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Big Daddy あ |¡kooktae!

ynhobi
Único.

❧•Jeon JungKook
❧• 28 años.
❧•Pelinegro.
❧•Alfa puro.

❧•Kim TaeHyung.
❧•22 años.
❧•Rubio.
❧•Omega
• • • • • • • • • • •

¿Por qué las personas últimamente normalizaban la infidelidad?, lo veían


como algo común, algo lo suficientemente normal para la sociedad actual.

Y a pesar de que TaeHyung había crecido en un ambiente donde sus padres se


amaban como si fuesen el único alfa y la única omega sobreviviente en el
mundo. Él no salió como tal, él y la infidelidad iban de la mano y habría sido
diferente si sus padres hubiesen respetado sus decisiones y gustos sin dejarse
llevar por el dinero y anclarlo con un sub-alfa, hijo de un ceo lo
suficientemente adinerado.

Lee SeungIn, la mano derecha de Jeon JungKook, Ceo de JJ corporarion, la


empresa más privilegiada en Seúl, la misma que se dedicaba a verificar la
mercancía que llegaba y entraba del país, teniendo el mejor sistema para la
seguridad de cada producto.

SeungIn era un sub-alfa, un joven amoroso y atento quien se terminó


enamorando de la persona equivocada, porque todo lo que aparentaba
TaeHyung, no era lo real.

A espaldas del joven omega rubio, un contrato de dinero y un matrimonio


arreglado y no deseado porque así eran sus padres.

Amante de la buena vida y de las riquezas, mientras recibieran dinero, todo


iba mejor y fue una de las razones por las cuales TaeHyung se quejo a
principios de su matrimonio.

Él no le gustaba SeungIn, él no se iba a entregar a un tonto, a un empalagoso y


estúpido sub-alfa.

Teniendo en cuenta el amor que Lee le tenía, Kim supo aprovechar eso y sus
padres también, dejando deudas en el joven, que a peor aspecto para
TaeHyung, era un chico dos años menor que él.
Aprovecho el dinero, disfrutó viajar y sus padres también se dieron lujos sin
siquiera verse obligado a besar o acostarse de manera íntima, porque el
contrario estaba tan perdido en el amor por él, que tan ciego fue al ver que
TaeHyung ya había encontrado una diversión cercana.

Muy cercana.

¿Por qué acostarse con la mano derecha, cuando puedes acostarte con el jefe?

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Todo inició en esa gran cena de navidad, una cena que empezó con gente
falsa dándose un par de tragos y hablando de cosas costosas y terminó en su
primera vez con la mejor follada de la historia por parte del dueño de aquella
empresa.

¿Jeon JungKook?, era el alfa que él necesitaba, dotado, coqueto, experto y


billonario para complacer todos sus caprichos.

Un hombre centrado, grande y con una mente tan profunda que podías
compararlo de la forma en la que te follaba, así era como describía TaeHyung
aquel alfa puro.

Y seguro, muy seguro de que era el indicado cuando esa noche luego de unos
tragos y miradas intensas, el baño fue ocupado por ellos con esas mínimas
palabras antes de los intensos y gloriosos gemidos del omega.

───Fóllame

Y bajo esa petición, aquella gruesa voz de mando que lo hizo lubricar en
cantidad.

───Te fóllare muy bien.

Una aventura peligrosa pero satisfactoria y placentera para ambos.


La diversión no solo fue de una noche, al contrario, hubo un cambio intenso
en lo que fue del sexo matutino de ambos lobos, un alfa soltero y un omega
casado pero no por amor, solo por dinero y obligación.

De manera honesta, Kim había confesado su situación con Jeon y lo único que
hizo este, fue darle una tarjeta de crédito con un par de millones en la cuenta y
volver a follarselo con ansias.

¿Sus padres?, a ellos nos les importaba con quien se metiera su hijo, con tal de
seguir teniendo dinero fácil, la noticia de que TaeHyung estaba teniendo un
amorío y era el amante del jefe de su esposo, no fue muy bien aceptada por
sus progenitores pero al ver los ceros redondeando la cantidad de la cuenta.

Gustosos aceptaron aquella relación o más bien, aventura, hasta el punto en


que JungKook llegó a cenar a su casa y en la noche disfrutó de su cuerpo
como todas las veces que se veían.

¿SeungIn?, muy ocupado con su empleo para sospechar que su jefe buscaba a
su esposo y desordenaban la cama ante tanta acción.

Enamorado, ilusionado y utilizado por haber arreglado un matrimonio donde


el punto principal no le había dado el consentimiento personal.

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Motivo de no haber aceptado casarse o haberse enamorado de SeungIn, como


para que esa mañana ya tuviese los papeles del divorcio impresos y firmados a
su nombre.

Kim TaeHyung tomó la carpeta de documentos y los dejó en la mesa del


comedor que se mantenía en eñ departamento del sub-alfa.

Con su maletín donde iban todas las pertenencias que anteriormente


guardaba en aquel lugar.

Dejando el anillo de compromiso que era obligado a usar junto a la carpeta y


una nota que decía "Adiós" y una carita feliz.

Sus padres no iban a decidir con quien debía estar, SeungIn ya no era nadie
comprado a JungKook, Jeon tenía a sus padres comiendo de la palma de su
mano y TaeHyung tenía al gran empresario hambriento por su cuerpo y sus
sentimientos.

Un viaje podría ser el comienzo de una nueva etapa y si JungKook deseaba


tomarlo de todas las formas, TaeHyung no iba a desaprovechar la
oportunidad de tener a alguien con el que estaría dispuesto a entregar su
corazón y más que nada, su vida.

• • • • • • • • • • •

Cerrando la puerta de su casa, observando el porsche de último modelo


estacionado justo al frente de él, abriendo la puerta de copiloto y lanzando su
maletín a la parte trasera del auto para luego observar esos lindos labios de
tonalidad rosa estirados.

Acercando su rostro al contrario, sus labios se encontraron y al separarse, Kim


sintió su corazón latir con fuerza de tan solo ver esa sonrisa tan perfecta para
él.

───Me parece que alguien esta muy emocionado hoy.

───Hmm~, ¿cómo no voy a estar emocionado si me iré a Jeju por toda una
semana con el alfa más lindo de toda Corea?

Encendiendo el auto y saliendo de aquella residencia, JungKook con sus


lentes oscuros y vistiendo ropa negra un tanto casual y cómoda para su viaje.

───¿Solo el más lindo?

Rodando los ojos, dos besitos en su mejilla y la caricia en la pierna del alfa.

───El alfa perfecto.

Una sonrisa de orgullo y dominando perfectamente el volante, conduciendo


directo al aeropuerto.

───¿Tus padres saben que te vas de viaje?

───Tengo veintidos años, no les debe importar a donde me mueva y con


quien lo haga.

Con una expresión neutra, JungKook volvió a preguntar.

───¿Y tu esposo?

───Ex esposo.

El pelinegro le miró por segundos hasta volver a centrar su vista en la calle.

───Estas metido en un gran lío, bebé.

Encogiendose de hombros y viendo como se acercaban más al aeropuerto.

───El problema será entre Lee y mis padres, yo solo fui arrastrado y obligado
a casarme por dinero pero ahora que realmente encontré a alguien perfecto
para mi, no me voy a privar de mis emociones y mis derechos a disfrutar lo que
de verdad necesito junto a mi.
───¿Y qué es lo que realmente necesitas?

Alimentando el ego del mayor, TaeHyung rodó los ojos ante el comentario y
sutilmente lo dijo.

───Un chico como yo, necesita un verdadero hombre como tú.

Observando esa perfecta dentadura, feliz de haber causado esa preciosa


sonrisa y seguido la risa nerviosa del alfa, TaeHyung se sentia tan enamorado.

───TaeHyung.

───Jungkookie.

La delgada mano posandose sobre su muslo, acariciando el mismo y sintiendo


las feromonas del omega concentradas dentro del auto.

───Voy a pasar mi celo junto a ti.

Y eso realmente era lo que quería escuchar TaeHyung, tener el puesto


asegurado en el corazón del alfa.

───Yo te voy a satisfacer muy bien, alfa.

Dejando el tema y volviendo su concentración al camino, su celo lo tenía


controlado por supresores pero en la noche, dejaría que su lobo gobernará su
cuerpo y fuese el placer eterno para el omega.
Aroma a frutos rojos junto al de tierra húmeda por toda la habitación, ojos
avellana brillando bajo la luz de la luna, avisando que su celo también había
sido adelantado al tener aquellos ojos rojos, recorriendo su cuerpo de la
forma más lujurioso posible.

Luego del viaje, una ducha en el baño que pertenecía a la suite del hotel, sobre
su cuerpo un traje de lencería que JungKook había comprado especialmente
para él.

Tonalidad celeste, sus pezones cubiertos por el pequeño top, su abdomen


plano lo suficientemente atractivo y descubierto para los ojos del alfa, unas
bragas transparente que en realidad no cubría mucho pero sería sencilla de
romper y eso era lo que quería el mayor.

Romper y hundirse en ese lindo agujero.

───No creo que el celeste me favorezca.

Kim comentó, mientras se pocisionaba en la pierna derecha del alfa y sentía el


brazo rodear su espalda y la mano tomar su cadera.

───Todos los colores se ven bien en ti, bebé.

El rubio le dedicó una pequeña sonrisa antes de tomar ambas mejillas y


hundir su lengua en la boca del alfa, chasqueamdo sus labios y jugueteando
con sus lenguas.

Las manos recorriendo la espalda, frotando su trasero contra el erecto


miembro del pelinegro.

Respirando escandalosamente al momento en que sus bocas se separaron,


unieron sus frentes y sus narices se acariciaron entre ellas, escuchando la
agitada voz del omega.

───¿Papi recuerda que tengo una boca muy juguetona?

Jeon le dedicó una risita divertida para soltar el agarre y ver como su chico
buscaba lugar en el suelo, de rodillas, mirándole con rostro de inocencia.

───Haz bien tu trabajo.

Sin esperar otra indicación, Tae con el miembro entre sus manos, besando el
glande con dedicación, lamiendo la gran longitud de arriba hacía abajo,
disfrutando ver aquellos llamativos ojos rojos del alfa, observarle con tanta
atención.

La gruesa mano de su alfa tomando sus rubios cabellos para hundir el pene en
su boca y así embestirla, evitando que sus dientes rozaran con la ereccion,
sacando la lengua para más espacio, el sonido de su boca siendo follada por la
polla erecta de su pareja, era increíblemente escandalosos y obsceno.

Escuchando los dulces gemidos de Jeon, su suave voz llamar su nombre y a la


vez su lobo gruñir por el placer otorgado.

Viendo como la fuerza se descontrolaba hasta degustar el sabor del pre-


semen, TaeHyung olisqueo el ambiente y el lubricante fue saliendo en
pequeños hilos espesos de su entrada.

Gimiendo ronco ante su dolor en la garganta, JungKook arqueo los deditos de


sus pies al sentir su orgasmo y un fuerte gruñido salió de lo más profundo al
llenar la cavidad bucal de su semen.

Dejando ir la carita roja y sudada del más joven, TaeHyung tenía sus labios
manchados, limpiando con su lengua los restos, soltó un jadeo de impresión
cuando nuevamente terminó sentado en el regazo del alfa.

Su boca fue atacada por la contraria y con bruscos movimientos, los dientes y
los labios se encargaron de su cuello.

───Papi-ah~...

Tirando de los cabellos oscuros, las manos del mayor recorrieron su delgada
figura, sonriendo cuando su alfa destrozó la braga de tonalidad celeste y quitó
el broche del pequeño top, pasando su lengua por el lampiño y suave pecho,
buscando succionar ese par de pezones color caramelo.

Atrapando entre sus dientes el izquierdo, Kim llevó sus manos a las nalgas,
abriendo las mismas para sentir el pene erecto, entrar sin dificultad alguna.

El lubricante haciendo el trabajo sencillo, TaeHyung soltando pequeños


jadeos para dejarse llevar y controlar la estimulación en sus pezones.

El alfa abrazando su cadera e impulsando su pelvis para hundirse más a él, un


pequeño descontrol de ritmo ante la intensidad de Jungkook al estar en celo y
los espasmos que sobre cargaba el cuerpo del omega entrando en su etapa.

───TaeHyung, eres mío.

El rubio asintiendo entre quejidos de placer, tirando de los cabellos oscuros y


tan solo para atacar el cuello del mayor.

Mordiendo, succionando y lamiendo la piel, Jeon disfrutaba abrir ese trasero y


hundirse hasta sentir su pene viscoso del lubricante.

La agitada respiración del omega sobre sus labios y esa ronca voz confesarle
todo lo que le hacía sentir fue la gloria para JungKook.

───Me sostienes de una forma tan especial, que me hace querer aferrarme y
ser completamente tuyo.

Moviendo su pelvis con coordinación, el alfa llevando sus manos a las


delgadas piernas del omega, acariciando y manteniendo abiertas las mismas.

───¿Quieres ser completamente mío?

Preguntando de una forma tan sencilla, el menor llevó su vista a aquellos ojos
escarlata, inclinando su cuello y sintiendo el cuerpo del mayor tensarse.

───Hombres de mi edad no saben cuidarme y no saben tocarme, pero tú,


eres lo que todo omega desea en su vida, JungKookie.

Susurrando esas palabras, el menor sabía lo que había hecho y sabía lo que
iba a ocurrir, aferrando sus uñas a la espalda del más alto y sintiendo aquellos
caninos incrustarse en la piel de su cuello, manchando el abdomen y sintiendo
su cavidad anal manchada del semen contrario, el nudo se formó y él reclamó
a su lobo empezó.

Quedándose unidos por minutos, sus respiraciones agitadas y apreciando el


latido de su pecho.

Quizás TaeHyung había cometido el error de entregarse bajo el celo y


aprovechar esa oportunidad para tener el alfa de Jungkook asegurado, quizás
en un futuro su alfa encuentre a la persona correcta pero por ahora, Jeon
JungKook debía hacerse cargo del actual lazo que había comenzado con Kim
TaeHyung.

El omega que le daría su primer hijo en nueve meses después, si no tomaba


sus pastillas anticonceptivas, por supuesto.

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©KookTaeBolaschinas

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