EL DESPERTAR ESPIRITUAL DE LA 

IGLESIA
Texto: Salmo 80:3, 7,19
Introduccion:
La palabra «despertar» implica, por supuesto, que la Iglesia estaba previamente en un
estado de sueño espiritual o sueño y necesitaba ser despertada. Entonces, ¿estamos
experimentando actualmente un despertar espiritual, o estamos en un estado de sueño
espiritual o sueño?
Un despertar espiritual, en lo que respecta al cristianismo, es un período de
tiempo caracterizado por un renacimiento a gran escala, generalizado y el
movimiento sobrenatural del Espíritu de Dios de tal manera que produce un
hambre intensa por Cristo  y el cristianismo.
Típicamente, cientos de personas, si no miles, llegarán a la fe en Cristo durante un
despertar espiritual. Una manera de explicarlo sería  de esta manera:
Durante un renacimiento espiritual, Dios transforma sobrenaturalmente a creyentes y no
creyentes en una iglesia, un lugar, una región, una nación o el mundo a través de un
entusiasmo repentino e intenso por el cristianismo. La gente siente la presencia de Dios
poderosamente; convicción, desesperación, contrición, arrepentimiento y oración vienen
fácilmente; la gente tiene sed de la palabra de Dios; muchas conversiones auténticas se
producen y se renuevan.
El renacimiento y el despertar son, en general, sinónimos. Cuanto mayor sea la geografía
que cubre un renacimiento, mayor será la tendencia a llamarlo un despertar.

“¿A dónde está la Iglesia?  En su mayor parte esta dormida.  Contaminada con los
deseos y el materialismo del mundo, sabe muy poco sobre la disciplina espiritual y de
vivir la vida llena del Espíritu Santo. Se siente complacida, así como está y piensa que lo
tiene todo y que no necesita nada.”  “Una gran parte de la Iglesia se encuentra
espiritualmente impotente, carente de esa relación y caminar íntimo y personal
con Dios.  Habiendo caído en el culto de la comodidad”.
1. ¿QUÉ ES EL DESPERTAR ESPIRITUAL DE LA IGLESIA?
         El Sal. 119 repite más de 15 veces la palabra “vivifícame” y todo el Salmo
presenta la Biblia como el recurso divino para “volver a vivir” “revivir”.  El Sal.
80:3,7,19 repite el texto “Oh Dios, restáuranos, has resplandecer tu rostro sobre
nosotros”.  Hab. 3:2 dice: “Aviva tu obra” e Isaías 60:1 “Levántate y
Resplandece”. Son cinco
palabras: “Avívame, restáuranos, resplandece, aviva y levántate”.
Las cinco palabras asumen un contexto anterior negativo, de decadencia
espiritual, pero también un contexto futuro positivo que es el anhelo de Dios que
se dé un despertar espiritual.  Lo bueno es que de ese adormecimiento espiritual
surge un clamor y es donde Dios actúa, sin embargo, es necesario pagar un
costo elevado.  Ej. Los israelitas clamaron cuando ya no podían en la esclavitud
del Faraón, y muchas veces en el tiempo de los jueces.

En 1904, en Gales, EVAN ROBERTS, un minero de carbón, oró durante 4

años para que Dios le permitiera predicar.   En uno de sus días de oración,
Dios le reveló que 100,000 personas recibirían a Cristo.  Ante la insistencia de
Evan, el pastor de su iglesia le permitió predicar un Miércoles, si es que se
queda alguno para oírte, le dijo el pastor.   17 curiosos se quedaron para
escuchar su mensaje de 4 puntos:
1) deben confesar sus pecados delante de Dios, 2) deben evitar todo hábito
dudoso de su vida, 3) deben obedecer la inspiración del Espíritu Santo, 4)
Deben hacer público su testimonio de Cristo.
La siguiente noche que predicó vino más personas y en los siguientes 30 días,
más de 37,000 personas aceptaron a Cristo. y en 5 meses 100,000 ya habían
recibido a Cristo. Este despertar pasó a Noruega. China, África, India, Corea y
USA.

Así que el despertar espiritual es volver a vivir solo para honrar a Dios, cumplir
su voluntad sobre la tierra (Sal. 80:3,7,19; Ha. 3:1-2; Is. 60:1) y tener una relación
adulta con Dios.

2. ES VOLVERNOS A DIOS (2 CRÓN. 7:14)

¿Qué significa volvernos a Dios y su Palabra?

          a. Es volvernos de nuestros pecados (v.14ª)

Dar un cambio en la forma de pensar sobre la vida cristiana y la relación con
Dios que se tiene.  En este versículo: “es humillarnos delante de Dios confesar
los pecados personales, familiares y del pueblo”.  Darle la espalda a todo
aquello que no agrada a Dios.  Dar este primer paso es determinante para
marcar la diferencia en este mundo en caos y una iglesia en decadencia
espiritual.  “Se convirtieren de sus malos caminos”.
          b. Es dejar los rudimentos (Heb. 5:12-6:1-3)
           En Heb. 5:1-6:3 encontramos la advertencia a dejar los rudimentos que nos
llevan a un letargo espiritual. Primero hace un contraste entre el cristiano que
continúa siendo bebes espirituales “aun necesitan leche” (v.13) y los que ya han
alcanzado madurez espiritual (v.14) “necesitan alimento sólido”. La diferencia
no está solo en el conocimiento de la Biblia sino en
la profundidad, entendimiento y sometimiento y la manera de aplicarla en
determinada circunstancia de modo que honre a Dios, haga justicia al texto y
sea congruente con la identidad cristiana, la vocación de la Iglesia y la misión
de Jesús.
          ¿Qué son los rudimentos? (v.1-3)   Elementos primarios y sencillos de una
doctrina religiosa, de una filosofía, de una ciencia, literatura o sistema.  Otros pasajes
en la Biblia dan otros nombres a los rudimentos.  Gál.4:3,9 y Col. 2:8, 20 dice
que son principios rudimentarios de la religión que esclavizan a la
persona.  Pero, en Heb. 5:12, y 6:1 se refiere a infantilismo espiritual que resulta
de permanecer en los rudimentos que se oponen directamente a Cristo. Por
esta razón, somos advertidos a dejar los rudimentos.
RAZONES por las que debemos dejar los rudimentos. 1) Son de este
mundo (mundanos), terrenales, carnales, y externos.  2) Son pobres e
incapaces de ofrecer algo bueno, 3) Son elementos que se oponen a
Cristo, 4) Son legalismos, y evidencia de inmadurez.   Así que, los rudimentos
ya no deben ser parte de aquellos que profesan ser hijos de Dios.
Por lo anterior, cuando se habla de rudimentos, hay   dos
sentidos. PRIMERO, son los primeros pasos de la vida cristiana, las enseñanzas
necesarias en el proceso hacia la madurez espiritual.  Instrucciones elementales
que confirma la decisión de fe, y crea convicciones profundas en el recién
convertido.
APLICACIÓN:  Es triste y lamentable ver que muchos cristianos se resisten a
avanzar en su relación con Dios. Cuando un cristiano se queda en este nivel de
un niño espiritual, nunca estará preparado agradar a Dios (Ef. 2:10).
El SEGUNDO sentido de los rudimentos es el que más nos interesa, porque son
las cosas que todo cristiano debe abandonar si su anhelo es llegar a ser como
Jesús.  Son los elementos (cosas) paganos, mundanos, carnales, terrenales, y
externos que esclavizan al cristiano hasta convertirlo en fenómenos, enanos
espirituales, infantilismo espiritual.
Uno de los fuertes desafíos del postmodernismo es dejar fuera a Dios y la
Biblia al vivir según su razonamiento sin tomar en cuenta la autoridad de Dios
y la Biblia.  También puedes LIMITAR el accionar divino con tu activismo
eclesiástico, la religiosidad sin santidad, el razonamiento humano sin el
Espíritu Santo, la autosuficiencia bíblica sin humildad, la soberbia por el
almacenaje teológico inmenso que no te deja depender de Dios y la experiencia
histórica en el ministerio que te hace merecedor de puestos, honras y aplausos.
            c. Regresar a los objetivos originales de Dios.
El presente siglo es llamado, el siglo del postmodernismo, liberalismo, y nueva
tolerancia que pretende sacar a Dios y la Biblia de todos los lugares.   Una
Iglesia sin la Palabra perece (1 Sam.1:3; Heb.3:2; Sal. 119:26). Urge regresar a la
Biblia y reconocerla como la voluntad, manual de conducta, y máxima
autoridad de Dios para la Iglesia. Debe ser leída, estudiada, memorizada,
obedecida y compartida (Jn. 5:39; 2 Ti. 3:13-17).

֍ Dios nos ha dejado en la tierra para dar gloria a Dios (Ef. 1:6,12) testificar de
Dios (Hechos 1:8), y ser fieles (1 Co. 4:1-2).

Resumen primera parte:     

Una iglesia o una persona humillada delante de Dios, confiesa sus pecados y se
aparte de estos, cumple los objetivos originales como un estilo de vida; y se
regocija en Dios; es la que que se encamina a experimentar un despertar
espiritual.

La Iglesia ha estado afanada en tantas cosas que ha olvidado alegrarse en Dios y

hacer lo que es importante; estar bien con Dios.   Hacemos todo lo posible por
quedar bien con el vecino, compañero, familia, jefe, cliente; pero poco hacemos
por quedar bien con Dios.
Hoy es el día de comenzar este despertar espiritual; volviéndose a Dios.  Pida
perdón a Dios, agradezca por amarle y prometa ser fiel.

II Parte
¿QUÉ HACER PARA QUE LA IGLESIA DESPIERTE ESPIRITUALMENTE?
           En la primera parte de esta serie, aprendimos que el costo de un
despertar espiritual de una iglesia es volverse a Dios, significa volverse a la
Palabra, a los objetivos originales de la vida cristiana y dejar los rudimentos de
este mundo.
Una segunda parte del costo del despertar espiritual es el cultivar una vida de
oración como un estilo de vida.
3. Es cultivar una vida de oración ( 4:23-30)
Según los expertos en la oración, hay tres clases de personas en la iglesia: 1) Los
que hablan, predican y enseñan sobre la oración, pero no oran, 2) Los que
hablan, predican y enseñan sobre la oración como resultado de su constante
experiencia de una vida de oración. 3) Los que no les gusta hablar ni escuchar
sobre la oración, pues no oran.  Los tres son cristianos con diferentes
resultados.  Lo mismo pasa con las iglesias, se dan los mismos resultados.

La oración debe tener un lugar primordial en la iglesia o el cristiano para ser

fuerte, agradar a Dios, para vencer y para crecer integralmente.

           ¿Por qué cultivar una vida de oración?  Jesús nuestro maestro practicó la
oración; los apóstoles practicaron la oración y tuvieron éxito; los grandes
avivamientos son el resultado de la oración.  La oración es el medio por el cual el
cristiano y la iglesia se despoja de su autosuficiencia para dejar caer su flaqueza en Dios
quien todo lo puede.   La Iglesia necesita de todo, pero de lo que más necesita
practicar es la oración.   Es tiempo que la Iglesia trabaje mano a mano con Dios para
luchar contra el enemigo común que tiene (Ef. 6:12), Satanás y sus demonios.
Habacuc 3:1-3 presenta tres elementos para que la iglesia despierte: oración, la
Palabra y el temor hacia Dios.  Cuando una iglesia invierte su mayor tiempo en
la oración, el estudio de la Palabra y vive bajo el temor de Dios; experimenta un
despertar espiritual.  Requiere esfuerzo, tiempo, disciplina y constancia.
Iglesias que han dado prioridad a la oración. John Mxwell, pastor de la Iglesia
Wesleyana de San Diego California, habla sobre las siete claves del crecimiento,
y en primer lugar esta la oración. Bob Logan, conocido como uno de los más
fuerte líderes, dice que las siete cosas más importantes en la plantación de
Iglesias, la primera es la oración.  En 1990, en el mundo había unas 20 iglesias
con una asistencia semanal mayor de 20,000; 9 de ellas estaban en Korea del
Sur, los pastores de estas afirman que la causa del crecimiento era la oración.
Que la oración es base para el crecimiento no es nuevo, pues la Iglesia Primitiva
según Hechos 4:23-37, 6:4-7 tenían la oración como una de las prioridades o
disciplinas espirituales.   Así que, ¿Cómo debe ser la oración que la iglesia
necesita cultivar?
         a. Una oración dirigida a Dios (Hch. 4:23-30, Sal.25:1-2)
         El contexto de este pasaje, Pedro y Juan están presos por curar a un cojo y
predicar un mensaje de resurrección.   Dios los liberó de la cárcel porque la
Iglesia oraba, y vinieron a ellos y compartieron todo lo que Dios hizo.
 Dirigida al cielo para adorar a Dios (v.24-28) (Sal. 25)

¿Cómo oró la Iglesia v.24-26?

  Dirigida al cielo para rogar a Dios (v.29-30)
No olvidar el contexto sociopolítico que vivía la Iglesia de ese tiempo. La Iglesia
era perseguida por el imperio romano, que quería exterminar a los cristianos. 
Pero la Iglesia oraba dando alabanza a Dios, y con una admirable petición, “que
les diera denuedo (valor, fluidez, soltura y confianza) para predicar el
evangelio (v.29)”, con el riesgo de morir.   
          b. Una oración que espera en la voluntad de Dios (v.31, Sal. 37:4-5, 7ª). 
Cuando se ora de acuerdo con la voluntad de Dios y se concede a Dios el libre
ejercicio de su soberanía, Él responde de inmediato.   ¿Qué pasó cuando
terminaron de orar? La espera por la respuesta requiere saber esperar y mucha fe.
          c.  La oración es muy necesaria para vencer.
La cual debe tener un lugar primordial en el corazón de la Iglesia (Hch.6:4-7).  
Debe ser parte del programa diario de cada cristiano (Sal. 5:1-3, 3:5,4:8). Debe
ser entendido como un recurso divino para crecer (Jn.14:3, Stg. 5:16-18).
Requiere compromiso y disciplina (2 Cro. 7:14, 1 Te. 5:17).
         d. Una oración así garantiza beneficios a la iglesia.
 La oración da fuerza, unifica, poder a la iglesia y al ministerio (Hch. 12:6-
19). 
Esta oración debe ser constante, angustiosa, desvelada y victoriosa. Es el
medio que Dios ha dejado para obtener todas las cosas que deseamos basado en
la voluntad de Dios (Sal. 37:4).  Fue la mayor ocupación ministerial de los
siervos del NT (Hch. 6:24).   La duración, la frecuencia, cantidad de tiempo y la
calidad de la oración depende de la relación con Dios, del sometimiento al
Espíritu y del apego a la Palabra de Dios.
El primer despertar espiritual fue en el primer siglo d.c. (Hch. 1:14-2:1).   De 120
creció a mas de 5,000 cristianos.  El estilo de vida de la iglesia incluía, amor,
oración, Palabra y pasión por las almas sin Cristo.  En este despertar participó:
1) El pueblo de Dios que en santidad y obediencia clamó a Dios. 2) Su base para
hacer esta petición fue la oración. 3) El Espíritu Santo como la fuente del
despertar por voluntad del Padre.
El despertar espiritual de la Iglesia desde el siglo II hasta hoy ha sido en
primera instancia por la oración.  No olvide, la oración debe ser constante,
angustiosa, desvelada, sincera, y victoriosa.  ¿Por qué debe ser así la oración? 
1) El diablo este suelto y resuelto a oponerse al crecimiento (Ef. 6:12).  2) La
oración es el camino más recto para crecer (Sal. 37:4, Stg. 4:2). 3) La oración
ocupó un lugar importante en la vida y ministerio de Jesus (Mr. 1:35). 4) La
Iglesia, no da importancia a la oración como un estilo de vida.
  La oración es el medio para tener respuesta a nuestras peticiones.
(Jeremías 33:3 “Clama a mi…”, Mt. 6:33 “Buscad primero a Dios…”, 7:5-
7 “Pedid y se os dará…”; por último, Juan 15:7 “Pedid todo lo que queráis y os
será hecho.
CONCLUSIÓN
Oremos no para pedir sino para adorar a Dios. Oremos no por obligación sino
por necesidad, no a la fuerza sino con voluntad. Si encaso pedimos en la
oración, pidamos valor y denuedo para conducirnos como hijos de Dios, que el
Espíritu nos controle y que demos a conocer a nuestro Dios.
El reto de hoy es a comenzar una vida de oración, como iglesia y como
cristiano, como matrimonio y como familia. Una oración dirigida a Dios para
adorarle y de espera en la voluntad divina.

Acción: Enseñe y planee actividades de oración.

III Parte
¿QUÉ HACER PARA QUE LA IGLESIA DESPIERTE ESPIRITUALMENTE?
La Iglesia no solo debe volverse a Dios y su Palabra, y cultivar una vida de
oración, sino que debe tener disposición para trabajar en unidad.
4. Tener Disposición para trabajar en Unidad
¿Qué es más importante en una iglesia, que sea trabajadora o que este unida? 
¿Puede trabajar una iglesia que no esta unida? ¿Puede estar unida una iglesia
que no quiere trabajar para el Señor?   Esto nos recuerda el llamado de Dios a
despertar espiritualmente. Pablo en Efesios 5ª:14-17, despertar del sueño,
letargo espiritual para que Cristo alumbre.
Dios no enviará bendiciones a menos que regresemos a él y su Palabra e
iniciemos una vida de oración estando dispuestos a trabajar en unidad.  
Cuando Dios bendice a una iglesia viene acompañada de mucho trabajo
(Neh.2:18-20; Hch.1:12-26; Salmo 133.

   a.   La unidad de la Iglesia es la voluntad de Dios (Neh.2:18-20, Ef. 4:3). ¿Qué

hace posible la unidad en la Iglesia?
        *Guardar en la mente y el corazón las promesas de Dios.
             Dios ha prometido su presencia y su bendición (v.18) “La mano de Dios
había sido sobre nosotros”. La presencia de Dios, y la obediencia de su pueblo
garantizan la unidad y la victoria. Esta presencia la experimentó José, Moisés,
Josué, los discípulos, y se nos prometió a nosotros su Iglesia. “Yo estaré con
vosotros todos los días hasta el fin del mundo” (Mt. 28).
La promesa de bendición constante la encontramos en el v.20), que ya la había
prometido en Génesis 39:2-3 y luego en Josué 1:9 “Los prosperaré” pero con la
condición de obedecer. La presencia de Dios garantiza la bendición.     Dios esta
con y en nosotros; por consiguiente, como pueblo suyo que somos debemos
estar unidos (Ef. 4:3). “Solícitos en guardar la unidad”. Es que cuando hay
unidad, se duplican y multiplican los resultados (Dt. 32:30).

 Practicar todos los días lo que nos une (v.18-20).

          Esto asume, un olvido de todo lo que nos separa y un fortalecimiento de
todo lo que nos une.  Lo primero a practicar es la disposición por obedecer a
Dios y su Palabra (v.18ª).  Compare esto con Neh. 8:1-3, donde el mismo pueblo
oyó la Palabra de Dios durante 6 horas, y la escucharon con atención estando
todo el pueblo unido.
La segundo que se ha de practicar es la disposición por trabajar en unidad
(v.18b).  “Levantémonos y edifiquemos”. La división solo favorece los planes
del diablo y debilita la fuerza de la iglesia.  No olvide, en la unidad se
multiplica la fuerza (Dt.32:30; Ge. 7:25; Ecle. 4:9-12; Lc. 14:31).   Además, la
unidad viene acompañada de un buen ambiente, alegría, comunicación, espíritu
positivo, sacrificio y disposición por servir.   Y en ese ambiente, Dios envía
bendición y vida eterna (Salmo 133).

          b. La unidad contribuye a mantener la perseverancia y la visión de la

Iglesia (Hechos 1:12-21).
           Este pasaje resalta tres elementos: unidad, perseverancia y una clara
visión. Los cristianos “perseveraban unidos en oración” porque esperaban la
promesa.  No puede haber perseverancia si no hay unidad y no puede haber
oración sin unidad. Lea v. 13,14,21,24, ¿Qué frases son similares? “Moraban en
un solo lugar” “Perseveraban unánimes” “han estado juntos”.  Se necesita ser
de un mismo sentir, propósito, meta, lenguaje para poder perseverar juntos y en
armonía”.
Durante 3 años y medio, los discípulos estuvieron juntos y en armonía con
Jesús. Esto no significa que no tuvieron desacuerdos, discusiones, problemas,
pues la unidad capacita para resolver y ponerse de acuerdo y seguir la unidad. 
Requiere humildad, media hermana de la unidad según René Padilla. La
unidad es embellecida por la humildad, el amor y la entrega. Para orar en
unidad, debe desaparecer el orgullo, egoísmo, diferencias, complejos y debe
fomentarse el amor, humildad, respeto, mansedumbre, paz, compresión y
compasión.

Conclusión
¿Qué hacer para que la Iglesia despierte espiritualmente y detenga la
avalancha postmoderna?
          La Iglesia necesita regresar a Dios y su Palabra, cultivar una vida de
oración, tener disposición para trabajar en obediencia, santidad y unidad.
¿Por qué la Iglesia como Cuerpo de Cristo necesita estar unidad como un solo
hombre?
1. Porque la Iglesia como Cuerpo de Cristo vive una constante lucha
espiritual que no puede ser defendía aisladamente o si se está separado.
2. Por qué, en unidad, la lucha y la carga se vuelve ligera o liviana, y se
puede ganar en unidad.
3. Porque en la unidad, se aprovecha las habilidades, virtudes y los
recursos de los demás. Esto duplica las fuerzas y el fruto (Dt. 32:30).
4. La Iglesia es un solo cuerpo que funciona en unidad y no en
paradigmas (Ef. 4:15-16; 1 Co 12:12-13).