesaria y que además su tensión de trabajo es igual a su límite elástico de cálculo.
14
Como se ha comentado en la nota 11, la máxima contribución de las armaduras se va a obtener suponiendo
que cot = 2,0 (= 63,5º). Si se toma este valor también habrá que hacerlo en la comprobación de la resistencia
a cortante de las bielas comprimidas (ec. 22).
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 25
Construcción III

3.2. Elementos que no requieren armadura de cortante

Este es el caso de algunos elementos estructurales bidireccionales en los que


es posible una redistribución transversal de esfuerzos, como por ejemplo losas
(macizas, nervadas o alveolares), zapatas o muros. De forma análoga a lo visto en el
apartado anterior, hay que comprobar que no se produce el agotamiento por
compresión oblicua del alma, ni por tracción en el alma.

a) Agotamiento por compresión oblicua del alma

Para que no se produzca el agotamiento, se debe verificar15:

𝑉 0,5 𝑏 𝑑  𝑓

siendo:

Vd1 cortante solicitación en la sección situada en el borde del apoyo

 coeficiente de reducción de la resistencia en el hormigón fisurado por cortante


𝑓
 0,6 1
250

b) Agotamiento por tracción en el alma

Para que no se produzca el agotamiento, se debe verificar:

𝑉 𝑉 ,

siendo Vd2 el cortante solicitación en la sección situada a un canto útil del borde del
apoyo y VRd,c el cortante que es capaz de absorber el hormigón (ec. 20) para evitar
un agotamiento por tracción en el alma, es decir:

0,18
𝑉 , 𝑘 100  𝑓 /
0,15 𝑏 𝑑  0,035 𝑘 /
𝑓 0,15 𝑏 𝑑

15
La expresión propuesta por la normativa para elementos sin armadura de cortante se puede obtener a partir de
la ecuación 22, suponiendo simplificadamente cw = 1, z = d,  = 45º y cot  = 0.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 26
Construcción III

4. DECALAJE DE LA LEY DE MOMENTOS FLECTORES.

En condiciones de agotamiento y debido a la fisuración oblicua por cortante se


produce un incremento de esfuerzos en la armadura longitudinal de tracción que,
lógicamente, habrá que tener en cuenta en el dimensionamiento de la pieza.

Para entender bien esta cuestión, es conviene determinar, y posteriormente


comparar entre sí, los esfuerzos que se generan en dicha armadura en los dos
supuestos siguientes: viga sin fisuración oblicua y viga con fisuración oblicua por
cortante.

a) Pieza de hormigón armado sin fisuración oblicua por esfuerzo cortante.

N c1 N c2
P P
Equilibrio de fuerzas exteriores,
no se aplican los momentos ,
generados por las fuerzas z Vd Md z Vd Md
axiles de las armaduras. Debe N s1 N s2
existir una fuerza que equilibrio
o contrarreste las fuerzas que
sustituyen al resto de la barra,
por eso aplicamos las fuerzas a a sd
en las armaduras(estas deben
contrarrestar el momento) las
fuerzas exteriores deben R 1d R 1d
equilibrar las interiores.

a) b)
Figura 22.

Dada una sección cualquiera situada a una distancia “a” del apoyo, de acuerdo
con la ecuación de equilibrio de momentos, tomando momentos respecto del punto P
se tiene (figura 22 a):

M d  Vd a

Si se tiene en cuenta que, a su vez, el momento solicitación exterior Md tiene


que estar equilibrado por un par de fuerzas Ns1 y Nc1, que son las resultantes de
tracción y compresión, respectivamente, en la sección de hormigón, la ecuación
anterior puede escribirse:

Vd
M d  N s1 z  V d a  N s1  a
z
donde z es el brazo mecánico.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 27
Construcción III

Es decir, cuando la pieza está sin fisurar, la fuerza de tracción en la armadura


longitudinal en una sección situada a una distancia “a” del apoyo es igual a (Vd / z)ꞏa .

Si, por el contrario, la sección en vez de estar situada a una distancia “a” del
apoyo está situada a una distancia “a + sd”, operando igual que en el caso anterior,
se obtiene (figura 22 b):
Vd
M d  N s 2 z  Vd  a  s d   N s2   a  sd 
z

b) Pieza de hormigón con fisuración oblicua por cortante.

Algunas normas, como el Código Estructural o el Eurocódigo EC-2, consideran


nula la contribución del hormigón en la absorción de esfuerzo cortante, confiando
todo el esfuerzo a la armadura transversal.

Al haberse fisurado la pieza por cortante, el equilibrio de esfuerzos se


establece en el plano inclinado que pasa por la fisura (fig. 23). De esta forma la
fuerza de la armadura en una sección se tiene que equilibrar con la fuerza de
compresión del hormigón que está situado en una sección con mayor momento.
Antes teniamos un momento
Podemos suponer que cuando rompe
exterior y lo equilibrabamos
como la fibra neutra sube x-d la
mediante respuestas de
aproximamos a z
traccion y compresion en el
interior, en este caso Cogemos momentos en el punto P
sustituimos el momento
exterior por una fuerza de
compresion Nc3 y al nivel de la
armadura inferior , una de
traccion Ns3.

Y el esfuerzo cortante debe


haber una armadura
transversal, normalmente
estribos pero en este caso a
alfa grados. Se sustituye el
cortante por una fuerza que
esta estirando la armadura, de
la cual sabemos que la
componente vertical es Vd
Figura 23.

Para establecer el equilibrio, se va a sustituir el momento y el cortante, por


unas fuerzas actuantes sobre la sección. Suponiendo además que la armadura
transversal está uniformemente distribuida a lo largo del brazo mecánico z, la
resultante de fuerzas en las mismas estará situada en el centro de z, a mitad altura.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 28
Construcción III

Dicha resultante es una fuerza inclinada (siguiendo la dirección de la armadura


transversal) cuya componente vertical es igual a Vd (ver ec. 15) y, por consiguiente,
la componente horizontal es igual a Vd cot.

Si se considera simplificadamente que d - x ≈ z, planteando el equilibrio de


momentos respecto del punto P, se tiene:
𝑧 𝑧
𝑁 𝑧 𝑉 𝑐𝑜𝑡 𝑉 𝑎 𝑐𝑜𝑡
2 2

es decir:

𝑉 𝑐𝑜𝑡 𝑐𝑜𝑡
𝑁 𝑎 𝑧
𝑧 2

Si, por ejemplo, se toma 𝑐𝑜𝑡 𝑐𝑜𝑡 igual a sd, la ecuación anterior puede

escribirse de la siguiente forma:

Vd
N s3  a  sd 
z

Como se observa, esta expresión es análoga a la vista en el caso de sección


sin fisurar y situada a una distancia “a + sd” del apoyo. Es decir, cuando se produce
la fisuración oblicua por cortante, la fuerza de tracción que se genera en la armadura
longitudinal en una sección cualquiera no es igual a la que se deriva de considerar el
momento existente en esa sección sino la que se deriva de considerar un momento
mayor, el situado a una distancia “sd” de la sección de referencia16.

En definitiva, la fisuración oblicua por cortante produce un incremento de


tracción en la armadura longitudinal de flexión, que es equivalente a trasladar
(decalar) la ley de momentos flectores un valor sd en la dirección en la que decrecen
los momentos en valor absoluto.

16
En el Código Estructural (anejo 19, art. 9.2.1.3) la nomenclatura utilizada para designar la magnitud del
decalaje es diferente, siendo sd = al
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 29
Construcción III

Figura 24. Decalaje de la ley de momentos.

Dependiendo de los valores que se adopten de  y  (ver nota 7), el valor que
habría que considerar de “sd” sería el indicado en la siguiente tabla.

Tabla 2. Valores del decalaje sd de la ley de momentos flectores.

Tipo de armadura  = 26,5º  = 45º  = 63,5º

Estribos verticales  = 90º z 0,50 z 0,25 z

Estribos inclinados  = 60º 0,71 z 0,21 z 0

Barras inclinadas  = 45º 0,50 z 0 0

Como aproximación del lado de la seguridad se suele adoptar como valor del
decalaje el canto útil de la sección “d” ( sd  1,10 z  d).

5. PIEZAS DE CANTO VARIABLE. Situación especial pero se puede dar

En piezas de canto variable, el cortante que debe absorberse no es el que se


deduce directamente del cálculo de esfuerzos Vd, sino que puede ser mayor o menor
según cómo varíe dicho canto. A este cortante se le denomina cortante efectivo Vrd.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 30
Construcción III

Con el fin de analizar esta cuestión, supongamos una pieza de canto variable
sometida, en el caso más general, a un momento flector Md, un esfuerzo axil Nd y un
esfuerzo cortante Vd.

Ns
as
Vd
es
Md
z
Nd
Vrd

ac

Nc

Figura 25.

Si se plantea el equilibrio vectorial de fuerzas, fácilmente se puede observar


que, en este caso particular, la componente vertical de las resultantes de compresión
y tracción compensan en parte el cortante solicitación exterior Vd, por lo que el
cortante Vrd que deberá de absorber la viga será menor que el solicitación.

Nd
Nc

Vrd Vd

Ns
Figura 26.

En cualquier caso, planteando el equilibrio de fuerzas verticales en la sección,


se tiene:

F V 0; Vd  N s sen s  N c sen c  Vrd

En este caso particular el cortante efectivo es menor que el cortante


solicitación. Sin embargo, no hay que olvidar que los ángulos c y s pueden ser de
signo contrario a los aquí establecidos, en cuyo caso Vrd sería mayor que Vd.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 31
Construcción III
Pieza biapoyada con canto variable
El cortante
no cambias,
es el que
esta aplicado
en la barra,
pero el
momento es
Los axiles deben el opuesto
oponerse al (que se
momento opone) regla
de la manita,
que se
necesita para
deformar la
pieza****

Figura 27.

En definitiva, el cortante efectivo, es decir, el que realmente tiene que absorber


la sección de hormigón, va a depender del ángulo que forman las armaduras y la
cabeza de hormigón comprimido con la directriz de la pieza. Aunque lo más efectivo
y que mejor ayuda a entender físicamente el problema es plantear en cada caso el
equilibrio de fuerzas verticales, como regla general se puede señalar que cuando la
sección crece en el sentido en que crecen los momentos el cortante Vrd es menor
que Vd, y que cuando, por el contrario, la sección disminuye el cortante Vrd es mayor.

Lógicamente, cuando la pieza no es de canto variable los ángulos c y s son


nulos y, por lo tanto, Vrd = Vd.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 32
Construcción III

6. CARGAS COLGADAS Y APOYOS INDIRECTOS.

Se denominan cargas colgadas a las cargas que actúan por debajo del bloque
de hormigón comprimido. Para movilizar la celosía resistente es necesario transferir
las cargas hasta el bloque comprimido mediante estribos verticales bien anclados en
la parte superior de la viga, cuya capacidad mecánica debe ser mayor o igual que el
valor de cálculo de las cargas que transmiten. Estos estribos deben sumarse a los ya
dispuestos para absorber el cortante.

Figura 28.

Si se trata de cargas puntuales colgadas, se puede considerar que éstas se


disipan en el interior de la pieza según ángulos de 30º hasta alcanzar la fibra neutra,
pudiendo disponer la armadura uniformemente distribuida a lo largo de la longitud
AB.

Figura 29.

Se denomina apoyo indirecto cuando una viga se apoya sobre otra viga
(en lugar de en un pilar o un muro), como es el caso de los brochales. En este
caso, se debe incluir una armadura adicional en forma de estribos en la zona
de intersección de ambos elementos. Parte de estos estribos también pueden
colocarse fuera de la zona de intersección, en la zona sombreada marcada en
la Figura 30. Como en el caso de cargas colgadas, la capacidad mecánica
debe ser mayor o igual que el valor de cálculo de la carga transmitida.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 33
Construcción III

Figura 30.

7. LIMITACIONES Y DISPOSICIONES CONSTRUCTIVAS

Las limitaciones y disposiciones relativas a la armadura transversal que deben


cumplirse (anejo 19, arts. 9.2.2, 9.3.2 del C.E.) no son iguales para todos los
elementos estructurales y son las recogidas en los siguientes apartados.

7.1. Vigas

a) Como armadura transversal se pueden utilizar estribos, barras levantadas,


montajes en forma de escalera, etc., o una combinación de todos ellos.

Figura 31.

b) El ángulo que forma la armadura de cortante con la directriz de la pieza ha de


estar comprendido entre 45º y 90º.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 34
Construcción III

c) En vigas, al menos el 50% de la armadura necesaria debe disponerse en forma


de estribos verticales.

d) Debe disponerse una cuantía mínima de armadura con el objeto de evitar


roturas frágiles.

𝑨𝒔𝒘 𝟎, 𝟎𝟖 𝒇𝒄𝒌
𝒔𝒕 𝒃𝒘 𝒔𝒆𝒏 𝒇𝒚𝒌

o lo que es lo mismo, en el caso particular de estribos verticales, la separación


entre estribos st debe ser inferior a:

𝑨𝒔𝒘 𝒇𝒚𝒅
𝒔𝒕
𝟎, 𝟎𝟕 𝒃𝒘 𝒇𝒄𝒌

siendo Asw el área de armadura de cortante en la longitud st

e) Para garantizar un adecuado confinamiento del hormigón, la separación entre


armaduras de cortante debe cumplir la condición:

𝒔𝒕 𝟎, 𝟕𝟓 𝒅 𝟏 𝒄𝒐𝒕

que, en el caso particular de estribos es igual a:

𝒔𝒕 𝟎, 𝟕𝟓 𝒅

No obstante, cuando se emplean barras levantadas, la limitación es algo más


restrictiva:

𝒔𝒕 𝟎, 𝟔𝟎 𝒅 𝟏 𝒄𝒐𝒕

f) La separación transversal entre las ramas de estribo debe ser tal que:

𝟎, 𝟕𝟓 𝒅
𝒔𝒕,𝒕𝒓𝒂𝒏𝒔
𝟔𝟎𝟎 𝒎𝒎

g) Los estribos deben prolongarse al menos una distancia igual a d/2 más allá de
donde dejan de ser necesarios.

h) Los estribos deben disponerse hasta el borde del apoyo.


Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 35
Construcción III

i) Cuando se utilicen barras levantadas es conveniente que la distancia desde la


cara del soporte hasta el doblado de las barras no sea superior a d/2. El
levantamiento de las barras suele hacerse en dos o tres secciones distintas (se
mantienen los mismos criterios de separación que los señalados para estribos)
y, si es posible, debe de hacerse por parejas de barras dispuestas
simétricamente.

j) El diámetro de los estribos suele estar comprendido entre los 6 y los 10 mm,
Solo usar 8
pues a partir de este diámetro resulta difícil su elaboración.

k) Como norma general, es preferible colocar estribos finos y juntos a colocarlos


gruesos y separados, ya que se mejoran las condiciones de adherencia y
fisuración. Si, por cuestiones de cálculo, éstos deben disponerse muy juntos17
(separación inferior a 10 cm), es preferible doblarlos, colocándolos de dos en
dos, a disponer uno solo de sección doble.

7.2. Pilares

a) El diámetro de la armadura transversal t debe ser:


6 𝑚𝑚

1/4 
siendo max el diámetro de la armadura longitudinal comprimida más gruesa.

b) Al igual que en vigas, debe disponerse una cuantía mínima de armadura con el
objeto de evitar roturas frágiles. En el caso particular de estribos verticales, la
separación entre estribos st debe ser inferior a:

𝑨𝒔𝒘 𝒇𝒚𝒅
𝒔𝒕
𝟎, 𝟎𝟕 𝒃𝒘 𝒇𝒄𝒌

siendo Asw el área de armadura de cortante en la longitud st

17
Es necesario dejar espacio suficiente para poder introducir el vibrador.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 36
Construcción III

c) Para evitar pandeos localizados de la armadura longitudinal comprimida, debe


verificarse:
st  15 min
st  lmin La menor de las dimensiones entre base y altura del pilar en planta

st  30 cm
siendo min el diámetro de la armadura longitudinal comprimida más delgada y
lmin la dimensión menor del pilar.

En estructuras situadas en zonas sísmicas importantes o expuestas a la acción


del viento y, en general, cuando se trata de obras especialmente delicadas,
conviene que la separación st no sea superior a 12 min.

d) En la base y cabeza del pilar, en una distancia igual a la mayor dimensión del
pilar, la separación entre estribos será menor:

st  9 min
st  0,6ꞏlmin
st  18 cm
e) En las zonas de solape de las armaduras, cuando el diámetro de las armaduras
longitudinales sea superior o igual a 16 mm, el número mínimo de estribos será
de 3 y la separación entre ellos cumplirá los requisitos establecidos en el punto
anterior.

f) Las armaduras longitudinales situadas en las esquinas irán sujetas con


estribos. Las armaduras longitudinales interiores deberán estar sujetas
mediante armadura transversal en las dos direcciones si la distancia de dichas
barras a la más próxima que esté sujeta es superior a 15 cm (fig. 32).
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 37
Construcción III

Figura 32.

7.3. Losas macizas

a) Se podrá disponer armadura de cortante si el espesor de la losa es al menos


de 20 cm.

b) Si el cortante solicitación es inferior a 1/3 del cortante que agota las bielas de
hormigón comprimido (Vd ≤ 1/3 VRd,max), la armadura de cortante podrá
disponerse en su totalidad con barras levantadas.

c) Debe disponerse una cuantía mínima de armadura, siendo dicha cuantía la


misma que en el caso de vigas.

d) La separación máxima entre estribos es igual a:

𝒔𝒕 𝟎, 𝟕𝟓 𝒅

No obstante, cuando se emplean barras levantadas, dicha limitación es:

𝒔𝒕 𝒅

e) La separación transversal entre las ramas de estribo debe ser tal que:

𝒔𝒕,𝒕𝒓𝒂𝒏𝒔 𝟏, 𝟓 𝒅

f) La armadura transversal debe prolongarse al menos una distancia igual a d/2


más allá de donde deja de ser necesaria.
Lección 12. E.L.U. de Esfuerzo Cortante 38
Construcción III

7.4. Muros

a) En las zonas del muro donde el área total de armadura vertical de ambas caras
sea mayor que 0,02ꞏAc, se deberá disponer armadura transversal en forma de
cercos, cumpliendo con los mismos requisitos que para soportes. No obstante,
no es necesario colocar estribos si la armadura está formada por mallas
electrosoldadas y por barras  ≤ 16 mm y un recubrimiento superior a 2.

BIBLIOGRAFÍA

- Calavera, J. Proyecto y cálculo de estructuras de hormigón armado para edificios.


Tomo II. Ed. INTEMAC. Madrid, 2008.

- FIB. Shear and punching shear in RC and FRC elements. Bulletin 57. 2010

- García Meseguer A., Morán Cabré F, Arroyo Portero JC. Jiménez Montoya.
Hormigón armado. 15ª edición. Ed. Gustavo Gili. Barcelona, 2008.

- Kani GNJ. The riddle of shear failure and its solution. ACI Journal. April 1964, pp.
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- Leonhardt F, Mönnig E. Lectures about reinforced concrete. Part 2. Springer, pp.


175-217.

- Ministerio de Fomento. Código Estructural. Ed. Centro de Publicaciones de la


Secretaría Técnica del Ministerio de Fomento. Madrid, 2021.

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