Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
MATRÍCULA:
20-SPSS-6-058
SECCIÓN:
861
MATERIA:
Optativa I
DOCENTE:
DILENIA NUÑEZ
TEMA:
La Cultura
CIUDAD:
SANTO DOMINGO. REP. DOM.
FECHA:
6/02/2022
Tema 3: Cultura
Definición
El término cultura tiene muchos significados interrelacionados, es decir, es un
término polisémico. Por ejemplo, en 1952, Alfred Kroeber y Clyde
Kluckhohn recopilaron una lista de 164 definiciones de cultura en Cultura: una reseña
crítica de conceptos y definiciones, y han clasificado más de 250 distintas.3En el uso
cotidiano, la palabra cultura se emplea para dos conceptos diferentes:
Excelencia en el gusto por las bellas artes y las humanidades, también conocida
como alta cultura.
Cultura y sociedad
Es importante diferenciar entre dos conceptos complementarios e interdependientes:
Sociedad y Cultura.
La sociedad es el conjunto de relaciones sociales que se dan en un hábitat y la cultura
es lo que da forma y envuelve a esa sociedad.
En una cultura, se pueden mover diferentes criterios, dentro de cada contexto social
pueden ser importante unos valores más que otros. La adaptación a la cultura y a los
valores de una determinada sociedad dependerá de las circunstancias
socioeconómicas y personales de cada individuo o grupo social.
La cultura es un constructor social, y por los tanto también cambian los hábitos que se
constituyen como pautas culturales y socialmente aceptadas. Los comportamientos
más o menos saludables adquieren diferente dimensión en función de la trascendencia
social que tengan en un momento determinado. La educación para la salud es
fundamental en las sociedades para:
Los estilos de vida no pueden obviarse a la hora de tomar decisiones sobre la salud de
la población.
La propia percepción del paciente sobre su salud debe tenerse en cuenta. Es el
componente subjetivo de la salud.
La relación cultura – salud es compleja y constituye todo un reto para las sociedades:
cómo entendemos la salud desde las diferentes culturas que conviven en un territorio,
cómo entendemos la enfermedad, qué valor se le da a las conductas saludables, qué
significan para nosotros los riesgos para la salud, etc.
Comunicación simbólica
La comunicación simbólica es una de las principales condiciones en los procesos de
socialización del hombre, esta comunicación no verbal la cual nos ayuda a comprender
ideas u objetos que un individuo quiere comunicarnos mediante conceptos establecidos
mutuamente y que todos los individuos que componen un mismo tipo de cultura
también lo entenderían.
Los ejemplos universales son varios, entre ellos los que más se destacan son el
lenguaje de las personas sordomudas, que mediante gestos corporales (manos) dan a
entender lo que quieren comunicar a otro individuo u otro también muy conocido es el
del código morse el cual es un sistema de comunicación por medio de telégrafos.
La comunicación simbólica de cada cultura es diferente, en algunas su forma de vestir,
la apariencia física, etc., dan a comunicar conceptos adoptados por su cultura, los
cuales sin necesidad de expresarlo verbalmente ya se entiende el porqué. Un ejemplo
claro es el del punto rojo en la frente de algunas mujeres de la cultura hindú, el cual
indica que la mujer que lo lleve puesto está comprometida en matrimonio.
Un ejemplo de comunicación nuestra cultura son los iconos de whatsapp, más
conocidos como emojins que significan imagen (e) + carácter (moji), utilizados en redes
sociales y en los chats de comunicación telefónica, que con el avance de la tecnología
cada vez son más utilizados, los cuales en una conversación digital donde un individuo
no puede ver al otro físicamente con el que se está comunicando, la correcta aplicación
de uno de estos emoticones pueden dar a entender fácilmente a la otra persona la
expresión de sentimientos, ideas o saludos. Estos cada vez son más precisos, con las
actualizaciones que el sistema aplica, los que hace que las comunicaciones sean cada
vez más similares a una conversación sin necesidad de hablar ni de escribir.
Normas culturales
Las normas culturales que se refieren a cuándo y cómo mantener relaciones sexuales,
qué roles se supone que desempeñan hombres y mujeres en la sociedad y cómo se
forman las familias están muy influidas por la religión y la historia, entre otras cosas.
Las imágenes de los medios de comunicación, el arte y la música se basan con
frecuencia en estereotipos de género y alimentan las expectativas sobre el
comportamiento de una persona, incluido el sexual. Piensen en las historias con las
que crecieron: ¿Cómo se solían comportar los hombres? ¿Algunas formas de ser
hombre o mujer se consideraban “buenas” o “acertadas” y otras no? Esas historias
contribuyen a establecer una norma sobre cómo se supone que debe ser nuestra
conducta.
La cultura y las normas culturales son esenciales para la forma en que las sociedades
crean y restringen las identidades sexuales y de género de las personas. Las culturas
se componen de valores y creencias compartidos y las normas culturales son una serie
de creencias sobre lo que es “normal” o adecuado para esa sociedad. Muchas
personas dan por supuesto que las normas culturales y las tradiciones son “como han
sido siempre las cosas”, sin cuestionarse cómo ha desarrollado su cultura o su
sociedad esa norma concreta. Sin embargo, las culturas evolucionan y cambian, crecen
con el tiempo para adaptarse a los cambios de la comunidad, adoptando nuevas
influencias e incorporándolas a las historias que utilizan las personas para
comprenderse a sí mismas y a quienes las rodean.
La organización de la cultura
Es el conjunto de percepciones, sentimientos, actitudes, hábitos, creencias, valores,
tradiciones y formas de interacción dentro y entre los grupos existentes en todas las
organizaciones. La cultura organizativa puede facilitar la implantación de la estrategia si
existe una fuerte coherencia entre ambas o, por el contrario, impedir o retrasar su
puesta en práctica. Si aceptamos la premisa de que la estrategia empresarial, además
de conducir a la empresa hacia la realización de determinado objetivo económicos, le
sirve de guía en su constante búsqueda para mejorar su funcionamiento, se puede
deducir, por tanto, que la cultura puede influir, y de hecho influye, sobre los resultados
de la actividad de la empresa
Etnocentrismo
Es un estimativo ideológico a través del cual el individuo analiza el mundo de acuerdo
con los parámetros de su propia realidad. Es un concepto elaborado por la antropología
para mencionar la tendencia que lleva a una persona o grupo social a interpretar la
realidad a partir de sus propios parámetros culturales.1 El etnocentrismo suele implicar
la creencia de que el grupo étnico propio es el más importante, o que algunos o todos
los aspectos de la cultura propia sean superiores a los de otras culturas. Este hecho se
refleja por ejemplo en los exónimos peyorativos que se dan a otros grupos y en
los autónimos positivos que el grupo se aplica a sí mismo. Dentro de esta ideología,
los individuos juzgan a otros grupos en relación con su propia cultura o grupo particular,
especialmente en lo referido a la lengua, las costumbres, los comportamientos,
la religión o las creencias. Dichas diferencias suelen ser las que establecen la identidad
cultural. El etnocentrismo se da en muchas culturas, y es un sesgo cognitivo bien
descrito en la psicología social. Antropólogos como Franz Boas y Bronisław
Malinowski plantean que todas las ciencias deben trascender el etnocentrismo propio
del científico como individuo. Boas desarrolló el principio del relativismo cultural y
Malinowski el del funcionalismo como guías para producir estudios no etnocéntricos de
las diversas culturas. Los libros The Sexual Life of Savages de Malinowski, Patterns of
Culture de Ruth Benedict y Coming of Age in Samoa de Margaret Mead son ejemplos
clásicos de antropología no etnocentrista.
Personalidad y etnocentrismo
El etnocentrismo es un concepto relacionado con una comunidad, una
sociedad mientras que personalidad se vincula a lo individual (a la
persona, valga la redundancia). El etnocentrismo es la creencia de la
supremacía de una cultura sobre otra.
Se relaciona frecuentemente con la incapacidad de asimilar la nueva
cultura, creando dificultades en saber que es apropiado y que no.
Frecuentemente se combina con un fuerte rechazo (moral o estético) a
ciertos aspectos de la cultura ajena.
Relativismo cultural
Es una corriente antropológica que surgió en el siglo XX. Como una propuesta del
antropólogo Franz Boas; él redefinió la antropología y el concepto de cultura de ese
tiempo, que estaba fuertemente marcada por la corriente Darwiniana.
El relativismo cultural hace crítica al Evolucionismo y más en específico al concepto
de raza como parámetro para evaluar o determinar la vida cultural de una comunidad.
En cambio se decía que cada cultura debía ser estudiada o interpretada desde sus
propias creencias, valores, prácticas, hábitos, etcétera.
El relativismo defiende la validez y riqueza de todo sistema cultural y niega cualquier
valoración absolutista moral o ética de los mismos. Se opone al etnocentrismo y
al universalismo cultural —de carácter positivista— que afirma la existencia de valores,
juicios morales y comportamientos con valor absoluto y de carácter universal.
Esto significa que el relativismo cultural conlleva a considerar cualquier aspecto de otra
sociedad o grupo en relación con los estándares culturales de ese grupo, en vez de
hacerlo desde un punto de vista considerado universal, o en relación a la valoración
desde otras culturas. Por ejemplo, considera relativas a cada sistema cultural las
diferentes formas de matrimonio, como la poligamia o la poliandria. Según esta
corriente de pensamiento todas las culturas tendrían igual valor, y ninguna sería
superior a otra pues todos los valores son considerados relativos.
El relativismo define la cultura como la totalidad de las reacciones y actividades
mentales y físicas que caracterizan la conducta de los individuos componentes de un
grupo social, colectiva e individualmente, en relación a su ambiente natural, a otros
grupos, a miembros del mismo grupo y de cada individuo hacia sí mismo.
Shock cultural
Es una experiencia que una persona puede tener cuando se traslada a un entorno
cultural que es diferente del propio; también es la desorientación personal que una
persona puede sentir al experimentar una forma de vida desconocida debido a la
inmigración o una visita a un nuevo país, un cambio entre entornos sociales o
simplemente la transición a otro tipo de vida.1 Una de las causas más comunes de
choque cultural involucra a personas en un ambiente extraño. El choque cultural puede
describirse como consistente en al menos una de cuatro fases distintas: luna de miel,
transición, ajuste y adaptación.
Los problemas comunes incluyen: sobrecarga de información, barrera del
idioma, brecha generacional, brecha tecnológica, interdependencia de habilidades,
dependencia de formulación, nostalgia (cultural), aburrimiento (dependencia laboral),
capacidad de respuesta (conjunto de habilidades culturales).2 No hay una manera
verdadera de prevenir por completo el choque cultural, ya que los individuos en
cualquier sociedad se ven personalmente afectados por los contrastes culturales de
manera diferente.3
Cambio cultural
Es un término utilizado en la formulación de políticas públicas, que enfatiza la influencia
del capital cultural en el comportamiento individual y comunitario. A veces también se le
ha llamado 'Reposicionamiento de la cultura', lo que significa la reconstrucción del
concepto cultural de una sociedad.12 Se hace hincapié en los determinantes del capital
social y cultural de la toma de decisiones y en la forma en que éstas interactúan con
otros factores como la disponibilidad de información o los incentivos financieros a los
que se enfrentan las personas para impulsar el comportamiento.
Estas influencias del capital cultural incluyen el papel de los padres, las familias y los
asociados cercanos; organizaciones tales como escuelas y lugares de trabajo;
comunidades y vecindarios; e influencias sociales más amplias tales como los medios
de comunicación. Se argumenta que este capital cultural se manifiesta en valores
específicos, actitudes o normas sociales que a su vez guían las intenciones de
comportamiento que los individuos adoptan con respecto a determinadas decisiones o
líneas de acción. Estas intenciones de comportamiento interactúan con otros factores
que impulsan el comportamiento, como los incentivos financieros, la regulación y la
legislación, o los niveles de información, para impulsar el comportamiento real y, en
última instancia, retroalimentar el capital cultural subyacente.
En general, los estereotipos culturales presentan una gran resistencia al cambio y a su
propia redefinición. La cultura, a menudo aparece fija al observador en cualquier punto
en el tiempo porque las mutaciones culturales ocurren de manera incremental.3 El
cambio cultural es un proceso a largo plazo. Los responsables políticos deben hacer un
gran esfuerzo para mejorar algunos aspectos básicos de los rasgos culturales de una
sociedad.
Aculturación
Se refiere al resultado de un proceso en el cual una persona o un grupo de ellas
adquieren una nueva cultura (o aspectos de la misma). Los individuos se adaptan, es
decir se a culturan, incorporando elementos de otra cultura.1 Una de las causas
externas tradicionales ha sido la colonización.
En la aculturación intervienen diferentes niveles de destrucción, supervivencia,
dominación, resistencia, soporte, modificación y adaptación de las culturas nativas tras
el contacto culturalmente.
La definición tradicional diferencia a veces entre aculturación por un individuo
(transfiguración) y por un grupo, generalmente grande.
Las definiciones viejas y nuevas tienen una frontera borrosa en las
sociedades multilaterales modernas, en las que los hijos de familias inmigrantes
pueden ser motivados a adquirir la cultura dominante, pero también la familiar,
considerando a cualquiera de las dos como la extranjera, cuando ambas son parte del
desarrollo infantil.