Explicando el suicidio a niños y adolescentes1

Es difícil informar cualquier tipo de malas noticias a los niños y adolescentes, pero cuando es algo
tan doloroso como el suicidio se hace aún más complicado.

Las siguientes ideas y sugerencias se relacionan específicamente con el suicidio.

Esperamos que nuestros niños nunca tengan que vivir eventos trágicos, pero si una tragedia ocurre,
ellos podrán superar la experiencia de forma más saludable si se les habla con la verdad y se les
incluye en el proceso de duelo familiar, incluidos los servicios funerarios y /o eventos
conmemorativos.

Los adultos con frecuencia quieren proteger a los más jóvenes de escuchar verdades complicadas,
pero mentir para “protegerlos” - evitando la verdad o dando verdades a medias – a menudo tiene
consecuencias perjudiciales. Los niños y adolescentes podrían enterarse por otra persona y recibir
una versión deformada o poco útil de los hechos. La confianza en ti puede dañarse junto con la
credibilidad a futuro. Peor aún, podrían sentir que deben “honrar la mentira”, evitando cualquier
pregunta, pensamiento o sentimiento que puedan tener sobre el suicidio, impidiéndoles lidiar con
su realidad de forma saludable.

El dolor no reconocido y no resuelto a menudo tiene efectos negativos a largo plazo en la vida de
las personas y en sus relaciones interpersonales.

Cuando no obtuve respuestas a mis preguntas yo traté de contestarlas por mí

mismo, de manera equivocada y atemorizante. Otros niños también me contaban
cosas, las cuales eran verdades a medias. Terminé con un desastre en mi interior
por mucho tiempo, temeroso de muchas cosas e incapaz de confiar en mi padre.
No me dijeron la verdad durante diez años. De habérmelo dicho de forma
apropiada en su momento, me habría ahorrado años de confusión y miedo.

La edad y etapa de desarrollo de los niños y adolescentes, su personalidad y qué tan cercanos eran
a la persona fallecida son consideraciones clave a tomar en cuenta cuando hablemos con ellos.

ELEMENTOS CLAVE A TENER EN CUENTA

 Comunícalo a todos tus niños, incluso a los más jóvenes.

 Se breve y simple, no expliques en exceso.
 Maneja la verdad y la consistencia. Podría ser difícil decirlo, pero hazlo. Brinda información
correcta de manera amorosa, directa y empática.
 Utiliza el sentido común: evita detalles innecesarios.

1
Traducción y adaptación por la Mtra. Psic. Blanca Adelina Nava López y la Mtra. Psic. Erandi Basurto
Soriano, del texto original: Explaining suicide to the children and young people. Tomado de la página
https://www.skylight.org.nz/resources/death-and-dying/suicide/explaining-suicide-to-children-
and-young-people. Se realiza esta traducción sin fines de lucro. México, febrero del 2020.

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  Usa palabras y frases que ellos conozcan. No uses términos como dormido o de viaje, para
referirte a la muerte. Los niños pueden entender estas palabras literalmente y confundirse
sobre lo que realmente ha ocurrido.
 Ten en cuenta el shock emocional. Repite la información clave posteriormente y verifica que
estás siendo comprendido.
 Considera que puede haber diferentes reacciones y que pueden ser difíciles de acompañar,
permite al niño o adolescente procesar lo que ha sucedido.
 Las reacciones pueden variar, desde angustia aguda hasta aislamiento e incluso aparente
desinterés. Se comprensivo. Muchos niños y adolescentes experimentan reacciones tardías
que pueden desencadenarse por cosas simples. Intenta no sobrerreaccionar a sus
respuestas.
 Anímalos a hablar acerca de ello y a hacer preguntas cuando lo necesiten. Y si lo hacen
preste mucha atención.
 Espera a que procesen lo que ha ocurrido por un periodo considerable. A medida que ellos
crecen y maduran, es probable que comprendan lo sucedido de nuevas maneras. Es posible
que quieran hacer preguntas días, semanas e incluso años después.
 Cálmalo y tranquilízalo.

Al recordar mi infancia me doy cuenta que en ese periodo de tanta tristeza hay muchas
cosas que no me dijeron.

ALGUNAS RESPUESTAS SUGERIDAS PARA CUANDO LOS NIÑOS PREGUNTAN ¿QUÉ ES EL

SUICIDIO?

 El suicidio es cuando una persona está tan enferma y tan triste que decide hacer que su
cuerpo deje de funcionar.
 Tenía una enfermedad muy grave en el cerebro que lo hizo sentir muy confundido y triste,
por lo que ya no quería vivir más.
 Las personas mueren de muchas maneras. Puede ser por enfermedad o en un accidente
grave, o porque se llega a la vejez y el cuerpo deja de funcionar. El suicidio significa que
alguien enfermó tanto que hizo que su propio cuerpo dejara de funcionar a propósito.
 Los cerebros pueden enfermarse, al igual que otras partes importantes de nuestro cuerpo,
como nuestro corazón, nuestros pulmones o el hígado. Su cerebro enfermó mucho con una
enfermedad llamada depresión. Esta enfermedad empeoró tanto que confundía la manera
en que pensaba y sentía, e hizo que hiciera algo que haría morir a su cuerpo. (Aunque la
mayoría de las personas con depresión mejoran).
 Cuando alguien tiene una enfermedad llamada depresión, puede suceder que su cerebro se
confunda tanto que se sienta muy mal y no pueda pensar con claridad. Algunas personas se
enferman tanto que no logran pensar en una manera sana de detener el dolor que sienten.
Ni siquiera se dan cuenta de que pueden tener ayuda para sentirse mejor de nuevo y para
detener el dolor se hacen morir a propósito. Eso es el suicidio.
 Cuando alguien muere por suicidio, elige terminar con su vida porque piensa que vivir es
demasiado difícil para él o ella. No sabe cómo obtener ayuda o decide no buscarla. No es

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 una elección acertada porque pueden obtener ayuda para no tener que seguir sintiendo
tanto dolor todo el tiempo.
 La única persona que realmente sabía por qué ocurrió esto es XX. Hay muchas cosas que no
sabemos. Pero sí sabemos que XX nos amaba, y nosotros amamos a XX. Él / ella siempre
será importante en nuestras vidas y siempre podemos recordar muchos de los buenos
momentos que pasamos juntos.
 Papá tuvo algo así como un ataque al corazón, excepto que fue un “ataque cerebral”. Su
cerebro se puso muy enfermo y no pudo pensar correctamente. Hizo que su cuerpo dejara
de funcionar debido a que se sentía abrumado por el dolor en su cerebro.

Al igual que los adultos, es probable que los jóvenes se sientan desconsolados por el suicidio y
presenten variedad de pensamientos, sentimientos y reacciones. Hazles saber que esto es normal
y está bien. Déjales encontrar formas de expresarse, pero prepárate también para permitirles
reservarse si eso les es útil. Cada persona responde distinto ante la pérdida, sea cual sea su edad.
Nunca les digas cómo deberían sentirse o pensar, ni los desanimes de expresar las emociones que
les sean difíciles. Estos son una parte natural del proceso de duelo, aunque sea difícil de ver y
escuchar.

Al estar afligidos por el suicidio, los niños y adolescentes pueden sentir y pensar:

 Que lo ocurrido pudo ser su culpa - por algo que ellos hicieron, o no hicieron o algo que
dijeron.
 Que son responsables porque hicieron algo malo para la persona, pensaron algo acerca de
ella, o incluso llegaron a desear que muriera o se fuera lejos.
 Rechazados o abandonados.
 Temerosos- ¿Ellos mismos o algunos otros también morirán? ¿Quién los cuidará ahora?
 Negación- Se niegan a creer lo que ocurrió.
 Incapacidad para asimilarlo o sentir algo.
 Tristeza- Intenso dolor emocional
 Avergonzado, apenado, incomodo - de que otros sepan.
 Confundido.
 Enojado- Furioso con la persona y con otros que quizá él quiera culpar, como Dios, o todos.
 Muy solo.
 Abrumado- Esperando que todo esto se detenga.
 Alivio- Si ya se habían experimentado otros intentos u amenazas.

ASÍ QUE, ¿QUÉ ES LO MÁS IMPORTANTE QUE ELLOS DEBEN SABER?

 Tú eres amado- y serás cuidado y apoyado.

 Tú estás a salvo
 Esto no es para nada tu culpa- Nada de lo que hiciste o no hiciste, dijiste o no causó esto.
(Este mensaje debe repetirse una y otra vez)
 Está bien hablar de ella o él, conmigo, con nosotros y hacer preguntas.

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  No siempre te sentirás de la manera en que te sientes ahora. Las cosas mejorarán, y cada
día serán un poco menos dolorosas. (Ellos necesitan tener sentido de la esperanza).
 Sientes pena y tristeza porque amabas a XX, o te importaba XX. Cada quien es distinto por
eso, todos tenemos diferente manera de expresar el dolor. No hay reglas o maneras
correctas o incorrectas de sentir o pensar después de que alguien muere. Tú puedes hacerlo
a tu manera.
 XX no fue una mala persona. XX fue una persona muy enferma que no pudo tomar una
buena decisión.
 No todas las personas que se sienten tristes o enferman de depresión morirán por suicidio.
Hay médicos y otras personas que los pueden ayudar, y la mayoría de las personas se
recuperan y reciben ayuda para manejar sus emociones intensas y sus pensamientos. El
suicidio no es común.

¿Y QUÉ MÁS ES IMPORTANTE?

 Tanto como sea posible, mantén las rutinas normales- esto les da sensación de seguridad.
 Ten en cuenta que muchos niños y adolescentes desconsolados por el suicidio son muy
sensibles a ser abandonados, y pueden ser más apegados a ti, ser más temerosos, más
llorosos, menos confiados, etc. Sé paciente con la ansiedad de separación y junto con otros
adultos de confianza planifiquen un buen cuidado.
 Evita hablar negativamente de la persona que murió, sin importar que tan enojado te
puedas estar sintiendo.
 Los niños quizá no comprendan que la muerte es permanente y piensen que pueden ir a
visitar a la persona que murió. Enséñales sobre la muerte. Puedes emplear algunos libros
que expliquen la muerte de manera clara, realista y como parte de la vida.
 Es útil hacerles saber que algunas personas pueden querer decirles cosas negativas sobre lo
que pasó. Ayúdales a lidiar con esos comentarios planeando sólo ignorarlos, pidiendo ayuda
a algún adulto inmediatamente o aconsejándolos sobre qué responder como: “Ella estaba
muy enferma y muy triste. No quiero que me hables mal acerca de ella. Eso no está bien”.
 Hazles saber que ellos siempre pueden decidir cuánta información compartir con otras
personas. Es útil saber qué decir, por ejemplo: “Mi mamá enfermó mucho y murió
repentinamente”. Esto es una decisión personal. Hazles saber que ellos no tienen obligación
de compartir más detalles y pueden detener las conversaciones si se sienten incómodos,
diciendo, por ejemplo: “Gracias, pero ya no quiero hablar sobre estos”.
 Enseña que está bien hablar frecuentemente con amigos cercanos o familiares acerca de la
persona que murió. No evites decir su nombre. Menciónala en los eventos familiares. Esto
les ayuda a disfrutar de un vínculo continuo con ellos sin ningún tipo de vergüenza o
estigma.
 Muéstrales mucha atención. Diles cuánto los amas. Elógialos y aliéntalos.
 Mantente en contacto con ellos- cómo están y qué están haciendo. Sin que esta cercanía
sea muy intensa. Posiblemente puedan tener una conversación casual mientras caminan o
conduce, o hacen alguna actividad juntos. Mantén la puerta abierta para ellos.
 Recuerda que el suicidio ocurre cuando el dolor emocional y mental de una persona se
vuelve mucho mayor que su capacidad para hacerle frente. En lugar de hacer juicios de valor
sobre el suicidio, es mejor hablar con los niños y adolescentes acerca de maneras positivas

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 de ayudarlos si se sienten abrumados por las cosas, este es un acercamiento constructivo y
podría llegar a salvar su vida. Les da las herramientas que los empoderan para afrontar los
momentos en los que se sientan incapaces de afrontar lo que esté ocurriendo.
 Si el niño o el adolescente está muy triste y deprimido, y no mejora en varias semanas,
consiga ayuda profesional. Ve a un psicoanalista de niños, psicoterapeuta infantil o
paidopsiquiatra. En casos extremos, no dude en llamar a servicios de emergencia para
apoyo y asistencia.

PARA MÁS INFORMACIÓN Y OTROS RECURSOS

En México hay líneas de asistencia psicológica de emergencia vía telefónica:

1) Línea de ayuda Origen. Brinda asesoría psicológica, legal y médica de manera gratuita y
confidencial.
Atienden de lunes a domingo de 8 am a 10 pm. Tel: 800 015 16 17 o por WhatsApp 55 73
34 85 56 y al correo lineadeayudaorigen@origenac.org

2) LOCATEL. Servicio las 24 hrs los 365 días del año. 51 32 09 09 / 56 58 11 11. Derivan a
programas de salud mental.

3) UNAM. Call Center UNAM (Facultad de Psicología). Lunes a viernes de 8 am a 6 pm. 50

25 08 55.

4) SAPTEL (Sistema Nacional de Apoyo, Consejo Psicológico e Intervención en Crisis por

teléfono). Cruz Roja Mexicana. Trabaja las 24 hrs en servicio gratuito. Tel: (55) 52 59 81 21.

5) UAM. Atención martes y jueves de 9 a 1 pm. Tel: 58 04 64 44

http://www.lineauam.uam.mx/index.htm

Cuentos infantiles sobre el tema de la muerte (disponibles en México):

 S/A (2017). Globos para Federico. Barcelona: Salvat.

 Erlbruch, W. (2007). El pato y la muerte. México: Colofon. Trad. Moka Seco
 Staake, B. (2013). Pájaro azul. México: Océano.
 Verduzco, M. A. (2015). ¿Por qué ya no está? México: Trillas. Recomendado de 6 a 9 años.

*Visite la página www.skylight.org.nz o llame al 0800 299 100 para obtener el último folleto de la
página, el cual ofrece una amplia gama de excelentes libros sobre el apoyo a niños y adolescentes
después de un duelo, incluidos estos recursos de apoyo al suicidio (la información está en inglés y
el contacto es de Nueva Zelanda, mantenemos el recurso por ser de la fuente original).

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