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Partimos de la idea de que el grupo sujeto es aquel que opera o se propone operar sobre
ciertos desprendimientos de lo establecido, pueden abrirse a un más allá de sus intereses
puntuales aunque esto no constituye necesariamente un más allá institucional, aspira a
tomar la palabra porque en el discurso institucional siempre tienen algo que decir. Estos
grupos no pueden sostener en forma permanente una posición instituyente pero son
aquellos que respecto de lo hablado/hablante tienen vocación de tomar la palabra mientras
que los grupos objeto son los que tienden a repetir al pie de la letra.
Ubicándonos en la perspectiva que posee esta cátedra es acertado posicionarnos como un
grupo sujeto, ya que la propuesta curricular intenta romper con el modelo académico
tradicional, no obstante teniendo siempre en cuenta la singularidad y particularidad de cada
sujeto es claramente visible la resistencia que en algún sentido esto produce.
Por otro lado el grupo objeto hace referencia al sometimiento de las consignas instituidas,
son aquellos que soportan y sostienen la jerarquización institucional, su acción es la que se
espera de ellos. 
Así mismo no existen los grupos objeto o sujeto puros, se trata de herramientas de uso para
trabajar en la movilidad de lo insospechado institucional, a la indispensable disposición
para comprender la racionalidad de lo instituido/instituyente
Los grupos instituidos son aquellos que han dirigido hasta en sus gestos las reglas formales
e informales de la institución, existen aquellos que se encuentran más bien ceñidos hacia la
disposición vertical pero también existen las instituciones que dan lugar a la coexistencia de
cuerpos agrupados en forma horizontal de relación y comunicación. 
Lo mencionado anteriormente es claramente observable en el transcurso de las clases de
esta materia en donde no hay un orden establecido, sino que por el contrario las mismas se
van desarrollando espontáneamente según lo que va surgiendo y lo que se vaya presentando
a partir del feedback entre alumnos y profesores, se pueden tocar diversos temas y
trabajarlos en base a los conceptos dados, pero también se debe cumplir con ciertas pautas
institucionales por ejemplo los requisitos para regularizar la materia. 
Es importante destacar la riqueza de conocimientos que esto genera, ya que posibilita
comprender los fenómenos conceptuales y la teoría desde experiencias cotidianas o temas
actuales de diferente índole. 
La institución como dispositivo de las relaciones sociales, son conjunto de relaciones que
atraviesan y confluyen en un mismo espacio. Los hombres se producen circulan y también
se consumen en estas materialidades tangibles que son los grupos y las instituciones.
Lo hablante es aquello que nos facilita otra comprensión de la institución, aparece bajo la
ruptura de lo habitual, las fracturas, contradicciones, oposiciones. 
La dimensión de lo instituido significa una estructura ya dada, mientras que la dimensión
de lo instituyente no es tan sólo algo dado sino que se va haciendo, se va conformando. Por
lo tanto dentro de esta dimensión de lo instituyente se van de alguna manera dibujando y
descubriendo cada grupo con sus particularidades.
Dentro de las instituciones se producen procesos que se encuentran en continuo
movimiento lo cual implica conflictos, desajustes y que presupone todo menos la armonía
de un proceso fijo y estable. En tanto tal la institución es un proceso en movimiento serán
los grupos quienes pondrán en juego este movimiento.
Al comenzar la materia nos sorprendió el modo de organización, la desestructuración que
venía a romper con lo habitual de cada materia y que permitió que cada alumno tenga la
posibilidad de desplegar su propia subjetividad, destacando algún tema de interés y
debatirlo con los demás compañeros, donde tanto ellos como los profesores son hablantes y
a la vez escuchan.

La constitución del grupo en esta situación de la pandemia se vio dificultada, ya que no nos
conocíamos anteriormente, nos conformamos a partir de una red social, donde creamos un
grupo de whatsapp para ponernos de acuerdo en las diferentes actividades, e interactuar y a
lo largo del cuatrimestre se disuelve  el grupo cuando una compañera abandona la materia.
Si bien contamos con la libertad de armar los grupos a criterio, hubo una serie de pautas
brindadas y establecidas previamente por la cátedra, como por ejemplo el hecho de que los
grupos debían conformarse con alumnos que integren las mismas comisiones, en el mismo
horario y con el mismo profesor. Estas  pautas instituidas de alguna manera recortaron
bastante la población para la conformación de grupos, puesto que muchos tenían conocidos
en horarios de cátedra linderos. 
Es pertinente mencionar e introducir en este punto la categoría de Rizoma, según la cual la
organización de los elementos no siguen líneas de subordinación jerárquica, sino que
cualquier elemento puede afectar o incidir sobre el otro. 

Desde el punto de vista de la práctica podemos decir que es un conjunto de relevos de un

punto teórico a otro, y la teoría un relevo de una práctica a otra.
Un sistema de relevos en un conjunto, en una multiplicidad de piezas y de pedazos a la vez
teóricos y prácticos, para nosotros el intelectual teórico ha dejado de ser un sujeto, una
conciencia representante o representativa. Quien habla y quien actúa? siempre es una
multiplicidad incluso en la persona que habla o actúa, todos nosotros somos grupúsculos,
ya no hay representación, solo acción  en la práctica en relaciones de relevos o redes.

BIBLIOGRAFÍA

 Deleuze, Giles y Guattari, Féliz. “Rizoma”. Ed. Coyocán. México. (1996)

 Foucault, Michel. “Un dialogo sobre el poder y otras conversaciones”. El libro
de Bolsillo. Ed. Madrid. (1981)
 Kaminsky, Gregorio. “Dispositivos Institucionales. Democracia y Autoritarismo
en los dispositivos institucionales”. Capítulo 1. Buenos Aires: Lugar Editorial
(1990)