El señor de las

moscas
Capitulo 5: La bestia del mar

Valentina Cortez y María Fernanda

 Capitulo 5: La bestia del mar
Ralph iba por la orilla de la playa pues necesitaba pensar después de caminar y pensar en
varias cosas, retrocedió hacia la plataforma donde tenía una reunión planeada, Ralph leía
cuidadosamente los puntos de esa asamblea debido a que era importante.
Los niños estabas esperado por la asamblea, ellos le hicieron sitio consientes del
malhumor de Ralph, dónde se sentaron era un triángulo deforme, en uno de esos cuatro
troncos s encontraba aquel que se había hecho para atrás y había tirado a varios niños de
espalda provocando sus carcajadas.
Ralph se sentó el lugar del jefe pensando que nunca habían tenido un reunión a esas
horas, por eso el lugar se veía tan diferente, Ralph se movió con impaciencia tenía que
decidir qué hacer, tenía que pensar con valores, el sabia que piggy no era el que estaba a
cargo si no el pero acepto que el era inteligente. Ralph se dio cuenta de que el tiempo
estaba pasando asi que decidio tomar la caracola y se la puso en sus labios, los demás se
acercaban, aquellos que sabían del barco que había pasado cerca de la isla, cabizbajos
pensando en la ira de Ralph.
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La asamblea se llenó rápidamente, piggy llego solo que se quedó afuera del triángulo lo
que significaba que quería oír, pero no hablar, todos miraban a Ralph con atención
esperado a que dijera algo, se quedo pensando el las palabras mas indicadas y dijo
“Necesitamos una asamblea. No para divertirnos. No para reírse y caerse del tronco.” Los
que estaban en el tronco que se movía se rieron entre dientes, por lo que piggy entro de
puntillas al triangulo “Hemos tenido muchas asambleas. A todos les gusta hablar y estar
juntos. Decidimos cosas. Pero no se hacen. Íbamos a traer agua del arroyo y dejarla en esos
cocos bajo hojas frescas. Así fue por unos días. Ahora no hay agua. Los cocos están secos.
La gente bebe del río.” Todos murmullaron dando un asentimiento. Después de la
asamblea se pusieron de acuerdo e n que construirían bien los refugios debido a que
estaban débiles, y que una parte del lago se utilizaría como baño debido a que la marea
limpiaba esa parte. Era necesario que tuvieran un fuego prendido debido a que así os
podrían encontrar más rápido, tenían que hacer humo.
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Ralph menciono que la otra vez casi incendiaban la isla así que no se haría fuego más que
en las montañas. Jack se incorporó frunciendo el ceño, cuando Ralph vio eso le dijo que no
había terminado e hizo que se sentara de nuevo, cuando Ralph termino y dijo y todos
podían hablar, Jack dijo “Las cosas están derrumbándose. No entiendo por qué.
Empezamos bien éramos felices. Y luego... la gente empezó a asustarse “Ralph respondió
“Tenemos que hablar de este miedo y decidir que no es nada. Yo mismo estoy asustado, a
veces. Pero es un disparate. No hay fantasmas. Luego, cuando hayamos decidido esto,
podemos empezar otra vez y tener cuidado en cosas como el fuego y ser felices.” Jack
empezaba a decir que lo pequeños eran una carga debido a que no ayudaban en nada, y
estallo una discusión entre piggy Jack y Ralph.
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Cuando empezaron a discutir de porque había que tenerle mas miedo a la gente que a los
moustros un niño se adelantó, Phil, que demostraba bastante confianza para su edad, el
Phil dijo: “Anoche tuve un sueño, un sueño horrible, y yo luchaba con cosas. Yo estaba solo
fuera del refugio, luchando con cosas, esas cosas enredadas de los árboles. Luego me
asusté y desperté. Y yo estaba fuera del refugio, solo en la oscuridad, y las cosas retorcidas
se habían ido. una pesadilla comento Ralph, Phil denegó con la cabeza tercamente y dijo
“cuando se fueron estaba despierto, y vi algo grande y horrible que se movía entre los
árboles.” Ralph hizo el comentario de que si alguien había salido a lo cual hubo un
momento de silencio y simón se puso de pie dijo que él quería ir a un sitio que conocía,
¿Qué sitio? Dijo Ralph un sitio un conozco dijo titubeando simón, Ralph solo le dijo que no
volviera a salir de noche que ya tenia suficiente con que los pequeños le tuvieran miedo a
los moustros, piggy le dijo a Ralph que había otro a lo que los pequeños echaron a un niño
adelante y lo dejaron solo., Percival, que estaba en medio del triangulo hundido hasta las
rodillas por la hierba, piggy se arrodillo con la caracola y le pregunto al niño cual era su
nombre, El niño se retorció. Piggy se volvió descorazonado hacia Ralph, quien habló en un
tono cortante. “¿Cómo te llamas?”