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Por lo que se puede considerar como usuario a todo aquel personal que necesita
utilizar la información contable para la toma de decisiones, el cual se puede clasificar
por tipo de usuario y el interés que este presenta como se indica en la siguiente tabla:
Tabla 1. Usuarios de la información contable.
Usuarios Interés Información demandada
Propietario Planificación: Establecimiento Conocer y determinar capacidad
Administrador de objetivos. productiva.
Gestión: política actuación Determinar necesidades.
inmediata
Control
Propietario Mantener inversión. Valor de empresa e incremento
Dueño, poseedor. Buscar alternativas. del valor.
Remuneración (rentabilidad).
Trabajadores Estabilidad del puesto de Beneficio, evolución económica
trabajo. y perspectivas.
Adecuación de las retribuciones. Productividad.
Valor añadido y reparto.
Evolución empresa y
perspectivas.
Entidades financieras Solvencia. Situación económica y
Liquidez. financiera.
Seguridad. Evolución económica y
financiera.
Potencial económico y
financiero.
Patrimonio (garantía).
Endeudamiento.
Previsiones comerciales y
patrimoniales.
Administración publica Esfuerzo impositivo del Beneficios.
contribuyente. Patrimonio.
Incrementos de patrimonio.
Por esta razón que toda información contable debe reunir unas características
mínimas para que sea de utilidad por estos usuarios, las cuales se encuentran:
1. Objetividad. Que se logra a través del cumplimiento de unas normas de
carácter general en la valoración de los hechos y elaboración de la información.
El cumplimiento de este requisito establecerá un cierto grado de homogeneidad
a la información contable de todas las empresas, requisito que resulta necesario
para poder llevar a cabo un análisis comparado, bien sea global o parcial, entre
empresas, o para establecer información agregada y media de empresas de un
mismo sector.
3. Oportunidad. Para que la información contable pueda ser utilizada con fines de
análisis se nos debe proporcionar en el momento necesario, es decir, con
anterioridad al desarrollo del proceso de su estudio. No tiene sentido hablar de
una información útil si no es facilitada en el momento en el que va a ser utilizada.