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EL SISTEMA EDUCATIVO DE COREA DEL SUR

Práctica 2

Diego Fernández Gutiérrez


Andrea Gutiérrez Estrada
Rubén Fernández Mastache
Julia Gutiérrez de Soto

Educación Comparada - PA 2
INDICE

1. Factores endógenos y exógenos del sistema educativo coreano ......................................... 2

2. Comparación con el sistema educativo español ................................................................... 4

3. Conclusiones.......................................................................................................................... 7

Referencias .................................................................................................................................... 8
1. Factores endógenos y exógenos del sistema educativo coreano

En este informe trataremos de acercarnos al sistema educativo de Corea del Sur en base al
visionado de un documental, realizando una reflexión sobre el mismo, así como una
comparación con nuestro sistema educativo español. Por otro lado, analizaremos los factores
endógenos y exógenos propuestos por el autor Schneider influyentes en el sistema educativo
coreano.

Basándonos en los apuntes de la asignatura, Schneider analiza de manera profunda diez factores
que influyen en la educación de los pueblos, estos factores los divide en dos grupos; factores
endógenos y factores exógenos, los cuales se complementan unos a otros e impulsan a los
sistemas educativos a desarrollarse de determinada manera. Para analizar la educación en Corea
del Sur es necesario analizar todas estas posibles influencias independientemente del carácter
de la educación. En cuanto a los factores exógenos, estos hacen referencia al espacio geográfico,
la economía, la cultura, la estructura social y política o la historia del país. Así, tras realizar el
visionado del documental “Educación en Corea del Sur”, es importante destacar que Corea del
Sur es la cuarta potencia de Asia y la décimo quinta del mundo. Tras la guerra de Corea, Corea
del Sur consiguió resurgir su economía gracias a la ayuda del sistema educativo, lo cual
consideramos un factor exógeno muy influyente en la concepción que el país tiene sobre la
educación, como motor del desarrollo y clave para el funcionamiento de la economía. Para salir
de la miseria tras la guerra, Corea apostó por la industria y la tecnología, así como por la
educación como hemos dicho, creando más de 40.000 escuelas. Encontramos también dentro
de los factores exógenos peculiaridades de carácter nacional como son su propio idioma, escrito
y hablado únicamente por personas procedentes de Corea del Sur hacen que se cree una barrera
de entrada y salida de información en el país. Además, debido a la voluntad de una rápida
equiparación con los países más desarrollados tuvieron que importar conocimiento de estos
(principalmente EEUU y Japón), inventando vocabulario para adaptarse lo más rápidamente
posible a los sistemas educativos de estos países.

Su sistema educativo está entre los mejores del mundo, teniendo a los estudiantes mejor
preparados, pero al mismo tiempo a los más infelices. Esto sucede debido a la presión a la que
se ven sometidos los estudiantes por parte de una sociedad extremadamente competitiva,
donde lo más importante es conseguir las mejores calificaciones. Así, la autoestima de los
adolescentes es muy baja debido a la obsesión y el deseo de ser siempre los mejores, lo que
conduce a que siempre estén insatisfechos consigo mismos, porque nunca creen que su esfuerzo
sea suficiente. Por ello, Corea del Sur tiene la tasa de suicidio más alta entre su ciudadanía, y un
porcentaje muy alto es de adolescentes, los cuales como ya decimos se ven sobrepasados por
el estrés y la exigencia educativa y social. El objetivo de todo esto es escoger una buena
universidad y adquirir ese prestigio social que se espera de los estudiantes. En cuanto a este
hecho podemos clasificarlo como un factor endógeno relacionado con la necesidad y la libertad,
es decir, estamos ante un sistema educativo que relaciona el nivel de las notas obtenidas con el
éxito personal y el éxito futuro, lo cual genera una situación de necesidad en los estudiantes,
muchas veces en contra de su voluntad y libertad individual.

La estructura social de este país es un factor a destacar, ya que determina totalmente la


necesidad del individuo, el cual depende del bienestar familiar y no de su propio bienestar
individual. Cuidas a tu familia no por ti, sino para honrarlos a todos; trabajas no por tu salario,
sino para que la empresa y tu país crezcan; y estudias para ser un individuo apto que
enorgullezca a tus padres y a tu país. Es aquí donde podemos ver reflejado otro factor endógeno,
el individuo frente a la moral colectiva y grupal. Por ejemplo, vemos en el documental el caso
de Clara, una alumna a la cual le exigían en Corea aprender determinadas cosas en contra de sus
deseos. Sin embargo, tras mudarse a Bolivia con sus padres, donde existe un sistema educativo
más relajado, Clara pudo estudiar música, que era lo que le interesaba realmente y para lo que
de verdad tenía vocación. Aquí vemos ese factor endógeno del país que enfrenta la libertad del
individuo frente a la moral colectiva, la cual impone sus reglas sin tomar en consideración la
individualidad de cada uno.

Tras la guerra contra Corea del Norte, el gobierno impulsó la educación como motor económico
(factor exógeno) y lo ha convertido en el principal pilar de su desarrollo. Hoy en día, la economía
ha sido salvada con éxito, pero es cierto que los estudiantes de la actualidad han desarrollado
un nivel de competitividad muy alto. Saben que en las tres únicas universidades que les van a
ofrecer un buen puesto laboral no hay sitio para todos, por lo que la exigencia es muy elevada,
al no querer defraudar a sus familiares tras los grandes esfuerzos que estos hacen para que
logren conseguir su puesto. La enseñanza general, como vemos, está estrechamente vinculada
a la enseñanza profesional (factor endógeno) aunque no abarca a toda la población del país al
no haber plaza para todos y cada uno de ellos. Es una situación que explica los altos niveles de
estrés y depresión en los adolescentes del país, situación que no todos pueden soportar. Por
otro lado, se puede ver que muchos estudiantes coreanos estudian con vocación, por lo que no
poder acceder a esos estudios es también un motivo de hundimiento personal y moral.
Por último, en cuanto a factores endógenos propuestos por Schneider encontramos el problema
del bullying en este país, el cual se encuentra muy presente en el colegio y el cual en numerosas
ocasiones deriva desgraciadamente en suicidio. La decisión de suicidio es causada por la presión
a la que están sometidas las víctimas para soportar la situación, al mismo tiempo que lidian con
la presión de sacar buenas notas. Debido a la extrema competitividad, los alumnos coreanos
piensan que hay que empujar a los compañeros para salir adelante, así, los agresores en la
mayoría de casos son chicos frustrados por una sociedad que les exige demasiado, y en cierta
medida también son “víctimas” de ese estado social obsesionado con la perfección. Por ello,
como solución (factor exógeno problema/solución), el gobierno se ha visto obligado a intervenir
con la creación de un cuerpo de policía en los colegios con el fin de prevenir estas situaciones
de bullying, interviniendo tanto con las víctimas como con los agresores. En definitiva, vemos
cómo el gobierno coreano comienza a ser consciente de la necesidad de rebajar esa presión
escolar y mirar más por el bienestar personal de los estudiantes.

2. Comparación con el sistema educativo español

Una vez analizado el sistema educativo coreano, podemos decir que, este presenta diferencias
considerables con nuestro sistema educativo español al mismo tiempo que ciertas similitudes.
Principalmente es relevante destacar y es sabido por todos que el sistema educativo coreano
presenta mejores resultados que el sistema educativo español. Partiendo de estos resultados
nos tendríamos que plantear por qué se da esta diferencia tan grande.

Como principal diferencia vemos que el sistema coreano parte de una sociedad que basa sus
principios en valores como la excelencia académica, la lealtad familiar, la ética de trabajo, el
valor de las tradiciones, el honrar a los ancestros, así como una obediencia incondicional a los
superiores y un sistema muy autoritario, no tanto como lo es el sistema español. Así, Corea del
Sur es una sociedad basada en la meritocracia y en la excelencia, todas las etapas educativas se
encaminan hacia la obtención del certificado para acceder a la universidad. Esta concepción de
la educación es diferente en España, donde, aunque también se tiende a vincular la educación
con el éxito social y laboral, no se centra exclusivamente en ello, también se considera a la
educación como una herramienta para educar a personas, teniendo en cuenta su desarrollo
personal integral, considerando las inquietudes individuales de cada uno, y proporcionando
oportunidades y margen de elección individual, aun en un marco educativo común.
En cuanto al horario de la jornada escolar, en el sistema educativo coreano la jornada comienza
a las 8:00 de la mañana y termina a las 17:00 de la tarde, donde disponen de quince minutos
para cenar en el centro educativo, para después seguir en las academias estudiando hasta las
22:00 de la noche. Vemos como las jornadas son agotadoras, sin apenas ningún descanso diario
ni tiempo para dormir (apenas duermen cinco horas), a diferencia del sistema educativo
español, donde existe una jornada escolar de cinco horas y media diarias de 9:00 a 14:30, con
tiempo suficiente para comer y descansar. En un gran número de casos los alumnos en España
asisten a clases particulares por la tarde o actividades extraescolares, pero no por imposición
social, sino por necesidad excepcional de refuerzo académico y propia iniciativa de los padres o
alumnos. Vemos como nuestro sistema educativo no tiene un horario tan asfixiante como el de
Corea del Sur, en el cual se considera a los estudiantes como “máquinas” que existen por y para
estudiar y rendir por encima de su salud mental.

En cuanto a la estructura del sistema educativo coreano, distinguimos cuatro grandes etapas
aprobadas por la Ley de Educación Básica de 1949:

❖ Una educación elemental gratuita de seis años de duración donde la edad de ingreso es
desde los 7 años, un año más tarde que en nuestro sistema.
❖ Una educación Secundaria inferior no obligatoria, siendo de tres años de duración.
❖ Una educación secundaria superior de tres años.
❖ Cuatro años de estudios universitarios.

Como vemos, en España la estructura difiere bastante de la coreana. El sistema educativo


español se estructura en dos grandes etapas gratuitas;

❖ Educación Primaria, siendo de seis años de duración.


❖ Educación Secundaria Obligatoria, siendo de cuatro años de duración.

Una vez finalizada esta última etapa existen dos caminos diferentes, por un lado, el acceso a
Bachillerato, o bien, el acceso a un ciclo de Formación Profesional de grado Medio. Una vez
finalizada cualquiera de estas dos etapas, se puede acceder a un ciclo de Formación Profesional
de grado Superior o mediante una prueba de acceso a la Universidad. Es importante destacar
que el alumnado coreano tiene que realizar un examen para cada cambio de etapa. Por el
contrario, en nuestro caso este no es requisito indispensable en cada etapa, salvo en el caso de
la transición entre Bachillerato y la Universidad con la EBAU.
Respecto a la figura del docente, esta es una profesión muy reconocida y con un gran estatus
dentro del sistema de Corea, se espera que estos posean un nivel más elevado de moral que el
resto de los ciudadanos y deben demostrarla a través de sus acciones. Existe un consenso social
por el cual los comportamientos inmorales e incorrectos de los docentes deberían estar
regulados más estrictamente que en otras profesiones, a diferencia del sistema español, donde
consideramos que la profesión del docente no está tan controlada ni “regulada” como en Corea.

Dentro del sistema de Corea encontramos una metodología vertical, es decir, existe una relación
de autoridad y jerarquía claramente marcada entre docente y alumno, basada en el respeto
hacia el docente, sin ninguna intención por parte del docente de considerar las necesidades del
alumno. A diferencia del sistema educativo español, donde encontramos una metodología más
horizontal, en la cual se da una relación de tú a tú entre docente y alumno, estableciéndose una
relación de igualdad y de comprensión hacia el alumno, considerándolo como una persona, y no
como un mero “caso”. Así, vemos como en Corea predomina una metodología rígida, marcada
por el adoctrinamiento. En España, aunque puede haber ciertos rasgos comunes, la tónica
general no sigue una metodología tan rígida o estricta, lo cual quizás sea la causa de las peores
estadísticas en cuanto a resultados académicos, pero, por otro lado, también se traduce en una
mayor felicidad y bienestar de los estudiantes.

Debido a la ética confuciana presente en la sociedad coreana, el sistema educativo en Corea


hace énfasis en las asignaturas de letras e historia despreciando la enseñanza práctica de
matemáticas y las ciencias, lo que provoca la “no modernización”. A diferencia del sistema
educativo español, el cual abarca e incluye en el currículum todas o casi todas las disciplinas
educativas.

Por otra parte, destaca como unidad de comparación el sentido que cada país otorga a la
educación. Es decir, el sistema coreano concibe a la educación como motor del desarrollo y clave
para el funcionamiento de la economía del país. Así, los alumnos estudian no por su desarrollo
y bienestar personal, sino para honrar a su país y procurar su crecimiento. Sin embargo, el
sistema español tiene una visión en la que no se centra exclusivamente en los resultados,
también tiene en consideración el proceso. Aquí se concibe la educación no solo como un
elemento económico, sino también como una herramienta para formar personas maduras,
independientes, y felices.
Por último, destaca el elemento de la competitividad. Corea es un sistema marcado claramente
por la necesidad de pisar a los demás sin ninguna consideración, con tal de llegar a esa
excelencia. Podemos encontrar cierta similitud en el sistema educativo español, donde los
exámenes generan esa ansiedad y estrés en los estudiantes, pero quizás no de manera tan
marcada como en Corea, donde como vimos en el documental, denominan esta etapa como el
“infierno de exámenes”. Esta competitividad, como hemos visto degenera en numerosas
situaciones de bullying, el cual es un elemento muy presente en el ámbito escolar dentro de
Corea, al mismo tiempo que en el sistema español donde también existe bullying aunque en
menor medida que en Corea del Sur.

3. Conclusiones

Como conclusión general del sistema educativo coreano podemos decir que existe una
predominancia de la excelencia y la honra al país, antes que del bienestar e individualidad de los
propios estudiantes. Por ende, no les importa cuantos pueden acceder a los estudios superiores
sino cuán preparados estén aquellos que lo consiguen.

Según Seyeoung Chun en la conferencia sobre el sistema educativo coreano, la preocupación


por la educación en Corea es relativamente reciente. El nivel de estrés al que están sometidos
los alumnos, visto como mal necesario por la sociedad coreana, se ejemplifica en el aumento de
notas de corte para acceder a las diferentes etapas, que fue en aumento desde los años 70,
generando aún más estrés entre los estudiantes.

También nos parece relevante los comentarios realizados por Chun sobre la financiación
educativa en Corea del Sur. Partiendo de la base de que sólo la primera etapa es gratuita, esta
recae especialmente en el sector privado, la industria y los padres, siendo estos últimos los más
afectados porque muchos de ellos no son capaces de afrontar tales cargos económicos. Dentro
de los centros, la financiación no corre a cargo del Estado, sino que es el propio equipo directivo
el que tiene que buscarla. Otro de los problemas que dejó entrever Seyeoung Chun es la falta
de recursos, lo cual considera que se debe a las aulas masificadas siendo un factor influyente en
esta falta de recursos y a lo que el gobierno coreano debe hacer frente.
Hemos visto como el sistema coreano bebe de una serie de factores exógenos y endógenos que
condicionan su desarrollo, marcado claramente por una concepción rígida y pragmática de lo
que es la educación, concibiéndola como medio para salvaguardar el prestigio del país, de la
familia y del propio estatus social del estudiante. Así, el sistema educativo coreano se centra
básicamente en los resultados que se deben de obtener, y no tanto en el proceso o el factor
humano que existe de por medio.

En definitiva, podemos decir que el sistema educativo coreano es notoriamente diferente al


sistema educativo español en cuanto a su concepción de la educación. Podemos resumirlo en
que el sistema educativo coreano pone el foco de atención en los beneficios del propio país,
mientras que el sistema español pone el foco de atención y apuesta por una educación integral
de las personas, buscando quizás un mayor equilibrio entre éxito académico y bienestar
personal.

REFERENCIAS

Ee-gyeong K. (2006). Políticas públicas orientadas a atraer y a seleccionar graduados


competentes para la profesión docente: el caso de Corea del Sur. Revista de
Educación. 240, 141-164. Recuperado de
https://www.campusvirtual.uniovi.es/pluginfile.php/249245/mod_resource/content/1
/PROFEOSORES%20COREA%20DEL%20SUR.pdf

García M. (2011). ¿Cuáles son las razones subyacentes al éxito educativo de Corea del Sur?.
Revista española de educación comparada. 18, 203-225. Recuperado de
https://www.campusvirtual.uniovi.es/pluginfile.php/249244/mod_resource/content/1
/exito%20corea%20sur.pdf

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