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UNIVERSIDAD MARIANO GALVEZ DE GUATEMALA.

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES.

DERECHO DEL TRABAJO I


LIC. GERBER IVAN MENDEZ SOSA.

TEMA
HISTORIA DEL DERECHO LABORAL.

GRUPO #1.
ANA ELIDA SOTO MARTÍNEZ
JERANNY MASSIEL ALDANA RAMOS.
JAQUELINE MARLIN BORRAYO VELA.
JUAN CARLOS GONZALEZ
MAYLEN LISELL ROMERO LOPEZ.
KATHERINE YADHIRA RAMIREZ ROBLES.
MERIAM ROCIO BARDALES ORTIGOZA.

QUINTO SEMESTRE, 2023.


EL FENOMENO LABORAL A TRAVES DE LA HISTORIA
El estudio de la historia del Derecho Laboral debe comprender dos etapas:
El estudio de la historia del Derecho Laboral, debe comprender dos etapas:
a. A partir de ese momento se proclamó la plena libertad individual en el ámbito del
trabajo y se proscribió toda interferencia en el orden económico. Si bien pueden
invocarse algunas razones favorables, sobre todo que el sistema gremial no podía
continuar por mucho tiempo; esa rígida sujeción del principio de libertad individual
en lo que a la actividad laboral se efiere. La esclavitud domina el esquema del
trabajo subordinado de la antigüedad; es claro que dicha institución no encuadraría
nunca dentro del esquema del actual Derecho Laboral; fue un producto de cada
época y cada cultura, derivado entre otras causas de las continuas guerras en
épocas antiguas se sucedían entre diferente pueblo. Cada ciudad tenia sus
artesanos y su clientela; aquellos se agruparon en asociaciones que se
denominaron guildas, corporaciones o gremios. Puede decirse que no existe una
correlación o efecto de continuidad entre las manifestaciones laborales de la
antigüedad y el actual Derecho Laboral. No se podía irrumpir directamente en el
mercado de bienes y servicios, ya que estos estaban dominados rígidamente por el
sistema gremial.
Los primeros embates contra el sistema gremial en el contiene, se sintieron en los
años previos a que estallara la Revolución Francesa. Los fenómenos laborales se
han dado dentro del esquema de cada cultura en forma aislada y ha sido poca su
incidencia intercultural, salvo instituciones determinadas como la esclavitud, que
coincidentemente se repite en casi todas las civilizaciones antiguas, con ligeras
variantes en su regulación. Estaban formadas por lo jefes de taller, y en cada taller
había tres categorías de trabajadores:
a. En la Edad Media prevaleció el sistema económico de clientela y el trabajo era
ejecutado por los artesanos.

Destacan los llamados fisiócratas, el gobierno de la naturaleza (fisios=naturaleza),


que decían que las leyes de la naturaleza son sabias y que de la misma forma que
gobiernan el mundo físico, deben gobernar el mundo social y la economía; que en
materia económica debe haber libre interrelación de la ley básica de la oferta y la
demanda; que debe haber plena libertad para que entre en juego dicha ley de la
oferta y la demanda. El surgimiento del maquinismo, la expansión del comercio y
los descubrimientos de nuevas regiones, crearon nuevas condiciones económicas,
que a su vez dieron impulso a nuevas ideas o doctrinas económicas, entre las que
se incluían las actividades económicas (y laborales), derivándose que cualquier
intromisión estatal no era mas que una abusiva interferencia en la libre actividad de
las personas. Mutualista, en tanto se procuraba el bienestar y la asistencia entre
todos sus miembros; constituía unas especies de seguro de accidentes y aun de
vida: en caso de desgracias los compañeros acudían en ayuda del afectado y
adicionalmente acostumbraban un fondo comunal destinado a emergencias de sus
miembros.
Es claro que la primera etapa no es propiamente parte de la historia de esta rama
jurídica, por cuanto comprende una época anterior a su existencia; pero su estudio
nos sirve para tener una anterior a su existencia; pero su estudio nos sirve para
tener una panorámica de cómo fue interpretado y regulado el hecho de la prestación
de servicios en las diferentes culturas que se han ido desarrollando a través de la
historia de la humanidad, para conocer como los pueblos regularon el trabajo.
a. Maestros
b. Oficiales
c. Compañeros
d. Aprendices
Estas asociaciones tenían un marcado espíritu monopolista y mutualista. Vemos
aquí los antecedentes embrionarios de dos instituciones hoy día renovadas: por un
lado, de los colegios y agremiaciones profesionales, marcados por un principio de
protección a sus miembros, así como a sus actividades (colegio de médicos,
colegios de abogados, cámaras de periodistas) y la previsión social por el otro. Una
vez triunfante el nuevo orden, o mas bien, una vez abolido el viejo régimen, una de
las primeras leyes fue precisamente la de eliminar totalmente cualquier limitación a
la libertad de dedicarse a cualquier actividad económica licita; por lo mismo, el
principal valladar de esa libertad los gremios, quedaron totalmente abolido.
Cualquier persona que quisiera desarrollar un arte u oficio, debía pasar
necesariamente por el tamiz del sistema jerárquico gremial; por lo mismo
incorporarse en un gremio incoándose como aprendiz, para sucesivamente acceder
a los estadios superiores: compañero, oficial y maestro.
Cuando la economía feudal fue cediendo paso a un sistema de mayor
intercomunicación entre las ciudades, se incrementó la competencia comercial y
laboral. Eran monopolio en el sentido de que dominaba por imperio de la ley
totalmente el arte u oficio de que tratara; ningún artesano podía ejercer su oficio
libremente por bueno que fuera; debía someterse al sistema gremial vigente en su
ciudad y empezando la escala jerárquica por el puesto de aprendiz.
No es mucho pues lo que se puede hablar de la normativa laboral en la antigüedad;
en primer lugar porque no estaba configurado el trabajo tal como ahora lo
interpretamos, no estaba inspirado en los principios tutelares ahora vigentes; y en
segundo lugar, porque son pocas las fuentes históricas que sobre la materia han
sobrevivido a las fecha. Era a su vez un sistema mutualista en cuanto a la asistencia
que mutuamente se brindaban los agremiados, sobre todo en casos de
enfermedades o accidentes. Las coaliciones obreras, embrión de los sindicatos, en
el fondo pretendían mejorar salarios y condiciones de vida; esto es, ejercer
influencia o presión en el libre juego que fija los montos de los salarios. Eran
entidades que variaban según la localidad y el momento, pero que tenían en común
las características ya vistas de mutualista y monopolista.

ETAPAS DE DESARROLLO DEL DERECHO LABORAL.


Se reconocen tres Etapas De Desarrollo.
A. Etapa de Represión: La represión primordial en los primeros
momentos de vida de un sujeto, casi del orden de una necesidad
defensiva vital, vinculada al displacer primitivo y a la angustia ante el
desvalimiento, aun antes de la discriminación del yo y sus instancias.
Para poder reproducirse necesita de un orden que regule las diversas
relaciones que se dan entre los sujetos que la integran; ese
ordenamiento se vuelve imperativo por lo menos formalmente
mediante el derecho.

Este, finalmente encausa y norma relaciones que se dan entre las


diversas fuerzas sociales que se generan en las sociedades
históricamente dadas. La reglamentación jurídica regula el ejercicio de
los derechos subjetivos tanto individuales como sociales, sancionando
el incumplimiento de la normatividad que se genera como garantía del
orden establecido. A su vez, la huelga necesita la aprobación oficial
para ser lícita. Lo anterior no significa que el orden jurídico necesite
forzosamente para su cumplimiento de la sanción represora. Si así
ocurriera, la legitimidad del Estado se iría resquebrajando en razón
directa de la aplicación de tales sanciones.

B. Etapa de la Tolerancia: En esta etapa ya no se perseguía a quien


quería alzar la voz contra las injusticias al organizar algún tipo de
huelga pero tampoco se acudía a atender sus posiciones y peticiones,
el sector obrero seguía desprotegido porque no se creaba ninguna ley
para regular la relación entre trabajador y patrono, el estado dejo de
violentar su derecho de expresión y petición simplemente decidían
ignorar a menos que este afectara el orden público, era al menos un
avance porque ya no se les trataba como delincuentes al tratar de
pedir dignidad laboral.

C. Etapa de Legalización: La etapa de la legalización. En la primera


etapa, como su nombre lo indica, todo intento de los trabajadores de
presionar para conseguir mejoras laborales estuvo en la
clandestinidad. Los intentos de huelga y organización fueron tomadas
como sedición, conspiración y otras figuras delictivas. La legalización
es un trámite que permite usar un documento en otro país.
Normalmente, la legalización implica varios pasos. Documentos que
pueden ser legalizados son, por ejemplo, un certificado del Registro
Civil, una sentencia de un tribunal o un diploma. La legalización de
una conducta supone la permisibilidad de realizar ese acto y, en
algunos casos, la despenalización de esta.

Esto es, la conducta constituía delito o infracción administrativa, por lo


que acarreaba una pena o una multa. Tras la legalización, los
ciudadanos pueden realizar dicha conducta libremente.

EVOLUCIÓN DE LAS NORMAS LABORALES EN GUATEMALA.


Desde la era precolombina son pocas las anotaciones que se pueden registrar, ya
que no se cuenta con fuentes certeras y específicas que nos pudieran informar con
mayor veracidad de los hechos. Los textos escritos dicen que eran muy escasos en
información con respecto a esta materia
El influjo de ideas humanitarias y la actividad de personajes de la talla del obispo
Francisco Marroquín a Fray Bartolomé de las Casas, fueron ganando terreno para
dar lugar a un mejor tratamiento de los pueblos indígenas en el desarrollo de estas
naciones. Las famosas leyes de Indias significan un hito y era un ejemplo positivo
del poder que tenían las corrientes humanistas y manifestaban un claro intento de
la corona española de limitar todos los abusos que sus súbditos cometían. Pero la
verdadera evolución de nuestro ordenamiento laboral la podemos ubicar a finales
del siglo XIX.
DE LO CIVILISTA A LO LABORAL.
Las primeras regulaciones laborales especificas tenían un acento civilista muy
marcado en aquel entonces, el propio Código Civil de 1817 lo comprende dentro de
los contratos como uno más, incluyendo en su artículo el principio de que “en caso
de duda se estará a lo que diga el patrono bajo palabra”.
En los considerandos del Decreto Número 486, de 1894, se consigna que: “aunque
no se oculta a las autoridades delegadas para hacer las leyes y para cumplirlas, que
el trabajo en una sociedad libre no debe reglamentarse, sino dejar a la
espontaneidad individual de oferta y demanda, se hace necesario dictar trámites
que allanen el período de transición que sufre el trabajo y el paso del estado coactivo
al de acción independiente”.
Por su parte, el Decreto Número 1434 de la Asamblea Legislativa de Guatemala,
conocido como Ley del Trabajo de 1926, en su Artículo 1º señalaba que: El
contrato de trabajo se regirá por las prescripciones del Decreto común y por las
disposiciones especiales de esta ley.”
Es muy clara la posición inicial de nuestra legislación, ya que tiene un corte
privatista, y dio un giro al ir absorbiendo los nutrientes que han abonado esta
disciplina desde principios de este siglo: la titularidad y la intervención estatal
por medio de la regulación laboral.}

EVOLUCIÓN DE LAS DISPOSICIONES LABORALES.


Han quedado atrás y como olvidadas en el tiempo, aquellas épocas en la que por la
ley del trabajo se decía que eran como mandamientos, en los que el administrador
de justicia laboral era el jefe político, y que al trabajador se le decía mozo o jornalero
y en las que, en vez de contratar, la ley hablaba de atraer o del famoso reclutamiento
de personal y la misma ley, en un intento de protegerlos, prohibía la venta de mozos
en este caso los mozos eran los trabajadores. A continuación, se dan a conocer las
siguientes referencias.
El trabajo obligatorio en caminos se ha reputado como una de las particularidades
del régimen ubiquista (1,933-44); sin embargo, es una vieja y odiosa tradición que
se conocía desde los albores del nuevo Estado de Guatemala, tal como lo
testimonia el Decreto de la Asamblea Legislativa del 17 de abril de 1830.
El Decreto 1153 (código Fiscal del 30 de mayo de 1921) aumentaría a cuatro días
de trabajo la referida contribución.
El 21 de febrero de 1906 siglo pasado, hubo necesidad, por medio del Decreto
Gubernativo 657, de declarar “nulos y sin ningún valor ante los tribunales de justicia
y autoridades administrativas del país, todos los convenios que se celebren en la
república entre propietarios o administradores de fincas para el canje o venta de
mozos”.
La libertad contractual ha encontrado un escabroso trayecto a lo largo de nuestra
historia. El Acuerdo del siete de septiembre de 1983, autoriza a la Municipalidad
de Totonicapán a cobrar cincuenta centavos por cada peón que proporcione a los
cultivadores de café.
En circular del Ejecutivo a los jefes Políticos, del 12 de agosto de 1903, se
reconocía 10 lo “miserable de los salarios y se fija a partir del uno de septiembre,
jornales en el campo de doce reales diarios”, y más adelante, en circular del 19 de
septiembre de 1903, se acepta la libertad de precios en los contratos de trabajo.

ORGANOS ADMINISTRATIVOS DE TRABAJO.


Cuando fue tomando mas forma y presencia, tanto el movimiento laboral como la
disciplina laboral autónoma, se creo la cartera de Agricultura y Trabajo en abril del
año 1920.

SUCESION DE LEYES DE TRABAJO


Ley de Trabajadores: Si bien se emitieron una serie de normas aisladas respecto
al trabajo subordinado, no existió ningún cuerpo normativo que contuviera informa
sistemática los preceptos laborales, hasta el Decreto 253 al año 1894. Ley de
Trabajadores que contenía saludables disposiciones que lamentablemente no
llegaron a cumplirse. Dicha ley vino a ser una especie de reglamento aplicable a los
dueños de fincas y sus jornaleros (poca aplicabilidad tenía dicha ley en cuanto al
trabajo fuera de las fincas). Debe recordase que el auge que tenía en esa época el
cultivo de café requería mayor control de sus actividades por eso mismo, las
disposiciones laborales hasta entonces parecen dedicadas exclusivamente a esa
actividad.
Ley Protectora De Obreros Sobre Accidentes De Trabajo. (Decreto 669):
Emitida el 21 de noviembre de 1906. Su reglamento apareció un año después, es
una interesante anticipación de la futura previsión social hoy en día ampliamente
difundida.

Ley Del Trabajo: En 1926 se decretó la LEY DEL TRABAJO, texto al que podemos
referirnos como el primer conjunto sistemático de contenido laboral y de aplicación
general, aquí se estructuran técnicamente los diferentes temas en capítulos
ordenados e inspirados por los principios tutelados propios del derecho laboral.
Entre instituciones que contiene esta ley, encontramos: protección del salario,
jornada de ocho horas diarias y cuarenta y ocho a la semana, descanso
semanal, protección al trabajo de mujeres y menores, protección a la madre
obrera (periodos prenatal y posnatal, inmovilidad, lactancia).

Código De Trabajo. (1947): La revolución de octubre de 1944 margo el régimen


dictatorial de Jorge Ubico y abrió las puertas a una euforia. Se produjo una
apertura democrática, que sirvió de plataforma para la implementación de
instituciones ya vigentes en otras latitudes y largamente añoradas en el país. Se
centraron en el Código de Trabajo y en la implementación del Seguro Social. El
primer código de trabajo, fue el Decreto 330 del Congreso de la República, que
está inspirado en otros códigos de países latinoamericanos, siendo el más cercano
el Código de Trabajo de Costa Rica.

Código De Trabajo. (1961): En mayo de 1961 se emitió el Decreto Número 1441


del Congreso de la República, nomenclatura que corresponde a lo que actualmente
es el Código de trabajo. En realidad, se trata de una superficial reforma del anterior
código, ya que fueron muy pocos los artículos que se modificaron. Este es el código
vigente, no ha sufrido tampoco mayores modificaciones a su texto. Anteriores
modificaciones a las leyes laborales, por lo general, se decretan en cuerpos
separados que se asimilan a la normatividad laboral, pero no se incorporan
formalmente al texto del código. (ejemplos: Aguinaldo, Bono incentivo,
compensación económica y Bono 14).

REFORMA DE 1992 (DECRETO 64-92): En diciembre de 1992 se publicó el


Decreto 64-92 que contiene la reforma de una treintena de artículos del Código,
en los órdenes individual, colectivo, punitivo y procesal.

Es marcada la insistencia a proscribir y sancionar la discriminación en el trabajo, ya


sea por sexo, religión, por educación, etc. El Derecho individual amplia los permisos
y licencias, regula con mayor detalle y amplitud lo relativo a la protección a la
maternidad.
En el campo colectivo brinda mayores facilidades para el registro de sindicatos,
confirma el derecho inamovilidad de trabajadores e incrementa las sanciones para
los casos de despidos no autorizados previamente. En cuanto a lo punitivo se limita
a incrementar las multas para los infractores a las leyes de trabajo. En lo procesal
restringe el empleo de excusas, regula la actuación de los mandatarios en cuanto a
la prueba de confesión judicial. Lo más importante de este aspecto es que reforma
el procedimiento colectivo en el sentido de que el tribunal de conciliación ya no se
mandará a integrar cada vez que se presente un juicio si no que estará integrado
en forma permanente.

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