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Efecto del bosque en la regulación

de régimen hidrológico.

Por: Aarón Solís Ceciliano

 
Introducción 

Los bosques cumplen un rol fundamental en la regulación de la temperatura y del


ciclo del agua, es decir, el proceso por el cual el agua se transporta en distintas
formas de precipitaciones desde el aire hacia la Tierra, en donde los bosques y la
vegetación en general reciclan esas precipitaciones y regresa a la atmósfera
completando su recorrido (Lupi & Escobar , 2020).

La capacidad natural de los bosques de interceptar y evaporar mayor cantidad de


agua, que otro tipo de vegetación u otras superficies de captar mayor cantidad de
agua a través de sus sistemas de raíces más profundos que los de otro tipo de
vegetación y filtrar y mejorar la calidad del agua también tiene una mayor
importancia a partir de la crisis del agua, que afecta a gran parte de la población
mundial (ONU-HABITAT, 2003).

En el documento de la FAO (2023), menciona que el cambio climático altera la


regulación del ciclo del agua y las características de los recursos hídricos, lo que
favorecería el aumento de sequías en algunas áreas e inundaciones en otras. Las
investigaciones han demostrado que la conservación adecuada de bosques
nativos, así como la restauración de ecosistemas forestales dañados y
degradados, pueden desempeñar un papel protector y amortiguador frente a los
efectos del cambio climático.

Lamentablemente en muchas regiones del mundo la explotación excesiva, el mal


uso y la contaminación representan una amenaza cada vez mayor para la
disponibilidad y la calidad del agua potable. En este contexto, la relación entre los
bosques y el agua es una cuestión crítica a la que se debe otorgar una gran
prioridad.

Intercepción

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De acuerdo al documento de Mora (2020), la lluvia se distribuye de la forma
siguiente, primeramente, la que es interceptada por la cubierta vegetal, una vez el
almacenamiento de intercepción se rellena, el agua empieza a caer sobre el
terreno, la precipitación que alcanza el suelo puede seguir varios caminos, una
parte del agua rellena las depresiones en el terreno y otra se infiltra en el suelo.

Una parte del agua infiltrada constituye la humedad del suelo, y puede evaporarse
directamente o penetrar en las raíces de las plantas para ser transpirada por las
hojas. La porción de agua que supera las fuerzas de cohesión y adhesión del
suelo, se filtra hacia abajo. 

Escurrimiento.

También se denomina escurrimiento o escorrentía al agua que comienza a fluir


cuando un cauce o un depósito rebalsan. El agua, en este marco, avanza por la
superficie, pudiendo provocar diversos inconvenientes. Las características del
escurrimiento, en este sentido, están vinculadas al tipo de suelo, a la pendiente y a
otros factores. Este escurrimiento superficial está dado por el nivel de
precipitaciones menos la infiltración y la retención superficial (Chacon, 2019).

Según Chacón (2019), el escurrimiento se inicia cuando tanto la capacidad de


almacenamiento de la superficie como el poder de intercepción de la flora se han
agotado. A partir de entonces surge la película de agua que discurre sobre
la superficie y que erosiona el suelo, dado que fluye hacia los niveles más bajos

Infiltración

La infiltración se entiende como el proceso mediante el cual el agua penetra desde


la superficie del terreno hacia el subsuelo. Por lo que la percolación es el
movimiento del agua a través después de la entrada. Muchos factores influyen en
la tasa de infiltración, incluyendo la condición de la superficie del suelo y su
cubierta vegetal, las propiedades del suelo, tales como la porosidad y la
conductividad hidráulica, y el contenido de humedad presente en el mismo, así
como también la duración de la lluvia y del patrón de drenaje en la cuenca
(Villalobos Araya, 2015).

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Capacidad de campo 

De acuerdo a M

eylin (2009) se refiere a la cantidad relativamente constante de agua que contiene


un suelo saturado después de 48 horas de drenaje. El drenaje ocurre por la
trasmisión del agua a través de los poros mayores de 0,05 mm de diámetro; sin
embargo, la capacidad de campo puede corresponder a poros que varían entre
0,03 y 1 mm de diámetro. La Capacidad de Campo se determina mejor en el
campo saturando el suelo y midiendo su contenido de agua después de 48 horas
de drenaje. El suelo a capacidad de campo se siente muy húmedo en contacto
con las manos.

Punto permanente de marchitez

Según Venegas (2014), se refiere al contenido de agua de un suelo que ha


perdido toda su agua a causa del cultivo y, por lo tanto, el agua que permanece en
el suelo no está disponible para el mismo. En esas condiciones, el cultivo está
permanentemente marchito y no puede revivir cuando se le coloca en un ambiente
saturado de agua. Al contacto manual, el suelo se siente casi seco o muy
ligeramente húmedo.

Escorrentía superficial

Escorrentía es la parte de la Precipitación que llega a alimentar a las corrientes


superficiales, continuas o intermitentes, de una cuenca, existen distintos tipos de
escorrentías dependiendo de su procedencia, escorrentía Superficial o Directa,
escorrentía Hipodérmica o Subsuperficial.

De acuerdo a Dudley & Greminger (2009), la escorrentía Superficial o Directa es la


precipitación que no se infiltra en ningún momento y llega a la red de drenaje
moviéndose sobre la superficie del terreno por la acción de la gravedad, es el
agua de precipitación que, habiéndose infiltrado en el suelo, se mueve su
horizontalmente por los horizontes superiores para reaparecer súbitamente al aire

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libre como manantial e incorporarse a microsurcos superficiales que la conducirán
a la red de drenaje.

Concluyo que, las cuencas de captación boscosas suministran una gran parte del
agua que se destina a satisfacer las necesidades domésticas, agrícolas,
industriales y ecológicas de las zonas de río arriba tanto como las de río abajo.
Los responsables de la ordenación de las tierras, los bosques y el agua afrontan
un importante desafío que consiste en elevar al máximo esta gran variedad de
beneficios multisectoriales de los bosques sin detrimento de los recursos hídricos
ni de la función del ecosistema (Dudley & Greminger, 2009).

Para afrontar este reto es urgente entender mejor la interacción de los bosques y
los árboles con el agua, a fin de crear conciencia y capacidad en materia de
hidrología forestal, e incorporar este conocimiento y resultados de investigación en
las políticas. También es necesario crear mecanismos institucionales para
coordinar mejor el tratamiento de las cuestiones forestales e hidrológicas, y aplicar
y hacer que se cumplan los programas nacionales y regionales de acción.

Bibliografía
Chacon, A. (2019). Análisis del potencial de escurrimiento en la microcuenca del Río Tiribí entre el
2005 y el 2029 para la conservación de los servicios ecosistémicos de regulación hídrica.
Heredia: UNA.

Dudley, N., & Greminger, G. (2009). Los bosques y el agua . Roma : Organizacion de las Nciones
Unidas para la agricultura y la Alimentacion.

FAO. (2003). Situación de los bosques del mundO. Roma: Food and agriculture organization of the
united nations .

Lupi , A., & Escobar , P. (2020). Los bosques como reguladores del ciclo del agua para disminuir los
riesgos de inundaciones. La plata: Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y
Técnicas (CONICET).

Meylin, P. A. (2019). Determinacion de la capacidad de campo del suelo. Managua, Nicaragua :


Faculta de tecnologia de la construcion.

Mora, Y. R. (2020). Hidrología como estudio del ciclo del agua. GALICIA:
https://www.iagua.es/blogs/yuri-rubio-mora/hidrologia-como-estudio-ciclo-agua.

ONU-HABITAT. (2003). Water and sanitation in the world’s cities: local action for global goals.
Londres, Earthscan. Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos .

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Venegas, C. (2014). Determinación indirecta de la capacidad de retención de humedad en suelos
de la subcuenca del río Torjá, Chiquimula, Guatemala. Universidad Agraria de La Habana
Fructuoso Rodríguez Pérez La Habana, Cuba: Revista Ciencias Técnicas Agropecuarias, vol.
23, núm. 1, enero-marzo, 2014, pp. 41-46.

Villalobos Araya, M. (2015). Modelado de Procesos de Infiltración en suelos con sustratos de Terra
Preta . Cartago: Kurú.

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