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Evaluación Primaria

 Es una aproxima- ció n estructurada e indiferenciada al paciente con


patología aguda potencialmente grave
que permite la pesquisa oportuna y el
tratamiento de aquellas condiciones que
ponen en riesgo la vida o funcionalidad
de los enfermos.
Los componentes de la valoració n
primaria son:
 A – Airway (vía aérea)
 B – Breathing (respiració n)
 C – Circulation (circulació n)
 D – Disability (déficit neuroló gico)
 E – Exposure (exposició n)

Vía Aérea
A través de las vías aéreas el aire circula en direcció n a los pulmones
y es en estos ó rganos donde se realiza el intercambio de gases.

Causas del compromiso de la vía aérea


 inflamació n.
 neoplasias.
 estenosis cicatricial.
 hipotonía de los mú sculos faríngeos durante el sueñ o.
 cuerpo extrañ o.
 pará lisis de cuerdas vocales.
 compresió n extrínseca.

Evaluación de la vía aérea


La evaluació n de la vía aérea permite
anticipar la intubació n difícil en un buen
porcentaje de los casos, lo que resulta
ú til a la hora de manejar pacientes de
riesgo.
Tratamiento de la vía aérea
 Ventilació n con mascarilla facial (con
o sin cá nula orofaríngea).
 Mascarilla laríngea clá sica o tubo
laríngeo.
 Intubació n endotraqueal vía oral.
Manejo avanzado de la vía aérea
El manejo de la vía aérea es uno de los elementos fundamentales en el
cuidado de los pacientes. No solamente los especialistas deben conocerlo
y requiere de un entrenamiento continuo. En este artículo se revisará n
los elementos má s importantes en relació n a la anatomía de la vía aérea,
su evaluació n, y las técnicas bá sicas y avanzadas utilizadas para su
manejo adecuado. Se propone la creació n de algoritmos locales y
disponer de un carro de intubació n difícil.
Anatomía de la vía aérea
Para poder realizar un manejo adecuado de la vía aérea, debemos
conocer algunas nociones bá sicas de la anatomía de ella. Es posible
identificar las principales estructuras que la conforman. El camino que
recorre el aire desde el medio ambiente para llegar a los pulmones
habitualmente es: cavidad nasal (ocasionalmente cavidad oral),
nasofaringe, orofaringe, laringe, (pasando a través de las cuerdas
vocales) y trá quea.

Respiración
É sta consiste en la expulsió n de gases de los pulmones. Durante la
inspiració n, los mú sculos intercostales y el diafragma se contraen,
permitiendo que el aire penetre en los pulmones. Durante la expiració n,
los mú sculos utilizados para la inspiració n se relajan haciendo que los
gases sean expulsados de los pulmones.

Propósito
 Mantener suficiente oxigenació n y ventilació n.

 Escuche los sonidos respiratorios


Inspección

 ↑ esfuerzo necesario para respirar


 Ingurgitació n yugular
 Auscultació n: ↓ entrada de aire durante la auscultació n
 Palpació n: desplazamiento traqueal, enfisema subcutá neo, segmentos
inestables

Circulación
Es el movimiento continuo de la sangre en el cuerpo del ser vivo.

 La circulació n sanguínea en el cuerpo humano.


 La circulació n de células tumorales en el proceso de metá stasis
tumoral.
 La circulació n termohalina de las masas de agua.
 Al movimiento del aire (ver Circulació n atmosférica)
 Al trá fico vehicular (ver Trá nsito vehicular)
 La circulació n del agua en las plantas.
 La circulació n de energía (ver Circulador)
 La libertad de circulació n.
 En Física y Matemá ticas, a la circulació n de un campo vectorial a lo
largo de un camino, también conocida como integral de línea.
 La tirada de un perió dico o revista, también denominada "tiraje" o
"circulació n".
Evaluación del déficit neurológico

Se emplea la técnica de la observació n permanente desde que el individuo


entra a la consulta o desde que se lo identifica en la unidad. Si el
paciente se encuentra hospitalizado, el examinador debe tener una gran
capacidad de observació n.

El siguiente paso es la valoració n de la capacidad intelectual, considerada


"como la capacidad de hacer abstracció n, de usar símbolos y de valorar
nuevas experiencias a la luz de experiencias pasadas"3. Esta valoració n
necesariamente lleva a hacer un aná lisis del mecanismo de enfrentamiento,
el subsistema cognitivo, para lo cual se valoran:

 La orientación. que depende de la memoria y la atenció n. Se debe


indagar si el paciente sabe quién es él, cuá l es la fecha o día en que
está y dó nde se encuentra.

 La atención. Se observa la capacidad del paciente de concentrarse


en una actividad o tarea, o el hecho de responder a las preguntas
del entrevistador.

 La memoria. Se evalú a el registro mental reciente o remoto; debe


describir hechos histó ricos recientes y también hechos histó ricos o
relevantes pasados.

 El pensamiento. Se valora la secuencia ló gica, coherente y


relevante del individuo al dirigirse a un objeto seleccionado; por
ejemplo, con la pregunta ¿qué observa en el cuadro?

 El afecto. Es un sentimiento que se puede observar de inmediato


en el paciente, como un episodio de llanto o de risa.

 El cálculo. Se valora la capacidad de hacer cá lculos matemá ticos,


como sumas o en su defecto identificando billetes.

 El juicio. Se mide la capacidad de abstracció n o de interpretació n


pidiéndole que interprete, por ejemplo, un refrá n.

 Y, finalmente, el lenguaje. Este debe ser comprensible y


coherente; también se evalú a la forma de pronunciar las palabras.

Con esto concluye la primera parte de la valoració n neuroló gica.

El segundo paso consiste en la valoració n de los pares craneales, donde


ademá s se involucra a los ó rganos de los sentidos. Algunos de estos pares
craneales son sensitivos, otros motores y otros mixtos. Por lo tanto, de la
valoració n correcta de cada uno depende la identificació n de las respuestas
tanto efectivas como inefectivas del individuo.

En el tercer paso se valoran:

 La función motriz, que es definida como la organizació n neuroló gica


del movimiento e involucra la movilidad física, la marcha, la
coordinació n de todos los movimientos del individuo y el
sincronismo.

 La fuerza muscular, que va de ausencia completa de fuerza a fuerza


normal (de 0 a 5).

 El tono muscular, que se puede apreciar observando la actitud del


paciente en el lecho o en la forma de manipular elementos, en la
posició n de las extremidades, en el relieve de las masas musculares,
en la consistencia de los mú sculos al palparlos y en la resistencia que
estos presentan a los movimientos; las respuestas pueden ser la
hipotonía o la hipertonía.

 El trofismo muscular, observable en el desarrollo muscular. La


mejor manera de descubrir su disminució n o aumento es midiendo
simétricamente los mú sculos de las extremidades, sin olvidar que hay
mayor desarrollo de los mú sculos del hemisferio dominante,
dependiendo de si el individuo es diestro o zurdo; la diferencia no
debe ser mayor de un centímetro.

 La coordinación o adecuada utilizació n de las vías motrices y


sensitivas, que depende del buen funcionamiento del cerebelo y el
aparato vestibular. La valoració n de la coordinació n, segú n Callista
Roy, se hace má s minuciosa en las funciones de actividad y descanso.

 Los reflejos, que son la respuesta motriz involuntaria desencadenada


por un estímulo sensorial específico. Entre estos tenemos los
tendinomusculares, consistentes en el estiramiento brusco de un
mú sculo, que se obtiene golpeando el tendó n del mú sculo cerca de su
inserció n; la respuesta es el rá pido movimiento de la parte del cuerpo
accionada. Su valoració n se representa por medio de cruces, que van
desde reflejo ausente (cero cruces) hasta reflejo hiperactivo "clonus"
(cuatro cruces).
Tétanos

Infecció n bacteriana grave que


ocasiona espasmos musculares
dolorosos y puede provocar la
muerte.
El tétano es una infecció n
bacteriana potencialmente mortal
que afecta a los nervios. Una
vacuna puede prevenir fá cilmente
esta enfermedad que no tiene cura.
El tétano ocasiona contracciones musculares dolorosas, especialmente en la
mandíbula y el cuello. Puede interferir en la respiració n y, finalmente, causar
la muerte.
El objetivo del tratamiento es controlar las complicaciones.
Causas

La bacteria que causa el tétanos se llama Clostridium tetani. La bacteria


puede sobrevivir en estado latente en la tierra y en las heces de los animales.
Esencialmente, se vuelve inactiva hasta que descubre un lugar para
desarrollarse.

Cuando las bacterias latentes entran en una herida, una buena condició n
para el crecimiento, las células se "despiertan". A medida que crecen y se
dividen, liberan una toxina llamada tetanospasmina. La toxina afecta los
nervios del cuerpo que controlan los mú sculos.
Síntomas

El tiempo promedio de infecció n para que aparezcan signos y síntomas


(período de incubació n) es de 10 días. El período de incubació n puede variar
de 3 a 21 días.

El tipo má s comú n de tétanos se denomina tétanos generalizado. Los signos


y síntomas comienzan progresivamente y luego empeoran cada vez má s a lo
largo de dos semanas. Generalmente comienzan en la mandíbula y avanzan
hacia abajo en el cuerpo.
Algunos signos y síntomas del tétanos generalizado son:

 Espasmos musculares dolorosos y mú sculos rígidos y que no se


pueden mover (rigidez muscular) en la mandíbula
 Tensió n de los mú sculos alrededor de los labios, que a veces causa
una mueca persistente
 Espasmos dolorosos y rigidez en los mú sculos del cuello
 Dificultad para tragar
 Mú sculos abdominales rígidos
El avance del tétanos resulta en
espasmos repetidos dolorosos y
parecidos a una convulsió n que
duran varios minutos (espasmos
generalizados). Por lo general, el
cuello y la espalda se arquean y las
piernas se tornan rígidos, los brazos
se flexionan y se llevan hacia el cuerpo, y se contraen los puñ os. La rigidez
muscular en el cuello y el abdomen puede causar dificultades respiratorias.
Estos espasmos graves pueden desencadenarse por eventos menores que
estimulan los sentidos: un sonido fuerte, el contacto físico, una corriente de
aire o la luz.
A medida que la enfermedad avanza, otros signos y síntomas pueden ser:

 Presió n arterial alta


 Presió n arterial baja
 Frecuencia cardíaca acelerada
 Fiebre
 Sudoració n extrema
Factores de riesgo

El mayor factor de riesgo de infecció n por tétanos es no estar vacunado o no


estar al día con las vacunas de refuerzo de los 10 añ os.

Otros factores que aumentan el riesgo de infecció n por tétanos son:

 Cortes o heridas expuestas al suelo o al estiércol


 Un cuerpo extrañ o en la herida, como un clavo o una astilla
 Antecedentes de afecciones inmunodepresoras
 Lesiones en la piel infectadas en personas con diabetes
 Un cordó n umbilical infectado cuando la madre no está totalmente
vacunada
 Agujas compartidas e insalubres para el consumo de sustancias
ilegales
Complicaciones

Entre las complicaciones de una infecció n por tétanos se incluyen las


siguientes:

 Problemas respiratorios. Pueden producirse problemas


respiratorios potencialmente mortales por la tensió n de las cuerdas
vocales y la rigidez muscular en el cuello y el abdomen, especialmente
durante un espasmo generalizado.
 Obstrucción de una arteria del pulmón (embolia pulmonar). Un
coá gulo de sangre que ha viajado desde otra parte del cuerpo puede
bloquear la arteria principal del pulmó n o una de sus ramas.
 Neumonía. Una infecció n pulmonar causada por la inhalació n
accidental de algo en los pulmones (neumonía por aspiració n) puede
ser una complicació n de los espasmos generalizados.
 Fractura de huesos. Los espasmos generalizados pueden provocar
fracturas de la columna vertebral o de otros huesos.
 Muerte. La muerte por tétanos suele ser consecuencia de la
obstrucció n de las vías respiratorias durante los espasmos o por
dañ os en los nervios que regulan la respiració n, el ritmo cardíaco u
otras funciones de los ó rganos.
Prevención

Puedes prevenir el tétanos aplicá ndote una vacuna.

Vacunació n para los niñ os

En general, la vacuna contra el


tétanos se aplica a niñ os como
parte de la vacuna antidiftérica,
antitetá nica y contra la tos ferina
acelular (DTaP). La difteria es una
infecció n bacteriana grave en la
nariz y la garganta. La tos ferina
acelular, también llamada tos
convulsa, es una infecció n respiratoria muy contagiosa.

Los niñ os que no toleran la vacuna de la tos ferina pueden recibir la vacuna
alternativa llamada DT.

La vacuna DTaP es una serie de cinco inyecciones que, por lo general, se


administran en el brazo o el muslo, a niñ os de las siguientes edades:

 2 meses
 4 meses
 6 meses
 15 a 18 meses
 4 a 6 añ os
Vacunació n para niñ os de 7 a 18 añ os

Se recomienda una vacuna de refuerzo para los niñ os de 11 o 12 añ os. Este


refuerzo se llama vacuna Tdap. Si tu hijo no recibió la vacuna de refuerzo a
esta edad, habla con tu médico acerca de las opciones adecuadas.

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