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¡“Cubito Maggi” no
contiene carne!
Es así que, una publicidad se convertirá en engañosa o falsa cuando incita al consumidor a
error, ya sea mostrando u omitiendo información relevante. A menudo, tiene que ver con el
componente principal del producto o servicio. Es por ello que los diversos factores que se
pueden tomar en cuenta a la hora de evaluar aquello que se publicita como engañoso, será
sobre su procedencia o su naturaleza, el modo de su fabricación o distribución, las
características y la calidad del producto, así como cuestiones de cantidad y sus componentes.
Ahora bien, ¿qué sucedió con Nestlé y por qué Indecopi los sancionó por publicidad
engañosa? Resulta que la empresa ha venido publicitando a “Cubito Maggi” como un
producto que contiene carne deshidratada cuando en ninguna parte de su lista de
ingredientes tiene este alimento como componente principal, siendo que las imágenes que
acompañan al saborizante de caldos, tales como los trozos de carne y la figura caricaturizada
del bovino no guardan relación con el producto, haciendo que los consumidores piensen que
realmente si contiene carne y, en consecuencia, incurran en una publicidad engañosa.
Casos similares como los que viene desarrollando la Comisión dan cuenta sobre la ardua
labor que implica fiscalizar a cada uno de los operadores económicos y su actividad en el
mercado. Por ello, resaltamos su compromiso en reorientar la competencia y las fallas del
mercado, haciendo que los competidores desarrollen prácticas leales y sancionando a
aquellos que incitan al error a los consumidores.