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ara hacer introducción al curso el docente hizo mención a cinco elementos,


pilares dentro del estudio o para el estudio de la teología y liturgia de los
sacramentos de curación y servicio.

Estos son:

I. Biblia
II. Teología
III. Liturgia
IV. Derecho canónico
V. Principios y normas morales

Los textos base dentro del curso son:

 Ritual de Sacramentos
 Derecho Canónico
 Catecismo

Entrando en materia, y señalando los presupuestos bíblicos para argumentar los


sacramentos, se hace además mención de que aunque pocos, en el Antiguo Testamento
pueden encontrarse argumentos que soporten las teorías de los sacramentos.

En lo correspondiente al magisterio –documentos de la Iglesia-, la Sacrosanctum


Concilium aporta elementos importantes para acercarnos a los sacramentos. Ejemplo
de esto es el numeral 59 de la misma, que expone o sostiene lo siguiente:

Los sacramentos están ordenados a la santificación de los hombres, a la edificación del Cuerpo
de Cristo y, en definitiva, a dar culto a Dios; pero, en cuanto signos, también tienen un fin
pedagógico. No solo suponen la fe, sino que, a la vez, la alimentan, la robustecen y la expresan
por medio de palabras y de cosas; por esto se llaman sacramentos de la “fe”. Confieren
ciertamente la gracia, pero también su celebración prepara perfectamente a los fieles para
recibir fructuosamente la misma gracia, rendir el culto a Dios y practicar la caridad. SC #59.
En esta misma línea, -teniendo presente la enseñanza de la Iglesia sobre los
sacramentos- se dio lugar a la analogía de los sacramentos. Comparándolos a los ciclos
de la vida por los cual transita dentro de su lapso normal un ser humano, es decir:

Sacramento Ciclo

Bautismo Nacimiento

Eucaristía Desarrollo integral / alimento

Confirmación Robustecer / fortalecer

Orden sagrado Edad adulta

Penitencia | Unción Sanar / fin de la vida

De la reflexión o de los sacramentos en sí mismo se derivan una serie de temas


directamente implicados con la esencia de la sacramentalidad. La salvación es uno de
esos temas, y hay que saber que el lugar de la salvación es la historia; contraria o
antónimo de la salvación es la condenación, que consiste en negarse a que Dios
acontezca en la historia. Y al permitir que Dios acontezca en la historia –salvación- se
deriva otro término: la liberación. Esta equivale a salvación y no a expulsión de
demonios.

¿Liberarnos? ¿De qué?

 Del pecado: personal y de las estructuras


 Liberarnos para llegar a la salvación escatológica.
Hecho el anterior preámbulo, podríamos dar lugar a los sacramentos propiamente
dichos. El primero es el de la Penitencia. Y para hablar de este sacramento
necesariamente debemos apoyarnos en el Catecismo de la Iglesia Católica, el Ritual de
la Reconciliación y la Penitencia, como en algunas consultas de orden personal en
términos como metanoia y conversión.

El Catecismo condensa la exposición de la fe, doctrina y moral de la Iglesia Católica.


Referente al sacramento de la Penitencia nos dice lo siguiente:

El sacramento del perdón

Cristo instituyó el sacramento de la Penitencia en favor de todos los miembros pecadores de su


Iglesia, ante todo para los que, después del Bautismo, hayan caído en el pecado grave y así hayan
perdido la gracia bautismal y lesionado la comunión eclesial. El Sacramento de la Penitencia
ofrece a estos una nueva posibilidad de convertirse y de recuperar la gracia de la justificación.
Los Padres de la Iglesia presentan este sacramento como “la segunda tabla (de salvación)
después del naufragio que es la pérdida de la gracia” (Concilio de Trento: DS 1542; cf Tertuliano,
De paenitentia 4, 2). CCE 1446.

Y continúa:

A lo largo de los siglos, la forma concreta, según la cual la Iglesia ha ejercido este poder recibido
del Señor ha variado mucho. Durante los primeros siglos, la reconciliación de los cristianos que
habían cometido pecados particularmente graves después de su Bautismo (por ejemplo,
idolatría, homicidio o adulterio), estaba vinculada a una disciplina muy rigurosa, según la cual
los penitentes debían hacer penitencia pública por sus pecados, a menudo, durante largos años,
antes de recibir la reconciliación. A este “orden de los penitentes” (que solo concernía a ciertos
pecados graves) solo se era admitido raramente y, en ciertas regiones, una sola vez en la vida.
Durante el siglo VII, los misioneros irlandeses, inspirados en la tradición monástica de Oriente,
trajeron a Europa continental la práctica “privada” de la Penitencia, que no exigía la realización
pública y prolongada de obras de penitencia antes de recibir la reconciliación con la Iglesia. El
sacramento se realiza desde entonces de una manera más secreta entre el penitente y el
sacerdote. Esta nueva práctica preveía la posibilidad de la reiteración del sacramento y abría así
el camino a una recepción regular del mismo. Permitía integrar en una sola celebración
sacramental el perdón de los pecados graves y de los pecados veniales. A grandes líneas, esta es
la forma de penitencia que la Iglesia practica hasta nuestros días. CCE 1447.

El Ritual de la Reconciliación y la Penitencia por su parte sostiene que la Penitencia atañe


a una actitud absolutamente interior. Podemos conectar los términos metanoia y
conversión a lo ya mencionado sobre el presente sacramento.

Penitencia Metanoia Conversión

Virtud que consiste en el Media vuelta o El Nuevo Testamento usa


dolor de haber pecado y el conversión. Decimos: el la palabra strefo para
propósito de no pecar más. arrepentimiento denotar tanto un darse
vuelta físico (Jn 21, 20)
como un cambio de actitud
para con Dios (Hch 15, 3).

Definiciones del diccionario bíblico digital Bibliatodo. En el sitio web bibliatodo.com

El sacramento de la Penitencia confiere y conlleva una dimensión salvante. Donde el


hombre recibe además:

 Reconciliación
 Liberación
 Salvación
En este sentido, para acceder a la conversión y posterior reconciliación el pecado debe
primero reconocerse.

FUNDAMENTOS TEOLÓGICOS DEL SACRAMENTO DE LA PENITENCIA

1. Fundamentos teologales
 Relación con las tres divinas Personas
 Adquirir sensibilidad cristiana
 El pecado – ruptura de la Alianza

2. Fundamentos Cristológicos

 La Penitencia cristiana es participación en la vida, pasión y muerte de


Jesucristo.
 La reconciliación es un don de Dios, una iniciativa suya
 La pasión y muerte de Cristo, renovadas sacramentalmente en la Iglesia-
Eucaristía.
 La Iglesia debe ser vista como sacramento de conversión y como
instrumento para el perdón de los pecados.
Bajo dos dimensiones:
I. Reconciliadora
II. Reconciliada

EL SACRAMENTO DE LA PENITENCIA EN LA HISTORIA

¿Cuándo inicia?

Para adentrarnos en los antecedentes sobre el sacramento de la penitencia debemos


primero o llevarlo de la mano junto al pecado.
Tipos de pecado:

I. Personal
II. Social – estructural

Propiamente a nivel histórico su carácter (el del sacramento de la penitencia) muta.

 De ser público –primeros siglos-


 A ser privado –Edad Media-

Se sabe que en la antigüedad se esperaba hasta la muerte para bautizarse y confesarse.


Por ello la Iglesia establece el bautismo desde temprana edad (niños) lo mismo que lo
hace con la penitencia.

Pasaje histórico:

I. Con san Agustín inicia el conocimiento de cómo proceder


II. Siglos XII-XIII audiendas personales
III. Trento lo institucionaliza como propiamente “sacramento de la Penitencia”
IV. Alfonso María de Ligorio crea los Manuales de confesión
V. Concilio Vaticano II. Reformas litúrgicas y sacramentales.

FUNDAMENTO LITÚRGICO DEL SACRAMENTO DE LA PENITENCIA

Observaciones previas
La reconciliación de los penitentes en la vida de la Iglesia
Los oficios y ministerios en la reconciliación de los penitentes
La celebración del sacramento de la penitencia
Las celebraciones penitenciales
Adaptaciones del rito a las diversas regiones y circunstancias

Requerimientos para celebrar plenamente el sacramento:

 Preparación sacerdote-penitente
 Acogida al penitente
 Lectura de la Palabra de Dios
 Confesión-satisfacción
 Oración del penitente-absolución
 Rito breve

Con el sacramento de la Penitencia se repara y se reconcilia. El sacramento puede ser


personal, individual como colectivo. Entra en la parte final del curso en lo que
corresponde al sacramento de la penitencia el tema de las indulgencias,
específicamente la indulgencia plenaria. Esta viene desde Trento –siglo III- en aquel
momento se estaba construyendo el templo de san Pedro por lo cual se necesitaban
recursos. Ambiente en el que nace la indulgencia plenaria.

Con el Concilio Vaticano II se regula el tema diciéndose que esta existe como medio de
reconciliación, salvo pecado grave y es para aquellas personas que por distintos
motivos no han podido acercarse al sacramento de la reconciliación.

FUNDAMENTO LITÚRGICO DEL SACRAMENTO DE LA UNCIÓN

Al hacer referencia a la liturgia del sacramento de la unción, debemos también dirigir


la mirada al antiguo oriente donde se hacía unción a los reyes de Mesopotamia y donde
se empleaba la unción como rito para los desposorios.
En Egipto por su parte, se utilizaba para la consagración de estatuas de los dioses y para
la de los faraones.

También desde la enseñanza de los apóstoles o Didaché como desde la tradición


patrística encontramos elementos afines a la liturgia del sacramento de la unción.
Desde la Didaché podemos ver que se brindan indicaciones sobre la unción como
sacramento que se administra con un óleo consagrado y que se connumera con el de la
Eucaristía. En la tradición patrística, por su parte, encontramos que la unción debía
administrarse muy en privado en tiempos de persecución.

Estrictamente en clave bíblica, en los dos testamentos descubrimos que en el Antiguo


Testamento, en el uso ritual sagrado, el aceite servía para consagrar altares (cf. Gn 28,
18) y, junto con perfumes, también las personas y objetos empleados en el culto (Ex 30,
23-33). Ya en el Nuevo Testamento, la unción practicada por los apóstoles, se halla en
un contexto religioso, en el que insiste en la penitencia y la conversión y se quiere
destruir el poder de los demonios. Ya no solo se concebirá como una práctica curativa.

FUNDAMENTO BÍBLICO DEL SACRAMENTO DE LA UNC IÓN

La enfermedad en los primeros siglos de la Iglesia es una realidad humana consecuencia


del pecado. Por su parte la fe es la garante de superar la dificultad del pecado (Job 1, 21)

Dijo: “Desnudo salí del seno de mi madre, desnudo allá retornaré. Yahveh dio, Yahveh quitó:
¡Sea bendito el nombre de Yahveh!”

Dentro del Antiguo Testamento se encuentran lugares signo de la salvación, del


reintegro a la vida tales como el Río Jordán y la Piscina de Siloé.

Textos bíblicos que nos pueden acercar al sacramento desde el argumento bíblico se
encuentran en el evangelio de Marcos y en el libro de Santiago.

Y llama a los Doce y comienza a enviarlos de dos en dos, dándoles poder sobre los espíritus
inmundos. Les ordenó que nada tomasen para el camino, fuera de un bastón: ni pan, ni alforja, ni
calderilla en la faja; sino: “Calzados con sandalias y no vistáis dos túnicas.” Y les dijo: “Cuando
entréis en una casa, quedaos en ella hasta marchar de allí. Si algún lugar no os recibe y no os
escuchan, marchaos de allí sacudiendo el polvo de la planta de vuestros pies, en testimonio
contra ellos.” Y, yéndose de allí, predicaron que se convirtieran; expulsaban a muchos demonios,
y ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban. Mc 6, 7-13

¿Sufre alguno entre vosotros? Que ore. ¿Está alguno alegre? Que cante salmos. ¿Está alguno
enfermo entre vosotros? Llame a los presbíteros de la Iglesia, que oren sobre él y le unjan con
óleo en el nombre del Señor. Y la oración de la fe salvará al enfermo, y el Señor hará que se
levante, y si hubiera cometido pecados, le serán perdonados. St 5, 13-15

Según la tradición de la Iglesia se puede ver también o extender el tema de la unción de


los enfermos a la luz del relato de Hipólito de Roma sobre la bendición del óleo en el
siglo II; así mismo, la práctica de la unción en el siglo IV a partir de la Carta de Inocencio
I a Decencio obispo de Gubbio para llegar hasta la Edad media donde se habla
finalmente de la extremaunción.

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La Unción en los pueblos del Antiguo Oriente

o Tiene un uso religioso, sin embargo, no hace alusión a un rito propio como
sacramento.
o En el mundo mediterráneo y en Oriente, se menciona entre las ofrendas que se
hacían a los dioses en Mesopotamia, expresión de vida y de fortaleza.
o Se ungía, asimismo, a los reyes en Mesopotamia; también se empleaba la unción
como rito de desposorios.
o En Egipto se utilizaba para la consagración de estatuas de los dioses, para las de
los faraones y de sus funcionarios.
o Los hititas la empleaban para diferentes acciones de culto y para la consagración
del rey.
o En Siria y Palestina, para el culto y la unción del rey.
En la Didaché

En su versión cóptica existe un fragmento que contiene una bendición para el


“ungüento”: “Respecto del ungüento, dad gracias así: ‘Te damos gracias, Padre nuestro,
por el ungüento que nos has indicado por Jesús, tu siervo; gloria a ti por los siglos.
Amén’”.

Parecería indicar un sacramento que se administra con un óleo consagrado (al parecer,
en la misa) y que se connumera con el de la Eucaristía.

En la tradición patrística

El único comentario completo sobre el rito de la unción como sacramento es el de Beda


el Venerable. Conoce el rito de la unción, acompañada de la oración que cura la
enfermedad. Y también perdona pecados, siempre que haya autoacusación y metanoia.

Algunos piensan que al principio no fue muy frecuente el uso de este sacramento… Para
otros habría influido mucho la disciplina del arcano. La unción debía administrarse muy
en privado en tiempos de persecución.

En las iglesias de Oriente

San Ireneo Habla de dos ritos

1. Censura en su obra Adversus haereses, a los gnósticos: “Hay quienes dicen que es inútil
llevar el agua; pero, mezclando en uno aceite y agua con ciertos dichos semejantes a los
que antes dijimos, lo echan sobre la cabeza de los que se consagran. Y quieren que esto
sea redención, ungiendo ellos mismos con el bálsamo”.

2. Ireneo alude a la unción de los enfermos: “Otros hay que redimen a los que están
muriendo al final de su defunción echando sobre sus cabezas aceite y agua, o el
ungüento ya dicho con el agua, con las invocaciones ya dichas….”.

Ireneo conoce también la imposición de manos como medio de curación. Dice en la


misma obra: “Otros curan, por la imposición de las manos, a los trabajados por alguna
enfermedad, y los devuelven sanos”.
Documentos litúrgicos sobre la Unción

La Traditio apostólica, de Hipólito: refleja algunas prácticas litúrgicas de la Iglesia


romana y algunas Iglesias orientales.

Liber Ordinum, de la liturgia mozárabe: en él se encuentra un orden para visitar y ungir


al enfermo, que dice: “El sacerdote hace la señal de la cruz sobre la cabeza del enfermo
con aceite bendecido mientras dice: ‘En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu
Santo, que reina por los siglos de los siglos. Amén’”.

Sacramentario gregoriano.

Sacramentario-gelasiano.

En el Antiguo Testamento

En Israel se empleaba como elemento básico de la nutrición (Eclo 39, 26); como
condimento o para dar solidez a la harina. Se empleaba en combinación con otras
substancias, según el caso de la viuda de Sarepta en Sidón, cuyo aceite y harina
multiplicó milagrosamente el profeta Elías (3R 17, 8-16).

Entre los árabes, el aceite se ha considerado como fortalecedor del organismo y de los
músculos. Servía así mismo como cosmético para el ornato y cuidado corporal: “Que en
todo tiempo tus vestidos estén limpios y que no falte el aceite de tu cabeza” (Eclo 9, 8).

En el uso ritual sagrado, el aceite servía para consagrar altares (cf. Gn 28, 18...); y, junto
con perfumes, también las personas y objetos empleados en el culto (Ex 30, 23-33).

La unción del aceite era uno de los ritos más destacados en el A.T. El término Mesías
(mashiáh), de significación ungido, se aplicó al que iba a reunir en sí la triple unción de
rey, profeta y sacerdote, el Salvador de Israel (cf. 1Sm 2,10; Sal 2,2; Dn 9, 25), que en sí
concentraría la dignidad de rey, profeta y sacerdote.
En la enfermedad No ungirse con aceite era señal de duelo y de tristeza (cf. 2Sm 14, 2;
Mt 6,17); ungirse era el término de la penitencia (cf. 2Sm 12, 20).

En el Nuevo Testamento Mc 6, 13

La unción practicada por los apóstoles se halla en un contexto religioso en el que se


recalca la penitencia o conversión y se quiere destruir el poder de los demonios. No se
trata de una mera práctica medicinal o curativa.

Es un rito que se relaciona con lo religioso, y en concreto con la metanoia, o penitencia.

En Palestina esta aptitud natural del uso del aceite para la confortación del cuerpo sirvió
de base para el rito religioso practicado por los apóstoles.

No se comprende que los apóstoles practiquen este rito y que obtengan el efecto
preternatural de la curación si no es porque el Maestro los ha aleccionado sobre lo que
tienen que hacer.

El concilio de Trento afirma que: “Esta sagrada unción de los enfermos fue instituida
por Jesucristo nuestro Señor como verdadero y propio sacramento del N.T., insinuado
ciertamente en Marcos (6,13), y por Santiago, apóstol y hermano del Señor,
recomendado a los fieles y promulgado…”

Para algunos estudiosos como: Belarmino, Estius, Cornelio a Lapide, Jansenio, Calmet,
Knabenbauer, se podrá discutir si en Mc 6, 13 se trata del sacramento solamente “en
figura o tipo”; o bien se describen ya los comienzos de la institución del sacramento
(Beda, Maldonado, Lagrange...

Lo cierto es que hay una insinuación.

En el pasaje de Santiago 5, 13-15


El texto habla de una oración de los presbíteros que va junto con la Unción del enfermo;
la eficacia no se atribuye solo a la oración, sino a la oración con la Unción.

El texto no dice que se invoque el nombre del Señor (aunque podía hacerse y
probablemente se haría); dice que se unja en el nombre del Señor; esto es, con la
autoridad y en persona de Cristo, como se hace en los sacramentos.

El don de curar por medio de los presbíteros de la Iglesia que oran y ungen aparece en
Santiago como algo ordinario y permanente en la Iglesia; “basta llamar a los presbíteros
y se obtendrá”.

El texto de Santiago presenta las características de un rito del sacramento porque se


trata:

De un rito sensible y simbólico, con la significación de una confortación y de una


sanación espiritual.

La confortación espiritual tiene una analogía o semejanza de proporción con la


confortación material producida por la Unción, en el caso de los atletas.

La santificación interior, significada y producida por este rito, viene indicada por las
expresiones la oración de la fe “salvará” al enfermo, con un amplio sentido de salud
corporal y espiritual y por la frase siguiente: “El Señor “lo levantará”.

Concilio Vaticano II y CEC

La Constitución Sacrosanctum Concilium cambia el nombre de extremaunción que hacía


pensar que era el sacramento de los moribundos y no de los enfermos graves, en peligro
de muerte por enfermedad o vejez. Ahora se llamará sacramento de la Unción.

Lumen Gentium n. 11 presenta la enseñanza cristológica y eclesial del sacramento de la


Unción.
CEC nn. 1499-15-13, presenta los fundamentos contextuales del sacramento de la
Unción y habla tanto de la enfermedad y del efermo en las perspectivas filosóficas y
teológicas, como de Jesucristo y su presencia visible en la Iglesia.

Materia y forma de la Unción

También se denominan constitutivos.

Por “materia” de un sacramento se entiende la parte constitutiva del signo sacramental,


que es parte determinable.

Por “forma”, se entiende la parte constitutiva del signo, que es parte determinante.

También se habla de materia próxima, que es la acción con que se realiza el signo
(unción, oblación, imposición de manos...), y de materia remota, que es la substancia
(aceite, agua...) que sirve para realizar la acción, que constituye la materia próxima.

Según Santiago 5,14s., los presbíteros tienen que ungir al enfermo (materia del
sacramento) y orar sobre él (forma del sacramento, que determina el significado de la
Unción).

La materia de la Unción de los enfermos

La Carta de Inocencio I señalaba ya como materia remota de este sacramento “el santo
óleo de la unción... Hecho por el obispo”, esto es, bendecido por el obispo.

El decreto pro Armenis, al indicar la práctica común en la Iglesia, dirá que “la materia
es el aceite de oliva bendecido por el obispo”.

El Tridentino, sin descender a la precisión de aceite de oliva, enseñará que de la Carta


de Santiago entendió la Iglesia que “la materia es óleo bendecido por el obispo”.

Definición de santo Tomás


Santo Tomás declará el significado de la Unción del aceite: “La curación espiritual que
se emplea al final tiene que ser perfecta, porque después de ella no queda otra. Y tiene
que ser suave, para que no se rompa, sino que se fomente la esperanza, que es, sobre
todo, necesaria a los enfermos que se van”.

La idea de robustecimiento, confortación y protección se encuentra en el símbolo del


aceite y de la unción, afirmará santo Tomás.

Sobre la previa bendición del aceite

Ha sido objeto de discusión; 1., si este aceite, empleado en un rito religioso, debe ser
objeto de una bendición o consagración religiosa antes de su uso y aplicación; y 2.,
suponiendo que esta bendición se requiera, quién está facultado para darla, si ha de ser
siempre un obispo o puede ser un presbítero.

Teólogos que niegan la necesidad de un aceite bendecido: Victoria, DeSainteBeuve,


Drouwen.

Teólogos, como Suárez, Estius pensaron que era necesario para administrar la santa
Unción usar aceite bendecido por el obispo, sin que bastara la bendición de un simple
presbítero.

Razones por las que es necesaria la previa bendición

A nivel general y que Santo Tomás también propone:

El efecto de sanación corporal no lo causa el aceite en la unción por su propia virtud


natural,.

La plenitud de gracia que confiere este sacramento hace que no sólo borre la culpa, sino
también las reliquias de ella y la enfermedad corporal.
La tercera razón (primera de Santo Tomás) es que “toda la eficacia de los sacramentos
desciende de Cristo. Y por eso los sacramentos que El usó tienen eficacia por su mismo
uso;
así comunicó a las aguas fuerzas regenerativa con el contacto de su carne. Pero como
no usó este sacramento ni unción alguna corporal, por eso se requiere en todas las
unciones [previa] santificación de la materia”.

La forma del sacramento de la Unción

En las iglesias orientales como occidentales presentan una forma deprecativa, es decir,
que se expresa en forma de oración.

En la Carta de Santiago el rito consta de unción y de acción y la forma del rito es la


oración.

La forma puede ser también optativa: “Por esta santa unción... que Dios te perdone”...

Indicativa: “Te unjo en el nombre del Padre..., para que la oración de la fe te salve...”

La forma puede ser imperativa: “En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo,
que reina por los siglos de los siglos. Recibe la salud del cuerpo y la remisión de todos
los pecados”.

Y a veces es fórmula mixta (mezcla de fórmula optativa o indicativa con la deprecativa).

La nueva forma del sacramento

En ella se indica la acción que se realiza, cuyo sentido se determina por la forma: “Por
esta santa unción”.

Se apela a la misericordia del Señor, porque se trata de concesión de gracia y remisión


de los pecados: “... y por su piadosísima misericordia...”.
Se indica el efecto sobrenatural en la gracia que se produce y el auxilio o ayuda que con
ella se obtendrá: “te ayude el Señor con la gracia del Espíritu Santo”.

Se señala como efecto la remisión de los pecados: “... Para que te salve, liberado de
pecados”

Se indica el alivio espiritual y corporal que produce el sacramento: “y te alivie propicio”

Efecto y finalidad de la Unción

Sanación completa del hombre entero.

Sanación espiritual, expresada en el concilio de Pavia, dice: “Es un misterio


[sacramento] grande y muy de apetecer, por cuyo medio, si se pide con fe, se perdonan
los pecados y convenientemente (consequenter) se restituye la salud corporal”.

El decreto pro Armenis: “si por el pecado incurrimos en enfermedad del alma, por la
penitencia somos sanados espiritualmente; también espiritualmente y corporalmente,
en cuanto conviene al alma, por la extremaunción”.

El Tridentino expresó: “Y la oración de la fe salvará al enfermo y el Señor lo levantará;


y, si estuviere en pecados, sele perdonarán”.

Sanación corporal: “Se indica por los concilios Ticinense, Florentino (decreto pro
Armenis) y Tridentino. Y en estos dos últimos usando una fórmula condicional: “Y, en
cuanto conviene al alma, también [la salud] del mismo cuerpo”; “y consigue a veces la
salud del cuerpo, cuando conviniere a la salud del alma.

Manera de producir la sanación

No es una manera milagrosa o carismática.

La manera connatural de explicar la curación es por la misma confortación psicológica


producida en el alma.
Ayuda para la paz, tranquilidad, buen funcionamiento del organismo y euforia
fisiológica la misma paz y serenidad del espíritu. Mucho más el optimismo, los alientos
y la confortación del alma.

Se agrega la providencia particular de Dios, que ordena en bien del enfermo las
atenciones, las inspiraciones y los diagnósticos de los médicos, la salubridad de las
medicinas y de los remedios, etc .

Y tampoco se excluye una intervención directa y sobrenatural de Dios, que, aunque no


fuera milagrosa, alcanzaría la categoría de las “gracias” concedidas u “oraciones
escuchadas”.

A quiénes se administra la unción

Este sacramente no es solo para los últimos instantes de la vida, sino que puede y debe
administrarse desde que la enfermedad es peligrosa.

Según el Magisterio y la Tradición: El decreto pro Armenis (1439) ya establecía que


“este sacramento no debe administrarse sino al enfermo cuya muerte se teme”.

Según el concilio de Trento, en las palabras de la Carta de Santiago “se declara también
que esta Unción es para los enfermos, sobre todo para aquellos que están en el lecho
tan peligrosamente, que parece están ya al final de su vida; por donde se ha llamado
sacramento de los que se van”.

Disposiciones en el sujeto

Debe haber recibido el sacramento del bautismo.

Se recomienda con anterioridad a la Unción practicar el sacramento de la penitencia.

Según la Carta de Santiago se trata de un sacramento para los fieles cristianos.


Si consta con certeza la muerte de un individuo, no se le puede administrar la Unción ni
lícita ni válidamente.

¿Cuántas veces se puede recibir la Unción?

No es un sacramento que imprima carácter, y por ello no se reciba una vez en la vida.
Su efecto es para la presente enfermedad; y, por lo tanto, el sacramento ejerce su influjo
mientras dure la presente enfermedad.

Rito de la unción fuera de la misa

Comprende:

I. Saludo.
II. Exposición del Santísimo, si la persona va a recibir la comunión.
III. Aspersión de agua bendita, si el sacerdote lo desea.
IV. Rito penitencial.
V. Liturgia de la Palabra,se lee un breve pasaje de la biblia, preferiblemente: Del
Evangelio según san Mateo 8, 5-10.13; Del Evangelio según san Marcos 2, 1-12;
Del Evangelio según san Lucas 11, 5-13.
VI. Seguidamente se procede con la liturgia de la Unción (letanías e imposición de
manos).

Formula de la Unción

1) El sacerdote primero unge la frente diciendo: “Por esta santa unción y por su
bondadosa misericordia te ayude el Señor con la gracia del Espíritu Santo”.
2) Después unge las manos diciendo: “Para que, libre de tus pecados, te conceda la
salvación y te conforte en tu enfermedad”.
3) El rito finaliza con una oración que puede ser general o según la situación
particular.
4) Oración del padre nuestro.
5) Liturgia de la comunión.
6) Oración de conclusión.

Rito de la Unción dentro de la Misa

 Ritos iniciales.
 Acto penitencial.
 Oración colecta.
 Liturgia de la Palabra (Sabiduría 9, 9-11.13-18; De los Hechos de los Apóstoles
4, 8-12 –TP; Salmo 33; Del apóstol san Pedro 1, 3-9; Evangelio de Mateo 8, 5-
17).
 Liturgia de la Unción (letanías, imposición de manos).
 Liturgia de la Eucaristía; prefacio de los enfermos.
 Ritos conclusivos.

Unción en un hospital u otra institución

 Saludo.
 Oración sobre la Unción tomado del Carta de Santiago.
 Liturgia de la Unción (imposición de manos, Unción en la frente y en las manos
con la respectiva formula).
 Oración del Padre Nuestro.
 Oración después de la Unción.
 Bendición.

FUNDAMENTO CANÓNICO DEL SACRAMENTO DE LA UNCIÓN


Noción: Sacramento que brinda alivio espiritual y de alguna manera corporal. Además,
concede consuelo, paz y ánimo y recibe el perdón de los pecados a quien se le dispensa.

En el código de 1917 se encuentra la manera como se debe administrar: primero, debe


realizarse por parte del presbítero al bautizado que en uso de su razón lo ha solicitado.

Y no debe ser administrado en caso de que haya peligro de muerte reiterado en la


misma enfermedad.

Estrictamente, en el Código de Derecho Canónico de 1983, lo referente al sacramento


de la Unción se encuentra en los numerales 997-1007.

Uno de los elementos materiales indispensables para conceder el sacramento de la


Unción es el Crisma.

 ¿Por qué se utiliza el crisma?

Prescripciones litúrgicas:

La celebración del sacramento puede ser con viático o sin viático.

Liturgia del sacramento

Procedimiento – guía práctica:

 El enfermo confiesa sus pecados y se reconcilia con Dios.


 El sacerdote le da la absolución.
 El sacerdote lee una página del Evangelio que muestra a Jesús aliviando y
curando
 El sacerdote reza por el enfermo en compañía de todos los presentes.
 Unge con aceite la frente y las manos del enfermo, diciendo:
“Por esta Santa Unción y su bondadosa misericordia, te ayude el Señor con la
gracia del Espíritu Santo, para que, libre de tus pecados, te conceda la salvación
y te conforte en tu enfermedad”.

A las preguntas que le dirige el sacerdote, el enfermo renueva las promesas


bautismales y realiza su profesión de fe cristiana.

 Se reza el Padrenuestro y el sacerdote da la Comunión al enfermo.


 El sacerdote bendice al enfermo y a todos los presentes que lo acompañan.

(Adaptación-fuente: Didascalia)

El nombre del sacramento

Para introducirnos al sacramento en sí, primero debemos adentrarnos en el significado


o etimología; para lo cual debemos hacer la siguiente distinción o clasificación de
términos:

 Orden - Cuerpo de los que gobiernan

 Ordinatio - Integración en un ordo

 Ordo - Organización de un grupo


 Ordo Presbyterorum - Grupo dentro de un Ordo

El tiempo siguió avanzando y se llegó hasta la antigua alianza, tiempo en el que se logra
otra concepción del orden o ministerio del sacerdocio. Allí, encontramos textos bíblicos
que de alguna manera prefiguran o son antecedentes para reconocer el sacramento del
orden.

Algunos de los textos son los siguientes:

 Éxodo 19, 6

 Isaías 61, 6

 Números 1, 48-53

 Josué 13, 33

 Éxodo 29, 1-30

 Hebreos 5, 1

En lo que atañe a los elementos litúrgicos sobre el sacramento del orden dirijo la mirada
en un primer momento al Concilio de Trento. Reunión donde nace lo que conocemos y
celebramos hasta nuestros días como sacramento del orden.

Explícitamente Trento dijo lo siguiente:


“Si alguno dijere que el orden o la sagrada ordenación no es real y
verdaderamente un sacramento instituido por Cristo Nuestro Señor… sea
anatema”

(Sess. XXIII, Can. III, en Denzinger, n. 963)

Los sacramentos han tenido su desarrollo en la historia y Trento es clave importante


para conocer el sacramento del orden. Siguiendo la historia, llegamos hasta el Concilio
Vaticano II, importante también, ya que a partir de él podemos conocer una estructura
sólida y formada sobre el sacramento.

Con el Concilio Vaticano II se estipula la siguiente estructura:

1. Capital importancia, dentro de la celebración de las Órdenes, tienen los ritos


preparatorios:

 Presentación del elegido o elección del candidato


 Homilía
 Promesas de los elegidos
 Letanías
 Ritos explicativos

2. La imposición de las manos (Materia. CEC 1573) y la Plegaria de Ordenación


son el elemento esencial de la ordenación: en él la misma plegaria de bendición
e invocación determina el significado de la imposición de las manos.
3. Oración consecratoria específica (Forma) que pide a Dios la efusión del
Espíritu Santo y de sus dones apropiados al ministerio para el cual el candidato
es ordenado (CEC 1573).

4. Unción con el Crisma, como signo de la unción especial del Espíritu Santo
que se hace fecundo en su ministerio.
5. Entrega de patena y cáliz

Una de las finalidades o aquello que encierra en su misma esencia el sacramento del
orden y por ende que debe encarnar el ordenado es lo siguiente:

Participando, en el grado propio de su ministerio, del oficio del único Mediador, Cristo
(1Tm 2, 5), anuncian todos la palabra divina. Pero su oficio sagrado lo ejercen, sobre
todo, en la asamblea eucarística. Desempeñan con sumo interés el ministerio de la
reconciliación y del alivio en favor de los fieles penitentes o enfermos, y presentan a
Dios Padre las necesidades y súplicas de los fieles (cf. Hb 5, 1-4). Ejerciendo en la
medida de su autoridad el oficio de Cristo, Pastor y Cabeza, reúnen la familia de Dios
como una fraternidad, animada con espíritu de unidad, y la conducen a Dios Padre por
medio de Cristo en el Espíritu. En medio de la grey lo adoran en Espíritu y en verdad
(cf. Jn 4, 24). Se afanan, finalmente, en la palabra y en la enseñanza (cf. 1Tm 5, 17),
creyendo aquello que leen cuando meditan la ley del Señor, enseñando aquello que
creen, imitando lo que enseñan.

Qué es el matrimonio

Unión de dos personas mediante determinados ritos o formalidades legales y que es


reconocida por la ley como familia. En Roma el matrimonio fue un acto privado, que se
realizaba dentro de la propia casa y era compartido además por parientes y
espectadores, que servían de testigos, dándole “validez al acto”. Después, el matrimonio
el matrimonio fue concebido como un contrato que comprometía la palabra de los
contrayentes de ambas familias. (Hipp T., Roswitha, 2006, p. 62)
FUNDAMENTO BÍBLICO DEL SACRAMENTO DEL MATRIMONIO

Antiguo Testamento Nuevo Testamento

 Gn 1, 26-30: Creación del hombre  Mt 19, 6-8


y la mujer, se ve como bueno,  Jn 2, 1-11
complementariedad y petición de  Ef 5, 25-26
reproducción.  Ef 5, 31-32
 Sal 121, 2  1Co 7, 31
 Gn 2, 18-25  Mc 12-25
 Dt 24, 1  1Co 10-17
 Os 1-3  Ap 19, 7.9
 Dt 6, 4: Presenta el origen divino
del matrimonio, con base a que el
Él quien le instituye y le ordena
como sociedad monógama, donde
los dos serán una sola carne.
 Is 54, 62
 Jr 2-3, 31
 Ez 16, 62
 Ct 8, 6-7

FUNDAMENTO TEOLÓGICO DEL SACRAMENTO DEL MATRIMONIO

El matrimonio en la historia de la teología: Patrística

Tertuliano: ¿Cómo podré expresar la felicidad de aquel matrimonio que ha sido


contraído ante la Iglesia, reforzado por la oblación eucarística, sellado por la bendición,
anunciado por los ángeles y ratificado por el Padre? Porque, en efecto, tampoco en la
tierra los hijos se casan recta y justamente sin el consentimiento del padre. ¡Qué yugo
el que une a dos fieles en una sola esperanza, en la misma observancia, en idéntica
servidumbre! Son como hermanos y colaboradores, no hay distinción entre carne y
espíritu. Más aún, son verdaderamente dos en una sola carne, y donde la carne es única,
único es el espíritu. Juntos rezan, juntos se arrodillan, juntos practican el ayuno. Uno
enseña al otro, uno honra al otro, uno sostiene al otro. (Carta sobre el matrimonio)

El matrimonio en la historia de la teología: Edad Media


Anselmo de Laon presenta tres momentos institucionales del matrimonio, el Paraíso,
la primera Carta a los Corintios y las reglas de los Sancti patres modernos- y los fines
que estas “instituciones” pretenden: ¡la procreación, evitar la fornicación y acrecentar
el amor de los esposos-.

Hugo de s. Victor: doble institución. Una antes add officium, después del pecado ad
remedium, el hombre y la mujer se unen en sociedad.

Hincmaro de Roims: necesidad de que los contrayentes fueran bautizados para ser
sacramento. El vínculo del matrimonio legítimo existe cuando se establece entre
personas libres e iguales y une en públicas nupcias mediante la fusión honesta de los
sexos, con el consentimiento paterno, a un hombre y a una mujer libre. Legitimidad
dotada.

Pedro Lombardo separa la sacramentalidad del matrimonio y pone en tela de juicio su


capacidad de generar gracia.

El matrimonio, por tanto, puesto que consiste en la unión del hombre y la mujer, que se
proponen engendrar y criar hijos para la gloria de Dios, es un sacramento de la Iglesia;
por tanto, las partes contrayentes son bendecidas por los ministros de la Iglesia. Y como
en los demás sacramentos, algo espiritual se significa por una ceremonia externa, así,
aquí en este sacramento, la unión de Cristo y la Iglesia está figurada por la unión del
hombre y la mujer. (Tomás de Aquino)

El matrimonio en la historia de la teología: Trento y Vaticano II

Trento:

I. En 1547 el Concilio de Trento reafirmó el carácter sacramental del matrimonio.

II. El decreto Tametsi sostuvo: declarados nulos a partir del Concilio de Trento a
diferencia de los celebrados sin el consentimiento de los padres, prohibidos pero
tolerados y con validez canónica.

Vaticano II: Gaudium et Spes 47-52

 Fundada por el Creador y en posesión de sus propias leyes, la íntima comunidad


conyugal de vida y amor se establece sobre la alianza de los cónyuges, es decir,
sobre su consentimiento personal e irrevocable. Así, del acto humano por el cual
los esposos se dan y se reciben mutuamente, nace, aún ante la sociedad, una
institución confirmada por la ley divina. Este vínculo sagrado, en atención al bien
tanto de los esposos y de la prole como de la sociedad, no depende de la decisión
humana (48).
 Autoría divina: Entrega mutua de los esposos de manera manifiesta, debe ir en
progreso y madurando ordenadamente (50).

 La institución del matrimonio y el amor conyugal están ordenados por sí mismos


a la procreación y a la educación de la prole, con las que se ciñen como con su
corona propia.

El matrimonio en la tradición occidental

 El sacramento del matrimonio se encuadra en este último grupo de aquellos que


constituyen “una misión”, es decir, una llamada o vocación concreta en la vida
del cristiano. Se ordena al servicio de la comunidad, y por él, los que fueron ya
consagrados por el Bautismo y la Confirmación para el sacerdocio común de
todos los fieles, son fortificados y consagrados para los deberes y dignidad de su
estado por este sacramento especial (Benito del Valle, M, J. 2008).

 El acto de alianza conyugal, con frecuencia llamado contrato, que adquiere la


realidad de sacramento en el caso de esposos bautizados, no llega a ello como
efecto simplemente jurídico del bautismo. El hecho de que la promesa conyugal
de una cristiana y un cristiano es un verdadero sacramento, proviene de su
identidad cristiana, reasumida por ellos al nivel del amor que ellos mutuamente
se prometen en Cristo. Su pacto conyugal, al hacer que se den uno al otro, los
consagra también a aquel que es el Esposo por excelencia y que les enseñará a
llegar a ser ellos mismos cónyuges perfectos.

Los elementos del matrimonio en la tradición occidental:

 El signo externo: contrato matrimonial


 Materia remota: Los contrayentes
 Materia próxima: Donación recíproca de los esposos
 Forma: Aceptación recíproca de ese don personal y total
 Ministro: Cónyuges
 Testigo: Ministro ordenado o laico autorizado
Características

 Unidad e indisolubilidad: una sola carne para crecer en comunión


 Fidelidad: Fidelidad de Dios a su alianza, por este sacramento son capaces de
esa fidelidad.
 Apertura a la fecundidad: Ordenado a la procreación y educación de los hijos.

El matrimonio en la tradición oriental

Se puede entender como:

 Misteryon
 Relación entre Cristo y la Iglesia
 La posibilidad de transfigurar la unión de los esposos en una realidad nueva, la
realidad del Reino de Dios
 Eucaristía y matrimonio – Reino de Dios

En el oficio del matrimonio en la Iglesia Ortodoxa se intercambian las coronas


matrimoniales tres veces; así también se acostumbra hacer (en variadas tradiciones
locales) con las argollas. Este intercambio de las coronas y de las argollas enfatiza la
mutualidad y la igualdad compartida de la pareja. Más es siempre dentro del contexto
de la presencia de Dios y pertenencia al Pueblo de Dios, la Iglesia.

En el espíritu de la oikonomía (economía), pero de forma canónica y prescrita, la Iglesia


ortodoxa, puede otorgar divorcios eclesiásticos. Usualmente, el divorcio civil es
otorgado primero. Si la decisión es de otorgar un divorcio eclesiástico, uno o ambos
cónyuges pueden recibir el permiso de la Iglesia para entrar a un segundo matrimonio
mediante el sacramento de la Iglesia. Se permite segundo y tercer matrimonio a
cristianos ortodoxos, pero no se considera que tengan el honor y la dignidad de un
primer matrimonio.

Desafíos del matrimonio en la actualidad

 Matrimonios mixtos
 Separados vueltos a casar
 Nuevos modelos de familia

FUNDAMENTO LITÚRGICO DEL SACRAMENTO DEL MATRIMONIO

Características de la liturgia sacramental

Los sacramentos constituyen la expresión suprema de la oración de la Iglesia

A diferencia del bautismo y la Eucaristía, los demás sacramentos contribuyen a


descubrir la riqueza de la gracia de Cristo, que se quiere encarnar en la realidad de la
Iglesia y en la vida de sus miembros.

La liturgia recurre primeramente a la Palabra de Dios, pero recurre también a las


realidades de la naturaleza.

Respecto del sacramento del matrimonio

Se fija primeramente en textos del Antiguo y Nuevo Testamento: (Creación, Bodas de


Caná, carta a los Efesios).

Los sacramentos se basan en signos que sirven de medios para expresar, representar y
comunicar las realidades espirituales significadas por el mismo. Lo esencial del
sacramento del matrimonio no está en los signos, sino en la decisión de los novios de
unirse como esposos. En lo que a la identidad teología se refiere, esta radica en la
intención de los novios.

El matrimonio desde la Trinidad

Dimensión Trinitaria: “A través de la liturgia cristiana del matrimonio, el Padre


manifiesta su amor a los esposos, miembros del Cuerpo de Cristo, y la Iglesia ofrece al
Padre aquello que más le agrada, el amor de su Hijo, que se revela y manifiesta en el
amor que los nuevos esposos sienten entre sí. En cuanto sacramento, la celebración
cristiana del matrimonio es obra del Dios trinitario, del Padre que crea y abraza con su
amor todas las cosas, del Hijo que se entrega por amor a su esposa la Iglesia, del Espíritu
que santifica a los hijos de la Iglesia y les une en el amor.”1

El ritual del matrimonio

Dentro de la Misa Liturgia del sacramento

 Rito de recepción  Monición


 Ritos iniciales  Interrogatorio
 Liturgia de la Palabra  Consentimiento
 Liturgia del sacramento  Ratificación del consentimiento
 Liturgia de la Eucaristía  Pequeña aclamación
 Rito de la Comunión y  Bendición y entrega de los anillos
Padrenuestro  Oración universal
 Oración sobre la esposa y
el esposo
 Paz y comunión
 Rito de despedida

Celebración del matrimonio fuera de Celebración del matrimonio entre un


la Misa católico y un no bautizado

 Rito de recepción y ritos iniciales  Rito de recepción


 Liturgia de la Palabra  Liturgia de la Palabra
 Liturgia del sacramento  Liturgia del sacramento
 Rito de conclusión  Oración sobre la esposa y el
 Si hay comunión: (Padrenuestro, esposo
rito de la paz, oración después de  Rito de conclusión y despedida.
la comunión).

1 Florez, Gonzalo. Matrimonio y familia. Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1995.


 Si no hay comunión:
(Padrenuestro y rito de
despedida).

El sacramento del matrimonio en el Leccionario


I. Dios los creó hombre y mujer (Gn 2, 18-24; Sal 128; Ef 5, 2.21-31; Mt 19, 3-6).
II. Matrimonio como misterio de amor (Gn 24, 48-51.58-67; Sal 33; Co 12, 31-13,
8; Jn 15, 9-12).
III. El matrimonio, signo de alianza de Cristo con la Iglesia (Jr 31, 31-32. 32-34; Sal
103; Ef 5, 2. 25-33; Mc 10, 6-9).
IV. El matrimonio camino de felicidad y amor (Si 26, 1-4. 13-16; Sal 128; 1P 3, 1-9;
Jn 2, 1-11).
V. El matrimonio, signo de las Bodas del Cordero (Ap 19, 1.5-9; Sal 112; Lc 22, 14-
18-28-30).

El matrimonio en la Iglesia ortodoxa

Consta de dos ritos: Oficio de esponsales y Rito de coronación

 Oficio de esponsales:

Hombre a la derecha y mujer a la izquierda en la puerta del templo, el sacerdote


pregunta si vienen libremente. Expresado su consentimiento el sacerdote hace tres
veces el signo de la cruz sobre su cabeza y les entrega velas encendidas; ingresan al
templo y el sacerdote lleva el incensario. Una vez en el templo, se rezan o cantan
plegarias alternadas entre el sacerdote, el diácono y el coro, mientras que el sacerdote
les hace entrega de las argollas.

 Rito de Coronación

Los novios vuelven a la entrada de la iglesia para entrar en procesión por la nave
principal con velas encendidas, durante la procesión se entona el Salmo 128. Después
de la procesión el sacerdote hace una monición a los novios respecto del sacramento y
la función de los esposos. Luego coloca una corona sobre la cabeza de los cónyuges y se
hace lectura de la Carta a los Efesios 5, 20-33 y del Evangelio de Juan 2, 1-11. Luego el
sacerdote recita unas preces a las que se responden con el Kyrie Eleisson. Finalmente se
reza el Padrenuestro y se hace la bendición del cáliz.

El matrimonio en las iglesias protestantes

 Reforma protestante: Allí, el matrimonio no es propiamente un sacramento que


deba ser administrado por la Iglesia, sino un asunto secular de competencia del
Estado. En lo referente al divorcio, Lutero sostiene que está autorizado por la
Escritura y rechaza la autoridad papal para impedir que un divorciado pueda
contraer matrimonio de nuevo
 Sin embargo, la celebración del matrimonio en las iglesias de la Reforma se ve
sobre todo como un encuentro de la pareja y de la comunidad cristiana con la
Palabra de Dios, que descubre el sentido y la riqueza del matrimonio a la luz de
la fe; pero también como un medio para obtener el favor divino.
 Según la doctrina anglicana, el matrimonio pertenece al orden divino de la
Creación y al orden sacramental de la Iglesia y tiene un efecto santificador sobre
la pareja.

Conclusiones del aspecto litúrgico del sacramento del matrimonio

 La importancia del matrimonio como sacramento radica principal y


exclusivamente en la pareja, con la ayuda de la Palabra de Dios y algunos signos
que contribuyen.
 La apertura de la Iglesia ante el casamiento de una pareja sean católicos,
cristiano no católico, no bautizados, no creyentes, es óptima.
 Los ritos no distan mucho uno del otro, siempre teniendo en cuenta el
consentimiento y la disposición de amarse.
 El matrimonio es una forma de encontrar un diálogo no solamente ecuménico
sino interconfesional.

FUNDAMENTO CANÓNICO DEL SACRAMENTO DEL MATRIMONIO


 Consideraciones preliminares

El Código de Derecho Canónico no tiene una definición propiamente dicha del


matrimonio (hace referencia al sacramento como alianza conyugal), además utiliza el
término “matrimonio” para designar dos realidades: el culto y la comunidad, realidades
constituidas por este acto. Dentro del lenguaje jurídico, se le llama a lo primero –culto-
celebración o pacto conyugal y a lo segundo –comunidad- sociedad conyugal. Dentro de
las finalidades del Código de Derecho Canónico está la de mostrar al matrimonio como
institución natural que es a su vez sacramento de y por Jesucristo.

El matrimonio es el designio de Dios en el principio de la creación de la persona


humana, sexualmente individualizada como varón o hembra.

 Esencia del matrimonio

El matrimonio no debe reducirse a una simple unión entre hombre-mujer. El marido y


la esposa por el pacto conyugal, ya no son dos, sino una carne (esencia del matrimonio).
Realizar con mayor plenitud una comunidad fiel y fecunda de vida y amor, la cual se
realiza por el vínculo jurídico del consentimiento.

 Propiedades del matrimonio

Son dos: unidad e indisolubilidad, que a su vez alcanzan una particular forma por razón
del sacramento. La cualificación de esenciales que se da a esas propiedades, ha de
entenderse, en sentido estricto, ya que pertenecen a la naturaleza del sacramento, y sin
ellas no se pueden dar.

 Fines del matrimonio

Esto no indica cualquier finalidad que pudiera proponerse una mujer y un varón que
deciden unir sus vidas, sino aquellas a las que está ordenada la unión matrimonial.

_____________________________________________________

Estrictamente en lo que al Código de Derecho Canónico se refiere, el sacramento del


matrimonio podemos condensarlo en los siguientes numerales:

 1055 al 1165
 1057
 1061

De la atención pastoral y de lo que debe preceder a la celebración del


matrimonio:
 1063 –Los pastores de almas están obligados a procurar que la propia
comunidad eclesiástica preste a los fieles asistencia para que el estado
matrimonial se mantenga en el espíritu cristiano y progrese hacia la perfección:
catequesis, predicación, medios de comunicación.
 1065 –Sobre la confirmación y otros sacramentos en relación al matrimonio.
 1066-1072 –Corresponde a la regulación relativa a las medidas preparatorias
(investigación del estado de la libertad de los cónyuges y publicaciones
matrimoniales o proclamas)
 1068 –Otras disposiciones.

De los impedimentos dirimentes en general


 1073 –El impedimento –dirimente- inhabilita a la persona para contraer
matrimonio válidamente.
 1075 –Compete a la Santa Sede
 1077 – Prohibición por el Ordinario del lugar
 1078 –Dispensa del Ordinario y excepciones
 1079 –Dispensa en peligro de muerte

De los impedimentos dirimentes en particular


 1083 –Rango de edad
 1084 -Impotencia
 1085- Atenta inválidamente matrimonio quien está ligado por el vínculo de un
matrimonio anterior, aunque no haya sido consumado.
 1086 –Es inválido el matrimonio entre dos personas, una de las cuales fue
bautizada en la Iglesia católica, y otra no bautizada.
 1087-1088 –Respecto al Orden y los votos de castidad perpetua.
 1089 –En caso de rapto (particularidad)
 1090 –En caso de crimen para contraer matrimonio
 1091-1094 –Regulan los impedimentos de parentesco
 1094 –Parentesco legal (grados)

Del consentimiento matrimonial


 1095 –Establece quiénes son incapaces de contraer matrimonio y sus causales
 1096 –Información sobre los fines del matrimonio y consentimiento
 1097 –El error acerca de la persona hace inválido al matrimonio
 1099 –Error respecto al matrimonio
 1101 –El consentimiento interno de la voluntad
 1103 –Invalidez del matrimonio contraído por violencia
 1104 –Prespecialidad de los cónyuges y del procurador

De los matrimonios mixtos


 1124 –Matrimonio entre bautizado católico y bautizado en otra iglesia o
comunidad eclesial
 1125 –Establece las condiciones bajo las cuales se puede dar la dispensa para la
celebración de tal matrimonio
 1127 –Establece para la validez del matrimonio, la observancia de la forma
canónica

De la separación de los cónyuges


 1141 –Indisolubilidad y separación
 1142 –El matrimonio no consumado entre bautizados o entre parte bautizada y
no bautizada puede ser disuelta con causa justa por el Romano Pontífice a
petición de ambas partes o de una de ellas.
 1143 –Disolución por privilegio paulino
 1144 –Para que la parte bautizada contraiga válidamente un nuevo matrimonio,
se debe siempre interpelar a la parte no bautizada.

De la separación de los cónyuges


 1146 –La parte bautizada tiene derecho a contraer nuevo matrimonio con otra
persona católica
 1148 –Al recibir el bautismo en la Iglesia católica un no bautizado que tenga
simultáneamente varias mujeres tampoco bautizadas, solo puede quedarse con
una de ellas. Lo mismo vale para la mujer no bautizada que tenga varios maridos.
 1151 –Los cónyuges tienen el deber y el derecho de mantener la convivencia
conyugal a no ser que les excuse una causa legítima.

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