La planificación fiscal permite establecer la situación tributaria de una entidad para un período determinado o proyecto. Sus objetivos son pagar adecuadamente los impuestos y diferir su pago. Entre sus ventajas están el pago adecuado de impuestos, el diferimiento del pago para obtener financiamiento, y evitar sanciones. Si no hay planificación fiscal, una entidad puede incurrir en sanciones, contingencias fiscales, y riesgos para sus intereses y los de terceros.
La planificación fiscal permite establecer la situación tributaria de una entidad para un período determinado o proyecto. Sus objetivos son pagar adecuadamente los impuestos y diferir su pago. Entre sus ventajas están el pago adecuado de impuestos, el diferimiento del pago para obtener financiamiento, y evitar sanciones. Si no hay planificación fiscal, una entidad puede incurrir en sanciones, contingencias fiscales, y riesgos para sus intereses y los de terceros.
La planificación fiscal permite establecer la situación tributaria de una entidad para un período determinado o proyecto. Sus objetivos son pagar adecuadamente los impuestos y diferir su pago. Entre sus ventajas están el pago adecuado de impuestos, el diferimiento del pago para obtener financiamiento, y evitar sanciones. Si no hay planificación fiscal, una entidad puede incurrir en sanciones, contingencias fiscales, y riesgos para sus intereses y los de terceros.
“La planificación fiscal es una herramienta de gestión sumamente importante para
el manejo económico de cualquier contribuyente y/o agente de retención. Esta herramienta permite establecer en forma previa la situación tributaria de una entidad para un período determinado, para un nuevo proyecto o negocio”.
Objetivos de la planificación fiscal.
• Pagar adecuadamente los impuestos correspondientes. • Diferir el pago de tributos.
Ventajas de la planificación fiscal.
Las principales ventajas de una adecuada planificación fiscal, pueden resumirse en las siguientes: • Pago adecuado de impuestos por la adopción de procedimientos que se señalan en la propia ley o tratamiento preferenciales que se establecen en la misma. • Diferimiento en el pago de los impuestos, lo cual produce un incremento en el efectivo de la empresa, constituyéndose en un verdadero financiamiento para la misma. • Evitar sanciones o recargos, al cumplir adecuadamente con las disposiciones fiscales. Desventajas de no utilizar la planificación fiscal. • Si no hay planificación fiscal, existe el riesgo de caer en contingencias fiscales, que al materializarse podría incurrir la empresa en reparos y sanciones de tipo económico y legal por parte de la Administración Tributaria. • Incurrimiento en sanciones o recargos, por no cumplir adecuadamente con las disposiciones fiscales. • Provocar que la empresa adolezca de contingencias fiscales, que ponga en riesgo los intereses tanto de sus accionistas como de terceros. • Poner en riesgo los gastos reales de la empresa al considerarlos fiscalmente como gastos no deducibles. Metodología para realizar el diagnóstico tributario de un contribuyente.
La elección de mejores escenarios tributarios que los contribuyentes pueden
elegir, no puede concebirse como formas de evasión, sino como alternativas que las mismas leyes tributarias otorgan para que los contribuyentes adecuen su carga fiscal. Un ejemplo clásico de esta planeación es la elección de la forma de pago del impuesto sobre la renta, en virtud que el contribuyente tiene dos opciones de elección:
Régimen Sobre las Utilidades de Actividades Lucrativas (Pagando un
25% sobre la renta imponible, realiza pagos trimestrales de ISR y pagos de ISO).
Régimen Opcional Simplificado sobre Ingresos de las Actividades
Lucrativas (Pagando un 5% en la facturación de hasta Q30mil y un 7% sobre el excedente).