Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Neubaum Betiana. Introducción A La Protección Intenacional de Los DDHH
Neubaum Betiana. Introducción A La Protección Intenacional de Los DDHH
De acuerdo con las definiciones que se brindan, se entiende que los derechos
humanos son derechos inherentes a todos los seres humanos, sin distinción alguna de
1
Abogada Docente de la materia Principios de Derecho Constitucional y Derechos Humanos – CBC -Cátedra
Halperín
nacionalidad, lugar de residencia, sexo, origen nacional o étnico, color, religión, lengua, o
cualquier otra condición. Así, todas las personas tenemos los mismos derechos humanos,
sin discriminación alguna. Estos derechos son interdependientes, indivisibles y se
2
encuentran interrelacionados .
Otro concepto que se da también es el que explica que los derechos humanos se
fundamentan en la dignidad de la persona; por eso, todo ser humano, sin importar su
edad, religión, sexo o condición social, goza de ellos. Así, los derechos humanos son
facultades, prerrogativas y libertades fundamentales que tiene una persona por el simple
3
hecho de serlo, sin los cuales no se puede vivir como tal .
Por su parte, los derechos sociales, que se los conoce como derechos de segunda
generación o derechos sociales, económicos y culturales, buscan, a diferencia del
anterior, un rol activo por parte del Estado. Su origen histórico se relaciona con el
nacimiento del socialismo europeo a partir de la Revolución de París de 1848, la Alemania
2
Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Naciones Unidas, “¿Qué son los
Derechos Humanos?” https://www.ohchr.org/SP/Issues/Pages/WhatareHumanRights.aspx
3
Conforme González Napolitano, Silvina S. y Pulvirenti, Orlando D., Coordinadores, “Introducción
al Estudio de los Derechos Humanos”, Errepar, Primera Edición, Capítulo 1, pg. 4
4
Conforme González Napolitano, Silvina S. y Pulvirenti, Orlando D., Coordinadores, “Introducción
al Estudio de los Derechos Humanos”, Errepar, Primera Edición, Capítulo 1, pg. 6-8
unificada de Bismark, la Revolución Soviética de 1917 y la Constitución de México de
1919.
Las principales características que se le atribuyen a los derechos humanos son las
siguientes:
- inherentes: por cuanto se afirma que ellos son innatos a todos los seres humanos sin
distinción alguna. No dependen del reconocimiento que efectúe el Estado porque se nace
con ellos.
- universales: abarca a todas las personas en todo tiempo y lugar. De esta manera, no
pueden invocarse diferencias culturales, sociales o políticas como excusa para su
desconocimiento o reconocimiento parcial.
- irreversibles: ello así en tanto todo derecho formalmente reconocido como inherente a la
persona humana queda irrevocablemente integrado a la categoría de derecho humano.
- progresivos: en virtud del carácter evolutivo de los derechos humanos, se fueron
incorporando como tales derechos que antes carecían del reconocimiento y protección
internacionales.
a.- Concepto
En primer lugar, corresponde referirse a los Estados, que son los sujetos firmantes
de estos tratados. Al suscribir un tratado de derechos humanos, el Estado asume una
serie de obligaciones que se encuentran allí plasmadas; siendo las principales las de
respetar y garantizar los derechos humanos a las personas que se encuentren en su
territorio.
Por otro lado, se encuentran las personas físicas, que son los sujetos a los que se
destina la protección de los derechos humanos. Así, los Estados se comprometen entre
ellos a proteger el efectivo ejercicio de los derechos humanos por parte de las personas.
En caso de incumplimiento, o sea, si el Estado no permite el pleno goce de estos
derechos, la persona humana puede acudir ante los organismos internacionales para
denunciar dicho comportamiento.
5
Conforme lo define Pinto , se trata de un criterio hermenéutico que informa todo el
derecho de los derechos humanos, en virtud del cual se debe acudir a la norma más
amplia, o a la interpretación más extensiva, cuando se trata de reconocer derechos
protegidos e, inversamente, a la norma o a la interpretación más restringida cuando se
5
Pinto, Mónica, “El principio pro homine. Criterios de hermenéutica y pautas para la regulación de
los derechos humanos”, en ABREGÚ, M. y COURTIS, C. (Comp.), La aplicación de los tratados de
derechos humanos por los tribunales locales. Editores del Puerto-CELS, Buenos Aires, 1997,
p.163.
trata de establecer restricciones permanentes al ejercicio de los derechos o su suspensión
extraordinaria.
Este principio coincide con el rasgo fundamental del derecho de los derechos
humanos, esto es, estar siempre a favor del hombre.
Significa que no puede considerarse que existen derechos humanos que sean más
importantes que otros sino que deben interpretarse y tomarse en su conjunto y no como
elementos aislados.
A su vez, debe tenerse presente que todos los derechos humanos y las libertades
fundamentales son indivisibles e interdependientes; por lo que se relacionan entre sí y
debe darse igual atención y consideración a la aplicación, promoción y protección de
todos; esto es, complementarse, potenciarse o reforzarse recíprocamente
El trato igualitario que propone este principio puede exceptuarse en caso de que
se trate de situaciones en las cuales exista algún tipo de vulnerabilidad que requiera una
protección especial.
Como cualquier otro derecho, los derechos humanos son relativos, lo cual significa
que son pasibles de una reglamentación razonable. Así, el derecho no se ejerce de
manera absoluta, porque debe permitir su ejercicio por las demás personas.
En este sentido, los derechos humanos son objeto de restricciones legítimas, que
se dan a través de su regulación legal, sin desvirtuar su naturaleza y con miras a su pleno
goce y ejercicio en sociedad.
6
Conforme lo sostiene Pinto , la regulación legal del ejercicio de un derecho implica
la cristalización jurídica de todos los elementos que a nivel normativo y orgánico aseguran
que los sujetos alcanzados por la norma se encuentren en posición legal de ejercer o
disfrutar el derecho humano de que son titulares y al que ella se refiere.
6
Pinto, Mónica, “Temas de derechos humanos”, Editores del Puerto, 2011, 2° edición, 1°
reimpresión, Capítulo IV, páginas 87, 88.
7
nivel en el que actúen . Así, la responsabilidad internacional se establece por actos u
omisiones de cualquier poder u órgano del Estado, independientemente de su jerarquía, al
violar algún tratado internacional y se genera en forma inmediata con el ilícito
internacional atribuido al Estado.
En este punto, corresponde referirse al lugar que ocupan los tratados de derechos
humanos en el sistema jurídico argentino. Al respecto, debe recordarse que a partir de la
reforma constitucional de 1994 ha ocurrido un cambio de paradigma en el sistema de
fuentes de nuestro ordenamiento. Ello por cuanto se han integrado a las normas
constitucionales, las normas convencionales internacionales de derechos humanos, las
que deben colocarse en el mismo lugar que la Constitución Nacional
Este planteo surge del artículo 75 inciso 22 en cuanto especifica una serie de
tratados de derechos humanos a los que les otorga jerarquía constitucional, lo cual
significa , no solo que han de estar en la misma posición que la Carta Magna, sino que,
7
Esto es especialmente relevante para los Estados como el nuestro que tienen una organización
en la que cada estado o provincia que la compone tiene autonomía y, por ende, independiente en
sus decisiones del gobierno central.
además, deben entenderse de modo complementario a ella. A su vez, se deja abierta la
posibilidad de que el Poder Legislativo pueda otorgar jerarquía constitucional a otros
tratados de derechos humanos. Es decir, que la enumeración allí realizada puede
ampliarse, y de hecho así ha ocurrido ya que el Poder Legislativo otorgó jerarquía
constitucional a la Convención sobre la Imprescriptibilidad de los Crímenes de Guerra y de
los Crímenes de Lesa Humanidad, la Convención sobre los Derechos de las Personas
con Discapacidad y la Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de
Personas.
8
Tal como lo resalta García Ramírez , la Corte Interamericana tiene la potestad de
interpretar el PSJCR, lo cual implica la capacidad de definir el sentido y alcance de las
8
García Ramírez, Relación entre la jurisdicción interamericana y los Estados, Anuario
Iberoamericano de Justicia Constitucional, 18, 2014, p. 256, conforme lo cita Pizzolo, Calogero,
Comunidad de intérpretes finales – relación entre tribunales supranacionales constitucionales y
supremos. El diálogo judicial, Editorial Astrea, 1° edición, 2017, p 434
normas correspondientes, no solamente en un litigio concreto y para sus propios fines,
sino también para todas las hipótesis en que venga al caso la aplicación de aquellas. Se
trata así de un doble papel que tiene cualquier resolución del tribunal internacional por un
lado, inter partes en cuanto a los hechos y sus consecuencias inmediatas y directas; y
erga omnes, en cuanto a normas convencionales y su interpretación en todos los casos.
Así, la competencia para ejercer el control de legalidad ya no es una competencia
exclusiva de los jueces nacionales. Ello por cuanto el pluralismo normativo no solo cambia
el paradigma de la legalidad constitucional sino la garantía de su eficacia; eso es, el
control de constitucionalidad. Éste se reconvierte en control de convencionalidad,
trasladando la última palabra en derechos humanos (en tanto materia común de las
9
normas interconectadas) a los organismos internacionales de control .
10
Es en el caso Almonacid Arellano en el que la Corte IDH consagró la doctrina del
control de convencionalidad, desarrollando sus características propias. En dicha
oportunidad especificó que (...) los jueces y tribunales internos están sujetos al imperio de
9
Von Bogdandy, Armin, Del paradigma de la soberanía al paradigma del pluralismo normativo.
Una nueva perspectiva (mirada) de la relación entre el derecho internacional y los ordenamientos
jurídicos nacionales en “Internacionalización del Derecho Constitucional, Constitucionalización del
Derecho Internacional”, Capaldo, Griselda, Sieckmann, Jan y Clérico, Laura (Directores), Parte 1,
pg 143, Editorial Eudeba 1º edición 2012.
10
Corte IDH. Caso “Almonacid Arellano y otros vs Chile”. Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas. Sentencia del 26 de septiembre de 2006. Serie C N° 154. Párrafo 124.
la ley y, por ello, están obligados a aplicar las disposiciones vigentes en el ordenamiento
jurídico. Pero cuando un Estado ha ratificado un tratado internacional como la Convención
Americana, sus jueces, como parte del aparato del Estado, también están sometidos a
ella, lo que les obliga a velar porque los efectos de las disposiciones de la Convención no
se vean mermadas por la aplicación de leyes contrarias a su objeto y fin, y que desde un
inicio carecen de efectos jurídicos. En otras palabras, el Poder Judicial debe ejercer una
especie de “control de convencionalidad” entre las normas jurídicas internas que aplican
en los casos concretos y la Convención Americana sobre Derechos Humanos. En esta
tarea, el Poder Judicial debe tener en cuenta no solamente el tratado, sino también la
interpretación que del mismo ha hecho la Corte Interamericana, intérprete última de la
Convención Americana.
11
Corte IDH. Caso “Boyce y otros vs Barbados”. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 20 de noviembre de 2007. Serie C N° 169 Párrafo 78.