Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Víctima
: Delito:
Seguido contra:
Abogado defensor:
Jueces:
20/2021
104102092000062
Ministerio Público, Abg. Abraham Maika Rojas Catacora,
Fiscal de Materia; DNA-SLIM del GAM de Padilla, Lic. Villma
Montero Gonzales. L.M.R.C., menor de edad.
Violación con agrávate, articulo 308 con relación al art. 310 inc.
I) del Código Penal Boliviano. NERY RODAS RUIZ Lic. Ricardo
Barrientos
MSc. Ronald Joaquín Gantier Pérez Lic. Offman Alfredo Padilla Blacutt Lic.
Armin Ciro Copa García
SENTENCIA N° 05/2022
1
CONSIDERANDO I:
2
.
Que, convocado a declarar en estrados y advertido de sus derechos y garantías
constitucionales, entre ellos el de abstención a declarar, presunción de inocencia y
prohibición de autoincriminación, el acusado Cristian Fuentes Martínez afirmó que
quería declarar y prestó su declaración en juicio; declaración que a efectos de una
mejor exposición y valoración será desarrollada en el acápite III de producción
probatoria.
CONSIDERANDO II
1
111.1.- PRUEBA DE CARGO
La autoridad policial afirma que a horas 14:50 del día viernes 27 de noviembre de 2020,
recibió una llamada vía celular de la Sra. Violet Vega Salas de 28 años de edad quien
le habría indicado sobre un presunto hecho de violación a una menor. Refiere que junto
a personal policial se constituyeron en la calle Ayacucho N° 05, a objeto de verificar el
hecho y se comunicó con la responsable de la DNA. Una vez en el lugar refiere haber
tomado contacto con la Sra. Violet Vega Salas, vecina del lugar quien les manifestó que
su vecina menor de edad de iniciales L.M.R.C. fue víctima de violación por parte de una
persona en estado de ebriedad. Refiere que se observó la presencia de una menor de
la menor de edad en su domicilio llorando y con algunos rasgos de violencia, misma
que en el momento fue asistida por la representación de la defensoría quien se hizo
cargo de la misma. Posteriormente por indicación de la menor se constituyeron en el
domicilio del presunto agresor en calle Calama N° 25 y previa autorización de la esposa
del mismo y propietaria se procedió a detenerlo en calidad de arrestado para fines de
investigación e informaron al entonces Fiscal de materia Dr. Roberto Maidana Echalar
quien les indicó que en próximas horas emanaría la Orden de Aprehensión del
imputado por el delito de Violación agravada seguido de oficio por la DNA de Padilla.
2
cual acredita el examen médico de la paciente L.M.R.C. de 15 años de edad, soltera,
con C.l. 1277771, previo consentimiento informado de Yovana Flores Soliz, responsable
de la DNA de Padilla.
Este certificado en el apartado "Breve relato del hecho" refiere que la víctima relata que
se encontraba en su domicilio al cuidado de su bebé; de repente, el agresor quien es su
vecino ingresa a su domicilio en estado de ebriedad y provoca forcejeo con la víctima,
con un golpe brusco la empuja a la cama donde tapa su boca le agarra de las manos y
procede a la agresión sexual.
Esta prueba es importante para establecer que la menor L.M.R.C. luego del
examen físico clínico presenta en Región Lumbar: "Con leve dolor por contusión (golpe
sobre objeto duro-cama); Himen: "Semilunar, con desgarro completo antiguo en horas 5
y 7, ahora con pequeña laceración a horas 7. Escaso flujo amarillento no fétido"y como
impresión diagnóstica se concluye la existencia de Agresión sexual. De otro lado, el
relato del hecho efectuado por L.M.R.C que integra éste Certificado Único para casos
de violencia en el marco de la Ley 348 (en el que afrima que se encontraba en su
domicilio al cuidado de su bebé y de repente el agresor quien es su vecino ingresa a su
domicilio en estado de ebriedad y provoca forcejeo con la víctima, con un golpe brusco
la empuja a la cama donde tapa su boca le agarra de las manos y procede a la
agresión sexual), es coherente y concordante con las declaraciones de la presunta
víctima (MP- PD-4 Entrevista Psicológica de 27 de noviembre de 2020; la deposición
testifical de cargo de L.M.R.C., y la Prueba Pericial cursante en el apartado III.
1.D). El Tribunal establece que tiene valor probatorio para corroborar las declaraciones
de la víctima respecto de la existencia de una relación sexual no consentida, como fue
la producida el 27 de noviembre de 2020, sin que esa conclusión haya sido desvirtuada
por la defensa, emergente también de la valoración de otras pruebas de cargo con
relación a la existencia del hecho y la responsabilidad del autor. El Tribunal le asigna fe
de probanza conformidad con el artículo 216, 333-3) con relación al 173 del Código de
Procedimiento Penal.
3
En el desarrollo de la entrevista la menor afirma que antes estudiaba en la
ciudad de Sucre y que desde la cuarentena se encuentra estudiando en Padilla porque
quedó embarazada y decidió tener su bebé en esta localidad. Afirma que vive con sus
Papás pero que ahora ellos se encuentran en el campo en la comunidad de Corralones
antes de llegar a Mojotorillo.
La menor afirma que no es la primera vez que Nery Rodas le ofrece dinero a
cambio de relaciones sexuales. Afirma que durante todo su embarazo en varias
oportunidades, tanto de sano como mareado, le decía "¿No quieres ganarte unos 100
bolivianos, 300 o 50?" a lo que ella siempre respondía que No y que si seguía
ofreciéndole le haría llevar a la policía.
Afirma la menor que "es la primera vez que me ha hecho relaciones pero
siempre me ofrecía, (silencio)" (sic). A las preguntas de la profesional, la menor detalla
el hecho vejatorio afirmando: "Me puso los pies aquí (enseña los hombros) en el
hombro y ahí me hizo sus relaciones sexuales a mí y me tapó la boca". Afirma que
cuando el agresor le bajó su pantalón también le bajo su calzón y continúa
refiriendo:"(...) me quería tocar mis pechos, yo no me dejé me movía, y me besaba y me
quería sacar chupones en el cuello pero no le dejé, yo le decía mi mamá está aquí ha
ido al mercado ya va a venir, y él no me hacía caso y él seguía y seguía yo quería gritar
y no me dejaba estaba llorando mi hija y estaba llorando grave no me dejaba al final lo
empuje a un lado y se hizo a un lado y quería salir corriendo afuera no me dejo, el
primero se ha salido corriendo y hasta que al último vino con su mujer y su mujer no me
ha hecho caso y me ha dicho que yo le había robado plata y me ha dicho que soy una
perra una desgraciada me ha dicho feas palabras me ha dicho que soy una cochina que
yo le espero en la calle abierta dijo que yo le llamo a mi cuarto."
La menor afirmó que durante el hecho vejatorio le dijo a Nery Rodas que le
avisaría a su mujer y a su madre lo que le estaba haciendo, por lo cual el agresor
finalizado el acto trajo a su mujer al domicilio de la menor para confrontarla con su
esposa y negar todo lo sucedido, induciendo incluso a que ésta última agreda
físicamente a la menor"(...) diciendo pégale así le decía a su mujer, pégale le decía así
me está haciendo le decía, porque no le pegas le decía" (sic). Relata que después se
puso de rodillas jurando por Dios a su mujer que no le había hecho nada, que al
contrario la menor le había robado 600 bolivianos de su bolsillo, para luego afirmar que
le había robado 900 bolivianos. La menor indica que mientras su esposa se dirigió a la
esquina, Nery Rodas le quiso dar 50 bolivianos e intentó ingresar nuevamente a su
4
cuarto, momento en que L.M.R.C. lloró y salió su vecina que es hija del señor Hugo
Vega.
Por otra parte, la menor precisa que cuando le relató los hechos a la esposa del
ahora acusado, ella no le creyó y le dijo que si estaba mintiendo le haría meter a la
cárcel. Igualmente precisa que cuando le dijo a Nery Rodas que avisaría a la policía, él
le dijo que entonces diría que ella le robó 1000 bolivianos. Asimismo, afirma que luego
del hecho no se cambió de ropa ni tampoco fue al baño; describe la ropa que usaba su
agresor el día del hecho, un short plomo con rayas negras, una polera amarilla, unos
tenis y una gorra.
5
avisar a su esposa lo que le estaba haciendo, por lo cual el agresor finalizado el acto
condujo a su mujer al lugar del hecho para confrontarla con la menor y negar todo lo
sucedido, induciendo incluso a que ésta última agreda físicamente a la menor. Relata
que después el ahora acusado se puso de rodillas jurando por Dios a su mujer que no
le había hecho nada, que al contrario la menor le había robado 600 bolivianos de su
bolsillo, para luego afirmar que le había robado 900 bolivianos. La menor indica que
mientras su esposa se dirigió a la esquina, Nery Rodas le quiso dar 50 bolivianos e
intentó ingresar nuevamente a su cuarto, momento en que L.M.R.C. lloró y salió su
vecina hija del Señor Hugo Vega. La menor afirma que no es la primera vez que Nery
Rodas le ofrece dinero a cambio de relaciones sexuales. Afirma que durante todo su
embarazo en varias oportunidades, tanto de sano como mareado, le decía "¿No quieres
ganarte unos 100 bolivianos, 300 o 50?" a lo que ella siempre respondía que No y que
si seguía ofreciéndole le haría llevar a la policía.
6
noviembre de 2020, los resultados obtenidos y la conclusión diagnóstica. La testifical de
AIDA MIOLET VEGA SALAS, vecina de la presunta víctima, quien refiere que
aproximadamente a las 4 de la tarde se encontraba en el patio de su casa junto a su
padre y su hermano, cuando escuchó llorar y quejarse a una mujer a lo cual salió a la
calle a ver qué pasaba; momento en el que encontró a L.M.R.C. quien sólo alcanzó a
decirle que Nery Rodas le empujó al interior de su cuarto, aseguró la puerta y la violó en
presencia de su bebé. La testifical de CLAUDIA R. SANABRIA CONTRERAS, Perito
en Biología del Instituto de Investigaciones Forenses, quien corrobora los resultados de
la pericia de Estudio Seminológico, mediante la determinación de Presencia de
Antígeno Prostático Específico la evidencia E3 (Calzón), colectada a la víctima
L.M.R.C. En este sentido refuerza la valoración efectuada en la prueba documental MP-
PD-8. La atestación de LAURA KARINA GUTIERREZ CATAVI, Ginecóloga Obstetra
del Hospital Marcos C. Rojas Zurita de la ciudad de Padilla, quien corrobora las
conclusiones arribadas por la profesional en el Certificado Único para Casos de
Violencia en el marco de la Ley 348, de la menor L.M.R.C. de 27 de noviembre de 2020,
y refuerza el valor probatorio asignado a la prueba codificada como MP-PD-3. Y la
testifical de HUGO FÉLIX VEGA BELAUNDE, vecino de la presunta víctima menor de
edad y padre de la testigo Aida Miolet Vega Salas, quien afirma que el 27 de noviembre
de 2020 aproximadamente a horas 16:00 se encontraba en el patio de su casa
escavando para un alcantarillado, cuando escuchó bullidos, sacó su cabeza y estaba
presente la menor L.M.R.C. sentada y el señor Nery Rodas Ruiz parado, en estado de
ebriedad y acompañado de su esposa. Refiere haber escuchado que discutían, y el
señor Nery responsabilizaba a L.M.R.C. de la sustracción de un dinero y también de su
celular y la empujaba de momento a momento para decirle a la señora de que llame a la
Policía. Finalmente afirma que tras retirarse la Policía preguntó a la menor por qué no
había gritado o no había mordido a su agresor, a lo que ella le contestó que le había
tapado su boca.
Por otra parte, ésta documental es una prueba directa, porque emerge de la propia
víctima quien fue la única testigo de este hecho y tiene relación con los hechos
acusados.
7
la valoración judicial probatoria respecto de hechos de violencia sexual porque
introduce criterios de la Corte Interamericana de Derechos Humanos como aquél
expuesto en el Caso Fernández Ortega y otros vs. México, en la Sentencia de 30 de
agosto de 2010, sobre Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas, que
señaló lo siguiente: "la violación sexual es un tipo particular de agresión, que en
general, se caracteriza por producirse en ausencia de otras personas, más allá de
la víctima y el agresor o los agresores. Dada la naturaleza de esta forma de
violencia, no se puede esperar que dentro de un proceso penal de este tipo, se
presenten pruebas gráficas o documentales, y por ello, la declaración de la
víctima se constituye en una prueba fundamental sobre los hechos. En se sentido,
corresponde también mencionar al Caso Espinoza Gonzales vs. Perú, en la
Sentencia de 20 de noviembre de 2014, sobre Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas, la cual señaló que la declaración de la víctima, se
constituye en una prueba fundamental, tratándose de violaciones sexuales, y que
la falta de evidencia médica no disminuye la veracidad de la declaración de la
presunta víctima.".
Por todo lo expuesto, este Tribunal efectuando una valoración reforzada de la prueba
con perspectiva de género, tomando en cuenta la minoridad de L.M.R.C. que al
momento de hecho contaba con 15 años de edad, vinculándose a la normativa y
jurisprudencia antes referidas y efectuando una valoración armónica y coherente de
toda la prueba producida en juicio, considera como cierto el testimonio de la menor
Por tales razones, el Tribunal le asigna fe de probanza conformidad con el artículo art.
193 inc. c) de la Ley 548 (presunción de verdad), artículos 216, 333-3) con relación al
173 del Código de Procedimiento Penal.
8
Tribunal le asigna fe de probanza con relación a los arts. 173 y 216 del Código de
Procedimiento Penal.
9
La presente prueba científica guarda coherencia con el relato de la menor
L.M.R.C. cuando afirma que el 27 de noviembre de 2020 fue violada por el señor Nery
Rodas Ruiz. Tomando en cuenta que la evidencia signada como E3 (CALZÓN) en la se
observó la presencia de antígeno prostático, fue colectada a la presunta víctima
siguiendo la cadena de custodia.
10
armónica en su integridad desde los momentos en que este hecho tuvo su inicio, hasta
el momento en que el hecho culminó. Expresa como es que cuando se encontraba en la
puerta del domicilio de sus padres a punto de ingresar llevando un coche donde se
encontraba su bebé (el 27 de noviembre de 2020 aproximadamente a horas 14:00),
Nery Rodas Ruiz apareció y le ofreció ayudarla a meter el coche en el que se
encontraba su bebé, a lo que ella se negó afirmando que podía hacerlo sola; momento
tras el que fue empujada junto con el coche dentro del referido domicilio por el ahora
acusado quien cerró la puerta de su cuarto con candado por dentro, la empujó a su
catre, le tapó la boca, puso sus brazos atrás para que no pudiera defenderse, procedió
a bajarle su pantalón a la fuerza, se subió encima suyo y procedió a introducir su
miembro viril en su vagina: "me introdujo su pene en mi vagina" (sic). Refiere que su
hija se puso a llorar y ella tenía miedo de que la placa de su bebe ingrese en su
garganta (debido a que la neonata padecía de labio leporino). Asimismo precisa que
cuando el acusado terminó el acto vejatorio salió y a los cinco minutos regresó a su
domicilio junto con su esposa de nombre Arminda Rodas a quien incitó agreda
físicamente a la menor de edad afirmando que había abusado de él y le había robado
dinero; para luego de que su pareja se alejara del lugar del hecho, retornar y ofrecer 50
bolivianos a la menor a cambio de que no diga nada a nadie. Afirma que en ese
momento ella se puso a llorar al tiempo que su bebé también lloraba, razón por la cual
su vecina Aida Vega Salas quien vive en la casa contigua, se aproximó y le preguntó
que le había pasado, tras escuchar el relato de la menor en ese momento llamó a la
Policía. Finalmente afirmó que sus padres en ese momento no se encontraban en su
domicilio, sino en el campo.
Por otra parte, ésta documental es una prueba directa, porque emerge de la propia
víctima quien fue la única testigo de este hecho y tiene relación con los hechos
acusados.
Asimismo, el relato de los hechos efectuado por la víctima menor de edad contenida en
la presente entrevista, constituye una premisa táctica que este Tribunal considera
"fundamental" para establecer la existencia del hecho de Abuso Sexual de acuerdo a la
SCP 353/2018-S2 y a la Sentencia de la Corte IDH en el Caso Espinoza Gonzales vs.
Perú que se exponen más adelante; y conforme a una valoración reforzada de las
premisas fácticas que amerita el presente caso en atención a la minoridad de las
víctimas, éste Tribunal en aplicación del art. 193 inc. c) de la Ley 548 (presunción de
verdad) considera como cierto el testimonio de la menor. Más aún si la misma se halla
corroborada por otras pruebas de cargo producidas en juicio, con las que guarda
coherencia externa, como son las documentales
11
Finalmente, en virtud de la naturaleza del hecho de violencia sexual y el grado de
discapacidad de la denunciante (que forma parte de un grupo de atención prioritaria) su
testimonio conforme lo dispone la SCP 353/2018-S2 tiene carácter de prueba
fundamental. Recordemos que este precedente constitucional adquiere relevancia en
la valoración judicial probatoria respecto de hechos de violencia sexual porque
introduce criterios de la Corte Interamericana de Derechos Humanos como aquél
expuesto en el Caso Fernández Ortega y otros vs. México, en la Sentencia de 30 de
agosto de 2010, sobre Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas, que
señaló lo siguiente: "la violación sexual es un tipo particular de agresión, que en
general, se caracteriza por producirse en ausencia de otras personas, más allá de
la víctima y el agresor o los agresores. Dada la naturaleza de esta forma de
violencia, no se puede esperar que dentro de un proceso penal de este tipo, se
presenten pruebas gráficas o documentales, y por ello, la declaración de la
víctima se constituye en una prueba fundamental sobre los hechos. En se sentido,
corresponde también mencionar al Caso Espinoza Gonzales vs. Perú, en la
Sentencia de 20 de noviembre de 2014, sobre Excepciones Preliminares, Fondo,
Reparaciones y Costas, la cual señaló que la declaración de la víctima, se
constituye en una prueba fundamental, tratándose de violaciones sexuales, y que
la falta de evidencia médica no disminuye la veracidad de la declaración de la
presunta víctima.".
AIDA MIOLET VEGA SALAS, mayor de edad, con C.l. N° 7557990 Ch., ama de casa,
domiciliada en calle Ayacucho N° 44, vecina de la presunta víctima.
Afirma que vive a 10 metros de la casa de la presunta víctima menor de edad y que
sólo les separa una casa. Refiere que aproximadamente a las 4 de la tarde se
encontraba en el patio de su casa junto a su padre y su hermano, cuando escuchó
llorar y quejarse a una mujer a lo cual salió a la calle a ver qué pasaba; momento en el
que encontró a L.M.R.C. quien sólo alcanzó a decirle que Nery Rodas le empujó al
interior de su cuarto, aseguró la puerta y la violó en presencia de su bebé. Afirma que la
12
menor quería llamar a la Policía pero no tenía crédito, así que le prestó su teléfono para
que hiciera la llamada y posteriormente vinieron las autoridades policiales. Señala que
encontró a la menor sola acompañada de su bebita y no vio a nadie más.
La presente declaración testifical corrobora las afirmaciones de la menor L.M.R.C.
respecto del hecho acusado, guardando coherencia externa con las mismas respecto
de la narrativa de los sucesos posteriores al acto vejatorio (cuando L.M.R.C. afirma que
concluido el acto vejatorio el acusado se suspendió su pantalón y se salió mientras ella
se levantó inmediatamente para ver a su bebé; que cinco minutos después Nery Rodas
Ruiz regresó a su domicilio junto con su esposa de nombre Arminda Rodas a quien
incitó a que la agreda físicamente afirmando que la menor había abusado de él y le
había robado dinero; que ella se puso a llorar y su bebe también estaba llorando, razón
por la cual su vecina Aida Vega Salas quien vive en la casa contigua, se aproximó y le
preguntó que le había pasado, le contó sobre el hecho y ese momento llamó a la
Policía). En este sentido refuerza la valoración efectuada en las pruebas documentales
MP-PD-4: (Entrevista Psicológica de 27 de noviembre de 2020) y la testifical de
L.M.R.C. El Tribunal la valora de conformidad con los artículos 350 con relación al 173
del Código de Procedimiento Penal, y la jurisprudencia convencional antes precisada.
Afirma que por cadena de custodia recibió las muestras y evidencia que refleja
en el dictamen pericial, que consisten en M 1, M2 y E3 posteriormente, las sometió al
estudio semiológico en búsqueda de espermatozoides y antígeno prostático utilizando
la metodología de detección de espermatozoides mediante la tinción de árbol de
navidad y el método inmune ensayo de reacción enzimática es decir el método de Elisa.
Refiere que los resultados que se pudieron obtener después de esta metodología
analítica indicaron que no se observan espermatozoides. Precisa que la ausencia de
espermatozoides no significa que no existan, sino más precisamente que en las placas
que observó, no logró observar espermatozoides. Efectuada dicha precisión, expone
sus conclusiones refiriendo que: 1) En la búsqueda de espermatozoides de las láminas
analizadas de los extendidos M1 hisopado de introito vestíbulo, M2 hisopado de saco y
E 3 calzón, colectadas a la víctima L.M.R.C. no se observaron la presencia de
espermatozoides. 2) En la determinación de antígeno prostático específico PSA de los
extractos obtenidos a partir de la evidencia E3 (calzón) se detectó la presencia del
antígeno prostático específico. 3.- En la determinación del antígeno prostático
específico PSA del extracto obtenido a través de las muestras M 1 y M2 de la víctima
L.M.R.C. no se detectó la presencia del antígeno prostático específico.
13
significa que no existan, sino más precisamente que en las placas que observó, no
logró observar espermatozoides.
En tal sentido, la presente prueba testifical guarda coherencia externa con ambas
declaraciones de la menor L.M.R.C. (MP-PD-4 Entrevista Psicológica de 27 de
noviembre de 2020 y la testifical de L.M.R.C.) donde afirma que cuando se encontraba
en la puerta del domicilio de sus padres a punto de ingresar llevando un coche donde
se encontraba su bebé (el 27 de noviembre de 2020 aproximadamente a horas 14:00),
Nery Rodas Ruiz apareció y le ofreció ayudarla a meter el coche en el que se
encontraba su bebé, a lo que ella se negó afirmando que podía hacerlo sola; momento
tras el que fue empujada junto con el coche dentro del referido domicilio por el ahora
acusado quien cerró la puerta de su cuarto con candado por dentro, la empujó a su
catre, le tapó la boca, puso sus brazos atrás para que no pudiera defenderse, procedió
a bajarle su pantalón a la fuerza, se subió encima suyo y procedió a introducir su
miembro viril en su vagina: "me introdujo su pene en mi vagina" (sic). El Tribunal la
valora de conformidad con los artículos 350 con relación al 173 del Código de
Procedimiento Penal.
HUGO FÉLIX VEGA BELAUNDE, mayor de edad, soltero, con C.l. N° 1051264, con
domicilio en calle Ayacucho N° 44 de la ciudad de Padilla, vecino de la presunta víctima
menor de edad.
El testigo afirma ser el padre de Aida Miolet Vega Salas. Respecto del hecho afirma que
el 27 de noviembre de 2020 aproximadamente a horas 16:00 se encontraba en el patio
de su casa escavando para un alcantarillado, cuando escuchó bullidos, sacó su cabeza
14
y estaba presente la menor L.M.R.C. sentada y el señor Nery Rodas Ruiz parado, en
estado de ebriedad y acompañado de su esposa. Refiere haber escuchado que
discutían, el señor Nery responsabilizaba a L.M.R.C. de la sustracción de un dinero y
también de su celular y la empujaba de momento a momento para decirle a la señora
de que llame a la Policía. Afirma conocer que la menor L.M.R.C. tenía problemas
económicos a raíz del abandono del progenitor de su hijita. Relata que escuchó a
L.M.R.C. decir que la habían violado, y tras retirarse la Policía él le preguntó por qué no
había gritado o no había mordido a su agresor, a lo que ella le contestó que le había
tapado su boca.
Afirma que el 27 de noviembre de 2020, juntamente con dos policías recibieron una
llamada de una menor de edad. Indica al llegar al lugar del hecho la menor les
mencionó de manera verbal que una persona en estado de ebriedad había abusado
sexualmente de ella y en ese sentido dieron parte a la DNA de Padilla y tras la
indicación del domicilio del agresor por parte de la menor, procedieron al arresto del
acusado en su domicilio previa autorización de la dueña de la casa quien era la mujer
del aprehendido. Indica que el sindicado se encontraba en estado de ebriedad.
Asimismo afirma que encontraron a la menor con algunos rasgos de violencia, llorando
y despeinada acompañada de su hijito quien estaba llorando. Afirma que la menor les
indicó que el agresor le había violado.
La presente declaración testifical refrenda la prueba documental signada como (MP-
PD-1: Informe de 27 de noviembre de 2020, elaborado por el Pol. Armin Gabriel
Mundocorre Loayza) y por tanto le confiere valor probatorio de conformidad a la
normativa expuesta en la valoración que este Tribunal ha efectuado respecto de la
prueba antes precisada.
Con este efecto, la presente prueba testifical así como la prueba documental (MP- PD-
1) guardan coherencia externa con ambas declaraciones de la menor L.M.R.C. (MP-
PD-4 Entrevista Psicológica de 27 de noviembre de 2020 y la testifical de L.M.R.C.)
respecto de la narrativa de los sucesos posteriores al acto vejatorio (cuando L.M.R.C.
afirma que concluido el acto vejatorio el acusado se suspendió su pantalón y se salió
15
mientras ella se levantó inmediatamente para vera su bebé; que cinco minutos después
Nery Rodas Ruiz regresó a su domicilio junto con su esposa de nombre Arminda Rodas
a quien incitó a que la agreda físicamente afirmando que la menor había abusado de él
y le había robado dinero; que ella se puso a llorar y su bebe también estaba llorando,
razón por la cual su vecina Aida Vega Salas quien vive en la casa contigua, se
aproximó y le preguntó que le había pasado, le contó sobre el hecho y ese momento
llamó a la Policía). El Tribunal la valora de conformidad con los artículos 350 con
relación al 173 del Código de Procedimiento Penal.
16
el hombro y ahí me hizo sus relaciones sexuales a mí y me tapó la boca(...)";"(...) me
introdujo su pene en mi vagina" (sic); toda ella es concordante y coherente con los
lugares y objetos examinados en la presente inspección como son el catre ubicado en
dirección izquierda del ingreso, las bolsas de yute ubicadas en el fondo de la habitación
de los cuales se corrobora su existencia, así como la proximidad entre la puerta de
ingreso y el catre (1.20 metros).
Dictamen Psicológico Pericial, IDIF. REG. GRAL. IDIF. CH. N° 142/2022, IDIF.
PSICOFOR.MM.CH. N° 053/2022; elaborado por la MSc. Mercy Mariana Chirico
Herboso, Psicóloga Forense del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) de Sucre,
cursante de fs. 467 a 491 n del expediente y remitido al Tribunal mediante oficio de 16
de marzo de 2022. Dictamen solicitado para la evaluación de L.M.R.C. de 17 años de
edad basado en los siguientes puntos de pericia: a) Establecer la credibilidad de
testimonio de la menor de iniciales L.M.R.C. de 17 años; y, b) Determinar la existencia o
no de daño psicológico de la menor de iniciales L.M.R.C. ya referidas.
17
A continuación, la perito efectúa una extensa y detallada exposición de Criterios
de Evaluación. Expone la aplicación del Sistema de Análisis de Validéz de las
declaraciones (SVA) aplicado a la declaración de la menor L.M.R.C. obtenida en la
entrevista antes expuesta, detallando los siguientes criterios derivados de la
declaración de la menor: a) Características psicológicas: Adecuación del lenguaje y
conocimiento, adecuación del afecto, susceptibilidad a la sugestión (baja); b)
Características de la entrevistada: Preguntas sugestivas, directivas o coactivas (no se
considera que existe presencia de directividad o sugestión a entrevistas anteriores),
Adecuación Global de la entrevista (confirmada); c) Motivación cuestionable para
denunciar o para informar en falso: Motivos para informar (la evaluada informa sobre el
hecho a la media hora de ocurrencia, corroborando con ello la información obtenida en
la denuncia formal cursante en cuaderno de investigaciones), Contexto cuestionable de
la revelación o informe original (la revelación se presenta a partir del abandono del
cuarto donde habrían ocurrido los hechos efectuado por la persona identificada como
su agresor), Presiones para informar en falso; y, d) Cuestiones de la investigación:
Consistencia de las leyes de la naturaleza (evidencias físicas correlacionan con
características de credibilidad del relato y la comisión del hecho), Consistencia con
otras declaraciones, Consistencia con otras evidencias (no se advierte información
contradictoria).
1 Por cumplir de manera coherente con los tres elementos del SVA.
18
impacto emocional emergido de la situación gue describe y gue probablemente
podría haber comprometido la salud y bienestar de su bebe. Asimismo, se advierte
la presencia de sintomatología clínica transitoria en situaciones en que la evaluada se
ve expuesta al proceso judicial actual.
19
III.2.- PRUEBA DE DESCARGO III.2.A.-
Esta prueba ya fue objeto de valoración por parte de éste Tribunal en el apartado
III.1.A.- Prueba Documental de Cargo, (MP-PD-7).
PDD-4: Dictamen Pericial con Código de Informe: IDIF. REG. GRAL. No. 08732020,
realizado por la Dra. Claudia R. Sanabria Contreras, Perito en Biología del Instituto de
Investigaciones Forenses, de 13 de enero de 2021, cuyo objeto de pericia fue: a)
Determinar la Presencia de células Epiteliales en la muestra M4; y, b) Determinar la
Presencia de sangre en la muestra M4, dictamen que contiene una descripción de la
muestra, fundamentación técnica, descripción de operaciones realizadas y las
conclusiones del mismo en los que se afirma que: 1o) La búsqueda de células
epiteliales en la lámina analizada, del extendido en el portaobjeto, obtenido a partir de
la Muestra IDIF-0873-20-CH: M4 (Hisopados del Surco Balano Prepucial 2) de: Nery
Rodas Ruiz, no se observaron célula epiteliales; y, 2o) En la Muestra del caso IDIF-
0873-20-CH: M4(Hisopados de Surco Balano Prepucial), se determinó que las manchas
de color amarillento; no corresponden a sangre.
2 El surco balanoprepucial se encuentra justo detrás del glande (miembro vivir masculino), encontrándose
cubierto este y el glande por el prepucio.
20
coherencia, consistencia y credibilidad de las tres declaraciones prestadas por la menor
de edad L.M.R.C. respecto del hecho acusado. Al contrario, la evidencia de manchas
de color amarillento en la M4 puede ser relacionada con las conclusiones de examen
ginecológico de la menor de edad en las que se advierte la presencia de "Escaso flujo
amarillento no fétido" (MP-PD-3: Certificado Único para Casos de Violencia en el marco
de la Ley 348, de la menor L.M.R.C. de 27 de noviembre de 2020, emitido por la Dra.
Laura K. Gutierrez C., Ginecóloga Obstetra del Hospital Marcos C. Rojas Zurita de la
ciudad de Padilla).
FELICIA MANCILLA RODAS, mayor de edad, con C.l. N° 6368339 Ch„ panadera,
concubina del acusado Nery Rodas Ruiz. Advertida de su derecho a guardar silencia
sin que su abstención de declarar perjudique al acusado, afirmó que Sí quería declarar.
21
su casa con una orden de entrar a detenerlo, los dejó ingresar, entraron a su cuarto,
esposaron a su esposo y lo sacaron.
Afirma que tras la detención de su esposo a las 5 de la tarde fue a la policía a ver a su
esposo y la menor L.M.R.C. fue tras de ella y quiso entrar a verlo y los policías le
dijeron que no podía estar ahí por ser menor de edad. Afirma que la intención de la
menor fue de llegar a un acuerdo para retirar la denuncia y le dijo que si quería que
retire la denuncia tenía que conseguir Bs. 15.000.
Indica que conoce a la menor L.M.R.C., que en cinco oportunidades habría tocado la
puesta de su casa a horas 10 a 11 de la noche, y cuestionando a su esposo sobre esta
situación con la menor, el ahora acusado le habría afirmado que ellos mantenían
relaciones hace tiempo.
Afirma que respecto al hecho concreto de violación denunciado, su esposo le habría
dicho que: "la chica estaba de acuerdo y que ella necesitaba dinero para su bebé (...)
mi esposo dijo que ella estaba de acuerdo con tener relaciones por dinero porque
necesitaba para su hija" (sic.)
III.2.C.- Declaración de NERY RODAS RUIZ efectuada en el marco del art. 346 del
CPP:
Expuestos que fueron los alegatos de apertura del fiscal y del querellante, previa
explicación clara y sencilla del hecho por el cual se le acusa y su derecho de
abstenerse de declarar, se le preguntó al acusado NERY RODAS RUIZ si quería
declarar, contestando que sí quería declarar.
"Sobre el caso, porque la señora no es niña como dicen no cierto, todos los días
venia y me busca en mí casa tengo mis testigos hasta mi esposa me decía porque ella
para en aquella puerta, yo me hacia el sonso y le decía yo no sé, me venía me decía
dinero préstame, yo le di hasta celular lo di yo, le regale celular le sabia dar dinero, y
ella se ha acostumbrado hasta para meterse con otros hombres por cobrar dinero, y a
mí me venía hasta que una vez mareado me estaba recogiendo y ella estaba en su
puerta y me dijo don Nery ya pues présteme, ya te presto si es que tú me prestas le
dije, y como va a decir que yo le viole, ella por dinero se entregó a mí. pero no le
penetre, lo di el dinero y listo, nada más como va a decir que yo le viole eso es
injustamente que me esta diciendo, la fiscalía también porque no investiga bien ahorita
tengo testigos, de la casa de mi mujer que es, hasta los choferes toda la terminal,
buscaba como una trabajadora sexual, así paraba la chica v su mama sabía lo gue ella
me ofrecía, su papa también sabia, cuando yo estuve mareado me decía su padre mira
tu hija asi es, asi me anda buscando, no se hace voz lo que quieras, que me importa de
esa perra y mierda igual que su mama debe ser, me decía, como van a decir que yo le
22
he violado, es una mujer que anda cobrando dineros hasta en Sucre aquí como en la
terminal también, es injustamente que me diga que yo le viole, porque no acepta y dice
no me quiso pagar y por eso fue que le demande, eso tiene que ser. Preguntas Fiscal:
¿Nos pueda manifestar, donde estuvo detenido anteriormente y por qué delito?
R.- En la Carceleta de Padilla(...) por corrupción de menor en el año 2017. Pregunta
Fiscal: ¿donde se encontraba en fecha 27 de noviembre a las 14:00 de la tarde?
R.- Estaba recogiéndome de lo que estaba consumiendo bebidas alcohólicas de una
fiesta, hasta donde que la mujer estaba en la puerta de su casa, y me dijo como es
pues don Nery présteme dinero, yo te presto si tú me prestas, así eso fue lo que le dije
yo, porque ella es, yo quiero que sea sincera que diga la verdad, yo con gusto acepto
que m sentencien pero con la verdad, no con mentiras como dicen que yo le viole, eso
es injustamente lo que me dicen que yo le viole, porque esa mujer gana dinero con su
cuerpo, como me van a decir que yo le viole, yo quiero la verdad acepto mi sentencia
sin mentira por favor, se lo ruego doctor yo tengo mis hijos tengo mi hija usted piensa,
usted no tendría sus hijos, como piensa mantener a esos hijos dígame con la verdad se
los imploro señor juez.¿_Que nos manifieste si él ha tenido relaciones con la menor
presuntamente victima el día del hecho referido? R.- No tuve, por eso hicieron
también con el médico forense los análisis y salió negativo, porque no tuve relaciones,
eso me puedo, que no tuve relaciones. (...) Preguntas Defensoría: ¿tenía
conocimiento que la víctima en cuestión era menor de edad? R.- No. porque a ella
le conocí cuando va tenía su hijo según ella me conto, su hijo era para un hombre de
Monteagudo que tenía su esposa y lo dejaron y no le ha hecho caso por eso ella me
aviso, cuando yo estaba separado de mi esposa, es por eso gue se me acercaba e me
ofrecía y por eso su padre sabia, su mama sabía que me venía persiguiendo hasta a su
padre le avise que me perseguía acaso no tiene su esposo, porque ya tenía su hijo, ahí
recién lo conocí a ese señora. ¿Si el señor Nery, al saber que esa señora ejercía ese
tipo de acoso contra él, porque no pudo él ir a la instancia correspondiente, por
ejemplo, a la defensoría, a la policía, porque no hizo uso de ese derecho? R.- Yo
quería regresar con mi esposa gue yo tenía, porgue ella se dio cuenta también que la
señora me perseguía (L.M.R.C., paréntesis añadido), estaba con la señora (L.M.R.C.,
paréntesis añadido), fue esa vez que me busco y hasta mi hija que tiene 14 años me
dijo porque papito te busca esa señora es una loca (L.M.R.C., paréntesis añadido) le
dije, porque no como dice violación yo no le toque no le penetre doctora que diga la
verdad sin mentiras. Preguntas Abogado Defensor: ¿Don Nery podría
respondernos, si en fecha 27 de noviembre cuando usted se recogía dice por
inmediaciones de la terminal cuando encontró a la ahora victima ha habido algún
tipo de forcejeo o violencia psicológica o física de usted hacia la menor? R.- No
doctor, nada solo ella me dijo ya pues son Nery présteme dinero, nada más, yo no le
agarre, lo toque, lo peche así como dicen que le agarre de sus manos le tape la boca,
eso es por favor le pido que la fiscalía y la defensoría diga la verdad, nada más.
¿después de su detención tal vez ha existido una tercera persona que a querido
contactarse con usted o con familiares, para de cierta manera arreglar esta
situación por la cual está atravesando usted? R.- Si la misma señora (L.M.R.C.,
paréntesis añadido), con mi esposa pidiéndole dinero quería gue le de 3.000 bolivianos
para retirarla la denuncia, quería que le de dinero a cambio de retirar la denuncia, yo le
dije porque le vamos a dar si yo no hice nada, ese dinero tiene que ser para mis hijos
no tengo porque darle dinero, mi esposa tiene su gravado, el mismo día la señora vino a
retirar la denuncia de la fiscalía de la policía cuando yo estaba detenido ahí en la policía
y los policías dijeron ya ha pasado a la fiscalía y cuando fueron a la fiscalía dijeron voz
te quedas ándate de aquí asi lo boto y tiene gravado mi esposa como lo dijo. JUEZ
23
COPA GARCÍA: ¿A que se refería cuando usted le dijo a la señora (L.M.R.C.,
paréntesis añadido) tú me prestas? R.- Yo me refería a tener relaciones sexuales con
ella. ¿ Alguna vez tuvo relaciones sexuales con esa persona? R.- No doctor. JUEZ
PRESIDENTE: ¿La menor RPC le había pedido prestado para tener relaciones
sexuales, es eso lo que refiero, nos puede aclarar esto? R.- Porque ella iba a la
terminal ella para eso pide, por eso nosotros cuantas veces nos habríamos tirado a esa,
es una loca y mierda debías de agarrarle eso me decían, por eso le dije su tú me
prestas yo te presto le dije."
En la presente declaración del acusado por la cual afirma no haber penetrado a la
menor L.M.R.C. es inconsistente con la prueba documental de cargo consistente en la
tres declaraciones de la presunta víctima (MP-PD-4 Entrevista Psicológica de 27 de
noviembre de 2020, la deposición testifical de cargo de L.M.R.C.), y la Prueba
Pericial cursante en el apartado III. 1.D en la cual la víctima reitera la incriminación
positiva al ahora acusado por el hecho de violación y por la cual se establece tanto la
CREDIBILIDAD de las tres declaraciones, como la presencia de afectación psicológica)
mismas en las que la menor L.M.R.C. guarda coherencia externa, interna y
coincidencia narrativa en cuanto a tiempo, lugar y circunstancias al afirmar que Nery
Rodas Ruiz le bajó su pantalón y su ropa interior, le tapó su boca, agarró sus manos,
puso sus brazos atrás para que no pudiera defenderse y procedió a tener relaciones
sexuales no consentidas, en palabras de la menor: "hizo su abuso, yo no quería y él me
tapo la boca (silencio)"; "Me puso los pies aquí (enseña los hombros) en el hombro y
ahí me hizo sus relaciones sexuales a mí y me tapó la boca(...)";"(...) me introdujo su
pene en mi vagina" (sic) pruebas que. La advertida inconsistencia es reforzada por la
Prueba Testifical de Descargo de FELICIA MANCILLA RODAS quien manifestó que
respecto al hecho de violación denunciado, su esposo le afirmó que la menor de edad
se encontraba de acuerdo con tener relaciones sexuales por dinero porque necesitaba
el mismo para su hija (bebé).
24
en razón a que no se tiene ninguna prueba que corrobore fehacientemente estos
extremos. Asimismo, aún hubiesen sido verificadas en juicio las afirmaciones del
acusado respecto de la personalidad de la menor víctima, estas reforzarían aún más la
protección que merecería por su evidente situación de desventaja, conforme lo dispone
la Sentencia Constitucional
Plurinacional de Avocación 0001/2022 de 31 de marzo de 2022, que en su Fundamento
Jurídico H.3.4., estableció el respecto a la protección reforzada de las víctimas de
violencia en razón de género, la debida diligencia y la obligación de las autoridades
judiciales de juzgar con perspectiva de género.
Finalmente respecto del hecho denunciado, el acusado afirma que el día del
hecho acusado condicionó un supuesto préstamo de dinero solicitado por la menor de
edad L.M.R.C. a que la misma tenga relaciones sexuales con él. Afirmación que
refrenda la duda razonable en el presente Tribunal respecto a la veracidad de la
afirmación del acusado de no haber penetrado a la víctima menor de edad. El Tribunal
la valora de conformidad a la normativa legal y jurisprudencial antes precisada y de
conformidad con los artículos 346 con relación al 173 del Código de Procedimiento
Penal.
CONSIDERANDO IV
25
pies aquí (enseña los hombros) en el hombro y ahí me hizo sus relaciones sexuales a
mí y me tapó la boca". Asimismo, la menor relató que durante el hecho vejatorio
amenazó a Nery Rodas con avisar a su esposa lo que le estaba haciendo, por lo cual el
agresor finalizado el acto condujo a su mujer al lugar del hecho para confrontarla con la
menor y negar todo lo sucedido, induciendo incluso a que ésta última agreda
físicamente a la menor. Relata que después el ahora acusado se puso de rodillas
jurando por Dios a su mujer que no le había hecho nada, que al contrario la menor le
había robado 600 bolivianos de su bolsillo, para luego afirmar que le había robado 900
bolivianos. La menor indica que mientras su esposa se dirigió a la esquina, Nery Rodas
le quiso dar 50 bolivianos e intentó ingresar nuevamente a su cuarto, momento en que
L.M.R.C. lloró y salió su vecina hija del Señor Hugo Vega. La menor afirma que no es la
primera vez que Nery Rodas le ofrece dinero a cambio de relaciones sexuales. Afirma
que durante todo su embarazo en varias oportunidades, tanto de sano como mareado,
le decía "¿No quieres ganarte unos 100 bolivianos, 300 o 50?" a lo que ella siempre
respondía que No y que si seguía ofreciéndole le haría llevar a la policía.
26
coche donde se encontraba su bebé (el 27 de noviembre de 2020 aproximadamente a
horas 14:00), cuando Nery Rodas
Ruiz apareció y le ofreció ayudarla a meter el coche en el que se encontraba su bebé, y
tras su negativa la empujó junto con el coche dentro del referido domicilio y cerró la
puerta de su cuarto con candado por dentro, botó a su bebé hacia una "bolsa" y
después boto a la menor hacia "el catre", le bajó su pantalón y su ropa interior, le tapó
su boca, agarró sus manos, puso sus brazos atrás para que no pudiera defenderse y
procedió a tener relaciones sexuales no consentidas, en palabras de la menor: "hizo su
abuso, yo no quería y él me tapo la boca (silencio)"; "Me puso los pies aquí (enseña los
hombros) en el hombro y ahí me hizo sus relaciones sexuales a mí y me tapó la
boca(...)";"(...) me introdujo su pene en mi vagina". Asimismo, las conclusiones del
presente dictamen determinan que la menor L.M.R.C. presenta afectación psicológica
como consecuencia del impacto emocional emergido de la situación que describe y gue
probablemente podría haber comprometido la salud y bienestar de su bebe. Por otra
parte, se advierte la presencia de sintomatología clínica transitoria en situaciones en
que la evaluada se ve expuesta al proceso judicial actual. Finalmente es de suma
importancia para la corroboración de la presente conclusión la afirmación que efectúa la
perito en cuanto se puede determinar que el testimonio de la evaluada es CREIBLE por
cumplir de manera coherente con los tres elementos del SVA, a partir del análisis
criterial, antecedentes de la investigación, estudio de los aspectos psicológicos y
contenido del relato.
27
Las testificales de cargo también sustentan la presente conclusión al ser coherentes y
concordantes con el relato del hecho expuesto por la víctima en sus tres declaraciones.
Así se tiene la testifical de JHENNY ALEJANDRA ORELLANA VILLALTA, Psicóloga
del DNA-SLIM del GAM de Padilla; quien ratifica el contenido íntegro de la entrevista
psicológica que efectuó a la menor de edad L.M.R.C. el 27 de noviembre de 2020, los
resultados obtenidos y la conclusión diagnóstica. La testifical de AIDA MIOLET VEGA
SALAS, vecina de la presunta víctima, quien refiere que aproximadamente a las 4 de la
tarde se encontraba en el patio de su casa junto a su padre y su hermano, cuando
escuchó llorar y quejarse a una mujer a lo cual salió a la calle a ver qué pasaba;
momento en el que encontró a L.M.R.C. quien sólo alcanzó a decirle que Nery Rodas le
empujó al interior de su cuarto, aseguró la puerta y la violó en presencia de su bebé. La
testifical de CLAUDIA R. SANABRIA CONTRERAS, Perito en Biología del Instituto de
Investigaciones Forenses, quien corrobora los resultados de la pericia de Estudio
Seminológico, mediante la determinación de Presencia de Antígeno Prostático
Específico la evidencia E3 (Calzón), colectada a la víctima L.M.R.C. En este sentido
refuerza la valoración efectuada en la prueba documental MP-PD-8. La atestación de
LAURA KARINA GUTIERREZ CATAVI, Ginecóloga Obstetra del Hospital Marcos C.
Rojas Zurita de la ciudad de Padilla, quien corrobora las conclusiones arribadas por la
profesional en el Certificado Único para Casos de Violencia en el marco de la Ley 348,
de la menor L.M.R.C. de 27 de noviembre de 2020, y refuerza el valor probatorio
asignado a la prueba codificada como MP-PD-3. Y la testifical de HUGO FÉLIX VEGA
BELAUNDE, vecino de la presunta víctima menor de edad y padre de la testigo Aida
Miolet Vega Salas, quien afirma que el 27 de noviembre de 2020 aproximadamente a
horas 16:00 se encontraba en el patio de su casa escavando para un alcantarillado,
cuando escuchó bullidos, sacó su cabeza y estaba presente la menor L.M.R.C. sentada
y el señor Nery Rodas Ruiz parado, en estado de ebriedad y acompañado de su
esposa. Refiere haber escuchado que discutían, y el señor Nery responsabilizaba a
L.M.R.C. de la sustracción de un dinero y también de su celular y la empujaba de
momento a momento para decirle a la señora de que llame a la Policía. Finalmente
afirma que tras retirarse la Policía preguntó a la menor por qué no había gritado o no
había mordido a su agresor, a lo que ella le contestó que le había tapado su boca.
28
Tercero: Acreditada la existencia del hecho por todo lo expuesto precedentemente, se
ha establecido de forma indubitable que la identidad del agresor corresponde al
acusado NERY RODAS RUIZ, mayor de edad, con C.l. N° 5689363 Ch., boliviano,
casado, albañil, nacido el 9 de enero de 1979 en San Julián, provincia Tomina de
Chuquisaca, tiene 43 años, es padre de tres hijos de 22, 18 y 14 años de edad
respectivamente, tiene su domicilio en la calle Calama N° 25 de la ciudad de Padilla,
tiene grado de instrucción hasta 3o medio. Esta conclusión se halla acreditada por las
declaraciones de la adolescente víctima (MP-PD-4; Prueba testifical de cargo de
L.M.R.C.; y, Dictamen Psicológico Pericial, IDIF. REG. GRAL. IDIF. CH. N° 142/2022)
por las que identifica plenamente a su agresor; las declaraciones testificales de AIDA
MIOLET VEGA SALAS y HUGO FÉLIX VEGA BELAUNDE quienes afirman de manera
positiva e indubitable que L.M.R.C. identificó a su agresor como autor del hecho y son
coherentes y consistentes en la incriminación por ella efectuada a NERY RODAS RUIZ.
Finalmente, la identidad del acusado es refrendada por los datos proporcionados por él
mismo en Audiencia de apertura de Juicio Oral.
CONSIDERANDO V
29
vejatorias o degradantes; i) La víctima tuviere algún grado de discapacidad; j) La víctima
sea mayor de sesenta (60) años; k) La víctima se encuentre embarazada o si como
consecuencia del hecho quede embarazada; I) Tratándose del delito de violación, la
víctima sea mayor de catorce (14) y menor de dieciocho (18) años; m) El autor
hubiera cometido el hecho en más de una oportunidad en contra de la víctima; n) A
consecuencia del hecho se produjera una infección de transmisión sexual o VIH; o, o) El
autor fuera ascendiente, descendiente o pariente dentro del cuarto grado de
consanguinidad o segundo de afinidad. Si como consecuencia del hecho se produjere la
muerte de la víctima, se aplicará la pena correspondiente al feminicidio, asesinato o
infanticidio.
Estos hechos son admitidos como verdad procesal, tomando en cuenta que la actividad
probatoria y los elementos de prueba vinculan directamente al acusado como autor del
hecho. Esta convicción se halla sustentada principalmente las tres declaraciones
efectuadas por la propia víctima menor de edad así como por las pruebas de cargo
expuestas en el apartado anterior (Considerando IV, Conclusiones y Fundamentación
Probatoria) y que fueron debidamente valoradas en el Considerando III (Actividad
Probatoria). Ahora bien, en cuanto a las razones de por qué el Tribunal le otorga valor
probatorio reforzado a las declaraciones de L.M.R.C. que fueron introducidas en juicio
oral; es pertinente contextualizar los antes citados precedentes establecidos por el
Tribunal Constitucional Plurinacional y por la Corte Interamericana de Derechos
humanos, en lo que se ha venido a denominar el control de convencionalidad y la
interpretación desde y conforme la Constitución Política del Estado y el Bloque de
Constitucional; en este sentido, los referidos altos tribunales de justicia constitucional y
convencional han establecido precedentes respecto al valor probatorio de las
declaraciones de víctimas de violencia sexual. Uno de estos precedentes, que adquiere
la calidad de precedente en vigor por resultar el de más alto estándar de protección, lo
constituye la SCP 353/2018-S2que determinó que los jueces en materia penal al
momento de argumentar las premisas fácticas deben tomar en cuenta que el proceso
argumentativo en delitos de violencia sexual adquiere otra connotación; puesto que,
debe ajustarse a los estándares de protección normativa y jurisprudencial internacional
y nacional generada con relación al derecho de las mujeres a vivir una vida libre de
30
violencia, específicamente de la violencia sexual, que exige en delitos como los de
abuso sexual, aplicar una perspectiva de género, en sujeción a los valores, principios y
derechos consagrados en la Constitución Política del Estado, como la observancia al
principio de igualdad y consecuente prohibición de prácticas discriminatorias negativas
contra las mujeres; debiendo tomarse en consideración, que la argumentación fáctica
en estos supuestos, sea en la determinación de los hechos como en la valoración de la
prueba, resulta más compleja, pues, es donde se manifiesta en mayor medida el sesgo
de género; consecuentemente, el juez está obligado a tener una perspectiva de género,
considerando la discriminación y violencia estructural hacia las mujeres, pero también,
efectuando un análisis de la situación concreta de la víctima. Finalmente, la valoración
de los elementos indiciarios debe ser efectuada en el marco del principio de igualdad,
verificando que no exista un análisis o tratamiento discriminatorio, pero, además,
considerando en todo momento los estándares del Sistema Interamericano de
Derechos Humanos. Así, es importante mencionar que la Corte IDH, en el Caso
Fernández Ortega y otros vs. México, en la Sentencia de 30 de agosto de 2010,
sobre Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas, señaló que la violación
sexual es un tipo particular de agresión, que en general, se caracteriza por
producirse en ausencia de otras personas, más allá de la víctima y el agresor o
los agresores. Dada la naturaleza de esta forma de violencia, no se puede esperar que
dentro de un proceso penal de este tipo, se presenten pruebas gráficas o
documentales, y por ello, la declaración de la víctima se constituye en una prueba
fundamental sobre los hechos; en se sentido, corresponde también mencionar al
Caso Espinoza Gonzales vs. Perú, en la Sentencia de 20 de noviembre de 2014,
sobre Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas, la cual señaló que la
declaración de la víctima, se constituye en una prueba fundamental, tratándose
de violaciones sexuales, y que la falta de evidencia médica no disminuye la
veracidad de la declaración de la presunta víctima. De otro lado, es posible concluir
siempre que la inocencia del acusado se presume siempre y que si el juez no tiene
certeza debe absolver siempre, contrario sensu en el mismo entendimiento, la certeza o
convicción arribada a través de la valoración de la prueba destruye el estado de
inocencia, por ello es la actividad probatoria y la libre valoración de la prueba a través
de las reglas de la sana critica, sentido común permiten reafirmar la decisión del juez a
través de la motivación.
Por otra parte, cabe referir en la presente fundamentación que éste Tribunal concluyó
en que las afirmaciones sostenidas por el acusado en su declaración efectuada en el
marco del art. 346 del CPP (Apartado II1.2.0 de la presente Sentencia) respecto de la
personalidad de la víctima L.M.R.C. no pueden ser consideradas por este Tribunal a
31
efecto de fundar una sentencia absolutoria a favor del acusado, sin incurrir en
sesgos y estereotipos de género. Esto en razón a que no se tiene ninguna prueba
que corrobore fehacientemente estos extremos. Asimismo, aún hubiesen sido
verificadas en juicio las afirmaciones del acusado respecto de la personalidad de
la menor víctima, estas reforzarían aún más la protección que esta merecería por
su evidente situación de desventaja, conforme lo dispone la Sentencia
Constitucional Plurinacional de Avocación 0001/2022 de 31 de marzo de 2022,
que en su Fundamento Jurídico 11.3.4., estableció el respecto a la protección
reforzada de las víctimas de violencia en razón de género, la debida diligencia y
la obligación de las autoridades judiciales de juzgar con perspectiva de género.
Finalmente, cabe referir que efectuando una valoración reforzada de la prueba con
perspectiva de género, tomando en cuenta la minoridad de L.M.R.C. que al momento
de hecho contaban con 15 años de edad, vinculándose a la normativa y jurisprudencia
convencional antes referida, a la SCP 353/2018-S2 y Sentencia de la Corte IDH en el
Caso Espinoza Gonzales vs. Perú, y al art. 193 inc. c) de la Ley 548 que se expusieron
en su momento, y efectuando una valoración armónica y coherente de toda la prueba
producida en juicio; el Tribunal concluye que el hecho de que el acusado se encontrase
en estado de ebriedad a momento de perpetrar el acto vejatorio no excluyó ni
disminuyó notablemente su capacidad de comprender la antijuricidad de su acción, más
aún si se tiene en cuenta que Nery Rodas Ruiz afirmó haber condicionado a la víctima,
el día del hecho, a tener relaciones sexuales con él y según su declaración asoció el
comportamiento de la víctima al de una trabajadora sexual (Apartado III.2.C); por su
parte la concubina de Nery Rodas Ruiz afirmó que respecto al hecho concreto de
violación denunciado, su esposo le habría dicho que: "la chica estaba de acuerdo y que
ella necesitaba dinero para su bebé (...) mi esposo dijo que ella estaba de acuerdo con
tener relaciones por dinero porque necesitaba para su hija" (sic.). Por otra parte,
conforme a las declaraciones de la víctima refrendadas por toda la prueba de cargo
antes valorada, Nery Rodas Ruiz abordó a la menor de edad, aplicó una violencia física
en ella y perpetrado el hecho consideró la amenaza de la menor de avisarle a su
concubina lo que había hecho, razón por la cual al poco tiempo de haber salido del
cuarto de la menor regresó junto a su mujer para confrontarla con la menor afirmando
que ella le había robado dinero, insistiendo incluso a su concubina a que agreda
físicamente a la menor, para luego ponerse de rodillas y dirigiéndose a su esposa
afirmar que no le hizo nada a la adolescente L.M.R.C. Finalmente el acusado conforme
a la prueba valorada regresó para ofrecer a la víctima 50 bolivianos a cambio de que no
32
dijese nada. Todas estas acciones dan cuenta de una comprensión suficiente de la
antijuricidad de su conducta. (MP-PD-4; Prueba testifical de cargo de L.M.R.C.; y,
Dictamen Psicológico Pericial, IDIF. REG. GRAL. IDIF. CH. N° 142/2022)
Por otra parte, para destruir o enervar el derecho del acusado a la presunción de
inocencia, fué fundamental para el Tribunal otorgar valor reforzado al testimonio de la
víctima, previa justificación y valoración integral de la prueba de cargo antes referida y
en aplicación del principio de presunción de verdad establecido en el art. 193 inciso c)
de la Ley 548, así como de la jurisprudencia constitucional y convencional antes citada
y desarrollada. Finalmente, éste Tribunal desde una valoración reforzada de la prueba
con perspectiva de género debe tomar en cuenta la "Recomendación General del
Comité de Expertas del MECECVI antes precisada respecto de la figura del
consentimiento en casos de violencia sexual contra las mujeres por razones de género;
por el cual se recomienda a los Estados parte el generar o adecuar los protocolos de
investigación de delitos sexuales para que, además de las reglas establecidas en esta
recomendación, las investigaciones partan del principio de credibilidad del primer
testimonio de las presuntas víctimas de violencia sexual. Asimismo, éste Tribunal
se encuentra vinculado a la jurisprudencia de la Corte IDH que en la Sentencia del
caso J. vs. Perú de 27 de noviembre de 2013 (párr. 324) determinó lo siguiente: "(...)
esta Corte ha considerado que una negación de la ocurrencia de una agresión sexual
denunciada no necesariamente desacredita las declaraciones donde se indició que
había sucedido, sino que debe ser analizada tomando en cuenta las circunstancias
propias del caso y de la víctima"
Este delito, de violación se configura como doloso en esencia, pues, el acusado lo hizo
con voluntad y con el conocimiento de que se trataba de un acto totalmente impúdico,
ilegal y reprochable desde todo punto de vista y no ha opuesto en juicio ninguna causal
de justificación; de esta forma se ha configurado la antijuricidad de su conducta que fue
desarrollada con plena capacidad para ser motivado racionalmente. (Código Penal;
Artículo 14 (Dolo).- Actúa dolosamente el que realiza un hecho previsto en un tipo
penal con conocimiento y voluntad. Para ello es suficiente que el autor considere
seriamente posible su realización y acepte esa posibilidad. Luis Jiménez de Asúa,
dice "... que el dolo es la producción del resultado típicamente antijurídico con la
conciencia de que se está quebrantando el deber, con conocimiento de las
circunstancias del hecho y del curso esencial de la relación de causalidad existente
entre las manifestaciones humanas y el cambio en el mundo exterior, con la voluntad de
realizar la acción o con representación del resultado que se requiere." Por lo anotado
puede decirse que el dolo está constituido por 2 elementos conocimiento y voluntad de
realizar un acto o conducta punible; por ello en su calidad de autor, se ha representado
mínimamente la consecuencia antijurídica de su acto y consuma el delito a sabiendas
de las consecuencias penales de ese mismo hecho).
33
Penal, que dice: (Congruencia) El imputado no podrá ser condenado por un
hecho distinto al atribuido en la acusación o su ampliación. Es decir, la correlación
que debe existir entre los hechos de la acusación y el contenido de la sentencia, este
principio llamado de congruencia, consiste en la concordancia que debe existir entre el
petitorio formulado por las partes y la decisión que sobre él tome el juez, es decir, que
una sentencia condenatoria no puede contener un hecho distinto al atribuido en la
acusación, hecho que limita al órgano jurisdiccional a vincular su decisión a los hechos
de la acusación, este aspecto tiene correlato en la alocución latina iura novit curia,
principio que refiere que "El Juez conoce el derecho y las partes deben otorgar el
hecho. Este aspecto se halla plenamente desarrollado por la doctrina legal aplicable
contenida en los Autos Supremos Nos. 408/2014-RRC de 21 de agosto de 2014 de la
Sala Penal, 477/2014 de 03 de octubre de 2014 Sala Penal Liquidadora y 544/2014 de
13 de octubre de 2014 también de la Sala Penal Liquidadora; en ese sentido
corresponderá al Tribunal verificar si los hechos se hallan en la acusación, de ser así,
cuentan con respaldo probatorio, a efectos de que pueda subsumir o no las conductas
del acusado.
Por último cabe precisar que conforme a la valoración integral de la prueba producida
en juicio, las conclusiones y la fundamentación jurídica antes desarrolladas y
expuestas; Nery Rodas Ruiz adecuó su conducta al tipo penal previsto en el art. 308 del
CP en calidad de "Autor" conforme reza el artículo 20 del Código Penal que señala:
"Art. 20 - (Autores): Son autores quienes realizan el hecho por sí solos, conjuntamente,
por medio de otro o los que dolosamente prestan una cooperación de tal naturaleza, sin
la cual no habría podido cometerse el hecho antijurídico doloso. Es autor mediato el
que dolosamente se sirve de otro como instrumento para la realización del delito.".
CONSIDERANDO VI
34
Antecedentes que hacen inviables la aplicación de las atenuantes generales previstas
en el numeral 2) del artículo 40 del Código Penal. En ese antecedente, tomando en
cuenta que el delito de Violación tiene una sanción de 15 a 20 años de privación de
libertad, el Tribunal ha considerado que se ha acreditado este tipo penal en forma
fehaciente, por ello, corresponde aplicar la pena de 20 años de privación de libertad a la
que se agrega la agravante de 5 años antes acreditada, fijando de esta manera la pena
en 25 años de presidio. El presente Tribunal a tiempo de imponer esta sanción, ha
tomado en cuenta: a).- Que la culpabilidad y no el resultado es el límite de la pena, b).-
Que la sanción penal debe ser proporcional al ilícito cometido o lesión jurídica; y, c).-
Que la pena tiene como fines la enmienda y readaptación social del delincuente.
CONSIDERANDO VII
VOTO DE LOS MIEMBROS DEL TRIBUNAL - Que, en deliberación los jueces técnicos
del tribunal habilitados para resolver la presente causa, conforme los Artículos 358 y
359 de la ley adjetiva penal, analizando la prueba en su conjunto con la sana crítica y
prudente arbitrio, ambos coincidieron de manera unánime en la culpabilidad del
imputado y en la aplicación de la pena al acusado Nery Rodas Ruiz por su
participación y responsabilidad penal en el delito de VIOLACIÓN CON AGRÁVATE,
previsto y sancionado por el artículo 308 con relación al art. 310 inc. I) del Código Penal
Boliviano, respecto de la menor L.M.R.C., ambas normativas modificadas por la Ley N°
348 de "Ley Integral para Garantizar a las Mujeres una vida Libre de Violencia" de 09 de
marzo de 2013.
POR TANTO: EL Tribunal de Sentencia Penal N°1 de las provincias Tomina, Belisario
Boeto, Azurduy, Zudáñez, y Yamparáez, del departamento de Chuquisaca, con asiento
en la ciudad de Padilla, conformado por Jueces Técnicos, administrando Justicia a
nombre del Estado Plurinacional de Bolivia y en primera instancia, con pleno ejercicio
de jurisdicción, en mérito a todo lo visto y oído en juicio reservado y contradictorio, por
voto unánime FALLA declarando a NERY RODAS RUIZ, mayor de edad, con C.l. N°
5689363 Ch„ boliviano, casado, albañil, nacido el 09 de enero de 1979 en San Julián,
Provincia Tomina de Chuquisaca, AUTOR de la comisión del delito de VIOLACIÓN
previsto y sancionado por el artículo 308 con la Agravante prevista en el art. 310 inc. I)
ambos del Código Penal Boliviano, respecto de la menor L.M.R.C.
Toda vez, que la prueba aportada es suficiente para generar en el Tribunal la convicción
sobre la responsabilidad penal del acusado en el hecho referido, y en sujeción al art. 45
del Código Penal y al art. 365 del Código de Procedimiento Penal lo condena a sufrir la
pena de privación de libertad de 25 años a cumplir en la Cárcel pública de la ciudad de
Padilla, computable de fecha 13 de mayo de 2022 al 13 de mayo de 2047, debiendo
descontarse el tiempo que hubiese estado sometido a detención preventiva, sea con
costas. Debiendo librarse el correspondiente mandamiento de condena una vez
ejecutoriada la presente sentencia.
De conformidad a los artículos 123, 407 última parte y 408 del Código de Procedimiento
Penal, la presente resolución podrá ser objeto de apelación restringida por ambas
partes en el plazo de quince días de notificadas con su lectura íntegra.
En estricta aplicación del segundo párrafo del art. 361 del citado Código Adjetivo en la
materia, se da lectura solamente la parte resolutiva; señalándose día y hora de
35
audiencia pública para su lectura íntegra, el día miércoles 18 de mayo de 2022, a horas
15:30, en el Salón de Debates de este Tribunal de Sentencia.
Arts.: 8.II, 109,115-11, 116-1, 117, 119, 120, 121, 178 y 180.1 de la Constitución Política
del Estado.
Arts.: 1, 3, 5, 6, 8, 9, 11, 12, 13, 42, 44, 52, 114, 116-4, 117, 123, 124, 132-3), 163-2),
171, 173, 194, 204, 216, 218, 264, 329, 330, 333, 334, 342, 346, 347, 350,355 358, 359,
360, 361, 362 y 365 del Código de Procedimiento Penal.
Arts.: 4, 8, 13, 14, 20, 25, 27, 37, 38, 45, 46, 308 y 310 del Código Penal Boliviano; y
demás normas legales, Tratados y Convenios Internacionales citadas a lo largo de su
texto.
Regístrese.
36