argumento que puede parecer correcto, pero mediante una revisión más minuciosa, se prueba que no lo es. Las trampas que ponen las falacias pueden evadirse cuando se comprenden bien los tipos de errores de razonamiento que provocan.
Clasificación
Falacia de relevancia: son las más numerosas y
comunes; son aquellas en que las premisas no son relevantes
Falacia de inducción deficiente: También son
muy comunes; son aquellas en donde la equivocación surge por el hecho de que las premisas del argumento, aunque son relevantes para la conclusión, son tan débiles e ineficaces que confiar en ellas es un error garrafal.
Falacias de presuposición: Son las
equivocaciones que surgen porque se asume demasiado en las premisas; la inferencia a la conclusión depende de suposiciones no justificadas
Falacias de ambigüedad: Surgen por el uso
equívoco de palabras o frases en las premisas o en la conclusión de un argumento, algún término fundamental que tiene diferentes sentidos en diferentes partes del argumento
Principales falacias informales:
I. Falacias de relevancia
R1. Apelación a la emoción III. Falacias de presuposición
R2. La pista falsa. P1. Accidente. R3. El hombre de paja. P2. Pregunta compleja. R4. Apelación a la fuerza P3. Petición de principio. R5. Argumento ad boniem: (a) ofensivo
b) circunstancial
R6. Conclusión irrelevante IV. Falacias de ambigüedad
A1. Equivocación. II. Inducción deficiente A2. Anfibología. D1. Ignorancia. A3. Acento. D2. Apelación inapropiada a la autoridad A4. Composición. D3. Causa falsa. A5. División. D4. Generalización precipitada