Está en la página 1de 3

Yo he elegido tres obras de Velazquez:

i) La Venerable Madre Jerónima de la Fuente (1620)


ii) Philipe IV (1623)
iii) El Triunfo de Baco (1628-1629)

i) La Venerable Madre Jerónima de la Fuente (1620)

Este liezo ha sido pintado por Velazquez en Sevilla en 1620. Vemos la Madre al
centro con una cruz en la mano derecha y un libro (la bíblia?) en la mano
izquierda. Su ropa predominante negra contrasta con el detalle blanco em torno
del cuello y de la fase. La cruz de madera em tono marron claro y el detalle rojo de
la biblia dirigen la atención del espectador a los objetos religiosos que definem la
personalidad de la Madre.
El rostro de la madre es pintado com gran maestría e realismo. Su mirada hacia el
espectador es interrogante, sobria e le da un gran dignidad moral.
ii) Filipe IV (1623)

Velazquez pinta este retrato del joven soberano Filipe IV en 1623, tras llegar a Madrid e se
instalar en la Corte de los Habsburgos. Como en el retrato de la Madre Jeronima los tonos
negros predominan en la ropa y en fundo del escenario. La luz esta ilumina el rostro del
soberano desde la izquierda, projetando las sombras en lado derecho.

Con la mano izquierda, Filipe se apoia en una mesa de madera y con la izquierda segura un
papel entre los dedos. Como en el retrato de la Madre Jeronina, las manos están ocupadas y
revelan la personalidad del retratado.
El soberano tiene un rostro sobrio, tranquilo. Uma mirada reflexiva que sugiere un gobernante
ilustrado y culto.

iii) El Triunfo de Baco (1628-1629)

En este lienzo pintado antes del viaje a Italia, Velazquez toma un tema mitologico y
representa una fiesta de Baco. En contraste con los dos lienzos que analizamos
anteriormente, este no es un retrato individual y la escena se pasa en el exterior.
Tenesmos mas colores y más luz. También contrasta con los lienzos anteriores la
representación de gente comum del pueblo y no personajes nobles o religosos.
En centro de escena, el corpo del Dios Baco desnudo en la parte superior y
parcialmente cubierto en la parte inferior con unos panos rojos claros e blancos.
Las manos de Baco ponen una corona de hojas en un hombre de rodillas. Baco
mira a su derecha e no en la acción, como si estuviera atraído por outra cosa.
Pero el protagonismo en la composición no es de Baco, sino de los hombres
ordinarios, notadamente de uno de ellos que esta en el centro mirando el
espectador. Esse personage lleva un sobrero simples y sonríe, aunque com um
poco de melanolia, tomando un tazon de vino en la mano. Ese tipo y sus
compañeros están borrachos y como una fotografía miran al espectador como se
quiseran ser notados por nosotros o llamar nuestra atención. Tienen los rostros un
poco rojos, efecto del vino.
Me llama la atención la combinación de una escena mitológica con las figuras
realistas (contemporáneas).

También podría gustarte