Está en la página 1de 63

Los Mitos de Ífè.

Por

John Wyndham.

[Londres, 1921]

Traducido por Ángel Mosquera Vegas.

Correo: angelmosqueravegas@gmail.com

Serie: Yoruba 5

Version: Español-Ingles.
Este corto libro es una traducción de algunos de los mitos de las personas de los Yoruba
de Nigeria. Es una historia de la creación del mundo, los dioses, y humanidad, y los días
tempranos de la sagrada ciudad de Ífè, el centro tradicional de cultura de los Yoruba. El
texto se recitó al autor/traductor por los altos sacerdotes de Ífè, y lo del libro todavía se
cita en algunos libros en la religión del Yoruba tradicional y en el pensamiento de hoy.
Se ha hecho inmerecidamente bastante raro, así esto puede ser considerado como un
clásico menor en el campo.
Nota de autor.

El autor se pasó varios años como un Funcionario Asistente de Distrito entre los Yorubas
en Nigeria, y así me fue permitido coleccionar sobre el folklore contenido en este libro
de las fuentes nativas.

La reticencia de los nativos sobre los asuntos religiosos hizo esto necesario juntar muchos
trozos de encantamientos y remarcadas posibilidades, pero esto esperanzó que estas notas
en el mostrarán que ninguna gran libertad ha sido tomada con las creencias de una tribu
que habita una área grande en África Oriental.

Las leyendas son desnudas e inciertas, y esto pareció que en el verso blanco podría probar
una más conveniente forma de presentarlos que en prosa.

El autor desea expresar su deuda al Sr. Ford Madox Hueffer por el consejo cuando este
trabajo estaba medio-acabado, y también al Consejo del Real Instituto Antropológico por
el permiso para re-publicar las Notas I y XI-XIV qué aparecía originalmente en
"Hombre". Las sugerencias contuvieron en la Nota IV en la Creación de Hombre, y en la
Nota VII en la posible conexión entre el Festival de Edi y la Saturnalia, son ofrecidos
después de una lectura subsecuente de la "Rama Dorada".

p. 9
Personas.

I. El comienzo.
II. El descenso
III. La guerra de los Dioses.
IV. El Sacrificio de Mórimi.
V. La guerra Úbo.
VI. El paso de Ógun.
Notas.

Personas.

Arámfè = Dios del Trueno y Padre de los Dioses.


Orísha = Creador del hombre. Hijo de Arámfè.
Odúwa o
Odudúwa = Rey de hombres. Hijo de Arámfè.
Ógun = Dios del hierro. Hijo de Odúwa.
Oráyan = El guerrero hijo de Ógun.
Ládi = Herrero de Ógun.
Obálufon = Un trabajador en plata.
Mórimi = Esposa de Obálufon.
Ífa = El Mensajero de los Dioses, principalmente sabiendo por razón de adivinación.
Olókun = Diosa del Mar.
Olóssa = Diosa del Lago.
Óshun = Un Diosa quien se transformó y se hizo el Río Oshún.
Édi = El Pervertidor. Un Dios del mal quien llevó al hombre a perderse.

p. 10
Éshu = Ahora es considerado el Diablo, pero originalmente como el deshacedor,
anulador de los favores de los Dioses.
Peregún ’Gbo = Un Bosque Dios el cual causó el Bosque para traer adelante en el
tiempo los animales salvajes y miró sobre el nacimiento de Orúnmila.
Orúnmila = Un Dios quien mira sobre el nacimiento de los niños.
Offun Kánran = Un mensajero de Ífa.
Órní Odúm’la = El ancestro de los Órnís de Ífè.
Ojúmu = Un sacerdote.
Osányi = Un sacerdote y hacedor de encantos.

El Sol, Luna, Noche, Día, Alba y Tarde también eran Dioses y Diosas enviados por
Arámfè quien es menudo hablado de como Dios. Pero un superior y muy distante Ser es
mencionado por algunos de los Sacerdotes.

Oíbo quiere decir Hombre Blanco.

Okpéllè es un encanto usado en la adivinación de Ífa.

La última N es como en bon, y la pronunciación francesa es casi correcta en todos los


nombres anteriores.

p. 11
Un hombre blanco visita Ífè, la sagrada ciudad de los Yórubas, y pide oír la historia del
lugar. El Órní, la cabeza religiosa de Yórubaland, empieza, y dirige al Babaláwo
Arába, el jefe-sacerdote de Ífa para continuar.

p. 12
I. El Principio.

El Órní de Ífè habla:


Oíbo, usted ha pedido oír nuestro saber,
Las leyendas de las jóvenes horas del Mundo-y dónde
Podría verdad en mayor seguridad tener esta casa
Que en los recintos de los santuarios de Aquéllos
Que hicieron el Mundo, y en las bocas de sacerdotes
A quienes sus hacer han sido entregado
Del Padre al hijo?

Arámfè
reina en
el Cielo;

Antes de que este Mundo fuera hecho


Allí reinó Arámfè en el reino de Cielo
Entre sus hijos. Viejas fueron las colinas alrededor de él;
El Sol había brillado en sus vides y maizales
Desde tiempo pasado contando. Viejo fue Arámfè,
El padre de los Dioses: sus juventudes habían sido
Las juventudes de Cielo… Una vez cuando el
Rey reclinó En la tarima, y sus hijos se ponían postrados
En veneración a sus pies, él habló

Dice a sus
hijos de la
creación del
Cielo;

De las grandes cosas él propuso:


"Mis hijos, ustedes saben
Pero bellas cosas que yo hice para ustedes, antes
yo llamé sus espíritus del Crepúsculo: para siempre

Mitos de Ìfe. p. 13
Sus ojos han mirado las sombras y el viento
Sobre ondeante maíz, y yo he dado a ustedes
Los bailes y los coros de la noche—
Una edad de alegría y amanecer (el vino del Cielo)
Es su existencia. Usted ni siquiera ha oído
De la hora gris cuando mis jóvenes ojos en primera abrieron para mirar sobre una Masa
de hierbas, sin forma
Y sin adorno. Pero yo conocí bien el corazón
De Él-quién-no-habla-, el lejano-sintió el Propósito que dio
Mi nacimiento; yo laboré y los años austeros pasaron:
los Arroyos fluyeron a lo largo de sus soleadas camas; yo puse
Las estrellas sobre mí, y las colinas sobre;
yo foresté los árboles en ciernes, y enseñé a los pájaros
Sus canciones— lo sin forma yo había formado la belleza,
Y cuando las edades vinieron yo amé hacer
Lo bello más justo... Todo no fue bien:
Un noble animal mi mente concibió
Surgida en la aborrecible forma para acechar sobre
Mis mansas criaturas; un río, nacido para disfrutar
En iluminados cauces y reflejar las empinadas colinas,
Rasgados abajo sus bancos y asolados campos y llanos;
Mientras la catarata y el precipicio dentado,
Ahora grande con años, me recuerda de días pavor

El Principio. p. 14
Cuando el Cielo tambaleó, y anchas divisiones rompieron mis jóvenes
colinas Justas, y todo parecía perdido. Todavía—Yo prevalecí. Pensando, ahora, si el
cumplido completo es Cielo,
Cómo maravilloso los ansiosos años de destino de lento
Y arriesgado logro—un destino
Para los Dioses. Pero suyos no ha sido llevar
la Creación por el borde-acantilado vía de la Masa
para el Paraíso. "Él pausó sobre el recuerdo,
Y Gran Orísha clamó": ¿nosotros podemos hacer nada? ¿Qué uso en deidad sin hechos
para hacer?
¿Dónde anhela una desvalida región por una mano
para guiarlos?" Y el Viejo Arámfè le contestó:

Envía a ellos
para hagan el
Mundo

"Mi hijo, tu día de acercamiento. Lejano, la niebla


siempre Descansa en el exterior perdido que bordea
Nuestro reino; más allá, un Masa sin nervios fría mentira Bajo inundados cual algunos
malignos sin razón levantados
Odúwa, primogénito de mis hijos, para usted yo doy
El Pájaro cinco-recuperado, la arena de poder.1 Voy ahora,
Llamo a una tierra desesperada a la vida sonriente
Sobre el celoso mar, y encontrando hogares seguros
Para una nueva raza cuyo destino no es
La vida eterna de Dioses. Usted es su juez;

Mitos de Ìfe. p. 15

______________________________________________
Ver la nota I sobre la creación de la Tierra.
______________________________________________
suyo es la majestad, y a usted todos los Dioses
Y hombres están sujetos. Más sabio de mis hijos,
Orísha, suya es la agradecida tarea de soltar
Espíritus vagos(1) esperando por el alba—para hacer
La raza que será; y a usted yo doy
Esta bolsa de sabiduría guardé Sabiduría y artes
Para el bienestar del Hombre y avance. Y usted,
Mis hijos más jóvenes, el coro y el baile,
La voz de culto y las destrezas es suya
Para enseñar—que la nueva agradecida raza puede saber
La alegría de Cielo y los disfrutes de la labor. Entonces Odúwa dijo: "Feliz nuestra vida
ha sido,
Y yo podría vagar alegremente estas colinas para siempre,
Su hijo y sirviente. Pero a su orden
Yo rindo; y en mi orgullo de majestad sobre medida
Dolor y pesadez. Todavía, Señor Arámfè,
¿Yo soy su primogénito: por eso usted da
Las artes y sabiduría a Orísha? Yo,
El Rey, obedeceré; los corazones de los hombres
Cambiaré en maravilla al Dios que deletrea
los Extraños beneficios". Pero Arámfè dijo "Bastante;
A cada uno la digna tarea es dada. Adiós".

El Principio. p. 16

______________________________________________
Ver la nota IV sobre la creación de la Tierra.
______________________________________________
Los Dioses
Dejan
el Cielo.

Aquí el Principio estaba: desde valles de Arámfè


A través de las regiones desérticas los desterrados Dioses se acercaron
Al borde de Cielo, y en oscuridad hundida—
Un sin Sol vacío sobre una agua sin Dios mintiendo—(1)
Para asir un imperio desde la Oscuridad, y ganar Entre ingobernadas olas una soberanía.

Odúwa
roba la
bolsa y
causa de Guerra
sobre la Tierra

Pero por la orilla del camino mientras Orísha durmió


Odúwa vino por sigilo y robo lejos
La bolsa que Arámfè dio. Así fue la voluntad
Del Dios no hecha: para así con la arena encantada
Lanzada extensamente en el no dominado mar,
Llamado adelante un Mundo de envidia y de guerra.
De la Creación del Hombre, y del refrenamiento
Olókun(2) ubicó sobre el excoriado mar,
De los inconscientes años que pasaron en oscuridad
Hasta deslumbrante luz del sol tocó los sin uso ojos
De hombres, de Guerra y mágicos—mi sacerdote le dirá,
Y todos los Grandes hicieron antes del día
Ellos desaparecieron para volver a las colinas tranquilas

Mitos de Ìfe. p. 17

______________________________________________
Ver la nota I sobre la creación de la Tierra.
Ver la Diosa del Mar.
______________________________________________
Vida en Ífè
es como esta era
en el tiempo
de los Dioses

Del Viejo reino de Arámfè... Ellos se marcharon;


Pero todavía con nosotros sus altares y sus sacerdotes
Permanecen, y desde sus santuarios los Dioses ocultos
Miran adelante con alegría para mirar el baile que ellos nos enseñaron,
Y oyeron cada noche sus coros con el tambor:
Pero sin cambio aquí el Mundo temprano perdura
En esta primera fortaleza de la humanidad,
Y, constante como los bufetes de las olas
De la Reina Olókun en la orilla, la canción,
El baile de esos Dioses viejos acatan, la alegría,
La vida… Yo, también, nazco del Principio:

Odúm'la
habla para
los Dioses;

Para, cuando desde la vista de hombres los Grandes Dioses pasaron,


Ellos salieron sobre la Tierra Órní Odúm'la(1) cargaron
Para ser un padre a un pueblo de luto,
cuidar los santuario y proferir las palabras solemnes
Inspirados por Esos invisible. Y cuando
el tiempo de Odúm'la había venido a rendir la corona,
Para esperar sobre la orilla,(2) del Río y cruzar
Para el Viejo Arámfè—Ífa,(3) en su sabiduría,

El Principio. p. 18

______________________________________________________________
(1) Ver la Nota II sobre Odum'la, el primer Orni' de Ifè.
(2) El Rio cual separa este Mundo del próximo.
Ver la Nota XIII.
(3) El. Mensajero de los Dioses. Ver la Nota XII sobre su adivinación.
_______________________________________________________________
Y vive
para siempre en
la persona
del
Órní.

Proclamado ese hijo con quien el alma de Odúm'la mora. Así esto siempre ha sido; y
ahora
Conmigo que Ser es-acerca, dentro-
Y en nuestros sagrados días estos labios pronuncian
Las palabras de Odudúwa y Orísha

Mitos de Ìfe. p. 19
II. El descenso.

Arába habla:
Yo soy la voz de Ífa, mensajero,
De todos los Dioses: para mí las historias
Son conocidas, y yo las contaré a Uds. los días
Del Descenso. Como el viejo Arámfè envió
Los Dioses desde el Cielo, y Odudúwa robó
La bolsa-mi rey le hubo dicho a Uds.,… Por más de un día
A través de no mojadas llanuras los Grandes viajaron,
Y el arenoso desierto-para cual es el severo obstáculo
Puesto por Arámfè entre sus sonrientes valles

Los Dioses
llegaron a
el borde de
El cielo.

Y al espantoso borde del precipicio que sus hijos se acercaron


Temblorosamente, hasta el arenoso borde ellos se asomaron
Abajo el puro precipicio. Detrás ellos pusieron
Las resecadas, prohibidas ligas; pero todavía el Sol
Fue allí, y brisas suaves, y todavía las montañas—
Una perdida línea más allá del brillante desierto—
Llamados atrás por recordar sus antiguas casas.
Debajo
Tomado el caos-húmeda negrura y el amenazante rugido
De indomables aguas. Luego Odudúwa habló:
"¿Orísha, que hicimos nosotros? ¿Y qué falta fue la nuestra?
Proscritos por-días; por mañana nosotros debemos buscar
Nuestro destino en calabozos, y bajo

II. El descenso. p. 20
Esa bostezante oscuridad nosotros debemos fundar una ciudad
Para los nonatos hombres. Mejor una vida sin hogar
En desierto lugares: atrévase nosotros volvemos y huimos
¿A algún valle perdido de las colinas? ¿Orísha,
Qué piensan UD? "Entonces habló Orísha quienes los hombres llaman
El Grande:" Es este Odúwa que yo oigo-
El hijo de mi madre quien robó el regalo de Arámfè,
Y pensó hurtar lejos los corazones de hombres
¿Con bendiciones que eran mías para dar? Para mí,
Las artes que yo sé y yo anhelo a usar, y anhelo
Ver el primero de esforzarse, los vivientes hombres,
Que yo haré. Prohibir es nuestra tarea,
Usted dijo-pero piense, antes de que nosotros devolvamos la paz
Y la calma del Cielo, cómo ilimitado es el destino
¡Usted retrocede! ¿Además, es la Deidad enceguecida?
Usted piensa
¿Arámfè podría no saber? ha de Tener Poder no presagiar
¿Con los ojos y orejas?... Mudos espíritus hambrientos

Odúwa
envía
Ojúmu
con el
El pájaro,

Para vivir espérenos: permítanos ir. "Así habló


Orísha; y Odúwa colgó una cadena
sobre del precipicio a la cara oscura del agua,
Y envió a Ojúmu, el sacerdote sabio, para verter,
La arena mágica sobre el mar y soltó

Mitos de Ìfe. p. 21
Los cinco-recuperados Pájaros para esparcir lejos y extenso
Triunfante Tierra.(1) Pero, como los terraplenes de Tierra crecieron,
Siempre en la oscuridad vino las olas y chupadas Lejos desmoronando la orilla, mientras
pie a pie
Las albuferas se arrastraron, y se volvieron en pantanos abundantes en cañas
La tierra de esperanza. Así Odudúwa llamó

Y
Olókun y
Olóssa.

Olókun(2) y Olóssa(3) al precipicio


Y así él habló: "Abajo, las aguas luchan
Con el Mundo nuevo-creciente, y podrían destruir
Nuestro reino y deshacer la voluntad de Arámfè.
Vaya a los campos de hombres para ser, las casas
Que ellos harán. ¡Olókun! ¡al mar!
Para allí su gobierno y su dominio será:
para refrenar las olas hambrientas sobre las costas tierras.
Para siempre. Y así, en nuestra primera reina de ciudades
Y secretos santuarios sobre las solitarias orillas
A través de cada æon como la estación viene,
Hombres traerán regalos en homenaje a Olókun.
Y usted, Olóssa, dónde su ola sobrepone
El fructífero banco, Shan ve continuamente
Las ofrendas de agradecidos hombres".

__________________________________________________
Pie de notas.
p. 22
(1) Ver Nota I sobre la Creación de la Tierra.
(2) La Diosa del Mar.
(3) La Diosa de las Lagunas.
__________________________________________________

II. El descenso. p. 22
Los meses
Desde el Cielo pasó, mientras en la noche sin luna

El Pájaro
hace la
Tierra,

Bajo el Pájaro esforzado sobre hasta los límites,


Las esquinas del Mundo eran firmes. Y entonces Odúwa llamó a Orísha y a los Dioses
Al borde del precipicio, y habló estas palabras de dolor":
Nosotros vamos a nuestro triste reino. Cual es el legado Del Viejo Arámfè: así permitió
esto ser. ¿Pero ante
La hora el desierto cual abre para nosotros
Tragándonos absolutamente, antes la prolongada vista
De esas amadas colinas puede alegrarnos no más—
Debemos nosotros no soñar un rato de sonrientes días
Pasados?... La luz fue mojada mañana en el Sol Cuando oscuras las cimas-colinas
crecieron sobre brumosas hondonadas; La luz fue los frondosos árboles de noche bajo
La plateada Luna, y bonito el viento
Sobre los prados. Adiós, vos llanuras nosotros vagamos.

Los Dioses
descienden

Adiós a la luz del sol y las cambiantes sombras Lanzadas sobre los riscos de colinas
azules del Cielo. ¡Ah! Vino
Del Cielo, adiós."… Así venidos los Dioses a Ífè. Entonces de una edad de pasar meses
indecibles
Por advertencia de la Luna nuestra erudición repite

Un sin Sol
Mundo.

Mitos de Ìfe. p. 23
La endecha de perdidas esperanzas y el lamento
Sobre un pueblo en un extraño Mundo estremecido
Bajo el trueno de las inadvertidas olas
Sobre desmoronadas orillas alrededor. Siempre el pantano
Presionó ávidamente sobre Ífè; pero siempre el Pájaro
Volvió con la invencible arena
Ojúmu vertió de sus encantada cáscara,
Y el pantano rindió. Entonces el joven Ógun ordenó
El Bosque crecer sus susurrantes árboles—pero ella Brotó los pálidos retoños de
desesperada noche,
Y todos fue dolor alrededor del mojado pueblo
Dónde Odudúwa reinó. Todavía para vivos hombres

Orísha
crea al
hombre.

Orísha, el Creador, anheló, y llamó


A él las anhelantes sombras desde otras oscuridades;
Él tiró sus imágenes (1) en los úteros
De Noche, Olókun y Olóssa, y todas
Las esposas de los grandes Dioses abrieron bebés con ojos
De esos nacidos ciegos—desconociendo de su necesidad—
Y miembros para sentir el sin corazón viento cual sopló en
Desde exterior ninguna parte a la oscuridad más allá….
Pero cuando los inconscientes años llevaron por, Orísha,
El Creador, miró el no iluminado Amanecer del Hombre
Nostalgia—como uno que sigue el ponerse en vuelo

II. El descenso. p. 24
________________________________________
p. 26
(1) Ver Nota V sobre Obálufon.
(2) Vino-Palma, un eficaz intoxicante nativo.
_________________________________________
De un solo pájaro-de mar cuando el ocaso marchita Más allá de un pantanoso desierto—y
habló
A Odudúwa": Nuestro día es interminable noche,
Y los profundos, pálidos bosques rodean nuestros llorones niños.
El Océano amenaza, fríos vientos gimen a través
Nuestras desmoronadas. Nuestra guardiana Noche, quien habló
A nosotros con sus extraños sonidos en las silenciosas horas
Del Cielo está aquí; todavía ella puede pero lamenta
Su sin descanso tarea. ¿Y dónde está la tarde? ¡Oh! ¿dónde
Está el Alba?" Él cesó, y Odudúwa envió
Ífa, el Mensajero, a su viejo señor
para pedir el Sol y la calida llama que encendió
La antorcha de la Tarde del Cielo y la danza...

Arámfè
envía fuego,
el Sol
y la
Luna.

Una profunda compasión movió al atronador Arámfè,


El Padre de los Dioses, y él envió abajo
Al buitre con el rojo fuego en su cabeza
Para hombres; y, por orden de los Dioses, el pájaro Todavía lleva ningún plumaje dónde
esas brasas lo quemaron—
Una marca de honor para el recuerdo. De nuevo
El Padre habló la palabra, y la pálida Luna
Buscó fuera los recintos de la tranquila retirada de la Noche

Mitos de Ìfe. p. 25
Para compartir su mirada sobre la Oscuridad; y Día tomó las alas, Y voló a los anchos
espacios del cielo—
para vagar benignamente de las flotantes nieblas
Cual se aferran a las laderas del Amanecer—a la víspera
Quien llaman la feliz esforzada casa.

Y todo

La Edad
de alegría.

Fue cambiado: para cuando el terror del luminoso Día


había alzado de los sin usar ojos de hombres,
las Chispas volaron desde yunque de Ládi, mientras Ógun enseñó
El uso del hierro, y el sabio Obálufon (1)
Hizo bronceados envases y mostró cómo arroyos de vino salían
Desde delgadas palmas (2).Y en la noche los Dioses
Pusieron antorchas en sus atestadas cortes para iluminar
El baile, y la música de Cielo tocó el tambor
Una vez más como en su antigua casa. Y alegría
Con Odudúwa reinó.

II. El descenso. p. 26

__________________________________________________
Pie de notas.
p. 26
1 Ver Nota V sobre Obálufon.
2 Vino-Palma, un eficaz intoxicante nativo.
__________________________________________________
III. La guerra de los Dioses.

Arába continúa:
Oíbo, yo diré y haré crónicas
Un segundo capítulo de las historias

La fábula
de Tierra,
Agua y
Bosque

Legado de otros tiempos… Un cuento se dicho


Cómo Dios al principio envió tres hijos
En el Mundo—Tierra, Agua y el Bosque—
Con uno y veinte regalos para la Tierra y hombres Que son los hijos de Tierra; y todos
salvan uno
El Bosque y los Ríos robaron; y cómo
Dios prometió a su primogénito, la Tierra, que hombres
Deben ganar los veinte regalos de nuevo En virtud
De eso último, Humor Bueno. Y esto es verdad:
Para en esos años cuando Ógun y los Dioses Hicieron conocido sus artes hombres
aprendieron a buscar,
Paja, comida y vino en el Bosque y en el Río

Disputa
Entre
Odúwa y
Orísha

Pacientemente. Así el Hombre prevaleció; pero por esos días


Vino disputa y tumulto para los Dioses—Por aun
Por celos y orgullo Odúwa retuvo
La bolsa que Arámfè dio a Gran Orísha.
A menudo Orísha hizo súplica; a menudo
Uno suplicante vino ante su hermano—en vano;
Hasta una vez cuando Odudúwa se sentaba con Ógun

Mitos de Ìfe. p. 27
En ese mismo palacio dónde el Órní reina,
El sonido de tambores fue oído y Gran Orísha acercó con el experimentado Obálufon, y
dijo:
"El tiempo ha venido a enseñar las artes de Arámfè" A los hombres. Devuelva la bolsa
(porque esta mía es!)
Que yo puedo hacer la orden de nuestro Padre. ¿además,
Tenga cuidado, esto no es dicho cómo cuidado dormido
En los silenciosos bosques cuándo el orgulloso leopardo cayó,
Atraído sobre por silencio, "bajo el pie del monstruo?" (1)
¿Luego fue Odúwa encolerizado sumamente:
"Yo no Soy el rey? ¿Arámfè no hizo
A mi señor de Dioses y hombres? ¡ve lejos! Quién habla
Impropias palabras ante el rey ha empacado
Su carga." (2)

Orísha y Odúwa llamados

Trae
Guerra
a Ífè.

Por brazos sus seguidores de Dioses y hombres,


Y en ese día la primera de guerras empezó
En Ífè y el Bosque. Tal era la caída
De los Dioses de caminos divino, y tal para los hombres
La pena que Odudúwa robo preparado;
Pero poco los Dioses preocupó de su profunda culpa

III. La guerra de los Dioses. p. 28

_______________________________________________________________
Pie de notas.
p. 28
(1) comp. Amenaza Yoruba "El elefante tiene el poder para aplastar a los Leopardo, a
pesar de que guardan silencio". (Comunicado por los golpes-tambor, Yo pienso.)
(2) Refrán Yoruba. El hablador esta probablemente preparado para un viaje.
________________________________________________________________
Hasta la oscuridad cayó y todo fue quietud—por entonces
Volvió la memoria de Calma, su herencia,
De Cielo nacido y destinado para el Mundo;
Oscuridad, también, con la silente noche bajó: un sentido
De error impío, irreligioso impío, pesado bajo
Guerreros cansados, y todos fueron cambiados. Alrededor,
Muerte, muerte el Bosque parecía, sus ramas no agitadas;
Muerte también, entre su estrangular, anudado crecimiento
El ahogado aire—mientras en ese silencio, la tormenta

Arámfè
Trata de
detenerlo;

Mudo heraldo, vino la distante atronadora voz


Del Viejo Arámfè cuando él meditó: "En vano
Dentro la Pérdida abajo yo envié mis hijos—
Los niños de mis felices valles—para hacer
Un Mundo de alegría: para desolación retenidos
Las casas de Ífè, y las mujeres con sus bebés
Son proscritos en los desnudos bosques". Pero cuando
Las giradas nubes eran rodadas en el cielo
Y los grandes árboles fueron heridos por el viento,
Atronador Arámfè en su ira reprendió
Sus errantes hijos: "A mi orden usted vino
A la oscuridad, dónde el Mal del vacío—
Inconsciente Violencia—tuvo hecha su casa,
Para formar en el Abismo un Mundo de alegría,

Mitos de Ìfe. p. 29
Y lleva Creación en las vías del Cielo.
¿Cómo, entonces, este reyerta? ¿El alma negra del Vacío
Superó a Uds., o poseyó sus corazones para venir
De nuevo dentro sus propios? Para infortunio del Hombre
Yo me aflijo; pero usted ha cargado a ellos sobre la marea
De su mal-hacer, y su castigo
Es suyo para compartir. Pero ahora mis rayos
Yo lanzo, con diluvios sobre la tierra—
Para llenar los pantanos y albuferas, y quedarse
Para siempre su impía guerra".

Pero faltas.

Alba vino; la tormenta

Se hubo ido, y el Viejo Arámfè en su pesar


Partió sobre negras nubes. Pero todavía la ira,
Pero todavía el enojo de sus hijos soportó,
Y en los goteantes bosques y los pantanos
Los rebeldes Dioses lucharon sobre—mientras en las nubes Lejos Arámfè razonó con él
mismo:
"Yo hablé en truenos, y mi diluvio llenó
Los pantanos que Ojúmu secó;—pero todavía
Ellos luchan. ¿Castigar, yo puedo—pero qué puedo yo Lograr? ¿En el Cielo omnipotente:
pero aquí—?
¿Qué significa esto? Yo no puedo decir… En lo Desconocido, Más allá del cielo dónde
yo he puesto al Sol,

III. La guerra de los Dioses. p. 30


No es el-no-Quien-habla-: El sabe todo. Puede esto
Ser Verdad: Entre la antinatural disputa de hermanos
El Mundo fue destetado: por disputa debe soportar—?"
¿Oíbo, cómo la primera de las guerras empezó,
Y el Viejo Arámfè buscó reservar el flujo
De sangre—su pluma ha escrito; pero de los días,
Los cansados días de toda esa guerra, qué lengua
Puede decir? 'Esto es dicho el enojo de los Dioses
Soportó doscientos años: nosotros sabemos el sacerdote
Osányi hizo extraños amuletos para todos
Los mortales soldados de los Dioses—un encanto
podría volverse una lanza adelante, un segundo robó
La hiriente espada de todos su punzadura, otro
Hizo una tan terrible que una cuenta llena
Debe huir—pero no una palabra de los grandes hechos,
De esperanzas y miedos, de inminente derrota
O victoria arrebatada lejos es entregada:
Ninguna leyenda ha desafiado, ninguna voz llamó a través
La sombríos y los desconcertantes años.

Pero cuando

Un fin fue venido a los malos días revelados,


Para El-no–Quien-habla-, recuerdo de la calma
De Cielo robo sobre los desvelados Dioses—

Mitos de Ìfe. p. 31
Pero mientras la Luna se extendió suave con todo su hechizo
En Ífè de las muchas batallas; mientras
Con afligido reproche los sabios árboles estaban de pie
Y miraron sobre los Dioses que hicieron la tierra
Las voces del Bosque canturrearon sus sueños
De paz: "Duerma, duerma" toda la cansada Naturaleza quiere, Y "Duerma" la dormida
caña-gente instó, y entre
La sombra y la hoja color de plata, para el sueño,

Ógun pide a
Odúwa que
Devuelva
la bolsa a
Orísha.

La adormecida brisa anheló… Y con el amanecer


Ógun, el guerrero, con sus compañeros fue
Antes el rey, y así, habló: "Odúwa,
Nosotros Estamos cansados de la batalla, y su agonía
Pesada multa sobre nuestro pueblo. ¿Ha olvidado
Las descuidadas horas del reino del viejo Arámfè?
¿Qué significa esta guerra, esta vacía guerra entre
Los hijos de una madre? Orisha tan querido,
Usted dice… Esto fue dicho de los antiguos ¿Quién no tiene casa
No se comprará una escoba',(1) ¿Por qué entonces Gran Orisha
Traerá plagas sobre aquellos que el hizo en amor? En el cielo
Lejos Arámfè dio a usted el imperio,

III. La guerra de los Dioses. p. 32

______________________________________
(1) Refrán: Yoruba
______________________________________
Y para el conocimiento de Orísha de las maneras
De misterios y cosas ocultas. La bolsa
Usted asió; pero no su indicio—la habilidad, la sabiduría
De Gran Orísha que solo podría despertar
La durmiente erudición. . . Las naciones del Mundo
Son suyas: devuelva la bolsa, y Gran Orísha
Problemas con nosotros no más. "Pero Ni Ógun
Ni las suaves voces de la noche podrían soltar Odúwa de la esclavitud de envidia: el
gobierno
De hombres e imperio donde de ninguna cuenta Cuando el caliente pensamiento de
erudición del Viejo Arámfè
Despertó su negra ira nuevamente. La bolsa él retuvo;
Pero todos los infieles años no habían revelado
Sus prometidos tesoros. Amargamente él contestó:

Odúwa
se niega;

"Estos muchos años mi hermano ha hecho la guerra


Sobre su rey; mientras para la corona, su poder
Y grandeza, yo he forjado incesante. Para-día
Mi hijo—espera de mi causa, mi causa sola—
Cansado de guerra, y une a mis enemigos.
Débil hijo, el cetro usted nació para retenerlo
Y pasar fortalecido a una línea de reyes
Podría no levantar su voluntad y ser UD. espuela Hasta el fin. Es no dijo, "Debe un
Sacerdote enterrar, y luego su compañero desenterrar

Mitos de Ìfe. p. 33
¿El cadáver?"(1) Ningún día de breve trabajo ha usted deshecho,
Pero todo mi corazón ha anhelado a través de una vida
De labor. ¡Así que permítale ser: Dios del Suave Hierro!
Sobre su real frente desciende este día
La corona de un disminuido jefe de tribu,
Con los dulces honores de un rey en nombre—Porque yo regreso a las colinas del Viejo
Arámfè

y trans-
forma en
piedra,

Y el tranquilo reino usted habla de. "Entonces Odudúwa


Se transformó a piedra y se hundió bajo la tierra,
Llevando lejos la bolsa fatal.

Tomando el

Y así,

Bolsa con
él.

Abajo, a través de todas las edades del Mundo


Una muda erudición y artes que no encontraron un maestro
Han quedado en esclavitud.

III. La guerra de los Dioses. p. 34

_______________________________________________________________
Pie de notas.
p. 34
1 Refrán Yoruba.
__________________________________________________
IV. El sacrificio de Mórimi.1

Arába continua:
Oíbo Yo he dicho a UD. de los días
Cuando Odudúwa y Orísha lucharon;
Pero de los tiempos de paz nuestros anales retuvieron
Extrañas legendas también… Ahora en la edad cuando la alegría
y Odudúwa reinó, el dolor siempre-creció
Sufrió Gran Mórimi, la esposa experta

Mórimi
no tiene
hijos,

Obálufon—por mientras, sus esposas menores


Orgullosamente dieron muchos hijos para su señor,
Una hija solamente, joven Adétoún,
Fue concedida a su reina. Y cuando los años
Retrasaron por, una extrañeza que él siempre parecía
mantener en escondido cuadrado el justo día
Con dudas, y acechando a ella en los caminos
De ella cariñosos sueños nocturnos. Una vez con el brinco,
Ella vio las agrupadas cimas-árbol quebrándose dentro de las hojas
Cobre y rojo y cada verde, y ella
Recordó cómo bajo los nuevos brotes del año
Esto fue ordenado por Peregún 'Gbo, señor
De inhabitables bosques que Viven

Mitos de Ìfe. p. 35

__________________________________________________
Pie de nota.
1 Ver Nota VI sobre sacrificio de Mórimi
__________________________________________________
¿Debería desde el Bosque primaveral, y Vida de Vida,—hasta todo
Los Bosques se alegraron así con la voz de las bestias
Y pájaros—y ella así razonó: "Es esto no dicho Cómo Peregún ’Gbo (1) habló, y desde el
útero
Del Bosque primaveral la flojera que rió por la noche? ¿Cómo 'mitad las ramas la flojera
trajo adelante al mono
Que dio al leopardo? ¿Y no Peregún
Miró sobre el nacimiento del joven Orúnmila,
Y siempre, cuándo la tristeza del alba del día siguiente
debe rendir a los malos ligados la vida Justa
de niños, el no vigilante Dios envió abajo
Su mensajero a quedar asiendo en la mano
De la Muerte? Así hacen los Dioses; y ciertamente un
Me dará hijos. ¡Ah! ¿quien yo debo aplacar?"

Ella
consulta
Ífa:

Rápidamente con la nueva esperanza la Gran Mórimi buscó fuera


Un sacerdote de Ífa (2) en su corte patio con monte, Dónde desde cada viga y ahumado-
sucio pilar colgó Los encantos el hombre sabio puso para guardar su casa,
Sus esposas y niños de los males planeados

IV. El sacrificio de Mórimi. p. 36

__________________________________________________
Pie de notas.
1 Ver Nota XI sobre Peregún ’Gbo.
2 Ver Nota XII sobre la adivinación de Ífa.
__________________________________________________
Por los espíritus malos. ¡A su regalo ella susurró,
Y puso este en Okpéllè; y el sacerdote
Asiendo al encanto de Ífa dijo: "Okpéllè,
Para usted la pena de Mórimi es conocida;
Usted sólo puede revelar esta su secreta causa,
Esta su desconocida cura!" Entonces él extendió el encanto Y Óffun Kánran estaba en
pie ante ellos. La cara
Del sacerdote de Ífa fue problemas, y él dijo:

Quién dice
a ella que
sacrifique
su
hija.

"Mórimi, éste es el mensaje de mi señor


Ífa: un hijo, no muchos hijos, que usted anhela por. Usted tiene una hija, y el amor de su
marido
Fue suyo. Los Dioses podrían darle a UD. muchos hijos,
Pero en su camino está de pie Éshu, el Deshacedor,
Cuya urna llama afuera para sangre, por el sacrificio: Adétoún. "Sin esperanza Mórimi
Fue adelante, y aborreció de las maneras de los Dioses
Poseyó su—mientras la indignación alimentó su amor
De su un niño…

Los meses pasados por: Lunas vinieron

Y en las sonrisas de más felices esposas ella leyó


Una burla; Lunas marchitaron desde cielo,
Y pesar y su Adétoún se mantuvo
Compañeros de sus horas. Por fin ella lloró:
"Pero hijos yo pregunté para; yo iré de nuevo

Mitos de Ìfe. p. 37
Y oraré por los hijos y mi Adétoún.
La última palabra no es todavía. La marea de Olókun ha menguado: Esta no fluirá de
nuevo?"

Todavía esperanza

Ella
Consulta
Ífa de nuevo.

No fue con Mórimi a la oscura corte


Del sacerdote de Ífa; y cuando una antorcha descubrió
El mismo presagio de dolor en el crepúsculo—
Para su triste casa Gran Mórimi huyó atrás
En terror del hecho que el amor ordenó,
Y el amor condenó… Silenciosamente por la noche

Édi le aconseja
que actúe
en el mensaje
de Ífa.

Vino Édi, el Pervertidor, el liso de lengua


Que con su razonamiento engañoso compele
Al pecado consciente: "Las formas de mensajeros Revelan los pensamientos de Ífa, y las
orejas
De Ífa, el Dios-mensajero, han oído
La remota, voz de trueno. ¿Podría usted retenerla?
¿No es el nacimiento de Naciones la primera ley
Que Arámfè dio? Puede cualquier esposa resistir
Su voluntad, o sirvienta endurecer llamada de Ógun? (1) Hoy
Es suyo, oh, madre de grandes reyes que serán:
Los retoños verdes saludan la lluvia-Primavera y olvidan
Los estériles meses, y Mórimi sabrá
Su pesar y su reproche no más. "Entonces duda

IV. El sacrificio de Mórimi. p. 38


__________________________________________________
Pie de notas.
1 Ógun mata muchachas no casadas de edad casadera.
__________________________________________________
Asió Mórimi pero todavía ella contestó; "Dioses no darán? Es el severo Mundo una
mañana vendido
Dónde ellos manejan ofertas con la gente que ellos hicieron?
Son los bebés como brazaletes que Obálufon
modas para cambiar?" ¡Pero Édi contestó a ella:
"Pero una vez Arámfè habló a Odudúwa,
Y con qué pesados corazones los Dioses fueron adelante
Desde los valles del Cielo a la oscuridad! Ahora tres veces, (1)
Tres veces a la mujer Mórimi la palabra
Ha venido—con promesa del deseo del Mundo:
No cada esposa es escogida por la madre
De una casa de reyes. Y piensa!—Obálufon!" Entonces Édi, el Pervertidor, escondió su
forma
En oscuridad; y con el alba una joven muchacha acostada

La muerte
de Adétoún.

En el Deshacedor altar de Éshu—mientras


El perezoso humo azul de temprana mañana
Se arrastró al paso entre las colinas.

Mitos de Ìfe. p. 39

__________________________________________________
Pie de nota.
1 Acordando con la legenda, Mórimi consultó Ífa tres veces antes actuar sobre su aviso.
__________________________________________________
V. La guerra Úbo.1

Arába continua:

Después de la
Guerra de los
Dioses, Ífè retorna
a las artes
de paz.

Oíbo, grabado sobre mi memoria


Está la triste leyenda que mi padre me contó
De la partida de los Grandes Dioses… Los años resbalaron por
No notados mientras Rey Ógun (2) reinó. El Mundo
Era joven: sobre las escarpadas cuestas los árboles
Dispararon adelante rojos brotes, y antiguo Ífè, lúgubre
Con sufrimiento, soñó de nuevo sus tempranos sueños.
Enseñado por los Dioses, la gente empezó a aprender
Las artes de la paz del Cielo nuevamente; el tambor
Devolvió a las medidas del baile, y Gran
Orísha vio la alegría de vida una vez más
En los ojos de sus criaturas. Así vivió la humanidad entre la paz

La
fundación
de Úbo

Los Dioses, y multiplicó hasta la juventud


De Ífè buscó nuevas casas y más anchas tierras
En el vasto Bosque; y así fue nacida la primera
Justa hija de la ciudad de Odúwa. Hombres llamaron a
Ella Úbo, y el líder tomó el nombre de
Olúbo de Úbo con su jefe de tribu.

Es asistido
por disputa
desde el
primero.

Pero a estos colonos los Dioses, sus Padres,


Dieron ningunos buenos regalos: 'entre batallas con el Salvaje,' Medio forcejeos con el
Bosque el pueblo creció-
Mientras embotado recuerdo de antinaturales males

V. La guerra Úbo. p. 40

________________________________________________
Pies de nota.
1 Ver Nota VII sobre Úbo y el Festival Édi.
2 Ver Nota X sobre Ógun.
________________________________________________
Engendraba primer pensamiento rebelde del Hombre contra los Dioses;
Y cuando el tiempo de festival estaba cercano,
Palabra vino a Ífè que la gente de Úbo
Podría no traer regalos, ni rendir culto a los pies
De Ógun. Pero el Rey los desdeñó, riéndose:
"Quién enciende
Su lámpara entre las patas del leopardo? " (3)

El Jefe

Años Pasaron

De Úbo
busca
consejo,

En Aflicción mientras Olúbo buscó las casas


De espíritus del Bosque primaveral, regalos puestos
En una encrucijada santuario dónde las mujeres sin hijos van,
O vagó por tristes costas para compartir sus males
Con Océano rozándole en su vieja restricción.
Pero ríos no contestaron, ni arroyos, ni Dioses
De encrucijada santuario en la luz de alba;
Y a través el incesante silbido de la espuma
Ninguna voz de consejo vino… Con la caída del Otoño
Olúbo vino con regalos ante el santuario
Del austero Dios-Bosque quien cercó su tierra,
Y oró a el para aceptar el maíz que él trajo
Y las gordas bestias, ni asieron sus tierras de nuevo.
Y el Dios vio el aceite, y olió la sangre
De pájaros y ganado; y el anheló-por voz

Mitos de Ìfe. p. 41

________________________________________________
Pies de nota.
3 Refrán Yoruba.
________________________________________________
Cual el
Dios-Bosque
Dio a el

Vino a Olúbo": Vea con la lluvia yo vine


Cada año sobre sus campos con los primaverales árboles,
Línea-creciente césped y vegetación salvaje:
Su trabajo de antaño-año es todo deshecho
Por mi rápida desolación. Sea este su símbolo:
Va así contra los Despreciativos unos ordenados
Como yo."

En Ífè fue gran goce: el ultimo

Negro nubarrón ha pasado; las sirvientas fueron casadas, Y todos los hombres festejaron
en los sagrados días

Olúbo
invade Ifè,
y toma
los hombres
lejos como
esclavos.

De Ógun y el Señor del Día—cuando súbito,


Desde el callado Bosque sobre las paredes allí rotas
Augurios de mover árboles y rápido césped
Sobre juerguistas piedra-quieta de Ífè. (Esperanza perece
En la hora oscura una madre ve el baile
De blanco-vestidos duendes1 de las calles de media noche—
Un vislumbre, no más; y su niño enfermo es perdido).
Desesperación retuvo gobierno: las nueva-casadas esposas estaban solas;
Sus hombres fueron esclavos de señores de Úbo. El tambor
Estaba callado, y la risa muda. Acerca entorpecidas tareas
Una personas apáticas vagaron; pero no así

V. La guerra Úbo. p. 42

Mórimi
consulta
Ífa,
Mórimi-por ella, segura de triunfo, anduvo
A la oscura corte de Ífa, y puso desnudo
Su regalo. Una visión parpadeante y se hubo ido,
Y el sacerdote profetizó: "El presagio es bueno. Como cuando un hombre enfermo
miente acosado por los demonios1
yo no llamo a los Dioses por ayuda, pero tomo
La pimienta en mi lengua y así invoco
Esos mismos demonios en sus pavorosos nombres de sus madres,
Y luego ordenó al Príncipe de liga Penas
(Sin embargo apresurándose por el labio del Río) a volver
De nuevo-cual ahora es el consejo de Ífa, cargado
Rápido en la forma de Mensajeros para mí,

Quién aconseja
a ella a ir
a Úbo.

Su sacerdote, su voz: 'Mal se ha echado sobre Ífè:


Por Mal sólo puede desear prevalecer.
Tomó seis machos cabrío a Éshu, el Deshacedor;
Así pidió su ayuda y fue, Gran Mórimi,
Una ramera a la tierra de Úbo."… Así rápido
Mórimi al rebelde pueblo; y cuando.

Ella averigua
El
secreto.

Un señor de Úbo buscó a ella entre las sombras


De noche, el Deshacedor deseó poseer sus labios,
Y él traicionó la manera de la caída de Úbo.
Mientras el santuario de Éshu todavía corría con sangre, los Dioses,

Mitos de Ìfe. p. 43

________________________________________________
Pies de nota.
1 Ver Nota XIII por los encantamientos.
________________________________________________
Entretanto,
los dioses
transforman
las piedras,
ríos,
etc.,

Desconociendo, se sentó sola en su humillación,


Y Ógun dijo: "Nosotros despreciamos a nuestro advenedizo hijo;
Despreciamos a el y le permitió ser—ni horadaron en mente
La sabiduría del Pasado, 'Una pequeña serpiente
Es todavía una serpiente.'1 Ve ahora el fin ha venido:
Veloz de la vista de burlones hombres nosotros debemos
Partir. ¿El sabio Osányi pondrá ancha
La puerta de nuestra liberación: viene luego—
Por desnudo de dominio qué somos nosotros Dioses?"
Y uno por uno Osányi dio sus encantos
A los abandonados Dioses… Orísha podría pero gime
"Niños yo hice UD.—quien pero yo?" y hundió
Bajo la tierra que él amó. Y Óshun2 tiró
Su cuerpo abajo—pero nunca cesó: un arroyo
brotar, el sagrado arroyo que fluye para siempre. Olókun3 cayó; 'baja la ancha Tierra ella
fluyó
A los anchos espacios de su problemas reino...

Excepto
Ógun.

Así idos los Dioses; pero último, como Osányi dio


El encanto a Ógun, último de todos los Dioses
Atrás del rebelde pueblo Gran Mórimi
Corrió atrás, y gritó: "El fuego el buitre trajo

V. La guerra Úbo. p. 44
________________________________________________
Pies de nota.
1 Refrán Yoruba.
2 Ver Nota VIII sobre Óshun.
3 Ver Nota IX sobre Olókun.
________________________________________________
Matará las multitudes de Úbo"!. . . Los meses arrastraron por
Destino-cargado, blanco Rey hijo del guerrero Ógun,

Orányan
Destruye
el ejército
Úbo

Orányan,1 adiestró a los muchachos del Señores para Guerrear;


Pero cuando la estación festiva vino, él escondió
Ellos con rojo fuego preparado dentro de la ciudad,
Y, como las invasoras multitudes de Úbo escalaron
Las paredes, a prisa de encendidas ramas destruyó
Vestidos de Césped y rebeldes hombres. Así cayó Úbo ante Orányan, y su gente
Vio la esclavitud en Ífè…

Tiempo escatimó estos hecho —

Pero dio a el impenetrable salvaje


El lugar dónde Úbo resistió, sus rebeldes Dioses,

El Édi
Festival

Sus ritos. Y allí en Ífè, por orden


De Mórimi, los niños de los cautivo
Rinden culto a Olúbo, pero debe huir ante
El fuego de Orányan. Y en esos días de festejar
Ningún hombre puede culpar a su esposa de sus fechorías
Todos-atentos de la astucia de Mórimi.

Mitos de Ìfe. p. 45
________________________________________________
Pies de nota.
1 Ver Nota X sobre Ógun y Orányan.
________________________________________________
VI. El paso de Ógun.

Arába continua:

Después de la
Guerra de Úbo,
Ógun reinó

Una edad pasada por, e Ífè supo de no mas


de batallas; por Ógun, gris y corvado, eligió
La forma de paz amada del Viejo Arámfè.

En paz.

Olvidadas vidas fueron vividas, y sombríos sacerdotes


Guardaron calurosos los altares de los Dioses partidos:
Viejos hombres fueron suavemente a la orilla del Río1
No cantados: 'entre esperanza y miedo mudo colonos
Fueron adelante a los extraños bosques del Mundo;
Y no recordadas esposas buscaron los santuarios
De los dadores de nueva vida. Sus nombres están perdidos…

Todavía ahora, Oíbo, permítame un último cuento


Sea dicho; para, en último, esa silente edad
Produjo la leyenda de esta su caída. En esos
Últimos tranquilos años las madres bendijeron al Rey Ógun
Para pacíficos días y seguridad de la noche;
Y viejos hombres usaron contar sus valientes hechos
En batallas dónde Orányan llevó, aplaudían
El baile antorcha-encendida y pasaban sus últimos tranquilos días
Alegremente… Pero luego vinieron comerciantes de los salvajes

VI. El paso de Ógun. p. 46


Por espina y enredo de maneras pisadas-escasas
A través de los oscuros bosques con maravillosos cuentos ellos oyeron
En mercados de encrucijadas1 en tierras lejanas de hecho
Orányan hizo sobre campos de batalla más allá
La región de los bosques. Estos cuentos, a menudo-dicho
En casa y mercado, lleno el aire con los rumores
Y sueños de guerra que preocupó el reposo
Del antiguo Ífè—por, mientras los padres temieron
La venida del día cuando el gris Dios,
Cansado de Majestad de la Tierra, Podría regresar
A su primera casa-remota, los jóvenes sueños de los hombres
Eran siempre de Orányan, y sus días pálidos

Orányan
retornó
desde
distantes
Guerras a
demandar la
corona.

Retrasado por… Tal era los varios pensamientos de hombres


En Ífè, cuando sobre una arcilla, no anunciado, Orányan2 con un organizador apareció
antes
Sus pacíficas puertas. Ninguno podría negar su entrada:
El héroe anduvo de nuevo las calles que él salvó
De los hombres vestido-césped del Olúbo, y vino
Ante su padre a exigir la corona
De Odudúwa. Rey Ógun habló": Mi hijo,

Mitos de Ìfe. p. 47
Esto es anhelado desde que usted estaba aquí, y usted es bienvenido.
Pero porqué con estos hombres armados usted recuerda
Tiempos bien-olvidados y las antiguas guerras?
Ésta es una tierra de paz: bajo la sombra
De los árboles de Ífè la alegría de los valles del Cielo
han encontrado una casa, el coro y el baile
Su medida. ¡Puesto por sus brazos, y no puede herir
Asistir a su venida o sus sosegadas horas!"
Severamente Orányan le contestó a su viejo padre:
"Usted habla de paz, Gran Ógun, y el tranquilo
Arámfè destinó para un Mundo a ser.
Arámfè habló—y el sueño de Odudúwa
De sabiduría unida al supremo poder engendró
Un robo!1 Y esa misma noche en el borde del Cielo
Crearon otro destino para los hombres.
Qué Cielo-enviado arte tiene Ógun para deshacer
Ese hecho, y ofreció el todavía-nacido vivo? ¿Además,
Quién enseñó a los pacíficos pueblos del Mundo
Su anhelo por la roja Guerra? Quién forjó su armas—
Con acero Arámfè dio para segar?
Quién mató a jóvenes sirvientas quienes podrían no casarse para llevar

VI. El paso de Ógun. p. 48

________________________________________________
Pie de nota.

p. 46
1 El Río que separa este Mundo del próximo.

p. 47
1 Mercados son frecuentes encontrados en encrucijadas en el bosque.
2 Ver Nota X. sobre Ógun y Orányan.

p. 48
1 El robo de la bolsa de Orísha.

p. 49
1 Refrán Yoruba.
2 Osányi hizo el hechizo que habilitó a los Dioses para transformarse.

p. 52
1 Un regalo de huevos de loro para un jefe Yoruba es una intimación que el ha tenido un
suficiente largo reinado y que, debería el morir por sus propias manos, problema habría
ser salvado.
________________________________________________

Más hijos para antiguas guerras? ¿Quién, ora, pero Ógun,


El Dios de la Guerra?... ¿qué Entonces? 'Esto es dicho: ’El campo
El padre sembró su hijos cosecharan!"1 y Ógun
Hizo la respuesta: "La historia de mi vida ha sido
Como las exitosas temporadas en el curso
Donde Óshun vierte su arroyo. Primero, mucho tiempo atrás,
Los meses de sol del cielo cuando yo vagaban
Un descuidado niño sobre las montañas, luego,
Como una entera estación cuando las bulliciosas tormentas
Llenaron plenamente las sembrada-peña cama con las carreras de aguas,
Y el caliente sol es ocultado por las nubes,
Destino me trajo viajes, esfuerzo en oscuridad, guerras
Y todavía más guerras. De nuevo, los secos meses
Están aquí: el wagtail (pájaro África) luce sobre la roca
El río escondió, un perezoso goteo se mueve
Y en mi edad Arámfè prometió paz
Devolvió su robada felicidad a Ífè…
Y ahora, el sabio Osányi2 no es más,
Sus encantos olvidados: No puedo pasar la piedra
Y desaparecen como Odúwa; yo no puedo lanzar

Mitos de Ìfe. p. 49
________________________________________________
Pie de nota.
1 Refrán Yoruba.
2 Osányi hizo el hechizo que habilitó a los Dioses para transformarse.
________________________________________________

Mi estropeado viejo cuerpo bajo para subir en vez


Un río de la tierra, cuando Óshun hizo.
Tierra no, debe retenerme, alegre o desolado,
Un Rey o proscrito en el vago bosque,
Hasta el Cielo llama a mi—cuando los cerrados estanques calientan,
Y Óshun duerme… Hasta luego yo pido a ser
En paz; y con mi cuento de días logrado,
Mis últimas artes enseñaron, Arámfè ofreciendo hecho—
Yo, el solo Dios sobre Tierra que conoce justo Cielo,
Y la tranquila vida el Padre mandó a nosotros dar
Al hombre,—yo, Ógun, haré la manera, y voy
Sobre el camino que yo vine." Pero Orányan dijo:
"Permita a la primera Señora del Mundo decidir.
Estos años el poder real ha pasado lejos
Desde el viejo durmiente pueblo que Odúwa construyó
Para mí, Orányan, batallando en lejanas tierras
Dónde ninguna voz habló de Ífè. Permita a Ífè escoger
Su vía: oscuridad o ancho renombre!"
Un silencio cayó: las negras nubes de la tormenta
Eran sobre colgando humano destino;
El sin aliento pausa ante la fuerte ráfaga de viento
Retuvo todos los hombres sin palabra—aunque ellos parecían exhalar

VI. El paso de Ógun. p. 50

Los viejos
hombres desean
Ógun a
permanecer;

Para pronunciación. En longitud, Eléffon, el amigo


De Ógun, expresó las afectuosas esperanzas de los viejos jefes
Quien temió Orányan y su próximo día:
"Nuestra es la ciudad de los santuarios que guardan Los espíritus de los Dioses, y todas
nuestras maneras
Son ordenados por las Presencias que frecuentan
Los sagrados recintos. El ruido de guerra y tumulto
Está lejos de aquéllos que sueñan bajo los árboles De Ífè. Hay otro forma de vida:
La manera de colonos. Por orden de Dios,
Desde este primer pecho las infantiles naciones extravían
A las absolutas marchas de humanidad.
Permita a ellos presionar adelante, y permita a Orányan llevar a ellos
Hasta las lejanas esquinas del Mundo se llenado;
Permitió el desobediente otoño ante su espada
Hasta la Ley prevalezca. Pero no permitió Ífè
Desviar del fresco camino de su destino
Para sueños de conquista; y no permitió Ógun salir
El tejado, la luz del fuego de la tarde y las vías
De hombre—para ir adelante a los desnudos bosques."
¡Y los viejos jefes hicieron eco: "Viva con nosotros todavía, Oh, Ógun!
Reine en su estable trono". Pero los murmullos de rosa

Mitos de Ìfe. p. 51

Pero los
jóvenes hombres
aclaman
Orányan.

¡Y los viejos jefes hicieron eco: "Viva con nosotros todavía, Oh, Ógun!
Reine en su estable trono". Pero los murmullos de rosa
Del el joven hombre-suprimido en primer, luego ruidoso
Hasta su líder, ganando valor, gritó:
"Vacía, nuestra vida ha sido—mientras desde lejanas llanuras,
Vibrante con el romance, el viviente lustre,
Nombre de Orányan otorga, grandes rumores vinieron
A burlarse de nuestras lentas estaciones; y cada año
El festival de Mórimi recuerda igual
El nombre del héroe y la grandeza de Ífè.
Todo Ífè aletargado que el viejo puede adormecerse?
Nosotros no tendremos Orányan, y ningún otro,
Para ser nuestro Rey." Y un ruidoso lamento subió
Desde sus seguidores: "Orányan es nuestro Rey!"
Y en eso lamentó Rey Ógun oyó la sentencia
Un jefe de nuestro día ve claro en huevos1
De fatales loros en su más interior cámara:
Las paredes de su orgullosa ciudad (su vieja defensa)
Nunca más puede sostener una regla de hierro
Para vencer traidor dentro de. Y fatigadamente
Él habló sus últimas tristes palabras": Mi niñez escaso
había acabado en las colinas felices de Arámfè

VI. El paso de Ógun. p. 52


________________________________________________
Pie de nota.
1 Un regalo de huevos de loro para un jefe Yoruba es una intimación que el ha tenido un
suficiente largo reinado y que, debería el morir por sus propias manos, problema habría
ser salvado.
________________________________________________

Cuando yo vine aquí con Odudúwa; con él,


Amorosamente yo miré esta antigua ciudad creciendo,
Y planté los grandes bosques por una túnica
Para la reina de Ífè. Yo he envejecido con Ífè:
A veces yo siento que Ógun se volvió
Ífè, e Ífè Ógun, con el tranquilo lapso,

Ógun se va
lejos.

De años. Todavía ella me rechaza. ¡Ah! mis árboles


Podría ser más amable, y a mis árboles yo voy."

Alba vino; y Ógun estaba de pie sobre una colina


Al Oeste, y se tornó para tomar un último adiós
De su vieja reina de ciudades—pero blanco y denso.
Sobre albergados bosques y no recordada Ífè
Una neblina fue puesta y eclipsó todo… Más allá,
Como islas de una mañana de mar, se levantó
Dos solas grises colinas; y Ógun soñó él vio
De nuevo aquellos tempranos días, una edad pasada,
Cuando él y Gran Odúwa miraron el Pájaro
Encontraron esas grandes colinas con mágica arena,—desnudas laderas,
Todavía nacido para sonreír… Esa visión palideció: rojo-oro
Sobre grises nubes el Sol de ayer
Subido arriba—para brillar sobre un nuevo orden… Así pasó
Viejo Ógun desde la tierra.

Mitos de Ìfe. p. 53

________________________________________________

Pie de nota.

p. 46
1 El Río que separa este Mundo del próximo.

p. 47
1 Mercados son frecuentes encontrados en encrucijadas en el bosque.
2 Ver Nota X. sobre Ógun y Orányan.

p. 48
1 El robo de la bolsa de Orísha.

p. 49
1 Refrán Yoruba.
2 Osányi hizo el hechizo que habilitó a los Dioses para transformarse.
p. 52
1 Un regalo de huevos de loro para un jefe Yoruba es una intimación que el ha tenido un
suficiente largo reinado y que, debería el morir por sus propias manos, problema habría
ser salvado.
________________________________________________

Notas.

I. La creación.

Las relaciones de los varios dioses son diferentemente declaradas por los diferentes jefes
y sacerdotes de Ífè, y también por los mismos hombres en momentos diferentes.

Esto parece, sin embargo, que Arámfè gobernó en el Cielo, y envió sus hijos, Odúwa y
Orísha, a una oscuridad y la acuosa región abajo para crear el mundo y a las personas en
este. De acuerdo a las leyendas dichas en Ífè, los dioses no fueron enviados lejos como
un castigo; pero allí está alguna historia de mal-hecha mencionada en Ówu en el país de
Jébu. Arámfè dio una bolsa llena de artes y sabiduría a Orísha, y la majestad a Odúwa.

En la vía del Cielo Odúwa hizo borracho a Orísha, y robó la bolsa. Sobre alcanzando el
borde de Cielo, Odúwa colgó una cadena encima del precipicio y envió abajo al
sacerdote, llamado Ojúmu, con una cáscara-caracol lleno de arena mágica y una ave
"cinco-dedos". Ojúmu tiró la arena en el agua y el ave escarbó sobre esta. Dondequiera
que el ave pateó la arena, la tierra seca aparecía. Así el mundo entero fue hecho, con Ífè
como su centro.

 Cuando la tierra estaba firme, Odúwa y Orísha se permitieron bajar por la cadena, y
fueron seguidos por otros varios dioses. Orísha empezó haciendo a los seres humanos;
pero todos eran oscuros y fríos, porque Arámfè no hubo enviado el sol con Odúwa. Así
Odúwa envió arriba, y Arámfè envió el sol, luna y fuego. (El fuego fue enviado

Notas. p. 54

sobre la cabeza de un buitre, y eso es porque el buitre no tiene ninguna pluma en su


cabeza.) Entonces los dioses empezaron a enseñar sus artes y destrezas a los hombres.

Después de muchos años Orísha hizo la guerra sobre Odúwa para obtener de nuevo su
bolsa. Los varios dioses tomaron partido, pero algunos miraron sobre. Los hombres-
medicina mantuvieron los amuletos a los hombres en ambos lados. Arámfè estaba
enfadado con sus hijos por luchar y tiró sus rayos imparcialmente—por eso él fue el dios
de los truenos por estos días. Se dice que la guerra hubo durado 201 años, y sólo se acabó
porque los dioses en el lado de Odúwa le pidieron que devolviera la bolsa. Odúwa, en un
enfado, se transformó en piedra y se hundió bajo la tierra, tomando la bolsa con él. Su
hijo, Ógun, el dios del hierro, luego se hizo rey.

II. Odúm ’la, El primer Órní de Ífè,

De acuerdo a la tradición, cuando los dioses se transformaron, ellos ordenaron a


Odúm'la para hablar por ellos, por ser un padre para el entero mundo y permanecer para
siempre en la Tierra. En las palabras de un viejo jefe: "Esta es nuestra ley antigua que el
espíritu de Odúm'la pasa de cuerpo en cuerpo, y permanecerá para siempre en la tierra.
Los espíritus de los dioses están en sus santuarios, y Odúm'la habla por ellos"

Yo pienso que el Órní clama por ser el Odúm'la el mismo. Ésta es una cuestión de
dogma, y yo no expreso ninguna opinión.

Mitos de Ìfe. p. 55

III. Odúwa.

Allí hay poco para agregar a la historia de Odúwa dicho en las Partes I, II & III.

Arába me dijo otra versión del fin de la Guerra de los Dioses: Orísha y Odúwa
acordaron en detener la lucha en condición que cada uno debería tener un hombre para el
sacrificio cada siete meses. Catorce meses era entonces considerado como un año.

Otra historia que Arába me contó fue: "La Luna es una piedra redonda de cristal que está
con Odúwa. Ellos toman esta en frente cuando ellos van a sacrificar para Odúwa—de
otra forma el dios dañaría al hombre que ofrece el sacrificio". Odúwa es dicho que ha
tomado la piedra de un musulmán, y que ha estado en el hábito de mirar en esta.

Cuando yo fui al santuario de Odúwa, allí había un gran golpeteo de puertas para advertir
al dios de mi llegada. Yo no vi la piedra.

IV. Orísha y la creación del hombre.

La leyenda de la creación del Hombre de Orísha es misteriosa. Él es dicho que hubo


tirado imágenes dentro de los úteros. Me dijeron una vez que él puso las señales en las
manos de las mujeres. Yo sólo puedo responder de esta historia por la sugerencia que
pueda fechar desde un período cuando los hombres no habían descubierto la conexión
entre la comunicación sexual y el nacimiento de niños.

Notas. p. 56
Acerca de la vida del espíritu antes del nacimiento, el sacerdote de Arámfè dijo "Un niño
puede haber estado con los espíritus, pero cuando él nace él olvida todo acerca de esto."

El sacrificio ofrecido para Orísha consiste en ocho cabras, ocho pescados, ocho ratas y
ocho nuez-kola.

Orísha fue un dios de gran conocimiento (aparte de los contenidos de la bolsa que le fue
robada a él), y enseñó a sus hijos, Oluorógbo—quien, según la tradición, es el
antepasado de las razas blancas.

El Órní atribuye ascendiente de Europeos para el sobre-traer de Oluorógbo.

Nuestros antepasados tienen la necesidad de huevos, aves, ovejas, kola—y caracoles.

V. Obalufon.

Poco es contado de Obálufon, el marido de Mórimi.

Él fue un hombre enviado desde el Cielo por Arámfè, y era tejedor y un trabajador en
bronce. Él también les mostró a las personas cómo usar las palmas para el palma-vino.

Aparte de eso, "él tomó cuidado de todos como una madre de un niño, y usó para ir
alrededor del pueblo para llevar fuera la enfermedad y a los espíritus diabólicos".

Su imagen le representa a el como un rey.

VI. Mórimi.

Mórimi es la gran heroína de las leyendas de Ífè. La historia de su sacrificio que yo he


adoptado es la versión de Arába.

Mitos de Ìfe. p. 57

Yo fui también al sacerdote de Mórimi que me mostró de ella su imagen—de pintada


madera y ningún artístico merito—representando una desnuda negra. Su historia fue muy
igual como la de Arába; pero, en su versión, Mórimi sacrificó a su único hijo, Yésu, por
el mundo entero y no por algún dios. Esto podría parecer que algún temprano misionero
Cristiano hubiese reconocido a la Virgen Maria en Mórimi; pero esto puede ser dudado
si el misionero había oído hablar de la visita de Mórimi a Úbo (Ver Nota VII).

VII. Úbo y el festival de Édi.


La historia de las Guerras de Úbo es que algunos colonos fueron de Ífè para fundar un
nuevo pueblo que ellos llamaron Úbo; pero cuando los dioses no les habían dado nada,
ellos invadieron Ífè. En la primera ocasión ellos se volvieron atrás; pero el próximo año
ellos vinieron vestidos en césped, aterraron a las personas de Ífè y tomaron a los hombres
como los esclavos. (Y en aquellas partes de África murieron los reyes y los dioses en
necesidad de sacrificio son creídos por preferir esclavos a los hombres libres).

Entonces Mórimi consultó Ífa, y fue dicho a sacrificar seis cabras y seis bolsas de cauris
para Éshu, e ir como una ramera a Úbo. Su misión tuvo éxito, y ella volvió con la
necesaria información—solo para encontrar que los dioses se habían transformado a ríos,
piedras, etc., (Esto parece que Ógun no se transformó, así él fue después desplazado por
su hijo, Orányan).

Actuando sobre el aviso de Mórimi, Orányan puso fuego a los soldados de Úbo en su
próxima incursión.

Notas. p. 58

El fin de Úbo es conmemorado por Édi (el festival de Mórimi que empezó el 21
noviembre en 1913). Los hombres vistieron en el desfile del heno del pueblo, pero tienen
que correr por sus vidas cuando otros los persiguen a ellos con el fuego. El fuego también
es sacado al Arbusto.

En el primer día de Édi, el Órní aparece, pero debe permanecer en el Afin (Palacio) por
los siguientes siete. Durante este período las mujeres hacen honor a la parte de Mórimi
en la victoria por emulación de su hecho, y sus maridos no se les permite interferir.

El significado de la leyenda es dudosa. Pudo haber habido un tal pueblo como Úbo, pero
probablemente parece que el Festival se conecta con la agricultura.

Úbo (o Ígbo) significa el Arbusto, y Mórimi pudo haber aconsejado la costumbre de


quemar el Arbusto para preparar la tierra para las cosechas. La fecha del Festival
(temprano en la estación seca), el fuego y los hombres vistieron en heno, todos sugiere
esta interpretación. Por otro lado, los mismos argumentos, combinados con el aislamiento
del Órní y la licencia de las mujeres, habría favorecido la vista que Édi era el más
general Festival de la Saturnalia. Posiblemente esto fue así originalmente; y los
demonios a ser sacados fuera aparecían como material en la forma de vegetación tropical
que Úbo (el Arbusto a ser quemado) ha obscurecido el anterior significado del Festival.
Si esto es así, la misión de Mórimi para Úbo puede ser una tardía fábula para responder
por la licencia de las mujeres ante el comienzo de las operaciones de cultivo.

Mitos de Ìfe. p. 59
VIII. Óshun.

Óshun era una mujer (o diosa) en alto favor con ambos Odúwa y Orísha. "Esto era
bueno era Óshun con nosotros," dijo Odúwa, y Orísha acordaron. Acordadamente con
ella tuvo su lugar en la izquierda de Odúwa, Orísha siendo sobre su derecha; es decir
Óshun fue considerada el tercer personaje en Ífè.

El segundo jefe en Ífè, el Obalúfe, clamó descender desde Óshun por él mismo y la
mitad de las personas de su cuarto del pueblo. Él tiene un bien en su compuesto, llamado
Óshun, que es dicho a ser el agua actual en la cual Óshun se transformó ella misma. Él
dice que su primer antepasado tomó una calabaza del agua con él cuando él fue a
guerrear, y este galón se volvió la fuente del Río. La fuente es a cuarenta millas de Ífè, y
quizás el Obalúfe tiene razón. El bien nunca está seco; y este es innecesario agregar que
el agua tiene muchas propiedades curativas. Uno podría ser sorprendido si un
descendiente de Óshun muriera, excepto de otras causas.

"En el tiempo del Festival de Óshun," dice Obalúfe," todos su tribu colecta oveja,
cabras, ñames, agidi, vino-palma, kola, ratas, peces y palomas, y ellos los traen a mí para
la fiesta. Óshun obtiene la sangre de cabras, ovejas y palomas, la cabeza de un rata—para
no de un pez. Nosotros comemos el pez—aunque ellos son los niños de Óshun y por
consiguiente nuestros hermanos." Óshun es más estrecha-atada que sus descendientes.

Notas. p. 60

IX. Olókun.

Hay un estanque en Ífè llamado Ókun (el Océano), dónde Olókun se transformó a agua.
De allí ella fluyó bajo tierra, y entró afuera en el mar.

Su sacerdote me mostró una cabeza de bronce de Olókun, que tiene considerable mérito.
Él me dijo que, a cambio por sacrificio, Olókun da cuentas. En Benin, Olókun es
considerada a ser la Diosa de la Riqueza, así como del Mar; y un Rey de Benin, quien
debe haber estado vivo aproximadamente 1400 D.C., es dicho que ha encontrado los
tesoros de Olókun puestos en la orilla y por haber saqueado su coral.

X. Ógun y Orányan.

Ógun fue el hijo de Odúwa, y normalmente es considerado como el Dios del Hierro y de
la Guerra.

De acuerdo a su sacerdote-jefe (el Oshógun), él se marchó lejos a guerrear y capturó una


mujer llamada Deshóju, quien él hizo a su esposa. Cuando Ógun volvió a Ífè, Odúwa
tomó de Deshóju su hijo. Allí hay alguna duda por consiguiente acerca de si Ógun era
que el padre de Orányan—quien nació con una pierna, un brazo y mitad de su cuerpo
negro, el resto siendo blanco (de acuerdo al Oshógun).

Ógun puede haber tenido otros atributos. Él pudo haber sido una Deidad Fálica, porque
allí son talladas piedras en Ífè, llamadas los cetros de Ógun que parece

Mitos de Ìfe. p. 61

para ser de origen Fálico. Esto es también notable que, en el momento de su Festival,
Ógun es dicho que mata a cualquier casadera muchacha que él puede encontrar en la casa
de su madre. (Esto pasó una vez a Arába; el probable yerno no podría producir £5, y
Arába, quien no da ningún crédito, perdió una nota potencial de cinco libras en la forma
de su hija). Más allá, cuando un niño es circuncidado la desunida piel es puesta en una
calabaza de Ógun "para rendir culto a el (junto con un caracol para que la herida pueda
sanar)."

Ógun puede también haber sido el Dios-Sol (o un adorador del Dios-Sol). Su festival es
normalmente llamado Olójjor (Señor del Día). Oshogun dice que Ógun fue Olójjor;
Arába dice que Olójjor era alguien más, la confusión siendo debido a la circunstancia
que los dos festivales tienen lugar al mismo tiempo. En esta conexión, el medio-y-medio
coloración de Orányan es sugestivo.

El perro es el principal animal usado para el sacrificio a Ógun. Orányan prefiere un


carnero, una rata, kola y mucho vino-palma.

Eventualmente, Orányan desplazó a su padre, quien plantó sus cetros en Ífè y se marchó
lejos. Yo he presumido la muerte de Osányi, cuando yo no puedo de lo contrario explicar
el hecho de que Ógun "se marchó lejos" en lugar de transformarse como los otros dioses
había hecho. En su giro, Orányan "se marchó: él tenía demasiada medicina para
morirse."

Nota. p. 62

XI. El culto de Peregún ’Gbo.

Peregún ' Gbo (o Peregún Ígbo) parece haber sido un dios quien causó el bosque para
traer adelante pájaros y bestias. Él era un hijo de Dios, y vino a la tierra con Ebbor
(culto) y Édi, un dios que da causa a los hombres para hacer lo que ellos saben que esta
equivocado.

Esto es evidente del encantamiento debajo ese Peregún ’Gbo fue originalmente
aproximado por personas en la necesidad de niños, pero hoy día la misma fórmula es
recitada por el sacerdote sea lo que sea un hombre pueda estar pidiendo. El sacerdote le
dice al hombre que traiga una oveja, kola, aceite-palma, una paloma, un gallo, y una
gallina; también una cabra viva para el sacerdote.

El sacerdote mata la oveja, paloma, gallo y gallina. Los tres pájaros y una parte de la
oveja son puestas en separadas ollas rotas con aceite-palma. El hombre es luego dicho a
producir nueve peniques valor de kowries, que son también puestos en las ollas. El
sacerdote toma el equilibrio de la carne de carnero además de la cabra viva. El sacerdote
entonces enfrenta las ollas, pone pimienta (átarè) en su boca, y recita el encantamiento:

1. Ígbo lóbi íror


Los bosques trae la pereza.

2. Íror lóbi ógubor


La pereza trae el mono.

3. Ógubor lóbi áhan-námajá


El mono trae el leopardo.

Mitos de Ìfe. p. 63

4. Ahan-námajá lóbi érelu-agáma


El leopardo trae la gallina-guinea.

5. Érelu-agáma lóbi ekusá


La gallina-guinea trae el halcón.

6. Ékusá lóbi óju-gbona


El halcón trae el mal espíritu que guarda la puerta del cielo.

7. Óju-gbona lóbi áfi íkere-tíkere éhin éku


El mal espíritu trae los órganos generativos de los hombres y las mujeres.

8. Peregún ’Gbo ni abobá Imálè


Sin traducir. Imale es el mensajero de Peregún ’Gbo y es enviado a hacer que el hombre
pida.

9. Oriyámi la-popo
Buena suerte es humana.

10. Ése ámi lápè okúte ába


El padre de una suerte niña es suerte.
11. Atorladórla Igbadá lordífa fun Orúnmila nigbatí nwon fi ojor íku re dóla.
Atorladorla Igbadá se acercó a Ífa en nombre de Orúnmila cuando ellos había fijado su
muerte para el mañana. (Atorladórla Igbadá es un buen espíritu quien mantiene en
aplazamiento un mal hecho contemplado por alguien.)

Nota. p. 64

12. Orúnmila ni kátikun tíkun kátikerè tikerè


Orúnmila dice menstruación cesará, y preñez comenzará.

13. Orúnmila ni on ko yúnle orun


Orúnmila dice que el (el niño) no irá al Cielo (es decir. Será nacido vivo).

Cuando el sacerdote ha terminado la recitación, el hombre toma las ollas al santuario de


Éshu (el Diablo). Las primeras diez frases son en alabanza de Peregún ’Gbo que ordenó
que Atorladórla Igbadá fuera a Ífa y es ahora pedido enviar Imále a Orúnmila con la
demanda del solicitante. (El encantamiento está al parecer en alguna forma del arcaico
Yoruba, y el Babaláwo tenía que explicar mucho de este al intérprete. Algunas de las
traducciones probablemente están muy sueltos).

XII. La adivinación de Ífa (Un fragmento).

Ífa era el Mensajero de los Dioses, y es consultado por los Yoruba en todos los asuntos.

Sus sacerdotes (llamados Babaláwo) gana considerablemente por la adivinación, que


ellos realizan con arena en una tabla redonda, o con un encanto llamado Okpéllè.

Okpéllè consiste en ocho pedazos de corteza en un cordón. Estos ocho son colocados en
cuatros.

Cada uno de los pedazos de corteza puede caer mostrando el exterior o el interior. Por
consiguiente

Mitos de Ìfe. p. 65

cada uno de los cuatros pueden caer en dieciséis maneras diferentes que tienen diferentes
nombres y significados.

Los dieciséis nombres son:—

1. Ógbè—todos cara abajo—mostrando interior.


2. Oyéku—todos cara arriba—mostrando exterior.
3. Iwóri.
4. Édi.
5. Obára.
6. Okánran.
7. Róshun.
8. Owórin.
9. Égutan.
10. Ossa.
11. Eréttè.
12. Etúrah.
13. Ológbon.
14. Ékka.
15. Oshé.
16. Offun o Orángun.

Cuando Okpéllè es tirado en la tierra y los dos cuatros son idénticos el resultante es
llamado:—

Ogbe Meji (es decir. Dos Ogbes) --- Egutan Meji


Oyeku Meji ----------------------- Ossa Meji
Iwori Meji ------------------------- Erétte Meji
Édi Meji --------------------------- Eturah Meji
Obára Meji ----------------------- Ologbon Meji
Okánran Meji -------------------- Ekka Meji
Roshun Meji ---------------------- Oshe Meji, o
Aworin Meji ---------------------- Offun Meji

Éstos se llaman los Dieciséis Mensajeros de Ífa.

Notas. p. 66

La oportunidad, sin embargo, de las cuatro sobre la izquierda del Babaláwo acordando
con ese en su derecha es solo uno en dieciséis. Las otras quince combinaciones que
pueden aparecer con Ogbe sobre la derecha son llamadas: Ogbe Yeku, Ogbe Wori,
Ogbe Di, & c., semejantemente con los otros Mensajeros de Ífa. Estas combinaciones
son llamadas los niños del Mensajero que aparecen sobre la derecha. Así, Ogbe Yeku es
un niño de Ogbe; Oyeku Logbe es un niño de Oyeku.

Desde esto será visto que Okpéllè puede mostrar 256 combinaciones.

Procedimiento.— Un hombre viene a un Babaláwo para consultar Ífa. Él pone un regalo


de cauris (al que él ha susurrado sus necesidades) ante el Babaláwo. El último toma el
Okpéllè y coloca este sobre los cauris. Él entonces dice: "Usted, Okpéllè, sabe lo que
este hombre dijo a los cauris. Ahora dígame." Entonces él alza el Okpéllè y acuesta este
sobre el suelo. Desde el mensajero o niño que aparecen el Babaláwo es supuesto a
deducir que su cliente quiere un hijo, ha robado una cabra, o tiene un dolor de muelas,
cuando el caso puede ser. Él entonces le dice lo que él debe traer como un sacrificio para
lograr sus fines. En todos los casos el sacrificio (o una parte grande de él) es ofrecido a
Éshu Por ejemplo, el cliente es pobre y necesita dinero: Édi Méji aparece, y el
Babaláwo le dice a su cliente que traiga un perro, una ave, y algunos cauris y aceite-
palma. El hombre se hiende el perro y el ave; pone el aceite-palma y

Mitos de Ìfe. p. 67

los cauris dentro de ellos, y los toma a Éshu. El Babaláwo probablemente toma el
volumen de los cauris para él mismo.

El aparecer de Ógbe Méji promete larga vida, pero una cabra debe ser traída.

Si un hombre no tiene ningún niño y Oyéku Méji aparece, él debe traer un carnero y una
cabra.

Iwóri Méji exige huevos, una paloma, y cauris de un hombre enfermo.

Édi Méji.— Como anteriormente.

Obára Méji.— Un sacrificio de 2 gallos, 2 gallinas, y 250 cauris son necesitados para
purificar después la menstruación.

Okánran Méji.— Una cabra y 500 cauris traen la menstruación.

Róshun Méjí.— Una ella-cabra y 2 gallinas para curar un dolor de cabeza.

Awórin Méji.— 4 gallos y 800 cauris para provocar la muerte del enemigo de uno.

Égutan Méji.— Un carnero (grande) y 1,200 cauris para curar un mal dolor de barriga.

Ossa Méji.— La carne de carnicero y 4 palomas para ahuyentar la brujería.

Erétte Méji. - 2 palomas, 2 gallos, y 600 cauris para conseguir a los niños.

Etúrah Méji.—Un vestido grande, una oveja, y 300 cauris para curar la enfermedad del
ojo.

Notas. p. 68
Ológbon Méji.—Sacrifique 4 caracoles y 4 palomas que si usted sospecha que alguien
desea envenenarlo.

Ekka Méji.— 4 gallinas, engrase, y 700 cauris para el dolor de oídos.

Offun Méji.— Si niños mantienen en moribundos, sacrifique 16 caracoles, 16 ratas, 16


pescados, y 1,600 cauris, y lo siguiente los niños vivirán.

Osse Méji.— 8 caracoles, 8 palomas, y 800 cauris para niños.

Ogbe Yeku.—(a) Si un hombre no tiene dinero, él debe traer 4 palomas, 2 chelines, y


jabón. El Babaláwo mezcla hojas (ewe-ire) con el jabón como un encanto, y el hombre
debe usarlo para un baño.

(b) Si un hombre está muy enfermo, él debe ofrecer 3 machos cabrío y 5s. 6d. Él
entonces estará mejor.

Ogbe Wori.—(a) Si un hombre está enfermo, él debe ofrecer 8s. y una oveja. Por otra
parte él morirá.

(b) Si un hombre necesita dinero, él debe traer hilo y 6 palomas y jabón comprado. El
Babaláwo consigue ewe-aji y los pone en el jabón con la sangre de la paloma. El hilo se
pone dentro del jabón. El hombre entonces lava.

(c) Si un hombre ha cometido un crimen, él debe traer 7 gallos y 35s. El Babaláwo mata
los gallos, y toma los 35s. para él. Él toma la arena de Ogbe Wori desde la tabla de Ífa y
pone algunos en el pecho de cada gallo, con 260 cauris. Cinco de los gallos son entonces

Mitos de Ìfe. p. 69

dados a Éshu y los otros 2 son tomados a un lugar dónde tres caminos se encuentran.
Entonces o un testigo necesario no aparecerá en corte o el acusado no será encontrado.

(d) Si dos hombres quieren la misma mujer, y Ogbe Wori aparece (cuando uno de ellos
consulta Ífa), el Babaláwo pide por 4 gallinas y a un macho cabrío. La mujer entonces se
vuelve la esposa del cliente. Éshu consigue las gallinas y la sangre de la cabra; el
Babaláwo, la cabra.

XIII. Una cura para las enfermedades súbitas y serias.

El sacerdote pone pimienta (atáre) en su boca y recita:—

Akélejá! Akélejá!
Un espíritu que agarra a un hombre por la garganta y hace respiración rápida e
intranquila.

Akélewóssa!
Un espíritu que causa la ojo-enfermedad.

Akútobárun!
Espíritus que preocupan a las personas enfermas.

Amúrorfáshorgérrè!
Espíritus ahora llamados Anjánu, que causa delirio.

Amulepásheyé!
Uno que causa el dolor de barriga malo.

Ojobolóro!
Espíritus que causan los dolores de cabeza severos.

Notas. p. 70

Abiyéte-ashórmunyányan!
Uno "que tiene un borde muy afilado a su tela," y dolor de espalda de las causas.

Asá-ntétè-mofárapá!
Duendes vistos por la noche en blancas telas. Ahora llamado Elérè. Ellos afligen a los
niños.

Olómo-áro, niyéye éshukú!


"Olómo-áro que arte la madre de males." Ella no hace daño pero es invocada porque sus
niños, ya nombrados, escucharán cuando se ore en el nombre de su madre.

Arónposhé Íreké!
El marido de Olómo-áro y el padre de los espíritus malos. Si él no es invocado el hombre
enfermo muere. Él también es llamado para detener las travesuras de sus hijos.

Íshuku den lényimi!


"¡Mal, salga de mi atrás!" Cuando esto ha sido hablado, los espíritus dejan al hombre
enfermo.

Bi Ébura Nla ba de éti ómi, apéyinda.


"Si el Gran Mal viene al banco del río, él retrocederá.
Ébura Nla es el amo de todo los males. Si llamado por los otros espíritus, él viene al
extenso banco del río Arénkenken, que es descrito como el "agua de Cielo." Si él cruza
al lado cercano, los hombre enfermos mueren.

Mitos de Ìfe. p. 71

Después de terminar el encantamiento, el sacerdote aloja alguna de la pimienta de su


lengua y pone sobre la cabeza del paciente. El paciente recupera, y es capaz de tomar
nutrición en seguida.

(El Yoruba de esto es probablemente arcaica. El intérprete no lo entendió, y el


Babaláwo tenía que explicar).

XIV. Ajíja (El Polvo-Diablo).

"Ajíja era un doctor que vivió con Arámfè, y vino a la tierra con otro doctor. Ellos
hicieron varias medicinas—una para matar a un hombre cuando pidió a hacer eso. Él
pronunció ciertas palabras, y el hombre murió. Él podría también matar con su cayado. Él
vive en Óke Arámfè (Óke Óra), y puede sólo ser aproximado a través de Arámfè (el
padre de los dioses), porque él es un hombre malo. Él se adorado cerca del santuario de
Arámfè.

"Cuando él desea hacer problema, él viene a través del pueblo. Él a veces pone fuego a
una casa recogiendo el fuego y poniéndolo en la paja.

"Cuando un hombre se encuentra Ajíja, él debe protegerse el mismo poniendo pimienta


en su boca y diciendo: "Ahanríyen, Fágada Shaomi" (nombres de Ajíja), "ki íru re
bómi" (ponga su cola en agua). El hombre debe escupir la pimienta entonces a Ajíja.

"A veces Ajíja se convierte en un gran lagarto".

Según otra historia, Ajíja es un diablo con una pierna que tira a los hombres abajo y
quiebra sus tobillos.

Notas. p. 72

Final.

También podría gustarte