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LA ALTA EDAD MEDIA, ISLAM EN EXPANSIÓN.

ORÍGENES Y CARACTERES DEL ISLAM.


o Los orígenes de la religión islámica se remontan a la figura de Mahoma o Mohamed para sus fieles, Profeta de
Alá o de Dios, nacido en la Meca, Arabia, al parecer entre el 569 y 571 d.C.

o En 610 Mahoma declara haber tenido una aparición del arcángel san Gabriel, anunciándole que él era el “Profeta
de Dios”. Al comienzo él y sus discípulos pasaron inadvertidos, pero luego son rechazados por su clan y Mahoma
huye a Yatrib.

o Esta huida se conoce como “La Hégira”, ocurrida en septiembre de 622 y marca el punto de inicio del calendario
lunar musulmán o “era islámica”.

o Tras largos años entra en la Meca el 11 de enero de 630. El pueblo le prestó juramento y ese mismo año llegaron
delegaciones de todas las tribus árabes a fin de declarar su sumisión al profeta. Falleció en Medina el 8 de junio
de 632. Fue sucedido por uno de sus primeros discípulos, Abu Bakr.

o La fe musulmana se basa en una total sumisión del hombre a la voluntad de Alá. Tiene entonces un carácter
pesimista o casi determinista. Y además postula la naturaleza unitaria de Dios. Mahoma no acepta la Santísima
Trinidad ni la divinidad de Jesucristo, al que reconoce como el más grande profeta, pero humano después de
todo. Asimismo, se declara el “Único Profeta de Dios”. La fórmula tradicional es “No hay más Dios que Allah y
Mahoma es su profeta”.

o Según Mahoma, el culto adecuado para Dios es la repetición de la profesión de Fe: “No hay más Dios que Allah y
Mahoma es su profeta”. Esta frase debe ser repetida cinco veces al día por los creyentes.

o Para ello los muecines (predicadores) llaman a la oración desde los minaretes de las mezquitas. Las oraciones
que son colectivas y se practican en mezquitas dirigidas por un “imán”- consisten en recitaciones de los textos
sagrados del Corán, que deben ser pronunciadas en dirección a la Meca.

o Esta es la ciudad sagrada en donde está la “Kaaba” o piedra traída desde los cielos por los ángeles. El culto
impone, asimismo, la observancia del Ramadán (o mes de ayuno) durante el cual no se ingiere alimento (de sol
a sol) ni se mantienen relaciones sexuales.

o Los fieles musulmanes deben, además, dar limosna. Finalmente, todo musulmán en condiciones de hacerlo debe,
a lo menos una vez en la vida, acudir en peregrinación a la Meca y dar siete vueltas alrededor de la Kaaba.

o Además de estos deberes religiosos los fieles musulmanes deben cumplir con un último mandato: La “Jihad” o
guerra santa. Originada en las luchas de Mahoma para extender el Islam hasta la Meca, se volvió un
mandamiento que todo creyente debía cumplir rigurosamente.
o El botín obtenido se destinaba en parte a los “soldados de Alá” y los muertos en la batalla aseguraban su entrada
en el paraíso. Esta guerra permite la vertiginosa expansión del Islam desde la península arábiga hasta Persia e
India por el Oriente y Egipto, África y España en el Occidente.

o A la muerte del profeta, fue electo como nuevo líder religioso-político, su suegro Abu-Bakr (632-634), quien es
el primero en ostentar la dignidad de “Califa”, es decir, “sucesor de Mahoma” (La palabra proviene del árabe
“Jalifa” que significa precisamente “sucesor”). A la muerte de Abu-bakr, Omar asciende al trono.

o Estos dos primeros gobernantes presidieron la gran expansión territorial del islam. El primero invade
exitosamente los territorios del imperio persa de los sasánidas y el segundo consolida la victoria con la
destrucción de tal imperio y la victoria sobre los bizantinos, que deja a toda Siria y Palestina en poder de los
soldados del Califa. Asimismo, imponen su yugo a Egipto. Sin embargo, a la muerte de Omar, hubo agudos
problemas sucesorios.

o Se pensó que el que tenía el mejor derecho a la sucesión era Otmán, yerno del profeta y cabeza de la familia de
los Omeya, del clan Coraichita de Mahoma. El nuevo Califa hubo de soportar una creciente oposición y el ritmo
de la conquista se redujo pese a la conquista de Chipre. Sin embargo su apoyo fue mermando y en las zonas de
Persia se difundió la doctrina de que el califato sólo podía corresponder a los “familiares del profeta” (De la tribu
hachemita, de la cual descienden los actuales soberanos de Jordania).

o Uno de los más grandes de los Omeyas fue Abd-al-Malik: realzó a Jerusalén como centro de peregrinación
religiosa, erigiendo la “Cúpula de la Roca” y la mezquita de Al Aksa.

o El reinado de los Omeya tuvo a otro gran representante en Hixem (724-743) y luego entró en un proceso de
acelerada decadencia. El último Omeya, Marwán II (744-750) fue aniquilado por Abu Abbas, líder de los
“Abásidas”, descendientes de Abbas, tío del profeta. Abu Abbas fue proclamado califa y exterminó a los Omeyas.
Traslada la capital del califato a Bagdad. El último Omeya se refugia en España.

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