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UNIVERSIDAD AUTONOMA DE NUEVO LEON

FACULTAD DE PSICOLOGIA

CLASE ORDINARIA DE DESARROLLO PSICOSEXUAL

GLOSARIO DESARROLLO PSICOSEXUAL

SEM: 5 GPO. 007

EDUARDO ANGEL ESTRELLA GONZALEZ

1885435
1. Sexualidad infantil –
Klein sostuvo que el niño y la niña experimentan sensaciones e impulsos genitales
desde el principio que no son únicamente el resultado del cuidado corporal de la
madre, sino que se derivan de un conocimiento inconsciente de un pene y una
vagina

Este conocimiento de las distinciones anatómicas genera fantasías inconscientes


sobre diferencia de género que entran en el registro de la sexualidad infantil
inicialmente por medio del objeto-parcial oral, en sus dimensiones libidinales y
agresivas. La tarea crucial que ahora le espera al niño, de gran importancia para la
futura sexualidad, es la integración de estas relaciones de objeto interno pregenital
en la emergente genitalidad.

Según Klein, esta integración se organiza alrededor del cambio desde relaciones de
objetos parciales a las relaciones de objeto total que comienza después del destete
y continúa durante la segunda mitad del primer año de vida.

2. Pulsión –
Se establece en la descripción de la sexualidad humana. Basándose especialmente
en el estudio de las perversiones y de las modalidades de la sexualidad infantil,
refuta la concepción popular que atribuye a la pulsión sexual un fin y un objeto
específico y lo localiza en las excitaciones y el funcionamiento del aparato genital. 

3. Objeto -
Es aquel sobre el cual se depositan los sentimientos (energía libidinosa) y se actúan
las pulsiones del sujeto, un objeto puede ser cualquier persona con la que el sujeto
se relacione.

4. Fase oral -
Primera etapa del desarrollo psicosexual, va desde los cero a los dos años; en esta
el placer está ligado a la excitación de la cavidad bucal y de los labios, que
acompaña a la alimentación. La relación de amor con la madre se hallará marcada
por las significaciones “comer” y “ser comido”.

Dentro de ella se encuentran la fase oral precoz: succión y la fase oral sádica:
mordedura.

5. Fase anal –
Segunda etapa del desarrollo psicosexual, que puede situarse aproximadamente
entre dos y cuatro años; se caracteriza por una organización de la libido bajo la
primacía de la zona erógena anal; la relación de objeto está impregnada de
significaciones ligadas a la función de defecación (expulsión-retención) y al valor
simbólico de las heces. En ella se ve afirmarse el sadomasoquismo en relación con
el desarrollo del dominio muscular.

6. Fase fálica –
Fase de organización infantil de la libido que sigue a las fases oral y anal y se
caracteriza por una unificación de las pulsiones parciales bajo la primacía de los
órganos genitales; pero, a diferencia de la organización genital puberal, el niño o la
niña no reconocen en esta fase más que un solo órgano genital, el masculino, y la
oposición de los sexos equivale a la oposición fálico-castrado. 

La fase fálica corresponde al momento culminante y a la declinación del complejo de


Edipo; en ella predomina el complejo de castración.
7. Latencia 
Etapa del desarrollo psicosexual que comprende el periodo de los 6 a los 12 años,
comienza con el final de la primera infancia, y termina al comienzo de la pubertad, es
en este periodo en el que la libido deja de manifestarse en el cuerpo, y entra en un
estado de pasividad, esperando a volver a actuar en etapas posteriores de la vida.

8. Complejo de Edipo -
Ocurre durante la fase fálica entre los tres y cinco años de edad; se presenta un
conjunto organizado de deseos amorosos y hostiles que el niño experimenta
respecto a sus padres. Será de forma “positiva” si se tiene un deseo de muerte al
rival que es el personaje del mismo sexo y deseo sexual hacia el personaje del sexo
opuesto; será “negativa” si se presenta a la inversa, que el amor sea hacia el
progenitor del mismo sexo y odio y celos hacia el progenitor del sexo opuesto.

9. Posición esquizoparanoide –
Según Melanie Klein, modalidad de las relaciones de objeto específica de los cuatro
primeros meses de la existencia, pero que puede volver a encontrarse durante la
infancia y, en el adulto, especialmente en los estados paranoico y esquizofrénico. Se
caracteriza por los siguientes rasgos: las pulsiones agresivas coexisten desde un
principio con las pulsiones libidinales y son singularmente intensas; el objeto es
parcial (principalmente el pecho materno) y se halla escindido en dos, el objeto
bueno y el «malo»; los procesos psíquicos que predominan son la introyección y la
proyección; la angustia, intensa, es de naturaleza persecutoria (destrucción por el
objeto malo).

10. Posición depresiva –


Según Melanie Klein: tipo de relaciones de objeto consecutivo a la posición
paranoide; comienza alrededor del cuarto mes y se supera progresivamente en el
curso del primer año, aun cuando pueda encontrarse también en el curso de toda la
Infancia y reactivarse en el adulto, especialmente en el duelo y en los estados
depresivos. Se caracteriza por los siguientes rasgos: el niño es, en lo sucesivo,
capaz de a la madre como objeto total; se atenúa la escisión entre objeto «bueno» y
«malo», las pulsiones libidinales y hostiles tienden a relacionarse con el mismo
objeto; la angustia llamada se refiere al peligro fantaseado de destruir y a la madre a
consecuencia del sadismo del sujeto; esta angustia es combatida mediante diversos
modos de defensa (defensas maníacas o defensas más adecuadas: repartición,
inhibición de la agresividad) y se supera cuando el objeto amado es Introyectado en
forma estable y aseguradora. La posición depresiva marca un progreso crucial en el
desarrollo, y durante su elaboración el bebe cambia radicalmente su concepción de
la realidad.

11. Ansiedad paranoide –


El yo inmaduro del bebé se enfrenta ante una ansiedad por la polaridad innata de los
instintos de vida-muerte y a una ansiedad por afrontar la realidad externa como el
nacimiento, la vida, el calor, amor y alimento. Deflexiona la ansiedad del instinto de
muerte en un parte como proyección la cual coloca en el objeto externo original
(Pecho materno). Así es como se llega a experimentar el pecho como malo o
amenazador para el yo, como sentimiento de persecución y por otra parte aparece
como una agresión que va dirigida a sus perseguidores.

La ansiedad predominante de la posición esquizoparanoide es que el objeto u


objetos persecutorios se introducirán en el yo y avasallarán y aniquilarán tanto al
objeto ideal como al Yo. Contra la ansiedad de ser aniquilado el yo desarrolla una
serie de mecanismos de defensa. Un rasgo constante es el aumento de disociación
y se utilizan la proyección y la introyección para mantener a los objetos persecutorios
tan alejados como sea posible de los objetos ideales, a la vez que se mantiene a
ambos bajo control. Se puede tener una sensación de amenaza externa y se pueden
producir temores de carácter hipocondríaco (introyección de los perseguidores), y la
ansiedad de quedar vacío de bondad e invadido por perseguidores (Proyección
hacia fuera de partes buenas). Las ansiedades y defensas que constituyen el núcleo
de la posición esquizoparanoide son parte normal del desarrollo humano.

12. Ansiedad depresiva –


El bebé se enfrenta a esta por su propia ambivalencia, tras esto surge la ansiedad
en la posición depresiva, teme que sus propios instintos destructivos destruyan al
objeto amado. Cuando la posición depresiva no se ha elaborado suficiente
creatividad del yo y en su capacidad de recuperar interna y externamente objetos
buenos, el desarrollo posterior es mucho menos favorable. El yo se siente acosado
por la ansiedad constante de perder totalmente las situaciones internas buenas, está
empobrecido y debilitado, su relación con la realidad es frágil. Existe un perpetuo
temor ya veces una verdadera amenaza de hacer una regresión a la psicosis.

13. Escisión –
Mecanismo descrito por Melanie Klein y considerado por esta autora como la
defensa más primitiva contra la angustia: el objeto al que tienden las pulsiones
eróticas y destructivas es escindido en un objeto bueno y un objeto malo, que
entonces seguirán destinos relativamente independientes dentro del juego de
introyecciones y proyecciones. 

La escisión del objeto interviene especialmente en la posición esquizoparanoide, en


la que afecta a objetos parciales. Vuelve a encontrarse en la posición depresiva,
afectando entonces al objeto total. La escisión de los objetos se acompaña de una
escisión correspondiente del yo en un yo bueno y un yo malo, por cuanto, para la
escuela kleiniana, el yo está constituido esencialmente por la introyección de los
objetos.

14. Defensa maníaca-


La defensa, de un modo general, afecta a la excitación interna (pulsión) y
electivamente a las representaciones (recuerdos, fantasías) que aquélla comporta,
en una determinada situación capaz de desencadenar esta excitación en la medida
en que es incompatible con dicho equilibrio y, por lo tanto, displacentero para el yo.
Los afectos displacenteros, motivos o señales de la defensa, pueden ser también el
objeto de ésta. El proceso defensivo se especifica en mecanismos de defensa más o
menos integrados al yo.

Sus características son la manipulación omnipotente o bien el control y la


devaluación despectiva; se organiza con respecto a las angustias propias de la
depresión, la cual es el estado de ánimo resultante de la coexistencia del amor y la
voracidad o gula por una parte y el odio por otra dentro del marco de las relaciones
entre los objetos interiores.

15. Reparación-
Mecanismo, descrito por Melanie Klein, en virtud del cual el sujeto intenta reparar los
efectos de sus fantasmas destructores sobre su objeto de amor. Este mecanismo va
ligado a la angustia y a la culpabilidad depresivas: la reparación fantasmática del
objeto materno, externo e interno, permitiría superar la posición depresiva
asegurando al yo una identificación estable con el objeto benéfico.
16. Objeto parcial-
Es aquella representación con la cual el bebé en posición esquizoparanoide, dentro
de la etapa oral, se relaciona, dentro de su concepción del mundo, aún no existen
otras personas con las que interactuar, así que se relaciona mayoritariamente con
partes de su madre, pero lo hace de manera individual, sin comprender que todas
estas partes forman a un individuo.

17. Objeto total-


Hace referencia a los individuos completos con los que se relaciona el sujeto, la
noción de un objeto total se obtiene cuando el bebé pasa a la posición depresiva, y
es capaz de integrar a las personas como un solo objeto, con los cuales tiene
relaciones dinámicas y complejas.

18. Simbiosis-
Es el sentir del recién nacido de ser uno con su madre, este sentimiento se
desarrolla por la gran dependencia que tiene el bebé hacia su principal figura de
cuidado, de la cual depende para alimentarse, mantenerse cálido y sobrevivir, esta
relación de simbiosis debe separarse en medida que el niño se va desarrollando y
aprende que es un individuo completo.

19. Separación-
Proceso mediante el cual el bebé descubre que su madre y él son seres distintos, y
aprenden a actuar sin la presencia del otro, se vuelve un individuo relativamente
independiente mientras va creciendo y desarrollándose.

20. Adaptación-
Considerado un predominante biológico, implica el impulso de los organismos hacia
la adaptación de su medio ambiente. Conlleva una relación armoniosa entre el
mundo interno y externo o circundante. La enfermedad psíquica explica los síntomas
neuróticos en términos de conducta inadaptada (mecanismos de defensa), se habla
del tratamiento de ayudar al paciente a “adaptarse” a la realidad. 

21. Psicosis simbiótica-


Perturbación grave de la individuación y de desorganización psicótica. El niño vuelve
a esa simbiosis que tenía con su mamá aproximadamente en su segundo mes de
vida. El infante no logra adquirir la capacidad de percibir al agente materno ni de
usarlo para lograr el equilibrio entre sus necesidades y la satisfacción de ellas para
mantenerse en un estado libre de tensión. Como consecuencia, posteriormente
tampoco podrá soltar al agente materno para diferenciarse de él.

22. Separación-individuación:
Esta fase del desarrollo infantil sigue a la simbiótica, dentro de ella el niño comienza
a percibir que es una persona distinta a la madre.

23. Ansiedad-
Surge como un conflicto psíquico entre un impulso inaceptable que está intentando
adquirir representación consciente y liberarse, provocando en el Yo la adopción de
medidas defensivas contra las presiones que proceden del Ello.

24. Psicosis infantil-


El infante no logra distinguir entre su realidad interna (fantasías) y su mundo externo,
teniendo como consecuencia la vivencia de sus miedos como realidades inmediatas,
masivas y oceánicas.

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