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Enlace Iónico

El enlace iónico o electrovalente consiste en la atracción electrostática entre


partículas con cargas eléctricas de signos contrarios llamados iones.
Este tipo de enlace se manifiesta generalmente entre átomos metálicos y no
metálicos en los que la transferencia de electrones ocurre desde los átomos
metálicos (menos electronegativos) hacia los no metálicos (más
electronegativos).
Propiedades de los compuestos iónicos

 Son enlaces fuertes. La fuerza de esta unión atómica puede ser muy intensa,
por lo que la estructura de estos compuestos tiende a formar redes
cristalinas muy resistentes.
 Suelen ser sólidos. A temperaturas y rangos de presión normales (T=25ºC y
P=1atm), estos compuestos tienen estructura molecular cúbica y rígida, que
forma redes cristalinas que originan sales. También existen líquidos iónicos
denominados “sales derretidas”, que son poco frecuentes, pero sumamente
útiles.
 Poseen un alto punto de fusión y ebullición. Tanto el punto de fusión (entre
300 ºC y 1000 ºC) como el de ebullición de estos compuestos suele ser muy
alto, pues se requieren grandes cantidades de energía para romper la
atracción electrostática entre los iones.
 Solubilidad en agua. La mayoría de las sales son solubles en agua y otras
soluciones acuosas que presenten un dipolo eléctrico (polos positivo y
negativo).
 Conducción eléctrica. En su estado sólido no son buenos conductores
de electricidad, dado que los iones ocupan posiciones muy fijas en una red
cristalina. En cambio, una vez disueltos en agua o en solución acuosa, se
tornan eficaces conductores de la electricidad.
 Selectividad. Los enlaces iónicos pueden darse únicamente entre metales de
los grupos IA y IIA de la Tabla Periódica, y los no metales de los grupos VIA
y VIIA.
Ejemplos de enlace iónico

 Fluoruros (F–). Aniones que forman parte de sales obtenidas a partir del
ácido fluorhídrico (HF). Son empleadas en la fabricación de pastas dentales
y otros insumos odontológicos.
Ejemplos: NaF, KF, LiF, CaF2.
 Sulfatos (SO42-). Aniones que forman parte de sales o ésteres obtenidas a
partir del ácido sulfúrico (H2SO4), cuya unión a un metal tiene aplicaciones
diversas, desde aditivos en la obtención de materiales de construcción, hasta
insumos para radiografías de contraste. Ejemplos: CuSO4, CaSO4, K2SO4.
 Nitratos (NO3–). Aniones que forman parte de sales o ésteres obtenidos del
ácido nítrico (HNO3), empleados en la manufacturación de la pólvora y en
numerosas formulaciones químicas para abonos o fertilizantes.
Ejemplos: AgNO3, KNO3, Mg(NO3)2.
 Mercurio II (Hg2+). Un catión obtenido a partir del mercurio, llamado
también catión mercúricoy que es solo estable en medios de pH ácido (<2).
Los compuestos de mercurio son tóxicos para el organismo humano, por lo
que deben ser manipulados con determinadas precauciones.
Ejemplos: HgCl2, HgCN2.
 Permanganatos (MnO4–). Las sales del ácido permangánico (HMnO4)
poseen un intenso color púrpura y un enorme poder oxidante. Estas
propiedades pueden ser aprovechadas en la síntesis de la sacarina, en el
tratamiento de aguas residuales y en la fabricación de desinfectantes.
Ejemplos: KMnO4, Ca(MnO4)2.

Enlace Covalente
Enlace covalente polar
El enlace covalente polar, a veces llamado enlace polar, es un enlace covalente que
se forma entre átomos de diferentes elementos (nunca se produce entre átomos del
mismo elemento) que tienen una diferencia de electronegatividad mayor a 0.4 y
menor de 1.7 (esta diferencia puede ser variable, en algunos casos se sitúa entre
0.5 y 2).

En el enlace covalente polar los electrones no se comparten por igual entre los dos
átomos, lo que causa que el enlace tenga polaridad y la molécula presente momento
dipolar.
¿Qué elementos forman enlaces polares?

 El enlace covalente polar no se puede formar entre átomos del mismo


elemento, pues los dos tendrían la misma electronegatividad y no se crearía
polaridad en el enlace.
 Tampoco se forma entre dos átomos metálicos. Estos forman otro tipo de
enlace, el enlace metálico.
 Los enlaces covalente polares siempre ocurren entre elementos no metálicos
con una diferencia de electronegatividad suficiente para crear polaridad en
el enlace.
 Por ejemplo, son muy típicos los enlaces covalentes polares entre el
hidrógeno y un elemento no metálico, como el cloruro de hidrógeno (HCl), el
fluoruro de hidrógeno (HF) o el agua (H2O).
 Si la diferencia de electronegatividad es muy alta, por ejemplo, entre un
metal y un no metal, se forman enlaces iónicos.
Ejemplos de enlaces covalentes polares

 La molécula de agua (H2O) es un ejemplo muy típico de enlace covalente


polar. La electronegatividad del oxígeno es 3.44 y la del hidrógeno es 2.20.
La diferencia es de 1.24. En la parte del oxígeno la molécula presenta carga
parcial negativa, mientras que cada uno de los dos átomos de hidrógeno
presenta carga parcial positiva.
 Otros ejemplos serían el amoníaco (NH3), el dióxido de azufre (SO2), el
sulfuro de hidrógeno (H2S) o el etanol (C2H6O), entre otros muchos.

Enlace Covalente no polar


Un enlace covalente no polar, también llamado enlace covalente puro o apolar, es
la unión de dos átomos que comparten uno o más pares de electrones de forma
equitativa. Es decir que los electrones que forman el enlace pasan
aproximadamente la misma cantidad de tiempo cerca de uno de los átomos que
del otro.

Este tipo de enlace se da entre dos átomos iguales (del mismo elemento) o entre
dos átomos diferentes, pero que tengan electronegatividades muy similares.
Características del enlace covalente no polar
1. Se forman entre átomos con electronegatividades iguales o muy similares

Son enlaces covalentes que se forman entre átomos iguales o que tengan
electronegatividades muy similares. En general, un enlace covalente se considera
no polar si la diferencia de electronegatividades es menor o igual a 0,4.
2. Pueden ser simples, dobles o triples
Dependiendo del número de pares de electrones que comparten ambos átomos, los
enlaces covalentes no polares o apolares pueden ser simples, dobles o triples.
Cuando el enlace está formado por un solo par de electrones, se denomina enlace
simple, cuando se comparten dos pares de electrones se denomina enlace doble, y
si se comparten tres pares de electrones se denomina enlace triple.
3. Casi siempre involucran no metales
Los metales son elementos con electronegatividades muy bajas que forman enlaces
metálicos entre sí. Cuando se enlazan con los no metales, siempre forman bien sea
enlaces iónicos o enlaces polares. Por esta razón, los enlaces covalentes no polares
solo se forman entre elementos no metálicos tales como el hidrógeno y el carbono.
4. Dan origen a compuestos apolares

Un compuesto que solo posea enlaces covalentes no polares estará formado por
moléculas apolares. Este tipo de compuestos se caracterizan por poseer puntos de
ebullición y fusión bajos comparados con los metales y los compuestos iónicos
(algunos incluso son gases a temperatura ambiente), son insolubles en agua y son
malos conductores del calor y de la electricidad.
5. Pueden formar compuestos sólidos, líquidos o gaseosos a temperatura ambiente
Debido a que los compuestos con enlaces covalentes no polares pueden tener
puntos de ebullición y fusión bajos pero muy variados, algunos de ellos son gases
a temperatura ambiente (como el hidrógeno, H2, y el nitrógeno, N2, por ejemplo),
otros son líquidos (como el bromo, Br2), mientras que otros son sólidos (como el
naftaleno, C10H8).
6. Poseen energías de enlace relativamente bajas.

Comparados con los enlaces iónicos, los enlaces covalentes no polares son más
fáciles de romper, ya que tienen una menor energía de enlace. Esto quiere decir
que hay que utilizar menos energía para romper un enlace covalente no polar que
un enlace iónico.
Ejemplos de enlaces covalentes no polares

 Enlace H-H en la molécula de hidrógeno (H2): En la molécula de hidrógeno,


H2, dos átomos de hidrógeno comparten sus únicos electrones de valencia
para formar un enlace covalente simple.
 Enlace F-F en la molécula de flúor (F2): Este ejemplo resalta el hecho de que
no importa la electronegatividad de un átomo sino la diferencia de
electronegatividades de los dos átomos que forman un enlace para saber si
el enlace será covalente no polar o no.

Enlace Covalente Coordinado


Un enlace covalente coordinado o enlace de coordinación es un tipo de enlace en el
cual uno de los átomos unidos suministra todos los electrones compartidos.
En un enlace covalente simple, cada átomo suministra un electrón al enlace. Por
otro lado, se tiene que, en un enlace de coordinación, los átomos que donan el
electrón para formar un enlace se llaman átomo dador, mientras que el átomo que
acepta el par de electrones para unirse se llama átomo aceptor (Clark, 2012).

Un enlace de coordinación está representado por una flecha que parte de los
átomos dadores y termina en el átomo aceptor. En algunos casos el donante puede
ser una molécula.
Ejemplos de enlaces covalentes coordinados

 El ejemplo más común de un enlace de coordinación es el ion amonio, el


cual está formado por la combinación de una molécula de amoniaco y un
protón proveniente de un ácido. En el amoníaco, el átomo de nitrógeno tiene
un par solitario de electrones después de completar su octeto. Dona este par
solitario al ion de hidrógeno, así el átomo de nitrógeno se convierte en
donante. El átomo de hidrógeno se convierte en el aceptor (Schiller, S.F.).
 Otro ejemplo común de enlace dativo es la formación del ion hidronio. Al
igual que con el ion amonio, el par de electrones libre de la molécula de agua
sirve como dador al protón que es el aceptor.

Enlace Metálico
Los enlaces metálicos son, como su nombre lo indica, un tipo de unión química
que se produce únicamente entre los átomos de un mismo elemento metálico.
Gracias a este tipo de enlace los metales logran estructuras moleculares
sumamente compactas, sólidas y resistentes, dado que los núcleos de sus átomos
se juntan a tal extremo, que comparten sus electrones de valencia.
Propiedades de un enlace metálico

 A los enlaces metálicos se deben muchas de las propiedades típicas de los


metales, como su solidez, su dureza, e incluso su maleabilidad y ductilidad.
La buena conducción del calor y de la electricidad de los metales, de hecho,
se debe a la disposición particular de los electrones en forma de nube
alrededor de los núcleos, lo que permite su movilidad a lo largo y ancho del
conjunto. Incluso el lustre de los metales se debe a ello, pues este tipo de
enlace repele casi toda la energía lumínica que los impacta, es decir, brillan.
 Los átomos unidos mediante enlaces metálicos suelen, además, organizarse
en estructuras hexagonales, cúbicas, o de forma geométrica concreta. La
única excepción es la del mercurio, que, a pesar de ser un metal, es líquido
a temperatura ambiente y forma de gotas perfectamente redondas y
brillantes.
Ejemplos de enlace metálico
Los enlaces metálicos son la base del mundo de los metales, por lo que cualquier
elemento metálico puro es perfecto ejemplo de ello. Es decir, cualquier fragmento
puro de: plata (Ag), oro (Au), cadmio (Cd), hierro (Fe), níquel (Ni), zinc (Zn), cobre
(Cu), platino (Pt), aluminio (Al), galio (Ga), titanio (Ti), paladio (Pd), plomo (Pb), iridio
(Ir) o cobalto (Co), siempre que no se encuentre mezclado con otros metales y
elementos, se mantendrá unido mediante enlaces metálicos.

Fuerzas Intermoleculares
Puente de Hidrogeno
Los puentes de hidrógeno constituyen un caso especial de interacción dipolo-
dipolo. Se producen cuando un átomo de hidrógeno está unido covalentemente a
un elemento que sea:

 muy electronegativo y con dobletes electrónicos sin compartir.


 de muy pequeño tamaño y capaz, por tanto, de aproximarse al núcleo del
hidrógeno.
Estas condiciones se cumplen en el caso de los átomos de F, O y N.

El enlace que forman con el hidrógeno es muy polar y el átomo de hidrógeno es un


centro de cargas positivas que será atraído hacia los pares de electrones sin
compartir de los átomos electronegativos de otras moléculas (Figura de la
izquierda). Se trata de un enlace débil (entre 2 y 10 Kcal/mol). Sin embargo, como
son muy abundantes, su contribución a la cohesión entre biomoléculas es grande.
La distancia entre los átomos electronegativos unidos mediante un puente de
hidrógeno suele ser de unos 3 Å. El hidrógeno se sitúa a 1Å del átomo al que está
covalentemente unido y a 2 Å del que cede sus e- no apareados.
Este enlace es fundamental en bioquímica, ya que:
 condiciona en gran medida la estructura espacial de las proteínas y de los
ácidos nucleicos y
 está presente en gran parte de las interacciones que tienen lugar entre
distintos tipos de biomoléculas en multitud de procesos fundamentales para
los seres vivos.

Fuerzas de Van der Waals


Cuando se encuentran a una distancia moderada, las moléculas se atraen entre sí,
pero, cuando sus nubes electrónicas empiezan a solaparse, las moléculas se
repelen con fuerza.

El término "fuerzas de van der Waals" engloba colectivamente a las fuerzas de


atracción entre las moléculas. Son fuerzas de atracción débiles que se establecen
entre moléculas eléctricamente neutras (tanto polares como no polares), pero son
muy numerosas y desempeñan un papel fundamental en multitud de procesos
biológicos.
Las fuerzas de van der Waals incluyen:

 Fuerzas dipolo-dipolo (también llamadas fuerzas de Keesom), entre las que


se incluyen los puentes de hidrógeno.
 Fuerzas dipolo-dipolo inducido (también llamadas fuerzas de Debye).
 Fuerzas dipolo instantáneo-dipolo inducido (también llamadas fuerzas de
dispersión o fuerzas de London).

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